Long-fic "la sexta luna" [sesshoxkagome]

Re: "la sexta luna" [sesshoxkagome]

Hola de nuevo aquí como siempre trayéndoles el siguiente capítulo, muchas gracias por su apoyo chicas y a todos a los que lo leen mil gracias, por eso me gusta escribir para que la gente disfrute un rato de las tantas tareas que hay, aquí les dejo el siguiente capítulo, nos vemos.

Aclaraciones:
[] Pensamientos.
<>El personaje narra.

La sexta luna.
Capitulo 5: Yume (ilusión)

<Una vez en mi infancia, vi una guerra, si es que así se puede llamar>
<nuestro país era tranquilo y pacifico hasta donde yo recuerdo, mi padre y mi madre nos amaban a mí y a mi hermana, nuestra vida era modesta, teníamos lo necesario, ropa, comida, salud y amor, no teníamos lujos, pero eso sabíamos que no servía para nada, pero toda esa felicidad se esfumo cuando la verdadera infelicidad llego del mas haya>
<llego una fuera inexplicable que ahora que tengo 14 no puedo responder aun, era pequeña y vi como mi madre y mi padre murieron, aquél mal, vino, con miles de soldados tantos humanos como demonios, arrasaron con todo, mujeres, niños, adultos, casa, cosechas, todo, todo por lo que yo y mi pueblo trabajamos, ni nuestras mejores brujas, como éramos llamados, pudieron derrotar al enemigo, era tan fuerza la energía de aquel ser o aquellos seres, se adueñaron de nuestras tierras, de todo lo que hasta ahora conocíamos como hogar, pero ahora no se contestar a la pregunta que desde pequeña me persigue: ¿Quién era él?>
<mi hermana y yo, después de la muerte de nuestros padre a manos de esos hombre y demonios, fuimos convertidas en esclavas de ellos, lavábamos, cocinábamos, a nuestra corta edad, fuimos sirvientas y esclavas, de nuestra abuela no supimos nada, y no era de extrañarse ella no sentía ningún afecto hacia mi familia, aunque pario a mi madre, ella era una persona de pocas palabras, y aun mas cuando mi madre se caso con humano, mi padre, el no tenia poderes, pero que son los poderes y la magia comparado con el amor, mi madre, para ella el amor lo era todo, y por el murió, pero un día, en la oscuridad de la coche apareció nuestra abuela y nos saco de eso, nos guio a una ciudad, donde por unos meses pasaba desapercibidas, pero con la muerta de mi abuela, fuimos descubiertas y es ahí donde conoceríamos a la gran familia taisho y donde comenzaríamos nuestro trabajo como detectives espiritistas>

-kagome.

Kagome volvía en sí, solo para mirar al chico de cabellos morados.

-lo siento.
-pensé que no llegarías.
-¿Dónde estamos?
-mejor dicho, ¿Dónde estás?, llegas un poco tarde, todos te esperan, vamos

Kagome lo siguió, vaya había llegado ahí, y ni cuanta se dio, eso sí que era raro, ahora todos la estarían esperando, llegaron a la puerta conocida para ella, la oficina de ese demonio de la muerte, entro y luego de ella Yashiro.
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<tenía que estar soñando, no había otra explicación para ello, sus ojos de demonio, no podían engañarlo, era aquella chica, mejor dicho niña que no menos de 24 vio, eso no podría estar pasando, esos movimientos, esa sonrisa, esos ojos, no podían engañar, era ella, simplemente sus luceros azules eran de ella y de nadie más>
Kagome trae sus cabellos en una trenza, unos short a la mitad del muslo, junto con una blusa que en el centro estaba abierta y dejaba ver el canal de sus senos, era blanca y debajo se veía un encaje rosa que apenas y cubría su ombligo, la cual se sujetaba en el cuello, también tenía sujeta a su cintura una falda de alanes de color azul y tenía unas botas negras (miren la vestimenta de Yuna de final fantasi)

-nos volvemos a ver-dijo sango.
-sí, hola de nuevo.

Kagome sonrió y se dio cuenta de que unos ojos azules, la miraban, y en la esquina de aquella lúgubre oficina estaba el chico, que por la foto parecía ser koga, vio como se acerco a ella, tenía una coleta alta y tenía un traje de piel, parecía un lobo, sus colmillos y el tomo de piel, junto con esa ropa de dos piezas y las tobilleras, era todo un guerrero.

-hola soy Rin.

Kagome bajo la mirada para encontrarse con una pequeña de unos 8 años, la miro y sonrió, vestía un kimono azul, con muchos estampados y en su cintura tenia sujeto una pequeña bolsita de cuero.

-tú eres la detective.
-kagome y tu Rin.
-rin está muy feliz de verte.

La pequeña le sonrió a kagome, pero koga llego y quito a la pequeña.

-ahora nos mandan a una segunda niña, soy koga, descendiente de la familia de los lobos.
-mucho gusto, soy kagome.
-¿a quién le llamas niña?, anciano.
-¿Cómo me llamaste?
-rin te llamo anciano-dijo la pequeña.

Kagome los miraba discutir, y como la pequeña se ponía en cuclillas para gritarle al hombre lobo, pero ni hacia llegaba.

-son algo peculiar.

Kagome miro al joven que entraba, tenía una vestimenta de monje y supuso que era miroku.

-al pequeña rin siempre habla en primera persona y a veces en tercera, pero es linda y koga, a él simplemente no le gusta los niños, soy miroku, mucho gusto.
-kagome.
-sí, ya me dijeron que es la nueva integrante.
-bueno.

Todos miraron a la vos, y kagome por un por un minuto se había percatado de que sesshomaru estaba en la habitación pero luego ni atención le puso, pero ahora los 6 lo miraban.
El poderoso yokai miraba a los 6, pero al hablar se refería a los 5.

