de Inuyasha - La verdad reflejada en el espejo (SesshXKag)

Re: La verdad reflejada en el espejo (SesshXKag)

Hola, muchas gracias a todas las que postearon J, lamento la tardanza pero aquí les dejo el siguiente capítulo:

---Supongo que guardé silencio durante más tiempo del que Inuyasha estaba dispuesto a esperar, pude reaccionar cuando él me sacudió levemente por los hombros, entonces el remolino de emociones se vino abajo y me aplastó por completo…
-¡Kagome!, maldición, sabía que no era buena idea contarte esto.
-Descuida Inuyasha, estoy bien-Le mentí-
-Si claro, cuando dejes de temblar como frenética tal vez te crea-Y estaba en lo cierto, incluso mi mandíbula temblaba con tanta fuerza que parecía que estuviese llorando-
-Lo siento…es que, la verdad yo…
-¿No te esperabas esto, verdad?
-En lo absoluto, pero hay algunas cosas que no coinciden. ¿Recuerdas el incidente de la infancia de Ayame con Naraku?
-Si…-Dijo mientras fruncía los labios en una mueca de disgusto-¿Qué tiene que ver eso?
-Bueno, después de…”lo que ya sabes” Naraku fue reprendido por su padre, o al menos eso fue lo que Sesshomaru me había dicho.
-Ese era el padre de Miroku-Dijo tranquilamente- Como ya te dije, el padre verdadero de Naraku se dio a la fuga y cuando Yuri Akabane murió el único que podía encargarse de él era su tío. Sesshomaru te lo ocultó ya que no deseaba que supieras la verdad.
-¿Yuri Akabane era hermana del padre de Miroku?
-No…solo era coincidencia de apellidos, lo que ayudó mucho a la hora de que tomara la custodia de Naraku; sin embargo Naraku no cambiaba su hosco carácter y terminaron por enviarlo a un internado en Londres.
-¿Por qué crees que haya regresado después de tanto tiempo?-Pregunté temerosa de saber la respuesta-
-Amargarnos la existencia, o tal vez desea volarme el otro ojo.
-Sabes más de lo que me dices-Refunfuñé-
-Y tu sabes más de lo que deberías, esa es toda la historia que conozco Kagome, solo voy a pedirte un favor.
-No te preocupes, no voy a decirle a Sesshomaru, y tampoco pienso acercarme a Naraku.
-Ahora yo Pregunto algo, ¿Por qué deseabas saber esta historia tan extraña? Creo que hubiese sido mejor ahorrarte el susto.
-Me preocupa la expresión que tiene Sesshomaru últimamente, está algo distante, pareciera que…
-Quiere que estés a salvo, si algo te pasara sería fatal para mi hermano-Dijo sonriendo cálidamente-
-Entonces es por protección, ¿Por esa misma razón terminaste con Kikyo? ¿Para alejarla de todo a pesar de que te mueres por ella?
-Había olvidado lo suspicaz que puedes ser-Su sonrisa se esfumó dejando una mueca de disgusto-
-No pensaste que me iba a quedar tranquila sin preguntarte eso-Dije con sarcasmo-
-Supongo que no…
---De pronto guardé silencio aterrada, si Inuyasha había tomado esa decisión, entonces Sesshomaru probablemente haría lo mismo, terminaría conmigo para que Naraku no centrara su atención en sus seres queridos.
Pero la sola idea hizo que se me detuviera el corazón de golpe, la cabeza me daba vueltas y las lágrimas amenazaban con desbordarse sin control.
-Kagome…
-Estoy bien-Dije en voz baja para que no se notara tanto el sollozo-
-Por eso te dije que no era buena idea que supieras la verdad. ¿Te encuentras bien?
-Define bien…-El sonrió levemente pero aún yo seguía muy nerviosa para imitarle-
---Luego de eso, me llevó hasta mi casa, las horas se convirtieron en años, no me imaginaba en qué momento Sesshomaru me diría las palabras que acabarían con mi mundo perfecto, intentaba imaginármelo una y otra vez pero era imposible, no existía preparación mental que me ayudara en ese asunto.
Esa noche…lloré hasta altas horas de la madrugada, no tuve pesadillas, pues, mi vida se había convertido en una…
Supongo que tuve la suficiente fuerza para levantarme y marchar al colegio, ya que me encontraba sentada en mi asiento, creo que Koga me saludó y dijo algo sobre una tarea de no sé qué materia, se marchó al darse cuenta de que lo estaba ignorando. No me di cuenta de cuando se había retirado la profesora Kagura para darle paso al profesor Bankotsu.
-Te ocurre algo…
-Eso suena más a una afirmación que a una pregunta.
-Pues tal vez lo estoy afirmando.
-Y tal vez yo no deseo responderte.
-¿Qué diablos te ocurre Kagome?
-Nada…solo estoy cansada.
-Se nota, te ves terrible.
-¡Sesshomaru!-Lo miré furiosa-Pues déjame decirte que tú eres el culpable de que yo me vea tan mal.
-No recuerdo que seas mi hija, así que no me eches la culpa.
-Muy gracioso-Dije mientras volteaba la mirada hacia el profesor que me había llamado-
-Srta. Kagome ¿Sería tan amable de leer el párrafo que sigue?
-Ahh, si…claro…
-Pagina 78, cuarto párrafo-Susurró Sesshomaru en voz baja-
---Luego de leer atropelladamente todo el párrafo me senté avergonzada, el profesor Bankotsu me observó con perspicacia pero no dijo nada, después de todo hice lo que me había pedido.
-Gracias…-Dije mientras guardaba el libro en mi bolso-
-Tenemos que hablar después de clases-Dijo Sesshomaru seriamente-
-Está bien…-No volteé a verlo ya que no quería llorar en medio del salón-
---Me convertí en una cascara vacía durante el resto del día, deseaba terminar con esta tortura a pesar de que sabía muy bien lo que me esperaba, en la ultima hora de clase descubrí que aquella tarea de la que hablaba Koga era sobre los orígenes de la música clásica, por fortuna Rin me prestó su trabajo amablemente.
El timbre de salida marcó mi sentencia definitiva, ya solo quedaban minutos para que mi corazón se partiera en mil pedazos. Sango y los demás me esperaban en la entrada, les dije que se marcharan sin mí pero insistieron en esperarme.
-Muy bien, es hora de hablar…-Dijo Sesshomaru mirándome fijamente-
-Ya basta, dilo de una vez.-Respondí conteniendo la rabia-
-¿De qué hablas?-Preguntó mientras examinaba mi reacción algo confuso-
-Ya sé lo que vas a decirme, así que termina rápido con esto, por favor…-Dije en un susurro ahogado-
-¿Quién te lo dijo?-Preguntó visiblemente molesto-
-Lo deduje yo misma, ¡vas a terminar conmigo! Pues bien creo que ya hemos platicado bastante.
---Me lancé a correr pero él me detuvo bruscamente, sus ojos dorados enfurecidos se encontraron con los míos bañados en lágrimas, me llevó a empujones hacia el interior del instituto y me condujo hacia un salón que estaba vacío.
-Aquí no seremos interrumpidos-Dijo cerrando la puerta y apagando la luz-¿Hasta cuándo vas a seguir llorando?
-¡Hasta se me sequen los ojos!-Respondí entre llanto y gritos-
-Vaya, eres una completa tonta.
-¡Si, es verdad! ¡Soy una tonta por creer que serías lo suficientemente valiente como para seguir a mi lado a pesar de las adversidades! ¡Eres un cobarde!
-Kagome, escúchame…
-¡No quiero!, ¡Suéltame!-Intenté deshacerme de su repentino abrazo pero me tomó rápidamente de la barbilla y me besó con mucha fuerza, sus labios eran tan suaves y exquisitos, intenté resistirme pero fue inútil, si ese iba a ser mi último beso entonces debía disfrutarlo-
-Al fin te quedaste tranquila, encontré una forma efectiva de hacerte callar-Dijo riendo entre dientes-
-Tonto…
-Te resististe al principio, ¿No querías que te besara?-Preguntó con la mirada fija en mi-
-No es eso…es que así es más doloroso… ¿Piensas terminar conmigo y me besas de esa manera? Que cruel eres…
-¡Maldita sea! ¿Se puede saber por qué diablos tendría que terminar contigo?-Dijo exasperado mientras apretaba mis hombros con fuerza-
-¿No?...-Pregunté incrédula-
-Claro que no-Respondió furioso mientras se apartaba de mi lado-¿Cómo pudiste pensar semejante cosa? ¿Por eso era que actuabas tan extraña el día de hoy?
-¡No me hablaste en dos días! Pensé que ibas a terminar conmigo para mantenerme a salvo de Naraku tal y como había hecho Inuyasha con Kikyo.
-¿Inuyasha te dijo algo?-Su furia se hizo más evidente ante esa posibilidad-
-Absolutamente nada, es fácil deducirlo, ya que han actuado muy extraño desde que Naraku llegó y me parece que es mucha casualidad que con la llegada de Naraku haya terminado el noviazgo entre ellos.
-Entiendo…bueno pero de todas formas no puedes asumir que Inuyasha y yo pensamos igual.-Dijo calmándose un poco, suspiré aliviada ya que por un momento estuve a punto de delatar a Inuyasha-
-¿Entonces no vas a terminar conmigo?
-No podría aunque quisiera pequeña idiota-Dijo suavizando el rostro mientras me acariciaba la mejilla-
-Vaya, si que te he hecho molestar.
-Eso sonó más a una afirmación-Dijo con sarcasmo-
-¡Pues tal vez lo estoy afirmando! Lo siento, fui una tonta pero no sabía que pensar, a veces siento que me ocultas tantas cosas, apenas y te reconozco.
-No importa cuánto cambie Kagome, hay una cosa que siempre seguirá igual.
-¿Y cuál…
---No pude terminar la pregunta ya que sus labios se apretaban con fuerza contra los míos, me sorprendí un poco ya que generalmente no era tan brusco, me tomó de la cintura y me acercó hacia él lo más que pudo, lentamente su boca abría paso hacia la mía, delineándola, acariciándola y saboreándola de la manera más increíble que pueda existir.
Me separé un poco nerviosa de que alguien pudiese vernos, el se acercó y sonrió al verme jadear como si hubiese corrido el maratón.
-¿Qué ocurre? Tan rápido te asustaste?
-Pueden escucharnos-Dije ruborizada al escuchar su tono seductor-
-No hay nadie-Me susurró al oído- Además, yo te mantendré callada-Sonrió con malicia-
-Vas a acabar con la poca cordura que me queda.
-Eso no es nada comparado con lo que tú me has hecho-Dijo mientras besaba la comisura de mis labios-
---Abrí lentamente la boca para besarlo, hasta ahora no nos habíamos aventurado a darnos el beso francés, supongo que él no deseaba ponerme nerviosa, pero yo me encontraba muy extasiada y no me importaba la vergüenza ni el temor a lo desconocido.
A Sesshomaru no le tomó mucho tiempo percatarse del movimiento de mi lengua para descubrir lo que en verdad deseaba y empezó a hacer lo mismo, el remolino de sensaciones fue indescriptible, esto era un deseo más allá de lo platónico, nuestros cuerpos se llamaban el uno al otro como imanes, pero mi alocado corazón iba a estallar en cualquier momento…
-Es increíble que sigas pierdas el equilibrio cada vez que nos besamos.
-Tal vez lo haces con esa intención, siempre me dejas atontada en el mejor momento.
-No juegues con tu suerte, salgamos de aquí antes de que se me ocurra algo peligroso.
-Está bien…-Me ruboricé por completo mientras él se divertía ante mi reacción-
-Hablando ya en serio, lo que realmente quería decirte era que había planeado una salida para que Ayame conozca a Sango y a los demás.
-¿En serio? ¡Me parece fabuloso!..¿Y Cuando saldríamos?
-El miércoles salimos temprano de clases, creo que podríamos ir a su casa y luego a patinar un rato.
-¿Patinar?
-Si, en la pista de hielo, no pareces muy emocionada con la idea.
-Bueno…
-No me digas, no sabes patinar.
-Bingo.
-Descuida, la única experta es Ayame, ya que es de los pocos sitios donde puede ir cuando quiera sin preocuparse por el sol o el calor
-Está bien, al menos te veré haciendo el ridículo por primera vez en tu vida.
-Yo la acompañaba a todas sus prácticas.
-Rayos, mejor suerte para la próxima.-Sonreí resignada- ¿Acaso eres perfecto?
-Únicamente mi vida, desde que te conozco.
-Eso me toca decirlo a mí.
-Tonta…en realidad esto lo hago para que nos relajemos un poco, no me gusta asustarte, así que por un día nos olvidaremos de todo y nos divertiremos.
-Gracias…
---Cuando salimos, Sango y los demás aún nos esperaban, quería morirme de la vergüenza pero Sesshomaru dio una excusa tan razonable que incluso yo me la creí. Mi día no terminó tan negro como pensaba, por fin podría dormir sin pesadillas y sin preocuparme por Naraku Akabane, al menos esta noche…
Bueno, hasta aquí les dejo el capítulo, en el próximo capítulo Kagome y los demás tendrán una interesante tarde en la piscina, lo siento por Kotono, Naraku no apareció pero en el próximo si saldrá (muajajajajaja), en fin dejen sus posts ;) bye!!

