Long-fic de Inuyasha - Me Quedare a tu Lado [InuxKag]

Tema en 'Inuyasha, Ranma y Rinne' iniciado por aLeTheia_anGeL, 14 Mayo 2010.

  1.  
    Cami Chan

    Cami Chan Usuario común

    Acuario
    Miembro desde:
    10 Marzo 2011
    Mensajes:
    304
    Pluma de
    Escritora
    aaaaaay noooooo! :( realmente pense que funcionaria lo que Inuyasha le decía ...
    no me cae muy bien el papá de Kagome, se que no es malo, pero quisiera matarlo ahora jaja
    Diooos por favor no tardes en la contii! queria seguir leyendo :(
    bueeeno, saludooos y gracias por avisarme :)
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  2.  
    MzzMuñeQuitaInu

    MzzMuñeQuitaInu Entusiasta

    Aries
    Miembro desde:
    7 Julio 2010
    Mensajes:
    161
    OMG como pudo pasar estoooo espero que el padre de aome no c la llebe a rusi X.X inuyasha
    as algo!!!!!! ueno gracias por la conti me gusto mucho te lo agradezco gracias por seguri
    va muy bien el finf te felicito :D
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  3.  
    Valecat

    Valecat Iniciado

    Sagitario
    Miembro desde:
    1 Febrero 2011
    Mensajes:
    11
    Mendigo Inuyasha, le pasa por tonto!! ¬¬ T_T no quiero que se lleven a Kag, pero el tiene que hacer más que solo decirle q la ama.. es un idiota!! ahh.. T_T
    me encanto el capitulo igual, me hizo sentir.. ah mucho, estoy cm sensible xD! pero me agrado el capitulo aunq sigo necesitando que Inuyasha haga meritos... tengo poco tiempo asi q debo irme.. coloca pronto una conti sip??, Saludos!
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  4.  
    Kai

    Kai Usuario VIP

    Géminis
    Miembro desde:
    10 Abril 2010
    Mensajes:
    2,466
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora


    Te amé.
    Tan lindo, brinqué de la emoción.




    Te odié.

    ¿Cómo es posible? Eres una malvada, ahora si que a Inuyasah le va a costar mucho.¿SU padre como se enteró o es chismoso?, no le enseñaron que escuchar conversaciones ajenas es de mala educación.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  5.  
    maFFer susin

    maFFer susin Usuario común

    Escorpión
    Miembro desde:
    22 Febrero 2010
    Mensajes:
    212
    Pluma de
    Escritora
    amigaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa kya cuanto tiempo no?? hehe perdon estoy my ocupada lo bueno es que me hize un tiempito para pasar, wow los dos capis los ame a exepcion de que como a inu le pusieron los cuernos quiera volver con kag pero ese es otro tema en fin :D te quiero amiga y perdon por la auscencia pero sabes que amo tus fics y asi me muera por el estres los leerle lo juro en fin gran fic bye :D
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  6.  
    liisseth

    liisseth Entusiasta

    Capricornio
    Miembro desde:
    21 Noviembre 2010
    Mensajes:
    59
    Pluma de
    Escritora
    ´o´ Me quede en shock ...... ¡¡¡¡¡¿¿¿Como es esto posible???!!!!! :O ese giro no me lo espereaba :o Sigo en shock tan estricto es su padre como para alejarla de Inuyasha y eso que el trataba de arreglarlo todo pero no >:P el con su mente maquiavelica penso en todo y el se esta riendo asi: Muajajajaja :risa malvada: Naa no creo que sea tan malo ¿o sí? Te apoyo totalmente Kal Sakka para mi que anduvo chismeando por ahí por aca y escucha conversaciones ajenas xD. Me despido y espero el siguiente capitulo. Esta chica dice:

    -Cambio y Fuera
    ?¬ |•‡•_|[°o.Liizeeth--Annahhi.o°]|_•‡•|¬?


    si una espada que no corta pero cura y da vida a las personas que amas y una espada con un sentimiento puro de proteger, si al escoger te equivocas de espada, dile adiós a tu deseo de vida
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  7.  
    Loops Magpe

    Loops Magpe Entusiasta

    Leo
    Miembro desde:
    2 Noviembre 2009
    Mensajes:
    137
    Pluma de
    Escritora
    NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!
    esto es más grave que cuando no encontraba nada que comer ¡Dios! ¡Malvado, no te la lleves! Y tú, Kagome ¡No seas mensa mujer! ¡Has algo!
    Gomene por no haberme presentado hace mucho, pero ya me informó y ahora sí no te perderé el rastro (No importa si tengo que espiarte, Jajaja ¡Pero no me perderé tu próximo cap!)
    Cuídate.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  8.  
    aLeTheia_anGeL

    aLeTheia_anGeL Usuario común

    Piscis
    Miembro desde:
    22 Junio 2009
    Mensajes:
    354
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Me Quedare a tu Lado [InuxKag]
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Romance/Amor
    Total de capítulos:
    31
     
    Palabras:
    3135
    Holas!!! Una vez más aquí reportandome para publicarles un nuevo capitulo, estoy avanzando bastante eh :P y déjenme decirles que el final se viene pronto aunque por adelanto les diré: se viene una sorpresa trágica pero con final feliz xD ... Estoy siguiendo el contexto de cómo lo escribi por primera vez pero también agregandole un par de cosas, lo demás lo mantengo igual.

    Bienvenida liisseth, gracias por tu comentario :)

    Y en general quería aclararles ¿Creo que no me expliqué bien verdad? Es que en el capitulo anterior traté de dejar en claro que Daijiro, el padre de Kagome, escuchó la conversación entre ella e Inuyasha, por eso es que intervino cuando ambos se encontraban abrazados.

    Bueno eso sería todo, nuevamente gracias por seguir comentando, aprecio mucho sus comentarios. Gracias por todo chikas!!! :D Aquí el nuevo cap. espero les guste.

    CAP. 23 LA DESPEDIDA

    A causa de los sucesos anteriores y cumpliendo lo que dijo, el viaje de Daijiro se adelantó un día por lo que ésta mañana Kagome se había levantado completamente desanimada; suficiente era saber que hoy por la noche regresaría a ese país no deseado para que además tendría que decirle a sus amigos que jamás los volvería a ver.

    Cuando terminó de alistarse, sin ponerse el uniforme escolar obviamente, bajó hacia la cocina aunque no tenía ganas de desayunar. De pronto vio una nota en la mesa que decía:

    “Kagome, estos son los papeles que debes entregar en la dirección de tu instituto, los profesores deben estar enterados de tu partida. Anda ahora mismo, nosotros regresamos después, fuimos a comprar los pasajes. Tu papá.”

    La chica no tuvo expresión alguna al tomar ese sobre en sus manos, aunque se le notaba muy fastidiada. No deseaba contarle a nadie sobre su viaje permanente a Rusia y ahora por obligación debería ir a ese lugar a dar la cara. No ahora… simplemente no tenía el valor.

    Suspiró profundamente y se resignó, sus amigos tenían derecho a enterarse además sí ella no se los decía seguramente Inuyasha se encargaba de eso. Salió de casa con el sobre en mano, completamente triste, dirigiéndose al instituto.

    Al llegar a la escuela notó que algunos alumnos se la quedaban mirando de forma extraña; se vio a sí misma y se percató que no traía el uniforme sino más bien una ropa informal: jean y una remera. Sonrió de lado, al parecer eso le causó algo de gracia.

    Se dirigía a la sala de profesores a entregar aquellos papeles, hasta ahora tenía suerte porque no se había cruzado con nadie conocido, pero eso no le iba a durar para siempre.

    —¡Kagome! —se escuchó de pronto una voz femenina.

