In Umbris Potestas Est

Re: In Umbris Potestas Est

Muy bien, le sigo yo,
trataré de hacerlo lo
más rapido posible.

 

Re: In Umbris Potestas Est

Pues bien, les traigo la conti, y espero que les sea de su agrado:


La verdad Mary Shadow no creía en las piedras, ni en nada sobrenatural, sólo quería fastidiar a Jax.

-Por mi, puede tener hasta mil piedras. No entiendo cómo existe “gente” que creen en esas estupideces. Se va a arrepentir.

En eso, una sombra en la oscuridad le dirigió unas palabras:

-Hagamos una alianza, Bloody Mary. –Era Kein
-Vaya vaya, pero miren quién acaba de llegar, el ermitaño.
-No tengo tiempo para tus palabras sarcásticas, hagamos una alianza.
-¿Cómo qué…? ¿Qué quieres?
-Destruir al maldito de Jax.
-Eso quiere todo el clan, vampiro. Hasta en París quieren verlo muerto.
-Hablando de muertos, tenía entendido que tú lo estabas.
-Eso no te incumbe, vurdalak.
-Pues ni modo… tiene que haber una forma de destruirlo. Tal vez si lo sorprendemos en un callejón vació y lo obligamos a pelear…
-Ni lo sueñes, ¿Qué crees que hice hace unas horas?
-¿Peleaste con él?
-No desgraciado, me entretuve con él bailando mambo, ¡obvio que peleé con él!
-Ya, deja el sarcasmo. ¿Qué pasó?
-Nada.
-¿Nada? ¿Cómo que no pasó nada?
-Nada, porque se transformó en licántropo y casi unos momentos después, se volvió un ser humano.
-Con razón, los seres humanos son tan débiles de carne.
-¿Y nosotros no?

Kein le lanzó una mirada de asombro.

-Me sorprendes Mary, ¡como crees! Nosotros los vampiros somos los amos de la oscuridad.
-No, somos los hijos de Satán, sus esclavos. – Masculló Mary.
-¿Y porqué dices eso?
-Sencillo, ¿Cómo puedes andar tranquilo por la noche, sabiendo que te fue negada la Gracia de Dios?
-Podemos vivir hasta el fin del mundo, pensé que lo sabías.
-Pero, ¿A qué precio? Con el paso del tiempo el mundo se vuelve un eterno infierno.

Kein se echó a reír como si hubiera escuchado un chiste.

-Vaya, vaya, ¡lo que nos faltaba! Tenemos una pequeña vampira depresiva.

Mary gruñe y le muestra los colmillos.

-Escúchame bien, vurdalak. Si vuelves a llamarme pequeña, o depresiva, lamentarás la fecha en que tu creador te convirtió.
-Tranquilízate, quieres matar a Jax, no a mí.
-Yo mato a cualquiera que se cruza en mi camino y me lleva la contraria.
-Con razón te llaman Bloody Mary…
-Ya, ¿tienes planeado cómo vamos a destruir a Jax?
-Seguro, por algo me llamo Kein, vampira. Primero, tenemos que encontrar a más vampiros que quieran verlo muerto…
-Eso no es problema.
-…Luego, le tendremos una trampa, usando como medio las famosas piedras.
-No me digas que crees en esa…
-Cada quien tiene sus propias creencias, Mary. Y él planea quitarme la que poseo.
-Hmn… déjame verla.
-¿Acaso me crees un bruto?
-¡Deja de lloriquear, demonios! Ni que valieran su peso en oro…
-A decir verdad, valen mucho más que eso.
-Pues si valen tanto, déjame verlas.

Mary arqueó una ceja, y Kein dio un paso atrás.

-Mary, ¡Ya deja esa mierda de arrastrar el aura!
-Pues te arrastraré otra cosa si no me haces caso.
-¡Maldita seas entre todas las de tu especie!
- Anda, ¿se supone que me sienta como la Virgen María?
-Ya cállate si no quieres que lance una blasfemia. Se supone que estemos discutiendo sobre cómo matar al vampiro.
-Pues creí que lo teníamos todo claro, ¿no? Pero, ¿Cómo vamos a utilizar las piedras?
-Verás, yo…

El vampiro no terminó de hablar, por culpa de un ruido, como si alguien hubiera tropezado con unos botes de basura.

-¿¡Qué demonios!?- Dijo Kein dando un salto.

Ambos vampiros se miraron de reojo y corrieron hacia el origen del ruido. Y efectivamente, alguien tropezó con unos botes de basura. Era Anne, luchando por ponerse en pie. Kein la agarró por un brazo y la sostuvo en el aire, mientras ella daba gritos de dolor.

-¡Maldito, me rompes el brazo!
-Si, y te romperé toda tu columna vertebral si no nos dices lo que escuchaste.
-¡Te olvidas de que soy hembra!
-Eso ya me es indiferente, vampira.

Kein apretó con fuerza el hombro izquierdo de Anne, mientras ella ahogaba un grito. Mary intervino.

-Tranquilo vurdalak, que ella viene conmigo.
-¿¡Qué!?
-Dije que ella viene conmigo.
-¡No soy sordo!
-Ah bueno.
-S-si, yo… yo estoy con ella.

Bajo el cuerpo de Kein, Anne temblaba como si el frío le llegara hasta los huesos.

-Si está contigo Mary, ¿Cómo es que huía como un humano cobarde?

Los nervios de Anne la hicieron tartamudear.

-Es que yo… n-no q-quería ir… c-c-con ella, m-me… me llevó a la… fuerza. Como los vi tan entretenidos discutiendo pensé… pensé en irme.

Mary perdió la paciencia:

-¿Dónde estabas escondida?
-Estaba entre esas dos paredes. –Anne señaló las paredes, que quedaban entre el callejón y un burdel.
-¿Qué escuchaste?
-¡Nada!

Kein le aprieta más el hombro, y ella dejó escapar un grito.

-Está bien, está bien… escuché que Kein le decía pequeña depresiva a Mary….
Entonces Mary le muestra sus colmillos, que parecían las fauces de un perro, y Anne gritó, confesando:

-¡¡Sé que quieren matar a Jax utilizando las piedras como cebo!!

Kein la soltó, dejándola caer al suelo.

-Escuchaste demasiado, vampira.

Kein estaba a punto de abrirle la garganta a Anne, cuando Mary le frenó.

-¡No seas imbécil!
-¿Y qué quieres que haga? Es tan cobarde que le confesaría a medio mundo nuestro plan si la amenazan de muerte, aún si no la matan.
-¡No! Juro que no diré nada, lo prometo por lo más sagrado que existe.

Kein se echó a reír en respuesta.

-¿Cuántos años crees que tengo vampira? Conozco muy bien los métodos de tortura, las mañas, mentiras y amenazas del vampiro como si yo mismo los hubiera creado. Seguramente, tú soltarías la lengua tan pronto te amenacen, o al menos, que hagan el aguaje de tocarte.

En respuesta, Anne bajó la cabeza, muerta de miedo ante el poder de tales palabras. “No cabe duda que es, al menos, 4 siglos mayor que yo, o quizás más.” Pensó ella.

Kein, leyéndole el pensamiento, dijo:

-Ni te imaginarás de que yo mismo vi a Mahoma profesar bajo un palmar…. Y probablemente, tú habrás visto mucho menos.
-¿Viste al Profeta? – Esta vez las dos vampiras lo miraron asombradas.
-¿Qué importancia tiene? Ahora su cuerpo se revuelca en su tumba, o por lo menos lo que quede de él.
-Cállate, por amor a Dios.
-Si nos vamos a quedar discutiendo sobre religión como unos imbéciles humanos incultos, mejor nos largamos de aquí.-Gritó Mary
-¿Y qué hacemos con Anne?
-Lo que te venga en gana.

Horrorizada, Anne gritó:
-¡¡N-no, yo los puedo ayudar!! Yo también deseo ver el cadáver del vampiro.
-¿Qué?
-No se crean, él me debe ciertos asuntos…
-Está bien, pero a la primera que nos quieras traicionar, ten por seguro que ni los santos tendrán piedad de ti, porque desaparecerás, ¿Estamos claro?
-S-si Mary, como tú digas.

Mary tomó a Anne del otro brazo, obligando a Kein a que la soltara, y dijo:

-Ahora nos vamos. Alguien o algo nos han estado llamando.

Kein sonrió:

- Fui yo, mas bien estaba llamando a Mary, pero no imaginé que llegara con… su amiguita.
-¡Vurdalak, ten bien claro que ella no significa nada para mi!
-¡Y tú no debiste cruzarte en mi camino, Mary!
-¿Te oyes? Pareces una niña.
-¡Se callan las dos, es suficiente! Apenas faltan veinte minutos para el amanecer, mejor dejamos las cosas hasta aquí, y buscamos unos refugios.
- Está bien, nos largamos.
-Hasta luego señoritas, dulces sueños.
-Será mejor que cuides tu espalda, vurdalak, quién sabe qué cosa se nos aparece por el camino.
-Lo mismo les digo, señoritas, adieu.

Y así, las tres sombras desaparecieron tomando rumbos diferentes, mientras los primeros rayos del Sol tocaban la tierra.


*Vurdalak: otro nombre para vampiro en ruso moderno.

 

Re: In Umbris Potestas Est

Gracias primo, me alegra
que le guste la conti.

 

Re: In Umbris Potestas Est

¡Bravo, muy buena conti!
(aunque sea la mitad) xD
Estaré pendiente.

 

Re: In Umbris Potestas Est

Perfecto bro,
como que esta tomando
forma, ¿no? xD

 

Re: In Umbris Potestas Est

Vaya vaya, muchas
gracias Sayuri. :D

Sólo hay que esperar
a Fire.