 

Re: La verdad reflejada en el espejo (SesshXKag)

Hola gracias por sus posts ^^ aquí está el siguiente capitulo. Por cierto, esta vez notarán que la mayor parte del tiempo Kagome está narrando.


---La noche en la pista de patinaje fue muy entretenida, aunque yo me la pase la mayor parte del tiempo rodando por el piso, la buena noticia es que Sesshomaru era un profesor paciente y se veía extremadamente guapo patinando.

La mala noticia es que no esperaba que Ayame y Koga se llevaran tan bien, sentí lastima por mi amiga Rin, si bien ella decidió aceptar que sus sentimientos no serían correspondidos se que debió ser duro.

Me siento terriblemente dividida entre mi solidaridad con Rin y la alegría de saber que Ayame estaba tan feliz, ella nunca había tenido amigos, pero con Koga fue diferente, podría decirse que fue amor a primera vista, ¿Y quién no quedaría cautivado por la belleza de Ayame? Tampoco puedo culpar a Ayame por fijarse en Koga ya que también es muy atractivo. A pesar de todo el dolor que pudo haber sentido, Rin y Ayame se llevaron de maravilla, simplemente no puedes odiar a la familia Taisho.

Parece que el tiempo hubiese pasado en un abrir y cerrar de ojos, ya se cumplen 4 meses desde que me mudé a Tokio y empecé a estudiar en el instituto Shikon. He hecho grandes amigos, he pasado por muchos problemas pero afortunadamente todo ha salido bien, sin importar lo que pase en el futuro, ¡estoy lista para todo!…

Bueno, para todo menos regresar a Kobe tan pronto, al grupo directivo del Instituto Shikon le pareció buena idea pasar dos semanas en un hotel muy costoso como vacaciones de primer trimestre.

