"La Gran Aventura Entre Los Limones!: La última misión del equipo 7"

Mis más cordiales saludos para todos los lectores. No soy nueva en este foro, de hecho hace tres años que tengo esta cuenta, pero como habrán notado, no la usé nunca. Les cuento que a esta historia la publiqué acá hace tiempo, pero al haber sido tan pobre en narración y contexto, obtuve críticas muy malas de parte de la moderadora. Les voy a confesar que en ese momento me sentí muy frustrada y enojada, pero ahora, cuando leí mi fic nuevamente, me dí cuenta que ella estaba en lo cierto,y hasta me sentí avergonzada de haber escrito tal cosa ¡Jajaja! Bueno... De hecho no tanto, pues a la historia original la escribí cuando tenía 12 años. Pero bueno, decidí restaurarla y probar suerte de nuevo.
Si llega a tener una buena aceptación, lo continuaré con todo gusto =), así que sin más preambulos, aquí se los dejo, esperando que sea de su agrado:
_________________________________________________________________________________

“LA GRAN AVENTURA ENTRE LOS LIMONES”: LA ÚLTIMA MISIÓN DEL GRUPO 7

Capítulo 1: "La extraña Misión del equipo 7"

Acaecía el atardecer en la Aldea de Konoha… Los últimos rayos del sol caían sobre las copas de los árboles, bañándolos de un brillante color oro, mientras la brisa los mecía suavemente… Este agradable panorama, común en el otoño, digno de ser una imagen propia de deleite, fue interrumpido por un chillido histérico, proveniente del centro del bosque, donde un grupo de cuatro personas “entrenaban duramente”:

-¡Sasukeeeee! ¡Me quemaste el trasero, maldito imbécil! –Gritaba un muchachito rubio, mientras corría desesperado, tratando de apagar la flama que se había encendido en sus pantalones.-

-¡Idiota! ¡Te había dicho que no te metieras en mi zona! –Le reprochó su compañero, al borde de un ataque de cólera.-

La niña de rosados cabellos, no podía más que descostillarse de la risa, agarrándose el estómago, y secándose las lágrimas que esto le producía.

Su sensei, en cambio, lejos de inmutarse o alterarse por la escena, se limitó a encogerse de hombros y soltar un ligero suspiro, mientras cambiaba la página de su libro. ¡Qué raro, Naruto y Sasuke! ¿Cuándo llegaría el día que no ocurriesen más de sus payasadas?

El crujido de una rama volvió a todos a la realidad, cuando inconscientemente se pusieron en guardia; exceptuando claro, a nuestro protagonista, que arrastraba sus glúteos en el suelo, intentando apagar el fuego.

- ¿Qué se le ofrece? –Preguntó tranquilamente Kakashi, dirigiéndose al sitio del cual provino el sonido.-

Por toda respuesta, un servidor ANBU se apareció en una rama contigua, y luego de hacer una reverencia, extendió su mano con una nota, hacia el sensei.

Éste, luego de leerla, le agradeció al enmascarado, quien inevitablemente echó una mirada a Naruto, para luego desaparecer.

-¿Qué fue eso, Kakashi-sensei? –Preguntó extrañada la pelirrosa, un poco más calmada.-

-Muchachos… Tsunade-sama nos solicita en su oficina en este momento. Recojan sus cosas y vámonos.

-¡Mendiga vieja! –Exclamó Naruto, sobándose el trasero.- ¡Justo se le ocurre llamarnos al momento de regresar a casa!

- Aish… Naruto tiene razón… -Agregó Sakura, con un tono de fastidio.-

Kakashi simplemente descendió del árbol, y emprendió la marcha silenciosa y lenta hasta destino. Cuando hubieron avanzado un par de metros, un extraño e incoherente cacareo de gallina se oyó en el cielo. Extrañados, todos miraron hacia arriba, preguntándose qué pudo haber sido… Cuando estaban a punto de seguir, un enorme pollo asado se incrustó en la cabeza de Sasuke, haciéndolo tambalear y casi caerse. Indignado, soltaba millones de insultos inentendibles, tratando de quitarse ese objeto de la cabeza. Naruto estalló en carcajadas, mientras le decía:

-¡Jajajaja! ¿Ahora quién ríe al último, eh Sasuke? ¡Jajaja! ¡Espérate! ¡Ahora me deshago de él!

Sin pensarlo, el rubio arrancó una pata; y deleitado por su sabor, continuó así hasta que Sasuke pudo quitárselo del todo. Enfurecido, se abalanzó sobre Naruto, culpándolo por el desafortunado suceso. Sakura y Kakashi únicamente los dejaron continuar, mientras ellos seguían el paso.

En fin, cuando entraron a la Aldea nuevamente, las cosas ya parecían haberse calmado en el grupo; pero no fue hasta que avanzaron hacia el centro, que todas las personas se volteaban riéndose como locas y señalando a Naruto. Ninguno sabía el porqué de esto, hasta que el rubio se miró de espaldas en una vidriera, y pudo notar el enorme agujero en su pantalón, el cual dejaba ver un bóxer blanco con dibujos de tiernos ositos.

-¡Sasukeeeee! ¡Me las vas a pagar, imbécil! –Amenazaba Naruto frenéticamente, mientras se quitaba la chamarra para atarla a su cintura, y así disimular el agujero.-

Los minutos restantes para llegar a la Torre Hokage, se les antojaron interminables a Sakura y Kakashi, quienes resignados seguían su paso, ansiosos por terminar el día. Entre peleas, amenazas, gritos y risas, llegaron al fin hasta la cima del edificio, dónde una mujer los esperaba sentada detrás de su escritorio.

-Tsu… ¿Tsunade-sama?-Llamó Sakura-

-Adelante, niños… -Invitó una voz, detrás del respaldo de la silla.-

Cuando el asiento giró, unos alaridos de horror surgieron de las gargantas de Naruto y Sakura, al ver la espantosa criatura verde con ojos de pepinos que se encontraba en el lugar de su querida Tsunade.

-¡Es un monstruo! ¿¡Qué le has hecho a Tsunade-Sama!? –Lloriqueaba Naruto, mientras se le abalanzaba con un palo en sus manos, dispuesto a pegarle.-

-¡Naruto, detente! ¡Soy yo, idiotaaaa! –Trataba de explicar la mujer, mientras tomaba al niño del cuello y lo arrojaba al otro lado de la sala.- ¡Imbécil! ¡No ves que es una máscara de belleza! –Gritó la señora, mientras se quitaba los pepinos de los ojos, y se refregaba la cara.-

-Ouch… Lo lamento Tsunade-sama… -Se disculpó, mientras se sobaba la cabeza.- Es que no vi la diferencia entre usted y un espantoso monstruo de las alcantarillas… Creo que su máscara no funciona muy bien…

El rostro de la Hokage se deformó en una mueca de odio e indignación. Pero cuando estaba a punto de destrozar a Naruto, la voz de Kakashi la detuvo:

-Tsunade-sama… -Inquirió con una voz un poco fastidiada.- ¿Sería tan amable de decirnos para qué nos mandó a llamar?

Tsunade se volteó a verlo, y al parecer se dio cuenta de lo que estaba haciendo, porque su cara cambió nuevamente, y en un intento por recomponerse, se sacudió la ropa y se apareció detrás de su escritorio nuevamente.

-Mil disculpas, Kakashi-san… Pero como verá, la insolencia de esta criatura me hizo perder la composición por un momento –Explicó, sonriendo amablemente.-

-¡Cha! ¡Jajajaja! ¡Naruto pegó en el palo con lo que dijo a Tsunade, es la pura verdad! ¡Jajaja! –Exclamó la inner-Sakura, sonriendo malvadamente.-

-El motivo por el cual los llamé, es que debo asignarles una misión nueva.

El rostro de los tres ninja se iluminó por completo, luego de oír esto.

