Hasta que la muerte la localice

Tema en 'Relatos' iniciado por windmiko, 14 Octubre 2010.

  1.  
    windmiko

    windmiko This is war

    Escorpión
    Miembro desde:
    2 Noviembre 2008
    Mensajes:
    825
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Hasta que la muerte la localice
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1087
    Hasta que la muerte la localice

    Titulo: Hasta que la muerte la localice.
    Palabras: 791.
    Summary: Muchos le temían a la muerte, pero Oliver le daba más temor vivir y ser olvidada. Todo el tiempo era la misma, el mismo ciclo que todos los seres vivos seguían, como si fuera un juramento desde que nacen.
    Notas: Con este escrito participé en el concurso literario que la misma preparatoria estaba llevando a cabo.



    “Hasta que la muerte la localice”


    El cielo no dejaba de llorar. El goteo de la lluvia y el grito de los relámpagos era lo único que Oliver escuchaba; sin embargo, eso no impidió que viera una vez más a su esposo. Sus lágrimas que rozaban sus mejillas por fin se desvanecieron en la tierra húmeda e infértil. Ella y su esposo tuvieron dos hijos, los cuales ya se habían casado convirtiéndolos en abuelos; pero tan sólo recordar que Enrique había muerto después del nacimiento de su último hijo, le provocaba un nudo en su garganta. Oliver Cádiz apretó el ramo de lirios que estaba en sus manos arrugadas.

    —Nuestra nieta cumplirá once años el día de mañana —anunció con cierta dulzura en su tono de voz, le dedicó una sonrisa a la tumba—. Enrique… me hubiera gustado que vivieras un poco más para mí.

    Otro ensordecedor trueno se presentó. A veces ella misma olvidaba que estaba en medio de una tormenta. Su difunto esposo había fallecido porque estaba enfermo del corazón, la enfermedad que por mucho tiempo tuvo y por fin lo había vencido precisamente ése día. Los pocos años de casada que estuvo con él no le bastaron, ella sólo le expresó sus sentimientos el día de su boda; todos los demás se dedicó a regañarlo por su bajo salario y su humilde trabajo de vendedor ambulante. “¿Qué mujer quedaría maravillada por un trabajo semejante?”, aquella simple pregunta se la hacía cada amanecer. De repente se escucharon lamentos, Oliver alzó la vista y miró varias personas llorando, todos llevaban trajes negros; pero no pudo observar mucho porque sus lentes estaban empañados con la lluvia que caía sobre ella.

    —Otro que fallece.

    Por fin, la anciana dejó los lirios sobre el bulto. Aquellas flores eran muy significativas para ella y para él, debido a que ésas adornaron la iglesia el día veinte de junio. Su experiencia con los años le habían demostrado que la gente que fallece poco a poco es olvidada, como las memorias de un bebé; sin embargo ella aún estando viva, sus hijos ya la habían olvidado. Era normal, Oliver ya había cumplido su labor como madre… ahora sólo faltaba esperar a que la muerte la localice.

    —Querido, a veces me pregunto si yo seré la próxima que muera —se rió un poco, en verdad deseaba estar con su esposo.

    Muchos le temían a la muerte, pero Oliver le daba más temor vivir y ser olvidada. Todo el tiempo era la misma, el mismo ciclo que todos los seres vivos seguían, como si fuera un juramento desde que nacen.

    —¡Abuela! —gritó su primera nieta desde muy lejos. Ella volteó con cierto brillo en sus ojos negros.

    Y con pasos apresurados, Beatriz llegó a los brazos de su abuela. Le importó un comino si ella estaba mojada, ya que aún mantenía esa calidez que Oliver desprendía.

    —¿Qué haces aquí?, debes estar con tus padres en la casa. Aquí hay una gran tormenta —regañó colocando sus manos en sus pequeños hombros, ella respondía con ciertos pucheros tradicionales.

    —Vine porque hoy es el cumpleaños de mi abuelo. Le hice un dibujo —contestó Beatriz, tomó su mochila morada y entre tantas cosas logró encontrar un pedazo de papel.

    Sin parar de sonreír, la pequeña niña lo extendió con cierta torpeza; pero cuando terminó frunció el seño, el papel se había debilitado con la lluvia, ahora cualquier cosa podía romper el regalo. Éste era un dibujo de dos personas tomadas de la mano. Con mucho cuidado, Beatriz se lo entregó en sus manos mojadas, por lo menos su abuela consentidalo apreciaría. El corazón de ella no paraba de palpitar, sus lágrimas caían de nuevo al suelo de felicidad; no importaba ahora cómo la vida la había castigado, ni qué deseos tenía ahora…Sólo importaba ella. Inesperadamente la abrazó, Beatriz sin entender mucho lo que pasaba le correspondió.

    —Abuela ya no llores. El regalo se rompió solo, tú no fuiste. —Uno de los aspectos que más le gustaba de sus nietos era que aún eran inocentes, algo que muchos humanos carecen.

    —Vámonos ya Beatriz —añadió Oliver, se separó de ella y se irguió por completo.

    Aunque sólo quedó el pedazo de papel en blanco, la niña lo recogió del suelo y lo colocó en la tumba; aunque no significara nada para su abuela, Beatriz estaba segura que a él le gustaría. Sus sentimientos infinitos estaban plasmados ahí, aunque la pintura lo había borrado la lluvia. A continuación, ella se aferró a su abuela y juntas caminaron. Oliver no podía asegurar nada de lo que había pasado, pero se sentía mucho mejor cuando su nieta estaba cerca. Ella era su vida, su razón de vivir… hasta que la muerte la localice, Oliver seguiría viviendo un poco más para ella.
     
  2.  
    Kyouko Kiryuu

    Kyouko Kiryuu Adicto

    Sagitario
    Miembro desde:
    27 Noviembre 2008
    Mensajes:
    1,588
    Pluma de
    Escritor
    Re: Hasta que la muerte la localice

    ¡Hola amiga! :rosa:

    Que lindo relato, me recordó a mi abuelita ToT.
    Cuanta razón tienes, los que estamos vivos nos olvidamos de los que ya murieron e inclusive de los que aún viven.
    Te felicito mucho, me hiciste llorar y hasta al momento sólo Iza-chan me había hecho llorar con sus relatos ToT.
    Sólo una cosa amiga hay una palabra que pegaste con otra, te lo voy a señalar con azul:
    De ahí en fuera todo está hermoso.
    Yo me despido, nos vemos luego.

    Sayonara... :rosa:
     
  3.  
    Quelconque

    Quelconque Usuario popular

    Virgo
    Miembro desde:
    8 Febrero 2004
    Mensajes:
    790
    Pluma de
    Escritor
    Re: Hasta que la muerte la localice

    Es la primera vez que te leo y me resultó un relato enternecedor.

    Sin embargo, la expresión "la localice" siento que tiene una connotación más moderna en estos tiempos que arruina un tanto el texto.
    Además, localizar no tiene el mismo significado que encontrar, porque en la primera palabra averiguas dónde se encuentra y en la segundo sólo hallas o das con ese algo que buscas.
    Pero en realidad sólo es cosa mía porque uno nunca sabe cómo trabaja la muerte, si tiene un radio localizador o no.

    También, el repetirlo tres veces en el mismo texto, excluyendo el título, se me figura innecesario.

    Ahora, hay algo en la trama que no me termina de convencer:
    Y si estaban en el cementerio, según la nieta, estaban celebrando su cumpleaños y no su aniversario de muerte como uno podría suponer/esperar después de haber sabido el dato importante sobre el que gira gran parte de la tristeza de la anciana.
    Pero, de nuevo, no está mal, sólo es diferente.

    Dos errores más aparte del que te marcó kagomexinu:

    ¡Éxito y escríbenos si ganaste el concurso!
     
  4.  
    windmiko

    windmiko This is war

    Escorpión
    Miembro desde:
    2 Noviembre 2008
    Mensajes:
    825
    Pluma de
    Escritora
    Re: Hasta que la muerte la localice

    Kagomexinu: Mmm… cierto, aún tengo varios fallos que tengo que corregir n_n, gracias amiga, es muy halagador tenerte leyendo. Es mi primer escrito en originales.
    Plangman: Gracias por tu comentario, aún confundo mucho esas palabras, me falta aprenderlas y practicarlas bien. Agradezco mucho las observaciones que hiciste, sólo espero salir bien en el concurso literario :).
     
  5.  
    Kourei

    Kourei Acosando a Gray-sama (kagome-chan) ;D

    Tauro
    Miembro desde:
    3 Abril 2009
    Mensajes:
    782
    Pluma de
    Escritora
    Re: Hasta que la muerte la localice

    Snif* Que lindo, es un temor natural de los humanos el vivir y ser olvidados por quienes más quieren. Lamentablemente nos olvidamos de aquellas personas que nos criaron y cuidaron desde pequeñas por hacer una vida aparte. Muy buen tema, te felicito chibi hermosa. Aparte de los errores ya marcados no encontré más.
     

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso