Lo Siento, No Puedo. Me Enamore [SasuSaku/NaruHina]

Re: Lo Siento, No Puedo. Me Enamore [SasuSaku/NaruHina]

Ohayo!!
Bueno gracias a todo por sus posts
Bien aqui traigo la conti!
Llena de misterio como siempre ;)
Estamos a tres capis del gran final
El proximo les dejara saber todo... hasta por que Sakura....
Ready...Set!...GO!!
Capítulo #6 “Sin recuerdos”
— ¿Por qué? ¿Por qué no fui capaz de hacerlo?— se preguntaba todavía, las sabanas se enredaban bajo sus pies y constantemente daba vueltas sobre aquella enorme cama.
Su cabello corto rosa se encontraba alborotado sobre la almohada y sus hermosísimos ojos jade, que lastimosamente cubría para no ser descubierta miraban hacia el techo. Abrió su boca y pronunció suavemente dos palabras: “Me gusta” al escucharse se sentó sobre la cama preocupada sacudiendo su cabeza como si aquella acción sacara a aquel azabache de sus pensamientos.

— ¡No!¡ No, no, no!— se decía repetidamente, no podía permitírselo, tenía que terminar esta misión y alejarse de ese mundo lo más pronto posible. Sus ojos bien abiertos, con unas grandes ojeras bajo ellos, ahora miraban el despertador sobre su cama. Aquel ruido incesante y molesto le indicaba que no había dormido en toda la noche, que sus ojos habían estado abiertos aquellas pocas horas que le quedaban para descansar.

Sakura estiro su mano y apagó aquel molesto aparato y en un suspiro cayó sobre la almohada. Sus ojos se posaban otra vez sobre el techo de la habitación y frunció el ceño. — ¡No dormí en toda la noche por estar pensando en él!— se dijo molesta y agregando un tono despectivo al nombrado. La joven de cabellos rosas se levanto de un salto de la cama y se dirigió hacia el baño de la habitación.

Ella entró en aquel amplio baño con un enorme espejo de lado a lado y vio su imagen en él con sorpresa. Su cabello estaba alborotado en nudos indesatables y las ojeras bajo sus ojos eran prominentes además de que había olvidado quitar su maquillaje antes de dormir. Sakura solo se miraba con tristeza en el espejo e inspeccionaba con sus manos cada defecto que encontraba mientras daba largos y grandes suspiros. “Si Sasuke me viera así…” pensaba la joven terminando la frase con todas las posibles situaciones que aquello podía desencadenar. Luego se miró decepcionada en el espejo, le parecía increíble que esos sentimientos se dirigieran a quien ella decía era el peor ser humano sobre la tierra.

—Sakura ¿Qué te pasa?— le preguntaba aquella sombra creada por ella, pero esta vez era su reflejo quien le hablaba, más sin embargo la palabra “inner” se mantenía en su frente. —Creo que no tengo que decir que debes matarlo— decía el reflejo de la joven mientras tomaba una pose retadora.

—Valla— se dijo sorprendida—Creo que la falta de sueño ya me hace alucinar— se dijo mientras se quitaba la ropa y entraba a la ducha.

Después de un rato salió de la ducha dejando tras ella una densa cortina de vapor, tomó una de las blancas toallas del baño y la puso alrededor de su cuerpo; salió sosteniendo aquella toalla con uno de sus y tomó la lo que se pondría ese día. Poco se demoro en vestirse y al comenzar a maquillarse se dirigió al baño y examinó por segunda vez aquellas feas ojeras bajo sus ojos. Sus dedos se detuvieron sobre ellas y se dedico a borrarlas con polvos para su rostro, todavía le parecían evidentes aquellas manchas negras bajo sus ojos así que tomo un delineador negro y puso un poco bajo sus ojos. Cuando termino sonrío deleitada, le parecía que su apariencia había mejorado bastante, luego prosiguió con su típica rutina de maquillaje.

Solo un rato después Sakura salió del baño y luego de su habitación. Aquel corredor que solo había visto en la oscuridad era bastante amplio y hermoso, las paredes estaban pintadas de un bello color crema y varios de los cuadros que decoraban aquel corredor eran del gusto de Sakura. Dio un gran bostezó y se dirigió hacía la sala, allí notó que esta también estaba bien decorada y el jardín que se veía frente a esta era hermoso y bien cuidado. En la sala había un gran sillón con un tono azul oscuro y frente a este había una mesa pequeña. En una de las esquinas se encontraba un enorme televisor y al lado de este un gran ventanal. Detrás de aquella ventana se encontraba un hermoso jardín, muy bien cuidado, tenía unas cuantas rosas en las paredes que marcaban los limites y en cada esquina del jardín subían unas enredaderas de las cuales brotaban hermosas flores blancas; también había una banca muy sencilla en medio de este.

Sakura lo apreció por un rato y dio otro gran bostezo. Dio media vuelta y se dirigió a la cocina no se tomo el tiempo para detallarla. Ya después de entrar en la amplia cocina tomo un pequeño delantal blanco que le llegaban hasta la mitad de la entrepierna; ese día Sakura llevaba una falda negra poco más larga que el delantal, también llevaba una camisa amarilla con una enorme cara feliz en medio de esta y unos guantes sin dedos de cuadros. Todo aquello combinaba a la perfección con la banda negra que ponía sobre su falso cabello castaño.