    La aludida pudo reconocerla a la perfección y volteo a darle una sonrisa fingida.

    —Hola Sango —dijo ella usando un tono triste.
    —¿Qué te pasa? ¿Estás bien? —aquel tono la había preocupado un poco.

    La azabache suspiró de lado y desvió la mirada.

    —¿Kagome? Qué ocurre, tú traes algo y además ¿Por qué andas vestida así? —insistía la castaña sin quitarle la vista de encima.

    Higurashi no pudo soportarlo más así que sin decir una sola palabra se lanzó a los brazos de su mejor amiga y la abrazó por completo. Unas gruesas lágrimas empezaron a invadir las mejillas de la muchacha mientras que la otra chica se encontraba sorprendida por todo esto, lo único que atinó a hacer fue corresponderle el abrazo.

    —Me estás asustando… qué pasa —se animó a volverle a preguntar aunque ya presentía algo malo.
    —No tienes idea de cuánto te voy a extrañar —le susurró a su oído.

    Luego de unos minutos, Sango se enteró de todo, su única expresión fue de asombro total, no quería creer que su querida amiga se iría permanentemente. Ishikawa decidió saltarse la primera clase para acompañarla a entregar esos papeles y luego de eso se dirigieron al césped del patio para sentarse a seguir conversando además de pasar unos últimos momentos juntas.

    —No te preocupes… te prometo que iremos a visitarte —la trataba de animar ella.
    —Sango… —y nuevamente la hizo llorar pero esta vez fue de alegría.

    La volvió a abrazar mientras que esbozaba una pequeña sonrisa.

    De pronto hicieron su aparición, por ese lado, el equipo de los lobos con su capitán al frente. Nagasaki volteó a ver y se percató de ambas chicas.

    —Adelántense muchachos, ya voy para allá —les avisaba éste para después ir corriendo hacia donde se encontraban las muchachas.

    *º*º*

    El muchacho abrió sus ojos y se pudo notar el hermoso color ambarino que lo caracterizaba.

    —Hasta que al fin despiertas tío —le decía su amigo quien ponía una bandeja de desayuno en su escritorio.
    —¿Qué hora es? —decía el chico para después tomar asiento en la bolsa de dormir.
    —Las nueve con veinte —le contestó el moreno fijándose en su celular.
    —¡¿Por qué no fuiste al instituto?! —se alarmó de pronto el muchacho.
    —Porque estabas en mi habitación y ni de broma te dejaba solo acá, tengo muchas cosas de valor Inuyasha —bromeaba un rato con él, quería levantarle el ánimo.
    —¿Qué? ¿Tus revistas hentai? —le siguió la broma lo cuál era buena señal.

    Miroku e Inuyasha intercambiaron un par de risas después de aquellos comentarios algo graciosos. Prendió el televisor y justo estaban pasando “Happy Tree Friends”, el programa favorito de ambos por lo que se pusieron de lo más cómodos a tomar desayuno y “matarse” de la risa un rato.

    *º*º*

    —¡¿Qué?! ¡¿Cómo te vas a Rusia?! ¡No Kagome! —el grito de Nagasaki se escuchó por todo el patio.

    Ambas chicas lo silenciaron como si de una biblioteca u hospital se tratara, luego Sango le dedicó una mirada de regaño mientras que Kagome desvió su triste mirar hacia otro lado.

    El capitán de los lobos se sentó junto a ella para luego tomarla de las manos, estaba a punto de empezar su largo discurso de “cariño y esperanzas” cuando de pronto alguien lo interrumpió.

    —¡Kouga! —gritó su pelirroja amiga con derechos.

    Así es, al parecer la porrista y el jugador de soccer estaban empezando una relación pero los rumores decían que sólo habían salido juntos un par de veces.

    El aludido giró su rostro y al verla se puso de pie de inmediato y se acercó a ella.

    —Ayame, no me lo vas a creer —dijo el muchacho para luego tomarla de la mano y llevarla hasta donde las demás se encontraban.

    De esa forma, una persona más se enteraba que Kagome dejaba el país para regresar a ese otro lugar que sin lugar a dudas, detestaba.

    *º*º*

    —Oye… sobre lo que decidimos ayer ¿Cuándo vas a comprarlos? —preguntó Kayama mientras que terminaba de beber el café de la taza.
    —Ahora mismo, así que apresúrate y vístete, voy a mi casa por un maletín con ropa y demás cosas, nos vemos en el parque en una hora —le decía el muchacho mientras que dejaba la taza en el escritorio.
    —¿Eh? —exclamó su amigo pero eso fue lo único que pudo emitir ya que Inuyasha salió de su habitación rápidamente.

    Supuso entonces que también debía alistar una bolsa de deporte donde pondría algunas mudas de ropa y otras cosas que necesitaría, después de todo como iban las cosas éste sería un largo viaje.

    *º*º*

    Después de haber pasado un tiempo con los muchachos explicándoles sus motivos, pudo regresar al fin a casa. Se encontraba algo deprimida por tener que decirles adiós pero al menos habían dos cosas que realmente la animaron: Cuando les comentó el verdadero motivo del porqué de su partida, Kouga hizo un gesto muy gracioso mientras gritaba a los cuatro vientos…

    —¡Inuyasha! ¡Baka! ¡Estúpido! ¡Ésta me la pagas tarado! —y entre muchas otras cosas más que le causaron gracia a Kagome y le sacaron una sonrisa.

    La segunda razón era que sus amigos irían a despedirla al aeropuerto y dijeron que le llevarían algo especial a pesar de las insistencias de ella en que no debían molestarse, de igual forma ellos lo harían.

    —Kagome… —escuchó la voz de aquel hombre.
    —¿Sí papá? —dijo desde las escaleras puesto que la llamó justo cuando ella estaba a punto de subir a su habitación.
    —¿Entregaste los papeles? —le recordó Daijiro mientras que se apoyaba en el marco de la puerta de la cocina.
    —Sí… —respondió ella girando la cabeza para no mirarlo indiferentemente, pero luego recordó lo de los muchachos. Sintió que lo mejor era avisar —Por cierto, mis amigos irán a despedirme así que los esperaré en el aeropuerto.

    Y diciendo esto, la chica no le dio tiempo a su padre para responderle, solamente subió las escaleras lo más rápido que pudo y luego se encerró en su dormitorio para terminar de empacar.

    Cerró con seguro la puerta y se secó las lágrimas que volvieron a brotar, últimamente se la había pasado llorando, nunca pensó que todo esto le pasaría al llegar a Japón.

    Se amarró el cabello en una coleta para que no estorbara y luego se puso a arreglar sus maletas y otros bolsos que llevaría a parte; haciendo todo eso le llevó un par de horas y cuando estuvo a punto de terminar, su celular sonó.

    Fue a revisarlo y se encontró con un mensaje.

    De: Sanguis.
    Kagome… Kouga, Ayame y yo nos vamos a encontrar en la plaza, de ahí nos pasamos al aeropuerto ¿Ok? Espéranos por favor. No te vayas a ir sin despedirte de nosotros... XOXO


    Sonrió al leer esas líneas, sentía que al irse perdería a unos buenos amigos. Entonces fue cuando recordó que no les había comunicado nada ni a Miroku y mucho menos a Inuyasha. Sobre el primero supuso que Sango se encargaría de avisarle pero con el segundo dudo si debía hacerlo o no, después de todo verlo por última vez tendría sus puntos buenos como malos… lo quería demasiado como para despedirse, eso dificultaría más su partida.

    —Pero… también le quiero tanto como para no verle por última vez —se decía a ella misma con una sonrisa melancólica.