-No te noto muy contenta Kagome.

-¿Tienes idea de cuanto debe costar el hotel?, es imposible que yo pueda ir.

-No seas ridícula, ¿Por qué habría de cobrarte específicamente a ti si los gastos del viaje correrán por parte del instituto?

-No te entiendo…

-¿Qué no sabías?-Interrumpió Rin por sorpresa- El hotel al que vamos a ir es propiedad de los Taisho.

-No debería sorprenderme…-Dije intentando no gritar de la sorpresa-

-¿Cuánto tiempo más vamos a estar de pie escuchando las tontas instrucciones?, ya estoy aburrido.

-Deja de quejarte Koga, si Ayame pudiese ir estoy segura de que estarías más animado-Replicó Sango divertida-

---Rin me tomó de la mano con fuerza, tal vez para reunir valor de donde no tenía, la miré por unos instantes con preocupación pero luego me soltó y se presionó las mejillas suavemente mientras sonreía. Sin duda alguna esta chica era muy valiente.

Como era de esperarse todos se encontraban muy emocionados con la idea de viajar a Kobe, sabiendo que no gastaría mucho mas que en mi traje de baño decidí unirme a la algarabía , esto de las playas no era nada nuevo para mí pero sin duda alguna sería más interesante yendo con mis nuevos amigos. Me esforcé más que de costumbre para sacar buenas calificaciones, aunque sigo creyendo que si hubiese reprobado en todo mi tía Kaede estaría igual de maravillada con mi viaje.

Y es porque no deseaba regresar aún…bueno, es difícil saber que ella no se encontrará esperándome como siempre…mi querida madre.

Finalmente el día esperado llegó, el clima no era exactamente el más calido, para variar amaneció lloviendo en Tokio, a pesar de todo eso nadie se desanimó, Sesshomaru Sango y yo nos dirigimos a la cafetería porque yo me estaba congelando, el frío me tenía paralizada entre los brazos de Sesshomaru, cosa que no me molestaba mucho.

Fue luego de recobrar el calor corporal que noté a la enérgica Rin recorriendo el enorme pasillo en un segundo.

-Es terrible, ¡no puedo creerlo!-Exclamó furiosa al llegar hacia nosotros-

-¿Por qué lo dices Rin?-Preguntó Sango tranquilamente mientras bebía un sorbo de café-

-Bueno, es que tendremos puestos asignados, probablemente no estaremos juntos en el vuelo.

-Oh…bueno pero no es tan grave.

-¡Definitivamente lo es!-Interrumpí furtivamente a Sango quien me observó algo confusa-

---La razón por la cual yo viajaba tranquilamente en un avión sin lanzarme al vacío era porque mi tía Kaede me acompañaba y me daba ánimos durante el vuelo, tenía la esperanza de sentarme junto a Sesshomaru o cualquiera de las muchachas, pero si me tocaba un extraño no iba a resistir mucho tiempo.

Sesshomaru intentó hacer algunos cambios pero el sistema de viaje era muy estricto y decidieron dejar todo como estaba para mantener el orden. Genial, ahora yo sería conocida como la desquiciada mental que no paraba de gritar en la excursión de clases.

-Pasará rápido, ten paciencia-Fue lo ultimo que me dijo Sesshomaru mientras me besaba la mejilla y esperaba que mencionaran su nombre para subirse al avión.

Sesshomaru se sentó junto a Koga, debo admitir que eso fue muy gracioso, 2 meses antes se hubiesen matado mutuamente antes de acceder a esa orden; Sango junto a Kikyo, Inuyasha junto a Rin, esto parece planeado para causar tensiones.

Pero por supuesto, mi enorme bocota siempre tenía la razón, debí darme cuenta por la cara de susto que todos pusieron, y no fue hasta que me llamaron 3 veces que mis piernas y el resto de mi cuerpo reaccionó.

-Kagome Higurashi, por favor diríjase al puesto 30-A junto a Naraku Akabane.

De todos los nombres existentes en el instituto Shikon, ¿Por qué tuvo que mencionar precisamente el mío?, repentinamente lanzarme al vacío no era tan mala idea, Sesshomaru me observaba con profunda preocupación e impotencia desde unos 10 puestos más adelante. El puesto de Sango se encontraba un poco más cerca pero no había mucho que ella pudiera hacer en caso de un problema.

En realidad creo que yo misma estaba exagerando las cosas, Naraku ni siquiera me había volteado a ver desde que nos sentamos, eso me tranquilizaba por una parte, pero quedaba mi pequeña fobia a los aviones y mi necesidad de apretarle la mano a mi compañero de vuelo; cosa que no sería posible con mi compañero actual.

El despegue fue aterrador, apreté los dientes hasta que se me cansó la mandíbula, cuando pude abrir los ojos nuevamente ya nos encontrábamos volando, el mareo se hizo menos fuerte; Naraku se había quedado dormido, me encontré a mi misma observándolo con intriga ya que jamás había tenido la oportunidad de verlo cerca.

Su piel era como la de un bebé, blanca y lisa, sus cabellos negros tenían un brillo perfecto, el rostro lo tenía completamente relajado, en ese momento lucía como cualquier chico normal y, viéndolo tan cerca hasta era guapo.

