[Gladiadores] Rehenes de un imperio

Opelius

Tensó los músculos de su cuello; sus trapecios estaban venosos por la furia creciente al tener an cerca a la mujer Cornelia. Tan solo la miró en silencio, con sus puños bien apretados y cuando ella se apartó, sus ojos la siguieron hasta el rincón donde se agachó. Ella jamás entendería la sensación de hermandad entre hombres, después de todo era una chiquilla con dos niños jugando al gato y al ratón en un mundo bestial y de sangre. El gladiador con la lengua cercenada solo quería largarse de allí, ya.

 

Los guerreros miraban y asentían cuando alguien decía aquellas palabras; pero dudaron de Cornelia, no había pronunciado las palabras adecuadas para oídos libertadores. El hombre estaba a punto de golpear el duro metal que impedía que los Gladiadores salieran; pero la mujer lo detuvo, después miró fijamente a Cornelia por unos segundos con sus ojos grises.
—Tu pregunta, una selección de palabras infortunadas— cerró los ojos y suspiró.
El hombre se calmó y continuó hablando.
—Tu libertad no es la misma que la mía; aquel que busca la libertad no puede ser tan frívola en pensar en comida cuando estás a un paso de pelear por lo que crees justo. Mismo cuerpo, misma sangre; es la frase del movimiento de sanguine frates — concluyó.
—Estas palabras se dicen desde el espíritu, si se dice que se tiene la misma sangre, significa que es más que un compañero de armas...—decía la mujer dando un descanso para mirar a Opelius que estaba bastante alterado con el comportamiento de la chica. Lo miró a los ojos y sonrió — ...es un verdadero hermano— desvió su mirada para decirlo a todos en general— Eso significa estar en el movimiento, pues sanguine frates significa hermanos de sangre—

 

Sebastián

Pude notar como cornelia y opelius se veían con una mirada nada agradable así que me acerqué a aquel hombre nuevamente y apreté su hombro --déjala, ella no entiende muchas cosas -- le mencioné tratando de que se tranquilizara un poco y hubiera un poco de coherencia de su parte. O de lo contrario habría problemas.

(lo siento no soporte más, aunque cornelia me pegue)

 

Cornelia
--Como podré decir que son hermanos de sangre si ni mi misma familia me crió juntoba ella, ni mij pequeña hermana me quiso,¿Cree que puedo confiar en los demás tal facilmente? Sí, quiero la misma libertad, salir de esta pesadilla y hacer mi vida, vengarme de todos aquellos que no merecen vivir--dije con ojos cristalinos a ambos.

 

—Todos hemos tenido una vida difícil, sécate esas lágrimas y pelea por no tener que llorar por esas razones— dijo friamente la mujer con mirada gris —llora cuando alguien que juraste proteger muere en tus brazos, no llores por personas que jamás llorarían por ti—

Contenido oculto

Es una mujer ruda :p
Y ahora si! Ya me voy a dormir, descansen :3

 

Cornelia
Escuchaba las atentas palabras que pronunciaba aquella mujer y al pensarlo realmente me había dejado llevar por las emociones.
--Que patética... Es verdad, mi honor y valentía al momento de la batalla se quedaban en el olvido--dije limpiandome un poco las lágrimas y dándoles la espalda para que no vieran su rostro.

 

Sebastián

Me partía el alma ver a Cornelia de esa forma, llorado por cosas de su pasado, sólo me pude viendo la escena de lejos, ganas no me faltaban de ir y consolarla, pero decidí darle su espacio y no interferir en aquella plática que parecía tener suma importancia, suspire y cerré los ojos cruzandome de brazos mientras pensaba --sobrevivire? ¿conseguiré mi libertad? -- Me intrigaba mucho pues todo podía pasar en la arena pero ¿que pasaría si llegará a salir ¿que aria?

 

Mi inquietud se debía a algo, ahora se mostraba ante mí, todos lo presentíamos. Con fuego detrás de mis pupilas y mis dos metros de altura que podrían parecer cinco, levanto mi mano para hacer el extraño saludo.


—Misma sangre... El momento de la verdad ha llegado, contaran conmigo y con mis hermanas si es necesario. — El latigazo que es el recuerdo de mis hermanas caídas casi me hace caer pero seguramente otras tribus colaborarían mirando de mala manera a los hombres pero aun así lo harían, también recuerdo a la pequeña pata de pelos pelirroja que no puedo dejar atrás. —Todo por sacar a mis hermanos de aquí. — Mire en dirección Vitrion y Ambrosius, las personas vivas que más respetaba en entre los hombres que llenan la celda, mi único hermano de arena es el primero pero aun así el invicto merece mi consideración.


Mire al hombre en forma de reto, esperando sus acciones, la forma de usar las pieles lo hacía ver conocido y hasta familiar, no por ello confiaría a la primera. La mujer de extrañas ropas también se fijaba en mis ropas y mis rasgos, no pude evitar sentir vergüenza por llevar este collar, por ser una esclava, por estar aquí entre ratas cuando el primer hombre que respete esta bajo tierra, mi hermano en manos del mismo imbécil que me envió aquí y toda mi familia probablemente descansando con Priscus.


Cornelia llorando, Opelius alterado y Sebastián en medio no es una buena combinación, aunque no confíe en el último y la mujer me parezca repugnante en estos instantes debo ayudar, salir de aquí es nuestra primera misión.


—Eres la segunda mujer del Coliseo, solo quedamos nosotras dos, levanta la cabeza y muestra que somos mejor que cualquier hombre. Mientras estas lloriqueando perderemos oportunidades a la vez que rebajas el orgullo tuyo y mío, tan solo por compartir género y ahora sangre.


La mire con decisión pues a mí también me dolían mis perdidas y traumas que puedo de ir que son mucho mayores que los de ella sin embargo suficientes lagrimas ya he soltado en publico después de la muer… te de Pris…cus. Luego mire a Sebastián con una mueca de asco y desconfianza ¿Quién podría pensar que cuando llegamos nos llevamos bien? Incluso nos aliamos para hacer bromas.

 

Ambrosius.

Desde el rincón mas desgastado, donde la humedad se mezclaba con la mugre; ahí donde confinados cual ratas nos hallábamos, la desesperación nos alcanzaba poco a poco. Rotando mi cuello dolorido por la cadena, y tronando algunas articulaciones de este, mire de lejos al hermano de Scato.

De lejos, el hombre estaba tan ansioso como yo, pero poco demostraba esa debilidad; mi respeto... Los niños jugaban como si realmente no les importara nada mas, y mis verdaderos hermanos compartían esta misma incertidumbre.


Pronto el revuelo se hizo presente, un guardia muerto... y dos extraños prometiendo libertad...

Mi rostro torció una muca de sonrisa y parándome junto al arquero del coliseo los mire extendiendo una mano en señal de apoyo, y mi otro bazo sobre la espalda de mi hermano de armas.

—Misma Sangre... Misma gloria... Libertad.—dije a los desconocidos, mire a Opelius y luego a los demás—Sus causas para alcanzar su libertad me dan igual... quien quiera salir ahora hágalo ya, pero de aquel que traicione nuestra hermandad, tendrá la muerte mas cruel que las manos de un hombre herido pueda dar... —Mire a Sebastian— Muchos conocen la libertad, otros solo la pueden soñar y algunos caído ni siquiera pudieron gozarla un día de la vida.... y hoy por ellos nosotros seremos libres... Maximos que fue hijo de Roma apoyaba esta causa, aquel que murió por que su alma se había dañado al servicio de esos puercos; y aun así nunca perdió su convicción... Somo hermanos, desde que nos juramos gladiadores... nos hemos cuidado las espaldas y así seguirá, vivirá aquel que valga la pena...—Me acerque a Cornelia—Priscus decía que eras una Patricia... seguro que no se equivoco... Asesinaste sin honor a un hermano, y aunque nadie te lo reclamo sigue fresco aquello, traiciona esta hermandad que te da la oportunidad de vivir... y yo mismo desgarrare ese cuello, las mujeres no merecen ni mas ni menos consideración y si te dices gladiadora lo sabes...—Ahora su mirada hierro se dirigió a la mujer mas alta—Amazona roja... tu eres mas hermana de lo que pude imaginar tu libertad esta cerca...—Me acerque a Opelius y de un apreton al hombro le susurre al oído—Hoy el alma de Scato es libre...

Mirando a los dos extraño baje mi cabeza en señal de gratitud, y luego hable—Las palabras no son suficientes, haremos lo que este en nuestras manos e intentaremos los imposibles.—

 

Laberius
La desesperación comenzaba a apoderarse lentamente de mis sentidos, todo a mi alrededor parecía sumergirse en el caos, viese a donde viese todo parecía estar mal, nada me parecía sensato o lógico, no cabía duda de que estaba comenzando a enloquecer. Lentamente, giraba mi mirada en varias direcciones pero sin detenerme en ningún punto en particular. Me sentía tan oprimido que ni siquiera podía emitir palabra alguna, mi garganta estaba seca. El murmullo de unas voces extrañas y el ver de pronto a esos dos extraños parados frente a nuestra celda ofreciéndonos su mano me devolvió de cierta manera a nuestra realidad. Su propuesta me golpeó en seco y me derrumbó. Mi espíritu parecía despertar. Al ver como todos aceptaban la oferta y se unía a la voz de "Misma Sangre" mi temor natural a lo incierto me obligó a callar y analizar detenidamente la situación. No podía evitar admirar a aquel par, el infiltrarse en coliseo sin ser vistos era algo por demás increíble.
No tenía muchas opciones, mi libertad era algo que ansiaba pero... tras el encierro, todo me resultaba irrisorio. ¿Podía confiar verdaderamente en aquellas personas? ¿Y si todo era una trampa del imperio? Me parecía descabellado que solo dos personas hubiesen podido derribar las defensas del coliseo e ingresar hasta el subterráneo.
Siempre pensé que de morir, lo haría en batalla y eso es lo que me recordaba a mi mismo mientras veía a Cornelia dudar sobre su respuesta. Ambos posiblemente pensábamos igual y no sabíamos como actuar. Nuestra vida a la suerte de una respuesta.
Extendiendo mi mano en se;al de respuesta me atreví finalmente a decir:
—Misma Sangre, y que los dioses nos amparen.

 

Los dos miraron a los nuevos en aceptar aquellas palabras; la mujer sonrió ante sus decisiones. Sin más que decir el hombre tomó su peculiar espada curva, la cual colocó en la base de la puerta y con un simple movimiento de palanca logró botar el mecanismo que mantenía la puerta en su lugar. La mujer entró a la celda y comenzó a separarlos de esos collares, ella no lo hizo con fuerza bruta, sino con la misma llave que le robó hace unos momentos al guardia mientras este daba su último suspiro.
Liberaron a todos incluyendo a Brazhan a pesar de no haber dicho ni una sola palabra.

–Mi nombre es Auri, provengo de tierras Germanas libres del Imperio Romano; junto a mi está Kaito guerrero salvaje de Iuvavum. Venimos con nuestros hermanos a destruir este lugar–


Kaito, aquel hombre con pieles ya había abierto de nuevo la puerta del exterior con la ayuda de varias personas que esperaban fuera de la celda. En total eran seis hombres con un aspecto parecido al de Kaito, llenos de pintura tribal que los camuflajeaba en la arena; todos tan silenciosos y ataviados de pieles y cordones.
Auri los guió hasta llegar a lla zona de entrenamiento, ya muy conocida por ustedes; en todo el recorrido no se habían topado con ningún guardia y al llegar a esa zona del subterráneo entendieron por qué. Todos los guardias estaban muertos, la mayoría de cortes transversales en sus cuellos; los cuales estaban siendo acumulados en una montaña. Y detrás de ese cúmulo de cadáveres se encontraba un hombre tan alto como Nixiras.
–Conque estos son los Gladiadores; la voz de los oprimidos...– Dijo el hombre mientras lanzaba el último cadaver al tope de la montaña– ... Mi nombre es Hareth, actual líder de esta organización; de donde vengo no tiene importancia, a donde voy es lo que importa...–

Contenido oculto

Estos nueve individuos habían desmantelado silenciosamente a los guardias, acostumbrados a alzamientos internos donde el sonido del metal se hacía presente; jamás se esperaron a un grupo de personas en pieles y con armas tan ligeras que sólo creaban ráfagas de viento mientras cortaban la carne.
Pero había más, cinco domadores de bestias del Coliseo estaban parados junto a los de sanguine frates. Vitrion no dudó en colocarse en posición de combate; pero Hareth, aquel coloso se acercó a él y lo calmó –Estos hombres siempre han pertenecido a nuestra organización; fueron ellos quienes asesinaron a Varus el cual había escuchado información con respecto a este día– Los domadores bajaron la mirada, su espíritu estaba dañado –Scato era nuestro líder en ese momento, y para protegerlos creó ese teatro; pelearse con Varus le aseguraría a él el castigo de su muerte... –Los domadores seguían sin levantar la mirada –Ellos son los que hoy arriesgaron todo para meternos a este sitio, es de noche y con estas pieles parecíamos excelentes especímenes para la diversión del pueblo. Y al poder entrar logramos recuperar algo que estoy seguro les satisfacerá– Los guerreros dejaron en el suelo un gran bulto envuelto de pieles, al quitar la piel de encima dejaron ver todas sus armas –Esta es una pelea injusta; estaremos en desventaja si es que nos descubren. Es por ello que pelearemos con armas; tómenlas y prosigamos a nuestro escape...–

Auri les entregó una copia a todos del mapa; la opción a la libertad:

Contenido oculto: Mapa de la fuga

–Saldremos por el drenaje subterráneo del Coliseo, debajo de los baños–Decía Hareth mientras avanzaban hacia los baños del Coliseo– Al estar en el drenaje subterráneo dudo que ahí tengamos problemas pero debemos apretar el paso para llegar al Acueducto central; como sabrán esa construcción es externa, ahí podrán vernos algunos soldados así que hay que tener mucha suerte– Al llegar a los baños ahí los esperaban dos guerreros más los cuales les indicaron la salida; habían levantado toda la piedra del suelo; aparentemente este conducto hacia el drenaje lo habían estado haciendo de hace ya varias semanas– Debemos actuar ahora; con Naevius en la cabeza será el Imperio de la esclavitud; hemos liberado a unos cuantos esclavos, algunos nos serán de gran utilidad, uno de ellos conoce los pasillos del Palacio Imperial, nos esperan al terminar el recorrido del Acueducto. Al llegar con ellos nos adentraremos de nuevo por un drenaje subterráneo debajo del Palacio Imperial; ahí seguiré explicando nuestra estrategia–

 

Mire al imponente hombre mientras explicaba el plan, que yo ya conocía por la confianza que me tenía el resto.

Incline mi cabeza en señal de respeto mientras nombraba a Scato un hombre que me trato como un igual desde el principio, habladome de la manera más suave que le escuche decir.

Cuando me dieron el paso avance mientras seguia pensando en el esclavo que salvaron ¿Quién sería? Lo e visto antes ¿Alexandro? No, esas son ideas mías, el es guardado como joya en algún sitio, no es un hombre de acción.

Me vino a la mente algo y se lo dije al jefe apenas pude.

--¿Cree que en el acueducto haya suficiente agua para deslizarnos? En vez de caminar, acostarnos y dejarnos llevar sería así más dificil vernos desde abajo.

 

Hareth miró en dirección a Nixiras; por un momento se quedó pasmado, estaba acostumbrado a ver a los demás hacia abajo, pero ella tenía su altura –El flujo del agua no es tan fuerte como para tomarla como una ventaja, no podremos arrastrarnos pues de todos modos nuestros cuerpos son visibles, la única manera de moverse sin ser notados sería recostándonos por completo en el ducto y arrastrarnos con nuestros brazos; pero será ineficiente porque iríamos lento; el agua empaparía nuestras pieles y ropajes haciéndolas más pesadas, además de que el agua entorpecería nuestra visión. no nos queda más que correr por el Acueducto esperando no ser vistos por el enemigo–

Después de decir esto, los guerreros comenzaron a descender por aquel túnel recién labrado, Petro y Píctor los siguieron, pues ese era el objetivo de los presentes, de todos menos los domadores; Gaius los miró desconcertado –Ustedes no vendrán con nosotros?

Uno de ellos por fin se atrevió a mirar a los Gladiadores directamente a los ojos –Por nuestro descuido, nuestro líder y hermano Scato murió; lo hizo para defender la causa, pues conocía a la perfección la importancia de nuestro rol en esta fuga. Aún así nuestro honor está manchado– Voteó a ver a sus compañeros. y colocó su mano en el hombro de uno de ellos, esto hizo que ese hombre también levantara su mirada –Nuestras vidas serán ofrecidas para darles más tiempo, nosotros seremos quienes quemaremos este lugar de opresión llamado Coliseo; arderá tan fuerte que podrán ver el humo desde el lugar donde ustedes podrán llamarse libres...– Los otros dos domadores también levantaron el rostro, y uno de ellos dijo –Nuestro fuego se levantará hasta el cielo; de este modo llegaremos hasta Scato...–
Hareth sonrió y estrechó sus manos –Siempre serán recordados, al igual que todos aquellos que cayeron ante la ambición de un Imperio vacío...–

Contenido oculto

En seguida crearé la nueva discusión ;3 despídanse de esta discusión; pues cuando iniciemos la fuga del Coliseo, ya no se posteará más por acá.

 

Contenido oculto

Amelie no me respondiste o el jefe no libro hizo y No vayas a borrar esto pues hay demasiado aquí que recordar

 

Contenido oculto

No vi la edición; editaré la respuesta en el post #1273
No; por mi no borraría nada y que este foro se quedara hasta la eternidad xD espero que al terminar el rol no simplemente lo borren D: pero de mi parte tengan seguro que no borraré nada xD

 

Sebastián

Nunca me imaginé que llegará a suceder tal acto por parte de estos hombres, sobe mi garganta al ser suspendido de mi cuello aquel collar de perro que tenía, escuchaba con más atención las palabras de aquellos que tomaban la palabra, los seguí integradome al grupo con mis demás compañeros. Mis ojos se abrieron de la sorpresa que me lleve al ver los cadáveres de muchos de los guardias, y sobre todo la forma en cómo los apilaban cómo un montón de basura, me detuve a escuchar al resto de los integrantes con ropas poco usuales, y al escuchar mencionar el nombre de Scato, un escalofrío recorrió mi cuerpo trayendo a mi mente aquellas escenas que pase con el, --seguramente me mataran si se enteran de la relación que teníamos-- susurre para mi mismo, pero eso no fue un impedimento para seguir adelante, tome algunos de los objetos que nos ofrecían mientras hacia exactamente lo que me decían para no provocar malas inspecciones y evitar que me odiaran a muerte los amigos de scato

 

Veo el rostro del jefe, sorprendido por mi estatura quizás, sonrei tenue. Sí la corriente no era lo suficientemente fuerte no tendría sentido mojarnos.

-Sí así es apueremos el paso mientras que la noche sirve para cubrirnos ¿tienen tela o pieles que sobren? Sí no cubro mi cabello eso sería ponernos un blanco.

Recuerdo la forma en que Aristela cubría y ataba mi melena antes de mi primera cacería o como yo hacia eso con mis hermanas menores.

-Tú el que ora, también debes cubrirte- llamo la atención del que creo se llama Tertirus o algo así.

Recordando a la mata de cabello pelirrojo sentencio que probablemente me separaria del resto en el palacio, no quiero llevar a nadie más conmigo, nadie arriesgara su vida más de lo necesario.

 

Hareth

–Tu has vivido las guerras; y sabes lo que es necesario para eventos como este– asintió –Las pieles necesarias las daremos al llegar al drenaje subterráneo; además de tintura para pieles como la de aquel Gladiador –Decía al señalar a Vitrion, pues sus quemaduras recién curadas tenían un brillo característico de la piel nueva, un brillo que reflejaba la misma luz.

Contenido oculto

Parece que estás leyendo la discusión nueva que estoy creando xD jajajaja

 

-Soy una guerrera, siempre he sido libre , se como cazar y buscar lo que necesitemos pero también se lo necesario para matar. Amazona hasta la muerte- lo último lo.dije en un susurro entre suspiros.

Ellos tenían todo pensando, creo que no tenía que decir otra cosa. Antes de regresar al subterráneo vi que quedaban armas y telas razgadas. Tomé un par de dagas maltratadas que guardé, algo así te cuidara las espaldas.

En la tela tenía que escribir algo,con sangre escribí unas frases y lo guardé sin importar miradas sobre mí.

 

Los guerreros ya estaban dentro del túnel hacia el drenaje; era momento de escapar del Coliseo, la prisión que los tuvo tanto tiempo en cautiverio; ya no pelearían más por diversión de otros, la próxima vez pelearán por su libertad.

Contenido oculto

Aún pueden colocar respuestas en esta discusión; pero al terminar la primera parte cerreré permanentemente esta discusión
Ahora pasen a la siguiente: https://fanficslandia.com/index.php?threads/fuga-del-coliseo-drenaje-subterráneo.44201/#post-736471