    Se resignó y deslizó su celular nuevamente. Le marcó a Inuyasha pero por alguna razón él no contestaba a pesar de que lo dejaba timbrando hasta que responda la contestadora automática. Siguió insistiendo unas cinco veces más pero el muchacho seguía sin contestar, la única manera que se le ocurrió para estar más tranquila fue mandarle un mensaje de texto donde le especificaba que deseaba verlo para despedirse, a tal hora y en tal lugar.

    —¿Kagome? —dijo una voz femenina mientras tocaba la puerta del cuarto de su hija.

    La chica se aseguró de enviar el mensaje y una vez hecho esto abrió la puerta.

    —¿Qué sucede mamá? —preguntó seria al verla.
    —Tu padre nos está apurando… andando —le contestó Sonomi que se había percatado de la mirada resentida de Kagome.
    —Ya voy… —fue lo único que respondió para después darse vuelta y terminar de cerrar su última maleta.

    La señora bajó al primer piso, se sentía algo triste por la mirada que recibió de su hija pero nada podía hacer para remediarlo después de todo no podía decirle que no le gustaría separarse de ella una vez más, que su padre y ella estaban llevándose mejor y entre otras cosas más. La situación se estaba complicando en la vida familiar de los Higurashi.

    La hora que restaba pasó rápidamente y en lo que menos se esperaban Kagome ya bajaba sus maletas y bolsos ayudada por su hermano; su padre la esperaba en la sala con su maleta también, volteó para ver que estaba lista y una vez así salieron todos para tomar un taxi y dirigirse al aeropuerto.

    *º*º*

    —¿Kagome aún no llega? —preguntó la castaña que regresaba de comprar una botella con agua.
    —No aún no… oye está bien escrito esto ¿no? —decía Kouga en una pose despreocupada sosteniendo una tela blanca.
    —Sí, nos quedó muy bien —le respondía la muchacha pelirroja.

    En ese momento, Kouga pudo ver que la familia Higurashi hacia su aparición entrando a la sala de pasajeros.

    —Ahí están ¡Rápido! —y diciendo esto Nagasaki se puso en una posición en la cual se le hacía más fácil sostener la tela y estirarla lo suficiente para que las letras se vean.

    Ayame y Sango se encargaron de llamar la atención de Kagome mediante señas de manos. La aludida las buscaba con la mirada y en cuanto giró pudo verlas; una enorme sonrisa se dibujó en su rostro, arrastró su maleta y se acomodó su bolso al hombro para ir al encuentro de ellas.

    Su sonrisa se agrandó más al leer el mensaje que estaba escrito con plumones de colores en aquella tela blanca, decía: “Eres la mejor Kagome Esfuérzate!!! Te queremos!!!” además luego de esa última frase Kouga había agregado: “Pero yo te quiero más”, lo adornó con una carita feliz y un corazón, mal dibujado, pero corazón al fin.

    —Muchachos… —eso era lo único que pudo emitir ya que el llanto le había ahogado las demás palabras. Estaba realmente conmovida así que dejo sus maletas a un lado y los hizo juntarse para darles un abrazo grupal.

    A una distancia desde dónde ellos se encontraban, habían dos muchachos mirando fijamente a Kagome quien seguía abrazando a sus amigos. Uno de ellos observaba la escena divertido mientras que el otro explotaba en cólera.

    —¡¿Ves?! ¡Es que siempre se tiene que aprovechar de la situación! ¡¿Verdad?! —le decía a su amigo, quien ahora soltaba un par de risas pequeñas.
    —Cálmate Inuyasha… Sabes mejor que yo que Ayame y Kouga están en una relación, aunque todavía no formalizan, Kamiya sabe que cuando Nagasaki le dice “te quiero” a Kagome es cariño de amigos —le explicaba Miroku quien estaba a punto de romper en carcajadas por los evidentes celos de su amigo.
    —Tsk!! Cómo sea, la cosa es que no se acerque más a Kagome —decía sin apartar su vista de la escena —¡Y qué! ¡Ya terminó el abrazo! ¡¿Por qué no la suelta de la cintura?! ¡Maldito sarnoso, cuando regrese lo mataré! Hazme recordar Miroku.

    Esta vez no pudo aguantar la risa y se sentó en uno de los asientos para abrazar su dorso y reír muy divertido mientras su amigo le dedicaba una mirada de desaprobación.

    —Claro Baka, búrlate, ya verás después… —decía el muchacho sentándose a su lado.

    Inuyasha había comprado en la tarde los boletos de vuelo hacia la ciudad de Moscú, el vuelo de él y Miroku salía una hora después del vuelo de Kagome; él decidió luchar por el amor de la Higurashi a toda costa y sí eso significaba cruzar algunos países para poder traerla de vuelta con él, lo haría sin duda alguna.

    —¿Le dijiste a Sango que no diga nada verdad? —preguntó de pronto sin mirarlo.
    —Sí, descuida, mi Sanguis no dirá nada —contestó sonriendo, típico en él, pero de pronto se volvió serio para preguntar —¿Le dijiste a tus padres?
    —¿Acaso me crees idiota? —le respondió y luego volteó a mirarlo con aquella sonrisa arrogante.
    —Mejor no te respondo —contestó Kayama ganándose un golpe en la cabeza. Sabía que su amigo reaccionaria así por lo que sólo sonrió, eso significaba que estaba de buen humor.

    Inuyasha soltó un suspiro ahogado, sabía que por el malentendido del compromiso, sus padres no vendrían a despedir a la chica así que se limitó a dejar una nota en la puerta de su habitación para que al pasar por ahí su madre pudiera leerla. La nota decía: Mamá, Papá, me voy a la ciudad de Moscú con Miroku, no dejaré que alejen a Kagome de mí sin darme la oportunidad de pelear por ella y eso es lo que voy hacer. No intenten detenerme porque no lograran nada… Ah!! Cuando regresemos, aceptaremos el castigo… no hay de otra ¿verdad? Ahí se ven Viejos.

    *º*º*

    —Ahí se ven… viejos… —terminaba de leer la nota el señor Taisho.
    —Sin duda es de Inuyasha pero ¡¿De dónde ha sacado dinero para irse tan lejos?! ¡InuNo tienes que hacer algo! ¡Tienes que traerlo de regreso! —exclamaba Izayoi, como cualquier madre alterada lo haría.
    —No cariño, déjalo… estoy seguro que lo hizo con la tarjeta que le obsequiamos en su cumpleaños pasado y además está con Miroku —decía el señor doblando el papel y guardándolo en su bolsillo.
    —Pero querido… —la señora seguía insistiendo, estaba un poco preocupada.
    —Tranquila, mañana le pondré dinero a la tarjeta de Inuyasha, todo estará bien, hay que dejarlo que haga esto solo —más que nada el señor Taisho quería que su hijo aprenda a desenvolverse solo en esa ciudad y por ende aprenda a madurar un poco más.

    Luego de esto, Izayoi se encargó de llamar a casa de Miroku para avisarles, o mejor dicho inventarles una excusa a sus padres que él e Inuyasha salieron en un viaje de improviso por diversión y que regresarían muy pronto.

    Las cosas se iban a poner más interesantes… y peligrosas.
     
    • Me gusta Me gusta x 12
  9.  
    maFFer susin

    maFFer susin Usuario común

    Escorpión
    Miembro desde:
    22 Febrero 2010
    Mensajes:
    212
    Pluma de
    Escritora
    seeeeeeeeeeeeeeeeehhhhhh soy la primera la la la la la la LOL xD en fin LINDA¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ amo tu fiiiiiiiiiic :D como sea me encanto este capi ;D me doble de la risa con lo de koga: PERO YO TE QUIERO MAS¡¡¡ HAHAHAHAHA en fin me agrada como escribes eso ya te lo habia dicho anteriormente. Pero bueno espero que lo continues pronto
    Te quiero bye [:
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  10.  
    Astaroth

    Astaroth Entusiasta

    Escorpión
    Miembro desde:
    24 Marzo 2011
    Mensajes:
    139
    Pluma de
    Escritora
    que bueno, inu va a luchar por kagome, aunque sea lo ultimo que haga....