— ¿Dónde está?— se preguntaba la joven sobre un banquillo que estaba a punto de dejarla caer al piso, Sakura constantemente se movía sobre aquel banquillo haciendo que perdiera el balance, pero sin embargo no caía.

— ¿Qué busca?— preguntó Sasuke desde la sala, la cocina era de estilo americana así que Sakura estaba siendo vista por el joven; la simple idea de que Sasuke la estuviera la puso nerviosa y comenzó a moverse mucho más rápido en aquel banquillo.

—No…no es nada— decía nerviosa la joven de cabellos castaños moviendo se mucho más rápido en aquel banquillo hasta que este finalmente cedió y Sakura cayó al piso.

— ¿Se encuentra…Sakura?— preguntó alterado el joven de cabellos azabaches.

—No, Uchiha-san. Soy Kamiya Kotomi— dijo la chica claramente nerviosa por estar a punto de ser descubierta.

El azabache la miro molesto, en sus ojos había un deje de tristeza pero mucho más enojo. Se acerco a la joven deprisa y se agacho hasta estar a la altura de los ojos de Sakura. Sakura comenzó a ponerse mucho más nerviosa casi intuitivamente su cuerpo comenzó a correrse hacia atrás hasta llegar a estar arrinconada contra la pared. Tal vez eso era a lo que llamaban estar entre la espada y la pared, y su espada tenía los ojos y lengua más filosos que mil cuchillos. Sasuke comenzó a estirar su brazo intentando alcanzar el cabello de la chica y Sakura fue lentamente aceptando que había sido descubierta.

—No sabes cuánto extrañé tu hermoso cabello rosa— dijo el chico tomando aquel mechón de pelo que había delatado su identidad. En sus ojos comenzaba a verse entre tristeza y felicidad.

La joven de cabellos rosa estaba ruborizada, alterada pero más que todo asustada y confundida. Sakura halo su cabello con su cabeza para que aquel mechón de pelo se escapara de las manos del Uchiha, haciendo eso tomó la peluca y la quito de su cabeza dejando ver su corto cabello rosa. Así mismo sin decir una sola palabra ella se puso en pie y camino en sentido contrario, luego estando a una distancia prudente del joven esbozó un “¿Uchiha-san usted me conoce?”

Sasuke volteo lentamente y se sentó en el frío piso de aquella cocina, encogió un poco las piernas y apoyo su espalda sobre la pared de la cocina. Puso sus brazos apoyados sobre sus rodillas y luego llevo una de sus manos a su cien y sonrío con decepción.

— ¿Puede decirme usted de dónde me conoce?— preguntó la mujer de cabellos rosados claramente preocupada.

—Sakura, podrías dejar de llamarme así ¿Por qué no utilizas el Sasuke-kun con el que siempre solías llamarme?— preguntaba confundido el joven.
—Sas…Sasuke-kun— dijo la joven con un gran sonrojo en sus cachetes. Aquella reacción fue una gran alegría para Sasuke y con ella logró ponerse en pie y sonreír con su ego recuperado. El Uchiha que sonreía como si Sakura fuera una atracción se acercaba a ella peligrosamente, a lo que Sakura retrocedía con sus mejillas totalmente rojas.

—Por favor Sasuke-san, no haga eso. Usted es mi jefe eso no está permitido—dijo Sakura intentando alejar a aquel joven de ella. —Haré lo que quiera pero manténgase alejado de mí, por favor— decía la joven—Por favor que se aleje de mí. Si no me controlo voy a terminar haciendo algo que no quiero— se decía Sakura mientras intentaba alejar al chico de su cuerpo. Su corazón latía a mil por hora y constantemente miraba los labios del joven y se sonrojaba aún más. — ¡¿Por que me tenía que pasar esto?! ¿¡Por que Hinata se quedó con el idiota?!—

—Esta bien— dijo el joven alejándose con una sonrisa que claramente indicaba que su ego estaba por los cielos. El chico se alejo poco a poco de Sakura y ella solo se dejo caer al piso tranquilizada. —Pero quítate los lentes de contacto—




“Juro que te voy a matar” decía claramente en un cuadernillo que Hinata sostenía tras su primo. Naruto acababa de leer aquel mensaje y en su rostro apareció claramente preocupación. Hinata sostenía aquel cuadernillo mientras miraba con sed de sangre al joven rubio. Neji que se encontraba sentado en la mesa tomando una taza de café se preguntaba que estaba viendo aquel joven de ojosa azules como para que en su rostro hubiera tanto terror. El Hyuga volteo y se encontró con la joven de cabellos azabaches cerrando fuertemente el cuadernillo que tenía en sus manos.

—Ya la maté, Uzumaki-san— dijo la Hyuga, mientras ponía en sus labios una bella sonrisa.

—Hinata…— dijo suavemente pero lo suficientemente fuerte como para que ambos escucharan.
Neji volteo inmediatamente, ni siquiera le dedico otra mirada a la joven de cabellos negros. Mientras el volteaba Hinata miraba con ira al rubio frente a ella mientras llevaba su dedo índice de derecha a izquierda frente a su cuello.

