Kanagawa Kamakura

Tema en 'Prefecturas' iniciado por Amelie, 2 Noviembre 2020.

Cargando...
  1.  
    Amelie

    Amelie Game Master

    Sagitario
    Miembro desde:
    12 Enero 2005
    Mensajes:
    8,206
    Pluma de
    Escritora
    Sección abandonada de Kamakura
    (Takano; Yuzuki)

    Kato trató de recordar el filo del arma de Murai; Takano desvió un poco la mirada, una reacción a la vergüenza que le daba aquella nueva cicatriz que cargaría por el resto de su vida debido a ese hombre.

    —No tengo la habilidad necesaria para recrearla; pero sé de una persona que si puede hacerlo —mencionó recordando a aquel que fue su maestro. En ese momento un águila real volaba sobre Kato; al parecer el ave reaccionó ante la situación. La veían de lejos cuando eran niños; pero nunca la habían visto tan cerca. —Cuando recupere mi movilidad escribiré una misiva a una persona en Nagoya, te haré aviso por medio de Sangatsu — aquel era el nombre del águila

    No dijo mas, después Yuzuki le mostró la katana que encontró en el bosque; Kato la observó a detalle quedándose en silencio por un tiempo que puso incómodo a los presentes, incluso hizo a Matsuda preguntarse si ya se había paralizado por completo —Hace treinta y tres inviernos que no veía esa katana —mencionó mientras Takano se acercaba a observarla —perteneció a mi hermana Aoi. La dejé en el sitio donde ella tomó su vida.

    Takano lo observó con detenimiento, era la primera vez que escuchaba algo del pasado de su padre —¿Por qué Aoi Harima tomó su propia vida?

    —Estaba comprometida con Sogo Minamoto, y él regresó a Kamakura un día con su primogénito en brazos; esto hizo que Aoi se sintiera ofendida y desesperanzada, al parecer trató de usar el tanto tratando de realizar seppuku; fue incapaz y tomó sus propios venenos— Kato observó a Yuzuki — en el dorso de la espada grabé su jisei no ku; su poema que escribió en el umbral de su muerte —Yuzuki no había desenvainado la katana, así que no lo había visto aun —Anoche supe que este mundo es rocío, y desperté — aquello era un haiku bastante desgarrador —No soy capaz de recrear la katana de Murai, pero si puedo hacerle un abatanador a esta katana que encontraste; es un canal que recorre la hoja, en el podrás verter veneno así como lo hace la tan conocida katana de Murai, es tu decisión. Modifico esta espada o viajas a Nagoya por otra.

    Takano miró a la luna, no podía perder mas tiempo; aun debía terminar de organizarse con Kenzaburo en la entrada de Kamakura; miró hacia Matsuda —Por favor, ve por Shinrin, dile que mi padre la necesita; no le digas por qué, o será a ti con quien tome represalias — mencionó haciendo que Matsuda se alejara.

    Después Takano se dirigió a Yuzuki —Debo dejarte un momento aquí, mi misión aun no termina, debo organizar la estrategia con un nuevo grupo de investigación que saldrá esta noche de Kamakura, además de otro grupo de reclutamiento, debo hacer una misiva que enviar a Hideyoshi en Shizuoka antes del amanecer. Shinrin vendrá enseguida cuando Matsuda le avise de la situación de mi padre. —Mencionó ante ella como tratando de disculparse por que la debería dejar sola con Kato, pues sabía que aquello era incómodo para ella —Volveré al castillo al terminar; necesito tu ayuda nuevamente con mis heridas— mencionó avergonzado sin importarle mostrar sus sentimientos frente a su padre. Miró la katana en manos de Yuzuki para después mirarla a los ojos —No importa la decisión que tomes, te apoyaré — mencionó antes de irse, pues quería asegurarle a Yuzuki que merecía esa katana, siendo que perdió la suya por apoyar a su equipo.

    Después se alejó, nuevamente corriendo.

    —Takano debe mantenerse enfocado en su misión como estratega; al distraerse contigo lo hará perder esa concentración, llegará el momento donde su amor por ti comprometa una misión, eso es algo que puedo asegurarte —mencionó Kato con firmeza — Es por ello que yo no voy entrenarte, si lo hago estaré afirmando que acompañarlo es lo correcto, no lo es. No me negaré a ayudarte con tu katana, es el arma que ayuda a tu defensa personal; pero no te mostraré mi escuela, no estás preparada para ello. Si deseas aprender mis técnicas, será a manos de Takano en el momento en que él se convierta en maestro y pueda tomar esa decisión con su juicio propio. De esa forma será error de él y no mío; pues no quiero más sangre de los Minami en mis manos —miró la katana que le perteneció alguna vez a su hermana — Puedes tomar venganza por los tuyos en este momento, nadie podrá recriminarte por ello.



    • Ataque= 17
      Protección= 13
      pv=35





    [​IMG]
    Habitación Tao
    (Yin; Satou; Misato; Kuroki; Jiin)


    Jiin y Satou hablaron brevemente en privado, terminando con Satou haciendo una reverencia; mientras Jiin afirmaba.

    Mientras tanto Yin y Misato se terminaban de despedir al igual que Kuroki, pero Yin avanzó a su lado —Los Tao también partiremos esta misma noche, permítanme acompañarlos hacia la salida de Kamakura — mencionó mientras Satou y Jiin se acercaban a escuchar las palabras de Misato, y Yin.

    —Entonces partiremos esta noche —mencionó Satou preocupado por lo inesperado de aquel acontecimiento.

    —Así es, debemos reunirnos con nuestros hombres en Fukui e informarles lo antes posible de su asistencia en Shizuoka— aclaró Yin ante Satou.

    Mientras tanto Jiin observó a Misato y Kuroki —¿Mi hermano me necesita? Iré con ustedes para saber por qué quiere moverme de Kamakura — mencionó confundido.

    Así todos se dirigieron a la salida de Kamakura.

    Kuno Vizard Gigavehl
    continúen en Salida a Kamakura.



    Mazmorra
    (Taiyo; Mao)


    Murai tenía varias cicatrices en el torso; pero una sobresalía del resto, una parecida a la que tendría por el corte de Riku en su talón. Esa herida era profunda y muy cercana al corazón.

    Las palabras de Mao eran claras ante los oídos de Murai, cada palabra tenía un sentido especial; quería protegerlo, algo que nadie más haría, eso era cierto.

    "¡Por favor, Murai, colabora conmigo... Ayudame a restaurar mi propio Clan, Murai; con sus propias ideologías, metodologías y puede que hasta dioses únicos y desconocidos... me da escalofríos pensar que te mataran a ti y... como no sean capaces los otros de ver el tesoro que han conseguido..."

    La dejó hablar sin interrupciones, no parecía comprender a esa niña; se acercó a su oído y murmuró con una sonrisa completamente asquerosa, Taiyo lo miró con repulsión, pues no parecía estar diciendo algo amable.

    —Entonces, pequeña Kobayashi— comenzó a reír como loco —Ahora que sabes lo que haría contigo si no estuviera atado ¿Aun así quieres estar aquí junto a mi?—no dejaba de reir, algo que comenzaba a alarmar a Taiyo.




    Fuera de la mazmorra
    (Kirara; Riku; Takeda; Shinrin)

    Shinrin observó la seta y afirmó ante Riku —Puedo ayudarte con esto, sé perfectamente que es esta seta, seguro la has encontrado cerca del puerto ¿Cierto?— dijo con interés.

    Matsuda llegó corriendo a espaldas de Shinrin, estaba sudando, seguramente la había estado buscando por varios sitios antes de dar con ella, incluso tenía una mordida en el brazo, seguramente Matsuda si había ingresado a la herbolaria como un loco y Kiba lo atacó.

    —Shinrin... —
    Dijo tomando aire para proseguir —Tu padre te necesita; está en la sección abandonada de Kamakura —mencionó en voz baja, no tanto para no ser escuchado, sino porque le faltaba el aire.

    Shinrin miró a Riku —Te veo mañana temprano en la herbolaria — mencionó antes de salir corriendo en la dirección que mencionó Matsuda

    Takeda observó el brazo de Matsuda y se acercó alarmado, mientras Kirara también lo hacía siguiéndolo. Kirara lo atendió de inmediato.

    —¿Qué ha sucedido, Matsuda?—
    preguntó Takeda observando a Shinrin correr a lo lejos, para después volver a mirar el brazo de su amigo.

    —Oh, Meishu; nada de lo que deba preocuparse, en verdad. Ya Takano volverá a explicarle todo —
    sonrió —Creo que el merece darle las buenas noticias.

    Takeda sonrió mientras negaba —Gracias por atenderlo Kirara.

    Kirara afirmó para después acercarse a Riku y susurrarle —¿Sabes que ha pasado?

    Inosuke al verse privado de ese paseo prometido, se orinó en el pasillo.




    Afueras de Kamakura
    (Kenzaburo; Misato; Kuroki; Jiin; Takano; Clan Tao)


    Kenzaburo esperaba paciente a que los demás aparecieran; primero llegó Zeng y Ujihisa, quienes esperaron a su lado en silencio. Después llegó Takano quien se veía aun más cansado que antes. Por último llegaron Misato, Kuroki; Yin; Satou y Jiin.

    Takano observó a Jiin muy confundido —¿Tú que haces aquí? —preguntó osco.

    —Escuché que me estabas buscando— mencionó Jiin recordando las palabras de Misato en el castillo.

    Takano miró a Jiin, luego a Kuroki mientras cruzaba los brazos —¿En verdad Jiin te parece que es mi hermano menor? —dijo ofendido.

    Jiin miró a Takano, luego a Kuroki; entendió que buscaban a Rengo y por ello comenzó a reír —No culpes al muchacho; culpa a tu cara. Deberías de dejar de fruncir el ceño, por eso seguramente creyó que tú eras mayor que yo.

    Takano masajeó con fuerza sus cansados párpados y habló sin mirar a nadie —Fue culpa mía por no especificar —dijo hacia Kuroki —Vete Jiin, no te buscaba a ti, buscaba a Rengo— mencionó mientras Jiin se iba riendo fuertemente, humillando aun más a su hermano menor. Yin no pudo evitar sonreír mirando al suelo para evitar ofender a alguien con su reacción; mientras que Ujihisa se reía abiertamente. Los demás se mantuvieron con mayor seriedad posible.

    —Bien—mencionó Takano para cortar aquel malentendido— Si Rengo no está creo que serás tú, Kuroki; quien viaje al mando de Kenzaburo junto con Misato a la ciudad de Tsu; será un viaje largo. Kenzaburo les dirá las especificaciones —le entregó a Kenzaburo una misiva —No pierdan tiempo en Shizuoka, simplemente entreguen esto a Hideyoshi, será fácil rastrearlo.

    Takano se dirigió ante Zeng —Estaré al pendiente de ustedes, si requieren ayuda también háganlo saber, ya no están solos como clan, también cuentan con nosotros.

    Zeng afirmó con firmeza ante las palabras de Takano.

    —Ahora —mencionó hacia Misato —sigan el mapa que les di —también miró a Kenzaburo y Kuroki —bajaran de manera segura —Avanzaron hacia el pasillo.

    —Debo informarles a todos los presentes que el plan ha funcionado a la perfección— dijo Takano deteniéndolos antes de que se fueran —Kato ha sido derrotado— mostró la katana de Takeda, principalmente para que Kenzaburo la mirara orgulloso —Le haré saber a Takeda que los presentes hicieron lo posible para que esto regrese a sus manos — Takano hizo una reverencia ante los presentes —Esta ha sido una gran victoria para el clan, viajen orgullosos por este logro. Los veré en Shizuoka.

    Takano los vio partir antes de irse, bajar fue más sencillo. Llegaron a la puerta por dónde entraron, al salir por ella encontraron a Take, aquel hombre que cuidaba de sus caballos. Se los entregó deseándoles un buen viaje.

    Kuno Vizard Gigavehl rapuma
    Tiraré la lista para ver quien tira el dado de 10 caras de movimiento. Quien salga en esa lista, tire ese dado de 10 caras; puede ser en un post nuevo o simplemente en un post anterior. Ya para que viajen a Shizuoka, su primer destino para llegar a Tsu
     
    Elegir, al azar, de una lista

    De las opciones:

    • Kenzaburo
    • Kuroki
    • Misato

    Ha salido: Misato

    • Fangirl Fangirl x 3
    • Ganador Ganador x 1
  2.  
    Kaisa Morinachi

    Kaisa Morinachi Crazy goat

    Tauro
    Miembro desde:
    20 Julio 2015
    Mensajes:
    6,296
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mao
    Mazmorras --> Habitaciones

    Nadie verá jamás la expresión que retrate en mis facciones en cuanto escuché a Murai murmurar, murmurarle a mi oído, mientras me quedaba en un silencio sepulcral; no importaba que sintiera, me asemejé a una piedra.

    Ni dos segundos que terminó solté un gruñido gutural, irguiendome como podía, puños tensados.

    —¡No te rías, maldita y desgraciada escoria! —hablé con firmeza, pero la rabia hacia que mi voz fuera más sonora.

    Me quedé inspirando y exhalando con concentración, intentando no irme a algún extremo. Me crucé de brazos, decidida y mirándolo con seriedad.

    >>Tendré que hablarlo con Takeda, pero no te creas que será fácil; nadie está dispuesto a ayudarte acá.

    Tras eso me dí media vuelta, miré a Taiyo de reojo, para luego volcar todo mi frente en dirección a él.

    —Taiyo, ¿puedes decirle a Kirara que me dé hasta mañana, respecto a Murai? Hay un par de cosas que necesito hablar con mi líder Takeda—. Di un leve suspiro, pero nunca aparte la vista—. Kirara tiene derecho sobre él por atraparlo, pero Takeda por un tema más profundo que la búsqueda de venganza.

    Hablaba con solemnidad, porque era una de las mayores enseñanzas que me dejó Kenzaburo.

    >>Sí Takeda no derrota a Murai en el arte en qué este último sea bueno, significa que nunca podrá superar a su maestro; Hiro.

    Volteé en dirección a la salida, pero antes de avanzar dije una última cosa.

    —Superar a tus maestros es más importante que vengarte por ellos.

    Y me fui, serena y calma: Con la consciencia pulcra, despejada y organizada.


    Venía siendo hora de volverse un...

    hitodama
    Mis pies flotaron sobre el piso, esforzándome más que ninguna otra vez; ni cuando caminaba por los pasillos en busca de mis hermanos, ni cuando corrí por el santuario maldito de Tsu en busca de rescatar a Kenzo: Estaba siendo lo más sigilosa posible, porque necesitaba lograr lo que deseaba sin percances.

    Antes de entrar a las salas donde nos hospedábamos, busqué entre los pasillos y piezas del solitario castillo lo que necesitaría demasiado de ahora en adelante; hilos y aguja. Terminé por encontrar tres agujas de distintos tamaños y grosores, de hilos tan solo me lleve un ovillo blanco y fino, el otro era negro y grueso. Los escondí entre mis ropajes, también me llevé una tijera.

    Luego me dirigí al baño donde me había duchado dos veces ya y, como era de esperarse, las ropas de los Azai seguían tiradas en un costado del salón. Las tomé y con el mismo sigilo de siempre me encerré en mi cuarto. Me deshice de todos los objetos que tenía, y en cuanto observé el Daruma en mi mano derecha y el Tao en mi izquierda casi lloré; pero la pena no me llegó y simplemente desinfle mi pecho a ojos cerrados.

    Dejé todos mis implementos ordenados, y delante de estos el daruma junto al símbolo del taoísmo. Me pinché la muñeca con la aguja más gruesa, justo en la zona que sabía; me sacaría sangre, pero no me haría desangrar. Cuando hice eso, pinté la pupila que le faltaba con mi sangre; el otro costado aún estaba sucio, y no sé podría discernir independiente de cómo lo limpiará, y no había tiempo para limpiar el amuleto. Es más, lo prefería sucio.

    Y tras dejar todo lo que alguna vez fue mío, lazos incluidos, de manera ordenada y casi como un altar; con movimientos rápidos y precisos el ropaje que alguna vez me brindaron los Azai se convirtió en un gran bolso y una pequeña bolsa. El grande me lo eché a la espalda gracias a mi hombro, el pequeño lo amarre a mi cintura. Me quedé un momento en blanco, pensando en qué hacer. Por ende, cuando supe qué necesitaba, me deshice de mis prendas y empecé a editarlas a mi gusto; el yukata ahora había dejado de ser una prenda tradicional, se transformó en un traje de guerra, funcional. Mis rodillas estaban despejadas, y eso me ayudaría a correr. Con la tela sobrante confeccioné una capucha de muy mal gusto, pero era lo único que tenía a mano de momento.

    Todo hecho como sí no fuera nada más que una sombra, salí del lugar en busca de lo perdido; revisé todas las habitaciones que, sabía, no pertenecían al herborista, por lo que al segundo intento pude colarme en su habitación. Verlo dormir casi como un niño tan solo me sacó una sonrisa enternecida.

    Perdón, Heya; pero esto es más importante para mí que para tí. Aunque, bueno, siempre estuve dispuesta a robarle al menos una sonrisa.

    Me llevé solo las cosas que él le confiscó al asesino de los Fujiwara; cualquier cosa que hubiera intuido, le pertenecían a él desde antes, se las dejé ahí... En realidad no; me llevé un par de antídotos, o bueno, lo que pudiera: Soy médica, no herborista, no tenía idea de qué era qué, solo me dejé guiar por la intuición y lo que se veía peligroso.

    Tras eso y nunca dejando el sigilo más extremo de mi vida, salí del cuarto de Heya y me marché al patio del castillo. Me trepé al árbol más cercano a la mazmorra, el wue parecía tocar las nuevas de día, ubicándome en la rama gruesa más alta; esperando el momento indicado.

    Las jugarretas del destino no me impedirían salvar lo indefendible.