    ¡Me encantya este fic!
    ojalá que lo sigas pronto, ya que estoy con una curiosidad enorme por saber que pasa :)

    xau, cuidate!!!!!
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  11.  
    kagomeG

    kagomeG Usuario común

    Piscis
    Miembro desde:
    6 Septiembre 2009
    Mensajes:
    340
    Pluma de
    Escritora
    Aqui me tienes amiga... Perdon por pasar hasta ahorita!! :(
    Awww!!! ESO fue muy triste... Muy conmovedor (inuyasha hizo caso!) no es que hiziera caso... Es algo que debia hacer... Que bonito!!! Y que tierno!!!
    Siento horiible por kagome ... Por el momento yo estaria igual que ella... Pero muero por vee su cara al ver a InuYasha...
    La nota para sus papas fue muy graciosa "hay se ven viejos!" sin duda alguna es Inuyasha... Muy divertido...
    Eso de que el papá lo apoye de alguna manera para luchar por kagome es muy generoso... Pero me preocupan los papas de Miroku... Yo no me lo tomaria tan bien...
    Lo que me parece bieb es que en Rusia Miroku puede ayudarle a distraer al papa de kagoke mientras inu va con kagome... Ss pone interesante... Graciaa amiga por avisarme... Llego tarde pero aqui estoy! :D

    KagomeG
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  12.  
    Idaly

    Idaly Usuario común

    Virgo
    Miembro desde:
    4 Septiembre 2005
    Mensajes:
    367
    Pluma de
    Escritora
    Jajajajajajaja el final de la nota de Inuyasha me causó mucha gracia jajaja, y también el mensaje que Koga le puso en la manta jajaja.

    Aunque no me cae muy bien en ésta historia, espero que encuentre a Kagome y se gane su perdon y el del papá también... aunque también espero que Kagome le haga sentir celos!! que le cuestee!!:mad:

    La continuación te quedo muy buena, espero puedas actualizar pronto y gracias por avisarme, adiós.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  13.  
    Loops Magpe

    Loops Magpe Entusiasta

    Leo
    Miembro desde:
    2 Noviembre 2009
    Mensajes:
    137
    Pluma de
    Escritora
    Wiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!! Otro Cap.!!!
    En verdad me mató eso de "Viejos" Jajaja y lo del mensaje ¡Ese Kouga! Pero, que bien que Inuyasha por fin se dio cuenta de que está perdiendo a Kagome y que debe de luchar por ella o se irá ¡Felicitemos a Inu porque por vez primera pensó! Bueno, es mentira Inu, ya sabes que te quiero.

    Etto... bueno, creo que ya está de más el decir que espero que sigas escribiendo.

    Saludos, anime angels.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  14.  
    kariina

    kariina Iniciado

    Cáncer
    Miembro desde:
    27 Diciembre 2010
    Mensajes:
    22
    Pluma de
    Escritora
    Ame la continuación, sorry la demora si lo lei cuando lo subiste pero la Universidad me ha consumido todo el tiempo ya ni vida para mi tengo, ame la carta de inuyasha, y eso de jugarsela es lo mejor mas le vale no arruinarlo si no GRR... >< lo matooo, bueno no mucho que decir cuidate
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  15.  
    aLeTheia_anGeL

    aLeTheia_anGeL Usuario común

    Piscis
    Miembro desde:
    22 Junio 2009
    Mensajes:
    354
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Me Quedare a tu Lado [InuxKag]
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Romance/Amor
    Total de capítulos:
    31
     
    Palabras:
    2200
    Hola gente... lamento la notoria demora, han sucedido varias cosas estos últimos días y es por ello que la programación para colgar este capítulo se vio afectada, espero entiendan. Ahora bueno, no tengo ánimos de expresarme y de antemano pido disculpas por eso... pero eso no quiere decir que esté muy agradecida por todos sus comentarios...

    Veo también que en cierta forma les causó gracia la nota de Inuyasha para sus padres xD A decir verdad, ese fue un pequeño e improvisado detalle, el cual me agrada la idea de que les sacó muchas risas :) Gracias x ello. En fin, nuevamente muchas gracias por continuar leyendo mi fic y espero q este capitulo sea de su agrado.


    CAP. 24 EN MOSCÚ – RUSIA

    El vuelo duró aproximadamente nueve horas, entre los cambios horarios y lo demás, fue un viaje largo y cansado para todos a excepción de Daijiro que ya estaba acostumbrado a ese trote.

    —Buenos Días, se les informa a todos los pasajeros volverse a colocar el cinturón de seguridad ya que en breves momentos estaremos aterrizando en el Sheremétievo Aeropuerto internacional de Moscú, gracias —decía una aeromoza a través del altavoz.

    Aquella notificación alertó a Kagome quién se había quedado dormida; abrió lentamente los ojos para acordarse de su realidad.

    —Ya levántate hija, ya casi llegamos —decía su padre algo ansioso.

    Sin embargo ella no respondió, se sentía demasiado deprimida como para si quiera verle al rostro. Emitió un sonido parecido a un “Ajá” y luego se volteó dándole la espalda para meditar unos minutos sobre su situación.

    *º*º*

    —Eh Inuyasha… despierta, dime cuánto falta para llegar —decía un chico de coleta sentado al lado de su amigo que prácticamente roncaba en el asiento por la mala posición en la que se encontraba.
    —¿Se supone qué tenga qué saber Miroku? No fastidies —le contestó el muchacho ambarino medio despertando.

    Se volvió a acomodar con la manta que le habían dado en el avión, y es que ya iba sintiendo el frío que muy pronto sería el principal clima de todo el lugar.

    Kayama volvió a ponerse los audífonos de su celular, que se encontraba en “modo vuelo” es decir, sólo se podía escuchar música mp3.

    El capitán de los tigres estaba en realidad despierto, pensando en lo que tenía que afrontar cuando esté en ese país desconocido para él.

    Por otro lado, descendían del avión, el señor con una sonrisa de lado mientras que su hija suspiraba resignada por volver a ese lugar.

    Rápidamente fueron a recoger sus maletas pero tardaron en esperar que las revisaran y que se las entregaran, después de eso salieron con valijas en mano y en hombro, tomaron un taxi y se fueron del aeropuerto.

    Mientras tanto, al cabo de una hora más…

    —Buenos Días, se les informa a todos los pasajeros volverse a colocar el cinturón de seguridad ya que en breves momentos estaremos aterrizando en el Sheremétievo Aeropuerto internacional de Moscú, gracias —volvía a repetir una aeromoza en el vuelo de los muchachos. Ya era medio día para cuando ellos estaban a punto de llegar.

    Ese aviso por altavoz advirtió a los chicos que se habían quedado dormidos; despertaron rápidamente y arreglaron sus objetos que andaban regados por la manta y parte de los asientos.

    Para ese entonces, Kagome ya se había instalado en su antigua habitación, dejó sus maletas a un lado y boca abajo se tiró prácticamente en la cama, hundiéndose en el edredón. Sólo quería un minuto de paz pero al parecer su papá no entendía ese concepto.

