Mantecado con Chocolate [U.A]

Re: Mantecado con Chocolate [U.A]

ChicAAAAASSS!!! HE VUELTOOOOO!!!! xDD!! ok.. son como las 3 de la mañanaaa!! ajajjaja kyaa ke kawaii q les haya gustado la contii!! ^^

Angomee-chann!!! arigatouu por el favorr!! jejeje buenoo... pronto pondre la conti!!

me despidoo, besos..

Kakis312.

 

Re: Mantecado con Chocolate [U.A]

Mantecado con Chocolate​

Resumen:​

Kagome Higurashi, una de las mejores cheff’s de su ciudad (Francia). Se ve obligada a compartir “su” cocina con el hijo de su jefe, creando sentimientos nunca antes vividos para ella. Ambos en equipo se les ha encargado la misión de crear un platillo/postre nuevo. Algo dulce y delicioso… algo… sabroso, algo como… ¿Mantecado con chocolate? [SesshKag]

Edad Kagome: 22 años.
Edad Sesshoumaru: 26 años.
Edad Sango: 22 años.
Edad Miroku: 24 años.

Aclaraciones:

- Es un SesshxKag.
- Si eres fan de Kagura, ¿Qué haces aquí?
- Rin es la sobrina de Kagome.
- Sango y Miroku también trabajan en el Restaurante Taisho.
- Hakudoshi en este Fic, es más alto que como es en la serie.
- Los personajes en este fic viven en Francia.

Si tienes más dudas respecto al fanfic, agrégame a tus contactos y te las contestare. Mi e-mail es: Itasaku312@hotmail.com

Capitulo Cinco
Gracias.

Después del pequeño “incidente” en casa de Sesshoumaru, Kagome volvió a su casa para encontrarse con la pequeña Rin dormida, sonrió al verla tan tranquila.

La pequeña Rin le recordaba mucho a su hermana fallecida, Midoriko, aun recordaba la carta que le habia dejado antes de morir. Era como un tipo de testamento a su estilo.

“Para mi querida hermana Kagome:

Hermana, primero que nada,
Te preguntaras ¿Por qué escribo esto si aun soy muy joven?
La respuesta es clara, nunca se sabe cuando
Puedes tener un accidente y morir.
Kagome, si algo me llegara a pasar, quiero
Que tú y solo tú cuides a mi pequeña Rin.
Se que la vas a querer tanto como yo la quiero.
Esta es mi última palabra, nunca olvides
Que te quiero más que a nadie en este mundo
Hermanita, cuida a mi hija, por favor.

Te Quiere,
Midoriko Higurashi.”

La primera vez que leyó la carta, casi pega el grito que gano el oscar y la ponen el “Guinness record award 2008” nunca se imagino a ella cuidando de una niña tan pequeña e inocente.

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-¿Hoy tampoco vas a comer?- Preguntó Kagome.

-No tengo hambre.- Susurró la niña.

-Rin, tienes que comer un poco aunque sea, vamos hazlo por A-hun.- Que era el peluche favorito de la niña.

-No tienes por que hacer esto. ¿Por qué te esfuerzas tanto?- Preguntó confundida la pequeña.

-Por que así lo quiero y por que te quiero mucho. Venga, vamos.- Anunció levantándose de la mesa para buscar su abrigo y salir del edificio con la pequeña niña a su lado.

Por el cielo podía deducir que eran las 7:00pm. Llegaron al restaurante sobre las 7:20pm, gracias a dios dicho lugar abría a las 7:30pm. Cuando entraron a la cocina Kagome, automáticamente se sonrojo. Hay estaba él, tan apuesto como siempre, ella se regañaba mentalmente. Cuando ambas entraron a la cocina, Sesshoumaru, la observo siempre tan hermosa como siempre, su cabello era tan o más azabache que la noche, hermoso. Sus ojos tan marrones, como un chocolate delicioso que quisiera ser comido, y su figura, ni se diga, tan esbelta a pesar de su corta edad.

Pudo llegar a ver que ella lo observaba sin embargo aparto su vista muy avergonzada y se dirigió a saludar a su mejor amiga.