—Hi…Hinata— dijo con nerviosismo el rubio —Neji, sé que no es el momento pero ¿Podrías hablarme de
ella y lo que paso hace tres años?— le preguntó Naruto al castaño que mantenía la mirada baja.

—A veces no dejo de pensar que todavía está viva— dijo el castaño —Hace tres años nada podía estar mejor, y paso eso, su desaparición—

¡Está loco! ¿Qué piensa hacer? ¿Cree que me voy a quedar aquí, escuchándolo con calma? Yo misma escuche que estaba a favor de eso… ¿Por qué?¿Por qué esas lágrimas ahora? ¿Acaso te gusta ver mis lágrimas? No pongas esa cara, si en verdad te importara no lo hubieras traído. Si en verdad te importara…

No voy a permitir que tú las veas, así las mangas de mi camisa se empapen, No voy a dejar que escuches un solo sollozo… no hasta que me consueles…

—Mi…Mikuru— lo escuche para luego salir al jardín.
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Bn proximo capi Flash back
Capítulo 7 "La razon de todo"
Espero que les haya gustado
Sayo!!

 

Re: Lo Siento, No Puedo. Me Enamore [SasuSaku/NaruHina]

Ohayoo!!
Bien vengo con la conti ;)

Es la primera vez que la entrego tanpronto pero mi emocionaba tanto la idea de escribir las razones de casí todo que Kyyya! Solo seguí escribiendo ^_^
Bien.... Sin más
Ready...Set!...GO!!
Capítulo 7 “La razón de todo”
No podía hacer nada más que contener las lágrimas, la votación iba tres a favor y cinco en contra. Mi tío Hizashi era el siguiente en dar su voto, sus ojos se encontraban estáticos en la pared. Apreté mis puños con fuerza, mi pecho subía y baja acelerado y mi padre a mi lado se mantenía mirando al frente lo imité.

Un nudo en mi garganta comenzaba a formarse y segundo a segundo se apretaba más y más, parpadeé una vez más cuando mi tío comenzó a abrir su boca.

—A favor—

El dolor se apodero de mi pecho, ahora no respiraba mi pecho no me lo permitía. No pude contener las lágrimas que se aproximaban pero me mantenía firme mirando al frente. Dolió, dolió demasiado, fue como si la daga más gruesa y más filosa atravesara mi corazón; y no conforme con eso con cada respiro esa daga penetraba con más fuerza a mi corazón.
No me preocupaba los siguientes eran Neji y mi padre, pero Neji no estaba. Su cojín se encontraba vacío, una luz de esperanza había tocado me dolido corazón.

—El voto de mi hijo es a favor— dijo Hizashi sin siquiera mirarme. Aquel que había sido mi tío mostro el documento con la firma de mi primo.

Más lágrimas llegaron a mis ojos, muchas, cada una significaba cada puñal que atravesaba mi corazón y mis pulmones, ese había sido el golpe fatal. Mi corazón no lo resistió, se rompió en pedazos y con ellos mi fuerza para contener las lágrimas. Sin embargo seguí mirando al frente, mi padre lo hacía así que yo también.

—Hiashi, tienes la decisión final—

Yo no miré a mi padre no necesitaba hacerlo sabía que se negaría que no lo permitiría que el teniendo la última palabra acabaría con esa propuesta y sancionaría a quien la propuso. Aunque en quienes confiaba me habían traicionada todavía tenía la esperanza de salir de aquello; después de todo yo era la hija de Hiashi. El votaría en contra.

—A favor— dijo tan fríamente como mi tío. Lo dijo sin dolor, sin mirarme, y mi hermana… mi hermana ni se inmuto.

No lo resistí más me quebré, dejé de mirar la maldita pared que mi padre miraba, con ira apreté los puños sobre la falda del prestigioso Instituto Seiyu. Las lágrimas salieron de mis ojos sin compasión, si el golpe que me había dado Neji era el golpe fatal este era el de muerte instantánea. A si fue, mi espíritu, mis ganas de vivir murieron.

— ¡Maldito!— grité — ¡Maldito sea el clan Hyuga y todos los que están en él!— me puse en pie, quería que supieran que yo era mejor que todos ellos, por lo menos tenía los sentimientos de los que todo ellos carecían— ¡Maldito seas padre! ¡Maldito sea Neji Hyuga que ni siquiera fue capaz de dar su voto frente a mí!—caminé casi sin fuerzas las lágrimas eran fuertes y continuas, caían tan rápido como la lluvia— Y Hermanita… cuídate, tal vez contigo hagan lo mismo; y no estaré yo que era la única que iba a defenderte…—

Después se abalanzaron sobre mí dos grandes hombres, hombres que se encontraban detrás de mi abuelo. Intenté luchar, pero me encontraba débil y me sostenían con fuerza. Sus manos eran frías, tocaban mi piel y dejaban un camino de hielo sobre ella.
Aquellos hombres me tomaron por los brazos y contra mi voluntad me sacaron de aquella sala, los ojos de mi padre se mantenían en aquella maldita pared, los ojos de Hanabi ni siquiera mostraban lastima Hizashi ni siquiera me dejo ver sus ojos. Neji…Neji ni siquiera se encontraba allí…

No tenía nada más que hacer que llorar, pero todavía tenía mi celular en mi falda y podía llegar a él. El numero de marcado rápido el número uno, era ella la única persona en la que podía confiar: Sakura Haruno. Marqué el numero de mi mejor amiga y ella contestó “¿Hola? ¿Hinata?”

— ¡Sakura-chan ayúdame! Mira en tu ventana—

Además de ser mi amiga era mi vecina… no sé si salió enseguida o si se demoro, porque fue golpeada por uno de esos hombre fue un golpe que me dejo inconsciente. No deje de llorar por un largo rato porque al despertar mis mejillas todavía se encontraban húmedas. Pero tenía frío, alguien había tomado mi ropa y ahora me encontraba atada en una silla. Y ese hombre, uno de esos dos se acerco a mí estaba desabrochando el cinturón de su pantalón.

Ni siquiera pude esbozar un: no. Aquel hombre ya estaba cerca, sus manos tomaban mis brazos, sus dedos tenía la magia de hacer que mis músculos se entumecieran. Y por esos músculos tiesos y sin movimiento dejaba un gélido camino que no podía ver. Gritaba por auxilio pero nadie llegaba. De pronto las lágrimas volvieron a caer, ya no sentía el dolor punzante en mi corazón esas lágrimas eran consecuencia del desespero y la agonía. Así me di cuenta nadie me salvaría, nadie movería un solo dedo por mí, nadie lo haría…

Solo hasta ese momento me di cuenta de que mi vida es insignificante, no solo para quienes no me conocen; si no también para aquellos que yo llegue a amar y a confiar. No había más esperanzas así que me detuve, dejé de luchar y deje que esas frías manos tocaran mi cuerpo después de todo ya no importaba si moría.

Deje que me tocara con sus frías manos, total no saldría de esa, no me llenaría de esperanza como antes; no debía confiar en nadie. Entonces la vi, vi a un demonio de color rosa que luchaba sagazmente contra aquellos hombres. Ella hacía que cayeran al piso los golpeaba, todo sin dudarlo. Cuando ambos estaban en el piso aquel demonio rosa me sonrío y me pregunto “¿Estás bien Hinata?”

Soltó las sogas que me sostenían y me dio su chaqueta, era pequeña y apenas llegaba a cubrir un poco más debajo de mi cadera. Estábamos preparadas para irnos pero en ese instante uno de aquellos hombres que creíamos inconscientes golpeo a Sakura con una gran varilla en la cabeza, fue un golpe tan fuerte que hasta mis huesos se sacudieron con fuerza. ¡Ya no podía soportarlo! Toda esa tristeza esa soledad se convirtió en enojo y con este logré juntar el valor para pararme y pelear con ese hombre. Tomé la única posición de artes marciales que sabía, una que había pasado de generación tras generación y de repente mis ojos podían ver tras su carne, y notar como varios ríos de energía circulaban por su cuerpo; como si mi propio cuerpo supiera que eran comencé a golpear aquellos lugares y poco después el hombre cayó inconsciente.

Sakura que se había desmallado por el fuerte golpe estaba tendida sobre el frío suelo. No llevaba puestos sus guantes, por lo que no estaba peleando en serio, ya no se me hacia extraño que uno de ellos hubiera podido estar consciente tras ser golpeado por Sakura. Tomé las sogas con las que había estado atada y até a aquel par de monstruos y fui junto a Sakura.

—Mmm- ¿Hinata?— preguntó la Haruno llevando su mano a su cabeza, al llegar a donde había sido golpeada su rostro se mostro llenó de dolor y me miro extrañada. — ¿Qué hago aquí?

Yo me encontraba apoyada sobre una pared, estaba exhausta la miré con lágrimas en mis ojos, era la primera vez en el día en el que era realmente feliz — ¡Sakura-chan!…— no pude completar la frase porque los sollozos se apoderaron de mi—…Sakura-cha…chan pen…pensé que habías muerto—dije balbuceando.

— ¿Hinata qué ha pasado? Auuchh no recuerdo nada desde esta mañana—

—Así es mejor— sonreí, si así era lo mejor que podía hacer para proteger a mi amiga es no decirle lo que había pasado ese día, no al menos hasta cuando la llamé. Tenía el derecho de saber porque se encontraba en ese lugar.

Luego me puse en pie y me dirigí hacía la única mesa que había en ese oscuro lugar, sobre ella había una pequeña lámpara. La encendí y con sorpresa vi mi ropa sobre aquella mesa, solo de pensar que aquellas personas habían visto mi cuerpo quería llorar de nuevo, pero no era lo mejor para Sakura. Tomé la ropa y me la puse. Después vi un revolver sobre aquella mesa y lo tomé, me dije que solo por si acaso… pero sabía para que lo quería, quería saciar la necesidad de venganza, pero me controlé. Me controlé al ver como lloraba, como sus lágrimas corrían silenciosas mientras ella me miraba confundida…

—Sakura-chan…— dije caminando hacia ella viendo como lloraba— ¿Qué…que pasa?

—Hi…Hinata, no…no lo sé. De repente las lágrimas comenzaron a salir, y… mi pecho duele— la miré con lastima,
dolorosamente sabía por qué lloraba, sabía porque o mejor por quien eran esas lágrimas. No se lo dije solo deje que llorara sobre mi pecho hasta que se calmara.