    —¿Kagome? —Preguntaba tocando la puerta, acto seguido entró en el dormitorio —Hija, en este momento voy a tu antigua escuela a inscribirte ¿No quieres venir?
    —¿Te parece que quisiera ir? —le devolvió la respuesta con aquella pregunta obvia, ya que ni siquiera se había movido de la posición en la que se encontraba.

    Daijiro frunció el ceño y sólo por esta vez dejó pasar de lado la manera en cómo le contestó, cerró la puerta normalmente y salió de casa.

    Al sentir que por fin se encontraba sola en casa, volteó y dio la cara al techo abrazando su almohada.

    —¡No soporto todo esto! —gritó con todas sus fuerzas y derramando un par de lágrimas llenas de coraje.

    Por su mente pasaron todas las cosas que hasta el momento había pasado: primero que Taisho la haya cambiado para regresar con su ex fue un golpe muy duro, se dio cuenta con el paso del tiempo que aún lo amaba, luego pasa eso del rompimiento entre ellos, era lógico que después de lo sucedido ya no tuvieran ninguna relación, justo cuando creyó que las cosas entre Inuyasha y ella podían ir arreglándose poco a poco viene esto del compromiso, sin duda enterarse de que siempre estuvo comprometida con el chico que llegó a amar sin medida fue un shock muy fuerte para ella… era más de lo que podía soportar.

    Por otro lado en el aeropuerto, dos chicos salían de ahí con sus maletas en mano; se les veía muy exhaustos además de que esto sería un completo reto para ambos: ninguno de los dos sabía a dónde ir ni por dónde empezar y mucho menos sabían hablar ruso.

    —Esto es genial, y ahora qué se supone que haremos —preguntó sarcástico Miroku.
    —Oh vamos, no puede ser tan difícil pedir indicaciones de algún hotel o la dirección de la empresa —dijo el muchacho ambarino quien se ponía los guantes por el clima frío.
    —¡Bien Inuyasha! Así se habla, entonces veamos… —intentó ser optimista así que se acercó a la primera chica que vio pasar delante de ellos.

    La tomó por sorpresa de las manos haciendo que la muchacha dejara su maleta para luego mirarla con su disque mirada seductora.

    —Qué tal madame ¿podría usted…? —preguntaba Kayama cuando de pronto la chica se soltó una mano y rápidamente sacó gas pimienta de su cartera.
    —¡Idiota! ¡¿Nos quieres meter en problemas?! —exclamó Inuyasha quién separó inmediatamente a Miroku de la chica antes de que ella usé aquel objeto.

    Aquella mujer extranjera se fue diciendo palabrotas en otro idioma, los muchachos se quedaron sorprendidos porque al menos el inglés sí lo podían entender… ¡Eso es!

    —¿Sabes hablar inglés Miroku? —preguntó algo esperanzando su amigo.
    —Sí, lo básico para sobrevivir —le respondió el chico con una sonrisa de lado.
    —Perfecto, tú serás el traductor —ordenó Taisho con una sonrisa arrogante.
    —¿Y qué hay de ti? ¿No hablas inglés? —y con esa pregunta lo miraba fijamente como observando sus expresiones.

    Inuyasha se sonrojó algo avergonzado de sí mismo, desvió la mirada y luego resopló fastidiado.

    —Tsk!! Sólo entiendo textos en hojas, carteles o lo que sea de manera escrita y también un poco al escucharlo, más no sé hablarlo muy bien —respondía detalladamente sin mirarlo.
    —Está bien hermano, no te avergüences —y diciéndole esto le puso una mano en su hombro como dándole su apoyo.
    —No fastidies… —dijo quitándose su mano de encima.

    Aquel gesto era mejor conocido como un “gracias” por parte del muchacho ambarino por lo que Miroku sólo atinó a sonreír de lado y seguirle el paso. Salieron del aeropuerto y pidieron un taxi, al menos el señor también hablaba inglés y Miroku pudo comunicarle que deseaban ir a un hotel para poder alojarse.

    En el camino iban viendo por las ventanas todos los edificios, casas y calles en aquella ciudad, el clima aún no era favorable para quitarse las casacas por lo que decidieron usarlas por un rato más.

    Al cabo de un rato, el señor taxista los dejó frente a un hotel de muy buena pinta, supusieron que se trataba de unas tres o cuatro estrellas.

    —Thanks for everything sir —le dijo Miroku al bajarse del taxi y pagarle.
    —Vamos Mir… —le avisaba Inuyasha quien ya estaba en la entrada del hotel con sus maletas.
    —Espera un momento… —le decía el moreno para luego girarse y enfocar su atención en el taxista una vez más —Excuse me, Sir…

    Miroku tuvo la repentina idea de preguntarle al señor sobre la dirección de la empresa Higurashi, el señor muy amablemente se lo escribió en un pequeño trozo de papel periódico que tenia ahí.

    —¡Thank you very much! —le decía muy complaciente.

    Después de eso, el muchacho siguió a su amigo y ambos entraron al hotel.

    Al día siguiente…

    Kagome regresaba de la escuela; al parecer su padre tenía gran influencia y la volvieron a aceptar en aquel instituto como sí se hubiera ido por un par de días solamente. Sin embargo, eso implicaba también tener varios quehaceres escolares, ya que debía ponerse al corriente con las clases ahí, al menos con una semana entera, sí se atrasaba más los exámenes le irían peor.

    Llegó directo a casa, no le interesaba ir a ningún otro lugar a parte que el frío del país le impedía salir a caminar por pasatiempo, como lo solía hacer en Tokio. Sacó su llave del bolsillo y abrió la puerta para luego entrar. La expresión de Kagome no cambiaba desde ayer: triste, deprimida y obviamente sin ánimos de nada. Claro que su padre se había percatado de ello.

    —Qué bueno que ya estés en casa, hija —la saludó su padre sin mirarla, ya que trabajaba desde su laptop en la sala.
    —Uhm… sí —respondió ella muy cortante.
    —Kagome, sabes perfectamente que esa no es la forma de contestar —le reprochaba con aquel tono autoritario.
    —Lo siento padre… iré a mi habitación, con permiso —y diciendo esto, además de dirigirle una última mirada de fastidio, se retiró del lugar para cruzar el pasillo e ir a su dormitorio.

    Dejó sus cosas dentro y luego fue a la cocina para llevarse unos bocadillos que le servirían para no salir de ahí en lo que restaba de la tarde.

    *º*º*

    —Tu turno Mir… —le decía el chico ambarino quien salía del baño secándose su cabello plateado con una toalla.
    —Sí Inuyasha muy amable, era para entrar hace horas —decía su amigo claramente exagerando la situación lo que provocó una sonrisa en Taisho.

    Kayama cogió su respectiva toalla y entró, cerrando con seguro después.

    Luego de secarse el cabello, Inuyasha encendió la televisora y mientras hacía zapping se dio con la sorpresa que… todo lo que hablaban era ruso.

    —¡Ah maldición! —Se quejaba a sus anchas, por lo que tiró el control remoto a un lado y se echó de espaldas en la cama mirando el techo de la habitación —Kagome… ¿qué estarás haciendo?
    —¿A esta hora? Comiendo seguramente… —respondió su amigo que estaba con una toalla amarrada a su cintura y goteando del cabello.

    Inuyasha se levantó inmediatamente para encararlo con una expresión de sorpresa.

    —¡¿Qué rayos…?! —y diciendo esto lo quedó mirando seriamente pero gracioso.

    Su amigó sólo atinó a reír mientras tomaba una parte de su ropa para cambiarse dentro.

    —¡No es gracioso Miroku! ¡Cállate! —decía muy alterado y además de sonrojado.
    —No tiene nada de malo que pienses en ella, después de todo amas a Higurashi ¿no? —se lo recordaba de buenas maneras.
    —Cómo sea… —le respondía Taisho, cruzándose de brazos y desviando la mirada, por cierto… seguía sonrojado.