-Naraku…-Susurré en un tono casi inaudible mientras me acurrucaba en mi asiento-

-Dime…-La respuesta de Naraku me sorprendió tanto que salté bruscamente-

-¿Tienes miedo?

-No…

-Eres pésima mintiendo…-Dijo seriamente sin verme a la cara-¿Qué tanto me veías?

-Yo…lo siento, creí que estabas durmiendo-Respondí atónita al darme cuenta de que siempre estuvo consciente de su entorno-

-No me agradan mucho los aviones, y verte a ti convulsionar no me ayudaba en nada-

---Por primera vez Naraku parecía un ser humano, le tiene miedo a los aviones, no me salían las palabras por la sorpresa, me sentí inevitablemente culpable pero no debía olvidar la historia que estaba oculta tras ese rostro tan atractivo.

El era enemigo de los Taisho, incluso Sesshomaru planeaba matarlo, esa era otra situación que me tenía inquieta, a pesar de todo lo que me han dicho no me sentiría muy bien si matan a alguien cercano a mi.

Una mueca de sorpresa se dibujó en mi rostro, ¿Naraku cercano a mí?, esas fueron mis palabras, de pronto el mar de nervios se desbordó de nuevo, afortunadamente Naraku no se molestaba en verme a la cara, tal vez lo hacía para no asustarme más de la cuenta.
¿Por qué he pensado eso? apenas y lo conozco, pero cada vez que miro su rostro siento que nunca nadie lo ha visto como algo más que un monstruo.

No me di cuenta de que el personal de refrigerios se había detenido en nuestros asientos, nos repartieron un pequeño desayuno y yo pedí una coca cola. Naraku pidió exactamente lo mismo por lo que me reí disimuladamente; tal vez el haya cambiado, no veo ningún rastro de alguien peligroso en este chico, si alguien lo ayudara…

Pero entonces, yo sería la única persona con la suficiente locura para querer acercarse a él, Sesshomaru jamás aceptaría esta idea, el y su hermano Inuyasha estaban convencidos de que Naraku tramaba algo, además todavía está el incidente de Kanna, hay tantas cosas que quisiera preguntarle y solo nos separan unos escasos centímetros, pero aún así yo…

-Descuida, no pienso hacerte nada. Mi problema es únicamente con los Taisho.

-Pero tu, ¿Acaso tu…?

-¿Lo sabes todo verdad?-Dijo manteniendo su voz tranquila y sin emoción- Responde-Insistió al notar mi silencio-

-Si…lo se todo. Pero Naraku…

-Simplemente no te metas en esto, y no saldrás lastimada.

---Sus palabras sonaban muy serias, realmente Naraku no se detendría solo porque yo se lo pidiera, entonces vi la otra cara detrás de la mascara y me encontré al Naraku lleno de rencor y tristeza por no haber podido tener la felicidad que gozaron sus rivales.

El avión aterrizó y automáticamente vino Sesshomaru a buscarme mientras le dirigía una severa mirada a Naraku, luego de ver sus ojos color ámbar mis preocupaciones se desvanecieron, ahora estaba en Kobe, y todos se sentían muy ansiosos por disfrutar la playa. El hotel era aún más impresionante de lo que pensaba, ya lo había visto en otras ocasiones por fuera pero ni en mis más alocados sueños hubiese imaginado que me iba a quedar hospedada aquí.

Sango y los demás no dejaban de preguntarme como me sentía viajando con Naraku, Sesshomaru e Inuyasha escuchaban atentamente pero yo les decía que nada había pasado, y en parte así era.

Para mi total decepción los primeros dos días hicimos turismo en la ciudad y salimos de compras, aunque no puedo culpar a mis amigos por desear conocer un lugar que yo estaba cansada de ver. Al principio se nos obligaba a permanecer juntos el grupo entero, pero luego dieron una hora para que cada quien fuera a donde quisiera.

-Kobe es un lugar muy interesante-Dijo Sango mientras cargaba un montón de bolsas con ropa y accesorios-

-¡Tengo ganas de comer algo delicioso!

-Pero si comimos hace 30 minutos Rin…

-No me refiero a comida, quiero comer algo dulce…

-Conozco una heladería que queda no muy lejos de aquí, si quieren podemos…

-¿Y que esperamos? ¡Andando!

-Mírenla nada mas, ni siquiera sabe a donde va y sale corriendo.

-Déjala en paz Koga, Rin necesitaba distraerse un rato.

-¿Distraerse de que Sango?

-De sus problemas, no es fácil para ella ¿verdad Kagome?

-Sango…tienes razón amiga.-Tal y como pensaba Sango tenía un sexto sentido-

-Quien entiende a las mujeres-Exclamaron Inuyasha y Koga al unísono-

-Sesshomaru, ¿Crees que habrá algún problema en que invite a Kikyo?

-Se lo que tramas, pero descuida, esos dos se reconciliarán en cualquier momento, así que no te metas donde no te llaman-Dijo apretando mis mejillas hacia los lados-¿Prometido?

