"Los pesos del Mundo" Shikatema

Re: "Los pesos del Mundo" Shikatema

Capitulo 14: Te haz ido… ya no me sientes… ya no más. (parte uno)

Con las muchachas. Ellas estaban charlando sentadas en el comedor.

-Y todo eso ocurrió mientas tú no estabas-terminó Temari de explicar todo lo ocurrido en la ausencia de Tenten.

-Vaya…-suspiró asombrada Tenten-… ¿pero ahora te irás a Suna?-preguntó algo desanimada.

-Si… tengo que ayudar a mis hermanos…-contestó la rubia-… además no sé cuánto tiempo estaré allá-agregó pensativa.

-Pero Temari, no te desanimes…-dijo Tenten colocando su mano en el hombro de la muchacha-… cuando te quieras dar cuenta ya estarás de regreso-le daba ánimos.

-¿Eso crees?-preguntó dudosa.

-Claro que lo creo…-agrego entusiasta- Ven, vamos a ver cómo está Hinata ¿si?-dijo levantándose de su asiento.

-De acuerdo, ella debe estar triste por lo de Naruto-dijo recordando que hoy se iría junto con Sasuke a entrenar con Jiraiya.

El tiempo transcurrió lentamente para nuestras parejas. Las muchachas ya habían terminado su visita a la mansión Hyuuga, para ver cómo se encontraba su amiga. Enterándose ambas que Hinata demostraba su apoyo a Naruto, mostraba su felicidad por él… reacción que no sorprendió a las muchachas, las cuales sabían con perfección de que ella ama demasiado a Naruto como para impedirle algo así.

*****

La decisión ya estaba tomada, Naruto y Sasuke decidieron aceptar el entrenamiento por el sannin legendario. Esos tres años lejos de sus seres queridos sería duro para nuestros jóvenes Shinobis, dejar de ver a sus novias por ese tiempo no sería nada fácil, tampoco sería fácil para ellas. La aldea estaría muy silenciosa sin ellos… en especial el ninja hiperactivo número uno.

Y ahora con la noticia de que la embajadora de Suna se iría a su aldea natal por quién sabe cuánto tiempo… eso traía muy nervioso al joven Nara, aunque gracias al plan del genio Hyuuga había un poco de esperanza de que se volvieran a encontrar pronto. Ahora Shikamaru no visitaba tan frecuentemente a su “amiga” según sus hermanos.

El momento tan esperado y tan no deseado por todos se avecinaba. En la entrada de la aldea se encontraban nuestros shinobis, aguardando el momento que el sannin apareciera. Junto con ellos estaban todos sus amigos, sus respectivas novias, Godaime Hokage y el Kazekage con sus familiares… todos reunidos para la despedida de Naruto y Sasuke.

Todos esperaban en un ambiente no muy feliz a la aparición del sannin… que pareciese que nunca aparecería.

-Ese ero-senin… cuándo rayos vendrá-se quejaba el joven Uzumaki en sus adentros, para no provocar más tensión en el lugar.

-No te preocupes Naruto-kun… ya aparecerá-lo tranquilizaba la joven Hyuuga sintiendo la tensión de la mano del muchacho, sospechando que estaría nervioso.

-Hinata…-susurró asombrado el muchacho por el comentario de su novia.

-Oigan Naruto-kun, Sasuke-kun, espero que su entrenamiento sea el más beneficioso-los animaba Rock Lee mostrando su dedo pulgar en alto- aunque cuando regresen todos nos volveremos más fuertes-agrego dándole un beso en la mejilla a su novia Atsuko.

-Hmp…-pronunció Sasuke con una media sonrisa.

-Eso tenlo por seguro cejotas… con el teme nos volveremos extremadamente fuertes-dijo un poco más animado Naruto-además no pararé hasta convertirme en Hokage-agrego mirando a su novia.

-Eso lo veremos, Naruto-dijo Tsunade en tono desafiante, cruzándose de brazos.

Y de nuevo otro silencio incómodo invadió el lugar… nadie comentaba nada, no sabían qué decir en estos momentos, es seguro de que los muchachos no se irían a la guerra para que sus amigos estuvieran tan desanimados, pero no había tema para tocar.

Luego de unos minutos más, el sannin legendario hizo su aparición, sin no antes recibir un golpe de su ex compañera y actual Hokage.