-hoy es su primera misión-dijo con autoridad-así que por su bien, espero que sobrevivan.

Cuando dijo eso miro a la chica, kagome lo miro.

-por su bien, sean uno solo, no trabajen por separado, bien, váyanse, Yashiro les mostrara su destino.
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Kagome y el grupo habían salido la oficina y habían sido llevados al comienzo del gran bosque.

-Bien muchacho-dijo mirándolos-esta es su primera misión y de esto depende si se quedan en el grupo o no.
-espera, a mi me dijeron que estos eran los grupos-dijo kagome.
-así es pero si no funciona, se debe cambiar, todo sea por el bien del equipo señorita kagome.
-¿señorita?

Kagome lo miro, ¿Por qué la llamaba señorita? Si hace no más de una hora la llamaba por su nombre, ahí entendió que debía de ser educado ya que lo miraban, kagome miro por todas las direcciones pero no capto nada.
Cuando se dio cuenta, ya estaña entrando al espeso bosque, mientras la figura de Yashiro desaparecía.
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Sesshomaru estaba sentado en su oficina mientras miraba hacia el bosque, el cual tenía una excelente vista desde ahí.

-ya estuvo-dijo Yashiro.
-ella se dio cuenta.
-me lo temí.
-por tu bien espero que no se dé cuenta de que es una…
-mira y aprende sesshomaru, que yo ganare la apuesta.
-ya lo veremos.
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Kagome y el grupo caminaban.

-escuchen-dijo koga-yo seré el capitán de este equipo así que me seguirán.
-espera-dijo la pequeña-desde cuando rin, dijo que quería a un anciano como jefe.
-rin-dijo sango-pequeña, el solo bromeaba, creo que el que debe ser capitán es miroku-dijo sonrojada.

Kagome miro a la chica que vestía un traje de ninja y tenía un gran bumerán en la parte de atrás.

-¿yo?-dijo miroku-¿Cómo quieran?
-creo que es lo mejor-dijo kagome.
-yo no estoy de acuerdo-dijo koga.
-la mayoría gana anciano-dijo Rin.

Todos se miraron.

-si no salimos victoriosos con miroku te escogemos a ti y punto-dijo kagome.

Todos se quedaron en silencio y miraron a kagome.

-¿no?-dijo kagome a los demás.

Todos asentaron y siguieron su camino.
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Kikyo estaba tomando el té junto con Midoriko, la cual la miraba.

-me falta aun-dijo kikyo dejando la tasa en la pequeña mesita.
-así es-dijo la joven maestra-te falta mejorar, por mi te mando pero ¿crees poder con la carga?
-para eso nacimos maestra, somos brujas.
-somos diferente a los hechiceros-dijo Midoriko-muchas personas prefieren que llamarnos hechizaros simplemente, pero haya algo muy importante ahí un hechicero hace pociones y magia negro, pero un brujo, un brujo como nosotras no hace eso, nosotros vemos espíritus, hablamos con ello, convivimos con ello y también podemos sentir su energía, si es bueno o malo, a hasta el preciso momento en el que atacara, eso es lo que nos distingue de lo hechiceros, nosotros no somos cualquiera, tenemos que desarrollar la magia, ya que sin ella, seremos más que hechiceros, comunes.
-lo entiendo maestra, pero yo quiero ir.
-te entiendo.
-quiero que mi madre este orgullosa de mi.
-lo sé, tú mismo dijo tu hermana.

Kikyo bajo la mirada.

-compréndela, ya que ella te comprende.
-no del todo.
-pero trata, es lo mismo que te digo.
-está bien maestra.
-bueno, ya vete, mañana veremos, si ya puedes desempeñarte como detective.
-si-dijo kikyo marchándose.
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-a la derecha te dije koga-dijo kagome

Koga había evadido el golpe, pero había recibido una buena herida en la pierna derecha.

-mujer, te dije que me lo dijeras antes-dijo koga presionándola herida para que no saliera sangre.
-¿por dónde atacara kagome?-dijo sango.

Kagome cerró sus ojos, concentrándose y sus ojos se abrieron.

-a tu derecha sango.

Sango tiro el gran búmeran a su derecha y aquel demonio recibió el golpe en uno de sus costados, kagome lo miro, era un demonio dragón, era largo y sus escamas era de color plateado, media alrededor de los 50 o 60 metros, muy largo, era feo, si, daba mucho miedo y a simple vista repugnante.

-¿Rin que ara señorita kagome?-dijo la pequeña.
-ayuda a koga ahora nosotros seguiremos al dragón.
-está bien.

Kagome junto con miroku y sango siguieron al demonio.

-al parecer no le hiso nada el golpe-dijo sango.
-o tal vez no le dimos en el punto exacto.
-eso sería lo más posible-dijo kagome.
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Rin abrió el pequeño bolsillo que llevaba y saco una pequeña botellita, saco un pedazo de tela y lo puso en la herida de koga.

-eso me la cerrara.
-la boca no ancianito.
-niña malcriada.
-deja de decirme así, si no cuando comas, le pondré algo y morirás.
-te atreves hacerlo niña.
-claro que sí.

Rin puso sobre la tela el líquido de la botella, koga echo un grito.

-es normal que arda-dijo la pequeña.

Koga miro a la pequeña y vio como le quitaba la tela y miraba la herida.

-¿sucede algo?-dijo koga.
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-miroku, sango ahí viene-dijo kagome.

Los dos miraron venir al demonio y lo esquivaron cayendo al piso, lleno de piedras.

-¿están bien?-dijo kagome.

Ambos se levantaron y la miraron, tenían raspones y sus ropas tenían una que otra rasgada, pero estaban en pie, kagome miraba a los alrededores y sintió una segunda energía, se alejo de donde miroku y sango luchaban y mío los alrededores.

-algo anda mal.

Kagome vio al demonio que se acercaba a ella y como la tiraba con un golpe de su cola, kagome sintió un dolor espantoso en el estomago donde había recibido el golpe.

-kagome.

Miro que venía Rin corriendo y koga junto con ella.

-¿Qué paso?-dijo kagome.
-¿estás bien?-dijo Rin.
-si-dijo levantándose.
-kagome, le cure la herida a koga, pero la medicina no hace afecto hasta después de una hora, pero mira.

Koga le mostro su pierna, donde hace nomas de unos 10 minutos estaba la herida, y al mirarla no había nada ni una cicatriz.

-no tiene nada-dijo Rin-cuando tenía que verse una cicatriz, no hay.
-pero como si vi como el demonio lo mordía.
-entonces nunca lo mordió.

Kagome se quedo pensando unos minutos.

-hay que encontrar a miroku y sango, cuanto antes.

Los tres corrieron.
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-sango, ¿estás bien?
-si-dijo ella-pero no entiendo porque nuestros ataques no lo dañan.
-ni yo, pero cuando trate de absorberlo con mi agujero negro, el simplemente se esfumo, eso jamás me había pasado.
-es porque nunca paso.

Miroku miro a kagome.

-es una ilusión-dijo kagome.
-¿Cómo que una ilusión?, si los golpes fueron reales y dolorosos.
-es una técnica ilusionista.

De pronto, un gran viento envolvió al bosque, todos cerraron sus ojos y cuando los abrieron estaban en donde comenzaron, la salida del bosque.

-¿Qué hacemos aquí?-dijo sango.
-volvieron-dijo Yashiro-de su misión.
-¿Qué fue todo eso?-dijo miroku.
-como lo dijo kagome, una ilusión, era solo un poco de mi poder.
-¿un poco?-dijo kagome-casi nos matas.
-me pase un poco nada más.
-casi me matas-dijo koga-moría desangrado.

Todos discutían con Yashiro de lo duro que había sido con esos ataques, mientras kagome miraba al edificio, donde ahí miraba al demonio.
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Sesshomaru cerró las ventanas.

-¿señor por que cierra las ventanas?
-hay demasiado sol.
-vaya, al parecer vivieron a la ilusión de Yashiro-san, eso es nuevo, ningún novato había sobrevivido a la ilusión, muchos se morían por no poder derrotar al mounstro.
-kanna, cállate y sírveme mi comida.
-está bien.
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Todos estaban en la oficina de sesshomaru.

-ya pueden irse-dijo el sin mirarlos.

Todos se fueron, quedando solo Yashiro en la oficina.

-yo gane sesshomaru.
-ya lo sé.
-ahora estaré en su equipo.
-sí, ya vete.
-que mal humor primo, me voy.
-¿A dónde?
-kagome nos invito a su departamento a cenar.

Sesshomaru lo miro.

-nos vemos primo.

Sesshomaru miro la puerta cerrada, no sabía por qué no podía quitarse ese nombre de la cabeza.

-kagome-murmuro.

<Kagome, Kagome, Kago no naka no Tori wa/Kagome, Kagome, el pájaro se encuentra en la jaula.
¿Itsu Itsu deyaru? Yoake no ban ni/ ¿cuándo la abandonará? En la noche o el amanecer.
Tsuru to kame ga subetta/ la grulla y la tortuga se deslizan
¿Ushiro no shoumen daare ?/ ¿Quién se encuentra detrás tuyo?>

-ese juego, lo odio, son puras niñerías, esa mujer es como cualquier otra.

Continuara…

Nos vemos, espero que les guste, adiós.

 

Re: "la sexta luna" [sesshoxkagome]

Hola mis queridos amigos aquí les dejo la siguiente continuación, y pues disculpen la tardanza es que ya entre a la escuela y los maestros no se cansan y me marcaron mucha tarea y pues he tenido mucho sueño jajá, pero en fin aquí les dejo la continuación, nos vemos.


Aclaraciones:

[] Pensamientos del personaje.

<>El personaje narra.



La sexta luna.

Capitulo 6: Aoi/azul



-¿estás seguro de eso?


Un hombre de armadura y un gran porte miraba a un joven que vestía un traje rojo


-si padre.
-pero.
-es lo mejor, han pasado 8 meses desde que ella se fue, es mejor que lo sepa.
-pero no crees que eso afecte su trabajo.
-no creo, se molestaría mas si le miento.
-bueno-dijo Inu-está bien, ve.
-cuando llegue te llamo.
-está bien.


Inuyasha miro a su padre, el cual, en sus ojos dorados se veía claramente el
Sufrimiento.


-espero que sus ojos azules no cambien-dijo preocupado inuyasha
-pides mucho, hijo mío.
-me voy padre.
-saluda a tu hermano por mí.
-¿crees que es buen momento?
-él lo sabe.
-¿Qué?
-y no te preocupes no le dirá nada a kagome.
-está bien.

------------------------------------------------

Kagome estaba con sango comprando una cosa.


-esta última misión fue muy interesante.


Kagome no presto atención.


-kagome, ¿te pasa algo?, hoy en la misión estuviste muy desconcentrada y por poco y el demonio te daña, si no fuera por Yashiro-san, no sé si estuvieras aquí.
-no seas dramática-sonrió-estoy bien, es solo que tengo un mal presentimiento, y hace ya 3 meses que no sé nada de la familia Taisho.
-¿y por qué no le preguntas a sesshomaru?


Kagome miro con cara de pocos amigos a sango.


-solo fue una sugerencia amiga.
-pues no me las des, con el no se puede.
-te refieres a lo que te dijo.
-sí.
-es que aun eres menor, es de entenderse.
-no-dijo Kagome-me las pagara ese maldito demonio.
-------------------flash back------------------
Kagome había llegado de una de sus misiones, ahora con su nuevo equipo, formado por koga, Rin, sango, ella y Yashiro.
Según dijo Yashiro que miroku no había sido llamado a otro equipo donde necesitaban de sus servicios y habilidades ya que su detective espiritista tenía muy poco nivel de control y como kagome había desempeñado un estupendo papel en su misión, mejor dicho la ilusión de Yashiro, así que por ello, el estaba ahí, koga por extraño que parezca se llevaba de maravilla con él y Rin admiraba mucho a Yashiro y sango junto con kagome no tenían ningún problema, así que el equipo siguió, ya habían pasado 2 o 3 meses desde que ella se desempeñaba como detective.

Ahora kagome caminaba por lo que parecía ser un bosque.


-segura que esa aquí sango.
-claro, yo ya vine, es el mejor.
-está bien.
-a pesar que hace mucho calor aquí, ese lago está muy agradable, no sé por qué no se calienta como el agua de las tuberías.
-eso es raro.
-sí, pero es inexplicable.
-bueno te veo aquí.
-¿no te puedes quedar con migo?
-no, kagome recuerdas que te dije que tengo un hermano menor.
-así, lo sé, bueno te veo mañana.
-está bien.


Sango se fue y kagome me adentro mas al bosque y ahí en un claro se veía un hermoso lago, la luz de la luna lo envolvía era como un cuento de hadas, kagome miro el lago, en casa estaba acostumbrada a bañarse con el kimono especial, pero esta vez, el kimono que llevaba no era justamente el indicado para ello.


-tendré que desvestirme.


Kagome me quito lentamente la ropa.


-solo espero que no hayan depravados, según sango no los hay.


Kagome me había desvestido completamente y ahora estaba dentro del lago, sus hermosa cabellera flotaba en el agua.


-¡qué bien se siente!


Habían pasado aproximadamente una media hora desde que entro, estaba pensando en salirse cuando oye ruidos, rápidamente te esconde en el agua, dejando ver solo sus ojos.
Después de unos minutos no vio nada, así que aprovecho para salir, se estaba secando el cabello cuando de nuevo oyó ruidos, por lo que rápidamente te coloco el kimono como pudo pero cuando los sonidos eran cada vez más cerca miro hacia la oscuridad del bosque y de ahí salió un demonio.


-¿Qué hace aquí?-dijo kagome.
-chiquilla.


Kagome lo miro, ese demonio que se decía llamar hijo de Inu taisho era un patán y un amargado, sintió la mirada del demonio en su piel.


-¿Qué tanto me ves?
-nada, si tan siquiera tuvieras algo de que presumir, pero solo tienes 14 años, no creo que lo tengas.
-¿Qué me estas tratando de decir?
-que no tienes nada porque eres una niña.
-no lo soy.
-pues yo veo que te queda bastante grande la blusa que usas cuando vas a una misión.


Kagome estaba perdiendo la paciencia.


-si no tiene nada que ver como dice, vallase.
-yo primero llegue.
-¿Qué?
-ha con tanto grito, ya se me quito las ganas de bañarme.


Sesshomaru se fue, kagome lo miro.


-¿Cómo que el llego primero?
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Kagome vestía un lindo kimono azul y sus cabellos estaban en dos coletas con unas bellas cintas plateadas, caminaba por las calles de aquella cuidad, le había llegado un llamada, y tuvo que escuchar la vos de aquel demonio, así que le dijeron que vaya a la central ya que tenia visita, esa es la razón, por la que estaba tan arreglada.


-señorita-dijo kanna.
-no me digas así kanna.
-bueno kagome, en oficina de mi jefe esta tu visita.
-¿Qué?, no se supone que es privado.
-es que, bueno anda, el te explicara.


Kagome caminaba, algo andaba mal, algo le decía que serian malas noticias.

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-hace 3 meses.


Sesshomaru miraba al joven.


-papa está destrozado.


Sesshomaru solo se limito a mirar por la ventana.


-ten táctica, esa chiquilla es muy impulsiva.


Inuyasha miro a su medio hermano, ¿Cómo lo sabía?, si solo había estado ahí 8 meses.


-¿Cómo sabes que ella…


Sesshomaru miro a la puerta y se sentó, kagome entraba con cautela.


-esto no es una misión-le dijo sesshomaru.


Kagome camino rápido y tomo haciendo, y al ver a la persona que estaba junto a ella se tiro sobre el chico.


-tranquila.
-inuyasha que bueno que estas aquí, ya me tenias preocupada.
-lo sé-dijo inuyasha.


Kagome le extendía la mano a este, y él la tomo, ambos se miraron.


-no has cambiado pequeña bruja.
-te lo prometí.
-mas te vale.


Ambos rieron, sesshomaru estaba sintiéndose incomodo.


-dile la razón por la que viniste inuyasha-dijo de formo autoritaria sesshomaru.


Ambos jóvenes miraron al mayor y tomaron asiento.


-no sé como lo vayas a tomar, pero te lo digo antes que te enteres por otro lado.
-yo no le dije nada-dijo sesshomaru.
-kagome.


Kagome miro a inuyasha.


-mi madre, como sabias antes de irse, ella estaba muy delicada de salud, y pues hace tres meses ingreso al hospital, por su enfermedad pero apenas hace un día, ella murió.


Sesshomaru sintió el aroma a sal, y sus ojos dorados se fijaron en aquella joven, las lágrimas salían recorriendo sus finas facciones.


-la enfermedad pudo mas, es por ello, que te vive a buscar.


Kagome no podía hablar, las lágrimas no paraban.


-kagome, la enterraremos y ella me pidió que fueras.


Kagome lloraba, apenas y oía.


-demonios, porque se lo dijiste así, te lo dije.


Sesshomaru salió de la oficina.


-kagome.


Inuyasha se acerco a ella y le toma la mano.


-ella me pidió que no lloraras.
-es que.
-recuerdas el sobre-dijo inuyasha-que te dio mi madre.
-¿Cuál de los dos?
-el que estaba sellado.
-sí.
-¿lo has abierto?
-no-dijo kagome.
-entonces-dijo inuyasha-te llevare de nuevo a Tokio, ahí haremos el funeral y abrirás la carta.
-¿Qué es lo que dice?
-lo sabrás cuando estemos ahí.


Inuyasha se aparto de ella y kagome lo noto.


-¿Qué hice?
-nada.
-por que te alejas de mi, tu jamás lo hiciste.
-hoy mismo nos vamos-dijo inuyasha.


El se levanto y salió de la habitación, kagome se quedo ahí sentada.


-¿Qué sucede?

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Sesshomaru miraba a inuyasha.


-¿Qué dije ahora?
-nada, lo que pasa es que eres muy tonto.
-hoy me la llevare, papa me dijo…
-no me importa lo que te dijo mi padre o no.


Inuyasha miro a su medio hermano.


-¿no tienes compasión?
-no, antes que nada está mi compañía.
-pero…
-no te la llevaras, porque ella es mi detective espiritista y punto.
-el vuelo sale a las 10 de la noche y papa ya lo pago.
-no me importa inuyasha, ella no se ira, porque la necesito aquí.
-¿la compañía o tu?


Inuyasha miro a su medio hermano, tenía una mirada muy diferente.

-no digas estupideces, es una niña.
-y, el hecho que lo sea, no quiere decir que…
-inuyasha te estás dando cuanta de la escena de celos que está armando.
-¿celos?

Inuyasha se dirigió a la salida.


-a las diez sale el vuelo-dijo inuyasha-ella vendrá, te guste o no hermano.

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Kagome seguía en la oficina.


-se acabaron las lagrimas.


Kagome se levanto al darse cuenta de quien se trataba.


-Yashiro, la señora taisho a muerto.
-¿Qué?
-sí, acabo de ver a inuyasha y me lo dijo.
-no lo sabía.
-tengo que irme.
-y la misión, mañana la tenemos.
-lo siento pero mañana es el funeral y tengo que estar ahí.
-pero kagome.


Kagome se levanto y Yashiro la sujeto de la muñeca.


-no te puedes ir.
-ella no irá a ningún lado.


Ambos miraron al dueño de la oficina en la que estaban.


-¿Qué quieres decir?-dijo kagome.
-que no te vas, tienes una misión.
-es que no entiendes, es el…
-no me importa si se muere tu gato, tu perro o tu madre, el trabajo es primero.


Los ojos de kagome se llenaron de nuevo de lágrimas.


-debiste de pensarlo antes de venir.
-pero es que ella…
-sea quien sea, lo primero es el trabajo que aceptaste.
-pero tengo que ir.


Kagome se dirigió a la puerta y fue seguida por Yashiro.


-kagome no te vayas.
-tengo que ir.
-es ese caso-dijo sesshomaru.


Kagome lo miro de reojo.


-si te vas chiquilla tu contrato como detective espiritista estará terminado.
-sesshomaru, eso no es justo.


Sesshomaru no le prestó atención a Yashiro.


-no volverás a trabajar aquí.


Kagome lo miro por un momento, si se iba sabía bien que perdería el trabajo, pero si se quedaba perdería el corazón de inuyasha, y de Inu taisho, y eso no podía permitirlo.


-entonces.


Kagome se quito el collar que traía en el cuello, sesshomaru se rio sarcásticamente con el gesto y Yashiro, quien sabia que ese collar se lo habían dado para controlar su poder la miro con desesperación.


-renuncio.


Dicho esto kagome dejo caer el collar y se marcho de la oficina.


-¿Qué estás haciendo sesshomaru?, ve a buscarla.


Sesshomaru siguió mirando papeles.


-¿no harás nada?, estás perdiendo a la mejor detective.
-puedo conseguir otra.
-¿otra como ella?, ya te dije que ese orgullo que tienes no te llevara a ningún lado.
-y esos sentimientos que tú tienes tampoco.


Sesshomaru miro a su primo.


-mírame, soy dueño de esta compañía y tu solo eres un trabajador en ella.


Yashiro lo miro.


-sé que es lo que realmente esperas de ella.


Sesshomaru lo miro.


-¿Qué sabes tú?, solo eres un demonio de la ilusión.
-lo sé primo, pero puedo ver más allá de las ilusiones.


Dicho esto Yashiro se fue, dejando a sesshomaru solo en la oficina.


-niña tonta.
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Kagome estaba guardando sus cosas, pero fue interrumpida por el sonido de la puerta.


-¿Quién es?
-soy Yashiro.
-si quieres que me quede de antemano te digo que no te abriré.
-no, no es eso.


Kagome abrió la puerta y lo miro.


-kagome, una vez que renuncias, no serás contratada de nuevo.
-no me importa, ella murió, ella era como una segunda madre para mí.
-lo sé kagome, pero tienes que estar consciente de que una vez que renuncies jamás volverás.
-lo sé-dijo kagome.
-quisiera ir con tigo.
-nada te ata a mí.


Kagome puso atención de nuevo a su trabajo de empacar.


-no creo eso.
-¿Por qué?
-soy tu compañero, y tu amigo.
-¿amigo?, discúlpame pero solo te veo como un compañero.
-yo te veo como mas que una compañera.


Kagome miro al joven de cabellos morados.


-ya veo, jamás fue mi intención.
-es porque soy el primo de él ¿no?
-eso no tiene nada que ver, tan solo te conozco 8 meses.
-kagome, te admiro mucho, eres una joven única.
-claro que lo soy, tengo poderes que los demás no tienen, eso entro en lo extraño, es por eso que te atraigo.
-no claro que no.
-no nos hagamos a los tontos, tengo 15 años, pero sé muy bien de la vida.
-¿15?, no tenias 14.
-tenia, ya lo dijiste.
-estas consiente que no volverás.
-por eso me dijo mi madre que no tenga amistades en un lugar, una persona como yo no es para quedarse en un solo lugar.
-lo sé, pero por esta vez.
-nada, he tenido muchas vidas, y no quiero que esta sea la última.
-aunque la vivas sola.


Kagome miro al peli morado.


-es mejor que mal acompañada ¿no cree?
-no lo creo.
-¿y qué harás?, ¿detenerme?
-no, no puedo, me odiaras si lo hago.
-eso es lo que te hace diferente a tu primo.


No se habían dado cuanta pero la noche ya estaba haciendo acto de presencia.


-ya es la hora.
-kagome, ¿segura?
-más que nunca, ellos fueron una familia para mí, no los dejare solos.
-pero, aunque eso signifique perder tu trabajo.
-sí.
-me gustaría ser como tú, pero yo dependo de esto.
-por tus hermanas.
-así es.


En el tiempo que habían estado en el mismo equipo, Yashiro, resulto se de lo más agradable, con sus charlas o chistes, lo cuales a kagome le encantaban, no había conocido en mas de sus largas vidas a un joven como él, gentil, de gran corazón y con un poder asombrosos, era único, pero su familia había pasado de un nivel económico a otro, de la noche a la mañana habían perdido todo, y por ello tenía que trabajar duro , ya que su padre, hermano de la madre de sesshomaru había muerto y dejando a él con sus deudas, ya que tenia 5 hermanas y claro su madre, él era el mayor de todos.


-nos vemos, espero que pronto Yashiro.
-eso espero.
-cuando vengas a Tokio, avísame.
-sí.

Kagome tomo la única maleta que tenia y se fue.
----------------------------------

Inuyasha estaba más que desesperado.


-pensé que no llegarías.
-ya ves.
-vamos, entra.
-claro.

Ambos subieron al avión.


-¿te despediste?
-solo de un amigo.
-¿uno nada mas?
-así es, ¿Cómo está tu padre?
-triste, pero trabajando duro.
-que bien.
-¿trajiste el sobre?
-sí, hablando de eso, ¿Por qué tanto secreto?
-eso lo sabrás cuando lleguemos.
-sí, pero inuyasha no me lo puedes adelantar.
-no.
-está bien.

El avión arranco, kagome miraba como el avión se alejaba de la cuidad.

[Aunque me dolió no despedirme de mis amigos, sabía que algún día, por alguna circunstancia de la vida, los vería de nuevo y me quedaría con ellos por siempre, claro aunque tomaría cierto tiempo, pero ahora, en este momento, no podía, había algo que tendía que atender, algo que no me había dejado dormir]

Kagome apretó fuerte el sobre.


-¿no me lo dirás?
-ya te dije que no.
-pero inuyasha.


Inuyasha miro a kagome.


-simplemente, tu vida cambiara a partir de ahora en adelante.
-¿muchos?
-si kagome mucho.

Kagome miro de nuevo la ventana.


-lo más seguro es que no vulvas ahí.
-lo sé, pero lo prefiero así.


Dicho eso kagome cerró los ojos, ya que quedaba muchas horas de vuelo por delante, mientras inuyasha solo la miraba de reojo.
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En la oscuridad una puerta se abrió dejando pasar la luz.


-¿está aquí?, señor sesshomaru.
-¿Qué quieres kanna?
-le vine a decir que kagome ya ha dejado la cuidad.
-muy bien.
-señor, ¿enserio la despedirá?
-ella renuncio.
-pero señor, la mama.
-kanna, vete, mañana tenemos una misión, y ahora con una detective menos, tendremos más trabajo.
-si seño.


La joven se fue dejando solo a sesshomaru.


-esa niña.

Mientras su mirada ambarina miraba la luna en sus garras apretaba un hermoso collar con una perla azul, como si su vida dependiera de esa acción.
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[solo espero que no sea mucho tiempo, para volver a ustedes…]


Continuara…


Nos vemos, besos.

 

Re: "la sexta luna" [sesshoxkagome]

Hola gracias por sus comentarios, y que bueno que les guste la historia jajaja la había dejado un poco por qué no sabía que rumbos seguir pero ya estuvo y aquí está la continuación muchas gracias por su apoyo, nos vemos.

Aclaraciones:
[] El personaje narra
< > Pensamientos del personaje o míos.

La sexta luna
Capitulo 7: un futuro mas cercano que nunca.


[La gente tenía que hablar porque no le quedaba de más, porque dios le había dado una boca, pero, cada blasfemia que decían con ella]
[Ahora estaba sola, más que nunca, sin el apoyo de lo que yo solía llamar mi familia, mi todo, mi hermana, mi querida hermana kikyo]

Kagome caminaba a paso veloz, suerte que el aeropuerto quedaba cerca, había extrañado el clima tan templado.

-camina-dijo inuyasha.
-no camines tan rápido, que no puedo.
-yo soy el que tiene cargado tus maletas y voy más rápido que tu.
-ríe-inuyasha, no has cambiado nada.
-ni tú, ven vamos.
-sí.

Kagome lo siguió a paso rápido.
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Yashiro se encontraba en el mismo lugar donde esperaba a kagome, solo que esta vez ella no vendría, pero el resto del equipo sí.

-¡Yashiro!-dijo koga-¿Dónde está kagome?, siempre que llego ella ya esta cómodamente platicando con tigo.
-ella renuncio.
-¿Qué?

Al mismo tiempo llegaba Rin de la mano de sango.

-¿Qué pasa?-dijo la pequeña.
-pasa que…

Koga iba a decirles lo de kagome pero Yashiro lo callo y este lo miro.

-¿Qué guardas Yashiro?-dijo sango.
-kagome ha dejado el quipo.
-¿Qué?-dijo Rin-pero ella…
-no lo ha hecho por gusto.
-ese maldito de tu primo la cambio-dijo koga-ahora mismo lo ire a ver y decirle unas cuantas cosas…
-no ella renuncio.
-¿Por qué haría algo a si kagome?-dijo sango preocupada.
-la madre del medio hermano de sesshomaru ha muerto y ella fue criada a su lado y fue a su funeral.
-¿y por eso renuncio?-dijo koga.
-sesshomaru, le dijo que no se fuera, pero ella no escucho y renuncio.
-pero sesshomaru no le dijo que podría volver-dijo sango.
-el ya rompió el contrato.

Rin lloro, aunque habían pasado poco tiempo como equipo ya se habían acostumbrados los unos a los otros.

-¿Cómo puede ser tan cruel sesshomaru?-dijo Rin.
-él es el que mando Rin, no podemos hacer nada.
-y si pedimos que vuelva.
-los despedirán-dijo Yashiro.
-el tiene razón, y saben que no podemos, cada quien tiene deudas y mucho futuro.
-eso es verdad-dijo sango.
-además-dijo Yashiro-ella lo decidió así y hay que respetar su opinión.

Los tres lo miraron.

-bueno-dijo koga-¿no vamos ya?
-claro-dijo Yashiro.
-si-dijo sango-¿rin estas bien pequeña?

Rin se seco las lágrimas con la manga de su kimono y tomo la mano de sango en señal de un sí.
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Midoriko, aquella mujer de ojos bondadosos cerraba su templo, vestía un kimono negros y traía un bolso del mismo color, bajo las escaleras y al llegar se encontró en un mar, de kimonos negros.

-jamás había visto tanta gente reunida.
-lo mismo me dije al salir de mi casa.
-anciana kaede, pensé que no iría.
-tengo que ir, después de todo era la esposa de un gran concejal.
-si, Izayoi era un buena esposa y madre.
-¿kagome ya llego?
-al parecer si-dijo Midoriko-ella ya está aquí.
-bueno, Inutaisho pidió al consejo ir, más que una sugerencia sentí que fue una orden.
-lo mismo pensó yo.
-bueno, pues no nos conviene enojarnos, vamos.
-sí.

Ambas mujeres se dirigieron a la mansión Taisho.
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Kagome llegaba a la mansión, estaba como la dejo hace ya 8 meses, miro cada rincón pero por más que buscara la cálida sonrisa de Izayoi no aparecía, definitivamente era doloroso.

-ella te extraño cada día.

Kagome miro a inuyasha.

-¿Dónde está kikyo?
-ella está entrenando, lo más seguro.
-quería verla, pero lo mejor será esperar.
-kagome.

Kagome miro hacia la vos, ahí estaba Inu Taisho, el cual la miraba.

-señor, que bueno es verlo.
-a mí también me da gusto, escuche que diste un gran desempeño ahí.
-así es, di lo mejor.
-¿diste?
-ella renuncio padre.

Inu la miro sorprendido y luego sonrió.

-no esperaba menor de ti, sabía que vendrías aun que eso sea lo último que hagas.
-así es, además ella era como una madre para mí.
-lo sé, y por eso te he pedido que vengas, después del entierro tenemos una juta, porque mi querida esposa dejo algo para ti.
-¿Qué dejo?
-ya lo veras, será algo bueno.

Inuyasha miro a su padre.

-hijo, llévala a su cuarto y enséñale lo que se pondrá.
-claro.

Kagome siguió a inuyasha.

-no ha cambiado-dijo ella entrando.
-esto te pondrás-dijo apuntando a un kimono negro con mariposas plateadas.
-¿seguro?
-sí, era de mi madre, ella quiso que te lo pusieras.

Kagome bajo la cabeza y vio como inuyasha dejaba la habitación.
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Kagome caminaba con trabajo entre la multitud, se oían lagrimas, quejidos una que otra maldición y risas, no tuvo tiempo de ver a los que alguna vez llamo compañeros, ya que inuyasha la había llevado al cementerio, donde solo las personas más cercanas estaban y el resto estaba afuera.
El consejo estaba, kagome camino y lo primero que vio fue a Midoriko, por instinto se tapo el cuello, y siguió a inuyasha, saludo con reverencias, ya cuando todos estaban la ceremonia comenzó.
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Kagome estaba algo nerviosa no sabía lo que vendría ahora, todos estaban reunidas en la gran mansión, a pesar de ser una reunión por algo trágico, la muerte de un ser querido, todo parecían estar contestos, kagome, ella no lo estaba, tenia rabia, de no haber estado con ella, pero por lo que le dijeron o por lo poco que escucho es que ella se fue feliz, eso no importaba ella quería estar ahí presente, se arrepintió por irse, por dejarla, después de todo era su única compañera, ya que kikyo por cruel que pareciera, era una extraña en su vida.

-kagome.

Kagome despertó y vio el bello rostro de la detective.

-señorita Midoriko, ¿Cómo ha estado?
-bien, al parecer has renunciado.
-¿Cómo lo sabe?
-Inu me lo dijo.

Kagome estaba apenada.

-tenía que hacerlo, después de todo está mi familia, la consideraba mi familia.
-lo sé kagome, y espero que te des cuenta que ya no podrás volver a trabajar ahí.
-lo sé.
-kagome.

Ambas mujeres miraron a inuyasha.

-ven, mi padre desea hablar con tigo.
-está bien, con su permiso señorita.
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Yashiro entraba a la oficina de sesshomaru, el cual estaba viendo unos documentos, pero ahora miraba al demonio.

-Hola primo-dijo dándole unos documentos-¿no crees que hay mucho calor?

Sesshomaru miro los documentos que le dio.

-tardaron.
-es porque no tenemos una detective.

Sesshomaru no le hizo caso y siguió mirando el documento.

-¿aun quieres estar en ese equipo?, te puedo cambiar.
-no, estoy bien-dijo abanicándose.
-fiel, como siempre.

Yashiro camino hacia la puerta pero antes de eso sesshomaru hablo.

-tendrán una detective.
-¿ella volverá?
-te dije que tendrán una detective, no que ella regresa.

Yashiro no lo miro, cerro su abanico lo tomo con fuerza y se fue azotando la puerta.
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Sango caminaba muy de lo feliz cuando se topo con miroku.

-buenas tardes sango.
-buenas tardes maestro.
-no me digas así.
-es que ya lo subieron de rango.
-así es, ya soy maestro.
-que bueno.
-¿Cómo está tu equipo?
-pues, ahí vamos, solo porque Yashiro es fuerte si no ya hubiéramos muerto.
-no digas eso sango, pero que mal que kagome se haya ido.
-si, pero debe de tener sus razones.
-eso es verdad.
-rin estaba destrozada se había encariñado con ella al igual que Yashiro.
-¿y koga?
- está molesto pero se desquita en las misiones.
-ya me lo imagino.
-bueno sango me voy, tengo muchas cosas que hacer.
-bien, no lo distraigo.
-nos vemos.

Miroku se acerco peligrosamente a sango y le dio un beso fugas en la mejilla y se fue, dejando a sango sonrojada.
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Kagome entro a la oficina y ahí está Inutaisho y junto de el había un hombre con vestimentas muy elegantes, kagome camino lentamente y tomo haciendo frente de ambos hombre e Inuyasha se quedo en la puerta.

-kagome, te presento a mi abogado.
-¿abogado?

Kagome había crecido en un pueblo y solo sabía lo básico, escritura y lectura, pero no sabía de eso, hasta que fue a vivir a la casa de los Taisho, Izayoi le había enseñado de culturas y más.

-disculpe-dijo kagome.
-no te preocupes.

Kagome miro a los hombres.

-bueno señorita kagome, ¿tiene los sobre?
-si-dijo kagome sacándolos-¿para qué son?
-ya abrió uno, ¿no es así?
-sí.
-bueno el otro falta.
-pero…
-ábralo y léalo en vos alta.
-está bien.

Kagome miro el sobre.

-no se va abrir con tu mirada.

Kagome sonrió y abrió el sobre sacando dos hojas una era pequeña y lo leyó.

-querida kagome para cuando estés leyendo esto es que ya no estoy con tigo ni con mi hijo y mi querido esposo, mi niña déjame decir que estos años en que conviví con tigo me di cuenta de que eres muy importante y que te quiero mucho, ahora ya no hay nada que hacer, ya que no es algo que se pueda resolver, solo quiero que seas feliz y que mires hacia el futuro y del tu próxima familia.

Kagome se quedo callada y miro la otra hoja.

-esta es un acta de…
-nacimiento-dijo el abogado.

Kagome miro a Inu y este sonrió, luego miro a inuyasha el cual se no veía contento.

-pero…está a nombre de…
-kagome Taisho.

Kagome se quedo quieta.

-¿quiere decir?
-Izayoi, lo hizo y yo estoy de acuerdo.
-¿Por qué no me lo dijo?
-te lo iba a decir pero te fuiste.
-quería llamarla mama.

Inu la miro y sonrió.

-a ella también le hubiera gustado.
-pero, es que, disculpen no comprendo aun.
-somos hermanos ahora kagome.

Kagome miro a inuyasha.

-ahora, eres Kagome Taisho, hija de Inu taisho y de la difunta Izayoi de Taisho, hermana de Inuyasha y sesshomaru Taisho.

Kagome quedo calla.

-¿y kikyo?, que paso con mi hermana, ¿sesshomaru lo sabe?

Ambos hombre se miraron.

-kagome-dijo inuyasha-ella ya no vive aquí, ella se fue de la casa cuando mi madre murió y no el no sabe nada.
-no, eso no es posible soy su hermana.
-ella renuncio, mi padre le dijo lo mismo.
-pero ella no acepto.
-pero es mi hermana.

Las lágrimas cayeron.

-señorita-dijo abogado-hay tiempo, así que descanse y piénselo.

Kagome se levanto y se dirigió a su habitación, a la que ahora era su habitación.
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Los días pasaron sin más novedades, kagome no había salido de su cuarto y ahora Inu miraba unos documentos.

-señor Taisho.
-¿Qué pasa kagome?
-ya lo pensé bien-dijo ella-está bien ser su hija.
-claro que sí.

Kagome sonrió.

-ahora dime padre, ¿de acuerdo hija?
-sí, padre.

Kagome lo abrazo con algo de temor.

-tranquila jamás te haría daño.
-gracias, por todo.
-ahora comenzaras una nueva vida kagome.

Ambos se separaron y sonrieron en ese momento llega inuyasha.

-¿Qué pasa hijo?
-kagome, me encontré con kikyo.
-¿Qué?, ¿Dónde?
-ella se va del país.
-¿Cómo?, ¿Por qué?
-al parecer le ofrecieron un trabajo de detective.
-¿Por qué no me dijo nada?
-ella esta rumbo al aeropuerto.
-vamos.

Kagome camino hacia la puerta pero inuyasha la detuvo.

-¿Qué sucede?
-ella te va a sustituir, ella trabajara para sesshomaru.

Continuara…

Espero que les guste y gracias por sus comentarios.