Lo único positivo de que estás roto es que eres poético, que la musa no es necesaria porque el arte corre por tus venas, la pintura inunda tus ojos y no es necesario leer 100 libros para ser intelectual, porque eres arte brusco y honesto, eres lo complejo de besar, de tocar, eres el cielo cuando se pone oscuro y las estrellas cuando brillan, las nubes que se vacían y el olor a tierra mojada. Eres la sirena que no existe, y la leyenda que se duda, el mito que se cuenta y la historia que no se olvida, no eres el villano y no eres el héroe porque la gente perfecta no es etiquetada, no eres quien juzga ni eres quien sentencia, eres quien comprende y quien susurra, quien no miente y quien te quiere. Eres la delicia en persona, la flor innata y el genotipo uno en tres, el sabor del café y un beso de buenos días, una preocupación de mamá y el orgullo de papá, eres el preferido de la tía y el consentido del abuelo, eres quien triunfa ante todo y quien ignora el dolor de una caída, el que se mantiene en pie y cumple la promesa que pareció olvidada. Eres quien pereció en batalla, el que no se rindió ante una partida perdida, el alivió luego de un ataque y el suspiro luego de las lágrimas, el dolor en el estómago luego de las risas y los cachetes rojos, eres el pelo en la cara y las joyas preciadas. Los regalos, las sonrisas y los mejores deseos. Nunca serás la ansiedad, los problemas familiares ni la rabia acumulada, porque eres lo más fuerte que este mundo posee, aquello a lo que ella se aferra, aquello que el necesita y que nadie comprende. No eres la cuchilla en los brazos ni las jeringas en las venas, no eres los improperios ni las promesas de muerte, porque eres lo bello que la gente rota necesita. No eres lo perfecto porque lo perfecto no puede amar, no eres el dinero, la riqueza ni el poder, no eres los gritos, los golpes ni las denuncias, no eres una estafa ni eres una mentira, no existes cómo farsante y tampoco cómo adulador. Puedes ser algo nuevo o algo viejo, pero eso nunca va a importar porque eres el amor verdadero.