-Vaya… creo que eso me lo merecía…-dijo Jiraiya sobándose la cabeza del dolor-… Naruto, Sasuke ¿están listos?-agrego cambiando su tono de voz a serio.

-Si… estamos listos-contestó el joven Uzumaki, mientras que Sasuke afirmaba con una inclinación de cabeza.

-Bien… les dejaré despedirse de ellas-dijo el sannin haciendo referencia a Hinata y Sakura.

-Hinata…-la llamó el joven rubio-… cuídate mientras no esté ¿si?-dijo tomando a la muchacha de su rostro y acariciándole las mejillas.

-Creo que tú deberías hacer lo mismo…-contestó la joven Hyuuga con una sonrisa-… no te sobre esfuerces, una cosa es entrenar… y otra muy diferente es dañar tu cuerpo-le aconsejaba la muchacha.

-jeje tienes razón-dijo divertido Naruto sobándose su nuca-… te extrañaré, Hinata.

-Yo también, Naruto-kun-dijo Hinata recibiendo un pequeño beso de parte del muchacho.

-Sasuke…-susurraba Sakura, dándole un fuerte abrazo al recién nombrado, siendo correspondido por él- Te cuidas mucho ¿me oíste?-dijo en tono de orden, más que consejo, mientras se separaba de él y le daba “pequeños” golpes con su dedo índice en el pecho del muchacho.

-Hmp… claro mi señora-dijo Sasuke burlonamente.

-Señorita, para tu información-corrigió la pelirosa, en tono de reproche.

-Hmp, lo que sea…-dijo fingiendo desinterés viendo como el rostro de Sakura se desviaba hacía otro lugar. Al darse cuenta de eso, Sasuke le roba un inesperado beso.

-Bueno, bueno terminemos con el drama y partamos de una vez-dijo Jiraiya arto de tanto melodrama-… ¿me esperarás, mi querida Tsunade?-preguntó acercándose a la hokage y poniendo carta de niño chico.

-Eso quisieras tú, viejo pervertido-contestó apartándolo de si.

-Qué más da… yo lo intenté-dijo alejándose de la hokage y dirigiendo su paso hacía fuera de la aldea seguido por sus dos shinobis subordinados.

-¡Adiós a todos dattebayo!-saludaba Naruto con su mano en alto, alejándose de la aldea y observándola por última vez. Observando como sus amigos le gritaban frases de aliento, algún que otro insulto amistoso por parte de Kiba, que enseguida era regañado por Ino, a Rock Lee gritando algo sobre la juventud… pero una frase que se quedó grabada en su mente “Aún sigo esperando a que seas Hokage, Naruto” una frase de su amigo y Kazekage, Gaara.

*****

Lentamente los tres Shinobis iban desapareciendo en el horizonte, poco a poco las personas allí reunidas se iban yendo del lugar a hacer sus labores diarios o simplemente a sus casas.
Hinata y Sakura decidieron dar un paseo por la aldea para charlar y despejarse un poco del tema de sus novios, Atsuko y Lee fueron al campo para entrenar junto con Tenten y Neji, y así la entrada de la aldea iba quedando vacía… pero un grupo de personas aún seguían allí.

-Shikamaru…-susurró por lo bajo la muchacha de la arena, observando al recién nombrado apoyado en una de las grandes puertas de la entrada de la aldea y como siempre mirando las nubes.

-¿Eh?-pronuncio el shinobi percatándose de unos ojos verdes que lo miraban, entonces se reintegra y se va acercando hacía la muchacha, provocando que ella se acercara también.

-Hola Shikamaru…-lo saluda Temari no muy cómoda que digamos, pues detrás de ellos se encontraban sus hermanos y sus cuñadas charlando.

-Qué problemático es esto ¿no?-preguntó refiriéndose al famoso tema sobre ellos y sus hermanos, viendo como Temari hacía una mueca como diciendo “Ni me lo menciones.”

-¿Quieres ir a ver las nubes conmigo al campo de mis padres?

-Yo pues…-estaba indecisa no sabía si aceptar o no, aunque se moría de ganas-… Me encan…-no pudo terminar de hablar pues su cuñada Hikari la interrumpió.

-Oye Temari ven conmigo y Matsuri a tomar algo…-dijo entusiasmada la muchacha- Oh lo siento, hola Shikamaru-san-saludo al muchacho- ¿Qué dices? ¿Vienes?

