Capitulo 1: Una nueva vida "Un año mas ha finalizado y empieza otro nuevo". apenas salió de la escuela y ahora tiene que volver a verla. Esto fastidiaba mucho a Charles, un chico prodigio de unos 17 años mejor conocido en su escuela como "el genio" su inteligencia era una bendición pero si supiera usar la otra mitad de su cerebro correctamente no tuviera tantos problemas con los maestros de su escuela. Una semana mas de vacaciones antes de ingresar a la escuela de nuevo, pero su nuevo año escolar estaría lejos de su ciudad natal ya que su nuevo hogar sería la casa de su abuelo eso implicaba quedarse a estudiar en el pueblo. El abuelo de Charles era un viejo de sesenta años que vive de su vieja granja, pero para aquel viejito lo mas importante era Charles por el hecho de que era su único nieto y lo quería mucho a pesar de ser una persona fría y distante. Eran al rededor de las cuatro de la tarde, todas las cosas de Charles se encontraban empacadas en cajas. Estaba a punto de dejar su vida en la ciudad para marcharse a la granja da su abuelo Garreth. --No puedo creer que tenga que irme con el anciano. --se quejó mientras sacaba la ultima caja de su cuarto. --Vamos campeón. --dijo su padre animándolo-- se que es difícil para ti pero es un proceso necesario para seguir. --Si señor pubertad. --susurró el chico. Luego de acomodar la última caja en el auto se subió en la parte de atrás y se abrochó el cinturón, y con la compañía de su padre se fueron a la granja. Durante el viaje Charles pareció estar un poco deprimido, sus ojos estaban mas opacos de lo normal su cara estaba totalmente pálida y su cabello negro perdió aquel brillo al contacto los cálidos rayos del sol, esta vez era otra persona pero ¿Por qué? Vivir allá o acá le daba lo mismo. Esa sensación vacía en el pecho era completamente rara nunca en la vida había sentido algo semejante, en ese momento bajó la mirada hacia sus piernas y de sus ojos azules salió una lágrima. Ese detalle no pasó por desapercibido por el espejo del conductor ya que captó aquellas lágrimas que sin duda alguna eran de tristeza. Después de dejar su pena a un lado llegaron a la casa del abuelo Garreth, sin duda alguna era una casa muy bonita, además de que tenía un estilo muy campestre que iba a gusto con el lugar. --Papá --dijo el padre de Charles-- te dejo a mi hombrecito en tus manos. --"Ja ja ja que gracioso" --Pensó el pelinegro. --Charles, se que estás molesto por esto pero mientras estemos fuera te pido que por favor, te comportes. --Si si ya entendí. --le respondió el chico. El padre de Charles y... Charles sacaron las cajas del auto y las pusieron en la nueva habitación del chico. Luego de un rato de hombres el dichoso padre se fue a su casa dejando al chico totalmente indignado. --Bueno jovencito. --el abuelo tomó la palabra pero Charles lo interrumpió. --Ya me voy a mi habitación anciano. --dijo el pelinegro irritado. Garreth no dijo nada al respecto, su cara pintó una expresión de tristeza debido al comportamiento de su querido nieto. El pelinegro estaba en su habitación completamente airado, nunca se había sentido tan molesto, primero una sensación de tristeza invadía su corazón pero luego sintió ira. Una y otra vez se preguntaba ¿Por qué? Pero por el momento no había respuesta. Mientras que Charles soñaba con los ojos abiertos, dos golpes suaves provenientes del otro lado de la puerta. El pelinegro se levantó de su cama algo fastidiado, él abre la puerta como si nada y ve a su abuelo con una leve sonrisa. --Charles, ven baja ya está lista la cena. --dijo el anciano. --Esta bien abuelo Garreth. --dijo el chico acompañando a su abuelo hasta la mesa. Ahí se encontraba una figura femenina de unos 15 o 16 años sirviendo una sopa recién salida de la estufa. --Seguramente le gustará. --Dijo ella mientras terminaba de servir la sopa en los platos. Ambos hombres bajaron las escaleras hasta la mesa donde los esperaba una rica sopa. Aquella chica cuando miró a Charles enloqueció dando un grito enorme dejando casi sordos a los dos hombres. --¡Primo Charles! --dijo ella enganchada del cuello del pelinegro. --T... Tiffany. --dijo Charles casi sin aire debido a que su querida prima lo exprimía. --Primito querido, estoy tan contenta de verte no sabes lo mucho que te extrañé cuando el abuelo me dijo que estabas aquí hice una riquísima sopa solo para ti. --T... Tiffany, ya... suéltame. Después de quitarse a la chica de encima comenzó a comer tranquilamente, todo era en silencio nadie habló nada durante toda la cena y así fue hasta que terminaron. Inmediatamente Charles se fue a su nueva cama a dormir esperando lo que le traería en día de mañana en su nuevo hogar.