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-¿No has logrado nada con Rin-chan?- Interrogó Sango, viendo que su amiga negaba con la cabeza.-Eso no es normal.-

-¿Crees que no lo se?-

-Kagome, no cualquier niña deja de comer por que no tiene hambre, ¿Cuánto tiempo tiene ya sin comer?-

-No tengo idea, una semana tal vez, dos quizás.-

-¿Será que es anoréxica?- Preguntó Sango, pensando en cualquier otra posibilidad. Mientras observaba a la pequeña niña la cual se encontraba sentada en una silla, un poco apartada de ellas.

-Sango, no seas ridícula, solo tiene siete años.-

Con lo que no contaban era con que un chico de cabellos plateados y ojos color ámbar habia oído la conversación. El mismo se acerco a la pequeña, pidiéndole permiso a Sango para descansar un par de minutos. (N/A: Recordemos que Sango es como que la que mantiene el orden en la cocina) Sin más el hombre se acerco a la pequeña, bajo la mirada atenta y confundida de Kagome.

-Konichiwa, Rin-chan.-

-Konichiwa, Sesshoumaru-sama.- Está última lo observaba mientras el Taisho sacaba un poco de cilantro de la nevera, saco mas o menos una mata completa. (N/A: A los que no saben el cilantro es una mata que le pone sabor a cualquier comida)

Aspiro su olor, y empezó a cortarlo en pedacitos, Rin lo observaba atenta. Cuando se dio cuenta de que la niña lo miraba, le paso un poco de la mata para que ella le ayudara. Esta lo agarro y empezó a imitarlo. Después de esto Sesshoumaru saco una olla profunda y puso agua a hervir mientras sacaba la pasta del almacén. Una vez estuvo echa la pasta, Sesshoumaru le echo una especie de salsa entre roja y rosada. La sirvió en un plato y le puso un poco del cilantro. Agarró un tenedor y como “apropositamente” empezó a comer enfrente de la niña la cual lo veía con ansias.

-¡Sesshoumaru, ven a trabajar!- Gritó Sango desde el otro extremo de la cocina.

-¡Hai! Rin, tenme esto por favor.- Suplico poniéndole el plato a Rin en las piernas esta lo agarro mirándolo con ganas de tragárselo de un bocado.

Sesshoumaru se retiro del lugar donde estaba Rin satisfecho. En ese momento iba entrando Kagome a la cocina y lo que vio la conmovió, Rin después de dos semanas de no haber querido comer, estaba atragantándose con la pasta que le habia entregado Sesshoumaru. Pudo ver que Sesshoumaru miraba a la niña y sin previo aviso le dijo:

-Deja algo para mí.- Luego sonrió mirando como la niña comía su preparación.

Sesshoumaru volteo buscando a Kagome con la mirada, cuando la encontró esta tenía los ojos puestos en él, lo único que ella pudo pronunciar fue un:

-Gracias.- Fue mas bien un susurro. Sesshoumaru asintió con la cabeza de modo que aceptaba su agradecimiento.

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-Kagome.- Llamó una voz de niña.

-¿Hai, Rin-chan?-

-¿Qué vamos a hacer el fin de semana?-

-Bueno, InuTaisho-sama va a cerrar el restaurante para fumigarlo. ¿Por qué lo preguntas?- Interrogó terminando de limpiar los trastes que había usado.

-Hmmp, me preguntaba si…- Suspiró. –Sabes que mi cumple se acerca, ¿verdad?- Recordó Rin.

-Claro que si, Rin-chan, es en tres días.- Sonrió Kagome.

-Bueno lo que yo quería era que… Me preguntaba si me podías llevar a pasear ese día.-

-Claro, ¿A dónde quieres ir?-

-A Paris.- (N/A: Recordemos que son de Francia así que Paris le queda como a un par de horas)

-¿Y eso?-

-Es que…- Su semblante cambio a uno triste. –Mamá solía llevarme hay cuando era niña.-

-Por supuesto que si, Rin-chan.-

-Tía no me interrumpas.- Kagome puso cara de WTF, ¿Qué le estaba sucediendo a los niños en esos días?-Lo que sucede es que quiero que también valla, Sesshoumaru-sama.-

-¿¡Que!?- El gritó que pego Kagome se oyó en toda la cocina, haciendo que todos la voltearan a ver con cara de “Que rara eres.”-¿Por qué él?

-¿Te molesta?- Preguntó Sesshoumaru internándose en la conversación.