     
    Kaisa Morinachi ha tirado dados de 20 caras para Vil rata Total: 15 $dice
    Última edición: 1 Febrero 2021
    • Reflexivo Reflexivo x 1
  3.  
    Ikoma-kun

    Ikoma-kun Rolero, dibujante

    Virgo
    Miembro desde:
    8 Septiembre 2013
    Mensajes:
    2,240
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Misato Aoyama

    Observe el llamativo firmamento en Kamakura acompañado de la particular compañía de la luna, en el camino no solo solo ibamos Kuroki, Jiin o kenzo; el clan Tao también debía ir más allá de la prefectura para terminar de organizar su apoyo.

    Justo al llegar a la entrada, Takano y Kenzaburo esperaban pacientes, pero cuando vio a Jiin el estratega formó un rostro de contrariedad e indignación ¿Porqué? Jiin no era su hermano menor. Vaya vergüenza por tal error.

    Me alejé un poco cubriendo mi boca conteniendo la risa por la comparación de edad, algo que Ujihisa no pudo contener. Pues claro...Takano se refería en realidad a un chico llamado Rengo...¿Rengo?

    Por supuesto mi memoria remontó hasta la reunión con el equipo tactico en Shizuoka, en el Shukusha, precisamente en una mesa donde Yuzuki estaba cerca del muchacho...a mi parecer era un niño algo extraño, parecía tomar cierta cosas a la ligera tanto como mencionar la intención asesinar a Natsu, al cual ocasionalmente encontro luego de su desaparición de Tsu...¿Habría hablado en serio? ¿Cual era su motivo? Era difícil saberlo; pudiera ser algún tipo de broma de mal gusto por parte de un pequeño travieso.

    —¿Rengo sabía sobre temas espirituales?—pense recordando lo dicho por Takano, era una pena, pude haberlo convencido de ir hasta el santuario maldito y tendría respuestas fáciles con su ayuda...pero que remedio, el joven desapareció apartando dicha posibilidad.

    "Kato Harima fue derrotado"

    Las palabras de Takano detuvieron mi marcha y pensamientos, pose delicadamente ambas manos entrelazadas en mi pecho, la dicha de un trabajo bien hecho no tenía comparación, más si pudimos ayuda a nuestro líder.

    —No podía resultar de otra forma, el poder de nuestro clan reside en nuestra ¡lealtad y determinación!—comente con un par de aplausos y mirada de sosiego.

    >>Ya escucharon...sigamos con el orgullo en alto nos espera un largo viaje—avise al internarnos al oscuro bosque de la montaña está vez libre de peligros.
     
    Ikoma-kun ha tirado dados de 10 caras para Viaje Total: 10 $dice
    • Ganador Ganador x 4
  4.  
    Zireael

    Zireael Equipo administrativo Comentarista empedernido

    Leo
    Miembro desde:
    27 Agosto 2011
    Mensajes:
    10,653
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Yuzuki Minami
    Calles de Kamakura | Sección Abandonada

    Me mantuve allí en espera de sus respuestas, en silencio, y observé al ave que lo sobrevolaba en reacción a lo que ocurría. ¿Era suya? La pregunta no tardó en responderse.

    Sangatsu.

    El silencio que lo dominó cuando observó la katana me hizo pensar que quizás ya había quedado completamente paralizado, pero cuando respondió un escalofrío me recorrió la espalda. Ni siquiera presté atención a la pregunta de Takano.

    Desde que llegamos... Desde que la intercambié con Shinko, había cargado conmigo la katana de alguien que había acabado con su propia vida como los Minami.

    Tragué grueso al escuchar su motivación y desenterré el arma del suelo con movimientos casi cuidados, como si tuviese visa propia y me diese terror lastimarla. La alcé para leer en ella el jisei no ku que acaba de recitar Kato, no pude evitar arrugar los gestos.

    Cuando estaba por responderle a Kato la voz de Takano llamó mi atención, él todavía tenía un montón de cosas que atender y aunque no tenía demasiadas ganas de quedarme sola con Kato, no había de otra, así que asentí a todo lo que acababa de decirme.
    Lo que más que preocupaba era tratar sus heridas apenas fuese posible.

    Su mirada viajó de la katana en mis manos a mis ojos antes de que dijese algo más.

    Dioses, eres un estúpido.

    ¿Apoyarme incluso si decido irme a Nagoya para replicar el colmillo que casi acaba con tu vida?

    Kato volvió a llamar mi atención y estaba vez aunque quise mantenerme firme, lo cierto es que retrocedí medio paso cuando habló. No se suponía que fuese él, de toda la gente, el que diese semejante sentencia.

    Que Takano sentía amor por mí.

    El resto de sus palabras sí fueron propias de su persona. Su voz se revolvió con la de mis pesadillas, la de mi padre diciendo todo aquello de muerte y desesperanza en relación con los Harima.

    Regresé la katana de Aoi a su saya, de nuevo con el cuidado que la había tomado de la tierra, y conecté mis ojos con los de Kato.

    —Un viejo guerrero en Iwakura me dijo algo parecido... O al menos así lo interpreté. —Hablaba con una calma que no sentía en ese momento—. Está bien, entiendo. Que sea él quien lo decida cuando sea el momento y si se equivoca, si nos equivocamos, bueno...

    Habremos perdido la partida.

    Retrocedí un par de pasos más para sentarme en el suelo y permitirme tranquilizarme un poco por lo menos. Andar de un lado para el otro con Asakura, escuchar a Takeda y ahora estar hablando con Kato me tenían bastante cansada.

    —Iré a Nagoya —sentecié—. No pienso modificar una katana como esta, que perteneció a alguien que tomó su vida.

    Se me formó una sonrisa bastante sin gracia en los labios.

    —Cuando llegamos a Kamakura te habría abierto el cuello de lado a lado, como tú atravesaste a Rengo, incluso a costa de mi vida. —Lo dije así nada más, como si ese hombre de no ser por la parálisis no pudiese abrirme en dos en un pestañeo—. Posiblemente el primer día aquí todavía lo habría considerado, ¿pero ahora? No forma parte del plan como lo organizó Takano. Hemos recuperado la katana del señor, te he pedido los favores que me interesaban y has accedido a dos de ellos, reconociste a tu hijo y a nosotros... Tampoco seré tan codiciosa hoy. Además, esa misiva a Nagoya no se enviará sola, ¿o sí, Kato?
     
    • Ganador Ganador x 2
  5.  
    Monpoke

    Monpoke Absol

    Géminis
    Miembro desde:
    6 Julio 2016
    Mensajes:
    3,413
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Riku

    Por el comienzo logre lo que quería de asegurarme una hora por la cual ir a la herbolaria. Me aseguraré de estar ahí a primera hora.

    Luego todo un curso en cual me faltarían varias partes con tal de entender.

    "No del todo". Le regreso en susurro a Kirara, mantengo mi cuerpo quieto. No queriendo llamar la atención de nadie extra. "Le sucedió algo al padre de Shinrin en la sección abandonada de la ciudad y, suponiendo que la llamaron a ella, es probable que sea en relación a una herida... o venenos". Fui reuniendo lentamente las palabras escuchadas, agregando además de lo que se de la persona convocada.

    Le doy un leve vistazo a la expresión del recién llegado. Agitado y cansado, pero sonriendo. Sin ver lo sucedido como una tragedia o un suseso inesperado.

    Dejo ir una pequeña ricita al conectar esos pocos puntos. "Nos perdimos de algo". No lo digo sintiendome herido o ofendido, simplemente lo acepto. No ser incluido en uno o dos planes no es peor que podría pasar.

    "¿Quieres que vaya a ver un poco a escondidas?". Le ofrezco un pequeña sugerencia de ir y comprobar los restos de lo sucedido. "O, si debería sugerir, es mejor si seguimos con lo nuestro, todo puede llegar a extenderse demaciado".

    Aunque es probable se nos explique todo a su momento.
     
    Última edición: 1 Febrero 2021
    • Adorable Adorable x 1
  6.  
    Amelie

    Amelie Game Master

    Sagitario
    Miembro desde:
    12 Enero 2005
    Mensajes:
    8,206
    Pluma de
    Escritora
    Sección abandonada de Kamakura
    (Yuzuki)

    Kato mantuvo la vista en Yuzuki, cada movimiento, cada palabra. No podía moverse, cuadraba perfecto con su siempre inamovible fachada, difícil de descifrar; pero cada vez la sombra de Kato Harima se hacía más palpable, ahora podían tener al menos una conversación, algo que jamás habían tenido.

    —Rengo es un peligro; así como lo fue su abuelo antes que él. Así como lo fui yo —mencionó ante Yuzuki — Tomé la vida de mi padre del mismo modo que debí tomar la de Rengo; perder la cordura lentamente es algo que no se puede ver desde uno mismo, tienen que ser los demás quienes detengan ese declive. Jamás comprenderé su actuar; pero entiendo su fuerza y su gran debilidad—clavó su mirada ante Yuzuki — Es terco, mentiroso, demasiado emocional; es por eso que es manipulable, es por ello que camina hacia su propia desgracia. Y la encontrará; como lo hizo su abuelo.

    —Podía haberlo matado; pero no lo hice. Él pudo haberme hecho daño, no lo hizo. Ninguno está de acuerdo con los métodos del otro, aun así respiramos el mismo aire—
    mencionó mirando hacia el frente, escuchando los pasos acercarse —Porque Rengo es más listo de lo que aparenta. Yo jamás dejaría que alguien como él tome el lugar de Takeda, y él lo sabe, por eso lo hace. Su rebeldía lo mantiene alejado de mi, y aun así regresa a mi buscando aceptación —miró nuevamente a Yuzuki, su mirada siempre fría y dura —esa es su debilidad, busca amor en dónde jamás lo va a encontrar.

    Shinrin llegó y observó a su padre, sabía perfectamente lo que había sucedido, revisó sus bolsillos y al notar la falta de elementos, su semblante cambió a odio. Miró a Yuzuki, estaba enojada por lo que veía; pero rápidamente suavizó su expresión con ella, pues también estaba en deuda con ella.

    —Después me tendrás que explicar Yuzuki —mencionó mientras se colocaba debajo del brazo de su padre para sostener su peso, así se lo llevó lentamente. Kato jamás soltó sus katanas.





    [​IMG]



    Patio del castillo
    (Takeda; Mao)


    Takeda caminó por el patio después de haber hablado con Kirara cerca de la mazmorra; se detuvo a contemplar el jardín que crecía salvaje, sin demasiado cuidado; se agachó a mirar unos setos y observó la vegetación, aquello siempre lo tranquilizaba. Sonrió mientras recordaba las palabras de Kenzaburo "ve y habla con una planta" eso parecía estar haciendo en esos momentos.

    Mori si quieres hablar con Takeda es tu momento.
    El robo de los venenos se da por tu sigilo, pero si buscas robarle algo más del inventario de Heya si necesitas tirar tu dado de 20 caras y sacar 15 o superior, puedes lanzarlo en tu post anterior o en el siguiente.


    Fuera de la mazmorra
    (Kirara; Riku; Takeda)

    Kirara negó ante Riku —Takeda me ha explicado que llevaron a cabo un plan en dónde él tampoco fue requerido —mencionó mientras se cruzaba de brazos —Ya me escuchará Taiyo cuando haga cambio de guardia con él, al parecer nos ocultó información sobre la audiencia a la que fue — dijo para después sacudir su cabeza, como si aquello tirara los malos pensamientos.

    —Riku, ve a la habitación. Enviaré a Taiyo con ustedes, descansen. Pues mañana es un gran día para los Fujiwara. Takeda a recapacitado, Murai será ejecutado por la tarde, y serás tú quien corte ese cuello de tajo. Pues como te dije, no quiero estar allí y justo antes de morir, diga algo que me deje aun peor — decía apretando sus puños, recordando lo que Shinko mantenía en sí mismo.











    El equipo de Kenzaburo abandonó Kamamura, su equipo continúa en este post
     
    • Fangirl Fangirl x 3
    • Adorable Adorable x 1
  7.  
    Zireael

    Zireael Equipo administrativo Comentarista empedernido

    Leo
    Miembro desde:
    27 Agosto 2011
    Mensajes:
    10,653
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Yuzuki Minami
    Calles de Kamakura | Sección Abandonada —> Castillo

    Nunca había hablado con él, ¿cierto? Es decir, una conversación como esa no era algo que considerara posible entre Kato Harima y yo, bajo prácticamente ninguna circunstancia. En realidad responsabilizar al cansancio que cargaba encima, no tenía energía para pensar en algo como cobrar venganza por nadie en ese momento, mucho menos con el idiota de Takano dando vueltas por ahí sin haber atendido sus heridas.

    ¿Iba a arrepentirme algún día por no haberle abierto el cuello cuando no podía moverse?

    Quién sabe.


    Me mantuve sentada escuchando cada palabra que salía de su boca, había mantenido en mi regazo la katana de Aoi y presioné los dedos sobre la saya sin darme cuenta siquiera con forma seguía hablando. No tenía ganas de contradecir a Kato, mucho menos siendo el caso que enviaría la misiva a Nagoya con todo el asunto de la katana, pero en gran parte era porque me conocía a mí misma. Si me atrevía a argumentar en contra no habría quién me callara, tampoco quién me detuviera si al final lanzaba el agotamiento a un lado y me cobraba la sangre de mi familia.

    Fruncí el ceño cuando dijo que Rengo buscaba amor dónde jamás iba a encontrarlo, a la vez que rodeaba con más fuerza la saya de la katana en mi regazo. Sentí una correntada de ira bañarme el cuerpo y no tengo idea de cómo fui capaz de contenerla, aunque quizás fueron los pasos de Shinrin acercándose los que me impidieron hacer una imprudencia.
    Me levanté cuando la vi llegar, estaba molesta con obvias razones, pero aún así sus gestos se suavizaron al mirarme. No le quedaba de otra, ¿cierto? No después de lo de Takeda.

    —Mañana, ¿de acuerdo? Atiende a tu padre y procura descansar tú también cuando puedas —respondí a sus palabras—. Tengo que atender a Takano en el castillo.
     
    • Fangirl Fangirl x 1
  8.  
    Kaisa Morinachi

    Kaisa Morinachi Crazy goat

    Tauro
    Miembro desde:
    20 Julio 2015
    Mensajes:
    6,296
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Me salió 15 en el dado para el robo

    Chale, mi song para la Friendshipp de Kohaku&Mao :anicry::sadexo::anicry:
    Mao/Masuyo/Ryouma
    Patio cerca de las mazmorras

    Lo encontré, cerca del árbol donde estaba, lo encontré y mi cuerpo se movió solo, independiente de sí pusiera en juego mi plan con Murai. Takeda era importante, debía saber por lo menos algo. Bajé con sigilo hasta posicionarme en una rama cercana, pero siempre tratando de mantener oculta mi presencia.

    —Takeda... Mi ex-líder Takeda —hablé con voz, calma, respaldada en el tronco buscando la luna con mirada; la voz era grave, como la que fingí en el Shukusha; solo que ahora no fingía, la consideraba parte de mí—. Voy a tomar un camino distinto, un camino tal vez único; el camino de las sombras, el camino retorcido, el camino enturbiado... Pero Takeda, te prometo que haré todo lo posible para no corromperme, para buscar la paz.

    Y ahí bajé del árbol, apenas y haciendo que la tierra sonara bajo mis pies al pisar. Caminé sin prisa, con sutiles movimientos, cabizbaja y manos tras la espalda para luego encarar a Takeda. A un metro y medio de distancia más o menos, alcé la vista y le brindé una sonrisa compasiva, llena de ternura y la cabeza ladeada; manos tras mi espalda.

    >>Takeda... eres el único que me puede detener de hacer algo; Ni Kenzo, ni Takano, ni mucho menos Kato. Eres tú, Takeda, el único al cual yo le tengo la estima de...

    Desvie la mirada, sin bajar la cabeza, hacia mi lago izquierdo; donde no estaba el árbol del cual bajé.

    >>Una manera única, Takeda; eres el único que me ve como una niña... cuando... No sé—. Y mis ojos empezaron a lagrimear, y los hipidos bajos no se hicieron de esperar, para limpiar mis lágrimas con rapidez; pero sería imposible detenerme, así que entre gotas y respiraciones profundas, seguí hablado mientras trataba de que mi voz no fuera un escándalo—. Te quiero mucho, Takeda; más que a un padre, que a un líder: Más que a una buena persona.

    Me callé tras inhalar hondo, aparté los puños alrededor de mis costados y alcé el rostro; encarándolo con una expresión llorosa, si, pero la determinación no pasaba desapercibida.

    —"Sí el tronco sigue sano, nuevas hojas podrán resurgir" —volteé a ver al costado izquierdo otra vez, nunca demasiado des-atenta a todo lo que nos rodaba—. Se lo dije a Kenzo... o lo pensé con él justo antes de que encontráramos a mi padre, al cual di por muerto desde mis ocho años— Volteé se nuevo a ver a Takeda, ya sí había rastro de lágrimas, debía ser alguna ilusión, pues yo estaba lejos de sentirme como la llorona que fui hace unos pocos momentos—. Los Taira están podridos desde dentro, no tienen salvación; tú aún eres joven, eres fuerte y decidido, pero no sabemos aún cuánto tiempo más te puedas mantener así.

    Desvié otra vez la mirada a mi costado izquierdo.

    —Hay días, momentos, en que simple y llanamente pensaba que no era yo, que me movía por... No sé, ni sé cómo puede vivir tantos meses...— Suspiré pesado, dejando atrás el ceño fruncido con confusión. Cabizbaja y mientras me acercaba a mi líder, murmuré— estando muerta.

    Alcé la vista, y aunque me tuviera que poner de puntillas, mi mano agarró con firmeza el hombro de Takeda, el izquierdo, mientras mis ojos refulgian contra los suyos.

    >>Era la mayor de dos hermanos, niños de menos de 11 años, Takeda; y me los arrebataron—. Mi mano se tensó sobre su hombro, mi rostro mostró genuina furia; una calmada, centrada; una que nunca había visto Takeda, una que nunca había demostrado o simple y llanamente exteriorizado este último mes—. No delante de mis ojos, bajo mis leves dominios; los mataron y yo no puede hacer nada, los mataron y a mi madre no le quedó otra que matarse ella, o sí no sería un soborno para mi padre...