    Kayama volvió a entrar pero esta vez a cambiarse.

    *º*º*

    —Al parecer la muchacha ha vuelto a Rusia, señor —decía un hombre a través de la línea telefónica.
    —Perfecto… —dijo otro hombre y cortando la llamada.

    Esa extraña sonrisa no se borraba de su rostro, atrajo el pequeño vaso lleno de Vodka y se lo bebió de un solo sorbo, luego juntó sus manos para jugar con algunos de los anillos, que traía puestos.

    —Llegaron antes de tiempo pero nada que no se pueda solucionar —se decía a él mismo mientras fijaba su vista hacía una fotografía que mantenía debajo del grueso vidrio en su escritorio.
     
    • Me gusta Me gusta x 10
  16.  
    maFFer susin

    maFFer susin Usuario común

    Escorpión
    Miembro desde:
    22 Febrero 2010
    Mensajes:
    212
    Pluma de
    Escritora
    ohhhhhhhhhh se me hizo muy corto¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ no es justo, como sea, me gusto el capi fue muy bueno, aunque esperaba reencuentro T.T

    Siguo shokeada por la ultima parte:
    Ahhh ¿porque? hay cosas que aun no entiendo :D pero seguire leyendo para descubrirlas. Espero que lo continues pronto D:

    Lo que odie fue al papa de Kagome y su actitud.
    Ash ¿pues que quiere? ¿que le traiga mariachis y le baile? Dios esta DEPRIMIDA aparte, ¿cual es la forma de contestar segun el? yo no se que hubiera hecho, asi como soy........

    Nos leemos pronto
    maFFer ♥
    xoxo
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  17.  
    Idaly

    Idaly Usuario común

    Virgo
    Miembro desde:
    4 Septiembre 2005
    Mensajes:
    367
    Pluma de
    Escritora
    Hola!

    Que buena continuación has dejado hee, pero quede muy intrigada con el final... quien es ese sujeto? porque le interesa que Kagome haya vuelto a Rusia? y de quien es la foto que tiene bajo el vidrio de su escritorio?

    No importa que tengas retrasos lo importante es que pones continuación, te aseguro que entiendo eso de la falta de tiempo jejeje, así que por mi parte no hay problema, espero puedas actualizar pronto.

    Adiós.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  18.  
    aLeTheia_anGeL

    aLeTheia_anGeL Usuario común

    Piscis
    Miembro desde:
    22 Junio 2009
    Mensajes:
    354
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Me Quedare a tu Lado [InuxKag]
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Romance/Amor
    Total de capítulos:
    31
     
    Palabras:
    3153
    Hola mis queridas lectoras (es) y seguidor@s xD Nuevamente [supongo que ya estarán cansadas de esto] lamento la tardanza, la imaginación no estuvo del todo concorde a mis emociones pero finalmente pude terminar algunos capitulos más. Me agrada que les haya picado la curiosidad acerca del nuevo villano sin embargo por el momento en este capitulo no se mencionará mucho al respecto, más bien me enfoqué en nuestra parejita principal y a pedido de algunas lectoras decidí emplear ese recurso para castigar a nuestro querido amigo "orejas de perro" ;) ... Ya va siendo momento que dejen de odiar al pobre Inuyasha xD pero aún así creo que este capitulo les gustará mucho y bueno de esa forma las cosas irán mejorando poco a poco.

    Antes de publicar el capitulo, quería agradecerles por siempre comentar y seguir leyendo el fic. A aquellas personas que les han borrado sus mensajes de igual manera muchas gracias, ya los acabo de leer.

    Finalmente he aquí el capitulo siguiente...


    CAP. 25 BUSCANDO SU PERDÓN

    Un día más y Kagome se preparaba para ir a esa escuela, estaba terminando de acomodarse el cabello para después salir de su habitación y bajar a la cocina. Encontró una taza con café recién servida, supuso que su padre se la dejó ahí para ella, se la bebió rápidamente y es que con el frío que dominaba el clima ahí, esa taza de café le cayó de maravillas.

    Ya estaba acostumbrada al típico desayuno que solía tener con su padre, él siempre salía muy temprano a trabajar y la dejaba sola en la mañana. Cerró la puerta con llave y de un salto bajó las gradas de la calle para aventurarse e ir a la escuela.

    De pronto al voltear la esquina por su casa vio un auto estacionado, a decir verdad ese auto se le hizo muy familiar.

    ¿Podrá ser el mismo de…? —pensaba ella muy intrigada mientras que pasaba al lado de ese automóvil mirándolo de reojo.

    Era una Range Rover negra con lunas polarizadas, la muchacha perjuraba mentalmente que ese auto lo había visto antes y al cabo de unos segundos pudo recordar que antes de su viaje a Japón, cuando ella solía irse a la escuela ese mismo carro estaba estacionado en el mismo lugar.

    ¿Qué? ¿De nuevo ese auto? Me pregunto quienes serán lo que están ahí… —se decía a ella misma en sus pensamientos.

    Decidió no darle mucha importancia y esta vez apresuró el paso un poco para llegar a clases pronto.

    —La muchacha se acaba de ir al instituto, jefe —dijo el hombre a través de un teléfono celular para luego cortar la llamada.

    Cuando Kagome ya no estaba a la vista, aquel misterioso tipo encendió el auto y se puso en marcha.

    *º*º*

    Cogió una botella con agua helada que había en la mini nevera dentro de la habitación, mojó un poco sus manos y salpicó gotas muy gruesas en la cara de su amigo, quién hasta esos momentos dormía plácidamente acurrucado entre las sábanas y el edredón. Kayama despertó sobresaltado y algo enojado también.

    —¡¿Qué rayos?! ¡Inuyasha! —gritó él, quitándose el cobertor de encima y poniéndose de pie.
    —Ya tío, relájate, se me ocurrió despertarte así —le decía el muchacho ambarino entre risas, totalmente divertido.
    —¡Ah! Eres insoportable —exclamó para finalizar esa divertida confrontación con una sonrisa de lado.

    Cogió la toalla de rostro que estaba en el respaldar de uno de los muebles y se secó la cara para luego tirársela en la espalda a Inuyasha, quien se ponía un par de medias más.

    —Hace tiempo que no me divertía así —dijo Taisho con una sonrisa melancólica.
    —Ya te vino el sentimentalismo —decía su amigo tratando de hacerle broma —¡Oh! Ya sé, quizás es por el frío.
    —Ya deja de fastidiar Miroku —respondió volviendo a su típica pose.

    Se turnaron para bañarse y cambiarse; cuando estuvieron listos bajaron al restaurante del hotel a tomar desayuno.

    —Y bien… ¿Cuál es el plan de hoy? ¿Cómo harás para encontrar a Kagome? —decía Kayama mientras mordía un pedazo de pan.
    —No tengo idea… lo único que sabemos es la dirección de la empresa Higurashi pero no podemos ir y preguntar ¿Señor dónde vive? Quiero ver a su hija ¡Bah! —hablaba sarcástico el joven ambarino apoyado en la mesa de mala gana.
    —Necesitamos un hada madrina —decía el chico de coleta después de haberse reído.

    En ese momento, el celular de Taisho vibró lo que hizo que la mesa temblara mínimamente, lo suficiente para que captara la atención del joven y que bajara la mirada para coger el aparato.