-No, digo si, digo no, hay ya no se.- Balbuceó la azabache.

-Por favor, Kag-chan.- Suplicó Rin.

Muy bien sabía que Kagome no pondría resistencia si la llamaba así, era algo muy imposible para ella negarle a la pequeña Rin. En especial si le decía así. No tuvo otra opción, tuvo que decirle que si.

-Suspiro- De acuerdo. Tu cumpleaños es el sábado entonces quiere decir que nos iríamos el viernes luego de salir del restaurante, ¿De acuerdo? –Gruño, la idea de compartir un fin de semana completo con Sesshoumaru no le agradaba, en especial cuando estaba segura de empezar a sentir algo por ese individuo.

-Tía Kagome, eres la mejor.- Dijo abrazándola.

-Se aprovechan de mí.- Susurró la oji-marrón.

Continuara…

Si ya se, es el capitulo mas corto que he escrito hasta ahora. Espero que les haya agrado puesto que para mi no es mi capitulo favorito que digamos, espero que sigan leyendo mi fic. Saludos…

Escenas del próximo capitulo ^//^…

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-Kagome-chan, ¿Cuándo nos vamos?- Interrogó Rin.

-Después de desayunar.- Respondió la Higurashi parándose para ir a preparar el desayuno, pero una mano le agarro el brazo y la volvió a sentar. -¿Pero que…?-

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-Mmm, ¿te parece si vamos al parque de diversiones nuevo?-

-¡Hai!- Exclamo emocionada.

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-Miro… Miroku…-

Lentamente ambos fueron acercándose el uno al otro. Sus narices rozaban, ambas mejillas sonrojadas, y un… ¿un zombie acercándose a ellos?

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Mas en el próximo capitulo de ¡Mantecado con Chocolate!
Posteen por favor!! ^//^

 

Re: Mantecado con Chocolate [U.A]

Mantecado con Chocolate [U.A]​

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Resumen:​

Kagome Higurashi, una de las mejores cheff’s de su ciudad (Francia). Se ve obligada a compartir “su” cocina con el hijo de su jefe, creando sentimientos nunca antes vividos para ella. Ambos en equipo se les ha encargado la misión de crear un platillo/postre nuevo. Algo dulce y delicioso… algo… sabroso, algo como… ¿Mantecado con chocolate? [SesshKag]

Edad Kagome: 22 años.
Edad Sesshoumaru: 26 años.
Edad Sango: 22 años.
Edad Miroku: 24 años.

Aclaraciones:

- Es un SesshxKag.
- Hay leve MiroxSan.
- Si eres fan de Kagura, ¿Qué haces aquí?
- Rin es la sobrina de Kagome.
- Sango y Miroku también trabajan en el Restaurante Taisho.
- Hakudoshi en este Fic, es más alto que como es en la serie.
- Los personajes en este fic viven en Francia.

Si tienes más dudas respecto al fanfic, agrégame a tus contactos y te las contestare. Mi e-mail es: Itasaku312@hotmail.com

Capitulo Seis
¿Cuánto falta para llegar?
Visita al parque de diversiones.

Se levanto con pesadez, abriendo los ojos perezosamente para acostumbrarse a los rayos de sol que entraban por su ventana. Habían pasado exactamente tres (3) días desde la petición de su pequeña sobrina. Había algo que le agradaba en esa petición, el pasar junto al joven Taisho ese fin de semana completo sin embargo no lo iba a aceptar, habia prometido no volver a enamorarse y menos lo haría con el hermano del joven “traicionero”.

Por desgracia el Sr. Taisho habia cerrado el restaurante también el viernes, eso quería decir que estaría con Sesshoumaru mas tiempo, ¡rayos! Mala noticia.

Antes de poder seguir pensando en esas cosas “tontas” como ella las llamaba, entro su sobrina saltando de alegría a su habitación montándose en la cama de Kagome empezó a brincar gritando el nombre antes nombrado.

-¡Kagome, Kagome, Kagome! Despierta por favor.-

-¿Qué sucede, Rin-chan?- Interrogó poniéndose una almohada en la cabeza para no oír los alegres gritos de su sobrina.