    Volteé a ver a la izquierda por completo, buscando intrusos. Quedé con la cara volteada y seguí hablando.

    —La gente nunca querrá morir, Takeda, y mucho menos matar a otro, pero sobre todo—. Volteé a mirarle, ya sin mejillas sonrojadas, labios temblorosos o ojos lamentamos por el llanto; seriedad absoluta, nunca soltándole el hombro—... No quiere estar sola, Takeda; alguien solitario, es alguien herido, maltratado, abusado y desprestigiado. A mi los motivos no me importan; me interesa las cosas que pueden causar esas personas desvalidas.

    Me alejé cuatro pasos entonces, para observarlo con determinación.

    >>Dile a Kuroki que su amigo está bien, y tema aparte; Kato y Murai están bajo mi protección y compasión, Takeda.

    Desenvainé mi katana, Ryouma, y apunté directamente hacia él; Minamoto no Takeda.

    >>Kobayashi no Masuyo, pero ahora soy una hoja al viento y mi nombre siempre cambia, ¿sabes que no cambiara? —solté solemne, pero tras decir lo último una sonrisa adornó mi mirada retadora.

    Me acerqué con la espada en alto, con una elegancia y estilo no tan comunes en mi persona; apacible y correcta, una postura ideal y firme: Era una alzada de katana formidable. En cuanto el filo amenazó con tocar el pecho de Takeda, solo fue necesario un movimiento de mano para que yo terminara ofreciéndole el arma; descansaban sobre mis dos palmas extendidas, haciendo una reverencia de 90%, le estaba dejando a su disposición la espada de mi familia. Aquella que había perfeccionado Fuji.

    Ya no solo mataba por un Clan muerto; brillaba por y gracias a los Minamoto, a los nuevos Minamoto.

    —Minamoto no Ryouma; dónde sea que escuches ese nombre, espero que sepas que no es un farsante, más que yo misma. Masuyo es el nombre de mi Clan, ahora que estamos reducidos a dos tan solo somos "Hideki y Masuyo" Pero se supone que a los ojos de los Taira estoy muerta, por lo que me gusta llamarme Mao y que otros me reconozcan con ese nombre.

    Me erguí como correspondía, para encararlo.

    >>Ryouma... No escogí ese nombre para fingir ser un chico, Takeda; fingí ser un chico para que no hubieran discrepancias con mi nombre.

    Solté una risa baja, desviando las mirada mientras me cubría el torso con el brazo, por apretar el otro con mi mano.

    >>Ni idea de cuánto es falso y dónde empieza lo real—. Me volteé a verlo, sonriente y alegre, a ojos cerrados—. Soy como un Yurei, un Kitsune travieso que te deja en bancarrota; soy el Tanuki escurridizo y...

    Abrí los ojos, sonriéndole con una mirada apacible, pero indescifrable.

    >>Soy mi bosque, mi pequeño bosque, porque soy una Kobayashi, aunque no desee cargar con ese peso enorme recaido en mis hombros.

    Desvié la vista, aún con la sonrisa ambivalente.

    >>Por eso soy tan egoísta y molesta —murmuré la conclusión.
     
    Última edición: 8 Febrero 2021
    • Fangirl Fangirl x 1
  9.  
    Monpoke

    Monpoke Absol

    Géminis
    Miembro desde:
    6 Julio 2016
    Mensajes:
    3,413
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Riku

    ¿Ejecutado? En ese corto tiempo donde me entretuve con Shinrin parece aprovecho a tener una pequeña charla con Takeda. Si es que pidió su opinión sobre que hacer con Murai, debe ser la razón por la cual llego a esa conclusión.

    Asiento con tranquilidad a su pedido. "Entonces, ten cuidado ahí abajo. Esperemos el día siguiente sea como estos, sin interrupciones importantes. Te veré mañana".

    Me detengo sobre mis pasos antes de comenzar a retirarme, pensando la posibles acciones de Murai. "Si habla antes de que realice el corte... ¿Debo informarte o mantengo el silencio?".

    Me acerco a ella para susurrarle al oído, un plan pequeño, simple. "¿Puedo hacerle un finta antes del corte final? Es posible no se espere esa. Quiero saber... si es posible deformar su expresión en ese último segundo". Saber si es capaz de mantenerse firme con el filo de la katana en el cuello. Tal como lo aparenta o de verdad no teme morir. Quiero saber la fortaleza de su voluntad.

    Me alejo de ella, soltando un pequeño suspiro mientras agrando la distancia. "No es una acción... honorable y quizás aproveche a burlarse de mí antes de separarle la cabeza del cuello. Ninguna de las dos me importa, lo que suceda solo me conciernira a mí . Entenderé si estás en desacuerdo, haré un corte sin trucos si así lo prefieres".

    No muestro malicia o deseo de venganza hacia Murai, como tampoco creer que encontraré placer en su sufrimientos. Quiero hacerlo porque es el tipo de muerte que se merece. Ser engañado.

    Tras recibir su respuesta me retiro a las habitaciones, llamando a Inosuke para ir conmigo.
     
    • Fangirl Fangirl x 1
  10.  
    Amelie

    Amelie Game Master

    Sagitario
    Miembro desde:
    12 Enero 2005
    Mensajes:
    8,206
    Pluma de
    Escritora
    [​IMG]



    Patio del castillo
    (Takeda; Mao)



    Takeda escuchó las primeras palabras de Mao con suma tristeza, no podía ocultarlo; sus emociones estaban muy expuestas debido a su plática con Yuzuki. Después llegó el llanto de Mao, mencionando cuanto lo quería, eso lo hizo nublar su mirada; no entendía que sucedía con Mao; pero los sentimientos eran reales. La dejó hablar pues el era incapaz de interrumpirla.

    [​IMG]

    Se acercó a ella, sus palabras eran fuertes, hablaba de sus confusiones, de su cruel pasado, haciendo que Takeda colocara su mano sobre la suya en su hombro. Aun sin hablar.

    Después habló de que Kato y Murai estaban bajo su protección; aquello no cambió el semblante de su triste mirada, no había odio en esos ojos. Mao apuntó su katana a Takeda, él estaba desarmado, aun así no buscó por reacción a Genji, confiaba en Mao, sabía que no le haría daño. Y así fue, le extendió su katana junto con su verdadero nombre. Takeda sonrió, aunque su mirada aun reflejaba profundo dolor.

    Tomó la katana y la observó mientras Mao terminaba de hablar, con la última oración Takeda levantó la vista hacia ella.

    Takeda se sentó en una roca e invitó a Mao a seguirlo; cuando ella se acercó comenzó a hablar sin separar su vista de la katana en sus manos —La katana es nuestra alma— miró a Mao —Sé que lo sabes.

    Colocó su mano en la cabeza de Mao—El cabello es nuestro pasado —dijo sacudiendo levemente su cabello, sonriéndole —Mao —mencionó el nombre por el que prefería ser llamada, su sonrisa se desvaneció —Yo he caminado el camino que tú ahora quieres caminar, corté mi cabello cuando tomé mi primera vida con Genji, mi katana —miró a la katana de Mao —Me dije a mi mismo que la soledad sentaba perfectamente conmigo, que no necesitaba un clan, era yo contra el mundo. Y no gané nada. Sólo acumular más tristezas, fue entonces que conocí a Fuji, a Matsuda y Yamagata, lentamente crecí y me sentí más fuerte que nunca. Y no fue por fuerza propia —miró nuevamente a Mao, con ojos humedecidos

    —Te digo esto porque ese camino de soledad nunca terminó; nada cambió Mao, sigo siendo el mismo niño, creció mi cabello, mi altura también. Pero ahora estoy peor que antes; sin katana, sin alma — se levantó de la piedra y se hincó ante Mao para extenderle su katana —Sé lo que es estar sin tu katana, Mao. Que me la entregues significa que estás dispuesta a olvidar lo que fuiste y eres; y eso no lo puedo permitir —mencionó con firmeza.

    —Eres fuerte, Mao —dijo aun con la katana en manos —Podrás decir que eres egoísta y molesta; pero yo veo fuerza dónde tú ves defectos, todos debemos crecer, porque debemos ser mejores que lo que fuimos ayer —nuevamente sonrió — Tu eres un bosque, lo has dicho bien; yo soy un árbol seco sin hojas, e incluso así, ese árbol da color a la montaña.

    Se levantó —Yo quiero ser como el bambú; crecer alto, moverme con el viento; porque la verdadera fuerza del bambú es su flexibilidad —volvió a sacudir ligeramente el cabello de Mao —Tú decides tu propio camino; pero te pido que no lo camines en soledad; siempre apóyate en mi, Mao— Takeda habló con seriedad.

    —Tu cabelle se ve hermoso así —mencionó para culminar con una sonrisa.



    Fuera de la mazmorra
    (Kirara; Riku; Takeda)

    Kirara observó a Riku —Si habla antes, no me digas nada. No quiero saber que dirá; me va a bastar con todas las tonterías que me dirá esta noche—mencionó mientras parecía pensar en la propuesta de Riku —Engáñalo si así lo deseas; si fuera yo quien impartiera la condena; lo amarraría a un árbol alto, esperando que el clima y su cuerpo lo maten lentamente— miró a Riku y sonrió —Iré a hacer guardia, ve y descansa

    Sin mas, avanzó hacia las escaleras, dónde cambió de guardia con Taiyo; quien subió y se incorporó con Riku e Inosuke para avanzar hacia las habitaciones.

    Habitación Fujiwara
    (Taiyo; Riku; Shinko; Inosuke)

    Shinko ya estaba dormido cuando Taiyo y Riku entraron, tratando de guardar silencio. Pero Inosuke entró ladrando y fue a molestar a Shinko chupándole la cara, este se despertó y acarició a can, mientras bostezaba.





    Habitaciones
    (Takano; Yuzuki; Jiin)

    Jiin y Takano descansaban fuera de las habitaciones. Jiin estaba tranquilo mientras que Takano estaba recostado en el suelo con todas las extremidades extendidas.

    —Sigo sin creerlo Jiin— mencionaba Takano.

    —Es una gran victoria hermano; deben de sentirse orgullosos— dijo Jiin golpeando uno de los pies de Takano.

    Escucharon los pasos en el pasillo y ambos se giraron al ver a Yuzuki —Menos mal estoy de su lado, no me gustaría que me cayera una lluvia de agujas — mencionó Jiin con una sonrisa —Iré por algo, no se muevan de aquí, enseguida regreso.

    Jiin se levantó cediendo su almohadilla a Yuzuki, después salió corriendo al segundo piso de las habitaciones.
    Takano miró a Yuzuki y sonrió levemente, algo que se permitía con ella; en especial hoy, pues estaba orgulloso.
     
    • Fangirl Fangirl x 2
  11.  
    Zireael

    Zireael Equipo administrativo Comentarista empedernido

    Leo
    Miembro desde:
    27 Agosto 2011
    Mensajes:
    10,653
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Yuzuki Minami
    Castillo

    Para cuando entró al castillo ya el cansancio del día le pesaba de manera evidente, sentía el cuerpo pesado, la cabeza en particular, pero aún así la emoción que sentía por haber logrado el plan era imposible de ignorar.

    No tardó en ubicar a Jiin y Takano fuera de las habitaciones, el segundo estaba recostado, extendido a lo que le daba el cuerpo y le hizo algo de gracia. El comentario de Jiin conseguió arrancarle una risa baja.

    —Ahora es que cuando Takano debería dar las gracias de que no le enterrara una aguja en el cuello para mantenerlo en la herbolaria la otra noche —añadió con tono de broma aunque iba en serio.

    Asintió a las palabras del mayor, no era que fuesen a moverse de allí de todas maneras. Cuando se levantó pensó en tomar asiento pero antes de cualquier cosa se arrodilló junto a Takano y se dedicó a revisarle las heridas y golpes visibles luego de regresarle la sonrisa.

    —Perdona por no haber ido al dojo a tiempo —dijo mientras seguía enfrascada en su tarea—. No tuve un despertar muy agradable y luego pasaron otras cosas, pero me alegra que alguien fuese capaz de tomar mi lugar incluso sin saberlo.

    Dejó las manos quietas un momento mientras dejaba salir un suspiro bastante pesado y después estiró la mano hasta posarla en el rostro de Takano.

    —Te lo mereces, esta victoria... Lo que dijo Kato. —Se inclinó hasta unir su frente con la de él, el cabello se desparramó los lados de su cuerpo y el resto lo soltó en un murmuro, no hacía falta hablar fuerte si estaba así de cerca—. Le pedí a tu padre que enviara la misiva a Nagoya.

    Se separó luego de decirle eso, para continuar en lo que estaba. Le sujetó el mentón con las manos, obligándolo a girar el rostro en una dirección u otra, asegurándose que estuviera en una pieza.

    —Pude haberlo matado hoy, paralizado como quedó —comentó luego de dejarlo ir para sentarse por fin en la almohadilla que había dejado libre Jiin—, él lo tenía claro porque sabía que querría matarlo. Pero en su lugar... Hablamos. Fue como charlar con Inugami de alguna manera.


    La intensa de los posts a la 1 am me llaman
     
    • Adorable Adorable x 1
  12.  
    Monpoke

    Monpoke Absol

    Géminis
    Miembro desde:
    6 Julio 2016
    Mensajes:
    3,413
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Riku

    Niego en silencio ante la acción de inosuke. "No sé cómo es posible que se quedará en la mazmorra todo el día". Tal vez lo hizo, en permanecer ahí todo el día, pero prefiero no imaginar cuánto escándalo abra echo.

    Voy y me siento en mí lugar de la noche anterior, espero por unos segundos mientras dejo que Taiyo se acomoda en la habitación.

    "Taiyo... Supongo estarás al tanto de la guerra que se llevará a acabo en Shizuoka... Ah, ese plan al parecer tuvo éxito". No le hablo de forma acusatoria por la probable información falsa de esa reunión, ese plan no es mí punto de interés.

    Me tomo unos segundos mirandolo fijamente, tomando aire tranquilo mientras me preparo para hablar. "Kirara y tú... ¿Califican como maestros? ¿Verdad?".

    "Hoy Kirara me mostró su ataque especial, Futatsunomichi, y me habló de su maestro que le impartió dicha técnica". Suelto un pequeño suspiro mientras bajo un poco la mirada. "Me hizo darme cuenta que no solo quiero balancear la katana de forma normal, quiero realizar algo más... Único". Mortal y útil.

    "No pido me me enseñen una técnica así, reconozco está fuera de mí nivel". Rechazo rápidamente parte de mis palabras anteriores. "Aún tengo que seguir entrando mucho para llegar a ese nivel de habilidad".

    "Pero...". Vuelvo a levantar la cabeza y miro a Taiyo, mostrándome algo esperanzado al verlo. "¿Hay algo que ustedes, como maestros, podrían enseñarme?".

    "Yo no pienso retroceder llegando a este punto. Deseo aprender y entrenar todos los días posibles, no me importa si todas son derrotas". Le doy un pequeña sonrisa hacía Shinko. "Quiero lograr en unos pocos días aquello que no logro en años de mí vida. Mejorar".

    Todo por apoyarlos, querer conocer todas mis opciones y aprovecharlas. No dejarlos en ridículos... No dejar a ninguno morir y defender mí voluntad.
     
    • Fangirl Fangirl x 1
  13.  
    Amelie

    Amelie Game Master

    Sagitario
    Miembro desde:
    12 Enero 2005
    Mensajes:
    8,206
    Pluma de
    Escritora
    [​IMG]


    Habitación Fujiwara
    (Taiyo; Riku; Shinko; Inosuke)

    Taiyo observó a Inosuke mientras Riku hablaba sobre él. Shinko, ahora completamente despierto escuchaba la conversación.

    —Me da gusto que el plan tuviera éxito —mencionó sin decir mas, no porque no planeara disculparse, sino que sentía vergüenza de haber ocultado información.

    Taiyo observó a Riku ante la pregunta —Así es, Kirara es maestra de del estilo Furaingukatto, del mismo modo que el joven Minamoto; ambos lo aprendieron de Hiro Sugita — se detuvo antes de proseguir, parecía nervioso.

    —Mi técnica no es la misma que la de Kirara; mi maestro fue mi padre— mencionó mientras observaba su katana, extrañaba su viejo filo, ese que Kirara destruyó —Mi katana era lo único que me quedaba de él —suspiró apesadumbrado, haciendo que Shinko colocara su mano en su rodilla, de manera conciliadora. Taiyo le sonrió — La perdí pero gracias a ello logramos capturar a Murai, así que ganamos algo con su sacrificio.

    Después observó a Riku, en su mirada había gran determinación —Ya conoces el Futatsunomichi de la escuela Furaingukatto-ryu; ahora entrenarás conmigo y conocerás mi técnica, Hinode— mencionó mientras dejaba la katana a un lado — Kirara me dijo que era momento de contarte el secreto que guardan los Fujiwara. Te lo diré cuando terminemos ese entrenamiento, después de que veamos rodar la cabeza de Murai.

    Monpoke
    Ya voy a cerrar la noche con esto; puedes contestar o simplemente esperar a que abra el día.



    Habitaciones
    (Takano; Yuzuki; Jiin)

    Takano se sentó al escuchar su primer comentario, no sabía que aquella noche en la herbolaria, Yuzuki estaba armada por si él desobedecía el reposo impuesto por ella y Shinrin. Alejó el pensamiento al ver que comenzaba a atender sus heridas, algo que ya parecía una rutina entre ellos; después escuchó su disculpa por haberse ausentado en el dojo.

    —Deberás explicarme dónde estuviste —dijo con burla, para después volver a un semblante serio —Lo cierto es que fue mejor que no te presentaras al dojo —mencionó seco —Si lo hubieras hecho habría tenido que pelear contigo, sabía que esa era la posibilidad impuesta por Kato; estaba seguro que estaba preparado para hacerlo y así llevar a cabo el plan a la perfección; pero cuando pelee con Kenzaburo me di cuenta que no hubiera sido capaz de llegar a los límites que llegué contra él contra ti—miró a Yuzuki —Tus instintos superaron mi planificación Yuzu; hubiera fallado si Kato me obligaba a derrotarte, ahora estoy seguro de ello— Takano desvió la mirada.

    La mano de Yuzu lo obligó de nuevo a mirarla, sus palabras le hicieron sentirse orgullos, iba a decir que el trabajo había sido en equipo, que él solo no lo hubiera logrado, pero perdió el hilo de sus palabras cuando ambas frentes estaban unidas; sintió el fuego quemarle la cara mientras Yuzuki le decía lo que había decidido. Lo obligó a girar el rostro, mientras el se dejaba manipular sin protestas, pues estaba más preocupado en que su mente se mantenía en blanco, era extraño para él no estar pensando a futuro.

    "Pude haberlo matado hoy, paralizado como quedó"

    Si, pudo haberlo hecho; y él lo sabía, y aun así los dejó solos.

    "Fue como charlar con Inugami de alguna manera"

    Esas palabras lo hicieron fruncir el ceño; su estado natural.

    —Ambos igual de molestos —mencionó recordando a aquel hombre que lo había derrotado; luego recordó a Murai. Las derrotas se le estaban acumulando; pero la victoria con Kato lo llenó de nuevas energías, además de mayor confianza a los integrantes del clan que ayudaron. Nuevamente se dio cuenta que los pensamientos a futuro regresaban a él; miró a Yuzuki, pues debía decirlo.

    —Eres en la persona en la que más confió, Yuzu. Sabía que podía dejarte con él, debía hacerlo. Pues sé lo que cargas; sé lo que sientes hacia mi padre —mencionó con firmeza —Antes no le temía a la muerte. Si sucedía era porque mis planes habían fallado y ese era el resultado de mi debilidad —mencionó mientras masajeaba su cuello — Cuándo pelee en Iwakura me di cuenta que no quería morir, no mientras tú mirabas; en ese momento pensé que me gustaría verte alejada de toda guerra, así no tendrías que ver la muerte de frente. —Clavó su mirada en la de ella —Pero tú encaras a la muerte; tú me devuelves la vida siempre que me comienzo a alejar de ella; vas al mismo Yomi si es necesario —utilizó las palabras que le dijo antes — Hoy tuviste la oportunidad de quitar una vida y no lo hiciste. Muchos en tu lugar lo hubieran hecho; pero te mantuviste firme. Hoy también tuviste una victoria personal ante Kato, quien seguramente esperaba que cayeras ante la venganza.

    La tomó de las manos con la mayor delicadeza que pudo, a pesar de sus movimientos bruscos que generalmente lo identificaban—La camelia se inclina ante la fuerza de la lluvia; pero su tallo siempre vuelve a levantarse. La lluvia dura un momento y su rastro después se evapora; pero la flor perdura, con gotas de rocío. Demostrándole al cielo que no caerá ante ninguna tormenta — mencionó apretando un poco sus manos —Yuzu; yo...

    —¡Brindemos! —Jiin regresó con las manos llenas, dos jarras de sake y vasos para tomarlo. Al verlos tomados de las manos se dio cuenta de su interrupción, inmediatamente se sintió apenado mientras Takano soltaba a Yuzuki desviando la mirada. Jiin no dijo nada, pues ya había incomodado el ambiente lo suficiente. Tomó aire con fuerza, frustrado de haber arruinado el momento; dejó una jarra frente a Yuzuki, le entregó un vaso vacío a Takano y dejó el de Yuzuki a un lado.

    —Vamos, sírvanse un poco— mencionó Jiin bebiendo de la otra jarra directamente.

    Hitori
    Ya voy a cerrar la noche; puedes contestar o simplemente matar a Jiin mientras duerme
     
    Amelie ha tirado dados de 20 caras para Dadito sorpresa Total: 10 $dice
    • Fangirl Fangirl x 1
  14.  
    Zireael

    Zireael Equipo administrativo Comentarista empedernido

    Leo
    Miembro desde:
    27 Agosto 2011
    Mensajes:
    10,653
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Yuzuki Minami
    Castillo

    ¿Instintos? Había sido pura cobardía, nada más, apenas despertar había sido incapaz de pensar siquiera en verle la cara a cualquiera de los Harima, la pesadilla había tenido tal fuerza y efecto que la alejó incluso de un plan que había formulado Takano para triunfar sobre su padre. Lo de Asakura sí había otra cosa, un movimiento de piezas inesperado, pero ausentarse del dojo... Eso no había sido nada que hubiese hecho por instinto, por intuición ni nada.

    Había sido el más crudo de los miedos.

    Algo de gracia le hizo notar que la sangre le alcanzaba el rostro por la cercanía pero lo dejó correr, no tenía la energía para molestarlo y quizás tampoco el ánimo, pero aún así que dijera que Kato e Inugami eran igual de molestos consiguió arrancarle una risa baja.

    No esperaba que fuese a seguir hablando, al menos no tanto, y que soltara que ella era la persona en la que más confiaba hizo que sus movimientos se detuvieran un momento, se quedó quieta como una estatua. Cada palabra se hilaba con su propia sentencia de que, de haberse mostrado ella en el dojo, no hubiese podido enfrentarla.

    Kato tenía razón.

    También Inugami.


    Y dolía en realidad, ¿no? Saber que ese sentimiento podía costar el éxito de un plan o directamente su vida.

    El tacto de sus manos estuvo por hacerla reaccionar, obligándola a apartarse pero logró razonar al menos algo de ese impulso y en su lugar apretó un poco el agarre. Había logrado que dejara de ver a la camelia como una flor sin esencia, no sabía ni cómo, pero lo había logrado y ahora entendía que realmente la flor nada tenía que ver con su presencia o ausencia de perfume, sino en la resistencia de su tallo.

    ¿Qué tanto podría doblarse antes de partirse en dos?

    Inhaló aire cuando notó que Takano iba a seguir hablando pero giró el rostro con brusquedad al escuchar a Jiin de nuevo, lo cierto es que si las miradas tuvieran la misma capacidad para matar que las agujas de Shinrin ya Jiin hubiese caído al suelo. Soltó el aire contenido con fuerza cuando Takano dejó ir sus manos, de hecho su respiración recordó al bufido de un perro hastiado y alcanzó la jarra que Jiin dejó para servir en ambos vasos.

    —¿Qué decías de la lluvia de agujas hace un rato, Jiin? —preguntó con cierta diversión en la voz, aunque casi estaba hablando en serio—. Lo bueno es que no me quedaron más.

    Dejó la jarra a un lado para tomar el vaso y beber antes de seguir hablando.

    —Vaya hombre más inoportuno estás hecho.


    Jiin te quiero mucho pero agradece que no tiene más agujas de verdad (?

    Bueno, este sería mi último post del día entonces~
     
    • Gracioso Gracioso x 1
  15.  
    Monpoke

    Monpoke Absol

    Géminis
    Miembro desde:
    6 Julio 2016
    Mensajes:
    3,413
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Riku

    Libero la funda de mi katana de su castillo y la coloco sobre mis rodillas. Llevo una mano hacia la empuñadura y aplico suficiente fuerza para desenvainar una parte del filo.

    "Supongo que la katana guarda mucho más que el honor de uno". Inclino un poco la katana con tal poder ver mi reflejo en la hoja, un objetivo impedido por la superficie negra. "No lo entiendo del todo". No soy samurai.

    "Un día decidí abandonar su cuidado con tal de quitarle su brillo. Ver mi reflejo en ella... se convirtió en una carga en mi mente más que una señal de orgullo". Dejo ir mis palabras con lentitud, ganando una voz más sombría por cada palabra dicha. "Hice que mi propia katana dejara de reflejar mi exterior y coincidiera con mi interior, en ese entonces arruinado".

    Me hizo darme cuenta de mucho el volver a empuñarla en este estado. Dependi de su filo durante muchos años, ahora que lo perdí, se mejor donde se encuentran mis habilidades.

    "Por muy simple que sea su filo, es un recuerdo de mi hogar". Y las cadenas de mí voluntad. "No es nada tan especial como una herencia, un regalo o una gran historia con tal de conseguirla, pero es la primer katana que llegue a empuñar... Ya es parte de mi". Termino con un suspiro apagado mientras regreso la hoja al interior y dejo la katana a un lado.

    Bajo la cabeza en señal de respeto hacia Taiyo. "Agradezco quieras compartirme su técnica siendo el valor que tendría para ti".

    "Pero tendré que rechazar una cosa". Levanto la cabeza y lo miro a los ojos, con una pequeña lagrima deslizandosè de uno de los míos. "Lo decidí esta mañana, quiero oir ese secreto de la voz de Kirara. Esperare lo que deba esperar".

    Confió en que mantendrá su palabra en ello y, como menciono antes, quizás Taiyo tendrá un papel más secundario. Un papel del que tal vrz no se le informo totalmente.

