Llegamos a un punto en que ya no había agua, sólo puro barro... así que regresé a Vaporeon a su pokébola y me puse a caminar con cuidado. —¡Hmm! Aquí hay pokémon que me interesan... —dije revisando la pokédex. Con ese dato, empecé a buscar si aparecía algún pokémon por ahí... Y a lo lejos apareció un siniestro Croagunk que infalaba y desinflaba sus cachetes...
—Veamos que hay por aquí... No fue sino sólo decir eso, para que apareciera un simpático Hipopotas durmiendo.
Seguí buscando, con la esperanza de que aparecería pronto el pokémon que buscaba. Pero por el momento sólo vi a lo lejos a unos simpáticos Trubbish.
—Yo sé que va a aparecer... —dije con mucha fe. Aunque me distraje demasiado; los mismos Trubbish seguían ahí.
Por más que me demorara, no importaba... tenía que seguir buscando, ¡la esperanza es lo último que se pierde!
Y ahora sí, ¡la perseverancia dio frutos! —¡Ahí estás! Un Skorupi había aparecido. Rápidamente envié a Prinplup a combatir con él. Una Hidrobomba fue suficiente para dejarlo confundido... y lancé la pokébola. 1, 2, 3... ¡Y captura exitosa!
Después de salir del lago helado con Staraptor me dirigí al gran pantano y aterricé en el barro, siempre me había desagradado un poco ese lugar
Sentí un ruido... como que alguien hubiera pisado lodo. Con curiosidad, me di vuelta y al ver quien era dije: —¡Dante!, ¿qué te trae por estos lares? Contenido oculto Tuve la tentación de decir "Vaya! Te ves diferente; 20 años más joven" jajaja xD
Oí una voz conocida así que me decidí a girarme para ver quien era, Steve al parecer, le sonreí como saludo — Staraptor... siempre escoge lugares con gente conocida.. ¿Y a ti?
Le mostré el diario que había encontrado en ciudad Témpera. Ese que tenía en la primera plana como titular: "Rumores hablan de turistas desaparecidos luego de entrar a extraña mansión en el Gran Pantano". —Esto nos llamó mucho la atención a mí y a Liza; pero ella se fue a darse una ducha porque se cayó en el barro a mitad de camino...
— ¿Pensaban ir a la mansión abandonada? — pregunté al ver el titular hasta que oí lo de Liza — Supongo que la entiendo.. este barro es un poco desagradable
—Y tiene un olor tan.... sospechoso —comenté. Sin embargo, decidí volver al tema anterior: —Y sí, la verdad es que no encuentro nada que hacer desde hace días... así que supuse que esto sería emocionante. ¿Quieres acompañarme?
Traté de sonreir lo más que pude para mantener la compostura... Como había dicho en ciudad Témpera; yo la verdad era malísimo para las situaciones que implican misterio y terror... pero es que el aburrimiento me estaba desesperando, y necesitaba algo emocionante, aunque fuera por unos pocos minutos que pudiera aguantar. —Ahh... sí, c-claro —me limité a decir. Volteé la mirada y vi una extraña casa a lo lejos... —¿Es esa de allá?
Miré hacia donde decía, en efecto era esa — Sí, allí es.. pero no te preocupes no creo que pase algo serio
— Bueno.. jamás estuvimos en peligro realmente — dije rascándome la nuca, la mansión no nos iba a hacer nada