-¡Sesshoumaru-sama ya esta aquí! ¡Levántate por favor! ¡Tengo hambre!- Terminó para luego salir de la habitación gritando cosas como “Que bien, ya quiero ir a la Torre Eiffel” “Y voy con Kagome-chan y Sesshoumaru-sama, genial”.

Kagome suspiro, tan temprano y ya habia llegado Sesshoumaru… Tenía la sensación de que algo iba a pasar en ese viaje… algo que la dejaría marcada para siempre.

Se levanto de la cama perezosamente, como estaba metida entre las sabanas de su cama no pudo evitarlo y callo al suelo con todo y mesa de noche. Se sonrojo al pensar que Sesshoumaru entraría y la ayudaría a pararse, por lo que grito…

-¡Estoy bien!-

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-Buenos días.- Saludó Sesshoumaru observando que su compañera de trabajo entraba a la cocina torpemente. –Al parecer alguien se levanto hoy con el pie izquierdo.-

-No es gracioso, Sesshoumaru.-

-Kagome-chan, ¿Cuándo nos vamos?- Interrogó Rin.

-Después de desayunar.- Respondió la Higurashi parándose para ir a preparar el desayuno, pero una mano le agarro el brazo y la volvió a sentar. -¿Pero que…?-

-El desayuno ya está hecho.- Dijo un Sesshoumaru, ¿Sonriente? Dios lo único que faltaba era que los marcianos llegaran a la tierra y dominaran el universo.

-Hmmp-

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-Sango, ¿Oíste que la Srta. Kagome ira a Paris con la pequeña Rin y el Sr. Sesshoumaru?- Preguntó un pelimarrón de ojos azul zafiro.

-Hai, Miroku- Respondió su acompañante un tanto sonrojada.- ¿Por qué lo preguntas?-

-Por que pienso que tú y yo deberíamos hacer algo.- Coloco la mano en la zona prohibida de Sango.

-¡Pervertido!- Gritó parándose de la banca de en donde se encontraba.

-¡No! Sango, no lo mal pienses. Por favor.- Tranquilizó el ojiazul.

-Suspiro-Esta bien, ¿Qué quieres hacer?-

-Mmm, ¿te parece si vamos al parque de diversiones nuevo?-

-¡Hai!- Exclamo emocionada.

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-¿Cuánto falta para llegar?- Pregunto la pequeña niña que iba sentada en el asiento de atrás. Kagome en el copiloto y Sesshoumaru en el piloto del carro.

-Poco.- Respondieron los dos al unísono, Kagome se sonrojo. Sesshoumaru no dejo que eso pasara desapercibido.

Después de cinco segundos.

-¿Cuánto falta para llegar?-

-Poco.- El sonrojo aumento, y Sesshoumaru se dio cuenta. Sonrió para sus adentros.

Después de cinco segundos.

-¿Cuánto falta para llegar?-

-Poco.- Sesshoumaru estaba que se caía de la silla. Estaba riéndose en silencio.

Después de cinco segundos.

-¿Por donde salen los bebes cuando van a nacer?-

-Poco.- Esta vez los dos se sonrojaron. Rin los habia puesto en una posición muy comprometedora.

-¿Poco?- Interrogó inocentemente la niña.

-¡Mira ya llegamos! Kawaii.- Interrumpió Kagome. La verdad le daba pena discutir ese tema con Sesshoumaru al lado.

-¡Que lindo! ¿Cuándo vamos a ir a ese lugar?- Preguntó entusiasmada apuntando hacia la Torre Eiffel.

-Iremos mañana.- Respondió el Taisho.

-¡Genial!-

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-¿A dónde quieres subir primero?- Pregunto el ojiazul a la castaña.

-¿A dónde quieres subir tú?-

-¿Te parece si vamos a la casa de los sustos?-

-¡Si!-

Miroku sonrió. Le gustaba verla así, aunque si le decían “mujeriego” y/o “pervertido”. Su corazón solo lo ocupaba una persona. Esa castaña que trabajaba en el mismo lugar que el. Aquella castaña “malhumorada” que le dejaba los pelos de puntas cuando sonreía.

Caminaron uno al lado del otro dirigiéndose ambos al mismo lugar. La casa asustadiza.

-Dos tickets, por favor.- Pidió amablemente Miroku.

-Aquí tiene sr.- Un hombre de cabellos rojos y ojos verdes le entrego los tickets.