    Rayos… —pensó antes de contestar, acto seguido habló —¿Sí papá?
    —Inuyasha ¿Cómo va todo? —preguntó de lo más normal el señor InuNo.
    —Ehm… bien… ¿No estás enojado? —cuestionó el muchacho algo confundido por el tono de tranquilidad de su padre.
    —Tu madre insistió en que te llame, quiere saber cómo estás, de ahí en más todo bien hijo ¿Por qué la pregunta? —le detallaba sin ninguna perturbación.
    —Papá, necesito tu ayuda —y de pronto se le había ocurrido aprovechar esa llamada al máximo.

    Empezó por decirle a su padre que sólo tenía la dirección de la empresa de Daijiro pero que necesitaba algunos detalles más como por mencionar: la dirección de su casa y el horario de escuela de Kagome. InuNo le dio lo que quería a excepción del horario, sólo les dio la dirección de la casa Higurashi con avenida, número y color de casa; ambos muchachos supusieron que con esos datos ya “la tenían ganada”.

    —Muchas gracias viejo —decía el muchacho ambarino con una sonrisa de lado.
    —Claro… luego veremos el castigo, adiós hijo regresa pronto —le dijo su padre en un tono burlesco, casi pareciere que estuviera bromeando.
    —¡¿Castigo?! ¡Pero…! —su reacción fue demasiado tardía, su padre ya había cortado la llamada… eso indicaba que no bromeaba del todo.

    Miroku se reía por lo bajo, eso lo notó su querido amigo.

    —Ni te creas tanto Baka, tus padres también te darán lo tuyo —le recalcaba Inuyasha.
    —Ya lo sé y nada más que por tu culpa Dobe —le reclamaba y fingía enojarse.

    Pero muy en el fondo ambos sabían que las cosas se estaban facilitando.

    *º*º*

    Por otro lado en el instituto ruso, Kagome se encontraba metiendo sus cosas en su maletín; a decir verdad no tenía muchos ánimos de hacer las cosas y eso lo notó uno de sus compañeros que acababa de regresar de los servicios, y que no dudó en ningún momento para aprovechar la oportunidad de acercársele.

    —Higurashi, que bueno encontrarte aún—mentía el muchacho, ya que en realidad la había observado todo el tiempo desde que sonó el timbre de salida y rogaba porque al regresar ella siguiera ahí.
    —Ah hola Pávlov ¿Me estabas buscando? —preguntó la chica terminando de recoger sus cosas y mirándolo fijamente.

    El muchacho se quedó viéndola también con aquellos ojos celestes cielo; se llamaba Andrew Pávlov y era un joven muy bien parecido: buen porte, cabello castaño claro y una sonrisa encantadora. Era evidente la atracción que sentía por la chica pero ella era muy distraída para darse cuenta, además por las cosas que recientemente le estaban sucediendo, estos asuntos eran en lo último que pensaba.

    —¿Pávlov? —volvió a hablar para llamar su atención.
    —¡Ah! Perdón, me perdí en tu mirada, lo lamento —dijo con una sonrisa, sus intenciones eran obvias y directas.

    Este comentario causó el leve rubor en las mejillas de Kagome, quien desvió la mirada a sus cosas.

    —Eh… claro, me tengo que ir, adiós —ahora se encontraba algo nerviosa.
    —Te acompaño a casa —se ofreció rápidamente pero parecía más bien una afirmación.

    Kagome no pudo objetar ya que Andrew no le dio tiempo: tomó el maletín de ella y salió del aula.

    —¿No vienes Higurashi? —decía el muchacho siempre con aquella sonrisa.
    —Ah… claro —contestó lentamente ella, ese chico la confundía un poco.

    De ese modo salieron del instituto caminando muy juntos, por parte de él ya que se le pegaba mucho cada vez que podía. Se sentía algo incomoda ya que Pávlov no dejaba de preguntarle cosas sobre ella… por un lado resultaba muy atento y tierno pero por el otro era algo frustrante y sobre todo si venía de un chico que no le gustaba.

    Por suerte, pensaba ella, ya habían llegado a casa; supuso que finalmente podría alejarse de él.

    —Bueno Pávlov gracias, tengo que entrar —decía la chica, en verdad estaba desesperada por ingresar a su hogar.
    —Oh, sólo dime Andrew… Kagome —le respondió con una sonrisa de lado muy sensual.
    —No creo que se vea bien —contestó poniendo una excusa.
    —Kagome… —y diciendo su nombre la tomó de la mano delicadamente —No tienes idea lo feliz que estoy porque hayas regresado.

    A partir de ese momento todo sucedió muy rápido, sólo recuperó la conciencia cuando sintió los labios de su compañero mordiendo delicadamente los suyos. Abrió sus ojos totalmente sorprendida y vio que Andrew la besaba con pasión, ella simplemente no hacia ningún movimiento… estaba en shock.

    —¿Estás seguro que por aquí es su casa? No debiste pedir indicaciones a esa ancianita, se veía sospechosa —decía uno de los muchachos mientras releía el croquis que esa amable mujer les había hecho.
    —Sí Miroku, deja de fastidiar, estoy seguro que por a… —y de pronto se quedó completamente en silencio mirando al frente.
    —¿Eh? ¿Qué tienes? —preguntó Kayama aproximándose hacia él.

    Al ver que su amigo no respondía, se limitó a ver en la dirección en la que Taisho fijó su ambarina mirada dándose con la misma sorpresa.

    —No me jo… —dijo él pero se calló en el acto al ver que su amigo por fin hizo un movimiento caminando hacia allá… Muy mala idea —¡Wow! ¡Wow! ¡Wow! ¡¿Qué haces?! Vámonos.
    —Cállate… —usando un tono muy serio, el cuál asustó a Miroku.

    Sabía que dejarlo ir no era una buena decisión pero cuando su amigo ponía esa mirada y usaba ese tono de voz no era inteligente hacerlo enfadar más.

    Taisho caminó directo hacia los dos muchachos, Kagome se había quedado perpleja por lo que estaba sucediendo y trataba de empujarlo para qué deje de hacer eso sin embargo Andrew no estaba dispuesto a dejarla así nomás así que la tomó por la cintura a la fuerza atrayéndola más hacia él.

    —Por…favor…suelta…me —pedía ella tratando de voltear su rostro.
    —No Kagome… ahora que estás aquí… no te dejaré —y diciendo esto la tomó por el mentón y la obligó a voltear por completo besándola a la fuerza nuevamente.

    Lo único que sintió después de eso fue la sorprendente liberación de sus labios, al fin podía sentirlos sin tal opresión. Pero al fijarse de qué o quién había sido el responsable se quedó mucho más asombrada que antes.

    —¡¿Inuyasha?! —y es que en verdad no lo podía creer.
    —¡Qué estas sordo! ¡Déjala en paz! —gritaba él muy enojado.
    —¡¿Quién rayos eres?! —exclamaba Pávlov desde el suelo cogiéndose la mejilla muy adolorido.

    Ante esa pregunta, el capitán de los Tigres se enojó mucho más y estuvo dispuesto a aventarse hacia ese chico con tal de dejarle en claro que no se acercara más a Kagome, pero su amigo lo impidió a toda costa ya que estaban en vía pública y habían empezado a llamar la atención.

    Miroku lo sostuvo por los hombros fuertemente imposibilitando el hecho de que lo golpeara.

    —¡Maldita sea! ¡Suéltame Miroku! —gritaba él sin apartar su chocante mirada de ese chico.
    —¡Maldición cálmate Inuyasha! —le decía Kayama sin soltarlo al contrario sujetándolo con más fuerza.

    Kagome seguía mirándolo aún sorprendida ¡¿Pero qué demonios estaba haciendo él en Rusia?! La chica no lograba comprender nada por el momento, lo que importaba ahora era tranquilizar a Inuyasha y hacer que Andrew se vaya.

    Pávlov se puso de pie, aún sentía el latido en su mejilla por el dolor, tarde o temprano se le iba a hinchar.