-Ah… yo…-no quería aceptar ir con ella, pero Shikamaru le hizo una señal de que si fuera- Está bien… vamos-acepto rendida, sin muchas ganas se fue, dejando a su amor solo.

 

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Capitulo 15: ¿Te haz ido?… ¿ya no me sientes?… ¡¿ya no más?! (Parte dos)


Temari se iba alejando se su amor, miró por última ves hacía atrás para encontrarse con el joven Nara caminando hacía otra dirección. Rendida por todo lo ocurrido se deja llevar por sus amigas.

Al llegar a un restaurante, las muchachas se instalan en el establecimiento, cerca de una ventana. Hikari y Matsuri comienzan una charla entre ellas, mientras que una muy pensativa Temari observaba con una mirada perdida el paisaje de afuera. Por su mente pasaban muchas cosas, no se sentía capaz de soportar el no decirle a sus hermanos de su relación con Shikamaru… sin mencionar que estaría lejos de él… sentía que en cualquier momento estallaría de una forma brutal.

-¿Tú qué crees, Temari?-la voz de Hikari provocó que Temari saliera de ese letargo que la alejaba de la realidad.

-¿Eh? ¿Qué…?-preguntó confundida, sin la más mínima idea de lo que estaban hablando-… si, está bien-trató de actuar con normalidad.

-¿Temari, estás bien?-cuestionó preocupada Matsuri-...te noto distraída-agrego.

-Ah… discúlpenme chicas, es que no estoy de ánimos-contestó colocando su mano en su cabeza-… no he dormido mucho… será mejor que me valla-agregó poniéndose de pie.

-¿Quieres que te acompañemos?-preguntó Matsuri parándose también.

-No, no se preocupen… estoy bien, sólo necesito dormir un poco-dijo esbozando una pequeña sonrisa-… las veo luego-finalizó saliendo del lugar.

-¿Qué crees que le suceda, Hikari?-preguntó Matsuri observando a Temari salir.

-Creo que la idea de irse a Suna no la tiene muy contenta-concluyó Hikari cruzándose de brazos y cerrando los ojos.

******
Mientras con Hinata y Sakura. Ambas caminaban por las calles de la aldea, charlando sobre lo ocurrido con sus novios.

-Espero que Naruto-kun vuelva más fuerte… y que pueda ser Hokage-dijo ilusionada Hinata, realmente ella deseaba lo mejor para él.

-Si… de eso no tengas duda Hinata…-intervino Sakura-… Oye Hinata ¿crees que los muchachos encontrarán las cartas?-preguntó no muy convencida.

-De seguro que si…-la apoyaba la peliazul-… además la carta de Naruto-kun está junto al ramen que le prepare, no hay duda que la encontrará-dijo soltando una pequeña risita.

-Tienes razón… espero que les guste-dijo la pelirosa esbozando una pequeña sonrisa.

******
Ahora nos encontramos en las afueras de Konoha, allí se encontraban caminando rumbo a comenzar su entrenamiento los jóvenes Shinobis junto con el sannin legendario. Los tres iban callados, sin decir una sola palabra hasta que…

-Oigan… tengo hambre ¿podemos comer algo?-preguntó muy hambriento Naruto.

-No hace mucho que salimos y ya quieres comer… si serás dobe-dijo fastidiado Sasuke.

-Es que sabiendo que Hinata me preparó ramen no puedo resistirme-se defendió el joven Uzumaki abriendo su mochila encontrando pegado en la bolsa una carta-¿Qué es esto? ¿Una carta?-se cuestionaba confundido.

-Hmp pues ábrela-sugirió el joven Uchiha.

-Ah ya lo sé teme… no me lo tenías que decir-dijo abriendo la carta y comenzando a leerla.

-¿Y? ¿Qué dice?-preguntó el joven Uchiha ya cansado de ver a Naruto con su rostro en shock.

-¡Quiero volver! ¡Déjenme volver! ¡Quiero regresar!-gritaba desesperado el joven Uzumaki, conmovido por lo que Hinata le había escrito-¡No puedo moverme, algo me lo impide!-dijo sabiendo que corría lo más rápido que sus pierna le permitían, pero con la sensación de que no avanzaba.

-Hmp, eso quisieras… de aquí no te mueves-dijo el pelinegro sosteniendo a su compañero por la espalda del cuello de su camisa- no seas dobe, nadie va a regresar-agregó autoritario.

-¡Pero, pero…!-tartamudeaba el rubio haciendo berrinche de niño chico.

-¿Y qué les dirás a los demás cuando regreses?-intervino el sannin legendario-Todos están ansiosos por tu entrenamiento y lo peor que puedes hacer es regresar y desilusionarlos-dijo en tono serio, un tono que sorprendió a los dos Shinobis- Pudiste irte antes cuando tenías 12 años ¿y ahora que tienes 21 no puedes?

-…-Naruto no respondió nada, sabía que lo recién dicho por Jiraiya es la pura verdad.

-Sigamos avanzando…-finalizó Jiraiya retomando su paso, seguido por los demás-Vaya… ¿yo le dije todo eso?-se cuestionaba en sus adentros, sorprendido por su discurso.

******


Mientras con la muchacha de la arena, ella caminaba por las calles de Konoha sin el mínimo sentido de a dónde se dirigía, simplemente caminaba hasta que sus piernas le dijeran basta. Necesitaba estar sola por unos momentos, alejarse de todos los que la rodean, alejarse del mundo real. Necesitaba poner su mente en blanco para meditar bien las cosas… aunque no había mucho de qué pensar, solamente de aclarar las cosas con sus hermanos.
Ella sentía que todo lo ocurrido es ridículo… por el amor a Dios, son sus hermanos, no son un par de monstruos como para pensar que armarían un escándalo… ¿o si?


De tanto caminar, finalmente llegó hasta un hermoso prado, se sentía tan relajada en ese lugar, pues el viento del atardecer provocaba que sus dorados cabellos se movieran al compás del mismo (viento)
Ella se acostó en la hierba e inconscientemente dirigió su mirada al cielo, miraba como las nubes se movían lentamente, libres y sin preocupaciones. Al darse cuenta de lo que hacía suelta una pequeña risa, era lógico pensar que las costumbres de Shikamaru contagian.

Sin más que sentir, oír o ver… quedó profundamente dormida.

*****

Lentamente sus ojos se fueron abriendo, dándose cuenta de que no se encontraba en aquel prado, se levanta y se percata que está en nada más y nada menos que en su propia casa. -¿Qué demonios…?-se cuestiona en sus adentros -Esto de nuevo… no esta vez no… por lo menos no está lloviendo -se asomó por la ventana y miró el cielo oscuro, pues la noche ya había hecho su entrada triunfal-¡Shikamaru! ¡Deja de hacerte el misterioso ¿quieres?!-alzó la voz pensando que tal vez ese prado pertenecía a la familia de los Nara.

-Por fin despiertas problemática…-dijo divertido Shikamaru, entrando a la habitación de la muchacha.

-¿Tú me trajiste hasta aquí?-preguntó confundida y a la vez molesta.

-Qué problemático…-dijo fastidiado, desviando la mirada-… claro que fui yo, qué querías que hiciera, que te dejara en aquel pardo dormida y todavía con la noche asomándose-preguntó molesto.

-…-ella no contesto nada, solamente miró hacía otro lado, no sabía por qué, pero la verdad no tenía ganas de verlo.

-¿Qué pasa contigo? ¿Por qué estás molesta?-preguntó extrañado por la actitud de la muchacha.

-No lo sé, Shikamaru… solamente quiero estar sola-respondió secamente, colocando sus manos en su cabeza.

-¿Qué?-se cuestionó confundido- Temari, desde que llegaron tus hermanos no hemos podido vernos, mañana te iras a Suna y ahora que estoy aquí quieres que me valla-preguntó incrédulo.

-¿Crees que eso me pone contenta?-dijo mirándolo enojada-Pues fíjate que no…-agregó volviendo a mirar a otro lado-… ahora por favor Shikamaru… quiero estar sola-finalizó sin mirarlo.

-…-Shikamaru no comprendía dicha reacción de Temari, ¿él había hecho algo que la molestara? ¿O simplemente como todas las mujeres problemáticas tenían sus días de ser más problemáticas aún? Pues ninguna respuesta lógica venía a su mente, así que sin mas que decir… se marcho… como último pedido de su… ¿novia?

Mientras que Shikamaru salía de la casa, Temari no podía creer de la manera en que lo había tratado, él, que había actuado muy bien con ella, ahora lo trata con desprecio, pero… ¿por qué? ¿Por qué lo trató así?
-Eres una debilucha… ¿por qué demonios lo trataste así?-se preguntaba una y otra vez, con sus manos cubriendo su rostro, en ese momento se puso de pie y salió a buscarlo… pero ya era tarde… él ya se había ido…

*******

A la mañana siguiente, el sol comenzaba a iluminar lentamente la ladea de Konoha. En la casa de nuestra Kunoichi de la arena, ella ya se encontraba pronta para su partida hacía su aldea natal. Ella recordaba aquel pequeño pleito con Shikamaru, se maldecía una y otra vez por tratarlo de esa manera tan… tan… ¿infantil? Si, infantil es la palabra correcta, enojarse con él por quién sabe qué cosa era ridículo… ni ella misma sabía por qué ese enojo tan repentino.

Sin fuerzas para mirarlo a la cara, sale de su casa rumbo a la entrada de la aldea, con la certeza de que sus hermanos y sus cuñadas estarían esperándola allí.

Al llegar se da cuenta de que es la primera en aparecer-Genial…-dijo en sus adentros, fastidiada por el hecho de que nadie estaba allí-¿Para qué demonios me dijeron que me levantara temprano…?-agregó molesta.

Luego de un largo rato de espera, los demás por fin se dignaron a aparecer.

-¿Por qué tardaron tanto?-preguntó Temari molesta y de brazos cruzados.

-Pues pregúntale a la reina de belleza…-dijo sarcásticamente Kankuro señalando a su novia Hikari.

-No es mí culpa que en Konoha no haya la crema para mi cabello-se excusó Hikari de brazos cruzados.

-Dejen de pelear y vayámonos de una vez-dijo seriamente el kazekage Gaara.

Y acto seguido, todos se dirigieron rumbo a la aldea de Suna, estaban saliendo de Konoha, pero unas voces los hicieron voltear.

-¿Qué hacen…?


Bueno, hasta aquí les dejo, espero que halla sido de su agrado!
El capi es un poco largo XD lo recompence por la demora...
Bueno el siguiente capi rebelaré lo que dice la carta de Hinata y luego Sasuke encontrara la de Sakura... no se cuando lo publicaré... espero que sea pronto.

Me despido, ¡Chaito!

 

Re: "Los pesos del Mundo" Shikatema

Capitulo 16: "Perdóname"

-¿Qué hacen…?-preguntó incrédula la muchacha de la arena al observar a todas sus amigas acercándose a ella.

-¿Creíste que te dejaríamos ir tan fácil?-interrogó divertida Tenten, acercándose a su amiga.

-Ah… pues yo…-trató de excusarse pero la interrumpen.

-Queríamos desearte… un buen viaje…-dijo Hinata con una sonrisa.

-Claro, además no sabemos cuándo regresarás, no podías irte sin despedirte…-intervino Sakura a la conversación.

-Oigan… ¿dónde está el vago de…?-quiso preguntar Ino al no ver a su compañero de equipo, pero Temari le hace una seña de que no continuara por sus hermanos-…de… ¡Kiba! Si, el vago de Kiba, ¿no lo han visto?-mintió, fingiendo naturalidad.

-Ni lo menciones…-contestó Temari desviando la mirada.

Las muchachas al ver esa reacción de Temari, concluyeron que las cosas no estaban del todo bien.

-¡Temari, date prisa!-gritaba Kankuro desde lejos.

-Bueno chicas, les agradezco mucho que hayan venido-les agradeció la mayor de los Sabaku no-… a ver si algún día vienen ustedes a visitarme-agregó divertida.

-Eso tenlo por seguro… me muero de ganas de broncearme la piel con el hermoso sol de Suna-dijo Ino, entusiasmada con la idea.

-Claro, mira tu piel puerca…-dijo burlonamente Sakura, tomándole el brazo de Ino-… más blanca y desaparecerás-agregó soltando una carcajada, provocando risas en sus amigas.

-Eso quisieras frentona-dijo fingiendo estar enojada, arrebatándole el brazo y dándole la espalda.

-Bueno Temari… esperaremos con ansias tu regreso-intervino Tenten tratando de cambiar de tema.

-Gracias chicas… adiós-se despidió retomando su paso hacía sus hermanos.

-Uno… dos… tres…-contaron en voz baja las muchachas- ¡Mejor hasta luego!-gritaron en coro, haciendo que Temari se volteara a verlas y levantara su brazo en señal de saludo.