—Sakura-chan… ya podemos irnos— le sonreí de nuevo.

La llevé afuera de la bodega que ya tenía forma al abrir la puerta y dejar entrar la tenue luz de la luna, Sakura salió y yo me quedé adentro. Pensé: Si mi vida, la de la heredera del poderoso clan Hyuga, no valía nada ¿Por qué habría de tener un precio la vida de estos seré que ni siquiera pueden llamarse humanos? Miré a ambos hombres atados con las sogas, al mismo tiempo ellos me miraron y con lentitud alce mi brazo a la altura de mi rostro y les apunte.

—A ver si puedes, ¡Niña estúpida!— sabía cómo cargar un arma, no era de gran dificultad. La cargué y con delicadeza puse mi dedo índice sobre el gatillo.—¡Vales mucho menos de lo que pague por ti!— escuche con tristeza ¿Así que así era?

Lágrimas comenzaron a caer de nuevo… ¡me habían vendido! Yo, que solo creía que era la expulsión del clan Hyuga. Yo, que
todavía creía que esas personas no eran demonios del todo…

Mi vida no vale nada, ni siquiera para mi primo, ni para mi hermana y mucho menos mi padre; pero si mi vida no valía nada la de esos hombre mucho menos; hombres que son menos que un ser humano que toman a la fuerza las cosas más preciadas, si así era entonces iba a limpiar el mundo de aquella vidas que no debían estar en este mundo y finalmente yo acabaría con mi propia vida.

—Hinata qué…— fue lo último que escuche de Sakura esa noche, había disparado, dos veces. Cada disparo había golpeado sus cabezas… Así fue esa noche maté a dos persona,, tan solo las primeras. Porque de allí en adelanté maté a muchos más: Más personas del mundo bajo que no merecían la vida, más personas que acababan con la vida de otros, más empresarios que ni siquiera merecían dejar huella en este mundo.

— ¡Pero a ti no puedo matarte!— dijo llorando con lágrimas en sus ojos —Quería acabar con la vida de Sasuke, quien había hecho sufrir tanto a Sakura. Que la había lastimado tanto, que aunque no recordara a esa maldita persona aún lloraba por él— decía con enojo en su voz y sosteniendo firmemente el arma que apuntaba hacía la frente del ru—Y pensé que sería facil hacerlo pero...

—Saito-san, no sé lo que sucede pero podemos llegar a una solución razonable— dijo Neji intentando calmar a la joven.

—Cállate Nii-san— grito en manera de orden pero siguió llorando — Por favor cállate. No quiero escuchar tu voz, no quiero ver tu rostro no quiero saber que sigues vivo…— dijo llorando mientras le sonreía dulcemente.

—Hi…Hinata— ella asintió con su cabeza y llevo una de sus manos a su cabello negro y retiro la peluca, sus cabellos azulados y largos cayeron con gracia mientras las lágrimas caían al mismo ritmo.

—Porque si te veo no creo poder controlarme y te mataría. Y es lo que menos quiero, aunque lo merezcas, pues tu también me vendiste— dijo.

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Bien A qui termina la razpn de todo
Proximo capi:
Capítulo #8 "No Puedo. Me Enamore" ;)
Por qué suena tan familiar!!??

 

Re: Lo Siento, No Puedo. Me Enamore [SasuSaku/NaruHina]

Aqui esta! recien salido como pan!
La conti :)
Bien es el pen ultimo capi!!

[FONT=&quot]Capítulo #8 “No Puedo, Me Enamore”
[/FONT] [FONT=&quot]—Sabes Naruto, hago esto por dinero— dijo Hinata después de sacar una segunda arma debajo de su falda y apuntar al joven castaño a su lado.
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Naruto frunció el ceño, se le veía enojado.
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—Mato a personas por dinero. Después de todo el dinero es lo más importante no, ¿Más importante que una vida?—
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— ¡Hinata! Detente ahora mismo. ¿En qué te has convertido?— preguntó Neji entre molesto y preocupado por la vida de Naruto.
Intentó acercarse a ella pero ella cargo el arma avisando que no estaba jugando, al terminar de escuchar las palabras de Neji, aquella joven mujer de cabellos azules solo lo miro fulminante.
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—Nii-san, ¿En qué me convertí? Deberías decir en qué te convertí. Vi la carta que firmaste apoyando a esas malditas cabezas del clan Hyuga… Y en qué me convertí preguntas—
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Las lágrimas que Hinata dejaba escurrir por sus mejillas no se habían detenido ni un solo segundo; ni en un pequeño lapso de tiempo sus mejillas pudieron dejar de sentir aquellas lágrimas, gotas cálidas que hacían carreras sobre sus blancas mejillas buscando cual llegaba más rápido al piso.
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—Hinata…— el joven bajo su cabeza, sin poder percibir algún sentimiento en él. No se sabía si el temblor en sus manos era ira, tristeza o decepción el solo miraba al piso y se mantenía en silencio. Haciendo esto Hinata dejo de mirarlo y se concentro el rubio de ojos azules frente a ella; él la miraba con tristeza, por alguna razón los ojos azules de ese joven miraba esas lágrimas caer con tristeza; entonces por primera vez la mirada determinada de la joven de ojos perlados dudo.
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— ¡Uzumaki Naruto: No me mires! ¡No me hables! ¡N-no… no te preocupes por mi!— gritó con su rostro color carmesí fuertemente. Ahora miraba al piso con su rostro totalmente rojo y avergonzado —Si me miras, si me hablas, si te preocupas por mí el dolor crece. No sé porque, pero el hecho de que te tenga que matar duele; cada vez que intento halar del gatillo mis dedos se contiene se congelan y se ponen tan helados como el hielo. Cada vez que por mi cabeza pasa el pensamiento de tu muerte mi estomago se retuerce y debilita mi voluntad; cada vez que me encuentro con tus ojos quiero tirar estas armas y rendirme.
[/FONT] [FONT=&quot]
>> Pero mi cabeza quiere darte la razón. Quiero poder decir que el dinero es lo más importante, que ese controla a la gente que puede hacer a una persona como yo matar a alguien, matarte a ti —sus lágrimas se acrecentaron— Ese día me dijiste que no tenías razones para creer lo contrario, y en este momento te la voy a dar— decía mientras descargaba poco a poco su arma y dejaba caer al suelo las balas con las que estaba cargada su arma— No te daré la razón. Lo siento, no puedo; me enamoré— dijo dibujando en el rostro de el rubio la sorpresa.
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—Creo que lo más importante es el amor— se dijo descargando el arma que apuntaba hacía Neji.
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—Hinata-sama— dijo Neji levantando la cabeza y lanzándose a abrazarla, ella solo se dejo abrazar y se dejo caer en sus brazos.