    —¿Quién eres? ¿Por qué te importa tanto lo que haga con Higurashi? —preguntó un poco enfadado, fulminándolo con la mirada.

    Para cuando él hizo esas preguntas, Kayama había logrado tranquilizarlo un poco, lo suficiente como para tener la confianza de soltarlo. Inuyasha estaba algo agitado por la adrenalina del momento y también lo fulminaba con la mirada.

    —Eso no es de tu incumbencia ¡Mira te lo advierto! Sólo déjala en paz —intentaba mantener algo de paciencia al responder pero simplemente ese no era su estilo.
    —¡Ja! ¿Qué eres? ¿Su novio? —decía Andrew con una pose arrogante.
    —¡Sí! —exclamó de pronto ella metiéndose entre los dos muchachos.

    Tanto Miroku como los dos rivales de ahí se quedaron mirándola muy sorprendidos. Ella miraba de manera retadora a Andrew, quien parecía decepcionado.

    —Entonces… ¿Tenías novio todo este tiempo? —le decía con una expresión muy triste.
    —S…sí Pávlov, realmente lo lamento… debes irte —le pidió ella tratando de sonar amable.
    —Está bien… discúlpame por todo esto, adiós Higurashi —no sabía que más decirle, se sentía muy avergonzado.

    Después de que el muchacho se retiró, algo de la tensión del ambiente pudo reducirse pero era de esperarse de que ambos jóvenes no se sintieran del todo cómodos. Miroku lo notó así que sin decir nada los dejó solos yéndose unos momentos a la esquina de la cuadra.

    —Kagome… ¿Por qué tú…? —iba a preguntar sobre el asunto de “los novios” pero ella lo interrumpió enseguida.
    —No te creas Inuyasha, sólo lo dije para que Andrew me dejara de una vez —le respondió para aclarar las cosas.
    —¡Quién es ese tipo! ¡Maldición, tenía que besarte! ¡¿No?! —acababa de volver su frustración y recelo.

    Ella trató de ignorarlo pero Taisho la tomó por el brazo, conservando su manera delicada de tratarla y luego, sin pensárselo dos veces la haló hacía él aprisionándola en ese tierno abrazo. La chica no sabía cómo reaccionar ante esto, simplemente lo sujetó por la camisa arrugando la tela en sus manos.

    —¿Por qué haces esto? Ya suéltame Inuyasha —decía ella muy dolida aún.
    —No te soltaré, o acaso… ¿eso es lo que quieres? —preguntó astutamente el muchacho.

    Kagome no supo que contestarle por lo que solamente se expresó a través de sus reacciones: sujetó más fuerte la camisa, arrugándola y atrayendo un poco a Taisho hacía ella.

    —Eres un idiota… —susurraba ella con una sonrisa en el rostro.
    —Kag, perdóname, sí vine aquí fue para arreglar las cosas contigo y explicarle a tu padre que sin importar ese compromiso yo te… —estaba completamente seguro de lo que diría pero al igual que aquella primera vez decidió que lo mejor era expresarse bien.

    Se separó un poco de ella, lo suficiente para tomarle del mentón y hacer que lo mirara; una vez así pudo verla directamente a los ojos de una manera tierna y con aquella sonrisa arrogante que lo caracterizaba finalmente continuó.

    —Te amo Kagome —aquellas palabras fueron como dulce melodía para los oídos femeninos.
    —¿Pero y… Kikio? —exactamente las cosas no iban a quedar así como si nada.
    —Ella es mi pasado, por fin pude superar ese capítulo en mi vida y gracias a ti ha sido la primera vez que aprendí lo que es amar —era algo difícil creer que estas palabras hayan salido de la boca de Inuyasha Taisho, sin embargo el muchacho trataba de ordenar sus ideas y expresarse lo mejor que podía.

    Kagome se limitaba a mirarlo fijamente, sabía que él decía la verdad pero no sería tan sencillo convencer a su padre de esto.

    Por el momento sólo quería disfrutar de su compañía así que sin que él se lo esperara volvió a acurrucarse en su pecho para después aspirar el típico aroma que emanaba de su amado Taisho: menta, sin duda alguna había extrañado sentirlo tan cerca.

    —Eh, lamento interrumpir pero en esa esquina hace mucho frío —decía Kayama quien al verlos tan melosos pensó que la reconciliación había sido rápida.
    —¡Miroku! —dijo la Higurashi para soltarse del muchacho ambarino e ir abrazar a su querido amigo.
    —Hola Kagome, que bueno que ya se amistaron —dijo muy animado con esa sonrisa propia de él.

    Estas palabras hicieron que ambos aludidos se miraran fijamente, a su vez la chica arqueó un poco la ceja y sonrió: algo se le había ocurrido, después de todo no iba a dárselo tan fácil.

    —No Miroku, tu amigo tiene que hacer muchos méritos aún —y de ese modo dictó su veredicto.

    Inuyasha sólo sonrió de lado y de paso hizo una mueca graciosa; sí Kagome quería ver hechos además de oír palabras lo haría, sin duda alguna lo haría. Estaba más que decidido a probarle a todo el mundo de cuánto amaba a Kagome Higurashi.

    =============================

    Por cierto, aquí les dejo una imagen del auto sospechoso para que se hagan una idea.
    Range Rover
     
    • Me gusta Me gusta x 10
  19.  
    liisseth

    liisseth Entusiasta

    Capricornio
    Miembro desde:
    21 Noviembre 2010
    Mensajes:
    59
    Pluma de
    Escritora
    Waaa!!! Hoolaa :seca: 2 palabras :tomando aire: ¡ME ENCANTO! Wooow Inuyasha cuando se propone algo lo consigue y que especifico es el padre de él porque hasta el color de la casa le dijo >-< Kagome si que es rápida apenas llega unos días a su antigua escuela y ya tiene un pretendiente Andrew y...... ¡¡¿¿COMO SE ATREVE A BESARLE CUANDO APENAS SE CONOCEN??!! (no seas tan dramática, me estas dejando sorda) CÁLLATE YAENI.... bueno pasando a la historia Inuyasha bien heroico al recatar a Kagome ahh :suspiro: ya me pareció ver la historia de la princesa atrapada y el príncipe la rescata. O: Ella es muy obvia cuando algo es suyo y aunque lo negara seguro sintió muy bien decir que Él es su novio ya quisiera decir eso yo ahh :suspiro (otra vez): déjame ¬¬' hoy ando dramática xD espero pronto la continuacion :D (desesperada) ¬¬' Esta chica dice:

    -Cambio y Fuera
    ¬ |•‡•_|[°o.Liizeeth--Annahhi.o°]|_•‡•|¬?

    si una espada que no corta pero cura y da vida a las personas que amas y una espada con un sentimiento puro de proteger, si al escoger te equivocas de espada, dile adiós a tu deseo de vida
     
    • Me gusta Me gusta x 2
  20.  
    MzzMuñeQuitaInu

    MzzMuñeQuitaInu Entusiasta

    Aries
    Miembro desde:
    7 Julio 2010
    Mensajes:
    161
    bien echo amiga aprovado!!! hehehe
    por fin conciliacion como quisiera yo q ubiera tambien una de mi parte
    pero bueno amiga gracias por todo te felicito el finf t quedo chulisimo
    espero ber mas conti mas adelante y ber q hechos inu iba aser y como su padre tomara
    la relacion entre ellos y quienes seran esos tipos q la andan persiguiendo espero
    q no pase nada malo hehehe bueno amiga gracias otra bes
    nos bemos bye!!!!
    CUidtae!!!!!
     
    • Me gusta Me gusta x 2
Cargando...

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso