[Gladiadores] Rehenes de un imperio

Vitrion

–No, otros callados; unos bastante ruidosos; hay algunos crueles –levantó levemente su brazo quemado– Otros sanguinos... sanguinarios– Dijo buscando a alguien que al parecer no logró encontrar– ¿Quién es el tuyo?

 

Sebastian

Continuaba comiendo al lado de Brazham cuando Priscus llego a fastidiarlo nuevamente con su cabello, la verdad si tenia razon estaba descuidado pero no era para burlarse, que esperaba si estabamos en un sitio como ese—Dejalo empaz o que ¿Emvidia?—le grite pues se alejó de inmediato tratando de defender a mi compañero que no lo hizo por si mismo y yo detestaba esa injusticia

 

El tiempo en el comedor llegaba a su fin; todos los Gladiadores fueron desalojados para cerrar el lugar, varios esclavos de la prisión entraron para limpiar.

Los guardias hicieron cambios de turno, y aquellos que ingresaron llevaron a los Gladiadores a sus habitaciones; pues eran libres de rondar en el subterráneo de día, pero estaba estrictamente prohibido hacerlo de noche.
Mañana sería un día difícil, era tiempo de acostarse.

Mientras tanto en la estancia de esclavos, un celador se quedó vigilándolos, era momento de descansar un poco, aunque la celda no fuera un lugar cómodo.

Contenido oculto: Todos

Mañana inicia nuevo capítulo :3 wiiiii

 

Capítulo IV
“Consecuencias”​

Era un día más en el subterráneo del Coliseo; los guardas ya habían amarrado a los esclavos de las manos y jalado bruscamente hasta la Arena Olimpia; para su sorpresa también estaban varios Gladiadores.

​

Gallio se levantó de las gradas y fue señalando a cada uno de los Gladiadores delante de él.


–Gaius; el gladiador capaz de derrotar a una persona sólo con sus manos.
Pictor; el más rápido con la espada pero no precisamente el más fuerte.
Vitrion; gladiador que usa la espada y la daga a pesar de tener un brazo quemado.
Petro; gladiador distinguido por el uso de la daga.
Varus; conocido como el sucio Varus, su estrategia siempre es hacer trampa.
Opelius; el gladiador sin voz, maestro del arco y la daga; le cortaron la lengua antes de entrar al Coliseo.
Marius; el más diestro en técnicas defensivas con el escudo y la espada
Scato; el rey del mazo, conocido por matar con un solo impacto
Ambrosius; el invicto en batalla, veloz con los pies, certero con la espada y mortal con su daga.
Kedoku; el novato del momento.
Tertius; nuevo Gladiador cuya fuerza podría alcanzar la de Scato
Sextius; el traidor al imperio pero hábil luchador
Alethia; la primera mujer en ser nombrada Gladiador
Marcus y Cimber; separados son uno más; juntos hacen estrategias feroces.–


Gallio le indicó a Ambrosius que avanzara hacia ellos; los guardias liberaron las muñecas de los esclavos y los colocaron frente al Gladiador, el cual sostenía una afilada espada.

Ambrosius avanzó hacia Priscus y levantó su espada en el aire –Es un honor, poder cortar esta cadena– Dijo al bajar rápida y ferozmente su espada, muy cerca del cuello de Priscus, donde el pequeño candado aguardaba ser destruido. El collar que demostraba su estatus de esclavo cayó al suelo. Uno de los guardias que estaban detrás de los esclavos se acercó a Primus.

–Primus; desde este momento no eres un esclavo; eres un Gladiador–Aquel hombre le entregó unas botas de piel y un mazo de hierro; esto provocó que la gente en las gradas comenzara a hablar; Ambrosius se veía indignado, pues al esclavo más destacado sólo le habían dado lo necesario– Estos son los primeros obsequios de tu mecenas, serán almacenados en la armería del Coliseo; jamás te dejarán bajar con ellos al subterráneo–

Contenido oculto: Primus

Mazo de hierro= +3 de ataque
Botas de piel= sin bonificación extra

Ambrosius volvió a levantar su espada, pero ahora frente a Cornelia quien también se había destacado en las pruebas; cortó aquel candado y el peso de aquel collar fue exterminado, volvía a sentir ese alivio de libertad. El guardia detrás de ella se acercó.


–Cornelia; desde este momento no eres un esclavo; eres un Gladiador–El guardia le entregó una armadura superior de piel con hierro, unos guanteletes de hierro, unas botas de piel y una daga de hierro– Estos son los primeros obsequios de tu mecenas, serán almacenados en la armería del Coliseo; jamás te dejarán bajar con ellos al subterráneo–

Contenido oculto: Cornelia

Armadura superior de piel con hierro= +2 defensa
Guanteletes de hierro= +1 defensa
Botas de piel= sin bonificación extra
Daga de hierro= +2 ataque

Ambrosius volvió a repetir sus movimientos; esta vez frente a Brazhan, el collar cayó directamente al suelo levantando un gran monto de arena –Eres un gladiador al no dejarte derrotar– Dijo haciendo referencia a su segundo ataque en la zona de entrenamiento, donde sorprendió a los presentes por no conformarse con su primer resultado.


–Brazhan; desde este momento no eres un esclavo; eres un Gladiador–El guardia que estaba detrás de él le entregó unos guanteletes de hierro, y un arco de madera bien tensado– Estos son los primeros obsequios de tu mecenas, serán almacenados en la armería del Coliseo; jamás te dejarán bajar con ellos al subterráneo–

Contenido oculto: Brazhan

Guanteletes de hierro= +1 defensa
Arco de madera tensado= +3 ataque

–Ahora…– Dijo Gallio señalando a Sebastian– Tu desempeño no ha bastado para que podamos darte el título de Gladiador (ver los detalles en el spoiler de abajo “explicación de puntajes”) no por ello no te daremos el beneficio de una segunda oportunidad– Desvió su mirada hacia los Gladiadores– Marcus, es un Gladiador novato, aún sin experiencia en Arena; además de que fue el más débil en calificar el día anterior; sin su hermano el resultado de su ataque no es el mejor– Marcus dio un paso adelante y un guardia le dio una espada de entrenamiento; el Gladiador no usaba ninguna clase de armadura – Por lo tanto ustedes pelearán; si el esclavo Sebastian vence a Marcus, se convertirá en Gladiador; y si Marcus pierde contra el esclavo; este regresará a ser un esclavo – Marcus se llevó la mano al cuello y miró con rabia a Sebastian; al fondo, su hermano Cimber también le clavaba la misma mirada.

Un guardia le entregó a Sebastian su espada de entrenamiento y la Arena Olimpia quedó vacía en el centro; todos los demás guardias y Gladiadores rodearon el área para no estorbar en combate. Ambrosius veía la escena con los brazos cruzados.


–¡Qué empiece el combate!– Gritó Gallio

Contenido oculto: explicación de puntajes

Para que alguien pueda convertirse en Gladiador; pido como mínimo sumar “10” puntos en ambas pruebas (en zona de entrenamiento y en Arena Olimpia) el resultado de Sebastian fue de “8” sin ninguna bonificación

Contenido oculto: Sebastian

Si, ¡Es hora de un combate!

Es la misma dinámica que llevamos para las pruebas, tirarás tres dados en cada turno:
-Tirar dos dados de 10 caras. El primer dado SIEMPRE representará al ATAQUE; el segundo dado SIEMPRE representará la DEFENSA.
-Tirar un dado de 5 caras. Este dado representa la SUERTE de tu personaje; si en el dado sale “4” o “5” se le sumarán +5 de ataque.
-Todos los combates se llevan a cabo por turnos (siempre tirarán primero ustedes, luego yo representando al enemigo)
-Para que el ataque afecte al enemigo siempre debe ser más alto que la defensa del enemigo.
-En el mismo turno donde se tiran los tres dados (de ataque, defensa y suerte) se les sumarán los puntos de ataque que tienen sus armas (si es que en ese momento tienen una)

Mucha Suerte!

Marcus tomó la espada con ambas manos –¿Qué esperas? No tientes mi paciencia… –


Sebastian
Ataque:
Defensa:
Puntos de vida: 50 pv [El primero de ambos en bajar 15 pv al oponente es el ganador]


Marcus
Ataque:
Defensa:
Puntos de vida: 50 pv [El primero de ambos en bajar 15 pv al oponente es el ganador]

 

Kedoku.
–No, otros callados; unos bastante ruidosos; hay algunos crueles –levantó levemente su brazo quemado– Otros sanguinos... sanguinarios– Dijo buscando a alguien que al parecer no logró encontrar– ¿Quién es el tuyo?

Me preguntó Vitrion mientras yo bebía un poco de agua, le respondí que era Naevius, luego de eso todos nos fuimos a nuestras habitaciones respectivas, al parecer está prohibido andar por el subterráneo en la noche, que regla mas fastidiosa. Al despertar fuimos llevados a la Arena Olimpia, obviamente fui arrastrando los pies como un crío que no quiere salir de casa, ¨¿Cuanto faltará para que la muerte nos haga el favor de llevarse a ese viejo? ¿Una semana, dos, tal vez cuatro? ¡Muérete de una vez, viejo podrido!¨ me decía mentalmente con un tic en el ojo mientras Gallio el tuerto nos señalaba y decía unas cosas que decidí no escuchar. Salí de mis pensamientos cuando oí gritar al tuerto ¨¡Que empiece el combate!¨, me quité del medio como lo habían hecho todos, aun desubicado de que pasaba a mi alrededor, cuando devuelvo mi mirada al centro observé que el nuevo y Marcus iban a pelear.

— Hmp, que problemático...— susurré mientras observaba a el novato que aun no hacía nada.

 

Contenido oculto: amelie

oye tengo escuela desde la 1:00pm hasta las 9:00pm despues estoy disponible porfavor que no maten a sebastian mientras no estoy, pero por esta ocasión exclusivamente tirare los dados

Sebastián

No podía creerlo, no lo había logrado mi única esperanza era vencer a aquel hombre, ¿lo lograre? espero que si, me esforzare al máximo y lo venceré, tome mi espada con las dos manos y corrí a atacarlo

 

Contenido oculto: Alisse

Está bien :) ; pero si mañana no sigues el combate suspenderé el mismo (pues por el momento todooos los jugadores están viendo esta pelea xD si se atrasa mucho se aburrirán :p y eso no lo permitiré.

Marcus recibió el impacto de Sebastian pero vio una valiosa oportunidad al ver que estaba descuidando totalmente su defensa para poder dar un fuerte impacto.
–Tu ataque fue poderoso, se ve que en situaciones de peligro tu personalidad se lo toma en serio– Dijo Marcus deteniendo la espada de Sebastian, no pudo detenerla lo suficientemente rápido como para parar el golpe– Un consejo, jamás descuides tu defensa– Desvió la espada de Sebastian y lo atacó a la altura de las costillas

–¡Golpea como hombre Marcus! Elimínalo– gritaba Scato, el cual aún seguía molesto con Sebastian


Sebastian
Ataque: 8 (sin suerte)
Defensa: 1
Puntos de vida: 42 pv [-8 del ataque de Marcus]


Marcus
Ataque: 9 (sin suerte)
Defensa: 5
Puntos de vida: 50 pv [-3 de ataque de Sebastian]

 

Sebastian

Estaba tan nervioso que no pude concentrarme y me descuide en a defensa, ruego a los dioses que estén de mi lado, volví a atacarlo dando un golpe en diagonal mientras gritaba con todas mis fuerzas.

 

Contenido oculto

Estoy perdida ;_;

 

Marcus se preparó para si siguiente ataque, recibió el de Sebastian no había sido tan fuerte como el primero aún así Marcus se resbaló haciendo que su centro de equilibrio fallara; pero la suerte estaba de su lado y su espada logró golpear la espinilla de su adversario. Marcus se puso rápidamente de pie, sorprendido por la suerte que había tenido.

Sebastian
Ataque: 4 (sin suerte)
Defensa: 2
Puntos de vida: 38 pv [-4 del ataque de Marcus]

Marcus
Ataque: 1 (con suerte +5)= 6
Defensa: 2
Puntos de vida: 45 pv [-2 de ataque de Sebastian]

 

Contenido oculto

No puedo creerlo :s

Sebastian
Pasaron por mi mente demasiadas cosas pero todas me impulsaron a continuar atacándolo

 

Pero Sebastian no esperó a que Marcus se pusiera cómodo, ferozmente atacó al Gladiador el cual pudo defenderse; aún así el impacto había sido muy fuerte. El público estaba muy sorprendido. Pero el orgullo de Marcus era fuerte, también el atacó con fuerza; el público ya estaba de pie, la pelea se tornaba muy emocionante.

Sebastian
Ataque: 9 (con suerte+5) =14
Defensa: 8
Puntos de vida: 36 pv [-2 del ataque de Marcus]

Marcus
Ataque: 10 (sin suerte)
Defensa: 8
Puntos de vida: 39 pv [-6 del ataque de ataque de Sebastian]

 

Sebastian

—todo depende de este ataque— me dije dirigiendo la mirada a los ojos de mi oponente

 

Sebastian atacó con todo a pesar de la fatiga, su espada golpeo directamente a Marcus el cual pudo defenderse pobremente; varios mecenas se mordían las uñas; Venator,el hombre que se había nombrado mecenas de Sebastian si este superaba las pruebas; se acercó lo más que pudo al filo de la Arena–¡VAMOS MUCHACHO!– Venator gritó con todas sus fuerzas; mientras Marcus lanzó un fuerte ataque; pero Sebastian reaccionó rápido y lo detuvo con su espada; al igual que lo había hecho Ambrosius cuando lo salvó de la rabia de Scato. Ambrosius sonrió desde donde estaba.

–¡El combate ha terminado!– Gritó Gallio –Un combate memorable entre dos novatos; nos has sorprendido Sebastian– dio una seña hacia Ambrosius, el cual se acercó y con su espada afilada cortó el collar de hierro, su movimiento fue muy rápido –Deuda saldada– dijo Ambrosius hacia Sebastian.

–¡Sabía que no había invertido en vano!–Al fondo se escuchó el grito de Venator; el nuevo mecenas de Sebastian; después de esto un guardia se acercó.
–Sebastian; desde este momento no eres un esclavo; eres un Gladiador–Aquel hombre le entregó unas botas de piel y una espada de hierro– Estos son los primeros obsequios de tu mecenas, serán almacenados en la armería del Coliseo; jamás te dejarán bajar con ellos al subterráneo–

Contenido oculto: Sebastian

GANASTE POR UN PUNTO!!!! Buena pelea xD
botas de piel: sin bonificación extra
espada de hierro: +3 en ataque

Sebastian
Ataque: 6
Defensa: 5
Puntos de vida: 36 pv

Marcus
Ataque: 5
Defensa: 2
Puntos de vida: 35 pv [-4 del ataque de ataque de Sebastian]

 

Sebastian

–Sebastian; desde este momento no eres un esclavo; eres un Gladiador– Las palabras que quise escuchar, Lo logre di saltos de felicidad sin importar que todos me vieran raro, –Deuda saldada– dijo Ambrosius, —Para mi no es suficiente, para mi te debo aun mas—Le respondí entre sonrisas dándole una gran palmada en la espalda. —Por cierto, no te lo había agradecido antes, Gacias amigo—continué dándole un gran abrazo para después de un breve momento salí corriendo recorriendo todo el lugar dando saltos de alegría.

 

–¡Silencio!– gritó Gallio ahogando todo el júbilo en gradas y Arena –Aún nos acontece un asunto más– giró su vista hacia los mecenas presentes –Aurelius y Naevius, acérquense un momento– Un hombre de nariz aguileña y expresión inmutable caminó hacia Gallio, el era Naevius; mientras que otro hombre se acercó al organizador, era un hombre joven, su nombre era Aurelius –Ambrosius y Scato acérquense– Ambrosius se alejó de Sebastian –No hagas nada estúpido niño; quédate donde estás y no muevas tu boca– le dijo a Sebastian con una mirada severa. Scato y Ambrosius se colocaron uno junto al otro.

–Ustedes dos han cometido una infracción; combatieron con intensión de lastimarse uno al otro, sino es que matarse– Gallio los señaló para regañarlos –Si tanto quieren una pelea se las daré; pero no en el subterráneo...
–Un momento Gallio, estás volviendo a pasar sobre mis decisiones; Ambrosius es mi Gladiador; yo decido con quien va a pelear.– Aurelius interrumpió a Gallio, a lo cual Naevius soltó una pequeña risa –¿Ah, te parece una broma? tu Gladiador puede morir– respondió Aurelius a la ofensiva risa de Naevius.
–Verás Aurelius, Scato NO perderá; el que morirá de una vez por todas será Ambrosius–
–¡Basta!–Gritó Gallio para callar a ambos mecenas –No discutan, esta sanción fue aprobada por el Emperador, si la niegan estarán cometiendo traición– Aurelius intentó protestar, miró a Ambrosius y desvió la mirada; después se fue de las gradas, en verdad estaba molesto.

–El combate se llevará a cabo en tres días; así que eviten provocarse uno al otro hasta entonces; pueden retirarse–

Ambrosius y Scato se miraron por unos segundos; Scato sonreía.


Después de unos minutos, todos los Gladiadores habían sido enviados al subterráneo; mientras tanto Marcus fue sometido de nuevo.

Contenido oculto: General

En un rato abro el siguiente capítulo :3 ahora entrarán los nuevos reclutas *o*
Por el momento siéntanse libres de rolear

 

Sebastian

Obedecí a las palabras de Ambrosius y me quede parado pero no pude evitar escuchar aquella conversación –Verás Aurelius, Scato NO perderá; el que morirá de una vez por todas será Ambrosius– Mis ojos se abrieron tanto de el asombro, ¿ Ambrosius, mori-ra por mi culpa?— hasta pronunciar esa palabra me costaba pronunciar, no, no ,NO! grite me hinque y golpee el piso con mis dos puños cerrados. después me acerque a el en el subterráneo me apoye en su hombro como siempre y le dije—Yo creo en ti, Se que ganaras— sin mas remedio, por una parte quería hacer algo pero no era posible hacer nada por mas que lo deseara, me di la vuelta con un nudo en la garganta y me retire.

 

Capítulo V
Preparándose para lo peor​

La tarde en Roma estaba en pleno apogeo; las calles estaban llenas de personas listas para hacer sus compras; varios vendedores ambulantes exponían sus mercancías a todo quien pasara frente a ellos.
Pero como siempre, el hecho de ver Soldados Imperiales caminando en las calles con nuevos esclavos, hacía que las personas se incomodarán; en especial por algunos de los esclavos a quienes en verdad tenían miedo porque no conocían mucho o nada de ellos.

Sólo un hombre pudo ubicar a alguien….

Contenido oculto

Nombre: Laberius.
Edad: 25 años.
Sexo: masculino.
Apariencia física: Es alto y de contextura fornida. Su piel color ébano se marca por un camino de cicatrices causadas por los golpes que debió soportar la mayor parte de su vida. Sus ojos verdes se enmarcan por unas espesas y oscuras pestañas que le dan a su rostro un aire de seriedad y dureza. A causa de las exigencias de sus anteriores amos, luce la cabeza rasurada al igual que el rostro.

Laberius; probablemente el único crío que sacó de sus casillas al consejo del Emperador; pues su estilo de vida, lo llevó a conocer al comerciante más influyente de toda Roma; un hombre dedicado al culto de Sabacio, sus vinos eran bien vendidos en altos estratos; pero su fama llegaba a la bodega del mismísimo Emperador; el cual disfrutaba sus cosechas. Liberius sin saber su fama, logró asesinarlo; pero fue instantáneamente descubierto y enviado a prisión, a pesar de que en ese momento sólo contaba con ocho años. Años después, la furia del Emperador se extinguió tras conseguir a un nuevo y mejor surtidor de vinos, por lo que liberó a Laberius de prisión pero sólo para ser enviado al Coliseo… a pesar de todo, le hizo pasar unos momentos amargos en sus placenteras y exuberantes comidas.


Había una mujer entre los esclavos; nadie sabía de su pasado, pero sabían lo básico de ella por su complexión tan distinta, además de que su presente aún estaba fresco en las mentes de los habitantes…

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Nombre: Nixiras
Edad: 19
Sexo: Femenino
Apariencia física: Es una mujer de belleza exotica, en extremo alta de casi dos metros, curvas pronunciadas con piernas y caderas anchas, no tiene seno derecho y el izquierdo es pequeño, su cabello es una melena pelirroja, es de tez morena con ojos amarillos. Sus manos ni rodillas son tersas y su trasero está lleno de cicatrices por los latigazos que recibía de la guardia cuando se resistía al emperador, sus hombres o al consejero.

Nixiras era una rebelde quien no soportó los tratos del mismísimo Cassius y Caelus; para ella, aquellos hombres no significaban nada, su rango no era superior ni inferior al de ella, es por eso que exigía su respeto; y al no obtenerlo se tornaba bastante agresiva, tanto que llegó a matar a un par de hombres dentro del estrato más alto, donde el Emperador tenía su harem de mujeres y las compartía con sus más allegados. Su fortaleza era admirable, es por ello que Caelus la envió directamente al Coliseo; ahí sabía que algunos hombres lograrían detenerla si se volvía a comportar como una salvaje.

Y por último; había una persona que nadie conocía, aún así caminaba junto a los demás esclavos; atado de manos y con la cabeza agachada; el morbo por esta persona era muy fuerte; nadie lo reconocía, ni siquiera podían inventarse especulaciones; era como si esa persona no existiera. Al parecer ocultaba más que sólo su nombre. A la única conclusión que llegaron los romanos fue que si estaba ahí era porque el Emperador conocía su pasado y si no se exhibía era que aún el momento no era oportuno…


Cuando los soldados les entregaron a los guardias del Coliseo a los esclavos; estos los jalaron fuertemente hacia su interior; el subterráneo era un sitio lúgubre pero con la suficiente luz como para ver por donde se caminaba. Los guardias se detuvieron frente a una gran puerta de Hierro; uno de ellos tocó a la puerta y tardó un poco en abrirse; en su interior había más guardias que tenían amarrados a otros dos esclavos; Henxia y Primus, esclavos llevados al Coliseo el día anterior.

Contenido oculto

@Mikasa Ackerman @Guriro-kun

Después de sacar a estos dos esclavos, siguieron caminando por los pasillos hasta llegar a un lugar mejor conocido como “zona de entrenamientos”, en aquel lugar había varios muñecos y bloques de paja firme para destrozar; varios blancos para los arcos y cofres donde se podían encontrar diversos trozos de paja, cuero, correo y madera; el lugar estaba vigilado por bastantes guardias con enormes armaduras y lanzas; y a pesar de que había armas en esta zona de entrenamiento, ninguna tenía filo.

​

–Gladiadores, aquí tienen más esclavos para la prueba de Gladiadores –

Los guardias sometieron a los tres nuevos esclavos, y les colocaron una especie de collar de hierro, el cual era sostenido por un candado con herrumbre, olía a fierro viejo.

–Esto es lo que los distingue de los demás, ustedes son esclavos– Dijeron hacia los sometidos; Primus y Henxia ya tenían colocados estos collares.

Casi inmediatamente de este proceso, los guardias los liberaron de las ataduras en sus manos dejándolos sólo con su collar de hierro; después se colocaron alrededor de la zona de entrenamiento para cuidar sus acciones.


Un Gladiador se acercó a ustedes –Mi nombre es Gaius, recuerden mi rostro pues es a mi a quien deben impresionar–Dijo arrastrando un cofre con armas en su interior, aquel Gladiador era muy fuerte pues sólo con dos dedos jaló aquel cofre de hierro y madera–Elijan un arma y uno por uno demostrará su fuerza–

–La daga, excelente amiga cuando tu espada te fue arrebatada; es raro que alguien espere que tengas a esta pequeña amiga en el cinturón, a pesar de ello no es tan fuerte como una espada–



–El arco, gran ventaja a la lejanía; pero si no dominas esta cosa a la perfección, en un combate cuerpo a cuerpo no te servirá de nada–

–El mazo; necesitarán gran fuera para poder soportar su peso, por esto suele ser un arma de ataque lento, aunque ya hay varios que dominan este arte–


–Y la espada; fiel compañera de los guerreros que buscan eliminar a su enemigo de manera rápida; más pesada que una daga y un arco pero mucho más ligera que un mazo; la elección que muchos de nosotros tomamos–

Contenido oculto

Bienvenidos al rol de Gladiadores!
Es hora de elegir un arma y atacar; el arma definirá su caracter como luchadores, por ahora sólo elijan la que crean que más les ayude; más adelante puede cambiar de armamento si no les funcionó :3 además... más adelante en el rol podrán usar dos armas si es que así lo prefieren
Para probar su arma contra un objetivo, deben lanzar dos dados de 10 caras y un dado de 5 caras.

Contenido oculto: Mapa de ubicación

Del lado derecho está la "zona de entrenamiento" Recuerden que aunque el mapa se vea muy pequeño, los espacios son muy grandes.

 

Brazhan



Miré con atención el collar tirado sobre la arena, por un momento me sentí libre al ver aquella cosa en el suelo. Pero ¿Para qué engañarse? Ahora era un gladiador, un esclavo a pesar de los privilegios que aquellos mecenas daban. Mire los objetos que me habían entregado con atención y sonreí ladinamente, a ver cuánto me duraban aquellas cosas.
De un momento a otro, todo se volvió disturbio para mis oídos. Escuché con atención cuando dijeron que Sebastian aun no iba a ser nombrado como uno más. Me apené mucho por él, ya que se notaba el entusiasmo del chico. Me sorprendí cuando dijeron que tenía que enfrentarse a un tal Marcus, sin duda no me hubiera gustado estar en su lugar; miré la pelea con atención y mi impacto fue grande al ver aquellas escenas que pasaban tan rápidas por mis ojos.
Sebastian lo estaba haciendo bien delante de aquel Marcus. Uno de los dos solamente podía ganar, el que perdía volvería a ser esclavo y el que no, sería gladiador. Podía sentir la adrenalina en mi interior, a pesar de que mi expresión era neutral y desinteresada, me entusiasmaba por cada estocada.
Al final, Sebastian ganó, por poco y pensé que no lo lograría. Cuando creí que todo estaba arreglado Gallio anunció otro combate; Ambrosius y Scato, quienes se habían enfrentado anteriormente en los calabozos. Luego de eso, Sebastian pareció estar en desacuerdo ¿Por qué? No comprendía los sentimientos del chico con respecto a Ambrosius, suponía que era simple admiración. — Bah, cosas de chiquillos. — Pensé.

Fuimos llevados al subterráneo, allí Sebastian desató su ¿ira? Pues, estaba eufórico y molesto. Seguramente por lo de ese gladiador. Luego de unos minutos salió corriendo a no sé dónde. Daba igual, mientras no se meta en líos como siempre.
Até mi cabello con la correa, iba a hacerle caso a Priscus después de todo. Tendría que hacer algo con mi pelo en algún momento.

Contenido oculto

Resumiendo ¿Dónde? Jaja, lo siento, es que como me quedé colgada (porque los alertas no me llegaban) y me perdí de contestar barias cosa.

 

Sebastián

Fui a tomar algo de ropa y note a varios ahí pero no dije palabra alguna, se apreciaban algunos susurros acompañados de miradas indiscretas, pero las ignore, Me dirigí a los baños, pues no había tocado el agua desde que llegue y con todo lo que había pasado, me sentía como un cerdo recién revolcado, me quite los muy humildes harapos y metí mi cabeza en un cubo que llene previamente, el agua estaba helada, creo que era lo mejor, no dejaba de pensar en aquella pelea contra Scatto, ¡maldita sea! Si hubiera controlado más mis emociones, bah soy un niñato sin remedio, me decía en voz alta, aún no me percataba si hubiese alguien ahí o no, comenzé a ducharme sin remedio, tarde un largo tiempo pues muchos pensamientos me invadan, ciertamente los nuevos esclavos me recordaron cuando y como llegue a este sitio, aunque no llevará mucho tiempo.