—Hinata-sama quiero que sepa que Hizashi me envió a América para evitar mi participación en esa votación, para evitar que yo fuera en contra de la voluntad de las cabezas Hyuga y desde ese momento deje de hablar con mi padre y con mi tío— dijo esto todavía abrazando a su prima fuertemente. —Y no sabe lo feliz que me encuentro la saber que usted está entre mis brazos— dijo dejando salir una pequeña lágrima que limpio al instante.
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— ¡Neji-niisan!—gritó con alegría. Y en seguida correspondió el abrazo que su primo continuaba.
[/FONT] [FONT=&quot]El rubio miraba la escena sonriente, parecía que de alguna manera eso era lo que había planeado desde el principio. Todo había salido como planeo, sin tener en cuenta que sus vidas corrieron peligro y que la joven que tanto le preocupaba y lo cambiaba se le había confesado.

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— ¿Está mejor así?— preguntó mirando al joven de cabellos rosa molesta.
[/FONT] [FONT=&quot]El joven la miro de nuevo y en él apareció un pequeño sonrojo que intento ocultar mirando hacia otro lugar.
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—Si me perdona me iré ya mismo de esta casa— dijo Sakura dirigiéndose hacia el corredor de donde se desprendían todas aquellas habitaciones que no conocía.
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Sakura estaba a punto de llegar a su habitación cuando sintió un jalón en su brazo, era Sasuke acercándola a ella. Sakura quedo contra su cuerpo y luego él en un movimiento que Sakura no logro describir ella quedo entre él y la pared. Que hiciera eso le incomodaba demasiado, ¿Qué rayos creía que ella era, un juguete? Pensaba enojada. Sasuke miraba a la joven frente a él con cariño en sus ojos; él tocaba su cabello y pasaba sus manos por él como si la mujer frente a fuese una muñeca de porcelana. Sakura evitaba a toda costa mirar sus ojos pues era eso lo que más le gustaba de él, haciendo eso se sonrojaría y aquel joven rebosante de ego haría algo.
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—Sakura…mírame— dijo en una orden a lo que Sakura solo subió la mirada con duda —Te juro que no seré tan tonto como para hacer lo mismo de antes—. Ella se veía tan inocente tan indefensa que el Uchiha no logro controlarse más y se acerco a la boca de la joven con ansias de tocar sus labios. Sakura trató de evitarlo pero al estar contra la pared no pudo, y los labios de Sasuke tocaron los de ella. No correspondió pero si cerró los ojos atesorando aquel momento, su corazón comenzó a latir con fuerza para luego sentir mucha ira y empujar al joven con todas sus fuerzas tratando de alejarlo de ella tratando de alejarlo de ella.
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— ¿¡Por qué haces eso?!— Preguntó entre gritos —Uchiha Sasuke no sé quién eres— dijo molesta pero luego su semblante cambió al ver al joven Uchiha al otro lado de la sala e inconsciente. Golpeo su cabeza con su mano ¡¿Cuántas veces no le había dicho Hinata que debía controlar su fuerza?! —Sas-Sasuke ¿Estás bien?— dijo la chica preocupada.
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Lo miro un poco mejor, y entonces recordó quien era él. Llevo sus manos a su boca que estaba bien abierta y se alejo de él hasta llegar al sofá, pues detenía su escape…
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— ¡Hinata! Sasuke respondió mi mensaje de texto— dijo Sakura mostrando su celular a la Hyuga.
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—Ano~ Sakura-chan ¿Quién es Sasuke?— preguntó Hinata con inocencia.
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—Es el chico guapo que trabajaba en un de las tiendas del centro comercial al que fuimos la vez pasada ¿Lo recuerdas? Le di mi numero— dijo feliz la Haruno, ambas jóvenes estaban sentadas una al lado de la otra, sus uniformes eran unos vestidos largos azules con una línea blanco gruesa en la mitad. Era un vestido que dejaba ver los bellos cuerpos de ambas chicas. Hinata leía un libro mientras Sakura continuaba enviando textos, a aquel joven.
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— ¡Hinata! Quiere que nos veamos esta tarde—dijo sacando de nuevo a su amiga de su lectura.
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— ¿En dónde?— preguntó la Hyuga sin despegar sus ojos del libro que sostenía en sus manos.
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—Donde trabaja. ¡Voy a ir!—
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Hinata se mantuvo callada y luego las clases dieron inició, al ser la prestigiosa escuela Seiyu de señoritas no había razones para que la clase no fluyera con normalidad y sin problemas. Al terminar aquella clase Hinata se despidió de su amiga que se dirigió directo al centro comercial.

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—Hi-Hinata— dijo la joven a través de su celular — ¿En dónde estás?— preguntó sollozando.
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—Estoy en casa, ¿Está todo bien Sakura-chan?—
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— ¿Puedo ir a tu casa?—pregunto la joven de cabellos rosa todavía llorando.
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—Sí, claro—
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—Bien… ya estoy aquí—
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Hinata dejo el libro que leía y se dirigió a las cortinas color crema de su habitación allí vio a la joven Haruno mojándose bajo la lluvia. La Hyuga bajo las escaleras con gran velocidad y tomó una de las sombrillas que se encontraban al lado de la puerta y salió de su casa corriendo para ayudar a su amiga. Ella, la chica de cabellos rosados, sollozaba bajo la lluvia hasta que su amiga puso el paraguas sobre ella, en ese momento vio las gruesas lágrimas que caían por el rostro de la joven de ojos jade.
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— ¿Qué paso?—
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—Hi…nata le di mi virginidad, y-y después de eso me dijo que me olvidara de él— dijo sollozando, Hinata a pesar de estar molesta le abrazó haciendo la sombrilla que sostenía callera al asfalto.
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—Sakura-chan todo va a estar bien, solo debes olvidarte de él—
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—Hinata, creo que lo que sentí al verlo fue amor a primera vista…
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A la joven de cabellos largos se le escaparon unas cuantas lágrimas y en sus ojos se vio enojo. De alguna manera estaba segura de que ella Hinata Hyuga haría que ese joven pagara por lo que le hizo a su amiga… solo debía esperar hasta mañana.
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—Hinata-sama, Hiashi-sama dice que la reunión va a empezar— dijo un sirviente desde el interior de la casa.
[/FONT] [FONT=&quot]
—Mañana hablaremos de esto ¿sí? Papa dice que hoy tomaran una gran decisión sobre el heredero del clan— Hinata tomó la sombrilla del suelo y se la dio a la Haruno —Ten, mañana me la devuelves— dijo para irse.
[/FONT] [FONT=&quot]
—Es…es él— dijo comenzando a llorar —¿Por qué Hinata no me dijo nada?...
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Its all
Sayo!!
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Re: Lo Siento, No Puedo. Me Enamore [SasuSaku/NaruHina]

Capitulo FInal #9
Epilogo ;)
Siento no decir más

[FONT=&quot]Capítulo #9 “Epilogo”[/FONT]
“… ¿Qué que paso después? Después tuve tiempo de calmarme, me dirigí hacía la habitación que él me había dado y lavé mi rostro; estaba sucio, de tanto que había llorado. Me miraba en el espejo tratando de descubrir que parte de mí le había perdonado, pero no encontré más que mi reflejo simulando una sonrisa. Mis ojos estaban rojos, los miraba continuamente, no podía creer que todas esas lágrimas pudieran causar tal problema.

Luego como si un rayo hubiese caído más rápido que la propia luz llegó a mi cabeza todo lo que dije; salté hacia atrás alejándome del espejo frente a mí. Aunque no lo necesitaba pude ver como mis mejillas se coloreaban de un color carmesí y como mis ojos y mi rostro cambiaron de la tristeza a la felicidad. Me sentía bien, no solo por el hecho de hacerle saber que estaba equivocado, si no porque al decir aquellas palabras frente a él la presión de mi pecho despareció.

Pero todavía me encontraba jugando con mis dedos en el baño, pareciera que la Hinata de hace cuatro años hubiera vuelto a nacer. Mis mejillas se tornaron a un más rojas y el nerviosismo se hizo más evidente ¿Qué le diría? Al salir de ese refugió de una sola puerta ¿Cómo lo miraría? Comencé a jugar aun más con mis dedos y luego sentí la enorme necesidad de arreglarme, de lucir hermosa.

Aunque… era algo imposible. Mis ojos rojos, mi rostro pálido y mi cabello desordenado parecían no tener remedio; entonces decidí verme mejor trate de arreglar mi cabello y termine finalmente llevándolo todo tras mi oreja derecha, todo lo hacía por él. El sonrojo que se asentaba sobre mis mejillas se extendió por todo mi rostro al saber que Neji quería que saliese.

—Sal…salgo en un momento— dije tartamudeando, como antes.