********
Mientras tanto en las calles de la aldea, se encontraba un muy desesperado Shikamaru corriendo lo más rápido que podía hacía la casa de Temari, pensando que tal vez, aún no se había ido.
Al llegar, entra sin dudar a la casa, pero una extraña sensación invade su cuerpo, pues siente la casa vacía, entonces sube rápidamente las escaleras hacía el cuarto de la muchacha, para encontrarse con… nada. Sin pensarlo abre los armarios y se da cuenta de que están vacíos, en la mesa de luz ya no se encontraban las fotografías que alguna vez estuvieron allí.
Pero en esa misma mesa de luz había una pequeño cajón e instintivamente lo abre, encontrándolo vacío también, pero con algo que le llamó la atención.

-¿Una carta?-se cuestionó extrañado, pero al tomarla puede ver que dice "Perdóname"

Sin demorar ni un segundo la abre rápidamente, comenzando a leerla.

Querido amor mío,
No tienes lo que deseabas al estar conmigo.
Y querido amor mío,
No tienes lo que deseabas para ser libre.
No puedo seguir fingiendo que ni siquiera te conozco.
Y en la dulce noche, tú eres mi posesión.
He soñado con un sitio para ti y para mí
Nadie sabe quienes están allí
Todo lo que deseo es dar mí vida sólo para ti
He estado soñando por mucho, pero ahora ya no puedo soñar más.

Nos estamos yendo aquí esta noche
No hay necesidad de decirle a nadie
Así por la luz de la mañana
Estaremos a medio camino
Hacía algún sitio
Donde nadie necesita una razón
Y donde el amor es más que sólo nuestros nombres.
Perdóname Shikamaru… perdóname por mi cobardía.
Pero no te preocupes, yo te metí en esto… y yo arreglaré las cosas… sólo dame tiempo.

Aún te ama:
Temari.

Shikamaru al terminar de leer, sale corriendo de la casa, esperando que tal vez ella estuviera en la entrada de la aldea. Pero en el camino se encuentra con Tenten, Ino, Hinata y Sakura que iban en sentido contrario.

-¿Shikamaru a dónde vas?-pregunta confundida Ino, haciendo que Shikamaru se detuviera.

-Busco a Temari… no me queda mucho tiempo-contestó rápidamente, iba a seguir su camino pero Ino lo detiene de nuevo.

-¿Qué sucede Ino?-preguntó algo molesto.

-Es que Temari… ya se fue-contestó la muchacha preocupada por la reacción de su amigo.

-¿Qué…?-se cuestionó petrificado, tratando de no creer lo que su amiga le acaba de decir-si se acaban de ir… no creo que estén lejos-dijo retomando su camino para alcanzar lo más rápido que podía a su amada… aunque las consecuencias no fueran buenas.

-¡Alcánzala Shikamaru! ¡Tú puedes!-gritó con entusiasmo la joven Yamanaka.

Cuando Shikamaru llegó a la entrada de la aldea, a lo lejos se podían divisar a personas alejándose lentamente. Entonces sin dudarlo Shikamaru usa su técnica de posesión de sombra, ya que gracias a un buen entrenamiento con su padre ahora su sombra llega más lejos que antes.

-¿Eh…? No… me puedo… mover-dijo Temari con dificultad, sintiendo su cuerpo paralizado, provocando que sus hermanos y amigas se detuvieran.

-Temari ¿qué te pasa?-preguntó confundida Matsuri, viendo a su amiga sin poder moverse.

-¿Acaso lo que veo es una sombra?-preguntó extrañado Kankuro, señalando una enorme sombra en los pies de su hermana.

-Ay no… Shikamaru-pensaba petrificada la muchacha de la arena.

-¡Temari espera!-se oía desde lejos una voz perteneciente al joven Nara.

-¿Nara…?-se cuestionó extrañado el joven Kazekage.

Cuando Shikamaru estuvo a una distancia cercana a los ninjas de la arena, deshace su jutsu y se acerca para hablar con… ¡¿Gaara?!

-Kazekage-sama hay algo muy serio que debo hablar con usted y con Kankuro-san-dijo seriamente el joven Nara, sin perder su tono serio.

-¿Sobre qué, Nara?-preguntó Gaara actuando seriamente y de brazos cruzados, por otro lado Kankuro ya tenía una idea de lo que se podía tratar.

-Yo amo a su hermana y estoy dispuesto a recibir una paliza si es necesario-contestó Shikamaru, manteniéndose firme a la situación y sin perder su tono serio.

Bueno hasta aquí les dejo!!
Espero que haya sido de su agrado^^