Vampire Diaries Give Up [Stefan]

Título: Give Up.
Tipo: One-Shot.
Serie: The Vampire Diaries.
Personajes: Stefan Salvatore. Amber.
Nota: Spoiler de la primera temporada.

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G i v e U p​

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La cabeza estaba dándole vueltas como loca ahora mismo. No podía pensar con claridad en esa situación ni en ninguna que se le impusiera en ese instante. ¿Cómo demonios había pasado todo eso? ¿Por qué le estaba ocurriendo eso a él?

—Yo no lastimo a la gente —Jadeó débilmente, apoyándose del fragante auto deportivo rojo—. No lo hago. Soy el hermano bueno.

Amber lo observaba desde una distancia no tan segura, postrada en su lugar mientras lo escuchaba lamentarse y decirse en silencio a sí mismo que era él quien hacía el bien. No tenía miedo ahora mismo aunque el apuesto muchacho se comportase de aquella manera tan extraña.

—¿Tú quieres lastimarme? —Inquirió en voz baja, con sus delicadas cejas marrones apenas juntándose al preguntar insegura.

Stefan se dio la vuelta en ese mismo momento, observándola desde los pies a la cabeza con una sonrisita casi torcida que era peligrosa e inusual en él (aunque ella no lo sabía), como si estuviese degustándola con el mero hecho de mirarla. Sus miradas estaban fijas en la del otro.

—Quiero matarte —Soltó él con simpleza y voz clara, a lo que Amber pareció sorprenderse—. Quiero arrancarte la piel, y quiero alimentarme de tu sangre —Concretó a pasos lentos y apremiantes, acercándose a la hermosa muchacha rubia frente a él—. Bajo tu piel.

Cortó de repente, estirando sus dedos entre los rizos dorados que se extendían sobre los hombros femeninos en una caricia casi suave y delicada, relamiéndose los labios durante una milésima de segundo al tocar con la yema de sus dedos la curva de su garganta.

—Ésta es tu arteria carótida —Señaló, acariciándole la piel con los dedos, de largo a largo—. Si la perforas bien se puede controlar el flujo. Lleva práctica, pero no tiene por qué ser un desastre. No quieres desperdiciarla.

Su voz se escuchaba casi ronca al indicarle, pasando con más fuerza y confianza sus dedos sobre el cuello ahora levemente sonrojado por sus toques. Amber permanecía quieta en su lugar, con los ojos apenas entornados para verle debido a la diferencia en sus alturas.

—¿Qué te detiene?

Una sonrisa amplia asomó de él tras la pregunta inocente de la muchacha que no le quitaba los ojos de encima, tan cerca de él que podía percibir su aliento.

—Si hago esto —Stefan dijo, ahora más serio—. Si me rindo, no hay vuelta atrás.

Y entonces la tenía sujeta del rostro, con ambas palmas grandes en las mejillas suaves de ella, susurrándole las últimas palabras.

—Entonces no lo hagas.

Salvatore se relamió los labios ante la negativa, exhalando profundamente para tomar aire tan pronto como había terminado de expulsarlo.

—Sólo quiero probarla —Descubrió más el cuello femenino, barriendo con sus dedos los rizos que se atravesaban y le impedían ver la piel apenas rosada—. Es todo lo que necesito. Sólo quiero probar un poco.

La locura y el ansia podían palparse en su voz desesperada y baja, que en ningún momento la alteró. Ella sólo le veía con el ceño más relajado, alzando después sus cejas.

—Sólo un poco —Ella secundó. En ningún momento se había negado y, quizás, ese era su gran error, quizás iba a arrepentirse de ello y Stefan lo sabía, aunque también planeaba hacerla olvidar, o matarla…

Pronto, las venas comenzaron a sobresalir moradas de los ojos castaños, corriendo casi hasta sus pómulos mientras sus corneas se oscurecían por el hambre. Sus colmillos se extendieron automáticamente, obligándole a abrir la boca, y al segundo siguiente se abalanzó sobre el cuello cremoso de Amber. Ella cerró los ojos, ni siquiera gimió de dolor o se quejó, y Stefan se abocó a probar la textura de su carne y la sangre que le estaba llenando la boca con una velocidad inquietante.

Sabía que estaba haciendo mal. Sabía que ese no era él. Pero mientras pensaba en eso, la vida de aquella chica estaba corriendo a lo largo de su garganta, refrescando su hambre y sus entrañas.
Y después se dio por vencido.

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Damon S No sé tú, pero el Stefan sangriento y todo adahakaghska me cae bien. El que no me cae muy bien es el Stefan-Disney. (?) Como sea tenía que escribirlo porque me gustó. Ojalá Stefan fuera así y no tan rosa, aunque mejor no porque a Damon le queda mejor ser el "malo". xD