Apoyé mi frente sobre la puerta y lleve mi mano temblorosa a la perilla de la puerta, no quería abrir. Estaba segura de que me encontraría con sus ojos cielo y con su brillante sonrisa, no sabría como mirarlo. Comencé a girar la perilla de la puerta y aunque suene contradictorio quería verlo… Quería verlo antes de tener que alejarme de ese mundo, tal vez, por toda mi vida.
Giré por completo la perilla de aquella puerta que me separaba de mi primo y él y salí. Fingía sonreír, me entristecía saber que en ese momento ya no podría estar con él.

— ¿Hinata-sama se encuentra bien?— vaya, no nos habíamos visto en años y Neji ya había empezado con las formalidades, pero aun así todavía sabía cuando algo no estaba bien…
—Si, todo está bien—

Neji me miro con duda, no creyó ni una palabra. Pero aun así se mantuvo en silencio y espero a que yo saliera de aquel baño; detrás de Neji allí estaba él… Después de verlo no pude soportar las ganas de llorar otra vez, no por mi pasado, no porque él representara las ideas de los Hyuga sino porque se me hacía muy difícil imaginar que estaría lejos de él. Entonces agache mi cabeza y mi cuerpo pidiéndole perdón.

—Uzumaki Naruto-san por favor disculpe todas las molestias que le he causado— dije con nuevas lágrimas asomándose, pero sería fuerte y no lloraría más—Si me disculpa iré por mis cosas— dije marchándome evitando al máximo verlo, si lo veía creo que no podría resistir.

Ya había cerrado la puerta de mi cuarto, sin seguro, Neji se hubiera preocupado. Comencé a empacar todo en la pequeña
maleta que había traído; alguien entro en la habitación y supuse que era Neji.

—Nii-san no volveré, me iré de este mundo lo más rápido posible. Iré a buscar a Sakura y nos iremos a donde nadie nos encuentre; no te preocupes dejare este trabajo…

No pude seguir hablando quien yo creía que era Neji estaba abrazándome por la espalda, pero aquel era un abrazo que me atrapaba y que hacía que la idea de marcharme de ese lugar saliera de mi cabeza. Sabía quién era, era él, a quien trataba de evitar desde esa absurda confesión. Mi corazón se aceleró y la temperatura de mi cuerpo subió y sentí la horrible necesidad de desmallarme, pero no ocurrió aquel milagro que me zafara de esa situación.

—… ¿Y si te pido con todo mi corazón que te quedes conmigo?— susurró cerca de mi cuello haciendo que mi espalda se encorvara intentando separarme de esa confusa pero deseable sensación.
— ¿Por qué quien amo es una persona tan egoísta?— pregunte llorando, otra vez.
—Porque él amor nos hace egoístas ¿No es así? Sacrificaste a tu compañera y el éxito de tu misión por egoísmo— dijo sin soltarme, todavía juntando su cuerpo con el mío.

No pude decir nada más, si había sido egoísta había sacrificado la misión a Sakura al no matar a Naruto. Si no lo mataba la misión fallaría y por lo tanto ese 0% de fracaso dejaría de ser cero, y dejaría a Sakura intentando matar a Sasuke arriesgando su vida por una misión ya perdida.

—Uzumaki-san no quiero encontrarme de frente con la hora en la que tenga que salir de esta casa y no verlo más, cuando lo pienso el corazón me duele. Pero me duele más verlo a usted pidiéndome que me quede conociendo la situación. Dirá que es huir pero para mí es como ir al mundo al que pertenezco, mi lugar no es aquí.

>> Así que por favor para que este dolor absurdo se detenga, para que mi pecho deje de sangrar por dentro suélteme y déjeme ir, entre más tiempo estoy con usted menos quiero irme; Menos quiero separarme de usted…
Sus mano dejaron de abrazarme, sus manos se movieron hasta mi cadera y desde allí me dio la vuelta. En sus ojos había un enorme cariño y la mirada juguetona que solía ver cuando estaba a punto de besar a esas otras chicas se había desvanecido.

Mi pecho comenzó a subir y a bajar violentamente, no sé si por mi respiración o el rápido y fuerte latir de mi corazón; él
comenzó a acercarse yo solo miraba sus ojos, esperando tocar los labios morenos de aquel rubio por el que mi corazón latía. Así ocurrió los labios de él se encontraban sobre los míos y deposito un suave beso que todavía hasta hoy siento.

— Sabe que esto no me hará cambiar de opinión— dije mirándolo.
—Lo sé, pero solo estoy dejando en claro que ahora serás mía— me dijo a lo que yo quedé sorprendida y sonreí abalanzándome a sus brazos y dando un tierno beso a aquel rubio.

Naruto-kun sigue viniendo todos los días hace una semana me pidió matrimonio, acepté. Sin embargo no hemos definido alguna fecha pero estoy segura de que será pronto; Neji ahora vive conmigo, en la casa en la que vivíamos juntas. Pero dime Sakura ¿Cómo va todo por allá, en America?¿Como está Sasuke?
Espero poder verte antes de la boda,

[FONT=&quot]Hinata Hyuga[/FONT]​

Dedicado a Kurosawa-san. Pues era una respuesta a su desafio ;)
Espero que algun día lo termine :D
Bn. También esta dediecado a Alehinastar (ale-chan) que me a alentado a continuarlo
Sayooo