-¿Dijo MISIÓN? ¡Sí, al fin! –Exclamó Naruto, muy emocionado.-

-Deben saber que es una misión de clase B… Necesito que vayan a una aldea secreta, ubicada en el otro continente… Más precisamente a la Aldea Escondida entre los Limones…

-¿Escondida entre los… Limones? –Preguntó Sakura, levantando una ceja, incrédulamente.- ¿Qué rayos es eso?

-Es la principal aldea del Extraño Reino… De Tuculandia…

Al decir esta última frase, una tétrica música de película se escuchó, y un estruendoso relámpago los hizo estremecer, mientras que la ventana de atrás se rompió.

-¿El Reino de… Tuculandia? –Repitió Naruto, tragando saliva y haciendo que se quiebre otro vidrio.-

-Así es, la cuestión es que deben infiltrarse en la Mansión Gubernamental, donde reside su líder, el LemonKage… Mejor conocido como Alperovich-sama. Necesito que tomen de allí un pergamino secreto que guarda en algún lugar de la casa. El destino de todos depende indefectiblemente de ése artículo… -Agregó Tsunade, con una voz dramática y de suspenso.- Lo reconocerán instantáneamente porque es un objeto que ellos no suelen utilizar, y porque… Me lo robó hace algunos años…

-Guau… -Expresó Naruto.- ¿Y se puede saber qué dice?

-¡Jaja! ¡Ni en tus sueños, niño! ¡Eso guarda un secreto ancestral y único! Ustedes sólo limítense a traerlo de regreso, en excelente estado; y para que el susodicho no se entere, lo reemplazarán por este otro. –Le respondió al rubio, mientras le entregaba la copia a su sensei.-

-Muy bien Tsunade-sama… Sólo quiero saber una cosa… -Anunció Kakashi.- ¿¡POR QUÉ DEMONIOS NOS ELIGIÓ JUSTO A NOSOTROS, HABIENDO TANTOS EQUIPOS DANDO VUELTAS POR AHÍ!?

-Jaja, eso es fácil querido… Simplemente porque creo que ustedes son los más capacitados para llevar a cabo una misión de ésta índole… Sé que no parece muy difícil, pero la verdad es que no tienen idea de los innumerables peligros a los que se enfrentan yendo a ese lugar… Es prácticamente desconocido por los Ninjas de nuestras tierras… Los pocos que han ido… No regresaron con vida…

Los rostros de Naruto y Sakura se ensombrecieron, ambos se llevaron las manos al cuello, involuntariamente.

-Además… Si lo hacen, sabes que habrá una recompensa muy jugosa… -Agregó, sonriendo perversamente.-

-Mmm… Bueno… Si lo pone desde ese lado… Creo que sí, aceptamos su misión. Finalizó Kakashi, sonriendo satisfecho.-

-¡Un segundo! ¡No nos ha pedido nuestra opinión, sensei! –Protestó Naruto.-

-Su opinión no es necesaria, queridos niños, este asunto está decidido –Kakashi no dejaba de sonreír.-

-Bueno, aquí tienen sus pasajes, sus visas, y el dinero para el alojamiento u otros gastos DE EXTREMA NECESIDAD. Partirán mañana a las 7:30 a.m, desde el Aeropuerto Internacional de Konoha. Por cierto, cuando lleguen habrá alguien esperándolos allí.

-¿Desde cuándo esta aldea tiene aeropuerto? –Preguntó Sasuke, quién no había articulado palabra desde que llegaron.-

-Pues... Desde que dejé de gastar los fondos en la lotería ^^. No se quejen, siéntanse los más afortunados, pues viajarán en el vuelo inaugural del aeropuerto, o sea ¡El primero! ^o^

-Oh genial… Y se supone que eso es bueno… -Masculló Sakura, por lo bajo.-

-En fin, basta de palabreríos. Se me van yendo porque tengo una cita con el pedicuro, para tratar mi juanete y mis uñas encarnadas ^^. Tengan mucho cuidado con la gente de allá, son amables, pero puede que tengan doble cara… Nos veremos a su regreso… ¡Ah! ¡Y no olviden traerme un recuerdo! ¡Chahito!

Tsunade empujó a nuestro equipo hacia afuera, quienes luego de mirarse, extrañados y confundidos, decidieron bajar y platicar afuera…

Mientras tanto, Shizune, que había presenciado la situación desde la habitación contigua donde había estado limpiando, salió con una escoba y le preguntó a su maestra:

-Tsunade-sama, ¿De veras cree que ellos son los más poderosos para llevar a cabo esta misión?

-¡Jajaja! Pues de hecho le había encomendado esto al grupo de Gai Maito, ¡pero en cuanto oyeron el nombre del sitio, salieron corriendo y gritando como nenas! –Pensando.- Excepto Ten Ten, que quería perfeccionar su técnica con armas punzo-cortantes… Pero ya sabes cómo es la vida, mi querida Shizune

Ambas rieron enérgicamente luego de las palabras de Tsunade, mientras se preparaban para volver a sus quehaceres.

-Bueno… ¿Qué más puede pasar en el día de hoy? –Expresó Kakashi, suspirando resignado.- En fin, muchachos, ¿Qué les parece ir por un tazón de Ramen? Yo invito ^^

-¡Pero por supuesto! ¡No lo dudo ni un instante! –Exclamó el rubio.-

-Qué amable, sensei ^^.

-De hecho… Yo prefiero regresar a casa… Tengo cosas que hacer…

-¡Pero Sasuke…! ¡Anda, será divertido! ¡Ven con nosotros! –Insistió Sakura.-

No, gracias…

Cuando estaba alejándose, Sakura lo tomó de la muñeca y lo obligó a detenerse. Era cosa inevitable de ella hacer eso cada vez que Sasuke rechazaba una propuesta. Éste, casi involuntariamente se zafó del agarre de la chica, soltándose torpemente y volteando a verla, con ojos de impaciencia:

-¡He dicho que no, Sakura! ¡Y no tengo que darles ninguna explicación!

Dicho esto, el azabache se alejó lentamente del lugar, dejando a una perpleja Sakura, mirándolo tristemente y con los ojos vidriosos… ¡Cuánto le dolía cada vez que el muchacho que le robaba los suspiros la rechazaba de tal manera!

Naruto se molestó bastante con la actitud del Uchiha, y sin pensarlo tomó a su compañera del brazo, mientras le proponía que se fueran de una vez.

-Ya sabes cómo es él, Sakurita… No le hagas caso. –Le recordó, mientras caminaba con los ojos cerrados y los brazos detrás de la cabeza.- Después de todo tú siempre te pones triste por culpa suya, y a él no le importa…

-Lo… Sé…

Para Kakashi, ésta era una situación más que ordinaria en su pequeño grupo, por lo que nunca interfería, y sólo dejaba que ellos hicieran lo propio.

Cuando llegaron a la tienda de Ichiraku, los ánimos ya se hubieron calmado, y afortunadamente pudieron disfrutar de una cena entretenida y cálida, con lugar a los chistes y las charlas amistosas. A pesar de todo, a Kakashi le gustaba pasar tiempos con esos chiquilines insoportables…

Cuando terminaron, el sensei pagó la cuenta, les dio las buenas noches y se retiró del lugar, dejando solos a Naruto y Sakura.

-Ey Sakura… ¿Quieres ir por un postre? –Le propuso el rubio a su compañera, sonriendo radiantemente.- Anda, yo te invito.

Sakura lo dudó un momento, pero al final aceptó. Cuando se ponía a pensar, la única persona que la hacía sentir bien era Naruto… Siempre estaba de buen humor, y le sacaba una sonrisa con sus tonterías… Últimamente, su compañía le era muy grata y le gustaba estar con él… Algo que a ella misma le resultaba extraño… Ya no sentía ese gran desprecio hacia él, que la caracterizaba hace algún tiempo atrás. Ahora, cada vez que lo pensaba, no encontraba motivo para justificar su tonta actitud…

El muchachito rubio acompañó a la niña hasta su casa… Cuando estaban en la puerta, Sakura lo miró tiernamente por un momento, mientras le agradecía el buen momento que habían pasado…

Naruto, algo nervioso, esperaba en verdad algo más de parte de su amiga… Aquella muestra de afecto que tantas veces trató de conseguir en vano. Ansiaba que los labios de esa kunoichi se posaran en los suyos…

Pero la puerta que se cerraba frente a sus ojos lo hizo despertar de su fantasía… ¡Que iluso soy al pensar que ella se besaría conmigo…!

Sin embargo, cuando estaba a punto de darse la vuelta para marcharse, esa puerta volvió a abrirse, mientras la muchacha de rosados cabellos salía, acercándose a Naruto lentamente, y sin vacilar le dio el tan esperado beso en su mejilla izquierda, provocándole un gran sonrojo, seguido de un recurrente estremecimiento en su estómago…

Transcurrido esto, nuestro protagonista se marchó a su hogar, de más está decir que muy feliz y satisfecho.

Fin Cap. 1
_________________________________________________________________________

NOTA: Habrá romance, sí. Pero dejaré que ustedes saquen sus conjeturas sobre la pareja conforme transcurra la historia ;). Saludos!

 

Bueno... Aunque no recibí comentarios, subo el siguiente capi. Ojalá les guste.
_______________________________________________________________________________

Cap. 2: “Un viaje con Chanta-tour”

La mañana siguiente los recibió a todos con un ligero fresco, propio de aquella estación del año, pero no por eso molesto o incómodo. Los tenues rayos de sol comenzaban a asomarse, demostrando un día más que perfecto para tomar un vuelo en avión.

Un grupo de 4 personas se encontraban vacilantes frente a las puertas transparentes del extenso lugar, con una mezcla de confusión y duda en sus mentes; acompañada claro, de esa somnolencia tan incómoda que no nos permite desenvolvernos con naturalidad a tales horas de la mañana. Para su gran asombro, el famoso aeropuerto atestaba de gente, como nunca lo hubieran imaginado: hombres con traje y maletas entraban y salían normalmente, mientras automóviles en cantidad daban vueltas en busca de un lugar para estacionarse.

Este sitio había sido construido extraña y velozmente a las afueras de la villa, más específicamente fuera de sus límites, para que no se interfirieran las tareas diarias.

-Bien… Acá estamos. En el… “Aeropuerto Internacional de Konoha” –Anunció Naruto mirando hacia arriba con asombro.-

-Qué extraño… -Murmuró su compañera.- Para ser “el primer vuelo” hay demasiada gente… Todo esto es tan raro. Tsunade es una bruja -.-

-Mejor dejemos de perder el tiempo y entremos de una vez. Tengo que hacer sus papeleríos y no es nada bonito –Les recordó Kakashi.-

El lugar era realmente enorme e intimidante. Kakashi se dirigió a los mostradores a registrarlos. Allí, la señorita miró por encima de su hombro y notó a los tres chicos que viajaban con él…

-¿Son sus hijos señor… Hatake?

-Gracias al Cielo que no…

-Aha… Y dígame, ¿Cuántos años tienen esas criaturas? –Preguntaba, mientras anotaba en una planilla y sonreía radiantemente.- ¿A dónde se dirigen?

-Pues… Todos tienen 12 años, y vamos a… El Extraño Reino… Digo, a la Aldea Escondida entre los Limones.

-Muy bien señor Hatake, tenga sus pasajes a mano. El avión parte a las 7:30. Y ¡Felicidades! ¡Ustedes son los afortunados en viajar en el vuelo inaugural! –Mientras decía esto, la mujer le colocó a Kakashi una guirnalda con flores de colores en el cuello. Cuando él se hubo retirado, la empleada tomó un radio y habló: -“Le informo de un caso A-350, pedófilo lleva tres niños a su ciudad, capitán. Intercéptenlo cuando llegue… Sí, lo sé señor. No… No podemos poner en riesgo el bienestar de los demás pasajeros… Sí señor. No… Probablemente los lleve para prostituirlos…”

Nuestros protagonistas se sentaron a esperar su vuelo. A medida que el tiempo transcurría, sus estados de ánimo empeoraban y el aburrimiento estaba a punto de carcomerlos…

Así pasó el tiempo, y luego de DOS HORAS de retraso…

-¡AHHHHHH! –Gritó Sakura.- ¡KAKASHI SENSEI! ¡DOS HORAS, DOS MALDITAS HORAS! ¿¡ESTO LE PARECE RACIONAL!?

-Tranquila, Sakura. Por dos simples horas no puede ser el fin del mundo –Trató de calmarla, sonriendo alegremente.-

Mientras tanto, del otro lado de los asientos se encontraba Naruto dormido, ocupando así tres de ellos, lo que causaba un gran disgusto en los otros pasajeros.

SU ATENCIÓN POR FAVOR, EL VUELO NÚMERO 1 CON DESTINO AL EXTRAÑO REINO DE TUCULANDIA (Un gran ventanal se quiebra en pedazos) ESTÁ A PUNTO DE DESPEGAR. SE LES RUEGA A LOS SEÑORES PASAJEROS DIRIGIRSE A LA ZONA DE ABORDAJE.

-¿Lo ves? ¡Ahí está, vámonos! –Ordenó el sensei, tomando su equipaje y a Naruto.-

Al pasar por la zona de controles, el detector de metales comenzó a sonar estrepitosamente, anunciando que Kakashi portaba objetos no permitidos.

-Lo sentimos señor, pero deberá deshacerse de esas armas si quiere abordar.

-¿Pero qué acaso es idiota? ¡Estamos en Konoha! ¡Portar armas es un deber!

-Lamentamos que tenga que pasar por esto, pero si quiere viajar deberá dejar esas armas.

En la décima fracción de segundo en la cual el hombre decía estas palabras, Kakashi pudo notar como sus ojos se desviaban casi imperceptiblemente hacia sus bolsillos. Entonces pudo comprender lo que el guardia tramaba:

-Oh… Comprendo –Anunció en voz baja, y entonces extendió su mano hasta el bolsillo derecho y sacó un fajo de billetes.-

-(Contando los palos) Me temo que no es suficiente –Repuso el guardia.-

-¿¡Cómo que no es suficiente!? ¡Usted está tomándome el pelo!

-Sin dinero, no pasa. Dese prisa o perderá el vuelo. Además, sus pequeños ya están en el avión –Comentó con malicia.-

-¿Pero cómo hicieron para…? ¡Oh, de acuerdo! ¡Aquí tiene!

-¡Jajaja! Hoy me levanté de buen humor, así que puede pasar, señor. –Finalizó el sereno, guiñándole un ojo perversamente.-

Kakashi se tele transportó a la fila de ingreso al avión, dónde otros 15 minutos más lo retrasaron, debido a una escandalosa mujer que aseguraba que Kakashi la estaba acosando sexualmente; luego un niño de 5 años pateó sus genitales con la excusa de que “quiso quitarme mi calamelo”; y finalmente, fue mordido por el perro policía que olfateaba en busca de explosivos.

¿Qué más podía suceder…?

MUY BUENOS DÍAS SEÑORES PASAJEROS, LA EMPRESA DE VIAJES Y TURISMO KONOHA’S TOUR LES DESEA UN FELIZ VIAJE.

-“¿Ya está todo listo para el despegue, capitán?

-Todo listo, comandante… Oh… Espere un segundo… ¡Oh, no! ¡Esto no puede ser! Olvidé mi gorra de capitán… No podemos despegar

-¡Pero que desgracia, señor! Yo avisaré a la gente… ¡No podemos despegar hasta que no la encuentre! ¡Esto es terrible!”

SE LES INFORMA A LOS SEÑORES PASAJEROS QUE EL VUELO QUEDA SUSPENDIDO HASTA QUE EL SEÑOR CAPITÁN ENCUENTRE SU GORRA. PEDIMOS DISCULPAS POR LOS INCONVENIENTES OCASIONADOS.

-¿¡QUÉ¡? –Gritaron frenéticos los pasajeros.-

-¡Madre Santísima! ¿¡Acaso esto puede ser posible!? –Exclamó el peliblanco, tirando su cabello en señal de desesperación.-

Y así transcurrió media hora, en la cual los clientes ya no supieron qué inventar para entretenerse. Los hombres de negocios hacían cuentas y proferían insultos cada minuto. Las señoras gordas se apantallaban, con aires de importancia, mientras largaban comentarios sobre lo caras que eran sus prendas… Y finalmente, Naruto peleaba violentamente con un niño por su videojuego.

SE LES INFORMA QUE EL VUELO ESTÁ A PUNTO DE DESPEGAR. POR FAVOR, MANTENER APAGADOS CELULARES U OTROS OBJETOS QUE PUEDAN INTERFERIR CON EL DESPEGUE. ABROCHEN SUS CINTURONES Y ASEGUREN LA MÁSCARA DE OXÍGENO.

Luego de tres horas de vuelo…

SU ATENCIÓN POR FAVOR, EL VUELO NÚMERO 1 ESTÁ A PUNTO DE LLEGAR A SU DESTINO FINAL: EL AEROPUERTO DE ALASKA. SE LES RUEGA MANTENER EL ORDEN Y ABROCHAR SUS CINTURONES EN CASO DE TURBULENCIAS.

El rostro de los indignados pasajeros se puso de todos los colores habidos y por haber… Después de tantas penurias tenían el descaro de haberlos traído hasta Alaska… De más está decir que un estruendoso coro de insultos y gritos retumbaba por todo el avión.

Cuando arribaron, Kakashi usó su jutsu para infiltrarse en la cabina del capitán, para darle una lección que nunca olvidaría… Éste se encontraba bebiendo una enorme taza de café caliente con rosquillas, a diferencia de los demás que tiritaban de frío.

-¿Qué pasará Kakashi sensei? –Preguntó el rubiesito a su tutor cuando hubo regresado a su asiento.-

-No te preocupes, Naruto. Muy pronto estaremos en La Aldea de los Limones –Comentó Kakashi, sonriendo tranquilamente.-

-¡Sí! ¡Y se supone que ahora nos enviarán a la Polinesia! –Exclamó Sakura, irónicamente.-

Así concluyó el truculento viaje… Al parecer todos habían acertado al predecir que el primero sería el peor… Dando gracias al Cielo por haber arribado vivos y enteros, nuestros protagonistas comenzaron a buscar con la mirada al misterioso servidor que los esperaría allí…

Cuando lo hallaron, un juego de miradas cómplices se cruzaron entre el peliblanco y el personaje encapuchado que sostenía un cartel entre sus manos. Cuando Kakashi se precipitó a su encuentro, una robusta figura se interpuso en su camino, deteniéndolo:

-Con permiso señor. Llevo prisa –Advirtió el sensei.-

-Usted no irá a ninguna parte, caballero. Queda arrestado por tráfico ilegal de menores –Anunció, mostrando una placa y una identificación.-

El alarido de rabia que brotó de la garganta de Kakashi fue indescriptible… Un encolerizado sensei tomaba por el cuello a su apresador, ante las miradas de gran asombro y desconcierto de sus alumnos y de un chismoso público…

-Niños… -Murmuró Kakashi, apretando los dientes con furia.- Explíquenle a este amable oficial que YO NO LOS ESTOY SECUESTRANDO

Las carcajadas de los gennin empeoraron aún más el enojo de su maestro… Tentadísima, Sakura se acercó al espantado policía, y como pudo le explicó la situación… Finalmente, y para el alivio de todos, las penurias al fin terminaron… Ahora empezaba lo bueno ¡La misión! Kakashi nunca pensó que diría esto, pero ansiaba de manera urgente comenzar con lo mandado y sumergirse en una ola de jutsus y asesinos…

Con la voluntad ya por el piso, al fin se acercaron al informante misterioso, que tampoco pudo evitar reírse de la situación vivida minutos antes…

-Acompáñenme… -Susurró por debajo de la capucha.-

-“Esta persona es… Demasiado extraña…” -Pensaron los gennin simultáneamente, y mirándola con recelo.-

Fin cap. 2