Microrrelato Los muertos vivientes

Los muertos avanzaban, arrastrando sus pies con lentitud, tambaleándose, con los hombros caídos. Su boca putrefacta abierta y sus ojos blanquecinos buscan a su presa entre los cimientos de la humanidad. El olor que desprenden es nauseabundo, tan fuerte que al inhalarlo sientes como se revuelve el estomago. Sus uñas largas y sucias buscan alguien a quién coger. La sangre coagulada de sus camisas o sus heridas los hacen mas brutales. Su gruñido, su arma más psicológica.

Su capacidad motriz solo los prepara para atacar, asediar, e incluso, matar. Esa es su naturaleza y nadie se la va a quitar. Solos, no son tan peligrosos como en conjunto. Una horda de seres hambrientos, podridos y endiablados son una batalla muy difícil de ganar. Tal vez Dios los haya creado para demostrar al hombre su lado oscuro. Es trabajo del hombre limpiar la Tierra y demostrar a Dios que los muertos resucitados merecen volver a su lugar: la tumba.

No sin antes derramar sangre, la furia del hombre contra el hambre del muerto puede tener sus consecuencias. El muerto no trabaja en colectivo, pero unidos entre ellos podrían erradicar a la humanidad de una manera asombrosa. Sin embargo, su "cerebro" no lo permite. Su capacidad mental es muy leve, casi nula.

En cambio, el hombre, el humano, actúa racionalmente. Los humanos no se han unido contra el hambre, contra la desigualdad, contra el imperialismo, contra lo injusto. Unidos funcionarían mejor y lo saben, pero el ser humano tiende a ser egoísta, y de esta situación se aprovechan, aunque no lo crean, los muertos vivientes. Los humanos se matan entre ellos, por comida, por refugio, por amor, por odio, por muchos sentimientos. La ley humana dicta "la supervivencia del mas fuerte".

Los débiles, acabarán uniéndose a las filas de los muertos, que sin ser conscientes del poder psicológico que causan, avanzan sin descanso, con un único objetivo: los vivos. En este nuevo mundo, bajar la guardia es morir. Por lo menos para los vivos. Sin embargo, para los muertos, ese tema no existe. Sus únicas capacidades mentales que los hacen mas "retrasados" que los humanos es un factor positivo para estos.

Es la estupidez humana la que provocaría la extinción, dejando un planeta desolado, muerto, y con una raza que en términos normales, esta muerta. Tal vez mientras yo escribo esto o tú lees esto los muertos vivientes ya estén caminando entre nosotros, asesinándonos a sangre fría, bebiéndose nuestra sangre, comiéndose nuestra carne. Bueno, no les dejaré que se coman la mía.