One-shot de Naruto - La niñera (sasuhina)

Capitulo 1: A tomar nuevas riendas.

Era un mañana diferente a las demás en vez de estar soleado y alegre, a toda Konoha la invadía un gris y una lluvia fría y horrible, no solo por el clima era fea si no que algo sucedía en frente de la gran mansión de la familia Hyûga.

— ¡Solo eres un estorbo en esta gran familia!— le grito un señor a una chica que estaba tirada en el suelo por que el la había echado, — ¡Cuando murió tu madre debí haberme liberado de ti! — esas fueron las últimas palabras que le dijo el señor para luego entrar a la gran mansión.

—L-lo b-bueno e-es q-que y-ya l-lo t-tenia p-previsto— se dijo a sí misma la chica para levantarse del suelo y marcar un numero.

—Hola… habla Ino-chan— pregunto Hinata atreves del celular.

—“Hinata, hola ¿Cómo estás?” — Ino le pregunto a la joven no suponiendo para que era la llamada.

—Ino-chan sucedió— le dijo Hinata dejando caer una de sus lagrimas.

—“Karin ¡sucedió! ”— le grita Ino a su hermana haciendo que esta corriera al teléfono. —“¿Estas embarazada? “— le pregunto está haciendo que se cayera Ino.

— ¿P-pudiera v-vivir un t-tiempo c-con u-ustedes?—.

—“Vente de inmediato”—.

Al terminar la llamada Hinata comenzó a caminar hacia la casa de Ino y Karin, a pesar de que la lluvia fuera fría y fuerte ella caminaba lentamente hacia su destino con las preguntas típicas que se le venían a la mente ¿Ahora que hiba hacer?, ¿Dejaría de llamarse Hinata Hyûga por deseos de su padre? , ¿Qué fuera de ella ahora que no sabía que hacer?, las preguntas el rondaban por la cabeza pero no sabía que respuesta dar, sabía que un día su padre se cansaría de ella y la echaría pero siempre sus planes tenían que fallar por no saber la fecha en que debían de ocurrir.

Hinata cada paso que daba se le venían recuerdos de su infancia, si se hubiera fijado bien en ese carro que se acercaba su madre estaría viva, si no hubiera sido que el conductor no estuviera ebrio él se habría dado cuenta que la madre de la chica estaba en frente de ella. Pero como dijo el Padre en el funeral: “Dios se la llevo por un motivo y todos sabemos que estará en un mejor lugar”. Desde ese día su padre la vio con gran desprecio.

El lugar donde la chica quería llegar estaba presente, al tocar la puerta esta se le fue abierta y vio a sus dos amigas arregladas completamente, —Perdona Hinata que no te allá avisado pero tenemos unas citas— dijo Karin más que emocionadas. Ino llevaba una blusa celeste turquesa de vuelos, un pantalón negro bien pegado y un mini suéter blanco algo roto. Mientras que Karin seguía con su estilo de Rock, cargaba un pantalón de cuero negro, una blusa blanca y encima de ella una blusa negra que decía “Rock” y unos chapulines grises para terminar su conjunto.

—Tú conoces la casa cualquier cosa esta el teléfono en mi cuarto y en el de Karin— Ino parecía estar más que emocionada por la cita que tenia, —Lo lamento Hinata pero nos tenemos que ir— Ino se despidió al oír una bocina que notoriamente eran los chicos por los cuales se alistaron.

Al salir a despedirse Hinata vio a un chico con ojos azules color cielo, u pelo rubio hermoso como los rayos del sol y una sonrisa de oreja en oreja que demostraba confianza en sí mismo. La chica mejor se entro a la casa ya que estaba empapada y con pijama pero no se contuvo a sonrojarse al seguir con la imagen del chico rubio en su mente.

No sabía que hacer pero mejor decidió, tomar un poco de café y buscar trabajo, la meta de la chica era comenzar desde pequeño, haci podía llegar hasta grande y demostrarle a su padre que ella no era solo un estorbo. Los ojos perlados de la chica fueron llamados por un anuncio que decía lo siguiente:
“Se necesita niñera que este las 24 horas del día en la casa, tenga cuidado y paciencia con los niños y que sepa cocinar, a quien le interese llamar a los números siguientes: 25896374 y 58963210”

A Hinata le pareció buena idea asi que agarro su celular deseando que todavía tenga minutos, —Buenos días ¿Este es el numero para el trabajo de niñera? — pregunto la chica tratando de no tartamudear.

—“Si este es el número correcto ¿Tienes donde apuntar? — la chica le pregunto a Hinata haciendo que ella volará tras un lápiz y papel para apuntar la dirección. La chica al ver la dirección se asusto era cerca de su antiguo hogar.

Pero eso no fue suficiente para que detuvieran a la chica, levanto la mirada y tomo prestada algo de ropa de su amiga Ino, ya que la de Karin era un poco de negra. Se puso una blusa negra casual, un pantalón de lona celeste estilo tubo, un collar en forma de corazón, un suéter casual blanco largo y una pulsera de plata.

—B-bueno e-es a-ahora o n-nunca— dijo Hinata apretando un paraguas para salir de vuelta a la lluvia.

Cada paso que daba sus piernas temblaban más y más, pero al ver que la gran mansión Hyûga se acercaba o ella a la casa. Pero por fin había logrado pasar cuando desde lejos escucho que gritaba su nombre una voz que se le hacía muy familiar.

—Hinata-chan vuelve a la casa— le dijo una niñita de unos doce años que le agarraba la mano jalándole.

—N-no p-puedo o-one-chan e-entra t-te h-hará m-mal — le dijo Hinata tratando de contenerse a no llorar al ver sufrir asi a su hermanita mejor.

—Si pudiera hacer algo dime ¿Qué quieres? — le pregunta Hanabi pensando que le hiba a pedir que le rogara a su padre que le dejara vivir en su casa.

—M-mete e-en u-una m-maleta t-toda m-mi r-ropa p-por f-favor v-volveré m-más t-tarde p-por e-ella — Hinata agarro coraje y se fue de ese lugar tratando de no llorar, era doloroso para ella que tenía que ver llorar a su padre por algo que ella no sabía lo que había hecho.

Siguió caminando y vio una gran mansión, la mansión a comparación de su antigua casa era una choza en miniatura. —Disculpe para la entrevista de n-niñera— Hinata trato de no tartamudear peor no lo logro al final. Las puertas se le fueron abiertas.
—Pasa adelante, mi nombre es Sakura Haruno y soy la secretaria del dueño de la casa, su nombre es Sasuke Uchiha, no lo mires directamente a los ojos si él no te habla, no le contradigas por más que quieras decirle algo ¿entendido? — mientras que le daba las recomendaciones a Hinata cada vez caminaban hacia una habitación con puertas gigantes. Al entrar vieron al dicho chico sentado en un sillón que se notaba que era cómodo.

—Se puede sentar— el joven se lo dijo con una voz tan frio que le dio escalofríos a la joven, — ¿Cuál es tu nombre? —.

—Hinata…—

— ¿Solo Hinata? —

—S-si s-solo H-hinata—

— ¿Sabes cocinar? —

—Si—

— ¿Tienes novio? — al momento de decir eso se vio que la joven se había sonrojado por recuerdos de aquel chico que vio salir con su amiga pero con su cabeza afirmo que no, —Que bueno porque no quiero que estés acaramelada con alguien—.

—E-entonces Uchiha-san ¿Tengo el trabajo? — le pregunto Hinata con un miedo que la acorralaba.

— ¿No comprendes fácilmente, verdad? Sakura entréguele a la chica la tableta— eso había sonado muy brusco, Sakura sospechaba la razón por la que de repente su “amo” se había enojado.

—Bueno vamos Hinata-chan, te enseñare tu habitación pero antes te enseñare todo la casa mientras que tu leerás lo que le gusta a cada uno— Sakura se miraba toda seria por cómo se miraba su “amo” sabía que como estuviera el día a ella la trataría de esa forma, —Primero te enseñare a los menores, ok— al subir las grandes escaleras se vieron dos corredores, las chicas tomaron el corredor derecho, mientras pasaban miraban una puerta con diferentes dibujos hasta llegar una que estaba abierta.
—Ella será nuestra niñera— la niñita se lanzo a los brazos de Hinata, —Hola mi nombre es Aoi Uchiha, pero dime cinderella o cenicienta y soy una princesa aunque muchos no lo crean— la niña cargaba un vestido celeste y una corona de plata. Aoi era una niña de 4 años, pelo negro igual que el de su padre, ojos azules que eran igual que el mar y tres chapitas en las mejillas.

—Alexander-sama ¿no se presentara? — le dijo Sakura con un tono tierno.

—Para que si ya dijiste mi nombre— Alexander le lanzo una mirada desafiante y fría igual que las de su padre. Alexander era un niño de 8 años, tenía pelo rubio como los rallos del sol, unos ojos negros que eran fríos y lo sabia controlar y en su cara tenía una marca como de equis debajo de su ojo izquierdo.

— ¿No eran tres? — pregunto Hinata viendo la tableta que le había dado la peli rosa.

—La mayor anda hablando con Sasuke-sama — dijo Sakura comenzando a guiarla, —Ven tienes que conocerla— para volver a la oficina del jefe era un camino largo que tuvieron que recorrer las dos chicas. Al fin habían llegado y al momento de llegar vieron a una joven salir corriendo de la habitación.

—Nika-sama ¿Te puedes presentar? —le pidió Sakura amablemente.

—Hola, mi nombre es Nika Ayame Uchiha, ¿Contenta Sakura? — Nika era una joven de unos 17 años, su pelo era negro igual que su padre y tenía unos ojos morados completamente hermosos, lo que no se explicaba la Hyûga es de ¿Dónde los había sacado?

—Puedes irte te esperamos en media hora en la mansión o lo más pronto posible— Sakura al terminar su oración decidió a irse del lugar.

—Bueno tendré que regresar para ver si Hanabi-chan ya tiene todo listo— se dijo a si misma Hinata ya que tenia la duda.

Al salir de la mansión Hinata vio a la joven Nika en un columpio bajo de una árbol de cerezo, ella sostenía una rosa negra y lagrimas caían de sus ojos morados para llegar a la rosa. Hinata quizo hablarle pero tenía el menos tiempo posible de arreglarse y todo lo demás así que solo decidió ir a buscar a su hermana menor y dejar una nota a Karin e Ino.

Al salir de la mansión se escucho desde lejos un grito de una niña, — ¡Oye espérame! — la voz provenía de Aoi. — ¿Te puedo acompañar? —. Hinata al ver el interés de la niña solo asintió con la cabeza.

—Bueno si tú serás mi niñera tendrás que responderme unas preguntas, ¿Cómo te llamas? Y ¿Por qué quieres ser nuestra niñera? — Le dijo Aoi con gran inteligencia a pesar de su edad, —O ¿eres una bruja que me quiere convertir en rana? —

—M-mi n-nombre e-es H-hinata, M-me g-gustan l-los n-niños y b-buscaba t-trabajo — Hinata trato de hablar normal pero sentía que no había sido buena idea.

—No tartamudees, a mi padre no le gusta que hagan eso, si hablas así será mejor que lo controles— Aoi como “princesa” buena decidió darle consejos.

— ¡Hinata-sama! — se oyó desde lejos a su hermana menor que estaba junto a una de sus buenas amigas, Temari Sabaku No.

—Temari-chan ¿Qué haces aquí? — le pregunto Hinata siguiendo el consejo de Aoi.

—Supuestamente iríamos al centro comercial pero no estar tartamudeando ¿Qué te sucedió? — le pregunto un poco extrañada Hinata.

—Tengo trabajo y tendré que estar las 24 horas en la casa— al decir eso las dos chicas que oían abrieron sus ojos como platos, —Y ella es una de las niñas que cuidare, Aoi—.

Mientras que Aoi se presentaba y hablaban de cómo había pasado todo, se dio el tiempo que solo quedaban 10 minutos para llegar a la mansión pero al parecer Aoi no se quería ir ya que tenía una interesante conversación con Hanabi.

—Aoi-chan nos tenemos que ir— dio la orden Hinata agarrando la maleta y despidiéndose de Temari y Hanabi.

No pensaba Hinata que se hiba a tardar tanto y es más se le había olvidado que había hecho una cita con Temari para comprarle un vestido que podía conquistar a Shikamaru, pero lastima todo le cambio a Hinata en un instante.

—Adiós Hinata me voy a la torre más alta… mi cuarto— Aoi tenía una gran imaginación y tenia detenidamente cada detalle.
Hinata entro a la mansión y vio todavía a la chica llorando en el columpio solo que esta vez sus ojos estaban rojos igual que su nariz. Solo que ahora la rosa estaba tirada en el suelo y ella ni la quería ver.

—Nika-chan ¿Le sucede algo? —le pregunto Hinata acercándose cada vez más a la chica.

—Nada que te importe— le dijo enojada ya que para que tuviera que contar con ella.

—Tranquila cuando quieras hablar aquí estaré— le dijo Hinata levantándose del la grama.

—Ehm… ni pienses que te pediré ayuda— Nika sabía que ella hiba ser de suma pero su orgullo de Uchiha no la dejaba confiar…

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Nota de mi XD :
Hola, puaf estoy más que nerviosa pero bueno les pediré la mayor ayuda posible ya que no quiero caer en las riendas y el mal camino del OoC XD...
Bueno... COmenten o Tobi muere XD

 

“recuerdos”
—Diálogos—
—Pensamientos—

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Capitulo 2: Primer día ¡vamos Hinata!​

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Ya había amanecido, era diferente al día de ayer ya que esta vez los pájaros cantaban con dulzura y se podía oír a las personas estar alegres y regalar sonrisas. Hinata se levanto a las 6:00 de la mañana para estar ya trabajando a las 7:00 como decía el manual de reglas que le había dejado Sakura en la tablilla. La chica se dirigió a su closet y saco una blusa blanca que con letras celestes decía “H0lynaight” y un pantalón blanco lona que tenía un cincho celeste de pitillas.

Al llegar al fin a la cocina la joven vio a su jefe que estaba sentado leyendo el periódico, —B-buenos días Sasuke-sama— le dijo Hinata viéndolo directamente.

—Buenos días— solo eso dijo y lo hizo sin despegar sus ojos del periódico.

— ¿Quisiera algo de desayunar? —.

—Sabes exactamente que necesito un desayuno— le dijo el Uchiha enseñando sus ojos fríos al ver la ingenuidad de la chica.

Hinata se preparo uno huevos y tocino para complacer a su jefe pero al acercársele el Uchiha le dijo algo que ella no se esperaba, —No me gusta tu olor— al decirle esto Hinata se quito de a la par de él para volver a la vieja posición donde estaba antes.

— ¡Buenos días! — dijeron Nika y Aoi entrando a la habitación, Aoi lo dijo feliz y Nika lo dijo bien serio. Las chicas llevaban una falda roja y una blusa blanca con un pañuelo de color verde, ese era su uniforme del colegio.

—Aoi no llevaras esa corona y Nika bájate esa falda— les dice el Uchiha corrigiéndoles cómo iban vestidas.

— ¡Pero… papa! — Sasuke al oír que ellas dos no querían hacer caso solo les lanzo una de sus miradas y con cara de tristeza le hicieron caso.

— ¿Dónde está Alexander? — le pregunto el Uchiha a sus hermanas.

—Lo secuestro un duende para tomar su cuerpo— dijo Aoi demostrándose tranquila pero con una voz atemorizada.

—Tal vez esperando que su padre le deje estar con alguien que desea— al decir eso Nika le mando una indirecta a su padre demostrándole que todavía estaba enojada con él.

El Uchiha se levanto de su asiento para ir en su “misión” como padre para saber que le ocurría a su hijo pero se detuvo al oír una voz de la misma chica que él había ofendido.

—Uchiha-san yo iré— Hinata solo les entrego el desayuno a las niñas y decidió ir a hablar con Alexander ya que el Uchiha le dio el permiso.

Hinata subió las escaleras que llegaban hacia la habitación de Alexander, al entrar en ella vio a Alexander en una esquina llorando.

—Alexander-kun ¿te sucede algo? — le pregunto Hinata acercándose a él con una voz dulce y consoladora.

— ¡Que no vez que estoy llorando es obvio que me sucede algo! — le dijo Alexander secándose las lagrimas de sus hermosos ojos negros.

— ¿Se pudiera saber que es lo que te ocurre? — le volvió a preguntar pero Alex le volvió a ver con su dura mirada.

— ¿Para que quieres saber? ¿Mi padre te envió verdad? — Alexander se levanto y le pregunto bajando cada vez la mirada.

—Solo quiero conocerte, quiero ayudarte si tienes algún problema… Uchiha-san iba a venir por ti pero quise saber que es lo que te hizo ser frio — Hinata se fue acercándole a él jalándole hacia ella para que se sentase cerca de ella.

—Todo lo malo que le sucede a esta familia es a causa mia, si yo no hubiera existido un montón de cosas malas no hubiesen pasado, yo sabía la verdad pero no le dije a nadie y hice que ella nos abandonara— dijo Alexander comenzando a llorar haciendo que Hinata lo abrasara, —Hay veces que me pregunto que pasaría si mi madre estuviera con migo—.

—Todo fuera diferente… tal vez estuvieras mejor o peor, el amor de una madre es difícil de encontrar, al alejarse puede dañar y dejar un hueco en el corazón imposible de arreglar— le dijo Hinata viendo hacia el techo y recordando a su madre.

—Hinata… me comprende, es la primera vez que alguien lo hace— se dijo a si mismo Alex al oír la declaración de la joven.

Alex se levanto del suelo y le dio una fija mirada a Hinata, esta era diferente, no era fría y macabra si no que era una mirada dulce y expresándole que le agradecía. — ¿Todavía puedo desayunar? — le pregunto Alex enseñándole una sonrisa que le hizo recordar al chico que había visto el día de ayer.

Al salir de la habitación, Hinata vio a Sasuke ir a las escaleras… él había escuchado todo, —Al parecer no eres tan tonta como pensaba— Sasuke sin darse vuelta le dijo comenzando a bajar las escaleras. Hinata no sabía si tomarlo como un cumplido o un insulto pero sin importarle se sonrojo.

— ¡Sayonara a todos! — gritaron los niños ya dispuestos a partir a su colegio.

—Que les vaya bien— les dijo Hinata entregándole su comida a Alex con una de sus bellas miradas.

Los niños subieron al bus que los transportaban y Hinata quizo saber quién era la madre y sabía la persona indicada para resolver sus dudas, era la chica que le había atendido: Sakura Haruno.

—Sakura-chan ¿sabes que le sucedió a la madre de ellos? — le pregunto Hinata haciendo que ellas dos entraran de inmediato a una habitación que estaba cerca de ellas.

—Regla numero uno para sobrevivir acá, nunca preguntes eso y no digas Ayame Takahashi— le dijo Sakura con una voz que apenas se escuchaba

— ¿Ella es la madre de los niños? — volvió a preguntar Hinata con más intriga cada vez más.

—Te contare, Ayame Takahashi fue una chica que Sasuke-sama conoció en el instituto que el estudiaba, ella era un chica común y corriente pero a Uchiha-san le atraía mucho la atención. El la invito a salir, ella concedió, se enamoraron, se casaron, adoptaron a Nika-chan, tuvieron hijos pero a pesar que todo se miraba color de rosa, ella no estaba enamorada de Sasuke-sama si no que de su hermano mayor. Ella dejo a los niños y ya no se sabe nada de ella — Sakura cuando hablaba movía las manos como ilustrando la historia de lo ocurrido. Ayame Takahashi la madre de los Uchiha y tal vez ex esposa de Sasuke Uchiha.

—Por eso, ¿Nika también se llama Ayame? — hizo su última pregunta Hinata para cerrar la conversación.

—Ella como tenía 10 años quizo tener un recuerdo de ella antes de partir y le pidió a Uchiha-san que le pusiera el nombre pero sin embargo nadie se lo dice — Sakura al terminar la conversación abrió las puertas y vio en frente de si a Sasuke que la vigilaba con una mirada seria y fría.

—Sakura conoces bien la reglas que tengo— Sasuke sabia de todo lo que habían hablado las jóvenes en la habitación.

—Sasuke-sama perdóneme es… que… ehm…—Sakura buscaba una buena excusa pero se detuvo al oír una voz de Hinata.

—Lo lamento Sasuke-sama, yo… solo quería saber quién era la madre de los niños— Hinata hizo una reverencia ante él y se quedo quieta en esa posición.

—Que no se vuelva a repetir— el Uchiha solo dijo eso y tomo su camino de regreso a su oficina seguido de Sakura.

En la oficina de Sasuke…

— ¿Qué adivinaste sobre ella? — le pregunto Sasuke tomando asiento.

—Parece que su apellido es Hyûga otra de las familias más reconocidas del país y además ella es la heredera— dijo Sakura sorprendida que la chica estuviera trabajando para él a pesar que tuviera todo lo necesario.

— ¿De que chica hablan? ¿Es linda? — pregunto un chico de pelo rubio como el sol y una sonrisa de oreja a oreja. Era el mejor amigo de los dos que estaban en la habitación, Naruto Uzumaki.

—Dobe, ¿Qué haces aquí? — le pregunto el Uchiha con una mirada fría y perturbadora.

— ¿Qué no se puede visitar a su mejor amigo de instituto y socio de negocios? — Naruto como uno de los muchos días que venía se sentó en su lugar, — ¿Pues este lobito solitario Uchiha ya consiguió a alguien para hacerse compañía? — pregunto Naruto viendo a Sasuke con una mirada picara.

—No te interesa, Uzukaratonchi— le dijo el Uchiha para cortar el tema y haciendo que este caiga en una gran depresión.

—Bueno no me queda de otra que irme— dijo Naruto abriendo la puerta. Al abrirla vio a una joven peliazul subiendo por las escaleras y sospecho que ella fuera la chica que hablaban esos dos.

El joven se acerco pensando en su movida para conquistar a esa joven peliazul, —Disculpa, ¿Tienes un mapa? Es que me perdí en tu mirada— al decirle ese cumplido el chico la joven no aguanto a sonrojarse. —Mi nombre es Naruto Uzumaki ¿y el tuyo? — le pregunto el joven entregándole su mano.

—Etto… m-mi n-nombre es Hinata— Hinata le recibió la mano y se puso cada vez más roja.

—Que lindo tu nombre y di…— el joven fue parado por una jovenzuela de pelo rosado no dejándole decir su cumplido.

—Naruto, Sasuke-sama te llama—.

Después de irse, Hinata no podía creer que su amor platónico lo había conocido en la gran mansión pero a la misma vez no quería enamorarse del chico con que estaba saliendo su mejor amiga; por decir estaba en la cuerda floja. Hinata entro a su habitación y siguió con el trabajo de leer el reglamento pero se sorprendió a ver a un joven entrar a su habitación.

—Con que eres Hyûga ¿se pudiera saber que quieres? — dijo Sasuke entregándole la ficha de su información.

— ¿Por qué quiere saber? —se pregunto Hinata buscando una excusa.

—S-solo quería hacer mi propio camino— dijo la chica pero el Uchiha sabía que era mentira.

—Otra excusa mejor no tienes, Hyûga— le dijo Sasuke acercándose cada vez más a ella.

—Etto… ehm… no puedo volver— al decirle eso el Uchiha se recordó de su pasado y solo se dio la vuelta dejando en paz a la joven.

“— ¿¡Porque no puedes ser como Itachi!? — grita un señor ya grande a un niñito que estaba en el suelo llorando.

—No lo trates tan mal, Fubuki— dijo una mujer joven agarrándole el brazo.

—No deberías ser un Uchiha— le dijo para finalizar el señor haciendo que Sasuke llorara.”

— ¡Joder! Malditos recuerdos— dijo el joven ya en su habitación recordando la pobre y dulce mirada de la chica…