    A mimir
     
    Última edición: 6 Febrero 2021
    • Impaktado Impaktado x 1
  16.  
    Amelie

    Amelie Game Master

    Sagitario
    Miembro desde:
    12 Enero 2005
    Mensajes:
    8,206
    Pluma de
    Escritora
    [​IMG]
     
    Amelie ha tirado dados de 50 caras para Dado evento día 22 Total: 5 $dice
  17.  
    Monpoke

    Monpoke Absol

    Géminis
    Miembro desde:
    6 Julio 2016
    Mensajes:
    3,413
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Riku

    El amanecer estaba volviendo a llegar a Kamakura. Decidí despertar temprano, mucho antes de ser invadido por las habituales pesadillas o los rayos de sol. Hoy me espera un probable día complicado, es mejor iniciarlo antes de verme obligado de interrumpir mis tareas por un imprevisto.

    No se cuanto podré llegar a rendir a este tiempo, fueron días simples, pero mi cuerpo va mostrando fatiga y dolor de los continuos golpes. Casi incluso siento mis huesos protestar por el castigo que también les espera hoy. Pero debo seguir este día y el siguiente, cuando alcance mi meta me permitiré ese descanso.

    Me levanto de mi lugar en silencio/sigilo, no queriendo arruinarle el sueño a nadie. Más importante, no llamar la atención de Inosuke quien despertaría a todos.

    Lentamente acerque los labios al oído de Taiyo, manteniendo mi cuerpo fuera del angulo indicado por si se levanta de golpe. "Estaré por la tarde o antes en el patio frente a la mazmorra, debo realizar unas tareas personales". Le susurro con cuidado mi intención de no querer abandonar el entrenamiento.

    Desde hoy seras mi maestro... compañero y hermano. No voy a defraudarte, a nadie que espere algo grande de mi. Quiero cumplir sus ambiciones porque yo no tengo ninguna propia.

    Abandono la habitació y el castillo, manteniendo mi sigilo con tal de no ganar atención no desea.

    Voy rápido por sobre las cosas por el simple motivo de querer hacerlo, esta vez asegurándom de trepar las correctas.

    Fui a la sección abandonada, lugar donde se llevo acabo la parte final de ese plan. Pero no es por querer revizar los restos de eso el porque estoy aquí, aun conservo mi objetivo del día anterior.

    Investigar estas viviendas.
     
    Monpoke ha tirado dados de 3 caras para Fujiwara2 Total: 3 $dice
    Última edición: 7 Febrero 2021
    • Fangirl Fangirl x 1
  18. Threadmarks: Día 22_Clan Minamoto
     
    Amelie

    Amelie Game Master

    Sagitario
    Miembro desde:
    12 Enero 2005
    Mensajes:
    8,206
    Pluma de
    Escritora
    [​IMG]
    El amanecer tocó las montañas; el día no tenía lluvia pero aun así se sentía frío. No había personas en las calles. El rumor de la derrota de Kato parecía haber mermado en la actividad cotidiana de Kamakura. El dojo, por primera vez en muchas estaciones, no había sido abierto por su maestro.
    Las pesadillas en Kamakura habían desaparecido; y también con ellas, parte de su vida. Kamakura despertaba ante un cambio radical en su estilo de vida.


    [​IMG]


    Habitación Fujiwara
    (Taiyo; Riku; Shinko; Inosuke)

    Taiyo se levantó ante las palabras de Riku, sin alarma o movimientos bruscos; lo escuchó amodorrado y confundido. Al verlo salir volvió a dormir.




    Habitaciones
    (Takano; Yuzuki; Jiin; Rei; Matsuda; Terunobu; Heya; Daichi; Kohaku; Clan Fujiwara)

    La noche anterior, Jiin había notado la ligera amenaza de Yuzuki, sonreía pues sabía que la tenía bien merecida. Al terminar de brindar se alejaron de allí; pasando una noche tranquila, con un descanso absoluto, sin pesadillas. Todo parecía ser perfecto.

    Takano despertó temprano como era su costumbre, esta vez sacó su tablero de shogi y decidió practicar un par de jugadas mientras el resto despertaba; necesitaba saber quienes estaban disponibles para ir a Shizuoka, ya que algunos había caído enfermos los días anteriores, seguramente debido al ascenso por la montaña.

    Heya; Daichi y Kohaku seguían dormidos, y aquello comenzaba a preocuparle, seguramente tendría que dejarlos en Kamakura al cuidado de Ryohei, pues moverlos a una guerra en ese estado sería una pésima jugada.

    EN Auditore OneMoreee Gigi Blanche
    Mientras regresan al rol los dejaré en Kamakura :) estarán bien cuidados

    Sujetó la pieza del rey —No puedo dejar Kamakura sin ordenarla primero —mencionó para sí mismo. Pues ahora con Kato derrotado, debía revisar la situación de la prefectura de Kanagawa. Si la dejaba para ir a Shizuoka sin organizarla primero, podría estar condenando a perder a una prefectura completa.

    Matsuda se reunió con Terunobu; hablaban sobre la situación con Takede.

    Rei avanzó hacia Takano, este lo observó confundido —¿Rei?— Preguntó mientras Rei afirmaba y se sentaba frente a él al tablero.

    —Entonces han derrotado a Kato —mencionó mirando la jugada que estaba estudiando Takano en el tablero — No podrás dejar a Takeda en Kamakura —observaba la pieza del rey entre los dedos de Takano —¿A quién piensas dejar a cargo?

    Takano bajó al rey colocándolo entre su general de oro —Jiin— mencionó seco.

    Rei sonrió y afirmó.




    Sección abandonada de Kamakura
    [Riku]

    La curiosidad de Riku lo hizo volver a esa sección abandonada de Kamakura. Entró a otra de esas casas abandonadas, eran enormes y seguramente en el pasado rebosaban de belleza y vida, ahora sólo eran escombros y polvo.
    Aquel sitio tenía un viejo altar destruido rodeado de lo que parecían ser talismanes; había incienso seco, polvo negro en el suelo, tierra recién removida de algún lugar. Una varilla de incienso estaba encendida. Había alguien allí dentro, o al menos hubo alguien quien dejó ese incienso para los espíritus del hogar.

    Los pasos se hicieron presentes mientras un hombre observaba a Riku.
    [​IMG]

    —Entrar a una casa, ver incienso en un altar y no reverenciarlo es una profunda falta de respeto— mencionó molesto —Haz una reverencia, los muertos te observan
     
    • Fangirl Fangirl x 3
    • Impaktado Impaktado x 1
  19.  
    Monpoke

    Monpoke Absol

    Géminis
    Miembro desde:
    6 Julio 2016
    Mensajes:
    3,413
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Riku

    "Lo sé". Respondo simplemente al desconocido, no planeado gastar saliva en disculparme por entrar, el no me acusa de eso. "He vivido mis últimos años considerando que soy observado". Compañeros, amigos y familia. ¿Me observan? ¿Lo estoy haciendo bien? ... Lamento si nunca les he dado una oración.

    Me acerco al altar con pasos calmados, manteniendo tranquilidad en no querer arruinar este espacio de oración. Y, por ende, a esta persona.

    "A un si es hacía los muertos deben de mantenerse las formalidades". Digo una vez estoy a la distancia indicada del altar, mantengo lo ojos hacia delante al hablarle a la persona que tengo detrás. "¿Me permites saber a quien le dedicó mis respetos?".

    Sea cual sea la respuesta, si da un nombre o no, hago la reverencia.
     
    Última edición: 7 Febrero 2021
    • Ganador Ganador x 1
  20.  
    Amelie

    Amelie Game Master

    Sagitario
    Miembro desde:
    12 Enero 2005
    Mensajes:
    8,206
    Pluma de
    Escritora
    Mientras tanto, dos personas llegan a Kamakura.

    —El viaje a sido fatal —mencionó un hombre al otro —Es momento de ir a buscar a tu tío Ujihisa — mencionó al joven que viajaba con él; por el parecido físico parecían familiares —Primero buscaré a Kato Harima —mencionó sacudiéndose la tierra del ascenso a Kamakura. La montaña era pesada a pesar de haber caminado por el sendero seguro que al parecer, conocía a la perfección.

    —Hijo mío— mencionó mientras aquel hombre lo sujetaba del hombre — Ve a buscar a Rei; debemos llevarlo con los Asakura a salvo, Hinata está sumamente molesta de que no la trajera con él; seguramente estará en el castillo—dijo señalando la gran estructura al fondo —Nos reuniremos a medio día en la clínica, creo que es momento de volver a mi vieja rutina.

    Slam bienvenido al rol!!!!!!!!!!!!! *o*

    Ginko está junto a su padre Sakaki Harutomo; está buscando a su hermano gemelo Ujihisa, el tío de Ginko



    Sección abandonada de Kamakura
    [Riku]

    Aquel hombre lo seguía observando con una mirada gélida —Este es el hogar del descanso eterno del clan Minami; honorables guerreros que tomaron su vida demostrando sus convicciones, una protesta hacia un régimen del cual nunca estuvieron de acuerdo— mencionó molesto —Espero nunca olvides hacer una reverencia si ves un altar con incienso.
     
    Última edición: 7 Febrero 2021
    • Fangirl Fangirl x 2
    • Adorable Adorable x 1
Cargando...

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso