Harry siempre había vivido encerrado, en un sitio muy pequeño a diferencia de su primo que tenía una habitación para él solo, debajo de las escaleras era molestado por este cuando bajaba a desayunar, lo tenían como un criado. Cuando entro al cuarto de su casa en Hogwarts, no podía creer lo que veían sus ojos, ahora era enorme,tendría que compartir con el resto pero el simple hecho de poder disfrutar de una cama, un baúl, una mesita de noche y con amigos...aquello era lo que podía llamar realmente un hogar. PD: Yo quiero ir allí.