-Gracias.- Dijeron al unísono Sango y Miroku, haciendo que las mejillas de la chica se tornaran color carmín.

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-¿Qué quieres hacer primero?- Preguntó a su sobrina.

-¡Quiero comer helado!-

-Allá hay una heladería, ¿vamos?- Señalo el peli plateado.

-¡Hai!- Asintió Rin.

Llegaron a la heladeria, era pequeña pero a la vez grande. Tenia varias mesas y sillas, y una barra donde estaban los diferentes sabores de helados.

-¿De que lo quieres, Rin-chan?-

-¡Mantecado con chocolate!-

-¿Mantecado con chocolate?- Preguntaron al unísono.

-¡Hai!- Sonrió angelicalmente la niña.

-Con cara de WTF- Va… Vale.- Dice Kagome.

-Kagome, ¿De que lo quieres?-

-Hmmp, mantecado.-

-Sr., tres helados, uno de mantecado y chocolate, otro de mantecado y otro de chocolate.-

-Enseguida joven.-

-Kagome, cuando lleguemos al hotel necesito hablar contigo.-

-Sonrojada-¿Para que?-

-Un asunto de mi padre.-

-Medio decepcionada-Ahh…-

-Aquí tiene sus helados sr.- Anunció el anciano que los habia atendido.

-¡Gracias!- Dijeron los tres al unísono.

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-¡Ahhhh!- Gritó una asustada Sango abrazándose a Miroku. Un cocodrilo le habia mordido el pies. (N/A: Recordemos que están en la casa de los sustos)

-Sa…Sa…San…Sango.- Tartamudeó Miroku.

La tenía a escasos centímetros de su boca. Podía sentir la respiración agitada de ella, puesto que estaba asustada.

-Miro… Miroku…-

Lentamente ambos fueron acercándose el uno al otro. Sus narices rozaban, ambas mejillas sonrojadas, y un… ¿un zombie acercándose a ellos?

-¡BOOOOOO!- Asustó haciendo que ambos cayeran al suelo del susto, uno al lado del otro sonrojados al máximo.

Que inoportuno era ese zombie.

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-Bien, ¿de que querías hablar?- Interrogó una cansada Kagome después de haber acostado a su sobrina, fue al living del hotel en donde se encontró con Sesshoumaru.

Después de comer helado habian ido a caminar por casi todo Paris, comprando ropa, zapatos, comida, etc.

-Cálmate, mujer. Eres desesperante.-

-Mira quien habla.-

-Sesshoumaru Taisho.-

-¿Enserio? No sabia.-

-Que cínica.-

-Burro.-

-Pitillo aplastado.-

-Jinete de perro.-

-Cabeza hueca.-

-Cabeza de chorlito.-

-Baka.-

-Teme.-

-¡Ya basta!-

-Lo que sea.- Contestó ella simplemente.

-Lo que sucede es que, la Asociación de Cheff’s internacionales, les están exigiendo a mi padre algo.-

-Aja, ¿Qué con eso?-

-“¿Cuándo fue que la mujer se volvió tan bruta?”- Pensó el Taisho.

-“¿Cuándo fue que el hombre se volvió tan machista?”- Pensó la azabache.

-Voy a ir directo al grano.-

-¿No lo has hecho desde el principio?-

-Venita en la frente- Quieren que hagamos un trabajo juntos.- Hizo caso omiso a la pregunta de la oji marrón.

-¿un trabajo?-

-Así es.-

-¿Qué clase de trabajo?-

-Un postre nuevo.-

Continuara…

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Escenas del próximo capitulo… ^//^

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-Me asuste cuando me levante y no estabas a mi lado.-

-Tranquila pequeña… Solo hablaba por teléfono.-

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-Hummm…- Seguía sonrojada por la llamada del ojiazul.

-Sango, estaba llamándote para ver si… si… Bueno lo que sucede es que ayer me la pase súper bien contigo y quería saber si tú querrías ir al cine conmigo hoy.-

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-Sesshoumaru…-

-Kagome…- Se acerco lentamente a los labios de la chica, estaba rozándolos… Podía sentir la respiración agitada de ella chocando con la suya.

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Más en el prox capi! ^//^ Los espero, ohh, el séptimo capitulo se titula:

Primer beso.
Casi segundo beso.

Kakis312.