The Hunger Games Haymitch

Haymitch​

Siguió caminando, observando como él avanzaba hacia el profundo risco que se formaba a unos metros de distancia. Tratando de memorizar en su mente cada uno de sus movimientos, cada paso y fracción que se formaba en su rostro. Simplemente… tratando de no olvidarlo aun cuando la oscuridad la seguía a todos lados.



—Vamos Haymitch, no hay nada más de ese lado.



Y por alguna razón, aun cuando sabía que no debería seguir a su lado, cuando sabía que tendría que dejarlo en ese preciso instante… aun así quería seguir a su lado. Porque aunque su parte racional le decía que sólo quedaban tres, su corazón le decía que eran tres y aun había tiempo para estar juntos. Y ella le hacía caso a su corazón.



—No, yo me quedaré aquí.



Cuando él dijo esas simples palabras, algo dentro de ella se rompió. Su pequeño corazón se desquebrajó lentamente, llenándola de agonía y de unas pequeñas lágrimas traicioneras en sus ojos.



—Entonces, creo que este es el adiós Haymitch.



No esperó su respuesta, no escuchó si es que él decía algo o no. Simplemente dio la vuelta y siguió su camino. Sabía que iba a morir, debía morir. Él era el que debía ganar. Él debía regresar a casa como todo un vencedor. Él y nadie más.


Por eso, cuando a vio a esas aves mutadas, a esas horribles creaciones del Capitolio… no lo dudó. Se interpuso en su camino, sintiendo como esos afilados dientes le desgarraban la garganta rápidamente. Calló al suelo, sintiendo un agudo dolor que aun siendo tan fuerte como era… no logró superar al de su corazón.



—Adiós, Haymitch…

Como le hubiera gustado estar junto a él para siempre…​

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Mi hermoso Haymitch <3​