-¡Auch! Está bien, te lo prometo.

-Bien, por cierto Kagome, hay algo que he querido decirte y voy a aprovechar que todos se fueron detrás de Rin.

-¿Qué sucede?

-Bueno, es que he querido hacer algo desde hace tiempo y como estamos en Kobe me parece que este es el mejor momento y no tendremos otra oportunidad tan grande.

-Sesshomaru, yo…

-No, déjame terminar por favor.

---Sesshomaru estaba algo nervioso, definitivamente sabía lo que me iba a decir, y aunque yo también he pensado en esa posibilidad debo admitir que me tomó por sorpresa, pero todo estará bien si sucede con él, después de todo lo quiero cada día mas.

-Espera Sesshomaru, antes de que sigas, quiero que sepas que estoy de acuerdo.

-¿En serio? Kagome, eso me hace sentir mas tranquilo. Creí que estarías un poco más nerviosa.

-Bueno si me siento algo insegura pero confío en ti y si voy a hacer esto por primera vez quiero que sea contigo.

-Por supuesto que si, entonces está decidido, mañana por la mañana me presentaré formalmente ante tu padre.

-Si…un momento… ¿Qué has dicho??-exclamé sorprendida-

-Que mañana me presentaré como tu novio ante tu padre-Dijo tranquilamente- se que suena algo anticuado pero me gustan las formalidades.

-Ohh, ya veo, entonces era eso de lo que hablabas-Dije aún más avergonzada-

-Desde luego, esta es la oportunidad perfecta, después de todo estamos en Kobe ¿Qué otra cosa pensabas que iba a decirte?-Preguntó confuso por mi reacción-

-Nada, es solo que me tomaste por sorpresa, entonces mañana…

-No te preocupes, todo saldrá bien…-Dijo mientras me tomaba la mano tiernamente- Vayamos a comer esos helados…

---El roce de su mano me erizaba la piel, me sentí muy estupida por malinterpretar las cosas, estuve a punto de meter la pata pero por fortuna todo se calmó. Nunca había tenido esta sensación, de querer estar más cerca de lo que ya estaba con Sessomaru, me pregunto si a el le pasará lo mismo en estos momentos…

Bueno hasta aquí les dejo el capitulo ;) espero que les guste, dejen sus posts si? Nos vemos ^^

 

Re: La verdad reflejada en el espejo (SesshXKag)

Hola!! Muchas gracias por sus posts ^^ aquí esta el siguiente capitulo.


---Estuve todo el día inventando una excusa lo suficientemente buena para no visitar a mi padre, pero no se me ocurría nada coherente, además, aunque no fuésemos hoy aún quedaban 10 días que Sesshomaru seguramente no pasaría por alto.

Y es que mi padre ya sabía de mi primer novio, pero no se lo ha tomado muy bien, evitamos el tema a toda costa, sin embargo no puedo irme y fingir que se me olvidó visitar a mi padre; el debía conocer a Sesshomaru y aprobar por completo mi relación con él.

-Kagome, estás muy callada.

-Ah lo siento, debe ser que aún tengo sueño-Dije mientras simulaba un bostezo-

-¿Es por la visita a tu padre verdad?, no reaccionaste como yo esperaba cuando te sugerí que fuéramos a verlo.

-No es eso Sesshomaru, es solo que…

-Yo no le agrado…-Dijo sonriendo con tranquilidad-

-No se que le ocurre, es muy injusto de su parte comportarse así.

-Tranquila, está molesto porque su pequeña hija ha sido raptada por un desconocido-Dijo mientras me rodeaba con sus brazos-

-No es así, tu no entiendes.-Pero Sesshomaru no escuchó mis refunfuños y me mantuvo abrazada un rato más-

-Tomamos un taxi desde el hotel y tardamos aproximadamente 30 minutos en llegar; la casa se veía totalmente distinta a como yo la recordaba. Habían construido un segundo piso y cambiaron el color blanco de la fachada por un amarillo pastel. Me costó reconocer que esa era la misma casa que visité cuando tenía 12 años, pero para salir de dudas en el portón principal estaba un letrero con el nombre de la “Familia Higurashi”.

-¿Qué te hace tanta gracia?-Preguntó Sesshomaru al notar mi expresión escéptica-

-No es nada…ven, toquemos el timbre, ya no puedes arrepentirte.

---Mi padre nos recibió en la entrada, su rostro era impenetrable, apenas y nos saludo con rapidez mientras examinaba a Sesshomaru de arriba a abajo, sonreí ligeramente al ver como se dibujaba una pequeña mueca de sorpresa, no era la clase de chico que esperaba ver, en realidad no creyó que mi novio fuese ni la mitad de lo maravilloso que yo le había dicho.

Junto a mi padre estaba su nueva esposa, una mujer delgada y rubia, ojos verdes y sonrisa amable, y los dos hijos jóvenes fruto de este segundo matrimonio.

-Mucho gusto Señor Higurashi, mi nombre es Sesshomaru Taisho.-Dijo mientras estrechaba cordialmente la mano de mi padre-

-Keita Higurashi, el placer es mío-Dijo con voz desinteresada- Ella es mi esposa Megumi y mis dos hijos Sota y Takeshi.

-Mucho gusto en conocerte Sesshomaru-Dijo Megumi con una amplia sonrisa- Es bueno saber que Kagome tiene un novio tan apuesto.

-Y aparentemente educado-Añadió mi padre con suspicacia-

-Te trata mejor de lo que mereces-Refuté molesta- Estás tratándolo como si fuera un criminal.

-Descuida Kagome, no arruinemos este maravilloso momento.-Interrumpió Sesshomaru con voz inquebrantable-

-¿Ah si? ¿Y qué tiene de maravilloso este momento?-Insistió mi padre en tono irónico-

-Ya basta padre, creo que no fue una buena idea venir después de todo-

-No digas tonterías, eres mi hija, puedes venir cuando quieras, nadie puede prohibírtelo-Y ese nadie iba directamente hacia Sesshomaru-

-Fue el quien insistió en presentarse formalmente, no veo por qué debas ser tan hostil.

-Mejor continuemos la plática en la sala, pasen adelante.

---Megumi se retiró junto con Takeshi y Sota, el ambiente ya estaba lo suficientemente pesado y a pesar de eso Sesshomaru no se inmutaba. Mi padre nos ofreció unas bebidas y se sentó en un sofá individual, yo reuní valor y me senté junto a Sesshomaru tomándole la mano, lo cual hizo que mi padre torciera el gesto en señal de desaprobación.

-Bien, se supone que ustedes llevan aproximadamente 4 meses juntos… ¿Debo esperar algo descabellado?

-¿A qué se refiere usted con descabellado?-Preguntó Sesshomaru con tranquilidad-

-Eres 4 años mayor que mi hija, intenta ponerte en mi lugar y verás la profunda preocupación que siento por ella.

-Estoy consciente de eso, pero Kagome me ha gustado desde el primer momento en que la vi, la diferencia de edades no significa nada para nosotros-

-Entiendo que estudias en el mismo curso que mi hija, pero ya antes habías sacado una carrera comercial para encargarte de los asuntos de la familia, ¿Qué piensas hacer con tu vida? ¿Por qué estudias en el instituto Shikon?

-La verdad es que aún no lo se con certeza.
-A tu edad ya deberías estar claro en lo que deseas-Dijo mi padre con extrema seriedad-

-Padre, por favor…

-Tranquilízate Kagome, está bien…-Dijo Sesshomaru serenamente-

-Mírate nada más hija, pareces su esposa, ni siquiera has tomado parte en esta conversación-

-Eso es porque te has dedicado a buscar defectos en mi novio, defectos que no existen.

-Tengo todo el derecho a saber lo que está ocurriendo-Dijo en un tono más alto de lo habitual- Vives prácticamente sola en Tokio, conoces a este chico que es mucho mayor que tu y terminan viajando juntos y hospedándose en el mismo hotel. ¿Esperas que solo sonría y aplauda tus locuras?

-¡No viajamos solos! Se trata de una excursión planeada por el instituto, dices estar pendiente de lo que me pasa y no sabes algo tan simple?

-No estoy hablando de eso hija, tú no entiendes.-Dijo mi padre con brusquedad-

-Pero yo si entiendo señor Higurashi-Interrumpió Sesshomaru seriamente- Kagome y yo no hemos tenido relaciones íntimas, puede estar tranquilo al respecto.

---El silencio se hizo más profundo, de manera instintiva, todos tomamos un largo sorbo de nuestras bebidas, mi padre hizo un leve ruido para aclarar su garganta, Sesshomaru no le quitaba los ojos de encima y yo observaba la escena totalmente ruborizada-

-¿Eso era lo que te tenía tan preocupado?-Dije aún atónita-

-Cuando se es joven pueden cometerse ciertos errores, no quiero que tú los cometas.

-Jamás haría algo que pudiese dañar a Kagome-Respondió Sesshomaru con firmeza-

-Entonces cuales son tus verdaderas intenciones-Preguntó mi padre algo interesado en escuchar la respuesta de mi novio-

-Estaré con Kagome todo el tiempo que ella quiera.

-Me preocupa el tipo de relación que están llevando, se nota que ambos se comprometieron al máximo y podrían cometer un error irremediable, un matrimonio a esta edad no es lo más inteligente.

-¡Ya basta papá! ¡Solo porque tu hayas sido un fracaso como esposo y como padre no pretendas que los demás hombres del planeta actúen igual que tu!

-Kagome…-Mi padre abrió los ojos impresionado al verme llorar de la furia-

-Cuando te separaste de mi madre y empezaste una nueva familia no tenías tiempo para nosotras, incluso cuando mi madre enfermó no te importó lo que yo pudiera sentir,
¡Tuve que pasar mi sufrimiento sola, sin un padre que me apoyara y sabiendo que muy pronto perdería a mi madre!

-No tenía idea de eso, ¿Pero por qué nunca me buscaste?-Preguntó sorprendido y confundido-

-¿Buscarte? ¡Maldición, tu eres mi padre! Se supone que tú debes conocer a tus hijos, por eso me marché a Tokio ya que no pertenecía a ningún lugar, luego conocí a Sesshomaru y por fin soy plenamente feliz. ¡Aunque no te guste voy a seguir con el!

---Me desboroné a llorar sin consuelo, mi padre se lanzó a mis brazos, secó las lágrimas de mis ojos y me ofreció su pañuelo mientras me miraba algo arrepentido.

-No tenía idea de que estabas sufriendo hija, siempre pensé que vivir en Tokio te ayudaría a olvidarte de tantos problemas, quería que tuvieras una vida como la de cualquier chica de tu edad, es por eso que nunca quise forzarte a decir lo que no querías. Está bien, veo que ahora sonríes más que cuando estabas aquí en Kobe.

-Padre…

-Sesshomaru, te encargo a mi querida hija, cuídala bien.

-Eso haré, no se preocupe por nada.-Y de esa forma, mientras se estrechaban las manos, esta vez en señal de amistad, se dio por terminada la tormentosa platica-

---Llegamos al hotel a las 7 y 30 de la noche, Sango y los demás se encontraban en la discoteca del hotel pero yo estaba demasiado cansada y me fui directamente a mi habitación.

Empezaba a quedarme dormida cuando el golpeteo de la puerta me hizo recobrar la consciencia.

-¿Se puede?...

-Sesshomaru, ¿Cómo lograste venir sin que te vieran los maestros?

-No me subestimes-Dijo guiñándome el ojo- ¿Te molesta si me quedo un rato?

-En lo absoluto-Dije sonriendo ampliamente-

---Sesshomaru se recostó en el espaldar de la cama y me atrajo con sus brazos hacia el, me besó en la cabeza y empezó a sisearme de un lado a otro con lentitud.

Otra vez mi corazón late a mil por hora, esta sensación es la misma que tuve ayer, me di la vuelta para quedar frente a Sesshomaru y lo besé lentamente, a diferencia de otras ocasiones, el no hizo ademán de separarnos ni un poco, nuestros cuerpos estaban rozándose por completo, era el momento perfecto, estábamos solos, nadie nos interrumpiría.

Pero al separarme sentí una ligera confusión en su mirada, no dejé que hablara y lo besé nuevamente, esta vez era yo quien posaba mis labios posesivamente sobre los suyos, el se relajó un poco y me tomó de la cintura, entonces empecé a desabotonar su camisa con torpeza, estaba hecha un manojo de nervios.

-¿Qué estás haciendo?-Dijo entreabriendo los labios mientras yo lo besaba-

-Lo que quiero-Respondí completamente ruborizada- Quiero que suceda.

---Entonces se incorporó de nuevo sentándose frente a mí, me miró con los ojos radiantes y con la respiración algo agitada, negó con la cabeza mientras me tomaba de los hombros.

-¿Por qué no? –Pregunté confundida- ¿Acaso hice algo malo?

-No es eso Kagome, no quiero que actúes precipitadamente.

-Hablas como mi padre, se muy bien lo que estoy haciendo, quiero estar contigo aquí y ahora…mas que nada en el mundo…

---Entonces empecé a desabrocharme la camisa, pero no pude terminar la tarea ya que Sesshomaru se lanzó contra mi cuerpo y me besó furtivamente, caímos a lo largo de la cama, coloqué mis brazos alrededor de su cuello para que no me soltara.

Esta era la primera vez que llegábamos tan lejos, Sesshomaru se separó y me abrazó con fuerza, intenté liberarme de su agarre pero fue inútil, al final el había ganado.

-Me engañaste-Dije con amargura-

-Es por tu bien…-Dijo mientras se reincorporaba y me tomaba en sus brazos como en un principio-

-¿No quieres estar conmigo? –Dije intentando disimular el tono agudo de mi voz-

-Kagome…es lo que mas deseo en estos momentos, maldición, estar aquí a solas contigo, no se de donde saco tanta fuerza de voluntad.

-Yo tampoco…

-Pero tú no me la pones fácil, te entregas en bandeja de plata, es casi imposible para mí contenerme.

-Entonces no lo hagas-Insistí en tono de suplica y luego me avergoncé por mi atrevida petición-

-Kagome, yo también quiero estar contigo, pero no de esta forma, ¿Te imaginas si por mala suerte llegaras a quedar embarazada? No deseo que tomes esa responsabilidad a tan temprana edad, eso puede esperar…

-No había pensado en eso…
-Hagamos un trato, te prometo buscar un momento oportuno lo más pronto posible, pero cumpliendo con todas las medidas preventivas. Si en ese momento te sientes preparada entonces lo demás vendrá por si solo.

---Justo allí, mientras pensaba con la cabeza fría, me di cuenta de que no estaba tan lista como pensaba, acordamos esperar a que llegara el momento indicado. Luego de tanta adrenalina Sesshomaru se marchó a su habitación, cumpliendo como siempre su promesa de protegerme y de ser maduro por los dos.

Finalmente me quedé dormida, y al día siguiente, nos esperaban algunas noticias inesperadas…

Bueno hasta aquí les dejo el capitulo ;) díganme que tal les pareció, nos vemos!!