Saint Seiya Fragmentos Del Amor Inocente (ShaMu) ShaMuTober2022

-Shaka, el rosario de ciento ocho cuentas… Es hora de devolvértelo-

-Mu…-

-Mira cuantas cuentas ya cambiaron de color. Entiéndelo, no puedes morir hasta que todas las cuentas hayan oscurecido por completo-

-Pero, Mu…-

Ese acercamiento se venía presentando desde el momento en que lo volvió a ver, y se intensificó en el instante que el carnero dorado estiro su mano, ofreciéndole aquel importante y sagrado objeto a su verdadero dueño.

Como si no creyera o no pudiera reaccionar por completo al ver, como aquella preciada y preciosa persona, está en todo su esplendor delante de él.

Sus pasos se apresuraron por el asombro, su mano derecha titubea para siquiera tomar aquel rosario, que sus cuentas doradas han ido cambiadas en su mayoría a una tonalidad morada.

Entiende, que si antes no fue capaz de tomar esa hermosa mano, ahora solo por un instante lo puede hacer, al recibirlo y darse cuenta que lo ha protegido con tanta dedicación, pues ningún rasguño se puede ver en el Rosario.

Delante de los dorados que aún quedan con “Vida” y aquellos dos de bronce que miran atentos la escena… Sin duda, se siente el ambiente bastante curioso y hasta romántico, que cualquiera se puede dar cuenta de ello.

Al tomar aquel rosario de la mano del carnero dorado, con quien de inmediato se conectan las miradas, provocando que los zafiros y las esmeraldas se quedan por un instante prendados, un semblante de enorme alegría por volverse a ver, y de fondo un Libriano observa con una pequeña sonrisa en su rostro a estos dos jóvenes dorados.

Si, se puede decir que entre Aries y Virgo, sucede algo más que una simple amistad, eso se nota demasiado obvio para cualquiera… Como si fuera un tímido, inocente, y bonito secreto, en donde los sentimientos se pueden abrir paso pese a la dificultad de ambos corazones inexpertos…

Claramente con esto no llega a ser suficiente para que los dos jóvenes que aún tienen un deber, se logren expresar su anhelado amor como lo desean… Y puede que estén bien con ello, aunque su secreto sea llevado hasta la tumba…

Sin embargo…

-Oigan, ¿No les parece como si Mu le estuviera proponiendo matrimonio a Shaka?-

Siempre existen aquellos amigos que se dan cuenta mucho mejor que uno mismo, de lo que sientes por tu interés amoroso y viceversa, además de que aprovechan para poner en extrema evidencia.

-¿Eh?-

Al unísono dejan escapar el primero y sexto dorado aquella expresión, que aun así con la sorpresa no apartan sus manos de ese agarre por entregar aquel valioso Rosario para los Virgos.

-¿Verdad que si? Creí que era el único que se estaba dando cuenta de eso-

-Es que son muy evidentes- El pelicerúleo señala a ambos dorados que los miran con las mejillas rojas, por que hablan sin ninguna pisca de prudencia –Además, Mu protegió demasiado el rosario, con su propia vida se podría decir, es que… Solo mírenlo, ni un rasguño tiene- Enfatiza sus palabras, señalando el rosario en perfecto estado que se encuentra.

-Y eso que nos enfrentamos a ese maldito juez del inframundo que nos hizo trama por esa barrera que le da ventaja sobre nosotros, al restarnos nuestro poder al 10% y termináramos en cositos- El león dorado sigue enojado por aquella derrota que pasaron, tanto es su molestia que aprieta sus puños y frunce el ceño, mostrando un poco sus dientes por la rabia.

-¡¡¡CÁLLENSE!!! ¡¡¡NO ESTÉN DICIENDO ESE TIPO DE COSAS TAN A LA LIGERA!!!- Aries, suelta de inmediato la mano del rubio para apretar sus puños, y mirar hacia el escorpión dorado, mientras frunce el ceño, juntando sus tikas, sintiéndose sumamente avergonzado y caliente de la cara por el descaro que sus camaradas están cometiendo –¡¡¡Y NO ESTÉN INSINUANDO COSAS QUE NO SON CIERTAS!!!-

-Además, Mu derramo muchas lágrimas cuando supo de la muerte de Shaka- Pegaso también se une a la tarea de evidenciar al pobre carnero –Aunque primero nos pidió a todos nosotros que no interviniéramos, se le notaba que fue un golpe muy duro para él…-

-¡¡¡SEIYA!!! ¡¡¡POR FAVOR, NO HABLE DE ESO!!!- Su rostro lleno de preocupación y pena, sintiendo como los zafiros se fijan en él, pero ser incapaz de mirar esos lindos ojos que extrañaba tanto ver.

-¿Lloraste por mí?- El Hindú escucha esto, y siente que no lo puede creer… Ya que es sumamente maravilloso como doloroso saber lo que provoco, sin embargo, en su corazón se presenta una sensación de calidez tan placentera por ese hecho. Aunque sea hermoso lo que escucha no va a manifestar nada que lo evidencie en su felicidad.

No pudo responder el Lemuriano, pues de nuevo más interrupciones para balconearlo se presentan.

-Y cuando recibió el rosario de parte de Saga… En ese momento creí que lo iba a atacarlo, por como lo sujeto con todas sus fuerzas… Aunque, pidió que todos nos calmáramos- Andrómeda también comienza a agregar más evidencias, que desde luego solo intensifican el sonrojo del primer dorado, que jamás pensó que Virgo escuchara todas esas verdades que debe refutar rápido.

-Pero después si estaba dispuesto para atacarlos a los tres, formando la exclamación de Atena, junto a los demás y él posicionándose en medio-

-Bien que nos decía que no atacáramos, ni fuéramos imprudentes, pero después de que mataran a Shaka, no lo pudo soportar más-

-Ja, ¿Así o más evidencias de que a Mu le gusta Shaka para hacer todo eso, solo por él?- Milo se siente por completo triunfante ante sus acciones que provocaron que la cara del pelilila se pusiera aún más roja que la grana.

–¡¡¡HUBIERA HECHO ESO POR CUALQUIERA DE USTEDES!!!- Se intenta defender con palabras, para que el rubio no se dé cuenta de sus sentimientos que plasmo al cuidar con su vida ese rosario, y sentir como su corazón se destrozaba por la muerte de quien ama en secreto.

-¿Por cualquiera?- Pregunta con una lastimera sorpresa Virgo, mirando atento al pelilila que es incapaz de mirarlo a los ojos, sintiendo ahora una pequeña tristeza porque esas declaraciones sean ciertas.

-Eso no es cierto, Mu- Escorpio de inmediato señala con Antares al pelilila, frunciendo el ceño molesto –Tú no me quisiste ayudar aquella vez con esa sorpresa que le estaba preparando a Camus…- Y como si fuera un interruptor, el simple hecho de escuchar ese nombre, aunque fuera pronunciado por él mismo, le provoca un sinfín de dolor…

Se fue a un pequeño rincón delante del muro de los lamentos y se puso a lloriquear, mientras entre sollozos mencionaba en repetidas ocasiones ese nombre del hombre que ama con todo su corazón y a la vez quien más lo ha herido.

-¡¡¡CAMUS!!! ¡¡¡¿POR QUÉ TUVISTE QUE TRAICIONARME?!!! ¡¡¡¿POR QUÉ HICISTE ESO Y ROMPISTE MI CORAZÓN?!!! ¡¡¡¿QUÉ TIENE DE BUENO EL EJERCITO DEL IDIOTA DE HADES?!!!- Entre lágrimas, escurrimiento de nariz, lanza gritos de extremo dolor y desconsuelo.

Esto sí que les da pena ajena a todos los presentes, que solo dedican una mirada de lastima al Escorpión.

-Milo… Si te ayudaba con eso, los escorpiones me hubieran picado y a diferencia de ti, yo no tengo resistencia contra el veneno…- Mu intenta explicar su punto de vista de hace muchos ayeres, impresionado a la vez por el nivel de rencor que guarda el octavo dorado.

-Vamos, Mu. No finjas que Shaka no te interesa- Alza una ceja triunfante, cruzando sus brazos delante de su pecho -Que es demasiado evidente que sientes más que una simple amistad por él- Aioria sigue atacando al pelilila, como venganza de aquella vez que le llevo la contraria por querer ir a ayudar a los jóvenes de bronce contra Poseidón.

-Aioria… Por favor…- La vergüenza no se va de su rostro al enfrentar al castaño claro. Con al cara tan roja y caliente, sus manos volviéndose puños temblando levemente, mientras sigue evitando la mirada del sexto –No estés hablando de eso a la ligera, que desde luego… Eso no puede ser…-

-Mu- Como primer acto de imprudencia, se deja llevar por sus propios instintos y deseos, para tomar la mano del Lemuriano, justamente con la misma en la que lleva su rosario, para así obligarlo a que lo mire.

-Shaka…- Niega con la cabeza rápidamente cerrando sus ojos, y abriéndolos para desviar la mirada –Lo que han dicho… Eso, no es verdad… Yo, yo sé… Que tú… Jamás podrías sentir algo como eso, por alguien como yo… Y obviamente yo no estoy interesado de esa forma… En…- Se intenta creer sus propias mentiras.

-Ay, que tiernos- Por primera vez en todo este escándalo repentino, Libra interviene en esta conversación donde solo se han dedicado a balconear al pobre Aries, que está muerto de la vergüenza, pena y tal vez una muy previa desilusión amorosa –Es demasiado obvio para todos, aunque ustedes dos no se dan cuenta de sus sentimientos-

Ambos se giran hacia la dirección del castaño, con sus mejillas y orejas rojas, nerviosos y torpes por que han sido imprudentes, y dejado todos sus sentimientos en evidencia sin siquiera haberlo previsto, sin contar que todas esas palabras los han orillado a un punto que no tiene retorno.

-Pero… Viejo… Maestro… No es justo que estén diciendo esa clases de cosas, para incomodar a Shaka…- Su principal pensamiento es creer que el rubio, debe estar por completó disgustado por que estén hablando de sentimientos referentes a su persona de parte del Lemuriano –Por lo menos, yo sé que no está bien…-

-No me incomoda- Habla firme, aunque por dentro siente que se está muriendo de la vergüenza –Al contrario… Si es cierto que tú… Tienes esa clase de sentimientos por mí… Yo… Me siento muy feliz por ese hecho…- Ahora es él quien desvía su mirada, sin dejar de sostener esa mano ajena, en donde siente piel y armadura, como el rosario en medio de ambos.

El corazón del Lemuriano pareciera que se salirse de su pecho, por esa confesión tan adorable e inesperada de parte de Virgo, que solo abre sus ojos como platos, y se queda por completo estático en su lugar.

-Esto es muy adorable de parte de los dos- De nuevo Dohko, comprueba su apoyo para ambos, pues con tan solo ver esas mirada que al principio se dedicaron, pudo descifrar mucho más, antes de que comenzaran a balconear al Ariano –Me recuerdan a mi Shion y a mí, a su edad… También fuimos muy lentos para darnos cuentas que nos amábamos…- Se acerca primero a los dos reservados y avergonzados dorados para posar sus manos en los hombros ajenos mas cercanos, pero, sus recuerdos con el Patriarca rápidamente le hacen estragos en su mente y corazón…

Y justamente al rincón en donde antes había estado Milo, se dirigió… Para ahora ser él quién derrame un millón de lágrimas y lamentos.

-¡¡¡BORREGUITO!!! ¡¡¡TE EXTRAÑO Y TE AMO TANTO!!! ¡¡¡POR QUE NO PUDE QUEDARME A TU LADO PARA SIEMPRE!!! ¡¡¡SÉ QUE TE HUBIERA GUSTADO VER ESTE MOMENTO, EN DONDE NUESTRO HIJO MU, CONFIESA SU AMOR POR ALGUIEN QUE AMA DE VERDAD!!!- A moco tendido expresa aquellas palabras, sin fiarse que noticas así pueden impactar a cualquiera.

Deja a todos con la boca bien abierta, pues ha revelado su amor por el patriarca Shion, cuando no se habían notado evidencias de ese hecho previamente… Sin embargo, para una sola persona, es más el hecho de saber repentinamente su origen, que hasta la sangre se le fue a los pies, porque quedo pálido.

-¿Hijo?- Sus orbes esmeraldas como las del viejo maestro, se fijan directamente en el séptimo dorado, y siente que en cualquier momento caerá al suelo por el terrible impacto.

-Mu, ¿Estas bien?- Virgo apenas si sale de esa sorpresa, mira el aspecto del pelilila y siente su cómo ese cosmos va bajando casi hasta el suelo por el terrible impacto.

Rápidamente vuelve a integrarse a los más jóvenes, mientras se limpia las lágrimas, y con una fingida sonrisa, se posiciona delante de los dos aun unidos por ambas manos derechas –Eres el más hermoso y lindo resultado del amor de mi amado Shion y mío, así que siéntete orgulloso de eso-

-Pero, pero… ¿Cómo fue que eso… Paso?- Simplemente no se lo puede creer, ni mucho menos explicar, ya no sabe con qué cosas le van a salir a cada segundo.

-Pues, como se hacen los bebés- Alza sus hombros despreocupado, para de nuevo sonreírles y empezar con unas cuantas palabras ya ajenas a ese asunto –En algunas culturas, si es una propuesta de matrimonio el dar un rosario, además…- Mira a Milo y Aioria, mientras cruza sus brazos –Ellos tienen razón, son demasiado obvios, así que… ¿Sí se quieren casar?- Pregunta todos despreocupado, solo esperando la respuesta de esos dos enamorados.

-Pero, ¿Así nada más?- El rubio es quien cuestiona esa proposición, pues ni en sus sueños más locos se había pensado en una situación así de bizarra a lado del precioso carnero dorado.

-Pues, no es como que si fuéramos a vivir mucho- Alza sus hombros por completo calmado -Digo… Hace unos minutos te quieres volver a morir Para derribar el muro tú solo. Por lo menos ahora ya estarás casado con mi hijo- Resta importancia al asunto que le compete en primer lugar.

-Emh… Bueno- Se sorprende y desvía la mirada, apenado por de nuevo ser expuesto.

-No tienes que decir nada, Shaka… Yo no lo hice con esa intensión- Mu intenta restarle importancia a este embrolló en que ambos fueron metidos, solo por cuidar, proteger y entregar en sus mejores condiciones el Rosario de su amor ya no tan secreto –Viejo maestro, por favor… Olvidemos todo este asunto… Ya que tenemos otras cosas más importantes que hacer- Dice esto, sintiendo una terrible opresión en su pecho y unas inmensas ganas de llorar, que resiste en secreto.

-Por mi está bien- Aprieta con mayor fuerza la mano del Lemuriano, para mirarlo a los ojos, decido por completo, denotando que lo que ha aceptado es lo mejor de su vida, aunque tuviera menos de dos segundos en expresar su postura –Claro que si quiero casarme con Mu donde sea, porque...- No se va a echar para atrás, ahora mismo tiene una enorme valentía en su corazón, pero es aún muy vergonzoso decirlo abiertamente, sin embargo tiempo es lo que ya no tiene para perder –Lo amo mucho… Y por mí ha hecho y sufrido mucho… Además…- Niega con la cabeza, sin ser capaz de alejarse del pelilila -No quiero morir sin antes decirle todo lo que siento por él, mis más sinceros sentimientos-

-¿Shaka?- El corazón de nuevo le late desbocado, como el hecho de sentir casi sus piernas temblar y que sus orbes verdes como esmeraldas siguen sin poder creer esa declaración tan poco ortodoxa, pero si muy romántica al estilo Virgo -¿De verdad, me amas?- Tiene que confírmalo dos veces, para que su mente y corazón lo procese.

-Si- Asiente, con una decisiva sonrisa, mientras atrae la mano que sostiene del ariano, hacia su boca y le deposita un pequeño beso en el dorso de esta.

Una perfecta escena romántica, que inicio todo por entregar un Rosario y la imaginación de un bicho que no se podía quedar callado, y los demás que le siguieron el juego, para dejar en evidencia al pelilila.

-Yo también te amo…- La declara todos aquellos sentimientos que no caben ya en su pecho, y tienen que salir un poco en estado líquido para lograr calmarse, por la inmensa felicidad que tiene, en un momento tan crítico de su vida.

-Entonces… Creo que por el poder que se me fue conferido por ser el actual patriarca del santuario…- Apenas si dice estas palabras de nuevo tiende a recodar que su Shion ya no está a su lado, y acto seguido vuelve a ir al rincón para llorar y recuperarse.

Cosa que solo los externos de esa pareja notaron, pues Aries y Virgo están en su ensoñamiento de mirarse a los ojos, ilusionados y muy enamorados que por primera vez y tal vez ultima, tengan esta oportunidad de experimentar una sincera declaración de amor.

Dohko regresa a los pocos segundos, recuperado, y dispuesto a oficiar en cierta forma este matrimonio, aunque estén lejos de los sagrados territorios del santuario –Por ser… El patriarca provisional, y padre de Mu- Se cerca, llamando la atención de ambos, notándose feliz y muy convencido de que este amor es fuerte, se ha demostrado con todo lo que han dicho, y además, a simple vista se puede ver esos preciosos sentimientos de esos dos chiquillos –Puedo dar mi aprobación de que se unan en un bendecido matrimonio- Vuelve a sonreír mas para ver al Lemuriano pelilila y cerrar sus ojos en ese instante –Sé muy bien que Shion, tu papá, estaría muy feliz por verte a lado de la persona que más amas en este mundo-

Antes de que el ariano actual, pudiera decir o expresar cualquier cosa…

Libra siente un terrible cosmos, muy enojado, enfurecido y sumamente amenazante que le hace retumbar en sus pensamientos la palabra

-¡¡¡NO!!!-

Por un instante se queda estático, sudando un poco, porque realmente reconoce ese cosmos tan agresivo, pero que aun así ama con todas sus fuerzas…

Pues sin importar el lugar, la distancia o la vida y muerte, Por este momento y al parecer se pueden todavía comunicar, y debe responderle apropiadamente, aunque sea en su cabeza –Vamos, borreguito… ¿Acaso no hacen una linda parejita?-

Tose un poco para recuperar su compostura, y mirar de nueva cuenta a los dos que ahora están confundidos por su extraño actuar tan repentino.

-Bueno…- En esa unión de manos con el rosario aun integrado de por medio, rápidamente envuelve aquellas extremidades de ambos con ese objeto sagrado, colocando las suyas sobre las de ellos, para sonríeles y decir unas cortas y breves palabras –Si están ambos de acuerdo y sabiendo que tenemos un deber que llevar acabo lo antes posibles, solo preguntare lo siguiente a cada uno- Mira al pelilila –Mu, ¿De verdad amas a Shaka tanto, como para respetarlo, amarlo, serle fiel y posiblemente morir a su lado en esta guerra santa?-

Tiene que ser bastante realista, esta situación es poco a nada favorable para los dorados.

Aries, claro que capta esta pregunta, y aunque parezca sumamente cruda, es verdad, y no piensa echarse para tara cual sea el resultado de esta guerra, será a lado de Virgo –Sí, de verdad aceptó todas las condiciones que sean necesarias para amar y permanecer junto a Shaka por toda la eternidad- Es sincero y muy consciente de sus palabras, con su dulce hablar, confesando su amor eterno por ese rubio.

La respuesta que escucha de parte de Mu, son la música y verdad que necesita en su vida para ser por completo feliz.

-Muy bien- Ahora ve al Hindú y algo serio para enfatizar su rol de ser el padre del lindo borreguito –Y tú, Shaka ¿Aceptas el amor, el respeto, la fidelidad que sientes por Mu, para sin importar el resultado de esta batalla, siempre tu alma este conectada con la de él?-

-Claro que si, aceptó lo que sea solo por mi amado Mu- Sin dudar, sin rodeos, ni titubeos, confiesa su amor y acepta que está dispuesto a todo con tal de casarse y formar un vínculo único con el Aries de sus sueños.

Lo bonito que siente Mu en su corazón es evidente, que su sonrisa se plasma en su rostro y la felicidad en pequeñas gotas saladas que salen de sus ojos.

-Entonces, por el poder que se me confiere al ser patriarca interino, los declaro casados, como marido- Señal al rubio con la cabeza –Y esposo- Mira ahora al pelilila –Bien ahora pueden besarse rápido, porque debemos derribar este muro- Suelta las manos de ambos, para volver prestar suma atención hacia lo único que los detiene para seguir a su Diosa y acabar con Hades.

Acto que los demás siguen, para darles un poco de privacidad da los recién casados de forma muy única y bastante curiosa.

Claro que sin olvidar felicitarlos, a sus estilos únicos.

-Felicidades a ambos-

-Que bonita boda-

-Ay, ya se habían tardado… Desperdiciaron dos buenos meses para haber hecho y dicho muchas cosas, par de lentos-

-No me agradezcan lo buen amigo soy, para darles el valor de hablar de su amor-

Y es allí cuando captan ambos, que en efecto… En este momento, en los posibles últimos instantes de sus vidas, se acaban de declarar y casarse… Demasiado rápido y mucho que procesar, pero… Solo es momentáneo, pues al reaccionar, ver levemente hacia el frente, para conectar con los zafiros y esmeraldas…

Sus labios forman una sonrisa, sus mejillas se tornan rojas y sus corazones palpitan tan rápido como sea posible.

-Te amo-

-Yo también te amo-

Sin soltar esa mano ajena, sin quitar ese enredo entre ambos, hecho con el rosario de ciento ocho cuentas, que pocas faltan para que cambien de color… Un beso, donde sus labios se tocan, sus ojos se cierran, disfrutando de ese contacto labial que habían deseado por tanto tiempo, al fin de hace realidad.

Se sienten tan avergonzados por escalar tan rápido, en donde apenas sus lenguas se tocan para profundizar el contacto, pero se separan por la falta de aire, y la situación en la que se encuentran, que no se ha esfumado por completo de sus cabezas, sin embargo eso no quito que sus corazones disfruten un instante romántico que bien merecido se lo tienen.

Al separarse, un pequeño hilo de saliva los une brevemente para romperse, bajar sus miradas, ambos apenados, pero elevan sus ojos para centrarse con los contrarios, dirigirse una leve sonrisa, y de nuevo volver a sus posturas de caballeros dorados… Pero ahora bien casados por el viejo maestro y un bonito rosario que se volvió la conexión de sus vidas y almas para que ambos, aunque uno ya no estuviera en la tierra…

Pues Mu no permitió que su recuerdo y muerte se perdieran, pues mientras el pelilila siguiera con vida, protegería ese preciado rosario, que aunque ese miserable de Saga se lo entregara y lo ensuciara con su mano, era el tesoro más sagrado del mudo para él.

-Ahora, no comprendo como vamos a traer la luz del sol hasta este lugar…-

 

-Las cuatro nobles verdades…-

-Nosotros, los monjes budistas estamos regidos por ellas…-

-La primera: La verdad del malestar-

-La segunda: La verdad de la causa del malestar-

-La tercera: La verdad del cese o extinción de la causa del malestar-

-La cuarta: La verdad del camino que conduce a la extinción del malestar-

-Siempre tenemos que tenerlos muy presentes, para lograr despojarnos del sufrimiento, del malestar que nos atormenta a todos-

-Cuando logramos extinguir nuestro sufrimiento, todo aquello que nos ancla a este mundo, y nos hace padecer mucho dolor… Debemos poder destruirlo, para que nuestro camino sea capaz de guiarnos hacia el Nirvana, y a su vez, ayudar a los demás para que sigan las mismas enseñanzas que Buda nos ha mostrado-

-Los fieles no deben seguir por completó ciertas reglas, las conocen, pero tienen permitido muchas más cosas que nosotros no. Pueden darse ciertos lujos, siempre y cuando no dañen a ningún ser vivo para consumo o diversión, ni herir a ningún tercero, tiene permitido explorar y divertirse con un sinfín sentimiento que nosotros debemos abandonar desde el primer instante que estamos en este lugar para nuestro entrenamiento-

-Eso estaba para mi bien…-

-Yo no he conocido nada más que estos imponentes muros, y eso era realmente bueno, no me importaba mucho el exterior, salvo por las veces que teníamos que hacer pequeñas excursiones para aquellos fieles que lo necesitaban y no pudieran llegar hasta nuestro monasterio-

-Simplemente, creo que la vida era buena en esa época, seguía todas las enseñanzas al pie de la letra. Yo deseaba caminar guiándome por las cuatro nobles verdades-

-Creí que mi malestar, solo era ver a las personas sufrir, querer hacer algo por ellos, pero que en mis manos es no era de todo posible. Detecte la causa de mi sufrimiento, supe como extinguirlo, y recorrí el camino necesario para hacerlo. Yo pensé que solo eso me causaría daño, y acabarlo me haría sentir mejor y capaz de llegar hasta el Nirvana-

-Ese era mi deber, mi ideal. Conocimiento, investigación, meditación, saber que yo puedo hacer todo lo que me proponga. No quería sucumbir ante el deseo egoísta de tenerlo todo, pero al menos, quería tener un poco de esa información y hacerla mía-

-Nunca me quise acercar tanto a nadie, pues ese tipo de apegos son negativos para nosotros… Así lo pensaba. Solo seguí los pasos y enseñanzas del monje que me tomo como su alumno. Gracias a él comprendí lo necesario y, por mis propias manos seguí descubriendo más verdades-

-Al ser solo un niño, estaba impresionado por esa vida que yo debía seguir por completo al pie de la letra… Creí que podría, pensé que de verdad lo lograría, pero aun… A esta edad, sé que nunca lo podre lograr…-

-Y no te culpo, no fuiste tú la causa de mis males, sino la debilidad de mi corazón…-

-Yo fui el incapaz de darme cuenta que ese sentimiento no llevaba para ningún lado, debí erradicarlo desde el momento en que lo sentí, en el instante en que mi corazón latió tan apresuradamente, y no lo puede controlar por nada el mundo-

-Lo empecé a ignorar, pensé que no debía buscar una idea racional para ello, ya que no existía, pero… Me estaba engañando a mí mismo, pensando que eso no podía ser siquiera posible-

-Yo sabía que ese sentimiento era lo peor del mundo, odiaba tan solo creer que me pudiera llegar a suceder a mí. Sí… Odie, desprecie, aborrecí algo que debería ser maravilloso para otros, pero para mí, era lo más repugnante del mundo-

-El amor, ese sentimiento que debería era capaz de traspasar más allá de la vida terrenal, del tiempo, de cualquier cosa que les impidiera ser feliz, y ser siempre tan puro como bondadoso… Yo odiaba tanto ese hecho, porque… Por ese sentimiento yo nací, de una prohibición, pues mis progenitores cometieron una aberración que no se me permitió olvidar por completo-

-Me repetían que yo no debía seguir los pasos de mis padres, que… Mi padre fue una piedra en el camino de iluminación de mi papá… Y que por eso, sus vidas no lograron conectar con la mía al nacer…-

-Me quede solo en el minuto en que vine a este mundo… No estuve entre sus brazos, mi papá murió al darme la vida, y mi padre… Meses antes por un terrible accidente…-

-Yo solo quería estar lo más lejos posible a lo que ellos significaban, un amor impuro, que violo las normas, nuestras sagradas reglas que tenemos… El celibato, es a lo que nos entregamos de lleno, no se puede, ni se debe romper. Cuando aceptamos ser monjes, sabemos que debemos olvidar y abandonar todos lo sentimientos que nos hagan sufrir, todos los deseos de bienes materiales, querer hacer daño, o amar a alguien… Eso no se puede hacer-

-Lo llevaba muy presente en mi mente conformé iba creciendo, que por eso me odie tanto al darme cuenta que…-

-Con solo ver aquel rostro, esos preciosos ojos verdes, es lindo cabello lila, las marcas de tu frente, y una sonrisa que era forzada, pero se mantenía fuerte-

-Fuiste presentado ante mí, y yo quedé impresionado por ti. Solo éramos unos niños en ese momento, yo tenía dos años más que tú, pero eso no tenía mayor importancia… Ya no la tiene…-

-Se me pidió que te guiara en el monasterio, te enseñara las nobles verdades, nuestros preceptos, reglas y todo lo necesario para que lograras adaptarte y conocer tus futuras obligaciones, si es que tu camino se conectaba con el de ser un monje-

-No quería siquiera ayudarte, a mí no me interesaba en lo más mínimo, pero accedí a hacerlo porque me lo pidió mi maestro. Te trate con indiferencia, siempre he sido así, peor tu sonrisa, tu alegría, tu energía, era tan grande… Que me irritaba, y sabía que eso podía ser muy peligroso-

-Cuando me di cuenta que contigo comencé a ser diferente, ni yo mismo me entere cuando comenzó… La convivencia, tu entusiasmo desmedido, como lograbas aprender tan rápido y entendías lo que te explicaba, aunque fueras pequeño-

-Me contestes tu pasado, que te hacia tanto daño, llorabas, pero limpiabas tus lágrimas rápido y con las mejillas rojizas por el llanto, y una sonrisa que forzabas, decidiste que serías capaz de olvidar tu sufrimiento-

-Yo sé muy bien que lo hubieras podido lograr, pero… No pudiste olvidar y enfrentar uno más…-

-Crecimos juntos, y era normal vernos siempre cerca… Me encariñe contigo, pensaba que podría ser buena nuestra convivencia, viéndolo solo como un hermanito, como alguien a quien pudiera guiar, y tal vez… Formar una amistad, pero nada de eso pudo suceder…-

-Termine perdido, termine desolado, termine destrozado, y cuando me di cuenta que mi corazón dolía al tenerte lejos, que me destrozaba al saber que mi camino y el tuyo si bien seguirían unidos, serian separados por nuestro deber a la vez…-

-Tantas veces corrimos, fuimos regañados, castigados, aprendimos tanto, sonreímos mucho, cosas que yo no hacía antes de estar a tu lado, contigo permitía un contacto físico, abrazos, a veces una caricia en la cabeza, o soportaba que te recargaras en mi hombro cuando te quedabas dormido al meditar o investigar… Era tan bonito verte así…-

-Me sentía tan estúpido, tan mal porque mis sentimientos así se estuvieron dando, volviendo mi camino tan cercano al de mis padres… Dándome cuenta que yo podría también cometer sus mismos pecados…-

-Solo quería ignorarlos, destrozarlos y negarlos, me enfoque en poner una barrera contigo, que preferí ignorarte, gritarte, alejarte, y hacerte llorar…-

-Me dolía eso, pero… Era lo mejor, lo mejor que podía hacer para los dos…-

-Que estúpido fui en eso, que miserable te hice sentir, sin darte explicación alguna-

-Me pediste que te dijera porque estaba molesto contigo, qué harías lo que fuera por arreglarlo, que simplemente no te odiara, por que no querías que me alejara de ti…-

-Pero, yo te die que era lo mejor, que yo quería alejarme de todo lo que me distrajera, que para mí, tu solo eras una carga que se me impuso, y como ya te había enseñado todo lo básico, lo necesario y mucho más… Estarías solo de ahora en adelante….-

-Recuerdo tu rostro lleno de lágrimas, como te desplomaste y sentías tanto dolor, te hice sufrir, y eso es algo que yo no debía hacer, provocar un sufrimiento en alguien más, eso se supone que debemos evitar, no causar-

-Pero lo ignore, me refugie en mi meditación y construí el muro que nos separó para siempre…-

-Mu, si tan solo yo hubiera podido prever lo que mi actuar, provocaría en ti…-

-El monasterio es grande, así que pocas veces nos lográbamos cruzar, al principio aun querías hablarme, me lo suplicabas con la mirada, y cuando saludabas, yo solo te ignoraba, para todos… Así era yo, y estaba bien, pero para ti no era verdad…-

-Dejaste de intentarlo, deje de ver tu sonrisa… Solo te vi deambular en silencio, perdiendo tu luz, aquella que me hizo olvidar por breves instantes que mi vida debía ser tan alejada a las de mis padres-

-Yo, decidí seguir el camino para volverme un monje, y acepté mis limitaciones, mis reglas, mi deber. Vivir y enseñar las cuatro nobles verdades, mantener el celibato, y así ser más consciente de que no podría sentir nada más que interés por el conocimiento, la iluminación, la guía hacia los fieles y nada más, eso era lo que yo quería y pretendía obedecer-

-No te volví a ver, podía quedarme meditando en silencio todo el día si lo quería y necesitaba, pronto me convertí en uno de aquellos que habían alcanzado un alto nivel en su deber, el Nirvana ya no estaba tan lejano para mí…-

-Y todo, gracias a que te decidí olvidar e intente erradicar el sentimiento impío que habías despertado en mí-

-Creí que era lo mejor, pensé que lo seria…-

-Y así pudo haber sido, pero… Me di cuenta en el momento en que tú igual decidiste volver un monje. Estabas tan apagado, tan diferente a aquel niño alegre y feliz, lleno de engría… Ya solo eras una cascara vacía que apenas tu voz reconocía…-

-Me llamo tanto la atención eso de ti, y me sentía raro al darme cuenta que en eso te habías convertido…-

-No me debí preocupar, no debí pensar en ti de nuevo… Pero, algo me decía que no podía dejarte solo de nuevo, debí haberle hecho caso a ese sentimiento tan abrumador e ir a verte…-

-Sabía que tu meditación se encontraba lejos de mi rango, pues… Aun preferías estar cerca del jardín, de eso árboles, siempre preferiste ese contacto con la naturaleza… A cualquier otra cosa-

-Me resistí por mucho tiempo a ir a hablar contigo, temía que volvieran esos sentimientos, que nunca se fueron…-

-Si tanto solo yo… Hubiera actuado antes, si hubiera ignorado que mis sentimientos eran abominables…-

-¿Tal vez te hubiera podido salvar?-

-¿Te habría rescatado de que cometieras esa terrible acción?-

-Te encontraron en tu habitación, tu rostro mostraba una paz que creo no habías podido tener en vida… De tu boca había salido algo de espuma, tu respiración se detuvo en el transcurso de la noche, parecías que estabas dormido, tan pacifico, tan tranquilo…-

-Habías cometido algo tan atroz y abominable, pero… Nadie entendió y conoció tus razones para hacerlo.-

-¿Por qué habías sido capaz de suicidarte, de quitarte la vida…?-

-¿Por qué sé que fue mi culpa?, pero… ¿Qué podía hacer yo?-

-Cuando me entere, solo sentí que mis fuerzas se iban, mi respiración faltaba y mis piernas flaquearon…-

-No pude creerlo…Y aunque mi rango fuera alto, no se me permitió verte, no pude despedirme de ti… Yo, no pude llorar delante de nadie, pero… En mi soledad, no pude volver a concentrarme en nada sin que mi mente trajera tu sonrisa, tu rostro tan hermoso, tus bellos ojos, para luego con tu mueca de tristeza y desolación te viera sufrir…-

-Todo lo que supe de ti… Fue por boca de otros… Tus últimos años, habías hecho otras amistades, fuiste apreciado por muchos, pero… En ese momento, no entendía como tu felicidad se había ido y, solo era amabilidad y respeto lo que quedaba en ti…-

-Nadie sabía por qué lo hiciste, ni siquiera yo, hasta que…-

-Por un impulso, un deseó desesperado me obligo a ir a tu habitación, y… Viole tu intimidad al buscar tu diario, encentrarlo y leerlo…-

-Me sentí tan angustiado, mi sufrimiento surgió, y buscaba la forma de conocer la causa del tuyo…-

-Lo encontré… Al descubrir tus últimas notas y ver que en todas ellas, plasmado esta mi nombre y tantas manchas de lágrimas secas…-

“-Shaka, me odia… No me habla, no me dice nada, no me mira, me desprecia, me quiere lejos… y a mí eso me duele tanto… Yo lo quiero… Quiero volver a estar a su lado, pero… No se puede…-“

“-Sé que esto no está bien para nosotros, no podemos acceder al amor, no podemos permitirnos ser egoístas y querer a una persona solo para nosotros, pero… Pero… No puedo luchar contra algo que yo quiero, y necesito…-“

“-¿Por qué me daño tanto?-“

“-¿Por qué no puedo olvidarlo cuando me ha dicho que me vaya de su lado para siempre?-“

“-Dukkha… Debo olvidarlo, debo saber la verdad de este sufrimiento-“

“-Samudaya, la causa de mi dolor… Es el amor que siento por Shaka, y que jamás debió existir…-“

“-Nirodha, No puedo hacerlo, la extinción de mi amor por él, no puedo hacerlo… No quiero…-“

“-Por más que lo intento, es allí donde no puedo avanzar para alcanzar el Magga… Mi sendero se obstaculizo, porque mi corazón no quiere abandonar este sentimiento-“

“-Entonces… Sí mi única opción para estar cerca de él, es seguir el camino que escogió, lo seguiré en silencio, para al menos verlo de lejos…-“

“-Shaka, jamás me amara, yo lo sé, por lo que ocurrió con sus padres, sin embargo no es algo malo… A veces pensamos que un camino es demasiado para nosotros, pero debemos buscar nuestra felicidad…-“

“-Creí que mi felicidad vendría con la meditación, la iluminación, el esfuerzo por ya no sufrir, pero no... No fue así…-“

“-Me cansé de buscarlo cada que creía tener la fuerza para superar mi sufrimiento, me cansé de mentirme, me canse de esperar que algún día él se dé cuenta de mi nuevamente-“

“-No seré una piedra en su camino, yo… No quiero condenarlo a un sufrimiento que es solo mi culpa…-“

“-Decidí… Que yo… Debo… Irme… Pero ya hice mis votos. Ya he decidido seguir el camino de un monje budista… Acepté que era lo correcto, pero… No puedo más…-“

“-Shaka, me odia, porque de seguro se dio cuenta de que yo lo quiero, que lo amo y por eso me desprecia… Bien… Si es así…-“

“-No tengo ya nada que me ate a este mundo…-“

“-Eso es a lo que debemos darnos cuenta, que nada nos ata a este mundo, y podemos… Ir a otro mejor, para ya no ser piedras en senderos ajenos y… Sé que mi malestar, mi Dukkha… Mi sufrimiento… No lo volveré a sentir… Ya no más, ¿Cierto?-“

-No… Por favor… No… Yo…-

-¿Qué hubiera podido decir?-

-¿Cuáles de mi palabras pueden ser suficientes para que yo expíe el dolor que ahora siento…?-

-¡¡¡¿QUÉ IMPORTA LO QUE YO SIENTA AHORA?!!! ¡¡¡MU ESTÁ MUERTO POR MI CULPA!!! ¡¡¡ÉL… SUFRIÓ MÁS…!!! ¡¡¡YO ME ALEJE PORQUE SABÍA DE LO QUE PODRÍA SER CAPAZ…!!!-

-¡¡¡AQUÍ ÉL ÚNICO QUE TIENE LA CULPA SOY YO…!!! ¡¡¡YO… ME FUI DE SU LADO!!! ¡¡¡DECIDÍ QUE PREFERÍA ALEJARLO A TENER QUE SOPORTAR Y ENFRENTAR LO QUE SIENTO…!!!-

-¡¡¡SOY EL MAYOR COBARDE DEL MUNDO, POR NO SER CAPAZ DE…!!!-

-Si tan solo hubiera hecho caso a mi corazón… Pero no lo hice-

-Mi orgullo, eso de lo que yo debí despojarme primero, me reprimió por completo, para que yo solo me concentrara en erradicar un amor que… Perdí…-

-Mu… Yo aún no te puedo alcanzar, pero… Prometo que cuando reencarnemos… Yo sé que así será… Tú lo harás… Te veré…-

-Prometí seguir este camino esta que yo muera también…-

-Aun me falten muchos años más. No existe día que no píense en ti, no hay forma que te olvide, hasta que mi memoria se pierda…-

-Ojala, que llegue pronto mi momento de partir, ojala que tenga la forma de que mis últimos instantes... Lleguen antes…-

-No, no… Ya no puedo ser egoísta, ya no puedo culpar, ni renegar de todo… Soy un monje como lo prometí, como te lo prometí alguna vez en nuestra infancia. Ya no puedo seguir las cuatro nobles verdades, porque… Al igual que tú… Me quede atrapado en el Nirodha… No puedo olvidarte ahora, y no quiero hacerlo-

-Me contradigo tanto, me dio cuenta que yo te cuse peor daño a ti, por intentar protegerme... Te lleve al borde del dolor. Sí yo hubiera podido aceptar mis sentimientos cuando aun estabas conmigo y haber luchado por ti, por nosotros… Si yo lo hubiera así decidido antes de volverme un monje. Aceptar que te amo, y que debí irme contigo tan lejos de este lugar cuando pudimos y vivir juntos-

-¿Hubieras aceptado irte conmigo?-

-Sí, sé que lo hubieras hecho, yo fui el que condeno nuestros caminos a que tu vida se truncara y la mía siguiera en completo sufrimiento-

-Lo merezco, debo así permanecer hasta el día en que… Tu rostro vuelva a ver, tu luz me ilumine, tu risa la escuche, mis manos tomen las tuyas y pueda decirte que al fin ya todo estará bien-

-Pero por mientras… Yo seguiré enseñando a los demás, un camino que yo escogí por miedo y orgullo, y que en ese trayecto perdí algo mucho más importante que la iluminación y la verdad, que alcanzar el Nirvana, ahora todo eso ya no me parece tan importante como el hecho de alcanzarte-

-Mu, ¿Me puedes perdonar por haberte dejado solo?-

-Y si no es mucho pedir, ¿Me puedes esperar para que en nuestra próxima vida, podamos reencarnar y coincidir?-

-Esta vez, te prometo… Que no me dejare influir por mi orgullo, y sin importar el lugar, nuestros caminos, nuestros deberes… Yo te escogeré a ti y me mantendré a tu lado para protegerte e impedir que nos vuelvan a separar… Lo juro, de verdad te lo cumpliré mi amado Mu-

 

En medio del campo de batalla, dos ejércitos se enfrentan…

Encarnizada es la lucha, ningún bando retrocede aun.

Golpes, choques de espadas, armas de fuego que fueron creadas solo para esta batalla, y la magia que se invocaba de manera defensiva y ofensiva.

Ningún reino se va a dar por vencido.

Uno había tenido que soportar toda la codicia y egoísmo del otro.

Ambos reinos, se enfrentaban en esta decisiva batalla…

A diferencia de quienes habían provocado tantos estragos a aquellos que aún no lograban someter, pues el reino y su gente no querían perder la poca dignidad que les quedaba…

Los líderes del bando enemigo se han quedado refugiados en sus castillos, para ver a sus soldados destruir a aquellos que intentan aun mantenerse en pie… Sonríen, pues creen que ya no existen posibilidades para aquellos que se defienden con ferocidad, pero…

Lo que nadie espera, es ver al príncipe de aquel reino, entrar al campo de batalla, para defender a su gente, a su pueblo y soldados. Debía ir a la guerra para seguir luchando por su reino.

No le importaba si el enemigo aún se mantiene refugiado, está decidido en acabar con el ejercito que le robo tierras a su reino y vidas inocentes.

Si bien, se podría decir que antes a ese príncipe poco le importaba su reino, gracias a sus pésimas actitudes llenas de arrogancia e indiferencia, que su gente creía que no haría nada por defenderlos.

Era su manera de creer ganar tiempo, de ser fuerte para que la muerte de sus padres a una muy temprana edad no le afectara…

Ellos lograron conseguirle tiempo, y él lo había aprovechado muy bien a su interés, en todos esos años, donde se cultivó en diferentes estilos de peleas, lucha cuerpo a cuerpo, y el uso apropiado de la magia, principalmente en ataques para aniquilar a los enemigos de su reino.

Disfruta ser él, el que ahora es cruel con el enemigo, pues… No puede dejar que nadie más vuelva a pisotear el escudo de su reino. Así que se volvió un príncipe temido hasta para su propia gente, pero al menos pretendía hacer algo, por las razones egoísta de la venganza…

Aunque ahora eso ya no es del todo verdad…

Quiere una vida nueva, una segunda oportunidad de hacer las cosas bien y no solo bajar la cabeza como pensó hacerlo alguna vez para ganar de nuevo sus tierras en un falso tratado, que descubrió solo era una mentira.

Si no fuera… Por la desconfianza de alguien que le enseño también su lugar…

Tal vez su arrogancia lo habría llevado a la caída de su reino, y la perdida de lo más maravilloso de este mundo.

Jamás lo admitiría, pero ese alguien lo salvo de perderse, y lo impulsó a seguir adelante…

Por eso, hoy lucha, manchándose de sangre enemiga, sintiendo como su cuerpo lleno de adrenalina sigue firme para avanzar al triunfo esta vez…

Sus soldados, su gente, todos desean paz, y los apoyara para traerla de vuelta… Nadie, ninguna vida inocente debía conocer lo que una guerra implica, y si los adultos del hoy deben sacrificarse para que las pequeñas futuras esperanzas del mañana, puedan tener un camino diferente, harán el sacrificio necesario.

Pelea feroz, llevando la armadura que le perteneció a su papá, junto a la espada de su padre, se enfrentara a quienes fuera.

Su magia forma grandes destellos para destruir la vista, romper tímpanos, y que el enemigo solo se vuelva un caparazón vacío, completamente acabado.

No importa si está herido, no le interesa llegar a estar cansado al borde del colapso, que su cabello sea manchado y enredado por la suciedad del campo de batalla, seguirá en pie hasta que su ejército triunfe sobre el enemigo.

-¡¡¡PRÍNCIPE SHAKA!!! ¡¡¡CUIDADO!!!-

Se ocupa de un grupo de soldados del ejército contrario, que se atrevieron a golpearlo a traición, pero no fue suficiente para perder el equilibrio ni la compostura, siegue adelante defendiéndose de ellos, sin embargo… Alguien más aprovecha para atacarlo por detrás.

Son solo segundos que dan la ventaja de vivir o morir… Si no reacciona lo suficientemente rápido, sus esfuerzos, sus motivos por vivir y continuar se esfumarían… No podía… No va a permitir que todo se venga abajo.

Pero, apenas sus zafiros se dirigen hacia sus espaldas para visualizar al enemigo del que le advirtieron previamente, siente como cálidas manchas de sangre caen en su rostro, apreciando a la vez una melena lila, que se supone no debería estar presente en esta batalla.

Rápidamente, sus ojos son testigos de cómo aquel que se atravesó para proteger su vida, da un tiro de gracia a ese soldado que ataco a traición, provocando que su vida acabe con solo un toque de ese poder lleno de luces estelares.

Es demasiado para él…

Ese ataque, y la profunda herida en su pecho, provoca que se tambaleé, sintiendo como sus fuerzas se van y el dolor aumenta.

Ver que esa persona cae de espaldas hacia él, no lo piensa más, e ignora por completo su alrededor, después de haber mantenido a raya al grupo que lo ataco y ahora destruyo por completo… Sus brazos se extienden para sujetar el cuerpo que deseaba proteger con su vida, el cual lleva una armadura destruida del tórax.

Siente como el peor terror de su vida se hace realidad, al verlo respirar pesadamente, con una mortal herida en el pecho de donde brota casi una cascada de sangre.

-¡¡¡MU!!!- Lo llama despeado, dándole igual que se encuentran en el mismo infierno en la tierra, sujeta a ese hermoso joven, cayendo de rodillas para intentar mantenerlo cómodo y estable a como sus pensamientos le dan entendimiento.

Su rostro con tanta angustia reflejada, los ojos amenazando con derramar lágrimas, sus manos tiemblan por el terrible espectáculo, mientras siente como la sangre lo mancha, y escucha los débiles quejidos de ese pelilila.

Lograr oír la voz de ese príncipe, provoca que sus ojos se abran pesadamente, jadeando, pues le cuesta tanto respirar, sus labios rápidamente forman una sonrisa cansada, por donde un hilo de sangre sale de la comisura derecha.

-¿Qué pasa… Príncipe…? ¿Por qué…- Un quejido de dolor se escapa de su garganta como una tos que le provoca sangrar aún más, dando una muy pésima señal de su condición –No se… Fija bien de su… Alrededor…?- La dulce voz de siempre ha cambiada por una sumamente pesada y agotada, casi ronca por el esfuerzo que hace –Debe ser… Muy… Mo… Moles… To… Para usted… Que…-

-¡¡¡YA CÁLLATE!!! ¡¡¡NO ESTÉS HABLANDO!!!- Le grita al estar hundido en su desesperación, al apreciar cómo se está sobre exigiendo para hablar, ya que esto solo lo pone más en peligro -¡¡¡MALDITA SEA, MU!!! ¡¡¡¿QUÉ DEMONIOS HACES AQUÍ?!!! ¡¡¡ERES UN IDIOTA!!!- El regaño comienza, mientras su rostro se frunce del entrecejo, y sus lágrimas caen por la impotencia, la preocupación por que está a cada segundo en un estado cada vez más crítico.

-Ja, ja, cof… Cof… Si… Creo que lo soy…- Habla débilmente, con un sonrisa que no se va, mientras mira y siente el llanto de ese despiadado rubio –Por proteger al arrogante… Y desagradecido príncipe… ¿Es… Esta… Molesto, por… Que… Un… Sim… Ple… Hombre… Lo… Lo… Sal… Vo?- Sus ojos se van cerrando pesadamente, está muy cansado, ya que su cuerpo había estado sumamente débil últimamente, no conocía la razón de esto, pero… No le importaba nada de eso sí debía luchar por su gente, por su príncipe.

Nota desesperado como esas esmeraldas, se van cerrando, el hecho de que los parpados empiecen a flaquear, niega angustiado, con la voz más jadeante y ronca posible, sujetándolo con la mano izquierda del rostro, para hacerlo reaccionar -¡¡¡NO!!! ¡¡¡DESPIERTA!!! ¡¡¡NO TE ATREVAS A…!! ¡¡¡NO LO HAGAS!!! ¡¡¡TE LO ORDENO!!!-

La mente en completa desesperación, grita toda su angustia, sus manos tiemblan, este es el peor escenario, que se había imaginado miles de veces, y por eso decidió impedir por todos los medios posibles para que ese joven pelilila no estuviera presente en esta batalla.

-Prí… Ci… Pe… No… No… Se… Pe… Preo… Cupe… Tiene que… Defender… El rei… No…- Su voz en un hilo sale, mientras su herida es cada vez más profunda y provoca la salida de sangre de manera torrencial, sus fuerzas flaquean al grado que su conciencia se va perdiendo, y en brazos de ese hombre rubio, deja de hablar ante su mirada desesperada.

-¡¡¡NO HAGAS ESTO!!! ¡¡¡NO LO HAGAS!!! ¡¡¡NO PUEDES IRTE!!! ¡¡¡NO TE LO PERMITIRÉ!!! ¡¡¡MU, DESPIERTA!!! ¡¡¡NO PUEDES HACERME ESTO!!!- Sus gritos son poderosos, pero se opacan con la batalla que se lleva acabo a su alrededor…

Siente la sangre tibia de la persona que le mostro que no era lo único que importaba en este mundo. Que a veces, se atrevió a darle algunas bofetadas, golpes y regaños para bajarlo de su nube. Le mostro un realidad que se había negado a ver, por sus actitudes, por su orgullo, arrogancia, creerse que su habilidades y conocimientos eran sufrientes para ganar en una batalla injusta, tanto que no fue capaz de darse cuenta que otros le jurarían en contra, y a la ve otros le podían brindar una mano amistosa de ayuda.

No lo puede perder, no a él… No a esa persona que nunca le importo su posición, que le hizo ver la realidad, y lo hizo conocer mucho más…

De todo lo que podría perder en esta guerra, Mu es lo único que no permitirá que le arrebaten, por nada de este mundo…

---Horas Después---

El quejido de un fuerte dolor, sentir el cuerpo terriblemente pesado, sus ojos poco a poco se van abriendo, sintiendo como la luz de las velas le molesta tanto, pero se acostumbra a ese hecho tanto como puede, lentamente va reconociendo esa habitación…

¿Cuantas noches previas a este hecho había estado allí?

Puede sentir el sabor metálico en su boca, el dolor horrible en su pecho y espalda, no puede moverse mucho, eso lo supo de inmediato. Sin embargo algo que no esperaba sentir, es que su mano se encuentre fuertemente sujetada, su mirada lentamente se gira para esa dirección, topándose con una imagen que jamás espero.

Alguien besa el dorso de su mano con devoción, la acarician contra un rostro y puede sentir la humedad que cae en él…

Apenas si puede reconocerlo, está agotado por la gran locura que ha hecho, además que su cuerpo se siente cada vez más extraño, que no lo puede entender.

-¿Prín… Cipe?- Pegunta con duda, y confusión…

Rápidamente obtiene su respuesta, al ver como ese rostro se eleva, para apreciar unos zafios rojos, empapados de lágrimas. Esta aun sucio y manchado de sangre, al igual que presenta heridas en su cuerpo, completamente desalineado, como jamás lo había visto.

Aquel monarca se levanta apresurado de la silla, tumbándola en el proceso, para acercare lo más posible al rostro ajeno, acariciándolo, y al fin sentir como su alma de nuevo regresa a su cuerpo –Estas bien, estas a salvo… Ahora todo está en oren- No puede quitar su mano de la mejilla izquierda del pelilila, y acariciarlo con suma ternura, no apartar sus ojos de esas esmeraldas un poco opacadas y agotadas.

-Pero…- Aun le cuesta coordinar sus pensamientos, por estar agitado y obviamente convaleciente por el estado tan crítico en el que se encuentra -¿La batalla? ¿La... Gue… Cof, cof, cof?- Una tos de nuevo se produce, mientras un gemido de dolor sale de sus labios, haciendo que cierre sus ojos en son de fruncir el entrecejo.

El miedo de que esto se complique no ha pasado aun, el peligro está presente, pero verlo despertar es un enorme avance ante todo.

-Ya, guarda silencio… No te estés esforzando tanto- Lo regaña con un tono gentil, mientras con cuidado su mano libre toca levemente ese vientre plano del herido.

Pero, con tan solo recuperarse un poco, sus pensamientos van directamente a la situación bélica, en donde se habían enfrascado en esta terrible batalla -¿Ganamos?- Pregunta algo confuso, su rostro se llena de dudas, sabe que si el reino era derrotado una última vez, todo estaría acabado.

-Sí, lo hicimos… Gracias a ti- Le habla con cuidado, con toda la calma que su desesperado corazón le puede permitir.

-¿Eh? ¿A mí?- No puede entenderlo, porque su presencia fue causa del triunfo, si no había hecho mucho.

-Si, por ti- Rápidamente limpia sus lágrimas con la mano que acariciaba delicadamente ese vientre, intentado recuperarse –Tú eres la razón por la que esta vez no podíamos perder- Habla serio, decidido y determinado.

Había pasado mucho tiempo jugando y pensando que todo podría llegar a ser como él lo deseara, que no tomaba en cuenta los sentimientos de otros, ni siquiera los suyos…

Debía madurar, debía empezar hacerlo, porque su deber ya no solo era de un príncipe arrogante y orgulloso, sino de un rey sensato y digno del puesto.

-¿Cómo dice?- Mu sin poder creerlo, niega con la cabeza, frunciendo su ceño, mientras lleva su mano derecha hacia la frente, un dolor se presenta en él rápidamente –Sí usted me encerró… Sin explicación alguna en los calabozos…- Le comienza a recriminar esas estupideces que cometió contra él, mirándolo ahora con una molestia lastimera.

-Sé que lo que hice, y lo volvería a hacer sin dudar- Le contesta sin ningún gramo de arrepentimiento –Aunque debí ser más cuidadoso… Eres demasiado listo para tu propio bien-

Sonríe, y ríe levemente con burla, pero no sale tan bien como lo pensó por el dolor en su cuerpo –Le dije… Que yo ayudaría en todo en esta guerra… ¿Pensó que sería… Una carga?- Alza una de esas marcas color rosa en su frente, agregando una risita leve con un poco de dolor por el esfuerzo que hace al pronunciar alguna palabra –Me debe la vida… Príncipe…- Solo es una conversación en son de mera burla, para darle donde más le duele al orgulloso y arrogante rubio.

-Te debo más que eso- Habla firme, serio, sujetando aun esa cálida mejilla que acaricia y a la vez que lo obliga a verlo directamente a los ojos.

-¿Qué?- Sigue sin comprender su alrededor muy bien, está cansado y le cuesta seguirle el paso en este momento.

-Tú me ayudaste a darme cuenta, lo que en realidad significa mi título y deber, saber que no soy el centro del universo de nada, ni nadie. Que debo luchar por mi gente… Me enseñaste de una manera que te habría asegurado ser ejecutado, que ni soy más que alguien que tiene la fortuna de nacer para por hacer un cambio en este mundo para bien- No es algo que acostumbre, el agradecer y entender que su sola presencia no es suficiente para traer la ventaja a su reino, que su personalidad, actitudes y conocimientos debían madurar para lograr triunfar ante este enorme caos –Gracias por eso- Solo se limita a dejar en claro su verdad, es de las pocas veces que lo hace, y siempre será con la misma persona.

El pelilila se le queda mirando confundido, intentando enfocar por completo su mirada, angustiado y algo preocupado por el rubio -¿Se encuentra bien?- Cree que esto no es siquiera posible… Que el príncipe más arrogante y creído de este mundo le esté agradeciendo.

-Sí, ahora que estas bien- Su corazón late tan rápido como desesperado, que sus manos no se quieren despegar de ese pelilila, de ese soldado que le hizo ver la realidad, mostrándole muy poco respeto a su autoridad por la arrogancia que manifestaba desde siempre. Cayo rendido ante él, pero nunca se lo había dicho, ni siquiera con ante la posibilidad de que pudiera morir por la guerra... No era tan valiente para hacerlo, pero puede que ahora cambie, por el terror que experimento –Que ambos estén bien- Su rostro levemente se sonroja, para de nuevo sujetar la mano izquierda de Mu, en donde había dejado un anillo en el dedo anular, y así poder besar esa dorada argolla

-¿Ambos?- Claro que ese joven de cejas en forma de punto, no logra entender mucho en este momento, porque el rubio se está refiriendo en plural a su condición.

-Por eso no te deje ir a esa batalla- Contesta, mientras lanza un suspiro, y desvía la mirada algo preocupado por lo que va a decir –Por que llevas en tu vientre a mi hijo. Pero aun así, mis advertencias y encierro no te importaron, ni impidió que hicieras esa estupidez- Una mezcla de regaño, calma y angustia se refleja en su voz.

-¡¡¡¿UN HIJO?!!!- Se lo pregunta en señal de sorpresa absoluta, mientras siente como sí un balde de agua helada le cayera encima, reaccionando de golpe, y aunque intenta incorporarse, el dolor y Shaka se lo impiden –Ay, ¿Cómo? ¿Qué usted y… Yo?- Todo le parece tan extraño en este instante, pero a la vez, le da una sensación que pensaba seguir ignorando para siempre.

-Ya sabes el cómo- Le contesta tajantemente.

Las memoras en donde ambos hombres, se habían entregado por una exigencia del rubio y el pelilila acepto sin rechistar alguno, como si fuera un mero deber por ser soldado, servir en muchos sentidos al príncipe…

Realmente no le había importado ser tomado por él, no tomo en cuenta que Shaka se había llevado su pureza, le gustaba, siente que lo ama profundamente, pero jamás pensó llegar a expresarlo, más allá de solo complacerlo con su cuerpo y hacerlo rabiar con sus palabras, ya que creía que al príncipe eso no le interesaba en lo más mínimo.

Sus mejillas se sonrojan, desvía las esmeraldas… Sabe que si no hubiera mira a ese idiota rubio, no se habría interpuesto entre ese ataque y él -¿Por qué no me lo dijo antes?- Cuestiona al príncipe algo molesto, esperando una explicación del por qué no le conto su estado, pues no había pasado mucho tiempo desde que se desmayó en un entrenamiento, y Shaka se había encargado de que lo entendiera lo antes posible y estuvo pendiente de él en todo momento… Exactamente como ahora.

-Por qué temía que no te importara llevar a mi hijo, y que te desharías de él en la primera oportunidad que tuvieras- Le confiesa con dolor ese horrible pensar –Tú y yo solo estuvimos por mero placer, y por obligación de tu parte, pero eso… Ya no me importa-

Se había pensado tanto esta situación previamente, Mu se volvió el motivo número uno por el cual debía diferente, mejorar y cambiar un poco su forma de ser, por una que beneficiara más al reino.

-¡¡¡¿CÓMO PUDO PENSAR QUE YO ME DESHARÍA DE MI PROPIO HIJO?!!!- En ese instante le hierve la sangre por darle una bofetada como aquellas que muchas veces se atrevió a proporcionarle, frunce el ceño, pero es incapaz de incorporarse para hacerlo, sin contar que la sensación de ahogo se le presenta por haber gritado.

-Porque tú mismo me lo dijiste- No se altera para nada, sabe que debe estar calmado para que ellos no se no se vuelvan a poner en peligro, más de lo que ya están –De que nada de lo que en esas noches ocurriera al estar juntos, cambiaría el hecho de soy un arrogante, molesto, engreído y odioso príncipe. Y que si no fuera por soy quien soy, jamás me hubieras permitido tocarte. Pero lo siento…- Sus últimas palabras en un tono algo grave las deja salir, apretando con un poco de fuerza esa delicada mano que lleva el anillo que le entrego –Ahora que estamos ganando, recuperando nuestros territorios, y que en tu vientre está el futuro de nuestro reino- Su mirada se pone bastante seria y se afila a mas no poder -No te voy a dejar ir. Te necesito para seguir triunfando, te quiero a mi lado aun sea en contra de tu voluntad. Te amo, y eres lo único que deseo poseer en este mundo para siempre, Mu-

Una confesión de amor bastante peculiar, sincera, rara y posesiva, pero a fin de cuentas es una que va acorde a la personalidad arrogante del monarca, pero acepta que necesita a ese pelilila que le fascino y encanto desde hacía tiempo, y con esa actitud que posee Mu, lo termino atrayendo tanto.

Para el de cejas peculiares, esas palabras, lo hacen sonrojarse tanto, impresionándose e impactándose enormemente, que su corazón late desbocado, aún está confundido por la pérdida de sangre, y su debilidad no ayuda mucho a estabilizarse.

No se esperaba que en ese momento el príncipe le esté diciendo que lo ama… Más cuando, igual él siente ese profundo, hermoso y sincero sentimiento, pero creyó que jamás seria correspondido, por eso, ha actuado como si eso fuera lo menos importante en su vida.

Cuando ha sido al revés, pero no se quiera ilusionar, ya que el príncipe podía tener a quién deseara, ¿Por qué él podría ser su elección?

-Entonces… ¿No se me permitirá decir sí estoy a favor o en contra de todo esto?- Mira desafiante al rubio, como siempre ha sido su naturaleza.

-Puedes decirlo, pero ya llevas un anillo en tu dedo, que te hace mío. Así que, lo que quieras o decidas, espero que sea favorable para nuestra vida de casados- Le responde decidido, aunque sí se siente un poco intimidado por esas preciosas esmeraldas, pues sabe que es capaz de escapar su lo desea, Mu no es alguien por completo frágil o de tomar tan a la ligera, y lo sabe.

Lo encerró y pudo escapar, ¿Quién le asegura que no lo intentara de nuevo?, no lo puede permitir, y solo le queda el poder para impedírselo.

Niega con la cabeza, cerrando sus ojos y riendo levemente –Bien, bien… Escuche esto príncipe, pues será la única vez que se lo diga- Toma la fuerza necesaria para que sus palabras sean escuchadas, ayudándose con un poco de su propia magia para aliviar su dolor, con el fin de que se concentre en ello, sonrojándose y decidido a verlo a los zafiros, mientras aprieta un poco la mano que aprisiona la suya –Acepto llevar a su hijo y darlo a luz, acepto ser suyo, está bien si no me deja ir, quiero estar con usted para siempre, porque igual lo amo, aunque… Yo jamás creí que usted sintiera algo por mí… Ja, ni siquiera creí que fuera capaz de amar a alguien, pero… Mucho menos pensé que fuera alguien como yo, un simple plebeyo que se cree la gran cosa- Muestra sus dientes, y una sonrisa de burla sigue reflejada en su ser -¿No es así como muchas veces me llamo?- No desaprovecha la oportunidad para recriminarle algunas cosas, mientras le confiesa sus sentimientos de una manera tan extraña y bonita.

Siente como su corazón se acelera, se alegra de saber que Mu le corresponde, pero se controla en no hacer algo estúpido, para no perder su postura real.

Después de todo, se quiere seguir viendo como un impetuoso, testarudo, engreído, presumido y obstinado príncipe, vuelto rey, es una apariencia que desea seguir manteniendo, tal vez en una escala más baja, pero no perderá la compostura, salvo solo con Mu.

Aunque este ya lo ha visto en diferentes facetas, conoce el origen de su dolor, sus lamentos, tristezas, odio, y felicidad…

Quien más se le enfrentó en el pasado, es quien ahora le da la fuerza para seguir haciendo lo mejor para su reino… Le hizo ver la realidad de una forma que creyó que nadie se atrevería…

Tanto le ayudo a cambiar, para darse cuenta que lo ama mucho, y que no puede permitirle escapar, pero al parecer no es necesario volverlo a encerrar por egoísmo y seguridad.

-Sí, eres un simple plebeyo, que no le teme a ningún castigo…- Lanza un suspiro, para apreciar ese dulce rostro aun cansado –Creo que eso fue lo que me hizo perderme en ti- Le confiesa a su manera ese enorme amor que le tiene, que solo ellos pueden entender y reconocer como halagos.

Una débil risita sale de sus labios, aun admirando a ese rubio hombre, mientras su mano libre con cuidado es llevada hacia su propio vientre –Y creo que su arrogancia fue lo que me hizo desesperarme con usted, pero también lo que más me gusto- Las mejillas rojizas, con un coqueteo peligros impreso en su sonrisa. Siendo ese gesto, algo que ambos ya han manejado muy bien –Y ahora… Creo que me tendrá prohibido ir al campo de batalla ¿Cierto?-

-Así es, y espero que no se te ocurra volver a ir sin mi autorización- Le reprende con calma, mientras cuidadosamente sigue besando esa delicada mano, y acompaña la que toca el lugar donde la vida que ambos han creado se está desarrollando.

-Ja, ja, ja, pero si lo salve. Creo que eso vale un poco para que no me castigue, ¿No?- Sí que tienta su suerte un poco.

-No, más vale tu vida y la de nuestro hijo que la mía, además… En cuanto te recuperes, nos casaremos y te convertirás en la madre de este reino, así que los soldados te protegerán a ti y no se te permitirán ir al campo de batalla- Le sentencia, mirándolo con esos ojos azul profundo, demostrando un toque de tranquilidad, como con cierta emoción ante el matrimonio que le ha propuesto e impuesto al pelilila.

-Ah… Bien… Sera muy aburrido entonces, pero lo hare solo por nuestro hijo, principito- Le sonríe, alzando la mirada con un coqueteo tímido y cuidadoso, pues aún le cuesta mucho levantar la cabeza, pero no pierde la alegría de ese hecho romántico.

-Deberás empezar a llamarme solo Shaka, además de que ahora ya fui nombrado rey, te convertirás obviamente en reina y nuestro hijo en el príncipe del reino, ¿Lo entiendes?- Se acerca poco a poco a ese rostro, inclinándose, pues desea firmar el contrato real con algo que solo ese joven le puede dar.

-Sí, lo entiendo reicito, Shaka- La burla siempre está sumamente presente entre ambos, sabe que ese actuar antes no le agrada para nada al rubio, pero ahora… Parece atraerlo cada vez más.

Sabe muy bien lo que busca de él, y esta perfectamente de acuerdo, puede acercarse tanto como quiera.

De a poco, sus ojos chocan brevemente antes de ver sus labios y sellar esa nueva futura unión, en donde no importa quién esté a favor o en contra, se llevara a cabo pues es el deseo del joven rey que ha demostrado ser capaz de proteger a su reino de esta guerra que pudo costarles muy caro.

Claro que aún falta por librar más batallas, pero… Si está al lado de Mu, tiene la motivación suficiente, y la humanidad para hacer cualquier movimiento a favor de su gente y su amada familia.

Esos labios prueban, y roban el aliento como el sabor del pelilila, no será un bruto como en otras ocasiones, aún está herido, y ahora lleva una vida en su interior, de ahora en adelante le demostrara su profundo amor, uno que jamás pensó dejar salir por alguien tan altanero, pero de un hermoso y puro corazón.

Mu, no tiene forma de negarse esta vez, será cuidado y protegido por el mismo rey, se volverá suyo, como el hecho de que su vida se conectara con el reino, que juro proteger como soldado y ahora lo hora como reina… Llevando el futuro en su vientre.

Sera responsable y calmado en esto, pues claro que no desea perder a mi pequeño bebé, que ya ama con todo su corazón.

El beso se rompe, dejando que un jadeo escape de ambas bocas, mientras sus rostros clientes y mejillas rojas se presentan, una sonrisa traviesa se dibuja en el pelilila, mientras una mirada seria en el rubio se proyecta.

-Debes descansar, la magia actúa mejor si duermes un poco más- Le recomienda, mientras da una última caricia a esa mejilla derecha, y conecta su mirar azul con las esmeraldas de quien ama.

-Creo que tienes razón, pero lo hare por nuestro hijo, no porque me lo dices- La forma desafiante de este joven siempre será su marca personal para dirigirse a ese rubio, que ya no se enfada tanto por sus actitudes poco respetuosas hacia él, sino que ahora por el contrario le trae calma que actué así.

-Como quieras, pero ya no hagas ninguna estupideces- Lanza un suspiró, sin soltar esa mano, manteniéndose de pie –Me quedare a tu lado, así que puede dormir tranquilos, están ambos seguros-

Eso le da mucha sorpresa, y emoción al pelilila, que se sonroja por las atenciones dulces y románticas del actual rey, que le provoca desviar la mirada y asentir –Bien… Como guste- Aprieta sus labios, intentando no ver a esos zafiros que lo ponen de nervioso -¿Seguirás sosteniendo mi mano todo el tiempo?-

-Sí, es mi derecho porque eres mío solo mío- Como un acto de atrevimiento, besa la derecha, para dirigir su vista al vientre plano y sonreír cálidamente –Tú y nuestro hijo son lo único que realmente me importa de este reino, por ustedes sé que puedo ganar esta guerra y tráeles paz a ambos, así que… Mientras estén a salvo, la esperanza seguirá existiendo, ¿Entiendes bien la importancia de tu vida para mí?-

Comprende muy bien cada una de sus palabras, las cuales ve como un código que descifrar ante sus dificultades por demostrar sus verdaderos sentimientos, aunque lo intenta a su manera.

Aprendió a decodificar cada palabra del rey ya hacía tiempo, y puede sentir la sinceridad y amor en sus palabras ahora.

-Sí, lo entiendo… Pero igual tu vida, es muy importante para mí, Shaka- Le sonríe, para cerrar sus ojos y acomodarse un poco en esa cómoda cama, para volver a dormir, pues el cansancio de nuevo lo quiere a vencer lentamente, aun esta convaleciente y necesita recuperarse.

-Te amo Mu- Le susurra, para seguir acariciando en vientre del pelilila –También a ti te amo-

-Nosotros… También te amamos…- Un susurro deja escapar el agotado soldado, para esta vez dormir plácidamente en compañía de su amado y arrogante rey, el cual lo está ya protegiendo con su vida mientras vela su sueño y a la vez planea como traer paz para toda la eternidad a su mundo.

Al fin de cuenta, su mayor motivación se encuentra en su cama, dentro de esa habitación que les da completa privacidad a ambos. Y como menciono, siempre y cuando Mu y su hijo estén a salvo, Shaka podrá hacer todo con tal de que la paz vuelva, y las guerras terminen, esa es su meta de vida y amor ahora.

 

Sus primeros recuerdos, son de personas alrededor de él…

Siempre diciendo lo mismo de su persona.

“-Es él la reencarnación de Buda-“

“-Por favor gran Buda, ayúdanos-“

“-Danos entendimiento para poder se tan virtuoso como tú-“

Siempre la gente a ido a verlo, a buscarlo, rogando porque sus plegarias san escuchadas, para que él pueda ayudarlos, interceder por ellos.

Solo es un niño, que ve a todos aun con confusión, con una lástima que no puede evitar expresar…

Cree que debería hacer algo, intentar ayudar de alguna forma posible, y no solo quedarse allí sentado todo el día en posición de flor de loto, meditando. Pero… No puede hacer mucho a sus cortos seis años, sus palabras, sus opiniones que intenta expresar a aquellos que se ocupan personalmente de él, pero que casi no le prestan atención alguna…

Tal vez por eso dejo de intentarlo.

Entendió que debe dedicarse solo a cumplir su papel como la reencarnación de Buda, pues aunque pensara que se podía hacer algo para que los fieles creyentes ya no sufrieran, la única respuesta que recibía de aquellos que lo “Cuidaban”, Era…

“-Tu mera presencia calma el dolor en sus corazones-“

“-Aliviar el dolor y la pena es lo que el gran Buda les enseño, y es lo que tú harás también-“

Creyendo en sus palabras, intenta hacer lo mejor posible.

Espalda recta, cabellos rubios por debajo de los hombros, cayendo como una cascada de oro suave, ojos siempre cerrados, puede reconocer ya su entorno solo con el oído, el olfato y sus pies descalzos, que dentro el recinto los lleva así, sus prendas sencillas, su Kasaya de color blanco, con la tela que sube por su hombro izquierdo y baja por su espalda hacia la cintura derecha de una tonalidad naranja, el Bindi en su frente, un punto rojo por el cual sintió mucho dolor, pues fue impreso en su pequeña frente casi al rojo vivo, para que quedara bien marcado y con un tono oscuro marcado de por vida, que se retoca ese color de vez en cuando.

Sí, ha derramado lágrimas, aprendió con el dolor, pero es algo que ha logrado soportar por el bien de aquellos que vienen a pedir su ayuda, y darle ofrendas.

Los dulces y alimentos los puede comer él, pero todo aquello de valioso como monedas, oro, piedras preciosas, no las toca, solo ve que son llevadas a un lugar en donde no tiene paso alguno.

A propuesto varias veces que ese dinero podría ayudar a quienes sufren pobreza y tal vez, de esa forma las personas serán ayudadas por el buen Karma que se merecen por desprenderse de objetos valiosos.

Aun es inocente, aún no sabe cómo funciona el mundo realmente, el por qué las personas hacen lo que hacen y se rigen por un deseo que no deberían tener en sí.

Incluso él… También se ha dejado llevar por sus instintos, al intentar dar su humilde opinión, al estirarse discretamente de la postura que hace doler su espada, pero igual ha hecho más sacrificios al aguantar el sueño cuando el día es tan largo, el hambre o la sed… Sí, esto es capaz de agotar a un adulto, para un niño es sumamente exhaustivo, pero intenta hacer todo por el bien de las personas, para que no pierdan su imagen de él, como su nuevo salvador, la reencarnación de Buda.

Pero, claro que todo tiene un límite, desde luego el de un niño llega cuando siente que de verdad solo quiere hacer lo que los demás…

Escuchar las risas de algunos niños fuera del templo, saber que deben estar jugando, divirtiéndose, ser… Solo niño de su edad, algo que a él no se le ha permitido desde que tiene memoria.

Detrás de ese templo enorme… Existe un hermoso bosque, en donde se encuentra un pequeño lago cristalino, con hermosos lotos flotando por todo el lugar… Solo ha podido ir una vez, pues tiene unos muy vagos recuerdos, pero… Siempre le han prohibió ir allí, por alguna razón que no le cuentan.

Esta vez, decidido que ira, solo… A divertirse, jugar, acompañado por la naturaleza, poder tocar esos preciosos lotos, que son mucho más lindos de aquellos que tienen en el templo, y sabe que no son los mismos que lleva en su memoria.

Escapo en el momento en que todos bajan la guardia para tomar un muy breve descanso, y sabiendo que él nunca hace este tipo de cosas, que tiene confianza de permanecer solo, decidió salir, ir corriendo aun con su Kasaya sagrada, y adentrarse en lo más profundo del bosque, para que nadie lo pueda ver o encontrar.

Sus pies descalzos, sienten el pasto suave y fresco en cuando entra en el bosque… Una sensación de libertad lo invade, y puede respirar un aire tan puro y fresco que no sabía que existía algo así de limpio…

El incienso siempre inundo sus pulmones, ahora con tan solo respirar es una sensación tan diferente.

El sol lo ilumina por completo, puede sentir la calidez y paz… Una primera bocanada de libertad invade su ser por completo…

Es tan extraño, porque sabe bien por donde caminar para encontrar ese lago, sus pies van dando pequeños pasos, pensando en solo encontrar a ese cuerpo de agua, no sabe cómo… Pero entiende que el camino que sigue lo guiara a su destino...

Puede escuchar el agua, la frescura en una suave brisa golpeado su rostro, puede ver la belleza de la vida con sus preciosos ojos azules como el mismo cielo…

Sus cabellos al aire, su rostro infantil sonríe plenamente, pues ahora no será regañado por mostrar emociones, puede sentirse cómodo, aquí nada lo ata, nadie le impide tener un instante de felicidad verdadera.

Puede correr un poco, quiere ya llegar, pero… Algo detiene su andar…

Una voz, una muy suave, y tierna… Que le llama tanto la atención, que le provoca detenerse para buscar y saber de dónde proviene aquella vocecita que inunda sus oídos y le da tanta curiosidad.

Con cuidado se va ocultando entre los arbustos, mirando atento hacia donde cree escuchar ese delicado sonido que pareciera hipnotizarlo.

Y lo ve… Justamente en donde el lago se encuentra…

Un niño, uno muy sonriente, que brinca emocionado, como si estuviera bailando de manera improvisada, girando sobre su propio eje con gracia, en donde las hojas se van moviendo al son de esos movimientos, las mariposas, insectos y demás animalitos pequeños, vuelan alrededor del infante y producen sonidos propios de su especie.

Su semblante es extraño, es como si su cuerpo fuera trasparente, pero se nota el color del cabello lila, corto hasta los hombros, adornando con ramitas y unas flores nunca antes vistas en este mundo, sus ojos verdes iluminados por el mismo sol, marcas en su frente, unos pequeños puntos de color rosa, sus ropas sencillas, una túnica por completo blanca, un lazo de color dorado alrededor de su cintura, sin zapatos, como si nada lo pudiera herir, deja escapar algunas risitas, y se detiene de golpe por alguna razón.

Ve su reflejo en el lago, algo que se supone debería ser imposible… Se queda un instante impresionado, y luego sonríe, hincándose a la orilla del cuerpo de agua, mirando atento los lotos, estirando su manita lo más que puede para intentar alcanzar a tocar algún pétalo de esa bella flor, sin ningún resultado favorable.

-Oh… No puedo hacerlo- Murmura su decepción, lanzando un suspiro, sintiéndose bastante triste por ello.

Los pequeños zafiros impresionados por esta imagen adorable a su ver, se queda atento por ver a un niño posiblemente de su misma edad, tanto es su asombro que no se fija en donde pisa ni como mueve sin querer el arbusto que lo oculta, e igual deja salir una expresión de asombro sin pensarlo –Wow-

-¿Eh?- Aquellos sonidos alarman al pequeño pelilila, que se levanta de golpe del suelo, mirando hacia donde escucho esos ruidos -¿Quién es?- Pregunta, aunque sea contra las reglas, no siente maldad, pero si miedo.

-Lo siento por asustarte- La tímida voz del rubio se hace presente, saliendo lentamente de su escondite, dejándose ver al fin.

-Ah… Un… Un… Humano…- Va retrocediendo lentamente, se siente atemorizado por las advertencias que conoce desde niño, sus manitas las encoge contra su pecho, al igual que su cuerpo tiembla y su expresión de terror inunda su rostro.

Sabe que debe huir rápido, pero le da algo de curiosidad ese niño como temor.

Rápidamente nota esto, como va moviéndose lentamente hacia atrás, pero… No puede dejar que ese lindo niño se vaya, pues… Le gustaría conocerlo, hablarle, juga con él…

Es el único que podría hacerle compañía en este momento, además de que le gustaría escuchar su linda voz un poco más de tiempo.

-Espera, no te vayas…- Al igual que ese pelilila de silueta algo trasparente, que intentaba hace poco tocar una flor de loto y no tuvo suerte de conseguirlo, estira su mano, queriendo alcanzarlo, sin embargo se detiene al darse cuenta que camino un pequeño tramo y llego a lago rápidamente.

Los ojitos verdes, revisan de arriba abajo al rubio, asustado por que un humano lo este viendo, sabe que eso es muy peligroso, pero… No entiende por qué sus piernas le impiden irse, es como si tuviera tanto miedo para poder correr, o no pudiera desobedecerlo por completo.

-¿Por qué… Me pides que no me vaya?- Le pregunta dudoso, frunciendo su ceño en son de miedo y desconfianza, alza levemente su mirada, cubre su boquita con las manos en forma de puño por si debe defenderse.

-Es… Es… Que… Yo…- No creía que debía explicar sus motivos, del por qué le pide que no se vaya. Pero la curiosidad como a todo buen niño le ha ganado al ver esa silueta como la de un humano pero trasparente, por la cual puede ver atreves de su piel los arboles de atrás, eso lo llena de tantas dudas, y no puede evitar que su pregunta salga de manera algo brusca -¿Quién eres?-

-¿Tú quién eres?- El pelilila, rápidamente se defiende ante la pregunta, quedándose de pie tranquilo, con sus manos delante de él, pero más serio en su mirar, pues recordó algo que solo él puede hacer y le ayudaría a escapar si lo requiere.

Reacciona ante la pregunta, queriendo que nadie lo relacione con lo que le enseñaron desde niño, baja su marida, apretando su puño, pero cambia de inmediato su semblante –Me… Llamo Shaka…-

-¿Shaka?- Pregunta ladeando su cabeza, como si reconociera ese nombre de algún lado -¿Eres a quien le llama la reencarnación del gran Buda?- Curioso es su rostro ahora, dando unos pasos hacia ese rubio, aunque mantiene su distancia por precaución.

No sabe cómo es posible que este niño conozca esa identidad con la cual lo conocen, eso lo llena de una mayor curiosidad por saber todo de ese pelilila, ahora siendo el quien preocupado ladea levemente su cabeza, frunce su ceño en son de angustia -¿Cómo sabe eso?-

Ahora de dar explicaciones, baja sus manitas a sus laterales y empieza a jugar con sus dedos en señal de vergüenza, regalando una sonrisa apenada, a la vez que desvía su mirada –Aaah, bueno… Es que… Soy un espíritu del bosque… Que a veces… Escucha las historias que el viento trae. Ja, ja, ja- Se pará de lado justamente para ver el lago, moviendo sus piecitos que no producen evidencias en la tierra suelta –Se supone que no debería hacer eso, pero… Lo hago para no aburrirme…- Un pequeño suspiro sale de sus labios -Es solitaria a veces la vida de un espíritu cuando no se tiene a nadie con quién jugar- Le confianza, alzando sus hombros, y sintiéndose algo mal por estar desobedeciendo las reglas sagradas de su mundo.

Le llama la atención esa reacción del pelilila, que sus pasos se envalentan, para acercarse un poco más a ese pequeño, teniendo menos distancia de por medio –Espíritu del bosque, ¿Vives aquí tu solo?-

Se asombra un poco al escuchar eso, se le había advertido siempre tener cuidado al hablar con un humano, podría ser engañoso y llevar peligro para su gente, por lo cual solo asiente, para seguir viendo el lago y esos lotos –Si…-

-Oh… Ya veo- Lanza un suspiro y mira hacia el lago también, justamente a donde los lotos flotan y se ven tan preciosos por el agua corriendo debajo de ellos –Yo también estoy solo… Así que… sé lo que es aburrirse de esa manera- Puede estar rodeado de muchas personas, pero nadie lo escucha, ni le presta atención a sus necesidades emocionales o de un infante, solo a aquellas básicas, como de alimento, bebida, sueño y necesidades fisiólogas de otra índole.

-Pero, los humanos tienen a muchos como ustedes ¿No? Deberían poder hacerse compañía…- Claramente es espíritu no conoce mucho de la sociedad a la que le teme.

-No es tan fácil… No todos tenemos esa oportunidad- El recuerdo de saberse solo en este mundo, el saber que no conoce la palabra familia, pues nunca la ha tenido que mencionar para él –Por eso ha venido a este lugar a ver los hermosos lotos, para no sentirme tan solo-

La curiosidad en esos ojos verdes se ve, pues perciben la tristeza de ese niño, pero cambia su actitud curiosa, para también mostrar una melancólica, y lanza un pequeño suspiro –Debe ser lindo poder tocar esas lindas flores- Baja su cabeza, hincándose a la orilla del lago, admirando su apenas visible reflejo.

Ladea la cabeza para ver que el pelilila se ha quedado arrodillado sobre ese pasto verde, imita su acción, para acompañarlo –No puedes tocarlas ¿Cierto?-

Niega con la cabeza, mirándose también un poco triste como ese rubio –Nosotros los espíritus del bosque no podemos tocar nada tangible o que pertenezca a su mundo- Cierra sus ojos decepcionado –Aunque el boque sea nuestro hogar, solo en ciertas áreas en las que ustedes no tienen acceso podemos tocar los árboles, flores, pero es naturaleza que ustedes jamás conocerá- Habla suavemente, para abrir sus ojitos, mirando como esos lotos flotan y entiende que es bueno dejar ir a veces aunque le moleste y entristezca por su edad –Sé que debe parecer raro, pero… No podemos hacer nada, nosotros ni siquiera deberíamos dejarnos ver por los humanos, pero- Al momento de hablar, gesticula un poco, provocando que su mano derecha, se dirija hacia el rubio, en donde por un micro segundo sus dedos chocan con el hombro ajeno y puede sentirlo -¿Eh? ¿Qué paso?-

-¿Estas bien?- Pregunta el pequeño humano, que no entiende que acaba de suceder.

-¿Te toque…? Pude sentirte…- Se sorprende por ese simple roce, siendo extraño y muy curioso para él. Rápidamente deja de ver su mano y observa ese rostro confundido del rubio -¿Puedo tocar tu hombro de nuevo?- Eleva su extremidad derecha, lleno de curiosidad ante esto y determinación a la vez.

Esta pregunta sorprende y sonroja al rubio, pero asiente con la cabeza, sin ser capaz de hablar.

Curioso por esta verdad, su mano tímida se empieza a acercar peligrosamente a ese delgado hombro que está a su completo alcance, sus dedos flexionados un poco, pues teme que solo fuera una falsa alarma, pero sabe que lo que sintió no fue solo… Una ilusión…

Y cuando al fin logra acercarse lo suficiente para que su mano se pose sobre ese hombro, una suave brisa se presenta, siendo ignorada por los dos niños, que se sorprenden por que en efecto… Pueden tocarse.

El pelilila no sale de su asombro, mira atento a ese hecho, ¿Cómo es posible que su manita logre tocar el hombro de humano? Niega con la cabeza sin poder creerlo, pero su sonrisa de felicidad es muy grande –¡¡¡ES SOMBROSO…!!! ¡¡¡NUNCA PENSÉ QUE… ESTO PUDIERA PASAR!!!-

-¿De verdad?- Ladea su cabeza, confundido y emocionado por la sonrisa del pelilila, la cual lo llena de una inmensa alegría, como curiosidad por conocer todo lo que pueda de él.

-Sí, es maravilloso y muy bonito- Quita su mano con rapidez, pues se siente apenado y sonrojado por haberse atrevido a tocar a un humano que tiene un gran peso en esta tierra, es cuando lo vuelve a recordar –Debe ser… Porque es la reencarnación de Buda… Él… Era muy apegado a la naturaleza, tal ve por eso es que logramos tocarnos- Sin malicia, ni perversión, sus palabras inocentes salen, como todo buen niño de seis años, muestra su más maravillosa sonrisa cuando algo lo sorprende tanto, encoje sus brazos al nivel de su pecho, flexionando sus codos, para que sus manitas se muevan de arriba abajo por el enorme entusiasmo –¡¡¡QUÉ LINDO ES ESTE DÍA!!!-

Nunca antes había visto una sonrisa tan linda, jamás escucho una voz tan hermosa y melodiosa, mucho menos sentir como un tibio toque se posa en su ser. Desde que alcanzó la edad de tres años, él mismo ha tenido que atenderse en cualquier cosa que sea tocar su cuerpo, como bañarse, limpiarse, comer, etc… Nadie tiene permitido tocarlo, ni ayudarlo en nada, pues es considerado un ser sagrado…

Sin embargo este niño lo hizo sin medir consecuencias de ese hecho, aunque al final lo recuerda.

Verlo sonreír aunque no lo conozca, le impulsa para querer hacer algo bonito por él… Tal vez… Tiene una idea inocente y muy curiosa que se posa en su mente, que no posee mucha lógica, solo lo piensa para hacerlo feliz.

Sin pensarlo, sin importar llevar esas prendas tan importantes, hunde su cuerpo en el lago, de donde apenas logra alcanza a tocar el fondo con sus pies… Solo por una razón.

-¿Que estás haciendo?- Pregunta confundido el contrario, mirando como camina por la orilla con mucho cuidado ya metido en el agua.

Escucha la pregunta, pero no le toma mayor importancia, pues esta decidido en lo que desea hacer, para brindarle un momento más feliz al pelilila. Y cuando al fin la tiene en sus manos, se dirige a la orilla en donde esta ese espíritu esperándolo.

-Se me ocurrió… Que si quieres tocar una flor de loto y no puedes hacerlo por ti mismo… Tal vez, si yo la tengo en mis manos, puedes acariciar sus petaos- La lógica en este niño es muy inocente y adorable, ofreciéndola entre sus pequeñas extremidades de donde escurre un poco de agua por la hermosa flora acuática, directamente hacia ese bonito niño que se sorprende por este hecho.

Siente su corazón latiendo rápidamente, sus manitas recogidas hacia el pecho, mirando atento a ese niño rubio, pero a la vez a esa bonita flor que siempre deseo tocar y no podía hacerlo antes.

Tímidamente de nuevo siente el valor en su ser, su mano derecha vaya directamente a ese loto, de color rosa pálido con un poco de blanco en el centro, sus propias hojas hacen una especie de cuna a esa hermosa flor, impresionado por esa belleza, se siente hipnotizado y tan lleno de emoción.

Sonríe, sus mejillas se sonroja, mientras va tocando con sumo cuidado sus suaves y delicados pélalos, dándose cuenta que es tan hermosa también al simple tacto, ambas manos sobre esa florecita, para poder ser admirada y acariciada…

Como si con ese simple hecho de que Shaka la esté llevando en sus manos, provoca que ese espíritu pueda tocarla. Esto es algo que no debería estar pasando, de hecho, el mismo espíritu se pregunta si este es el poder del mismo Buda o… Tiene más conexión con su propio mundo.

-Es muy bella- Murmura, enternecido por al fin cumplir un pequeño deseo.

-Todos merecen ser felices, y más si son por las pequeñas cosas que la vida nos regala- Un pensamiento que sale sin previo aviso, como si su significado indicara más de lo que esta interacción quiere decir.

Esto resuena en la mente del pelilila, y provoca que desvié su vista de la flor y vea al rubio, con el cual se siente más cómodo, pero aun tímido, mas sus mejillas rojas no le impiden hacer algo que debió desde un inicio o no debería ya para este punto –mi nombre es Mu…- Se presenta, tímidamente, mientras vuelve su vista hacia el loto, aunque de reojo, vuelve a notar esos luminosos zafiros.

-¿Mu? Es muy bonito…- Alza su vista, impresionado y muy feliz por ese nombre -¿Te podré ver de nuevo?-

-¿Eh?- La pregunta sorprende de nuevo al pelilila –No deberíamos… Esta prohibido que los humanos y espíritus convivan juntos-

-Pero, si lo hacemos… Podre ayudarte a tocar los lotos cada que lo quieras o cualquier otra cosa- Suplica con su mirada esto, sin importarle aun estar dentro del agua –Por favor Mu… Quiero verte de nuevo… ¿Si?-

Ver ese semblante le provoca un latir en su corazón a mil por hora, con los nervios que encienden sus sentidos y alarmas, pero no hace caso a esto, ya que la propuesta es muy tentadora, y ese rostro del rubio lo está convenciendo, para ser amigos –Esta bien, prometo volver a verte… Algún día- Le dedica una bella sonrisa, donde cierra sus ojos y muestra sus dientes.

Esto encanta el noble e inocente corazón del rubio, podría quedarse por horas viendo esa hermosa sonrisa, pero el tiempo tan corto se acaba.

Se escucha como a los lejos, varios gritan el nombre del rubio… llamando la atención de ambos…

Shaka, sin quererlo suelta el loto… Y aunque Mu intentó tomarlo, sus manitas no logran ser suficientes para sujetarla y cae de nuevo al lago, sin remedio alguno.

Es obvio que solo funciona el poder tocar algo del mundo humano con la ayuda de Shaka, pero…

¿Por qué esto sucede?

-Debo irme… Si vienen para este lugar, te podre en riesgo…- Sale del agua lo más rápido posible, mientras ese líquido vital escurre por su cuerpo, pero poco le importa, ya que el miedo de que descubran a este lindo espíritu, lo impulsa a irse lo antes posible.

-Si… Cuídate… Reencarnación de Buda- Sabe su nombre, pero por respeto lo llama así.

No le agrada que Mu le diga así, pero el tiempo de corregirlo o decirle algo se ha acabado, solo le dedica una sonrisa tímida, la última que podrá expresar ante de volver a su vida seria y aburrida por su título.

-Nos volveremos a ver Mu, es una promesa que hicimos. Adiós- Se despide rápido, para ir corriendo hacia donde había venido, dejando solo al espíritu que se levanta del suelo, quedándose sorprendido y sonriente ante ese humano tan amable y dulce que acaba de conocer, y fue muy lindo con él.

-Adiós- Alza su manita al nivel de su cara, despidiéndose como lo hacen los humano, moviéndola de lado derecho a izquierdo.

Pero el hermoso ambiente cálido y calmado, se va descomponiendo al notar un poco de humedad a su alrededor.

-Mu, ¿Qué es lo que has hecho?-

Escucha la voz que conoce bien y que lo ha asustado mucho en este momento.

-Yo… No creo que sea alguien… Malo…- Habla tímidamente, avergonzado y bajando su mano hacia el lateral.

-Hiciste una promesa con un humano, sabes muy bien que eso está prohibido, es algo muy peligroso para ti y para todos- El regaño de parte del espíritu mayor de cabellera azul y ojos Viridian, se acerca de espaldas hacia el más pequeño.

-Pero… Saga…- Quiere intentar disuadir al otro, pero no logra sacara argumento que le ayuden a esto.

-No existen peros que valgan. Tus padres se van a enterar de esto. Ahora volveremos a tu hogar, pequeño príncipe- Lo espera dándole la espalda, para ingresar al bosque y desparecer.

-Si…- Baja la cabeza, dando pequeños pasos hacia ese espíritu de apariencia adolecente que lo intimida un poco, pero no puede hacer mucho si es su protector y mucho más…

Sin embargo, aunque desaparezca junto a ese peli azul, ¿Podrá ser suficiente para olvidar al pequeño amigo que acaba de conocer?

Eso solo el tiempo lo dirá.

 

Después de aquella ceremonia, donde se dedicaron sus más sinceros y puros sentimientos, recibiendo la bendición de aquellos Dioses de los Lemurianos.

Saber y sentir que al fin ambos se pertenecen, que son uno en corazón, pensamiento y alma…

Siendo aceptados por los allí presentes, ya que demostraron ser capaces de defender, procurar y resistir en su decisión y sentimientos.

Un pequeño banquete, en donde la comida principal consiste en vegetales y carnes exclusivamente preparados para este momento…

De donde el olor invitaba a todos a sentarse a la mesa para degustar esa deliciosa comida, las frescas frutas como un pequeño postre…

Ya que para esta pequeña celebración, no hace falta tanta ceremonia formal, pero igual todo se mantiene tranquilo y discreto por parte de ambos jóvenes e recién casados, que se sonrojan a simple contacto visual y que intentan no soltar sus manos por nada del mundo.

Por momentos, Mu admiraba el anillo que el rubio le ha dado como otra muestra de su amor, acariciaba dicho objeto con cuidado, incluso hubo quienes lo querían ver, diciéndole que era un hermoso regalo de matrimonio.

Ese joven Lemuriano de cabellera lila no solo se ha casado con un hombre sumamente guapo maravilloso, que ahora ya no figura como un simple extranjero ante los ojos de los demás, sino que al demostrar lo fuerte, valeroso y dedicado que es y será como marido, se ganó la aprobación de todos… Sin duda uno de los mejores partidos para el pelilila.

Shaka, se sentía avergonzado por la atención que ha llamado, pero al estar al lado del Lemuriano de bella sonrisa y mirada preciosa, lo hace sentir que allí pertenece sin duda…

Aunque claramente, no podía evitar sentir la mirada de cierto disgusto del abuelo del pelilila, pero este término felicitándolos a ambos, y con una petición de por medio.

-Cuídalo con tu vida de ahora en adelante, ¿Lo entiendes bien, Shaka?-

-Sí, de eso no tenga la menor duda-

Fue solo un momento en que Mu estaba siendo admirado por su belleza, en donde Hakurei aprovecho para hablar con Shaka, sabiendo que de ahora en adelante, su nieto tendría otro lugar a donde ir, pues esa noche y las demás… Ya no lo vera en su hogar, sino en el que formara con este rubio. Por lo tanto debe dejarle en claro a ese joven, que se lleva lo más valioso e importante de su vida, por lo cual, cuidarlo con todo su corazón es su nuevo deber.

Claro que Shaka, sin falta protegerá a su Mu con su vida misma si llegara a ser necesario.

Se da cuenta de que perderse en aquella montaña dé su mundo, fue lo mejor que le ha pasado, ya que gracias a esto conoció a donde su corazón pertenece.

Música con instrumentos típicos, bailes tradicionales, comida deliciosa, todo sin duda fue sencillamente hermoso, discreto y fabuloso, pero… Ya es el momento en que todo acabe… Y la joven pareja se debe retirar a su nuevo hogar…

Ese caminar será a solas, entre ambos, hasta llegar a su nuevo y pequeño hogar. Shaka tomara la mano de Mu, y lo guiara en cada uno de sus pasos hacia donde la cabaña que hizo para él se encuentra…

El pelilila va confiado, sujetando esa cálida mano, sintiéndose tan seguro entre la noche, pasando por algunas zonas entre arbustos, que conoce tan bien de día. Sin embargo es diferente este caminar… Van juntos, sitiándose tan acompañados y a salvos a lado de quien aman.

La noche, la luna, y estrellas son los testigos de que ambos van a donde su amor se fundirá en un inmenso calor que ninguno podrá extinguir, solo controlar porque sus sentimientos son tan poderosos que solo basto poco tiempo para darse cuenta que se necesitan tanto.

Ninguno se cansa de decirle al otro su gran amor, que es maravillosa esta vida a su lado, que todo es perfecto y que serán tan felices juntos.

Sonrisas, suaves caricias y besos, sus corazones laten tan rápido que se puede sentir contra su pecho…

Sonrojados y ansiosos por solo ver que tan maravillosa y perfecta es la cabaña que es su nuevo hogar…

Y justo al llegar, el presentarla como su hogar, Shaka se fija en la expresión del Lemuriano, el saber su opinión y conocer la reacción que tendrá al verla de frente.

Sus ojos brillan, su boquita se abre en son de sorpresa, se sonroja, y lleva su mano derecha hacia su pecho, deslumbrado por que ese hogar, es suyo…

-Qué bonita- Puede ver que aunque sea sencilla, es muy acogedora por fuera…

Madera muy bien lijada, acomodados cada troncos de manera meticulosa, bueno lo mejor que pudo el rubio, claro la esta, la puerta del mismo macizo material, pero es fácil de mover por las bisagras que hizo desde cero, a como su mente le dio entendimiento de realizar, algunas ventanas, cubiertas por telas frescas, para proteger de cualquier vista indiscreta.

A un lado el jardín que preparo con cultivos para el consumo a futuro, e igual algunas flores que fue capaz de plantar a escondidas pues sabe que Mu las adora…

Cerca de un rio, todo para que tengan las mejores comodidades que su mundo les puede otorgar.

-¿Te gusta de verdad?- Pregunta, sujetando esa delicada mano, sintiéndose agradecido de que él disfrute lo que ha hecho solo para él.

-Sí, es muy linda, es… Simplemente perfecta…- Mira al rubio, con sus mejillas ruborizadas, y una encantadora sonrisa en sus labios –Porque la hiciste para nosotros- Encantado se encuentra el corazón del Lemuriano por tan hermoso detalle.

-La hice por ti y para ti… Y…- Se sonroja de solo pensarlo, pero respira hondo y se siente calmado para hablar con toda la sinceridad posible –Para nuestra familia…- Se atreve de manera rápida a robar un beso de los labios de su ahora marido.

Ya no puede esperar para darle miles de besos, todos los posibles, pues necesita que Mu sea solo suyo, aunque debe esperar un momento más…

Al igual como tuvo que esperar para darle esos dulces besos hasta ahora, todo para que el respeto por la cultura y tradición de los Lemurianos no se viera afectada por sus deseo mundanos, además Mu es a quien más respeta y ama en este mundo, el suyo y en los que siguen.

Se sorprende por ese beso tan suave y tímido, notando el contraste y contexto que lleva, un deseo e ilusión que sin duda también necesita realizar.

Sabe muy bien lo que sigue después de la ceremonia que bendice su unión, y lo acepta tan gustoso. Su cuerpo y corazón solo deben pertenecerles al rubio hombre que lo sujeta y mira con una inmensa ternura y cierta lujuria mezclada.

-Nuestra familia…- No puede resistir ver esos intensos zafiros, sonrojarse por ellos, sonreírle, los nervios invaden su cuerpo, asiente, y decidido abraza al Hindú de manera fugaz, pues esta tan ansioso por lo que continuara –Si… Eso me encantaría… Digo, me gusta la idea…- Su lengua lo traiciona, pero está bien, pues está al lado de quién más confía.

No pudo corresponder ese abrazo, pues sucedió tan rápido que su reacción fue lenta a comparación, aun así nada puede evitar que le deposite un beso en la frente, para seguir guiándolo hasta llegar a la puerta…

Tal vez ahora mismo no pueda ver por completo los detalles externos de su nuevo hogar, sobre todo la bonita cosecha que tendrán, ya que la capacidad de esa tierra fértil dará frutos muy pronto. Al igual que ese amor que necesita consumarse.

El estar delante de esa linda y artesanal puerta de madera, claro que tiene detalles que necesitan perfeccionarse, pero son mínimos, es linda, se puede abrir fácilmente, pero igual contiene su propia seguridad, una pequeña maña que el mismo rubio entiende y deberá enseñar a su ahora esposo.

La puerta es abierta, pero Shaka no dejara que Mu se adentre de una manera tan simple…

-¿Puedo hacer algo de mi mundo?- Le pide permiso, sin soltar la izquierda del pelilila.

Ladea su cabeza levemente, confundió, pero mostrando una linda y tenue sonrisa de nervios, con tintes rojizos en sus mejillas –Claro que si- Sabe que nada malo vendrá de parte de su amado.

Tiene luz verde para lo que desea hacer. Sabe lo que un matrimonio significa en su mundo y los procesos son casi similares en algunos aspectos… Dar a entender a la familia que es capaz de proporcionar alimentó, bienestar, estabilidad económica y emocional…. Pero las tradiciones de los Lemurianos son aún más especiales, pues estas demuestran que estas dispuestos a hacer todo por tu persona amada, mucho más de lo que el dinero puede comprar.

Siendo esto último algo de suma importancia.

Suelta esa gentil mano de forma rápida, ahora ya teniendo más fuerzas que antes, carga al pelilila, al estilo conocido como princesa, donde su brazo izquierdo pasa por debajo de las piernas del Lemuriano y la diestra sujeta con firmeza la espalda hasta tocar el hombro de su amado.

-¡¡¡¿QUÉ HACES?!!!- Se asusta un poco por esto, sujetándose con todas sus fuerzas del cuello del rubio, sintiéndose algo temeroso por la sorpresa y rapidez de Shaka.

Estos repentinos impulsos del pelilila por sujetarse más fuerte lo destantea un poco, sin embargo ahora es lo suficientemente fuerte para sostener con firmeza a quien ama con todo su corazón, pues jamás permitirá que caiga –Es… Algo que se hace en mi mundo- Intenta explicar, mientras pasa con sumo cuidado por el portal de madera –Una costumbre… De quien tenga… Bueno, el papel de novio o marido… Cargar a quien tiene el…- No desea decir como tal mujer, pues su Mu no es una, pero se puede mencionar que tendrá el papel de dar vida, como él de ser quien reciba al rubio en su interior, muy posiblemente esta noche.

-No sería novia… Si no… Tu esposo- Sonríe, intentando entender algo de esa rara costumbre, mientras siente como su cuerpo se pega al del rubio y escucha ese corazón latir a mil por hora –Te amo Shaka, y… Me gustan tus curiosas tradiciones…-

Le parece lindo ese hecho, aunque le gustaría saber por qué es esto, no lo entiende mucho, pero le parece agradable, y sumamente bonito…

Sin embargo, no puede preguntar nada, pues… Al entrar, observa la cabaña en su esplendor, lo que por fuera no se llegaba a ver… Quedando por completo con la boca abierta.

Shaka no se sorprende en lo más mínimo, ya que él ha sido la mente que tramo esto, por concejo y tradición.

-Espero que te guste…- Le susurra, mientras se acercan hacia donde está el espectáculo mayor, y a su vez baja con sumo cuidado el cuerpo del pelilila, dejándolo de pie delante de todo.

-Son… Pétalos de Saussurea Obvllata- Su sorpresa es grande, elevando sus manitas hasta su boca, sujetando las amplias manga de sus prendas, pues la imagen tan linda de verlos esparcidos por todo el piso, principalmente donde pieles suaves de color blanco y cafés se encuentran, siendo un lecho bastante amplio y cómodo para que dos persona puedan descansar plácidamente.

El calor y sonrojo sube por su rostro y cuerpo, casi como si un vapor curioso saliera por su cabeza, pues conoce el significado de esta flor, y el papel tan importante que juega en esta noche especial.

-Tu abuelo me dijo que debía hacer esto, al igual que dejar velas encendidas alrededor… Claro que en zonas altas de la cabaña alejadas de cualquier objeto que pueda provocar un incendio- Da una breve explicación, sintiéndose igual de avergonzado que el Lemuriano, pues también sería su primera vez en el sentido sexual, por lo cual todo debe ser perfecto y único… Las velas protegidas por lámparas de metal, para intensificar una atmosfera romántica y sin duda dedicada a su función.

El apasionado color de aquellas llamas, ese calor que ilumina la cabaña tenuemente, notando que aunque sea sencilla y no se tenga casi nada, es suficiente para comenzar, para iniciar de cero una vida a lado de la persona que ama.

-¿Por eso te despareciste unos momentos?- Le pregunta, girándose para ver los hermosos zafiros, tan sonriente, siendo levemente iluminado por la luz que se cuela de las velas.

-Perdóname por eso…- Murmura esto al tener tan cerca al precioso Lemuriano de sus sueños, dando también unos pequeños pasos hacia su lado –Prometo no volver a dejarte solo nunca más…-

-Está bien… Me gusta esta sorpresa mucho… Todas… Me gustan…- Sabe que no debe bajar la cabeza, solo desvía la mirada de su esposo un poco y sonríe con inocente vergüenza y timidez. Sus manos juegan nerviosamente con los dedos, está ansioso por lo que iniciará.

-Hare lo que sea por siempre hacerte feliz, Mu… Te amo tanto que no me importa nada más que ver tu preciosa sonrisa todos los días de mi vida…- Su corazón ya no soporta tenerlo lejos, sus manos necesitan sentirlo, abrazar ese tibio y frágil cuerpo. Realiza dicha acción, atrayéndolo a él, para que con solo un beso todo pueda iniciar.

-¿Shaka?- Pronuncia aquel nombre en son de duda, sorprendido por sus acciones, pero aceptando todo, porque igual es su deseo.

-Mu… ¿Sabes que sucederá esta noche?- Le pregunta primero pues considera a Mu un ser tan inocente y puro, sin ninguna pisca de perversión o malicia, que teme corromperlo por sus deseos codiciosos.

Abrazado contra el pecho del rubio, eleva su vista un poco para ver el rostro del Hindú, nota el rojo en esas mejillas, asiente, con una tenue sonrisa, sus largas pestañas lo hacen lucir más hermoso, tanto que lo ayudan a ocultar sus ojos un poco –Si, seré tuyo y está bien… Quiero serlo…- Se atreve también a indicar sus mayores deseos, pues contiene muchos de ellos, solo que no creía que fuera importante decirlos abiertamente –Solo… Te pido…- Baja su mirada un poco, no sabe si sea correcto hacerlo, pero sabe que debe confiar en él ciegamente –Se gentil… Tengo un poco de miedo, pero… Sé que no me lastimaras- Alza su mirar apenado, posando sus manos sobre el pecho del rubio.

Deja de sujetarlo con una mano, rodea esa estrecha cintura con la derecha, para acariciar ese precioso rostro con la zurda, y así pueda sentir una parte de su amor –Jamás haría algo para herirte, primero preferiría morir antes de que tu sufras…- Le habla desde el corazón, decidido y preocupado porque esta noche pueda no ser tan perfecta como la planeo –Mu… Sí sientes que no estás listo para esto… Podemos… Esperar…- Le propone, pues puede sentir como tiembla el Lemuriano entre sus manos.

Rápidamente niega con la cabeza, acercándose más a ese rostro que siempre vera a su lado –No, Shaka… No es necesario esperar… Yo… Deseo ser tuyo completamente…- Esta tan decidido en sus palabras, que las esmeraldas se fijan en los delgados labios del contrario, para por primera vez, ser él quien inicie algo tan atrevido entre ambos.

Un beso, uno que el mismo Lemuriano roba, en donde no tiene pudor alguno para posar sus labios e intentar abrir tanto su boca como la ajena, y si su lengua invité a la otra a entrar en contacto…

Shaka siente este tacto tan sorprendente, pues… Con solo pedirlo de esta manera su ahora esposo, lo obedece, su boca sigue las ordenes. Los zafiros se abren de par en par por la sorpresa, pero… A la vez esta tan fascinado por que Mu le esté diciendo sin palabra alguna que lo desea también… Lo hace sumamente feliz…

Vuelve a rodear ese delicado cuerpo con ambas manos, atrayéndolo para profundizar lo más posible ese beso.

Ambos cierran sus ojos, para por fin iniciar la última parte de su matrimonio por esta noche…

Ese beso, es completamente diferente a los que se habían dado poco antes, sube la temperatura de a poco, entregándose a un sabor, a un placer que nunca han conocido antes…

Es verdaderamente embriagante un solo beso, sus lenguas exploran la cavidad bucal del otro, Mu poco a poco empieza a sentir cohibido por esta nueva experiencia, pues siente como su propio cuerpo reacciona, sus manos tiemblan levemente, casi queriendo retraerlas a su pecho, separarse de ese instante mágica… Pero, Shaka no se lo va a permitir.

El rubio invade esa boca que se vuelve pequeña por los nervios, le excita saber que Mu es suyo, que lo será de muchas más formas posibles, no es capaz de expresar todas las emociones y sensaciones que su cuerpo tiene en este momento, pero lo único que entiende es que deberá hacer sentir muy bien al Lemuriano de su corazón.

La mano derecha sigue rodeando la estrecha cintura, atrayéndolo tanto a él como sea posible, que sienta como su ser reacciona ante él… La izquierda primero sujeta con cuidado la nuca del pelilila, sintiendo los sedosos cabellos, que con el simple tacto le dice que es lo más seductor en este momento, sabe que necesita y pide más sentirlo.

Rompen apenas el beso por la falta de aire, pero… Al estar ambos ya entregados a estas nuevas sensaciones, en el momento de separarse, sus labios siguen unidos por un hilo de saliva. El calor que emana de sus cuerpos se puede ver con el jadeo que expiden, los zafiros miran esas lindas esmeraldas, ambos hipnotizados ya por el otro…

Shaka es quien ahora vuelve a tomar esos labios, sujetando con tenue fuerza la mandíbula del Lemuriano, para darle tantos besos como le sean posibles, cada uno más profundo y necesitado que el anterior…

El pelilila, también lo está necesitando, la timidez sigue en sus mejillas, pero en su cuerpo está cada vez desvaneciéndose al atreverse a acercarse tanto que sus cuerpos se pegan y rozan sus miembros erectos que aún están bajo las prendas ceremoniales.

Es excitante y estimulante como se siente esto, ninguno antes había experimentado algo como eso, pero esta noche existirá más que solo besos y caricias, sus anatomías aun cubiertas serán expuestas para la persona que aman.

La necesidad de tomar su piel, de sentirlo tan cerca, le exige que haga el siguiente paso, el necesario para que Mu le pertenezca por completo, como él lo será del Lemuriano.

Con cuidado, de manera calmada y gentil, la mano que sujetaba aquel delicado mentón, se desliza hasta la cintura, justamente al nivel donde la abertura de las telas blancas, para que sea fácil quitarlas en este momento…

Las va descorriendo con cuidado, subiéndolas, para que ese pálido cuerpo se vaya mostrando.

Un jadeo contra su boca siente, el beso se rompe, al sentir la mano del rubio ir tocando su piel directamente, sus esmeraldas dejan escapar lágrimas, por la emoción que siente, ya que no es posible resistirse en lo más mínimo.

-Aaaaah… Sha… Ka…- La boca ligeramente abierta, mira hacia lo zafiros, su corazón late demasiado rápido, sus manos sujetan esos brazos, pero no para impedir que siga, sino para sostenerse por la enorme sensación que invade su cuerpo.

-Está bien, Mu… Yo seré gentil contigo… Te amo mucho y… No voy a herirte…- Le regala un beso en la frente al Lemuriano, para reconfortarlo y tranquilizarlo, de que nada malo le ocurrirá, siempre procurara su bienestar antes que cualquier otra cosa. Su mano se sigue desliando, elevando esas prendas, para de a poco descubrir el cuerpo más hermoso de todos.

Eleva sus brazos, ser ayudado al desvestirse es muy extraño, pero reconfortable, su corazón se acalora al igual que su cuerpo aunque este sin prenda alguna. Ya solo una tela cubre su parte intima, dejando ver su miembro erecto, lastimándole un poco por el roce y la humedad.

La primera reacción del joven de tikas, es cubrir su pecho… Le simple idea de que alguien pueda ver sus pezones rosas es vergonzoso, a pesar de que Shaka sea quien lo esté apreciando, su ahora marido, su amado y adorado rubio…

Solo queda en su cuerpo las sandalias y la prenda que cubre su hombría, que igual en algún punto serán desprendidas de él, pero…

El hombre rubio que no pertenencia antes a este mundo, se ha quedado anonadado por esa inocente belleza, tan pura, tan suave, y exquisita, un joven que jamás pensó que pudiera ser así de hermoso, que despertara en él los más bajos instintos, pero… Es todo porque se trata de Mu, porque es él quien está delante suyo, desnudo, sonrojado, avergonzado, tan seductor como lindo.

¿De verdad este hecho es una realidad?

Un sueño en donde un precioso joven, un ángel, un ser mítico, será suyo…

¿Lo puede tocar de esta manera?

¿Lo puede mirar sin car en el pecado de la lujaría?

Sus zafiros brillan, destellando el deseo de tocar, de ver más allá y sentir todo lo que pueda.

-Mu… Eres tan hermoso…- No puede evitar decir esto, dejando esas prendas en el suelo, acercándose para volver a rodear con sus brazos ese delicado cuerpo.

-No digas eso… Es muy vergonzoso…- Cierra sus ojos, intentando a la vez cubrir su rostro con sus manos por la enorme pena que siente, pero al ser abrazado por su encantador rubio, lo empieza a calmar un poco.

-No puedo evitarlo, me siento feliz de verte, de saber que… Me amas, y que eres solo mío…- Eleva ese rostro, quiere verlo por más tiempo, nota que está muy sonrojado, que tiembla, necesita trasmitirle que todo estará bien, que nada malo ocurrirá –Gracias por elegirme a mi…- Le agradece su suerte… Porque sí el Lemuriano jamás le hubiera correspondido, posiblemente su vida sería completamente un infierno.

Escucha aquellas dulces palabras, siente como los dedos de su rubio acarician su espalda, bajando por la curvatura y rodeando la cintura, son grandiosas esas simples sensaciones, las cuales erizan su piel –Gracias a ti, por ser lindo conmigo…- No sabe cómo expresar lo que en su corazón se encierra, pero se deja guiar de nuevo, se supone que eso está bien.

Otro beso más, igual de apasionado, pero esta vez, sus pasos se van dirigiendo con cuidado a su objetivo, Shaka cuida de que Mu no tropiece… Pues se van encaminando hacia el lecho que compartirán en esta primera pero no última noche…

Poco a poco, sobre los pétalos blancos con tonos levemente rosas pastel en la base, y una línea de un tono rojizo en el contorno… Esa flor es tan escasa, siendo utilizada como medicina para los Lemurianos, florece cada cierto tiempo, principalmente en la noche… Solo algunos son conocedores de su rotación de lunas para encontrarla.

En el caso del significado en el matrimonio, es un símbolo para que la primera noche de ambos jóvenes enamorados que estén bendecidos por los dioses… Experimenten un profundo y excitante amor, en donde puede que el secreto mítico de los Lemurianos para concebir se dé al solo oler su débil aroma que aún se encuentra impregnada en los pétalos…

El cuerpo de Mu es colocado sobre esas pieles suaves, sobre los pétalos que tocan su ser. Claramente para Shaka, aquellas muestras de flores no son comparación en suavidad para Mu…

Recostado, inocente, por completo a su merced, lo mira con devoción, con profundos deseos, y un inmenso amor… Solo quiere tocarlo… Probar el dulce sabor que debe tener por cada centímetro de su piel.

Sigue protegiendo su pecho, sintiendo como su cuerpo se eriza, por la simple vista de aquellos zafiros, avergonzado tiembla, reacciona ante todo lo que esta noche significara, y es sumamente excitante para él.

Muerde sus labios, ya no puede resistir por mucho tiempo…

Su desesperación es enorme, actúa por mero instinto… Sus manos van desprendiendo cada una de sus prendas para quedar en las mismas condiciones que el Lemuriano, para que así no este apenado por estar desnudo, lo calmara como sea posible.

Así como el rubio quedo impactado por la belleza de su esposo, Mu queda encantado y casi babeando por el cuerpo del hombre a su lado, recuerda bien que al principio, no por que quiso, sino para ayudarlo, debió ver su cuerpo semidesnudo… Sin embargo, en el tiempo que ha trabajado junto a él la tierra los laves domésticos, las pruebas para el sagrado matrimonio y demás… Lo ha hecho trabajar muy bien el físico… Puede que estén casi en las mismas condiciones de musculatura ahora.

Sin embargo, la diferencia de tener la capacidad de dar vida, tiende a hacer que su anatomía sea un poco más suave que la del rubio, solo por ese mero detalle en sí.

-Espero… Te parezca atractivo…- También está algo cohibido por mostrarse por completo desnudo, agregando que el calor lo inunda su cuerpo peligrosamente.

-Si… Si… Mu… Cho...- Los labios del Lemuriano son mordidos por sí mismo, se siente extasiado por verlo de esta manera, tan caliente, con una cierta humedad en su parte baja, está completamente abrigado por su excitación…

Tímidamente, Mu alza su mano izquierda en dirección del rubio que aún sigue de pie, para dedicarle una sonrisa, mientras la derecha cubre delicadamente su pecho –Por favor… Ven, acompáñeme…- Lo invita a ir con él, para estar en esa cama sencilla a su lado.

Tiene luz verde, puede llegar hasta el final, es posible que todo lo que ha estado imaginado ocurra en esta mágica noche…

-Como ordene, mi amado Mu…- Toma la mano del Lemuriano, para darle un beso, justamente en donde el anillo que le hizo se encuentra, y así uniéndose a él en ese lecho suave y cómodo.

Entre besos que van subiendo en intensidad, como los toques en sus cuerpos que ya no contienen pudor alguno, sino solo deseo, lujaría, amor y excitación…

Las sandalias quedaron fuera de sus pies, al igual que esas prendas interiores, dejan ver la anatomía por completo de ambos, esos miembros duros y viriles, lo cuales gotean y se rozan por los profundos besos que se dan cada uno y la cercanía que no rompen.

Shaka no puede tener suficiente de esa pequeña y suave boca, la necesita, quiere probar más ese delicioso dulce exótico que le pertenece ahora…

Sus manos tocan la piel de manera delicada, no quiere lastimarlo por nada del mundo. Con suaves y lentos círculos, acaricia el pezón derecho, provocando que se endurezca, y de paso escuchar sonoros gemidos de placer, que le indican gozo por parte del pelilila.

Se pude decir que a simple vista ambos son torpes e inocentes, saben que para entregarse mutuamente lo que deben hacer, por lo cual no conocen más juegos previos que no sean los besos y caricias. Ninguno se había interesado tanto en este tema, antes de conocer a la persona que despertó un deseo nunca antes conocido para ellos.

Tal vez los pétalos de esa rara y curiosa flor, si estén haciendo su trabajo como un afrodisiaco natural, pero también es el mismo amor que los envuelve en el placer único de tenerse por primera vez.

Después de disfrutar un sin de besos, sus bocas se alejan, rompiendo un hilo de saliva, Shaka jadea roncamente, mirando con ese brillo único a su adorado Lemuriano, tocándolo, sus manos y dedos no se sienten dignos de un ser tan puro como lo es él, pero sabe que no puede, ni quiere dar marcha atrás…

-Te amo… Tanto Mu… Como no tienes una idea…- Jadea sus palabras, acariciando ese precioso rostro.

-Igual yo, Shaka… Te amo con todo mi corazón… Quiero… Ser tuyo por siempre…- Los brazos del más joven son elevadas y flexionadas por los codos, quedando al nivel de su cabeza, dejando que el rubio haga lo que desee con él.

Una sonrisa de lujuria y felicidad en esos labios se dibuja, mirando con suma ternura a ese hermoso ser a su lado –Por siempre seremos uno, Mu… Yo igual te voy a pertenecer…- Un delicado beso en la frente le deposita, lo trata con suma ternura, como si fuera una delicada figura de cristal, y así seguirá siendo de ahora en más.

Explora aún más ese cuerpo, va dejando un camino de besos desde la punta de la barbilla del Lemuriano, pasando por el cuello, pecho, para bajar por su vientre plano…

En donde entiende, que en ese lugar, en ese vientre, llegara a ver una pequeña vida de ambos, al momento de censurar su amor, tal vez no esta noche, ni la siguiente, pero si en el futuro…

Bueno… La protección conocida como tal de su mundo, no existe como tal en este lugar, los preservativos y métodos anticonceptivos no son algo que se conozca como tal, la mujeres son las únicas que pueden tener un cuidado más de esto, pues existe el conocer los días fértiles e infértiles, tienen esa enorme ventaja por sobre los hombres que igual pueden dar vida. Por ende existe la posibilidad de que esos dos jóvenes no solo lleguen a tener un hijo, sino varios, pero… Eso solo el tiempo lo dirá.

Reacciona arqueando su espalda, su voz de excitación exclama el enorme placer que tiene, puede sentir como su marido se detiene en su vientre, para dedicarle un sinfín de besos y caricias…

Los gemidos tímidos de Mu son música para los oídos del rubio, el mayor éxtasis que existe en este planeta es escuchar a su esposo pronunciar su nombre con esa linda voz, que le indica que está disfrutando lo que le hace.

Continua, su boca baja… Y ve el miembro del Lemuriano, esta duro, es muy sensible… Lo toma cuidado con sus manos, le parece bastante lindo. Al comparar a ambos, se nota un poco la diferencia por sus edades, no es mucha, pero… Es adorable a su ver…

Simplemente lo acaricia, lo toca con cuidado, quiere darle una experiencia única…

Una donde le enseña más de lo que puede saber…

Mu se estremece por ese toque, el que su pene sea acariciado de esa forma, de arriba abajo, sus piernas por instinto se desean cruzar, pero Shaka no se lo permite, prefiere que estén abiertas ante él…

Esta perdido por esa hermosa imagen de seducción plena.

-Tranquilo… Es normal, que desee hacerte sentir bien… Te estoy masturbando…- Le explica suavemente, mientras sigue su ritmo de arriba abajo, atento a las reacciones de placer del Lemuriano.

-Pero… Oohgmmm… Se… Nngg… Se siente… Muy… Ahhg… Raro…- Es la primera vez que su cuerpo es tocado de esta forma, su pene jamás había sentido algo así, ni siquiera por él mismo, demasiado inocente, pero ardiente…

-Te sentirás bien… Además…- Baja su mano izquierda… Buscando el punto por donde profanara ese inocente cuerpo, necesita que esté listo. Cuando al fin lo encuentra, puede sentirlo tan húmedo, lo cual le sorprende un poco, pero no deja que eso le impida seguir sus instintos carnales. -Debo prepararte bien, si no lo haces… Te podría lastimar y no quiero eso…- Entrecortado habla, está lleno de deseos, que ya no puede soportarlo.

El tiempo ha avanzado, aun no consuman su amor, pues sienten que deben ir de manera cautelosa, delicada, para que ninguno se asuste, ni lastime, debe ser un momento completamente placentero para ambos

Sin embargo, en el instante que Shaka acaricia con su dedo el ano del Lemuriano, en donde se va moviendo en círculos para dilatarlo…

Mu cierra sus ojos... Arqueando su espalda, para incorporarse un poco, y negar con la cabeza –No, espera... No lo hagas…- Su voz sale un poco firme, casi en un grito ahogado, quiere impedir que esto así sigua.

Cosa que sorprende al Hindú, que lo deja completamente estático, pensando que tal vez está yendo demasiado rápido –Mu… Lo siento, si no…- Apenado, piensa que en efecto se ha dejado llevar demasiado por su necesidad de ese delicado cuerpo… Suspira, retirando su mano de esa entrada y del pene Lemuriano –Perdóname, estoy yendo demasiado rápido… Debí pensar que… Entender, que no debo ir tan rápido… Yo…-

-No, no es eso- Niega con la cabeza rápidamente, sentándose sobre las pieles y mira al rubio, ambos están sudados, avergonzados y muy rojos de las mejillas, como el hecho que sus pechos se elevan y bajan por la sobreexcitación –Es que…- Desvía su mirada, posando una mano sobre su boca, pues no sabe cómo continuar pero entiendo que debe expresar su sentir –No quiero… Que tu dedo sea… Lo… Pri… Primero… Que… Entre…- Baja su vista, por la enorme vergüenza, aprieta un poco sus piernas, sin lastimarse, solo pensando que fue demasiado rápido en su declaración.

Si, estaba antes rojo, ahora se puso mucho peor, casi al grado del fuego por esas dulces palabras del Lemuriano, sus manos quedando a sus laterales, sobre las pieles arrodillado, con las piernas abiertas, para su mayor apoyo –Pero… Si no… Lo hago… Te podría… Herir…- Intenta dar su explicación, sabe que esa parte no está hecha para ser penetrada o que al menos en su mundo no es así.

-Está bien…- Mira directamente ese rostro, acercándose a él, para posar sus manos sobre el pecho del rubio, sintiéndose tan avergonzado por su atrevimiento, pero no tiene de otra, quiere hacerle entender lo que siente y necesita de él –Mi cuerpo está preparado para hacerlo, para recibirte… Sentirte en mi…- Le deja en claro lo que significa este hecho, su parte baja esta humedecida, los fluido salen por la excitación y para preparar la zona para hacer la penetración mucho más cómoda y llevadera. Entiende la precaución del rubio, quiere demostrarle que confía en él y que todo estará bien de esa forma –Sigue… Quiero que lo hagamos, quiero sentirte en mi interior- Seductoramente baja su mano izquierda hacia su vientre bajo cerca de su pene –Quiero que mi cuerpo sea solo tuyo, y tú mío… Por favor… No tengas miedo, no me vas a herir… Porque sé que nunca lo harás…- Una sonrisa, adornada con gotas de sudor, y perlas de sal cayendo de sus pestañas, feliz porque su amado sea dulce con él y tan atento, pero igual quiere poner su deseo primero.

Toma la mano que está sobre su pecho, e igual sigue a la que esta sobe ese vientre bajo, ambas extremidades juntas, denotando que están sumamente unidos no solo por el profundo amor que se tienen, sino… Por la enorme felicidad que tienen ambos en su ser.

-Te juro que te hare muy feliz, y que esta noche será la mejor de todas… Para los dos…- Un beso fugaz en sus labios, una sonrisa por parte de ambos al hacerlo, otro de nuevo en los labios, para que seguir expresando sonrisas rápidas, hasta que… De manera lenta y tranquila, ambos cuerpos se recuesten nuevamente sobre las pieles, y esta vez… Para continuar su deseo carnal…

Con cuidado separa esas blancas y torneadas piernas, que se dirigen a sus laterales, coloca su miembro en la rosada entrada virginal… Se siente demasiado caliente y excitado, respira hondo y profundo, sabe que de este punto no existirá macha atrás…

Su pelvis va contra el pelilila, empujando en su interior el miembro del rubio, que es capaz de profanar un templo sagrado, que vuelve suyo en el instante que lo penetra…

Ambos sienten el placer del sexo, de hacer el amor por primera vez… Una sensación única y excitando, donde no cabe nada más que su profundo deseo de ser uno.

Está tan apretado ese interior, es normal, nunca nada había tocado esa zona íntima…

La espalda del Lemuriano se arquea una vez más, unas lágrimas de dolor y placer se escapan de sus ojos que cierra después de la sorpresa de esa grandiosa sensación, cayendo hacia sus cabellos lilas que han quedado completamente desordenados, dándole un toque único y exquisito…

Sus manos se aferran a las pieles, es demasiado bueno, su interior se siente lleno solo con recibir el duro pene de su pareja…

Shaka ve la expresión de Mu, se siente preocupado, por haber sido tan bruto de meterla de una –Lo… Ohhh… O siento… Mu… ¿Estas… Bien?- Pregunta con angustia… Aunque, su cuerpo necesita moverse, no lo hará hasta que crea está listo su amante.

Sus brazos estirados, apoyándose igual en las pieles, para poder tener control de sus movimientos, tan cerca de ese rostro, de la piel del Lemuriano.

-Si… Nngh Estoy bien… Solo… Que… Eres… Más… Grande de lo que… Pese…- Pronuncia su declaración, mientras se aferra a las pieles, pues es un éxtasis nunca antes experimentado y sabe que puede ser peligroso para él, pero poco le importa esto.

No sabe si debe tomar las palabras del pelilila como un halago o no, pero… Entiende que puede ser un poco atrevido en esto, inclinándose sobre él, para introducirse un poco más en ese interior…

-Aaaaahh… Sha… Ka… Nghh…- Lo siente más profundo de su ser, significa que aún no era todo, sus lágrimas escurren de sus ojos por el enorme placer, su saliva sale de las comisuras de su boca –Es… Pera…-

-Creo que… Debo mostrarte que soy… Más grande de lo que esperabas- Una sonrisa de triunfo se dibuja en el Hindú, al ver disfrutar de esta manera a su amado es completamente sublime –Argggh, ¿Puedo… Moverme?- Le pide autorización, como todo en lo que piensa realizar de ahora en adelante y para siempre, Mu tendrá la opción de escoger lo que desee y Shaka siempre se lo respetará.

Esta aprisionado, su cuerpo contra la cama improvisada y el cuerpo desnudo de su ahora marido, es fascinante y agradable, sabe que no tiene a donde escapar y solo poder seguir adelante en el acto del placer de su primera vez.

-Si…- Sonríe ante este hecho, con las mejillas rojas, estira sus brazos hacia el frente, para que el rubio lo abrace…

Con la aprobación, Shaka no soporta más y corresponde el abrazo, pasa sus brazos por debajo de los de Mu, para que esté lo sujete la espalda y mientras el rubio pueda apoyarse por completo en la cama mientras sujeta a su amado y sigue penetrándolo…

Las piernas del Lemuriano se cruzan por la cadera del Hindú, por instinto, por comodidad y necesidad de sentirse tan unidos como sea posible…

Las penetraciones son profundas y agradables, son lentas pero intensas a la vez, completamente sublime, se siente abrumado por tan placenteras sensaciones que invaden su cuerpo…

El sudor de ambos se combinan en sus pieles, los gemidos y jadeos se vuelven la música de esta noche, para perderse en la fascinación de sus cuerpos sin duda se complementan tan bien… Cada estocada en ese interior se va haciendo profunda, es excitante sentirse penetrado por el rubio, que no le da tregua alguna, pero no lo hiere tampoco, no lastima más allá de lo que una primera vez significa, lo inunda en placer, para seguir provocándolo…

No deben ir rápido, solo disfrutar de su amor, de entregare, de volverse uno, como lo desearon tanto… La noche será sin duda larga para ambos, por lo tanto disfrutaran todo el placer posible.

Los fluidos escurren… Se combinan en el interior de Mu…

-Shaka… Espera… Es… Ooh… No… Yo…- Necesita advertir que su cuerpo esta sensible, que tendrá pronto su eyaculación, que se vendrá pronto. Siente que no resistirá al ser sobre estimulado… -Nngh… Necesito… Algo… Va… A salir algo… Yo…- Muestra su inocencia e inmadurez en estos temas… Aferrándose más a esa espalda, sintiendo que sus uñas se encajan en la piel de aquel hombre que adora.

-Es… Normal… Agrhhh… Que… Sientas… Algo que salga de tu pene… No pasara nada…- Se lo intenta explicar, pues está concentrado en seguir penetrando a ese joven, que necesita seguir haciendo suyo…

-Pero… Creo que… Anggg… Ngghht…- No pudo soportar más, su cabeza es echada para atrás, aferrándose tanto al rubio como puede, experimenta su primera venida, que se queda entre ambos abdómenes… No sabe que se podía sentir así de bien, pero ha sido maravilloso sin duda…

El líquido caliente que ha salido del Lemuriano, lo siente en su piel y es feliz por saber que logro hacer que llegara a su clímax, solo con penetrarlo, sin tocar más allá que una masturbación previa…

Las embestidas se han vuelto un poco más rápidas, porque igual siente que está en su límite, se aferra más a ese delicado cuerpo… Se concentra solo para seguir provocándole todo el placer necesario, ya sabe que cuando su última estocada se dé, terminara en ese cálido interior….

Pero, ¿Debería hacerlo?

-Mu… ¿Estas bien, con que… Mngg, corra dentro?- Cada cosa que realiza, que cree puede molestar al pelilila, le pide su autorización, así es como Shaka actuaría en cualquier momento, es atento, es noble, amoroso y sumamente cariñoso, pero solo puede llegar hacer así con Mu.

-Si…- Su voz se ha vuelto más suave, un poco más relajada, sus esmeraldas están llenas de placer, el brillo particular que están dando es curioso, envuelto en el deseo que Shaka le ha proporcionado.

Sabe que ese tono de voz es diferente a lo normal, pero no le presta tanta atención, sino que desea terminar por completo en ese apretado ano, para poder derramar su semilla dentro de Mu y así abrazarlo, llenarlo de besos sin fin.

Una estocada más, dos o tres y… Sucede, el clímax del rubio llena al pelilila, Shaka se aferra a ese delicado cuerpo e introduce más profundamente su pene, para que su semen sea derramado por completo…

Las respiraciones de ambos están agitadas, aunque la de Shaka es más profunda al igual que su jadeo, y sus ojos llenos de placer…

Siente una corrida llena de placer, tiene el cuerpo de su amado para complacerse e igual complacerlo a él… Se levanta un poco para ver ese ruborizado rostro… Para depositarle un beso en la frente y sonreírle…

-Mu, te amo…- No puede evitar decirle sus más sinceros sentimientos a cada rato.

-También… Te amo…- Le susurra, el tono sigue siendo sensual y diferente… Las lágrimas caen por el enorme placer, el sudor se ha combinado en sus pieles, siendo manchados por los fluidos de cada uno.

No desea salir, pero sabe que es el momento… Con cuidado lo hace, pues quiere abrazar de manera diferente a su amado, pero… En cuanto su miembro está afuera de esa entrada que profano, de donde escurre parte de su semen… Se desea acomodar, para recostarse a un lado del pelilila para reconfortarlo…

Mu parece ya no ser por completo él mismo… Tembloroso por haber sido penetrado, sus caderas y cintura están algo adoloridas, pero el deseo aun no… De inmediato se pone en cuatro, su cara directamente en el pene manchado de semen… Sus esmeraldas brillan con lujuria, guiándose por sus instintos primitivos, lo introduce en su boca…

La sorpresa en los zafiros es evidente, pues no pensaba que esto lo llegaría hacer su lindo e inocente Mu en esta noche, incluso pensaba que esto no podría seguir para una segunda ronda…

-¿Mu? ¿Qué Estas…?- Aprieta sus labios, esa delicada boca y labios hacen un excelente trabajo.

-Más… Quiero más… De ti…- Habla entre cortado, mientras su boca de manera torpe mete y saca el miembro que lo profano como si fuera un delicioso dulce de miel, no le molesta el sabor del mene o que estuviera en su interior, esa zona estaba limpia, se había preparado adecuadamente para ello, gracias a los concejos que recibió de aquellos que lo han hecho antes…

Sorprendido por esto, no sabe qué hacer ante esto… Pues pensaba en llenarlo de mimos y cariños después de hacerlo suyo. Pero, al parecer Mu, está preparado para seguir esta apasionada noche.

Provoca que el pene del rubio de nuevo se ponga erecto… Con la humedad lengua y el interior caliente de esa boca…

-Pero… Ahhhg… ¿No estas… Cansado..?- Le pregunta, no entiende cómo es que su dulce Lemuriano, está reaccionando de esta manera.

-No… Quiero más… Shaka… Quiero más de ti…- Habla aun teniendo ese trozo de carne en su boca, intenta de manera desesperada darle todo el placer posible.

Es fascinante como todo está sucediendo de manera inesperada…

Esta muy sensible, sabe que una segunda eyaculación pronto vendrá… Ya que Mu no lo dejo ni siquiera respirar un poco, pero está bien…

Sentir como la piel del pene se crispa… Tocar con la punta de su lengua los testículos de su rubio… Explorar a su ahora marido tanto como puede, es sumamente fascinante… Pero no quiere que acabe así…

-¿También… Salda… Algo de ti?- Pregunta con un mezcla e inocencia y seducción, como de torpeza en sus palabras…

-Si… AHg… Mu… Ve despacio…- Le advierte… Mientras caricia esos suaves cabellos lilas…

Besa con delicadeza la cabeza del pene, para mirar hacia arriba al Hindú y darle una señal muy atrevida de lo que necesita –No, no aquí…-

-¿Eh?- Se acerca tanto a Shaka, para que sus cuerpos se peguen lo más posible.

-En mí… Ponlo dentro en mi otra vez y allí…- Levemente se impulsa con sus piernas, para flexionarlas, provocando que el rubio se quede sentado con las rodillas de apoyo, y el Lemuriano sobre él… Para que el miembro caliente, húmedo y duro de su marido se vaya adentrando en su interior… -Te necesito más… Quiero más…- Repite su deseo… Perdido en completo placer…

Una mueca de gozo y deseo se proyecta en el más joven, gotas de sudor caen de su pálida piel, sus caballos desordenados le dan un aspecto demasiado sexy, su boca jadeante, mientras deja escapar pequeñas perlas de sal de sus esmeraldas, rodeando el cuello del contrario, apoyándose sobe él, para ir marcando el ritmo de cada embestida.

Shaka, no puede creer que Mu sea quien haya iniciado una segunda ronda, ya que no va con su dulce e inocente personalidad. Esto lo sorprende, pero no le desagrada en lo más mínimo, le excita que sea así, pero no entiende en sí que está pasando con su amado Lemuriano…

¿Acaso hay algo en el ambiente, que le provoca este actuar?

¿Serán esas flores las culpables?

Y es allí que recuerda algo que leyó en uno de los pergaminos, relacionados con el placer sexual, las reacciones y sensaciones abrumadoras que rodean a los Lemurianos al experimentar esto en su primera y en cada encuentro con su pareja destinada.

“-Lo Lemurianos tienen un enorme apetito sexual, tan grande, que su pareja debe ser capaz de seguirles el paso. Ellos no estarán satisfechos con solo una vez, sus instintos reproductivos parecen activarse al estar en contacto con su pareja de forma intima… Ambos Lemuriano perderán el control y seguirán haciéndolo hasta que ambos estén complacidos y no puedan más-“

“-Posiblemente, con alcanzar el climas dos o tres veces o incluso más, pueden llegar a sentirse muy bien. Sin embargo algunos jóvenes necesitan mucha más estimulación, más de la que podría soportar sus propios cuerpos-“

Con eso encuentra la respuesta de sus dudas. Por ende, esto significa que Mu encestara más que solo una corrida para calmar su intenso calor, deberá hacer que se pierda en el placer carnal.

Está bien, va a satisfacer a su amado todo lo necesario.

Claramente, Shaka no estaba aún satisfecho, pero pensaba que debía ser prudente no un bruto…

Pero esto cambia las cosas, para un mayor disfrute sexual en ambos.

Sí Mu, la persona que ama, lo está seduciendo de esta forma, dejando que su cuerpo le pertenezca de esta manera tan picara y atrevida, pidiéndole que continúe, que lo siga haciendo suyo, que lo penetre, que lo ame, lo complazca enteramente, pues... Igual el rubio no ha tenido suficiente del perfecto Lemuriano de sus sueños.

Cada estocada, produce una especie de electricidad en el cuerpo del pelilila, indicándole que su segunda corrida llegara pronto, aprieta sus labios y dientes, deja escapar un hilo de saliva de su comisura derecha, mientras sus ojos expresan el intenso placer que lo envuelve, se aferra tanto como puede a los hombros del rubio, jadea sonoramente, respirando profundamente…

Shaka no se pueda quedar atrás en esto, también necesita más de ese precioso cuerpo, aferra sus manos a esa anchas caderas, que suben y bajan a un ritmo que ahora es él quien lo marca, es un poco más tosco en esta posición, va muy profundo, entrando y saliendo con un tanto de rapidez, escuchando en su oído como le piden más, que desea su esposo que vaya más rápido y claro que cada palabra del Lemuriano son órdenes para él.

Al verse a los ojos, sus bocas conectan, besándose profusamente, en el instante en que sus cuerpos siguen reaccionando a su deseo carnal, la lucha de sus lenguas procede a intensificarse, cediendo esta vez el rubio ante el pelilila, siente como las uñas de este se clavan en sus hombros, por la rapidez y la manera en que se han sincronizado.

Ambos escuchan como el choque de sus pieles se intensifica, produciendo sonidos tan obscenos como excitantes para cada uno que los envuelven en un terrible calor sin precedentes para ellos.

-De… Nue… Vo…Yo…- Le habla entre los besos, sintiendo necesidad de avisar que su eyaculación viene pronto…

No se corta el beso, no se detiene para nada, al contrario… Sí el de ojos esmeraldas quiere correrse que lo haga, que manche ambos abdómenes, pues él igual está a nada de venirse dentro de ese cuerpo, inundando esa intima zona con su segundo clímax.

Pasaron unos instantes más, Mu se aferra tanto, sus cuerpos se crispa, la cabeza levemente echada hacia atrás, por la sensación tan agradable y agobiante del orgasmos, sin embargo no pudo alejarse tanto, ya que Shaka reclama desesperadamente poseer esos labios, siendo algo demandante y poco gentil, el Lemuriano acepta ese trato con sumo gusto.

Sigue siendo penetrado sin tregua alguna, disfrutando que cada estocada va tan profundo en él, provocándole que aun después de su segunda venida, otras olas de placer surjan.

No tarda mucho para que Shaka también alcance su clímax por segunda vez, inundando ese cuerpo desnudo que le pertenece…

Esta vez, por la presión tan fuerte que ejerce, ha dejado marcados sus dedos en esa pálida piel, e igualmente Mu dejo líneas enrojecidas en la espalda y hombros del rubio provocadas por sus uñas, el enorme deseo de aferrarse a él por el terrible placer que ha experimentado.

Entre jadeos, se pierde entre los dulces besos de su marido, los gemidos de placer son suficientes para sentir que vuelve a tocar el mismo paraíso en esta noche…

En el instante que necesitan ambos aire, se rompe el beso, la lengua de Mu levemente queda en un profundo jadeo, sus ojos con algunas lágrimas cayendo de ellos, brillan con ese destello tan lujurioso y seductor, que Shaka no puede dejar pasar… Pues igual él presenta ese deseo en sus orbes…

Sus cuerpos sudorosos, manchados por los fluidos de ambos, de la entrada de Mu, escurre el semen que se ha acumulado, al igual que un tono rojizo se llega a ver combinado por esa corrida, pero ningún se ha dado cuenta aun…

Los pétalos de esa singular flor se han pegado a sus cuerpos, enredados en sus cabellos, dándoles un toque bastante adorable como profano, por estar tan perdidos en el mismo placer.

Shaka aún tiene la conciencia de no herir o lastimar al Lemuriano por nada del mundo, sin embargo Mu comienza a mover sus caderas de manera circular, sabiendo que el rubio está dentro aun, es una provocación de su parte.

-Sha… Ka… Te amo… De nuevo… Quie… Ro… Mas…- Su ruego, su deseo se empieza a sentir más necesitado y lastimero, además que presenta un temblor en su cuerpo, pero ese rostro es demasiado caliente como para limitarse en solo dos corridas.

-Mu… ¿Estás… Seguro?- Necesita preguntar antes de nuevo comenzar una tercera ronda, pues cree que puede estar sobrepasando el límite del Lemuriano, no es que quiera provocar que se desmaye, después de todo… Aunque ambos hagan un esfuerzo por complacerse más, es Mu quien recibe a un intruso en su interior, debe ser doloroso pues es su primera vez en ser penetrado y deben tomarlo con calma –Tomemos… Un pequeño descanso… Creo que… Arggt…-

Debió ser más rápido, aún está dentro del precioso y atrevido Lemuriano, esta vez sigue estando erecto en ese cálido interior. Por su propia cuenta y aun con las piernas temblorosas con pocas energías, es Mu quien hace fuerza para subir y bajar lentamente… Mientras se pega más a ese fuerte cuerpo, para que su miembro se frote contra ese abdomen…

Sin duda… Mu pareciera estar en un celo, los Lemurianos están tan conectados a sus instintos, que en la privacidad de amor, con su pareja amada y destinada, dan rienda suelta al deseo.

-Por favor… Marido mío… Más… Más… Quiero más…- Ruega con codicia, y a la vez en una súplica no muy inocente, posee un encanto sexual demasiado grande como para controlarse…

El Hindú simplemente no puede decirle no a Mu, sabe que perderá ante estos ruegos…

-Esta... Ahgn… Bien… Pero…- Sujeta esas muñecas, sonríe maliciosamente, para acercar su cara al Lemuriano –Lo haremos ahora como yo quiero…- Dicho esto, lo deposita sutilmente sobre la cama, para salir de su cuerpo… Le dedica una sonrisa, extasiado por el desastre en que se ha convertido su amado, pues estando manchado de semen, sudado y cansado, aun le ruega por mas amor, suplicándole que no se aleje de él…

-Shaka… No… Ven...- Estira sus manos, le ruega su cercanía.

-Mu, date la vuelta… Y ponte en cuatro, sí quieres que te haga el amor de nuevo- Una orden que da, la primera de esta noche, y solo serán dictadas en las noches de intimidad apasionada.

De inmediato el pelilila le hace caso, aunque su cuerpo este agotándose, aún tiene una enorme libido y fuerza para continuar… El rubio no se queda atrás, aún está deseoso de ese joven Lemuriano.

Mu no puede acatar por completo esa orden, sus brazos ceden, solo alcanza a poyarse con las palmas de sus manos, su rostro también toca las suaves pieles de su lecho, mientras la cadera se eleva, dando una vista preciosa de su entrada levemente abierta, de donde escurre el semen que se ha acumulado y a la vez sangre, por haber sido penetrado un poco brusco la segunda vez…

Ver ese tono, lo saca rápido de su excitación, sorprendiéndose por esto, incuso alarmándose, pues esto no debió pasar… Esto significa que se atrevió a lastimarlo y eso no lo puede permitir.

-No podemos hacerlo más… Ya es suficiente…- Le habla con calma, con todo el amor y cuidado del mundo, mientras su mano acaricia la espalda del pelilila –Mu, te lastime… Es mejor que descansemos-

Pero el Lemuriano no quiere eso en lo más mínimo –No… No quiero… Descansar, te quiero a ti…- Su ruego y un meneo de su parte posterior para pedirle en suplica al otro que sigua su deber como su compañero de vida en esta noche, sin duda esta perdido en el éxtasis que su cuerpo ha experimentado por primera vez y despertó en él un instinto primitivo insensible –Por favor… No me duele… No importa, quiero más…-

No pueden seguir, sin embargo… Claro que lo seduce esa carita de ruego, la voz lastimera y sensual, con el riego de que siga haciéndolo suyo, como si no pudiera darse cuenta que en este momento su cuerpo está en las últimas, pues tiembla de pleno placer y cansancio.

Shaka, desde luego entiende, que demasiado de algo sea tan bueno como el amor o malo, es peligroso para la salud de cualquiera, y más si se trata de la primera vez de ambos… Al menos un descanso antes de otra ronda deberían tomarse, pero su intención es que Mu se calme y pueda dormir un poco para que no piense más en eso… Ya lo ha lastimado, y eso es algo que no se perdonara nunca, mas sabe que ahora mismo lo principal es reconfortarlo.

Se acomoda a un lado del pelilila, abrazándolo, haciendo que esa postura que le ordeno se despeje, para que ahora lo tenga contra su pecho, intentando que ese calor abrumador de ambos baje –Mu, no tienes que sobre exigirte tanto… Si lo seguimos haciendo- Aprieta su mandíbula, tensándola y frunciendo el ceño algo molesto -Te voy lastimar peor, y eso nunca me lo podría perdonar nunca… Te amo demasiado como para hacerte daño, más de lo que ya te provoque- Se siente realmente culpable por este hecho, por eso entiende que debe desistir de una tercera ronda.

-Pero… No duele… Te amo, te quiero en mí… Mas, Shaka ¿Me amas?- Esos instintos carnales y primitivos, combinados con un revuelo de emociones, provocan que su actuar sea algo diferente a lo usual, tanto que eleva su rostro rojo, y lleno de lágrimas, para seguir suplicándole a su amado rubio su deseo.

-Claro que te amo… ¿Por qué lo preguntas?- No entiende que significa ese herido rostro que le dedica el pelilila, le provoca una enorme preocupación en su corazón.

-Si me amas tanto… Seguirías complaciéndome… No pondrías peros para ya no desearme…- Habla entre sollozos, pues sus lágrimas escurren por sus rojizas mejillas, acurrucándose contra el pecho desnudo del rubio, sintiéndose realmente mal por ese pensamiento cruel.

Simplemente para el hindú, esas palabras no tienen ningún sentido –Te deseo mucho Mu, tanto, más de lo que tú piensas e imaginas… Pero…- Su rostro se vuelve serio, pero a la vez comprensivo –También demostrarte mi amor, es saber cuando parar de algo aunque sea tan maravilloso como hermoso, ya que te eh hecho daño. Eso es lo que el amor sabe que debe evitar sin importar que, herir a la persona que más amas en este mundo como en los demás y próximos, es algo que nadie debe hacer de formo intencional- Rodea ese frágil cuerpo con sus brazos, atrayéndolo a él con cuidado, para que pueda escuchar su latir -¿Puedes oírlo?-

Confundido el pelilila, no entiende por qué ahora le hace esto, pero esas palabras al escucharlas, reconfortan una parte de él –Si…-

-Mi corazón solo late de esa forma por ti, por tenerte a mi lado… Estoy feliz porque eres mío y solo mío, al igual que yo soy tuyo, solo te pertenezco a ti…- Niega con cuidado con la cabeza –Y no voy a herirte más, fue suficiente… Sabes muy bien como yo, que demostrarnos el amor no solo se reduje en estas acciones, sino también con hablar, contemplar nuestros ojos, darnos besos, o incluso compartir nuestros mayores secretos y miedos cualquier cosa que hagamos juntos, ya es parte de demostrarnos nuestro profundo amor- Allí están las enseñanzas que tuvieron en ese último mes, le sirven al rubio para hacer entrar en razón un poco al Lemuriano, poseyendo esa suave y comprensiva voz para darle todo el confort del mundo –Podemos hacer el amor de diferentes maneras, no todas tienen que ser así- Un beso en la cabeza, contempla con ternura a ese hermoso joven, quiere solo escucha su respuesta ante lo que le ha dedicado, pero… Cuando apenas sí se fija bien, nota que sus esmeraldas están cerradas…

Mu se ha quedado profundamente dormido… Puede que el lívido en los Lemurianos sea muy alto, pero el cansancio también ha cobrado factura, agregando que ambos son unos inexpertos… Pero eso no niega de haber disfrutado y experimentando tanto placer. El pelilila bien pudo tener una o dos corridas más, Shaka sí que lo deseaba también, pero debía ser quien pusiera un alto a todo esto.

Se siente un poco más tranquilo de que Mu descanse al fin, la noche ya ha trascurrido mucho, hasta entrada la madrugada. Para ese virginal cuerpo fue suficiente acción por esta vez, aunque pudieran haber soportado mas, ver que broto un poco de sangre de esa zona no lo pudo resistir, no volvería a permitir que algo así ocurra de nuevo…

Su corazón no soportaría el causarle dolor o lastimadura a Mu… Incluso si por un tiempo debe negarse de ese placer recién conocido, lo hará con tal de ver bien recuperado a su amado…

Ese si es un muy buen principio del amor, poner la seguridad y bienestar de tu pareja, ante todo, incluso antes que los placeres de la carne.

Sus cabellos desordenados sobre esas cómodas pieles, enredados el lila y amarillo, Shaka rodeando el exquisito cuerpo de su esposo, acomodándolo tan cerca para que así puedan dormir plácidamente… No se alejará de él, no importa como duerma, siempre y cuando pueda tenerlo a su lado, solo para él, estará bien, porque ser sumamente feliz.

-Descansa, mi dulce y amado Mu, mañana prometo que te dejare descansar tanto como quieras, y te entregare mi amor de diferentes maneras…- Besa esa perlada frente, regala unos toques a las tikas, acracia levemente esa espalda, inhalando por sus fosas nasales ese aroma tan encantando y seductor del Lemuriano, para también entregar su conciencia al sueño, y así poder acompañar en este momento a su amado esposo.

Desde luego está sumamente cansado, pero claro que también podría tener más corridas, sin embargo no se va a atrever a tocar a Mu en este estado, aunque su mente lo pensó por breves segundos, puede más el respeto por su lindo pelilila.

Después de todo, mañana al amanecer, cuando despierte, sin duda Mu sentirá las consecuencias de tanto deseo carnal, además de que recodará lo que paso esta noche… Y bueno, deberán cambiar su lecho, pues, han quedado pegajosas, sin contar que de la entrada de Mu el semen aún está escurriendo, pues desde un inicio quedo su vientre muy lleno. Shaka debe estar muy orgulloso de que en sus dos descargas, fueran con una buena cantidad, sin duda tendrán efectos muy pronto.

Tal vez… En su futuro no muy lejanos, la ilusión de ambos de forma una muy linda familia se haga realidad, pero por mientras, por esta noche, en donde la pasaron uno de los mejores momentos de sus vidas, el amor, el respeto y la calma cuando debió ha reinado, se han consumado perfectamente todos estos sentimientos y valores, sus almas y corazones se volvieron uno.

Y así como recibieron la bendición de los Dioses de los Lemurianos y el anillo de esmeralda que descansa en el dedo anular de la mano izquierda del pelilila, son los símbolos de su profundo amor, uno que sin importar que pertenezcan a diferentes mundos, eso no impidió conocerse.

Si, ese es el verdadero amor, ser capaz de encontrarlo donde menos lo piensas, renuncias a una vieja vida o aceptar algo tan diferente y desconocido, comprender que la paciencia es una virtud que todos deben comprender, saber que una sonrisa puede encantar el corazón de alguien un poco frio y reservado, una mirada inocente cautivar el alma, y un ser simplemente único, perfecto y maravilloso.

Esa es la mayor aventura que puedes escoger para el resto de tu vida, experimentar tu mayor deseo y felicidad… Pues no se necesita mas que ser feliz a lado de la persona que amas en esta vida, complementarse en lo que necesiten y apoyarse para tener un maravilloso feliz para siempre.

 

-Buenas noches a todos. Nos encontramos en la sección favorita de nuestra amada audiencia. Entrevistas a la azar, con su servidora Ammu-

El aplauso pregrabado de múltiples personas se hace presente, para animar a la audiencia en vivo que se encuentra en el set, todo para animar el ambiente.

-Esta semana les he preparado unas muy buenas entrevistas, por no decir jugosas- El vestido rojo y entallado de la presentadora, no le impide verse elegante, al igual que el hecho de sus tacones del diez, para caminar entusiasmada por el set correspondiente de su sección.

-Como la gran mayoría de quienes nos ven en sus hogares, son muy fanáticos de la serie que ha estado en boca de todos desde que se estrenó. Y no solo es por su compleja y buenísima historia, sino también por todo el elenco que… Si me permiten decir, son extremadamente atractivos, además de que no solo su físico a encantado sino varias cosas detrás de cámaras. Y eso es lo que les traemos en la programación de esta noche- Sonríe, pues nota que no solo a captado la atención del público en vivo, sino en el rating que ha subido de golpe.

-Ya no los hago esperar más y pasemos a la entrevista que le realice a uno de los más queridos y adorables del elenco, quien hace el papel del primer guardián del santuario de Atena, Mu de Aries en la pantalla, un actor bastante joven Etuvum Mesam, de solo 23 años, pero eso todos ustedes ya lo saben, lo que realmente desean conocer en verdad es todo lo que le pregunte, y está relacionado con muchas dudas que todos ustedes tienen- Con un control remoto, presiona un botón para encender la pantalla enorme de fondo y así se pueda apreciar lo que hizo como evidencia para este día –Ahora si acomódense en sus asientos, traigan alguna buena botana y bebida, por que se vienen muy buenas revelaciones.

---En La Entrevista---

-Bien, Etuvum… ¿Te gustaría mandar unos saludo a toda nuestra audiencia?- La misma presentadora se encuentra realizando la entrevista, se encuentra luciendo un conjunto de blusa y pantalón estampado de flores blancas con un fondo azul, con zapatillas de plataforma, sentada cerca del joven de cabellera pelilila.

-Claro que si- Sonriente, saluda hacia la cámara, mostrando sus dientes y unos hermosos ojos verdes –Hola a todos. Espero que disfruten la entrevista tanto como yo- Su vestimenta bastante sencilla, una camiseta lisa roja, con pantalones de mezclilla y unos tenis negros.

-Vaya, sin duda eres un solecito- La joven mujer de cabellera roja, sonríe emocionada por ese encantó natural del menor –Ya vemos porque estas dentro de los cinco populares del elenco estrella, además de que todos admiran los hermosos ojos color esmeralda que tienes, iguales a los de tu padre a lo que tenemos entendido ¿No?-

-Ja, ja, ja, ja, gracias- Se sonroja levemente, jugando un poco con sus dedos sobre el regazo –Bueno, muchos me lo han dicho, que mis ojos son iguales a los de mi padre, no sabía que fuera algo que todos notaran tanto-

-Por la cantidad de fans que tienes, que a diario te mandan miles de halagos en las redes sociales, como regalos, debes darte cuenta que muchos te aprecian y aman-

-Eso lo agradezco mucho, la verdad los actores nos debemos a nuestro público, que siempre nos apoyan en los papeles que ejercemos y hacemos todo lo posible por cumplir sus expectativas, claro que sin perdernos en ellas- Lanza un pequeño suspiro –Yo aún soy un novato en pocas palabras, pero gracias al papel que he obtenido en esta producción, me ha ayudado mucho para crecer de manera profesional-

-Es cierto que este ha sido tu primer acercamiento a la pantalla, pero te ha abierto caminos hacia comerciales, y otros contratos, sin mencionar que se rumorea de que existe un nuevo proyecto de la casa productora Kido, para llevar una nueva saga a los cines. ¿Tienes algunos detalles que nos puedes compartir?- Sonríe entusiasmada por encontrar alguna buen dato jugoso.

-Por el momento no podemos decir mucho, más que… Nos llegaran a ver posiblemente en un futuro a muchos caballeros- Una sonrisa tímida, intentando ser lo más discreto posible.

-Oh, eso es bastante interesante, entonces… ¿Puede que sea cierto…?- Alza una ceja, sonriendo pícaramente –Y dime, en las vacaciones que tendrá de la quinta temporada de Saint Seiya, después de grabar las últimas escenas, ¿Tienes algún plan? ¿Te verás con algunos de tus compañeros?-

-Las vacaciones solo serán muy breves, en sí serán poco más de un mes, porque iniciaremos grabaciones para la sexta temporada. Y si… Tengo planes de ir con mi familia a la tierra natal de mi papá, y bueno… De verme con algunos compañeros… Como bien saben… Casi toda mi familia esta de lleno en el mundo del espectáculo y para este proyecto nos dieron una muy buen oportunidad, así que si… Me veré con el patriarca, el viejo maestro, el caballero de Géminis, el dragón marino y el pequeño Kiki- Una risa suelta, mientras se acomoda su larga cabellera, para que no le estorbe en su rostro.

-Wow, debe ser grandioso y muy divertido que toda tu familia se dedique al espectáculo, sin duda has tenido una enorme educación en ese tema toda tu vida ¿No?-

-Es grandioso eso si… Pero a veces… Mi papá es muy estricto con respecto a los ensayos que hacemos en casa. Es muy perfeccionista, pero lo entiendo… Desea que a todos sus hijos les vaya muy bien en todo su proyecto. Aunque padre es quien a veces nos ayuda para tener descansos más prontos-

-Ja, ja, ja, me imagino. El patriarca tan solo al verlo en la pantalla causa mucho respeto e intimidación, tenerlo como papá debe ser de mayor autoridad. Aunque… Enseñar y personificar el momento clave para tu personaje Mu, en donde ve a Saga y a Shion de vuelta a la vida solo traicionar al santuario e ir a matar a Atena, debió ser bastante impactante, como también ver a Dohko llegar a ayudarte-

-Se sintió casi similar cuando mis hermanos y yo estamos ensañando por horas y padre llega para darnos un descanso y papá pone su autoridad, para que nos salga el ensaño perfecto, y bueno… Allí escapamos nosotros-

-Sí, deben aprovechar sin duda que les dan esa oportunidad para huir de allí- Ahora que el tema parece estar dirigiéndose por buen camino, empieza a mover las piezas a su conveniencia –De hecho es muy linda la pareja de actores Rem y Puli Mesam. Tengo entendí que se conocieron en la primera actuación de Tulam Puli, y de allí surgió el amor… Ya que después fueron inseparables-

-Ja, ja, ja, si, a decir verdad… Mi padre batallo mucho para ganarse la aprobación de mi abuelo, pues no lo veía como alguien digno de mi papá, pero al final… Triunfo el amor-

-Y si que lo hizo, dos hermosos y talentosos hijos, y aparte que adoptaron dos más, además que su matrimonio ha sido de los más sólidos y fieles de todas las parejas de la farándula de Grecia- Sonríe pícaramente de nueva cuenta –Y dinos… ¿Existe alguien especial de esa forma para ti? Después de todo esta es tu primera actuación y podría repetirse lo mismo contigo, ¿No crees?-

-¿Eh?- Su sonrojo se nota en su dulce rostro, siendo intensificado por la cámara. Se ha quedado por completo estático ante estas preguntas y curiosidad por parte de la entrevistadora.

-Oh vamos, Etuvum Mesam o Mu de Aries… Que no solo en la pantalla se ha visto esas miradas que entre tú y el actor Saka Kanni… Además de que al parecer la serie se ha encargado de mostrarlos con una relación más allá de solo una simple amistad-

-¿Eh? No, espera…- Niega con la cabeza rápidamente algo nervioso –Nuestros papeles solo son de camaradas, de hecho solo compañeros de armas en cierto punto, todos lo saben- Sonríe un poco temido a la cámara desviando la mirada.

-Pues, ¿Creo que sabes que existen muchos fans que los aparejan?, de hecho hasta tuve que aprender el concepto de shipp, para entender como los llaman por sus personajes. ShaMu es como los nombraron- Una sonrisa pícara se vuelve a formar en sus labios –Además de que se han subido muchas imágenes en redes sociales en las escenas que son muy cercanos, como… Cuando Shaka le pide ayuda a Mu para volver de esa otra dimensión con Ikki, digo… El personaje es bastante arrogante, con los humos bastante subidos, pero con el primer dorado, no se le nota así-

-Bueno… Mu se supone que es similar en Shaka en algunos aspectos, es serio, respetuoso, reservado, e inspira confianza- Explica brevemente algo que es de conocimiento general –Por eso suponen que tienen un gran acercamiento, y si, se podría decir que Virgo es un tanta más cercano a Aries, pero no por ello quiere decir que los personajes lleguen a ser pareja-

-Pero, esa confianza que dices que se tienen… No solo se nota en esa parte, en donde ciegamente Virgo confió en Aries para traerlo de vuelta al Santuario, sino que… En la saga de Hades, Shaka confió en Mu para que no abriera la puerta de los sales gemelos, en cierta forma ¿Se podrían comunicar de una manera no verbal?- Pregunta, ladeando su cabeza, como si presionara un poco al joven actor a responder lo que desea.

-Recordemos que tanto Mu como algunos caballeros, tiene la habilidad de “Comunicarse vía cosmos”, así que… Mi personaje interpreto los deseos de Shaka, lo entendido aunque le dolió- Se señala a sí mismos, con una sonrisa, tomando una postura más relajada, intentando llevar la entrevista por un camino que no lo evidencie tan descaradamente.

-Y sí que le dolió, las lágrimas que derramo fueron más llamativas y conmovedoras que aquellas que le dedico a Tauro… Y sin contar la escena más tensa de todas, donde Saga le entrega el rosario a un pacífico, pero muy enojado Mu, por la muerte de un amigo muy cerna- Posa su codo sobre la apoyadura de la silla, para colocar allí su mentón y sonreír.

-Mu aprecia a todos sus compañeros por igual, no existe nada especial entre ninguno- Intenta arreglar la situación a como su mente le da entendimiento, pero lo que ocasiona es más preguntas por parte de la conductora.

-Entonces, ¿Cómo explicas que le entregara el rosario, completamente intacto hasta llegar delante del muro de los lamentos? ¿No crees que allí, no solo fue una muestra de profunda amistad, sino también de una gran confianza hacia alguien que defendería el ultimo recuerdo de una persona muy apreciada sin importar que estén en el mismo infierno?- Sí que se ha preparado bien, hizo su tarea de ver toda la serie para tener todas las dudas apuntados, lo cual dice que es apasionada a su profesión.

-Tal vez… Si fue una muestra de confianza. Shaka, no es muy cercano a ninguno de sus camaradas eso es algo bastante obvio para todos, pero con algunos les tiene un grado de acercamiento aunque sea mínimo y los aprecia a su manera. Mu solo es alguien que conoce y considera agradable y digno de su compañía, ya que como se ha visto en los recuerdos de los mismos personajes, eran muy cercanos de niños, tal vez ese recuerdo es lo que lleva a Virgo a tenerle una gran muestra de confianza a Aries- Esa es su verdad y se apagará a ella sin dudarlo. Pero su cuerpo muestra cierta incomodidad, que intenta evitar al acomodarse para inclinarse levemente hacía delante.

-Pero, dinos más… No solo hasta allí se detiene esos instantes de acercamientos comprometedores, sino que en Soul Of Gold, el como Shaka se nota preocupado porque Mu ira a pelear contra los Dioses guerreros, ¿Qué nos puedes decir de ese momento?-

-En esa escena, Shaka sabe muy bien que Mu no llevaba en su armadura sangre o la bendición de Atena para que se volviera divina, es por ello que le entrega la daga, y como mencione antes, sí, puede que él si vea a Aries como un preciado amigo, pero solo eso- Sigue intentando cortar toda posibilidad incriminadora.

-Sin embargo no es la única vez que se muestra el nivel de confianza entre ambos personajes, si nos remontamos en uno de los especiales, más precisamente Saintia Sho… En el momento en que Mu era quién ahora estaba en peligro, y si bien, podría tratarse como algo similar a los sales gemelos… Shaka no permitió que lo siguieran hiriendo…De hecho hasta tu personaje menciona que Virgo es muy confiable, ya que siempre llega en el momento idóneo, ¿Acaso esa confianza esta sumamente presente no solo en el personaje, sino en la persona?- Alza una ceja.

-¿A qué te refieres con eso?- El pelilila solo sonríe levemente, confundido por esas palabras.

-A que no solo en la pantalla vemos la cercanía que tienes con Saka, sino que fuera de las grabaciones, varias veces se les ha visto muy juntos en el set, por algunas fotos que se suben en los perfiles de sus compañeros, y en las propias… Como en imágenes etiquetadas por sus fans, que los han visto saliendo juntos a algunas partes de la ciudad, como en viajes de mero placer… Cosa que sabemos que el acto Kanni, quien tiene una carrera un poco más larga, no disfrutaba hacer-

-Somos amigos fuera del set, no solo nuestros personajes lo son. Él es bastante agradable, amable, divertido, y claro que me gusta pasar tiempo con él, como con cualquier amigo. Ya que no solo he salido con él, sino también con Kemus, quien el da vida a Camus de Acuario o con Manikku quien interpreta a Aldabearan- Defiende su postura, sin dejar de sonreír, aprendió que en las entrevistas jamás deben darse cuenta que pueden estar dando en el clavo.

-De acuerdo, podemos hablar de que tú eres una persona bastante sociable, se nota a simple vista que tienes un carisma único y muy agradable, pero… No solo tienes algo especial para la actuación, sino también para él, pues… Saka, jamás se relacionaba más de lo necesario con sus compañeros de trabajo, solo ha sido contigo con quién lo hemos captado fuera de los set de grabación-

-Posiblemente, es porque la gente lo ha juzgado mal, pensando que por su carácter reservado y serio, puede llegar a ser un grosero o prepotente, pero todo eso está muy fuera de la realidad. Es alguien muy atento, amable, considerado, jamás podría ser un maleducado con nadie… Simplemente a veces la gente puede juzgar a alguien sin conocer del todo, y más a nosotros, porque claramente mostramos lo que la gente desea ver y, en ocasiones porque llegamos a tener un mal día o decimos o hacemos algo que es un mero error nos juzgan- Frunce su ceño, pero se relaja, lanzando un suspiro –Saka, es una persona muy bondadosa, dispuestos a ayudar a quien sea, sin la necesidad de estarlo subiendo a sus perfiles para generar más fama, incluso a mí, que al principio me sentía algo nervioso por ser mi primer papel, y me ayudo a tenerme más confianza y estar calmado, para lograr cumplir las altas expectativas que mi papá tiene en mí, por eso lo considero un buen amigo, alguien de mi plena confianza- Regala una sonrisa sincera, intentando que eso fuera suficiente para calmar la curiosidad de la joven y el público.

Sin embargo en ese momento, la conductora en el programa en vio para la grabación en el set.

-Son muy lindas palabras que ha dicho Etuvum, sin duda se nota un gran cariño hacia Saka, pero… ¿No les parece curioso que dijera mucho la palabra confianza?- Pone su dedo índice bajo su mentón, con una cara de falsa duda –Es que… No solo a él le hice una entrevista previa a este programa, sino que también al misterioso y sofisticado actor de 25 años, Saka Kanni. Quien sabemos muy bien es muy renuente a entrevista, de hecho…- Va tecleando algunos botones en el control para redirigir a otro video –Si se dan cuenta aquí… La entrevista duro menos de tres minutos, fue más de lo que cualquiera pudiera conseguir, ya que…-

Presiona play para que el video se reproduzca, y se nota el martirio en la cara de ella.

-Entonces, ¿Tienes planes para tus vacaciones?-

-No-

-¿Iras a ver a tus padres?-

-Tal vez-

-Tu personaje Shaka de Virgo, sin duda es bastante difícil de tratar, pero… Con Mu de Aries es bastante diferente, ¿Verdad?-

-Se podría decir que si-

-¿Nos puedes decir más sobre eso?-

-No-

-Bueno… Pero, ¿Qué tal cuando le pide ayuda o la hace entrega del rosario? Esos momentos son muy amados por quienes adoran su shipp-

-Es solo actuación, no deberían ponerse a pensar mucho en eso-

-Aun así, no creo que sus fans los vayan a ignorar, se nota la enorme conexión de ambos- Como intenta mantener una conversación larga y fluida con el rubio, pero es muy difícil, por sus respuestas sumamente cortas y sin indicios.

-Si bien, Shaka y Mu tienen la capacidad de entenderse más allá que con simples palabras, los personajes solo están ligados por su deber como caballeros dorados, y puede que si llegaran a tener una amistad un poco más fuerte que la del resto, eso es solo a base de la confianza que se tienen entre ellos-

La repuesta más larga que ha dado hasta el momento, sin duda debe aprovechar esto a como de lugar para sacar la jugosa información que desea.

-Ya veo… Entonces, ¿Lo que se muestra de ambos dorados en pantalla solo es amistad?-

-Efectivamente-

-Comprendo… Pero ¿También se puede relacionar contigo y lindo de Etuvum?- Ella muestra una mirada soñadora, que se fija detenidamente en el rubio.

Nota que en ese rostro algo de tensión se formó al llamar lindo al joven de cabellera lila, pero se contiene en hacer o decir algo que lo incrimine –Definitivamente, entre él y yo, solo existe una pequeña amistad-

-Es curioso, usualmente no eres de salir mucho con otros compañeros de trabajo o hablar de ellos-

-Podrá ser un actor joven en pocas palabras y que su carrera inicio hace poco, pero ha demostrado tener una gran dedicación y decisión en lo que se proponga, bueno… Después de todo, recientemente termino una cerrera bastante alejada de la actuación, eso es digno de admiración, pues quiere decir que tiene otras cualidades aparte de la actuación, que si bien tiene que pulir aun algunos aspectos de ella, lo hace de manera maravilla- Su tono es serio, bastante frio y sin mucha expresión, pero en sus ojos azules se refleja más que solo calma.

-Veo que sabes mucho de él- Alza una ceja, sonriendo levemente -¿Conversan mucho durante las grabaciones?-

-Hablamos lo necesario, Etuvum, es bastante alegre, ocurrente, responsable, siempre tiene temas de conversación muy entretenidas y es sumamente confiable en tantos aspectos-

-Entiendo, Entonces, ¿Son buenos amigos a lo que quieres decir?-

-Somos amigos, es cierto. Creo que se podría decir que es la única persona que considero como amigo, ya que… Al igual que Shaka con Mu, yo confió en que Etuvum, pueda llegar muy lejos, y cumplir las metas que se proponga-

-Incluso, como Shaka… ¿Le confiarías tu vida e ideales a él?-

-Si- Contesta en automático, y su semblante se ve comprometido al igual que el sonrojo en sus orejas, pero lo intenta disimular.

---De Regreso Al Set---

-Como han visto querida audiencia, ambos jóvenes actores están en una especie de relación “Amistosa”, en donde su convivencia está rígida por mucha confianza. Eso es muy interesante, esa palabra, sabemos que no solo se refiere a amigos y familia, sino que en una pareja de manera romántica también se podría referir- Sonríe entusiasmada, mientras se levanta de su cómoda silla.

-Digo, ambos en sus entrevistas, mencionaron mucho que confían uno en el otro, que incluso sus personajes son amigos algo cercanos, y sabemos que esas interacciones hablan más que miles de palabras. Sin contar sus bonito nervios y sonrojos que los actores presentaron, además de que uno es un muy lindo doncel y el otro un actor bastante reservado y atractivo-

En aquella audiencia en vivo, los fans de esa pareja, empiezan a demostrar su reacción con miles de palabras de alegría, como encorar el nombre de la shipp, al igual que mostrar carteles con imágenes y mucho amor a ambos actores.

-¿Qué creen que sean solo amigos? ¿Sera acaso que entre esos dos guapos y elegantes actores ocurre más que una simple amistad? ¿Acaso estarán de verdad enamorados?- Señal hacia la cámara, sonriente –Eso solo lo podemos especular con lo que nos han declarado en esta entrevista, pero la última palabra la tienen ustedes, ¿Qué opinan?- Guiña un ojo, mostrando una sonrisa y su emoción única ante su reportaje -En nuestra página podrán poner sus teorías, en el posteo de esta posible linda y adorable pareja. Y recuerden votar por las próximas entrevistas que desean ver en el programa, ya que en la siguiente sección, les mostraremos a dos caballeros que representan el mortal veneno, con el elegante hielo, ¿Ya saben quiénes son?-

Y el coro de quienes apoyan a esa segunda pareja se empieza a alebrestar en el set, haciendo que el público coree el ShaMu y el CaMilo a unísono.

Sin duda el rating ha sido tan alto que se ha ganado la popularidad no solo en pantalla chica, sino también en el internet.

La mayoría de los hogares están con esta gran noticia especulativa, emocionados e imaginándose lo que esto significaría para esto dos actores…

Claro que como existen quienes los apoyan, también los que no disfrutan de esta shipp, pero… Eso sobra, aquí solo se enfatiza a los que aman sanamente de este dulce emparejamiento que se ganó popularidad a creces.

¿Acaso llegarían a revelar que si tienen una relación?

Bueno… Por el momento eso queda en el tintero, ya que… Justamente en ese instante una televisión bastante grande se apaga…

Dejando a dos jóvenes que la estaban viendo en compañía de un peli azul, peli cobalto y un niño de caballera naranja, están tan rojos como unos tomates maduros, sin poder creer que esto se saliera tanto de contexto.

-Así que… Saka, ¿Me puedes decir que es eso de que eres muy cercano a nuestro hermanito Etum?-

-Más te vale que no intentes cosas raras, como llevarlo a tu departamento a…- Se detiene a ver al niño –Jugar Twister…-

-Hermano Etum, ¿Saka es tu novio?-

-Mitunam, Tirakan, paren de decir tonterías- Se gira para ver al menor de la familia –Y Okre… No creas lo que digan los reporteros amarillistas, entre Saka y yo solo existe una genuina amistad…- Se gira para ver al rubio, con el rubor en sus mejillas a todo lo que da -¿Cierto?-

Se detiene a pensarlo muy bien, pues… No quiere seguir siendo solo eso, es evidente por sus comportamientos que el pelilila no le es para nada indiferente, pero… No sabe si sea el momento correcto, además que aunque el otro trate de negarlo, sabe que es correspondido.

-Bueno…-

-Sí, dinos… Jovencito…- Es allí que todos voltean a ver al peliverde, que frunce el ceño, y muestra una sonrisa muy aterradora, que congela la sangre de los allí presentes -¿Acaso esa reportera esta equivocada? De seguro lo está ¿Cierto?-

Podría ser que su carrera sea más larga que la del pelilila, pero… Sabe que el hombre peliverde, es alguien que gran poder, que puede llegar a destruirlo en un solo segundo y no solo de manera laboral, sino física, pues nadie nunca se atrevería a insultar a alguno de sus hijos, marido o seres muy queridos.

No es exageración considerarlo solo aterrador en la televisión.

-Vamos mi linda borreguito, ¿Acaso sería muy malo que ambos estuvieran enamorados?- El castaño como siempre intentando que las cosas sean amenas para toda la familia, tomándole la mano al peliverde –Sabemos que las entrevistas, y más con actores jóvenes, muy atractivos, y con un gran grupo de fans muy fieles, tienden a emparejarlos ya sea por la mínima interacción-

-Eso lo sé… Por eso… Menos me agrada-

-Ay, pero ¿Por qué?-

-¿Te recuerdo que nosotros también iniciamos siendo muy emparejados por nuestros fans?, y resulto que si es amor verdadero y aquí estamos después de casi treinta años de estar juntos y veinticuatro casados- Le señala con el dedo índice, para después girarse a ambos jóvenes implicados –Si llego a saber que están en una relación, enterándome por el noticiero de las ocho, antes que de ustedes mismos me lo confiesen, les juro que hare la carrera de Saka imposible- La amenaza ya está sobre la mesa para ambos.

-Papá, no es justo que nos amaneces de esa forma, Saka y yo no estamos saliendo, ni nada por el estilo, solo somos buenos amigos- Le explica, intentando calmar las aguas.

-Ya dije, y va para todos los atrevidos que se fijen en mis hijos- Se da media vuelta, para darle la espalda a todos, pues ya se molestó mucho –Nadie es digno de ustedes, y si lo intentan me deben demostrar de lo que son capaces, no permitiré que nadie se cuelgue de su fama o poder- Lanza una indirecta bien directa.

-Independientemente de lo que digan las rede sociales o televisión, la amistad que tengo con Etuvum, no es porque sea hijo de ustedes, o que tenga una carrera muy prometedora a futuro, sino que me agrada y es una persona interesante, sin ser alguien fastidio o superficial, por eso salimos solo como amigos y no mas- Declara esto serio, aunque aún tiene algo más que decir pero, necesita algo de valor.

-¿Lo ves papá? Solo somos amigo, no creas que llegaría a ver algo así entre… Nosotros- Su tono se vuelve algo triste, incluso baja levemente su mirada, pero sigue sonriendo.

-Aunque…-

Es allí que todos voltean para ver al rubio, incluso el peliverde malhumorado.

-Si es que llegáramos a salir como algo más, les aclaro que si eso llegara a pasar, no sería por la fama o poder de su familia, sino por lo que es él… Su personalidad, amabilidad, valores y… Belleza…- Desvía su mirada, poniéndose completamente rojo del rostro en esta ocasión, ya que se atrevió a decir algo tan vergonzosos delante de la familia de su interés amoroso.

Para el pelilila, esto es como un balde de agua helada, pero en cambio hasta vaporizo de la impresión que le provocó las palabras del rubio, teniendo toda la cara también sonrojada, sin poder decir más que una exclamación de asombro.

-¡¡¡¿QUE DIJISTE MUCHACHITO?!!!-

-Borreguito, cálmate-

-Ay no, papá lo va a matar-

-Apuesto diez euros, que lo corre en menos de cinco minutos-

-Etum… ¿Estas bien? Estas muy rojito de la cara…-

Con el corazón acelerado, aprieta sus dos manos, baja la mirada, sintiendo una hermosa calidez en su ser, y a la vez una pequeña frase sale de su boca en un susurro –Tonto… ¿Cómo dices algo así… Tan a la ligera…?-

Solo el más pequeño de la familia logra escuchar eso, mientras los demás de la familia intentan detener al patriarca no solo del santuario, sino de esa elegante y hermosa casa, mientras se escuchan los gritos de desaprobación de esté y las respuestas en defensa del rubio, a lo que posiblemente si y no sienta por el pelilila, el cual se muere de la vergüenza.

 

Sabes algo, Mu… Yo siempre he estado observándote a lo lejos…

Para mí, siempre ha sido muy difícil poder expresarme, decir lo que siento, poder mostrar una cara diferente que la misma seria de siempre.

No es que no deseara tener esos sentimientos, al contrario… Quiera experimentarlos con desesperación, mostrarlos como los demás lo hacían, pero simplemente no era algo que pudiera hacer a voluntad.

Me consideraron un Dios, alguien que pudiera liberarlos de sus pecados, de sus males. Yo solo los miraba y pensaba que debían estar tan desesperados por pedir la ayuda de un niño, que ellos erróneamente creían que era alguien capaz de salvarlos.

Me parece muy tonto ahora… Pero en ese entonces, quería simpatizar con su dolor, sentir algo, lo que fuera para poder demostrarme como un humano normal, pero… Eso es realmente relativo… Y sin importancia.

Lo que alguno consideran normal, es mostrarse con sentimientos genuinos, emociones, acciones que demuestren que tenemos algo en nuestra mente que nos motive o impulse a seguir… Que podamos hablar con facilidad o entendernos, ser empáticos con todos…

Esa no era mi realidad, eso no era algo que yo pudiera hacer o gozar.

Simplemente, acepte lo que debía hacer y tome mi papel como una reencarnación por mi propia supervivencia…

Aunque, conocí que en efecto tenía un lazo con Buda, pero… No como muchos creían.

Tontos, Buda no reencarna ya deberían saberlo. Pero preferían creer que pudiera ser así, para salvar sus vidas.

No los culpo, todos desean aferrarse a algo o alguien para entender y buscarle un sentido s su existencia, cuando en realidad solo somos un suspiro en el inmenso universo, así es nuestra vida.

Eso lo comprendí muy joven y, en verdad no me importaba mucho lo que llegara a pasar.

Conocí mi destino como caballero dorado de Atena… Volverme quién protegiera y vigilara la sexta casa.

Lo acepté sin importar nada… Entendí que así sería mi vida, y en realidad poco a nada me importa.

Disfrutaba de la soledad, sin la necesidad de tener que relacionarme con los demás.

Aunque fuera algunas veces obligado a tener que hablar con los oros aspirantes a dorados de aquella época… Siempre encontraba la forma de marca mi indiferencia e irme a meditar… Era lo que conocía, disfrutaba hacerlo.

Mi único interés era eso, y no quería que nadie me lo impidiera…

Pero… Ni siquiera yo podría prevenir que… Mi mente se viera perturbaba y se llenará de sentimientos y sensaciones que no había conocido antes.

Mu, tú llegaste una mañana… Me parecía tan gris como todas, tan monótona y simple...

Sentí el cosmos del patriarca regresar, solo con él era educado y un poco obediente, pero… Existía algo más que me llamo la atención aquella vez. Alguien me hizo abrir mis ojos en esa ocasión y desear no volver a cerrarlos-

“-Este es el templo de Virgo-“

“-Oh, es muy bonito-“

Solo escuchar esa vocecita, llamó mi atención, fruncí mi ceño, juntando mis cejas, para abrir mis ojos y toparme con una gentil mirada, una sonrisa única que aún me persigue en mis sueños.

“-Él es Shaka, y al igual que tú… Es un aspirante a caballero dorado-“

“-Ya veo…-“

“-¿Patriarca?-“

Solo reaccione a sus palabras, quedándome estático y confuso ante la mirada esmeralda que me dedicabas y esa sonrisa que provocó un latir en mi corazón…Sentí un calor que me empezó a inundar de un sentimiento nunca antes conocí.

“-Solo le estoy mostrando el santuario a mi pequeño discípulo-“

“-¿Su discípulo?-“

Me extraño saber eso. Fue extraño, en realidad no me importaría en otros contextos, sin embargo me llamo tanto la atención en esa ocasión, que me parecía confuso querer mirar fijamente a ese lindo niño que eras tú-

“-Lo he estado entrenando desde muy pequeño… Pero no había querido traerlo al santuario hasta ahora-“

Vi cómo te sonrió, y te animo a presentarte, solo al tocarte el hombro.

Asentiste y me extendiste tu mano tan feliz, que me sorprendió tu comportamiento para bien.

“-Me llamo Mu, es un gusto conocerte-“

Fue la primera vez que oí tu nombre, y en donde sentí que algo más agobiaba mi corazón.

A partir de ese día, me sentí tan perturbado, que no sabia como explicarme a mí mismo esto que sentía…

Quería verte pero no era normal en mí, quería hablarte, pero yo no disfrutaba de eso antes, quería oírte pero nunca soporté sonidos de nadie más… Solo… Quería estar a tu alrededor, sin que fuera raro.

Poco a poco, me anime a ir a los entrenamientos, y te buscaba siempre con la mirada. Tu sonrisa provocaba felicidad en mi corazón, era el sentimiento que aprendí a entender con solo verte.

Disfrutaba como me saludabas, me gustaba tomar tu mano en tu saludo formal.

Que nos emparejaran era mi enorme fortuna, que no quería compartir con nadie.

Cada que… No podía ser tu compañero de entrenamiento, me sentía tan molesto, frustrado, enojado…

Nunca antes había experimentado nada de esto, solo había conocido la serenidad y calma, nada más allá que eso…

Pero contigo Mu. Tú provocaste tanto en mí con solo tu hermosa presencia…

Una felicidad que no deseaba compartir con nadie más, una sonrisa que solo debía pertenecerme a mí, y tus ojos deben verme solo a mí-

Varias veces me sentí controlado por el enojo que se apoderaba de mi corazón al ver como Aldebarán, Milo, Camus, o Saga se acercaban a ti…

No apartaba mi mirada de ti, en ese momento no sabía que sentía, solo quería que se alejarán de ti y volverías a mí, para que de nuevo me prestaras tu total atención.

Ahora conozco que esos son celos y egoísmo… Y no han cambiado en lo más mínimo…

No me arrepiento de las veces que… “Jugando” llegaba a herir a los demás… Lo hice varias veces a propósito… Lo seguiré haciendo si alguien representa una molestia para nosotros…

Ame como me defendías de ellos, diciendo que era un accidente, que a veces en los juegos eso sucede…

Lograba que te enojara con ellos, por insistir que yo lo hacía a propósito, y con una sonrisa triunfante, preferíamos ir a otro lugar a seguir nuestros propios juegos.

Tumbarnos en la hierba fresca, mirar las nuevas, platicar de cualquier cosa que se nos ocurriera… Yo te escuchaba hablar y tú me contabas todas tus maravillosas ideas y sucesos. Disfrutaba escuchar todo lo que deseabas compartirme, pero odiaba cuando hablabas emocionado con lo demás… Por cualquier tema.

No Mu, no puedes hacer eso… Porque… No pienso compartirte con nadie… Ya no más…

Soporte las veces que tuviste que irte con el patriarca a Jamir, soporte los trece malditos años en que te tuve tan lejos de mí, sentí varias veces que enloquecería…

Sabía que mi cosmos no era suficiente para quien gobernaba el santuario con crueldad… Debía esperar a que pudiera hacer algo para ser quien diera el golpe de estado que se necesitaba, pero solo para traerte de vuelta.

Deteste como en esa ocasión, que fui a verte… Me pediste que no volviera a hacerlo, que nos poníamos en peligro…

Quería tomar tu mano y obligarte a estar conmigo. No, no te haría daño y lo sabes muy bien… Por eso me contuve y, aunque no lo entendía… Me fui…

La primera vez que te deje ir… Me arrepiento tanto por eso… Como no tienes una idea.

Pero no todo fue malo al final…

Volviste… Eso fue lo mejor… Al fin te tenía de nuevo cerca y no desaprovecharía esta segunda oportunidad…

Pero… A diferencia de cuando éramos niños… Ahora… Ya no estabas solo… De nuevo, debía compartirte con alguien más…

Sino era con el patriarca, era con Aldebarán, con Saga… Y ahora, que solo uno de ellos seguía con vida… Tu alumno… Ese niño…

De nuevo me sentía lleno de enojo y una terrible sensación de enojo, quería solo alejarte de él, pero sé que eso es algo sumamente complicado-

Ver como lo quieres, que le enseñas con paciencia y tranquilidad.

Lo mimas mucho y le entregas todo tu cariño… Se supone debería ser solo para mí.

Es alguien que permites que te abrace siempre… Pero, no solo a él… Los de bronce te aprecian mucho, y van seguido a pedirte que repares sus armaduras o solo a conversar…

-Sí, soy un egoísta y me volví peor al pasar de los años. A pesar de que tuve una oportunidad para decirte que tú despertaste tanto en mí, la desaproveche al morir por una Diosa que para mí no es importante…

Pero no cometeré ese error dos veces… Ya no más, y con esta nueva vida, prometo que te tendré… No solo como lo hago ahora...

Añorándote, diciéndote mis pensamientos y recuerdos a unas fotos tuyas…

Ja, la tecnología de esta nueva era es bastante útil…

Grabar recuerdos, momentos en donde pude ver tu sonrisa.

En donde no te diste cuenta de mi presencia…

En tus momentos de soledad y paz, yo he estado allí, oculto para verte de lejos…

Mu, mi amado Mu… Eres mío, solo mío…

Eso te debe quedar muy en claro, porque no dejare que lo olvides… Jamás…

Yo puedo ser la persona que te de todo el amor que quiera, que necesites…

Pero a cambio debes pertenecerme solo a mí, y a nadie más…

No dejare que nadie se te acerque, nunca…

No permitiré que nadie te aparte de mi lado.

No le demuestres tu cariño o atención a nadie que no sea yo…

No creo que te gustaría verlos heridos, y no debería hacerlo, ya que eso te causaría mucho dolor… Pero entonces, que no tienden su suerte.

Solo promete que me amaras a mí… Que no necesitare solo verte en la soledad de mi habitación, en estas fotos que a mí parecer son insuficientes para contemplar tu belleza, tu sonrisa, tu gracia… Todo tu hermoso rostro y cuerpo…

Necesito tocarte, sentir tus hermosos cabellos aun unidos a ti… No me puedo solo conformar con estos mechones que tengo, que obtuve de manera clandestina…

Si supieras que cada cosa de ti la atesoro con todo el amor que te tengo

Sí, sé que debe ser muy raro, demasiado extraño, pero… Sé que nadie me ha considerado un caballero normal, en si… Ninguno lo somos…

Pero, mi seriedad, mi manera de actuar y fingir una calma relativa, me ha ayudado a poder estar dentro de nuestra sociedad, para no levantar sospechas…

Que en el momento que confiese estos sentimientos que tú despertaste en mí, y que no pienso dejar de sentir por nada del mundo…

Cuando tú aceptes que también me amas, y me entregues tus manos para que yo la sostenga por siempre, te juro que te llevare lejos y no escarparas de mí… Porque nos amaremos de verdad y nada, ni nadie nos importara, ni siquiera el juramento a una Diosa que nos ha abandonado en los peores momentos.

Nunca debemos basar nuestra fe en alguien más… Sino movernos bajo nuestra propia voluntad y criterio… A veces, se puede cambiar el destino y en otras ocasiones no.

Mu, tu destino es estar a mi lado, ¿Lo entiendes verdad?

Mu, me vas a sonreír para toda la vida, solo para mí.

Mu, repite mi nombre toda tu vida y me harás la persona más feliz del universo.

Mu, tú eres la felicidad que no busque, pero necesitaba.

Mu, eres la obsesión que no pienso alejar de mis pensamientos.

Mu, este amor, se puede catalogar como enfermizo, pero eso no me importa, porque… Si logro tenerte a mi lado eternamente, valdrá la pena sin duda.

Mu… Yo te amo, y no pienso perderte sin importar que deba acabar con cualquiera que desee interponerse entre nosotros… Así que… Por el bien de todos, será mejor que rompas todos tus lazos que no sean conmigo…

Vamos, Mu… Tienes que hacerlo, no quiero verte llorar cuando pierda la razón al volverte a ver con alguien más, a quien le dediques una sonrisa…

Por qué… Ya no estoy soportando que el patriarca, el viejo maestro, o tu disculpo estén tan cerca de ti… Pero lo soportó todo para no verte triste, eso es algo que aun logra contenerme, el no verte triste…

Ja, ja, ja, si supieras lo que pienso, lo que siento, lo que he tenido que callar desde que teníamos cuatro años… ¿Huirías de mí? ¿Sentirías odio? ¿Desprecio? ¿Horror?

Mu, lo que sea que llegaras a sentir si lo supieras, no permitiré que nos aleje…

Mientras tú nunca sepas lo que escondo en mis profundos sentimientos por ti, serás solo mío, y todo estará bien…

-¡¡¡BUENAS TARDES, SHAKA!!!-

Oh, me estas llamando… Cierto, hoy te invite a tomar el té…

¿Acaso será hoy el día en que vierta un poco de esto en tu taza y no puedas resististe a mí?

-Maestro Mu, ¿Puedo comer un momo ahora?-

-No Kiki, son para comer los tres juntos-

Mmmh, lo trajiste a nuestra cita…

Sí, no es una como tal, pero… quiera estar a solas contigo…

Tal vez… Si no lo sabes… No te haga daño, ¿Cierto?

Es mejor dejar esto guardado, que nadie lo sepa… Esconderé mi secreto, mi amada obsesión con el único que ha despertado en mí, sentimientos extraños y hermosos, que no voy a abandonar por nada de este mundo.

Nadie lo sabrá, nadie tiene por qué saberlo, si son conscientes y precavidos en alejarse de ti.

Solo debo mostrarme como siempre, calmado, serio e indiferente, atento contigo… Para que al verte esta tarde, note tu sonrojo en esas bellas mejillas, que los nervios se noten en tus manos y que con solo una sonrisa tuya, ilumine mi soledad.

-Buenas tardes, Mu. Hola, Kiki-

Espero que no te moleste que Kiki nos acompañe, pero pasamos la mañana cocinando los momos y aunque le deje algunos en Aries, dijo que le gustaría comer con nosotros esta pequeña merienda. Te prometo que se comportará, ¿Verdad, Kiki?

-Sí, lo hare- Una sonrisa de ese niño, intenta hacerse el gracioso, pero no me fio de nadie que quiera la atención de Mu, es solo mía –Además mi maestro es muy feliz cuando usted está a su lado, así que…-

-Ja, ja, ja, ja, Kiki… ¿Qué estás diciendo?- Cubres su boca de inmediato, estás tan nervioso y rojo, y todo eso es por lo que está diciendo este niño…-

-Pero, maestro… Es cierto, usted me dijo que…-

Solo quieres que no revele un secreto tuyo, abrazándolo y poniendo tu mano en su boca…

-Qué cosas dices… Kiki, creo que estabas soñando…-

-¿Quieres que te ayude con esa canasta?- Si me ofrezco a ayudarte, te darás cuenta que correspondo tus sentimientos…

Asientes y estás muy apenado, me cedes la canasta y la sostengo para que estés más cómodo.

-Gracias…-

-Gracias a ustedes, por preparar los deliciosos momos que disfrutó comer… Prepararé el té- Dejo en la mesa baja aquel presenté y me dirijo a la cocina.

Veo como ambos se sientan en los almohadones que tengo, le dices algunas cosas al niño, es como si lo regañaras en secreto, es como si estuvieras al borde de un colapso nervioso y tu discípulo se ríe levemente de ti, diciéndote más cosas, solo para alterarte un poco…

¿Qué están escondiendo?

Si vertiera un poco de este brebaje en el té… Y lo bebieran… Me podría deshacer de ese estorbo, y tenerte solo para mí… Pero, por otro lado, podría ser tal vez un aliado que no he visto antes…

Ganarme su simpatía, para tenerte y después alejarlo de ti…

Si, tal vez sea una mejor idea… Solo con verlos de reojo, me ayude a estudiar qué beneficios me puede traer fingir llevarme bien con ese discípulo tuyo…

Por ahora… Si no te enteras de mi gran amor por ti aun… Está bien, pero no será así por siempre…

Mu, me vas a pertenecer, lo harás… Por qué te he añorado por tantos años que estoy en mi límite, en algún momento sé que caeré en una imparable locura, y no poder soportar que te alejes de mí, ni siquiera para ir a tu templo.

Lo tienes que entender…

Mu, tú me perteneces, como mi corazón a ti… Así que… No necesitaras a nadie más que no sea yo.

Lo entenderás cuando llegue el momento, pero… Por mientras, disfruta que aun tienes libertad, porque… Deseo encerrarte en una jaula, en donde solo los dos estemos y nadie pueda encontrar la llave que destruiré al tenerte conmigo por siempre…

Te prometo Mu, que en cuanto tenga el último fragmentó de valor para decirte que te amo y aceptes que también lo haces tú, te consagrare como mío… Y nada, ni nadie nos separará…

Ni el santuario, ni el patriarca, ni tus amigos, ni tu discípulo, ni siquiera la misma Atena… Lo van a lograr.

Así es, desafiare a los Dioses, solo por tenerte a mi lado.

Dime, Mu… ¿Con eso será suficiente para que me ames y entiendas que nunca serás feliz en otro lugar que no se a mi lado?

 

Alguna vez… Vivió una persona tan dulce y amable… Que con solo una mirada, podía encantar los corazones de todos.

Los llenaba de alegrías y una inmensa paz.

Lograba sacarles una sonrisa a aquellos que preferían mantenerse relegados o solitarios, nunca le había gustado ver a nadie sufrir, que padecieran algún mal o dolor.

Buscaba la forma de hacer que esas personas recuperaran la salud, la esperanza y la alegría…

No importaba que tan difícil fuera la situación, hacia todo lo que estuviera en sus manos y más, para traer una inmensa felicidad a todos a su alrededor.

A pesar de que tuviera un título alto en aquel lugar donde alguna vez vivió…

Era capaz de ensuciarse las manos con tal de ayudar en lo que pudiera.

Tal vez, por eso la gente de aquel pueblo siempre lo veía con unos ojos llenos de esperanza, y de admiración… Podían contemplar que el futuro de aquel lugar seria esplendido, ya que ese joven algún día los lideraría.

Tal vez, eso provoco que su fama creciera… Y muchos se fijarán en él, de una forma un tanto egoísta.

Saber que un joven príncipe, pueda ser tan desprendido de las cosas, que fuera capaz de procurar siempre la estabilidad de su pueblo ante cualquier cosa…

Esa sonrisa que muchos empezaron a codiciar, pero que él no deseaba dar a nadie…

Solo quería prestar atención a su gente, a su pueblo, a aquellos que lo necesitaran. Pues no quería involucrarse con nadie de manera sentimental, no aun.

Tal vez eso fue un error… Tal vez el hecho de creer que pudiera hacer su vida alejada de un interés romántico…

Los reyes orgullosos de su hijo, que fuera tan caritativo, y sumamente amable…

Siempre con una sonrisa andaba y saludaba a todos con sumo respeto, todos lo querían…

Llegaba a consolar con su sola presencia el sufrimiento de muchos… Y eso…

Fue algo que todos debieron prevenir, que podría traer el mal sin siquiera pedirlo.

Si bien, el reino era prospero… Pronto… Una epidemia empezó azotar el lugar… Una enfermedad que para esa época no existía cura alguna…

Ver como poco a poco su gente enfermaba y moría…

Lo hizo sentirse tan inútil, ya que era incapaz de hacer algo al respecto…

Y aunque lo intento, llevando alimentos, remedios… Todo lo que se pudiera y creía podría ayudar… Nada surtió efecto…

Cuando eso empezó a ser peor… Sus padres le prohibieron ir al pueblo, no debía exponerse más…

No quería hacerles caso, deseaba cuidar a su pueblo con sus propias manos…

Su gran corazón, lo llevo a desobedecer varias veces, y a quedar en una terrible encrucijada…

Sabía lo que significaba su cruel destino si acepta aquello, pero eso no le impidió hacer caso a su inmensa amabilidad y a la pureza que lleva en su ser…

Un reino vecino, que logro controlar la epidemia y salvar a la mayoría de su gente… Ofreció la cura, a cambio de la mano del príncipe…

Sus padres no aceptaron aquel ofrecimiento, un matrimonio arreglado no deseaban como destino para su único hijo, pero… Sin pensarlo, ni dudarlo un solo segundo, acepto esa propuesta.

Quedando su mano prometida para ese príncipe que deseaba tenerlo, lo codiciaba, por ser alguien con un corazón tan puro, hermoso y maravilloso, ya que sería perfecto para tener hijos apropiados para que así los dos reinos tuvieran prosperidad.

No es que iba a permitir que se rebajaran ante los aldeanos como lo hacía el joven que deseaba, pero al ser hijos de aquel amable y bondadoso ser, sabía que se ganarían la simpatía de los aldeanos…

Conocía lo que su vida significaba para los demás reinos, pero… No le importaba…

Si su gente estaba a salvo, haría lo que fuera por ellos…

Sin embargo, la cura que se necesitaba, no era algo fácil de tener aun con ese trato sellado…

Ya que… No era a base de hierbas y agua pura, sino que consistía en otro método… La magia…

Y eso solo lo pudo tener aquel reino, gracias a un hombre rubio que poseía amplios conocimientos en ese tema, pero… Aunque fuera fiel servidor de la corona… Sería difícil que considerará el dar su medicina especial hacia otros que no fueran los suyos.

Y allí, aquel príncipe, al saber esa parte del pacto…

Que si bien debería ser alguien que influenciara obediencia a ese ermitaño, no se había ganado su respeto para nada.

Aunque fuera el prometido del príncipe de aquel lugar, debía demostrar que lo hacía por un fin mayor, solo por el bien de su gente.

La primera vez que debió ver a ese mago… Sintió miedo tanto al lugar, pero cierta compasión hacia él, ya que lo vio tan desolado, lúgubre, malhumorado… Con ojeras, y su rostro en son de enojo…

No le agradaba ver esto en las personas, pero… No sabía si podría ayudarlo, primero debía pensar en su gente.

Y si bien, se presentó con su nombre y título… Fueron cosas que no le importaron a aquel sujeto.

Que solo al verlo, lo miro de reojo y lo ignoro, considerando que solo era alguien tanto, inocente y muy estúpido, por no saber que condeno su vida por algo que solo son tonterías ante sus ojos.

Pero ese rechazo no le importa al pelilila… Se aferró a la idea de salvar a su gente… Y demostrar su gran amor por su reino.

Se ofreció a hacer cualquier cosa para el mago del reino vecino, con tal de que le diera la medicina para salvar a su gente…

De nuevo no le hizo ningún caso, pero… El príncipe Mu no se dio por vencido ni una sola vez, su voluntad nunca flaqueo ante nada…

Comenzó a limpiar, organizar los estantes y varias mesas de trabajo, trajo luz a esa lúgubre habitación que tenía para sus habilidades mágicas.

Si bien, al principio ese mago se molestó tanto, y si bien no iba a faltarle al respeto al futuro consorte del reino, si lo regaño por no ser un inútil a su ver.

Pero, el pensar que ese joven se intimidaría por él fue su mayor error…

-¡¡¡¿CREES QUE YO QUIERO ESTAR AQUÍ?!!! ¡¡¡¿CREES QUE YO DESEO DESPOSARME CON EL PRÍNCIPE SAGA?!!!- Aunque estaba algo sucio por pasarse el día entero limpiando ese lugar, trayendo luz a ese sitio, estaba ya al borde de la desesperación por mostrarle a ese sujeto que podría hacer lo que fuera por su pueblo y ser digno de la cura por ellos, se rompió su paciencia y grito a todo pulmón -¡¡¡SOLO QUIERO SALVAR A MI GENTE!!! ¡¡¡ELLOS MUEREN, MIENTRAS YO ESTO AQUÍ, INTENTANDO ENCONTRAR UN ANTÍDOTO, LO QUE SEA PARA SALVAROS!!! ¡¡¡POR ELLOS, POR MI GENTE HARE LO QUE SEA, INCLUSO SI DEBO DAR PASOS HACIA UN FUTURO QUE NO DESEO, LO HARE!!!- Por primera vez en todo este tiempo… Se permitió llorar.

Pero no por eso se mostraba derrotado, al contrario… Su ferocidad era algo muy diferente a la amabilidad e inocencia de siempre… Demostraba que estaba tan desesperado, pero no por él, sino por aquella enfermedad que azotaba su reino.

Esas palabras, lo testarudo que ha sido y la determinación que vio en él, logro cautivar a ese mago de una manera que jamás pensó…

Antes de poder decir algo más… Mu se fue, no podía soportarlo más…

Y de nuevo… Un día más en que su gente sufrió, una noche donde al amanecer los muertos se contarían…

Muchas familias se acabaron, muchos cadáveres inundaban los cementerios… Era un horrible escenario y a ese paso, no importaría las riquezas que se tuviera, todo se perdería…

Sin embargo… Tuvo una pronta respuesta…

El príncipe, con el que se había comprometido, le llevo el antídoto, que podría rapdiamente ser repartido entre su gente para salvarlos…

Esas esmeraldas se iluminaron, estaba tan feliz que lloró de alegría… Y abrazo a ese hombre de cabellera azul… El cual se sentía tan orgulloso de ser alguien que pudiera tocar a ese lindo ser, y que con esto pronto seria suyo.

Y pronto su reino volvió a estar saludable, si bien… Muchos pequeños quedaron huérfanos…

Mu no los dejaría solo. Gracias a sus ideas y maneras de ser… Logro tener un refugio para todos, ayudarlos a aliviar su dolor y así puedan llegar a tener un futuro próspero…

Esa amabilidad, por la cual aposto su vida y alma, por una sola cura…

Sus padres estaban felices de que lograra traer salud a su pueblo, y en cierta forma aceptaron aquel matrimonio arreglado.

Como agradecimiento, aunque realmente no debía, ya que lo logro sacarlo de sus casillas, le llevo un presente al mago…

Se disculpó por ser un atrevido al limpiar y ordenar su estudió, le explico que fue algo creía que era necesario para que no tuviera tan mal humor…

Aquel hombre, no quería recibir aquel presente… Simplemente no quería hacerlo…

Por qué… Esa manera de ser del joven príncipe, llego a cautivar su corazón, mas debía callarlo, porque sería el consorte real y no… No podía fijar sus ojos en un ser tan puro y superior a su ver.

Mu insistió en darle aquel presente, y de hecho le pidió que le enseñara algo de magia, medicina, remedios… Todo para poder defender y procurar que tanto su pueblo como a este que tendría también siempre estuvieran a salvo.

Esa sonrisa, es marida, esa amabilidad e inocencia del pelilila, era muy difícil lograr negarle algo… Pero debió hacerlo.

Aun así, fue obligado a enseñarle, pues su príncipe complacía en todo al pelilila, pues lo principal era ganarse su corazón a como diera lugar.

Y al parecer lo estaba haciendo… En cierta forma… Solo su gratitud.

Sin embargo… Era terrible y muy doloroso para ese mago… Pues, no era solo porque comenzó a amar a ese dulce príncipe, pues su bondadoso y gentil ser, logro derretir las cadenas que encerraban ese amargo corazón, ya que… No creía que esto llegara a ser posible.

Menos, por alguien de la realeza, que estaba tan lejos de su alcance, pero…

Allí estaba, a su lado, aprendiendo todo lo necesario para traer conocimientos su prodigiosa mente.

La magia, se puede usar de formas tan maravillosas, trayendo vida, alegría, paz y conveniencia para la prosperidad, pero…

También desgracias…

Fue una tarde, una en donde al estarle enseñando, y estar sumamente cerca…

Sus miradas chocaron, Mu solo le sonrió y esa verde mirada brillo, estaba feliz de aprender un método curativo que podría erradicar algunos males simples.

Su corazón latió, por solo ver esas rosadas mejillas, esa paz e inocencia, el cómo lo trataba tan amable como nunca nadie lo había hecho… Ya que solo conoció el temor ente los ojos de los demás…

No le exigía hablarle con respeto como los demás miembros de la familia real, no le decía que era solo un mago, que debía estar al servicio de la corona…

Mu, muy ponto se metería a la boca de los lobos más despiadados, al momento de casarse con el príncipe heredero…

La luz no puede sobrevivir en medio de la oscuridad, y lo sabe muy bien…

Solo era un corderito inocente e ingenuo, capaz de todo por los que ama… Y ser fácilmente engañado, aunque supiera parte de la verdad, no hacía nada al respecto… Acepto su destino con una gentil sonrisa

No podía permitir que ese fuera el destino de la persona de la que se había enamorado perdidamente.

Así que… Al estar próximos a esa boda, que sería la unión de los dos reinos…

Los preparativos, los vestuarios, el banquete, todos los detalles ya estaban contemplados y listos para el gran día…

Su pueblo se alegró por la noticia, pensando que sería algo favorable y bueno para su amado príncipe.

Le dieron algunos regalos… Lo poco que podían, como muestra de su eterna gratitud…

No importa si fuera común o poco valioso, Mu acepto esos detalles con felicidad y emoción…

Frutas, vegetales, algunos dibujos y cartas, de aquellos que si habrían aprendido a escribir y leer, ya que… Él quería que todos tuvieran buenas oportunidades y prosperidad, así que… Uno de los escribanos de su corte, enseñaba a los más jóvenes…

Todo aquello, era hermoso para el pelilila, pero algo sin importancia para el peli azul…

El cual, aunque trataba de llenarlo de un sinfín de regalos caros y ganarse su atención, notaba que Mu prestaba y disfrutaba más a su gente que a él.

Pero no se daría por vencido de ninguna manera…

Ya que el final, Mu seria suyo y eso estaba bien, ya que nadie lo podría evitar…

Así que… Conociendo ese cruel destino para alguien tan puro, le confeso algo terrible que debió hacer…

-Esa medicina mágica… El remedio que te dio el príncipe Saga… No era eso…-

-¿De qué hablas? Mago… Tu remedio salvo a mi reino, ¿Cómo puedes decir que no?-

-Fue una orden-

-¿Una orden?-

-Como… No hacías caso a las insinuaciones del príncipe… Y sabiendo de tu enorme amor por tu reino. Ideo un plan para tenerte-

-¿Un plan?- Se puso de pie para este punto, alarmado, con el ceño fruncido, juntado tus tikas, asustado por lo que fuera a escuchar -¡¡¡¿QUÉ CLASE DE PLAN?!!!- Sentía una terrible sensación en su corazón ante este momento, que no midió su voz.

Sabía que al momento de decirlo, lo perdería también, no lo podría volverlo a ver, ni escucharlo, porque lo odiaría y jamás lo logaría perdonar, sin embargo, no podía ver que su vida se anclara ante alguien tan malvado y cruel.

-La epidemia… Fue creada con magia, para que no tuvieras más remedio que casarte con él-

-¡¡¡¿QUÉ?!!! ¡¡¡NO!!! ¡¡¡ES IMPOSIBLE!!! ¡¡¡NO PUEDE EXISTIR ALGUIEN TAN RUIN PAR E HACER ESO!!!- Sus lágrimas empezaron a brotar. Simple y sencillamente, no podía creer lo que acababa de escuchar y sentirse traicionado, quedando como un verdadero idiota por confiar ciegamente en los demás…

-Saga, quería tenerte a como diera lugar, así que… Me ordeno crear una enfermedad capaz de matar a cientos en poco tiempo, para que no tuvieras opción… Y al saber… Que la misma “Ataco” a nuestro reino y se lograra encontrar una “Cura”… La cual solo es el antídoto del mal que azoto a tu pueblo- Estaba realmente arrepentido, pero entiende que eso no servirá para reparar las vidas que se destruyeron en el proceso.

-¡¡¡¿CÓMO ES POSIBLE… QUE FUERAN TAN CRUELES?!!!- Sus pasos se daban hacia atrás… Intentando alejarse de ese rubio –Shaka… ¿Cómo pudiste…? ¡¡¡¿CÓMO PUDIERON TODOS SER TAN DESGRACIADOS Y MISERABLES?!!!-

-Lo siento… Perdóname… Yo… Solo seguí órdenes, yo…- Quería justiciarse, no podría soportar tener el odio de quien ama.

-¡¡¡¿PERDONARTE?!!! ¡¡¡JAMÁS LO HARE!!! ¡¡¡A NADIE!!!- Salió de aquel lugar… Que se encontraba al fin tan esplendido, bonito y hermoso, donde la luz no solo de la solar o velas se había vuelto única, sino… Que la alegría y sonrisas del pelilila, fue tan grande para inundarla de paz.

Estiro su mano, queriendo detenerlos, atraerlo a él, pero si usaba magia… Sabía que sería peor…

Así, que… Ese mago por primera vez, se sentía impotente e inútil, perdiendo a alguien que lo conoció en realidad y trajo esperanza a su vida.

Esa misma noche… Se presento ante su prometido… Quien creía que sería una agradable velada…

Mu, le dijo que rompía el compromiso…

Estando de pie, digno, fuerte y poderoso, sus esmeraldas ardían en furia, su rostro tan dulce, solo mostraba la decepción y odio hacia ese peli azul.

-¡¡¡¿CÓMO QUE YA NO TE CASARAS CONMIGO?!!!-

-¡¡¡COMO LO OYES, NO VOY A SEGUIR CON ESTO!!! ¡¡¡NO ME IMPORTA EL PACTO QUE HICE CONTIGO!!! ¡¡¡TÚ CAUSASTE ALGO TAN HORRIBLE AL MATAR A MI GENTE CON ESE HECHIZO!!! ¡¡¡MALDITO, NO QUIERO SABER NADA DE TI, NI DE NADIE QUE TENGA QUE VER CONTIGO!!!-

Con lágrimas por la decepción… No, no es que amara a ese príncipe, pero lo creía una buena persona… Dolía mas que su gente sufrir, por la codicia de otros, porque lo quisieran poseer a él.

-No me dejaste de otra-

No respondió, le dio la espalda a ese hombre de cabellera azul… Quería irse, volver a su reino y jamás tener que pisar de nuevo ese lugar…

Sus súbditos estaban listos y esperándolo en aquel lugar, para volver a salvo, pero nadie pudo prevenir lo que sucedería después.

-No prestabas atención a mis atenciones… Querías huir de tu destino, de lo mejor para ti… ¡¡¡NO LO IBA PERMITIR!!!- Ese grito tan potente helo la sangre de todos los presentes, su desesperación comenzó a serse presente… Al igual que un cambio en su cabello, a una tonalidad blanca… Y unos ojos tan rojos que parecen envueltos en llamas.

Mu de inmediato reaccionó ante esa sensación, esto solo podía significar una maldición muy peligrosa… Conoció y aprendió lo que pudo, entiendo como sentir las diferentes vibraciones del ambiente por influencia mágica…

Se giró, pero lo que sintió en su corazón fue terrible…

El sonido fue sordo, sus súbditos no podían creer lo que acababa de pasar, de ninguno reino creían posible esto.

El corazón de aquel príncipe tan amable y bondadoso, que tenía un futuro esplendido y era la luz de los suyos… Fue atravesado por una espada…

¿Cómo se movió tan rápido?

¿Cómo pudo herir de muerte a alguien que se supone deseaba poseer?

-¿Por qué Mu? ¿Por qué me hiciste hacer esto? ¿Porque no solo aceptaste que éramos destinados, y seguíamos como siempre?- Su mirada pedida, aferrándose a ese cuerpo, que le iba arrancado la vida, pues la espada aún seguía perforando ese corazón.

El dolor, las lágrimas, el saber que su vida se perdía lejos de su amado hogar… Sentirse un prisionero… Sus fuerzas se desvanecieron, mientras lo último que veía, mientras intentaba escapar, fue al rubio mago, que de lejos contemplaba con horror lo que ese ruin príncipe había hecho…

El hilo de sangre brotando de su boca, la perdida de la conciencia y la vida se dio…

El príncipe mas amado, codiciado, amable, y puro, había muerto en manos de aquel que decía amarlo, pero solo se obsesiono con él al grado de codiciarlo a muerte.

Era un desastre, una tragedia…

Los subidos de Mu… Atacaron furiosos por este hecho, pero los de Saga intentaron impedirles que continuaran…

Sin embargo a pesar de estar en territorio enemigo ahora, lograron acabar con aquellos, pues su príncipe también era apreciado por ellos…

Aun así… No era suficiente, Saga no los dejaría llevárselo…

Estaba ya muy loco, fuera de sí, que ya era peligroso acercarse a él…

Pero, los soldados no debieron hacer nada…

Shaka, también estaba volviéndose loco por su furia, su enojo, ya que por ese maldito hombre… Perdió a alguien que no creía necesitar…

Prefiera saber que estaba con vida, en su reino, lejos de él, pero bien… A saber que murió a manos de un desgraciado que no lo merecía…

El mago, uso un hechizo, para manipular la sangre de ese desquiciado monarca, alejarlo de del cuerpo de quien podía traer alegría y luz a donde fuera, gracias a su amable presencia…

Ver aquello fue algo aterrador, pero ese hombre rubio, solo les dijo una cosa a aquellos subidos del joven Mu, mientras torturaba al príncipe.

-Llévenselo lejos… Él debe volver a su reino-

Aquellos que aún estaban con vida, sabían que no podrían hacer más… Tomaron el cuerpo del príncipe, y se lo llevaron tan rápido como pudieron de ese lugar…

Y apenas sus pies, dejaron de pisar aquel reino…

Vieron cómo se oscurecía todo, se envolvía en una negrura tan insemina, la tierra que minutos antes habían dejado atrás, se volvía estéril, el cielo de ese lugar dejo de ser brillante, los animales perecieron, todo perdía su color…

Demasiado para procesar en tan poco tiempo…

La gente empezó a dar gritos de dolor… Podían oler la carne putrefacta…

No sabían que era eso… No entendían, solo que… El reino vecino moría y desaparecía ante sus ojos…

Y ellos, como únicos testigos… No harían nada, más que dar la vuelta a tan terrible espectáculo, para llevar el cadáver de su príncipe hacia su hogar.

Dar la noticia a los reyes fue lo peor… Verlos derrumbarse, sentir que el mundo entero de ese reino también se destruía, pues su único heredero, acababa de ser asesinado…

Conocieron la verdad, la maldad de aquel reino… Pero la venganza no era una opción, no porque no pudieron o temieran, la deseaban todos, pero…

Todo en ese lugar desapareció, no quedo ningún habitante con vida, las estructuras cayeron, los animales, el agua, la tierra, los árboles y flores, todos muertos, sin dejar más rastros que huesos y carne podrida…

¿Qué era eso?

Nadia lo supo, nadie conoció la verdad de ese hecho…

Solo que… El reino de príncipe que todos amaban, por ser siempre optimista, que su actitud reconfortaba, consolaba y siempre firme en ayudar, que hacia cualquier día bueno, aunque las nubles fueran grises… También cayó poco a poco… Pues ya nada les importaba a sus reyes, y las riquezas, la prosperidad ya no eran nada ante los ojos de ellos.

La luz que podía traer la armonía y paz a ese reino y los ríenos vecinos… Se apagó y provoco la destrucción de dos mundos…

Mu, no tuvo la culpa, fue una víctima clave para que se destruyera todo… Quería ser el mejor príncipe para que su gente nunca sufriera, pero sufrieron por su ingenuidad…

Solo deseaba el bien común, la proceridad, todo lo bueno para su gente, pero sus deseos, se volvieron la codicia de muchos… Y por tenerlo, se cometieron actos tan atroces…

Quien parecía amarlo de verdad, sabía que debía dejarlo ir… Que fuera feliz e hiciera lo que deseara sin necesidad de nadie, pues Mu demostró que no la necesitaba la ayuda de gente mal intencionada…

Shaka… Condeno a su reino… Provocando que la maldición que el príncipe Saga poseía desde su nacimiento incrementara en aquella noche, para que todos en ese lugar murieran, fueran azotados por el mal contenido en su monarca y así no lograra volver a hacerle mal a nadie más…

Incluso él, sabía que contenía maldad en su corazón y no podía permitirse volverse acerca a quien amo en ese último tiempo y le mostro que la oscuridad no era su destinó…

La pequeña luz que deseo proteger, la mando directamente a la muerte y con eso no podría vivir…

Si, Mu fue asesinado, pero él… Seguirá iluminando al mundo con su sonrisa, pues estará en un lugar hermoso, en cambio aquellos que se obsesionaron con él… Y lo llegaron amar, como codiciar… Permanecerán en un limbo de eterna oscuridad, castigados con solo ver una luz que jamás podrán alcanzar.

 

En una tarde cálida y hermosa en el santuario de la Diosa Atena, existe una pequeña duda, que está rondando en las cabezas de algunos caballeros dorados.

Bueno, realmente de solo dos de ellos, ya que a los demás poco a nada les importa esto, pero… A veces la curiosidad puede más que la prudencia.

Ambos han notado unos comportamientos ciertamente extraños de dos de sus camaradas…

Alguien que se ha ausentado mucho y otro que parece tomar más responsabilidades de las que debería, y que pensaban muchos que algún día llegaría a hacer.

Técnicamente, no debería darles importancia más de lo normal, pues… Ahora todos son libres de hacer lo que deseen, siempre y cuando no interfiera en sus deberes como caballeros dorados.

Pueden estar en pareja, salir de vez en cuando, hacer una pequeña vida más cercana a la “Normalidad” o lo que concedieren como tal…

Por ende, algunos van a ciertos lugares a visitar a ciertas personas especiales…

Todos hacen su pequeño mundo en son de aprovechar esta segunda vida que se les otorgo por su sacrificio hacia su Diosa.

Pero para algunos dorados, ciertos compartimientos y actitudes fuera del lugar de sus camaradas llegan a consternarlos bastante y aumentar su curiosidad.

Aun así, aquellos que notan estos detalles a veces van a buscar un concejo de personas que consideran más sabias y menos groseras.

Y justo esto van los dos curiosos jóvenes hombres de santuario.

Pues uno necesita concejos en el tema romántico para lograr cortejar a cierto caballero femenino de plata, la cual no es que no esté interesada en él, pero es que ese joven hombre es muy torpe en poder ser sincero con sus sentimientos y verse calmado cuando está a su lado, fuera claro de entrenamientos o combates…

Y el otro curioso, tiene un sentimiento bastante fuerte por alguien en especial, pero es incapaz de decirlo abiertamente, sin sentir que cometerá un terrible error…

Ambos como buenos amigos y a veces siendo incapaces de aconsejarse mutuamente por inexperiencia o falta de ideas, piensan que recurrir al primer dorado, es lo mejor… Ya que usualmente él da muy buenas ideas, sin tener una sonrisa de burla, al contrario siempre se muestra comprensivo al darles su apoyo incondicionalmente.

-Sé que Mu me va a ayudar. Él siempre tiene buenas ideas para solucionar problemas-

-Pero, no creo que sea buena idea ir a molestarlo solo por eso… De seguro está ocupado-

-Solo será un momento- Apenas entra al primer templo, sin siquiera prestar atención de que si ese cosmos que busca esta o no. Prefiere mejor llamar con tranquilidad antes asegurarse con algo muy conveniente -¡¡¡MU, ¿ESTÁS AQUÍ?!!! ¡¡¡NECESITO PREGUNTARTE ALGO!!!-

-Deberías primero saludar y no irrumpir en su casa de esa manera-

-Oh, vamos Aldebarán. Mu es mi amigo, no le molestará que lo llame de esta manera- Vuelve a tomar aire, para de nueva cuenta gritar -¡¡¡MU!!! ¡¡¡OYE, VEN. NECESITO TU AYUDA CON ALGO!!!-

No obtuvo respuesta alguna, cosa rara les pareció a ambos hombres, pues salvo por las veces que el carnero va a Jamir, no deja solo su templo, al menos no por competo, ya que o esta su alumno o… También… Alguien más.

-Ah que raro… Nadie responde…-

-Debe estar ocupado… O fue a Jamir o con Kiki a Rodorio… Vamos, deje...-

-¿Qué es lo que quieren?- Una silueta va saliendo de una de las habitaciones del primer templo, para dirigirse a la entrada y posicionarse de frente a ambos dorados que portan ropas civiles, para encararlos, fijarse en ellos con cierta molestia en su rostro, mientras sus ojos se encuentran cerrados.

-¿Shaka?- El segundo se sorprende a al ver justamente a ese rubio, tanto que abre sus ojos de par en par.

-¿Qué, quieres Tauro?- Le pregunta de forma retadora, al escuchar como este se sorprende más que el mismo León dorado al verlo presente en el primer templo.

-¿Qué haces aquí?- Le pregunta aun estando con sorpresa por esto, aunque no mantiene su vista tanto al frente, ni la duda en el aire por mucho.

-¿Te sorprende?- Cruzado de brazos, Aioria sonríe en forma de burla, alzando una ceja –Todos sabemos muy bien que Shaka ya no pasa mucho tiempo solo en Virgo, sino que también ahora lo puedes encontrar en Aries-

-¿Qué?- La mirada algo triste del segundo dorado se hace presenté, mientras mira a ambos, primero al quinto y después al sextos, entendiendo por que los chismes estaban siendo tan sonados en estos últimos días.

-¿Y eso les importa o les interese por algo en particular?- Un tono de molestia se refleja en su voz, primero de desagrado hacia su vecino de templo, y una pizca de enojo por la sorpresa en el segundo, pues tiene una ligera sospecha del por qué actúa de esa manera y claro que esa idea le desagrada tanto.

-Bueno, realmente a mí me da lo mismo, ya que…- Se acerca poniéndole una mano sobre el hombro al rubio y palmeándolo levemente –Desde que somos unos niños se notaba tu interés y especial trato hacia nuestro querido Mu. Pero claro, como buen amargado y malhumorado que eres, lo negabas y no querías dejarlo ver, y sin embargo… Ahora, noto que tienes más valor- Una sonrisa picara, mientras le da un codazo en las costillas al sexto –Bien hecho, amigo-

Esto en vez de avergonzar al rubio, lo único que provoca es que se enoje más, pues detesta que le estén insinuando cosas de esa índole con la persona que ama, ya que en efecto, Shaka ahora ya no lo niega, pero los indiscretos son de lo peor.

Su cosmos se nota enfurecido, por ende empuja con brusquedad al quinto para que se aleje de su perímetro, con el ceño fruncido y brazos cruzados delante de su pecho, lo encara.

-¿A que han venido aquí realmente?- Vuelve a preguntar, mientras su cosmos les dedica unas sensación fulminante a ambos –Por qué no les voy a estar permitiendo que estén hablando de mi vida, o de la vida de Mu como si fuera un chiste o chisme del santuario- Defender a quien ama es su deber jurado, pues nadie ira por allí hablando mal de Aries, o revelando los temas privados y sentimientos que los dos comparten.

-No, no estamos diciendo nada de eso, lo juramos- Aldebarán levanta sus manos al nivel de su rostro, pues sabe que están pisando territorio peligroso, además de que ahora mismo siente un pequeño dolor en su corazón, pero se aguanta este hecho.

Para Aioria esta manera de ser de Shaka no le genera ninguna incomodidad, pues en si sospechaba mucho y lo intuía en cierta medida, pero algo si llama su atención tanto, que se tiene que fijar dos veces en ello.

-Oye, Shaka ¿Qué significan esos anillos que llevas en tus manos?- Señala de inmediato las manos del Hindú, pues por lo normal esté usa ropas de mangas largas a diferencia de sus demás compañeros, los cuales prefieren aun usarlas cortas o sin ellas, y gracias al detalle de cruzar sus brazos, nota mejor esas extremidades.

Para Shaka, que se fijen en esos lindos detalles no le importa mucho –Son un regalo de Mu- Lo dice como si nada, mientras su rostro revela al fin un leve sonrojo en sus mejillas y orejas, claro que sin perder el porte serio de siempre.

-¿Un regalo de Mu?- El Brasileño vuelve a preguntar con cierta tristeza.

-¿Qué no se supone que los budistas no deberían tener algo como eso?- Le encara de inmediato, guiado proal enorme curiosidad que esto le genera –Sobre todo tú que eres como un monje ermitaño y que creías que estas banalidades no deberían ser parte de tu vida, humilde Shaka- La burla se ve en su voz, mientras también se cruza de brazos y alzando una ceja.

-¿Eso por qué te incomodaría, Leo?- Le cuestiona con astucia, mientras le dedica un semblante serio e imperturbable.

-Pues, tú te jateabas de ser siempre tan simple, humilde, serio y sin necesidad objetos banales, como el oro, piedras preciosas, joyas o cualquier cosa que pueda facilitar un poco tu vida, mucho menos de sentimientos que solo distraen de nuestro deber. Incluso decías que estar enamorado era algo tan absurdo… Que te burlaste de mis sentimientos por Marin cuando confíe en ti para pedir un concejo o aliento, mal amigo- Le recrimina este hecho, mientras fija sus ojos verdes claro con decepción en este.

Por unos segundos se queda en silencio, sin embargo esto dura poco, pues está listo para acabar al otro con sus palabras –Todos nos equivocados y cometemos errores al creer que no necesitamos ciertas cosas o sentimientos importantes, cuando en si… Son indispensables para nosotros en esta vida- Sin más se gira de lado, para darles la oportunidad de entrar al primer templo –Si no tienen nada más que hacer que solo decir tonterías, solo pase por Aries y dejen de estar molestando-

Niega rápidamente con la cabeza, para alzar su voz de inmediato –¡¡¡NO!!! ¡¡¡NECESITO HABLAR CON MU!!! ¿Dónde está tu borrego? Debo pedirle un concejo-

Eso sí que le hace hervir la sangre al joven hombre del Bindi rojo en la frente –No te permito que vuelvas a referirte a Mu de esa forma. Él está en Jamir en estos momentos, está ocupado y cuando regrese estará cansado como para estar ocupándote de tus tonterías. Además, lo que Mu me regale o no, no es asunto de ninguno de ustedes, mis creencias o el hecho de la humildad puede referirse en más de un estado- Les habla serio y desafiante a ambos, ya estando a punto de abrir sus ojos porque ya le fastidio el comportamiento de estos dos.

-Tranquilo, solo estoy jugando- Aioria de inmediato intenta disuadir al rubio, poniendo sus manos como barrera delante de su pecho -Pero cierto, es tu vida. Sin embargo… Nunca fuiste de usar nada más allá que tu ropa y calzado sencillo… Ningún presenté que se te diera era lo suficientemente bueno para a ti, claro que los que te daba Mu si los usas con orgullo-

-Ya, Aioria… Dejémoslo tranquilo… Aunque…- Alde también empieza a tener sus pequeñas dudas, que desde luego desea peguntar al rubio -¿Por qué Mu, te pediría a ti que cuides su templo últimamente, si… Era algo que me pedía a mí siempre?- Le cuestiona un tanto desafiante al Virgo.

-Eso es porque…- Olvida por completo el escándalo del León dorado, su atención se fija en el latino, que sin importar que el sobrepase por mucho en altura y anchura… Eso no le intimida en lo más mínimo, y más al saber que es alguien que a estado interesado en su persona especial, desde una corta edad.

Sin embargo los dos son interrumpidos en esa muestra de cólera y curiosidad, por un hiperactivo niño.

-Papá, ¿Qué sucede?- El pequeño Lemuriano, se acerca al rubio, curioso por lo que acontece en la entrada de Aries.

-Nada importante, Kiki. ¿Terminaste tu tarea?- Le cuestionado de inmediato esto, ya que más interesado en que el peli rojizo este lejos de estas tonterías y preste atención a sus deberes.

-Sí, pero prometió que jugaría conmigo al terminar, y ya tardo mucho- Le dice esto inflando sus mejillas, mirando con esos grandes ojos azules al mayor.

Un suspiro lanza, para asentir –Iré en un momento- Es su respuesta, mientras se da cuenta que es derrotado por un pequeño niño de solo ocho años.

Sin embargo, los otros dos se quedan sumamente confundidos, como sorprendidos y algo aterrados, por esta revelación. Que hasta a unísono lanzan un grito potente.

-¡¡¡¿PAPÁ?!!!-

Shaka de nuevo los encara serio, no abre aun sus ojos, pero si sabe dónde está cada quien -¿Tienen algún problema con eso?-

-Nos confirma entonces, que si tienes una relación amorosa con Mu, pero ¿Por qué no decirlo abiertamente? ¿Qué tiene de malo?- El Griego pregunta bastante incrédulo por algo tan bonito como es el amor y una cierta aceptación de parte de la mayoría del mundo de hoy en día- Además Kiki ya te llama papá, es más que obvio que te ganaste el corazón del alumno de Aries- Aioria es quien está más curioso por este hecho, intenta saber el porqué de muchos detalles que se especulan en el santuario.

-No es solo el alumno de Mu, sino también nuestro hijo bilógico- Declara tranquilo, mientras que como muestra de cariño, lleva su mano izquierda a la cabeza del peli rojizo niño, que al hacer eso sonrió feliz.

-¡¡¡¿HIJO BIOLÓGICO?!!!- El segundo dorado se queda por completo impactado ante esto, ya que ni siquiera él, siendo un amigo muy cercano del carnero dorado lo sabía. Por lo cual intuye que esto se trata de un invento de parte de Virgo.

Aioria por curiosidad, se acerca al niño, quedando a su nivel mismo nivel –Oye, Kiki ¿Qué edad tienes?-

-Tengo ocho años, aunque pronto cumpliré los nueve- Responde sonriente, mientras posas las manos en su cintura.

-Mu y Shaka tienen veinte… Eso significaría…- Solo necesito unos segundos para sumar dos más dos, y levantarse del suelo de solo un brinco -¡¡¡¿ESO SIGNIFICARÍA QUE LO TUVIERON A LOS DOCE Y ONCE AÑOS?!!!-

-Así sucedió- Contesta tranquilo, aunque… No le gusta para nada que estén hablando de esos temas delante del menor, que aún es bastante inocente.

-¡¡¡¿QUÉ?!!! Pero… ¡¡¡¿CÓMO?!!! ¡¡¡¿Y CÓMO ES POSIBLE QUE NO LO SUPERAS ANTES?!!!- El quinto dorado es quien sigue cuestionando todo de este tema.

-Mu, no me lo dijo y no lo culpo, por todo el caos que sucedía en esa época en el santuario… Era entendible, además… De que él y yo no teníamos en si mucho para cuidar de un bebé… Pero él encontró la forma- No da muchos detalles sobre este tema, ya que es algo que solo les concierne a ellos...

Sin embargo, el menor sí que no tiene restricciones para hablar.

-Mi mamá, siempre ha hecho bonitos anillos de oro, pulsaras muy bonitas con piedras preciosas y collares muy elegantes que vendía en el pueblo de Jamir, y gracias a eso logro hacer dinero para cuidarme, además… Que aprendió a cultivar, y también hacer jarrones, que incluso en el mercado de allá ha logrado tener una tienda para vender todo y ayuda mucho dando trabajos a otras personas- Habla tan tranquilo y sumamente orgulloso, dando algunos brinquitos, que sorprenden y enternecen a los otros dos hombres allí presentes.

-¿Enserio?-

-Wow, Mu es un empresario y nadie en el santuario lo sabía… O eso creemos…- Alza una ceja y mira al rubio con cierta credulidad -¿Ahora te ocupas de Kiki, ya que siendo un bebé e infante, no pudiste hacerlo?-

-Cumplo el papel que me corresponde, además… Ahora Mu y yo podemos ser un equipo y familia para él. Sin contar que se sigue ocupándose de sus deberes laborales ajenos al santuario, y que a ninguno de ustedes les debe importar- Refuta aquellas dudas, que refieren la labor de su amado carnero y defiende a la vez, ya que no permitirá que nadie este molestando o haciendo ver mal algo que es un digno trabajo.

-En otras palabras el sale a trabajar y tú te quedas en casa o en las casas, limpiándolas y cuidándolas, ocupándote de tu hijo y deberes del santuario ¿No?- La burla en sus palabras se encuentra, solo por la confianza que llega a tener con el rubio, para molestarlo levemente.

-¿Y eso te incumbe por qué?- Shaka se le encara al Griego, dando unos pasos al frente, pues a su ver eso no tiene nada de denigrante u ofensivo ocuparse de estas labores, al contrario no hacer nada de eso mientras la otra persona trabaja y aun así debe ocuparse del hogar, eso sí es algo por lo cual alguien se debería avergonzar.

-No, pero me sorprende… Ahora con lo que debe ganar Mu… Con razón… Tienen buenas cosas, hasta tú… ¿Dónde quedo tu vida humilde, si estas disfrutando de muchas cosas gracias a tu amorcito?-

-Lo que Mu proporciona es únicamente para que Kiki pueda estar bien, y con las nuevas oportunidades que los jóvenes de hoy en día pueden tener gracias las reglas más flexibles en el santuario, se deben aprovechar, si me da algunos regalos es cosa que solo nos importa a nosotros y si mantengo mi vida humilde o no, no es cosa de ustedes, ni de nadie más- Sus brazos cruzados sobre el pecho, serio ante su declaración y firme a la vez.

-Ay, ya veo… Pues tú eras el que no podía dar nada, por llevar una vida humilde como monje, sin ninguna riqueza o algo a su nombre, pero a Mu no se le cerró el mundo. Aun así se nota que te ama, para también mantenerte. Aunque está bien si ayudas, cuidas Aries, Virgo y a tu hijo, pues está bien, señor- Ahora se burla con confianza del otro, dándole igual lo que signifique esa relación, solo desea el jugoso chisme… Sin embrago una idea le cruza por la mente rápidamente para así sacara otro tema sobre la mesa –Si Mu hace anillos, me podría ayudar haciendo uno especial para Marin, ¿Cuánto me cobraría por uno personalizado?- Pregunta la rubio, estando el Griego sumamente interesado ahora en esa situación.

Shaka sin duda se ha quedado al inicio enfadado, pero ahora confundido por la pregunta final.

Por otro lado… Aldebarán se queda bastante serio ahora… Algo al margen de esta situación, pues de todo lo que pudiera saber, no se esperaba para nada esto... Y causa que su corazón este desquebrajándose de a poco.

Si, conocida que Mu estaba enamorado de Shaka desde hace mucho, pero no creía que ya hubiera escalado hasta este punto y más al saber que ese amor se volvió en un niño tan lindo y risueño que aprecia mucho…

Se sentía terriblemente decepcionado consigo mismo por no haber sido capaz de decirle lo que sentía antes… Pensando que pudiera a ver tenido una oportunidad aunque fuera pequeña… Pero se da cuenta que ese lugar que deseaba en el corazón de aires, ya le partencia desde hace años a alguien más, y con eso no podía competir y más si este rubio, corresponde ese sentimiento puro, haciéndose cargo de ese amor y de la nueva vida familiar que ambos decidieron tener al fin.

Solo lanza un suspiro lastimero, claro que ninguno de los adultos ahí presentes sabe de sus sentimientos a grandes rasgos…

Sin embargo…

-Lo siento mucho, señor Aldebarán- El pequeño Lemuriano, se acerca al de mayor tamaño, sonriéndole.

-Kiki… No tienes…- Quiere que se guarde ese secreto que le contó una vez en completa confianza y pensando que le podrida ayudar… Pero, el menor no lo llega a entender a tiempo.

-Le dije alguna vez que me gustaría que usted fuera mi padre, pero… Ya tengo uno y no sabía que yo existía- Alza sus hombros dándole menor importancia a esto de lo que pudiera sonar -Pero ahora todos lo sabemos y es muy bueno conmigo y mi mamá, aunque es muy serio a veces… Además, aunque se que quiere mucho a mi mamá, él quiere mucho más a mi papá. Así que… Espero que no esté muy triste por esto…- Inocentemente revela el secreto no tan bien guardado del toro, pero si un poco callado para algunos, pues no quería que eso lo hiriera peor de lo que ya lo hacía.

Aioria se queda mudo por completo ante esto, pues sospechaba algo como eso, todos lo hacían en sí, pero… No creía que Kiki fuera tan indiscreto en decirlo abiertamente y menos… Delante del rubio…

Sin embargo, Shaka claro que eso no le ha caído en gracia, sospechaba de las intenciones de ese hombre, pero no creía que le había estado hablando a su propio hijo de sus intereses por Mu.

Y si bien… Cuando todo esto paso en su adolescencia, y no habían quedado de acuerdo en que se establecería su relación por el conflicto en el santuario… No significaría que el amor y respeto se debieran perder de ninguna de las dos partes.

Por qué en cuanto volvieron a verse, sus corazones resonaron por la alegría de volverse a ver con la persona que más aman en este mundo, retomaron sus sentimientos, hablando sobre todos los temas importantes para aclarar miles de cosas, además de que Virgo se enteró de su relación con Kiki poco antes de la guerra santa de su generación. Y ahora que tiene un la segunda oportunidad de vida… No desaprovechara en intentar recuperar los años lejos de su amado y su querido hijo.

Por lo cual, cualquiera que sea una amenaza para su preciada familia de cualquier índole, no lo va a perdonar, ni permitir que alejen a los que mas ama.

-Tauro…- Habla con un tono bastante lúgubre, mientras su cosmos se nota enojado y a la vez sus pasos se dirigen hacia el Latino -¿Qué significa lo que acaba de decir Kiki?-

Siente el sudor frio que el recorre por la nuca, pues presente el peligro por aquel tono de voz –Shaka, eso…-

-¿Te atreviste a estarle llenando la cabeza de mi hijo, con insinuaciones de que podrías ser su padre y quedarte con Mu?- Abre sus ojos demostrando el enorme enfado que lleva en su ser al igual que un sinfín de celos por solo pensar que en algún punto Kiki hubiera preferido a ese sujeto antes que él.

Entiende al niño, pues no sabía nada al respecto de su origen, pero no por eso dejara pasar esto.

-Bueno… Es cierto, pero…- Puede sentir el peligro en esos ojos azules que se abren y se envuelven en enormes llamas por el terrible enojo que tiene.

-Deberías correr, ya que Sao no te perdonara eso…- Le susurra esto al Latino, mientras toma los hombres del niño y lo aleja del campo de guerra.

-Yo no hice nada malo… Solo…-

-Intentaste robarte a mi familia… Yo te voy hacer que olvides esa idea…- Su cosmos se vuelve tan visible a su alrededor que el peligro es sumamente obvio, esos ataques irán dirigidos hacia el toro dorado.

Y claro que Aldebarán, no tiene de otra, pues no le gustaría enfrentarse a Shaka, y menos que esto se haga un enorme alboroto y que Mu se llegue a enterar, así que prefiere huir por ahora…

Cosa que el rubio toma desde luego mal, pues sin siquiera tomarle importancia al escándalo que provoca a su alrededor, y cejado por sus celos, desea de una vez por todas dejar fuera de combate al toro por fijarse en su amado Mu, pues es solo suyo al igual que el pequeño niño que es el fruto del amor de ambos.

Así pues, Virgo y Tauro se alejan de la entrada de Aries, mientras dirigen sus pasos lejos del santuario, mientras Leo y el pequeño Lemuriano se quedan mirando atentos este espectáculo.

-Creo que papá se enojó mucho con el señor Aldebarán…-

-Sí, es que… Kiki no debiste decir eso…- Le regaña levemente, mientras lanza una pequeña risita, pues el espectáculo que Shaka está dando por su enojo, quien siempre se mantuvo tranquilo, sereno, implacable, humilde en sus gustos y manera de vivir, ha cambiado muchos aspectos de su vida, todo por la familia que no pensaba que tenía, y no culpa a Mu, entiende que hizo lo mejor para mantener a Kiki a salvo, estando en su lugar… Habría hecho lo mismo, ocultar ese hecho…

Además… Que ahora que Aries y Virgo son pareja y conocen absolutamente todos los aspectos de su vida, Shaka acepta y entiende que ahora Mu no puede dejar el negocio que inicio… Sin duda un verdadero hombre de negocios y muy emprendedor desde adolecente por su bebé…

Digno de admirar y el Hindú no le impedirá nada de eso, además… Que se siente feliz que Mu tenga esos tipos de detalles con él… Por lo cual intenta devolver el mismo amor con el hecho de ser responsable en los aspectos ahora hogareños y de protección a ambos templos, como al hijo de ambos, que ahora le toca cuidar y enseñarle ciertos conocimientos de su parte.

Después de todo, Kiki desea volverse un caballero dorado, y ha sido educado por las enseñanzas de Mu, ahora le toca a Virgo mostrar sus conocimientos de crianza y compartir lo que conoce, para darle más herramientas al futuro Aries.

De más joven debió seguir sus creencias de monje budista, negándose a placeres mundanos, bienes materiales, por mantener la humildad. Sin embargo ahora mucho ha cambiado y acepta este hecho. Ya que no solo privándose de objetos, deseos o joyas valiosas se puede ser humilde, existen muchas maneras de serlo.

No es por el hecho de que le convenga que sea Mu el que trabaje, solo que es el rol que tiene ahora y está bien con eso… Pues no por eso deja que uno haga todo, sino que como equipo hacen las tareas dividas, y aun así se encarga de Aries, el cual al llegar le brinda su total atención y amor a su manera.

Aun así, no perdonara a nadie que se atreve a siquiera querer interferir en su relación de ninguno modo y Tauro lo aprenderá de la peor forma.

A los pocos minutos, el pelilila llega, cansado, pero aun así con una bonita sonrisa en su rostro, apareciendo delante de su templo, mirando atento a su alrededor y topándose con su amado hijo acompañado de Aioria, ambos sentados en las esclareas de Aries.

-¿Sucede algo?- Curioso, por este espectáculo, para acercarse a los dos.

-Papá, esta persiguiendo al señor Aldebarán- Contesta tranquilo el niño.

-¿Que? ¿Por qué?- Se asombra por este hecho.

-No te preocupes mucho por eso ahora, Mu- Le resta importancia –Ahora lo importante es que te quiero pedir que me hagas un anillo especial para Marin, ya que debo ser valiente y declararme antes de que alguien más se adelante- Hace referencia al hecho de que su vecino de templo esta furico por lo que Aldebarán siente por el carnero dorado –Por cierto, felicidades, no sabía que ya eras mamá y que Shaka papá, que escondido te lo tenías-

-¿Eh?- Rojo como tomate, porque es obviamente que el León dorado se a enterado de su secreto mejor guardado, y que solo compartió con el padre de su hijo, y amor de su vida… Además que desde luego también con su maestro Shion y el caballero de Libra Dohko.

Esto sin duda se va a esparcir muy pronto por todo el santuario y sus alrededores gracias al comunicativo de Aioria.

Pero esa preocupación se le quita al sentir el cosmos de Shaka tan enfurecido y el de Aldebarán algo alarmado, pues el hecho de que le arrebaten los cinco sentidos es muy posible

Sin duda el pobre Aries llego de atender su tercera vocación, para encontrarse con un espectáculo que poco a nada entiende ahora mismo, pero se aclarara pronto, aunque deberá esperar para ello…

Ahora mismo nada en el santuario volverá a ser como antes, donde solo existía sangre, golpes, entrenamiento y una vida monótona, sino será como a cuando eran unos niños con un ambiente más familiar y claramente con tintes más románticos, pues aquellos aspirantes a dorados han crecido y forman de a poco sus propias vidas y familias… Llenando todo de alegrías, color, tranquilidad y una momentánea paz que van a aprovechar tanto como puedan.

 

-Niños, ¿Ya tienen sus deseos escritos?-

-Sí, yo ya tengo el mío-

-Aun me falta un poco-

-No veo el sentido de hacer esto-

-Vamos, es muy divertido-

-Eso lo dices porque aun eres un mocoso-

-¡¡¡NO SOY UN MOCOSO!!! ¡¡¡YA TENGO SEIS AÑOS!!!-

-Uy, pues que viejo estás, ja, ja, ja-

-Ya verás…-

-¡¡¡AAAAAAH!!! ¡¡¡MALDITO MILO!!!-

-Death Mask, cálmate por favor. Milo no quiso hacer eso-

-Siempre es lo mismo-

-¡¡¡YA ACABE!!! ¡¡¡MIRA SHURA!!! ¿Verdad que tengo una hermosa caligrafía?-

-Afrodita, se supone que no debemos leer los deseos de los demás o si no, no se van a cumplir-

-¡¡¡¿QUE?!!!-

-Sigo pensando que esto no tiene mucho sentido. ¿Por qué el patriarca pidió que todos hiciéramos esto?-

-Oh, Saga. Es algo muy lindo y divertido para los niños por estas fechas-

-Pero, nuestros mayores deseos solo son convertirnos en caballeros dorados y proteger a Atena, no le veo el por qué pensar en algo más-

-Esa es la parte divertida de esto-

-¿Qué? No te entiendo-

-Mira, no me vayas a malinterpretar, pero… El hecho de volvernos caballeros dorados, es más nuestro deber, que un deseo-

-Sigo sin entender a que quieres llegar-

-A que…- Posa sus manos sobre su pecho, apretando la hoja de papel que lleva bien guardada entre sus dedos –En el momento que cumplamos nuestro deber, proteger a la futura Diosa Atena ya siendo caballeros dorados, significara que podríamos pensar en un deseo aún más grande, una mayor motivación, un sueño que queremos cumplir a como dé lugar- Sonríe ampliamente mostrando los dientes, a la vez que presenta un ensoñamiento en sus bonitos ojos verdes cual bosque-

-Pero… Nuestra mayor y única motivación ya debería ser nuestro deber-

-Puede ser para algunos, pero… Por ejemplo para mí… Mi mayor deseo en esta vida es siempre estar a lado de mi hermanito y de ti Saga, ya que eres mi mejor amigo y te quiero mucho-

-¿Eh?- En ese instante las mejillas de aquel peli azul de catorce años se tornan rojas, por las lindas palabras del contrario, que incluso se queda por completo estático en su lugar.

-¿Mmh? ¿Saga?-

-¡¡¡AIOROS, AIOROS!!! ¡¡¡MIRA, YA TERMINE!!!- Un niño de cabellos castaños claro, se le sube al regazo al de cinta roja, sumamente feliz sujetando una hoja de color amarilla con café y estampado de leoncitos por todos lados.

-¿De verdad? Eso es asombroso, Aioria. Y ¿Qué fue lo que has deseado?-

-Eso es un secreto-

Entre las pequeñas risa de ambos hermanos, las conversaciones de otros niños, las peleas y discusiones de otros y el hecho de que uno se esté muriendo de lo nervios por las palabras de cierto aspirante a Sagitario.

Dos niños están muy atentos en escribir su mayor deseo en esos lindos papeles decorados… Que se envuelven en un inocente misterio.

Aunque estén junto a los demás, están un poco apartados por su concentración, aunque particularmente uno no se interesaba mucho en este tema como algunos de los allí presentes, pero se animó al ver el entusiasmo de un niño en específico.

Además que al pensarlo detenidamente, podría ser algo divierto y bonito, aunque jamás lo expresará abiertamente.

En cambio el niño que está a su delante, de cabellos cortos y lilas, se encuentra sumamente atento a esta pequeña tarea.

Primero se puso a pensar detenidamente en cuál era su mayor deseo, si a su corta edad sentía que ya lo tenía todo para ser muy feliz.

¿Tal vez, podría pedir más dulces?

¿Poder pasar unas cuantas horas más de juego?

¿Qué lo dejen ver las estrellas cada que lo quisiera?

¿Un peluche de borreguito?

¿Pasar más tiempo con su maestro?

O… ¿Seguir todo como hasta ahora?

Ya se siente muy feliz consigo mismo, y con el solo hecho de obtener su armadura, sería un plus a su inmensa alegría… Algo que sin duda está determinado en obtener, por ende… No temía en que no pudiera lograrlo en realidad… Ni siquiera ahora se pensaba que sus habilidades como herrero fueran pobres, entendió que cada día de práctica le proporcionaría ventajas únicas.

Por ende… Solo desea que todo siga exactamente como hasta ahora, todos felices, juntos, tal vez de repente con algunas peleas, a veces gritándose un poco y entrenando arduamente, pero tan solo recordar los bonitos momentos que todos han pasado juntos, se le hace suficiente para desear que la vida sea así por siempre.

Por ello, sonríe al ver su papel, que es de color lila claro, y con borreguitos en los bordes.

Sin duda, quien proporciono las hojas, pensó detenidamente en los gustos y personalidades de los más pequeños, por lo cual sabe que se emocionarían enormemente con solo verlas.

Quien está en su delante, de reojo se fija en él, aunque… Lo hace de manera discreta, abriendo levemente los ojos, para grabar su linda imagen lo más que pueda en la mente.

Le gusta verlo sonreír de esa manera, emocionado por algo que si le interesa hacer… En cambio él…

No siente mucho interés en ello… Lo hizo para poder pasar un tiempo con ese pequeño Lemuriano, pero… Buscar en su corazón un deseo secreto que tenga, es mucho más complicado de lo que imaginaba.

Sus enseñanzas siempre le han dictado que no debería tener esos tipos de sentimientos, de deseos, pensar que puede tener más o anhelar más de lo que ya posee, como si no agradeciera por ello…

Los Budistas no deberían pensar de esa forma, pero… Es un niño y tal vez pueda permitirse ese gesto…

Después de todo, de una u otra forma todos sus demás compañeros, aquellos aspirantes a caballeros dorados, lo están haciendo también, desde los más pequeños, hasta los más grandes… Siento estos apenas unos adolescentes…

Fija su vista a su delante… Ya no directamente a ese niño pelilila que concentrado se encuentra en su pequeña diversión. Sino, que ahora mira atento a la hoja de color amarillo suave y dibujados unos pequeños canarios en los bordes, tan bonito es ese papel, en el cual deberá escribir algo importante para él.

Si se va a la definición de un deseo….

Es un anhelo muy grande para que algo se haga realidad… Un sueño que puede o no se fácil de realizar… Al grado que lucharías y harías lo que fuera por cumplirlo…

Te brindaría la fuerza necesaria para continuar adelante, puede ser lo que sea…

Pero, para ese niño de cabellera dorada cual sol de verano, de hebras cortas hasta los hombros, mejillas algo regordetas, un Bindi rojo en la frente, y que porta unas prendas blancas y bien abrigadoras por el clima de esta temporada.

Es sencillo y humilde en lo que quiere y tiene…

Por ende… Si lo piensa, no quiere nada más… Solo, tal vez…

Pasar algo de tiempo con Mu…

Sí, podría ser ese su deseo mejor guardado… Aunque, es algo que puede hacer solo con disponerse a alejarse de su templo e ir a los entrenamientos…

Se ha dado cuenta que no todo es meditar, pero… Es difícil salir de su rutina ya establecida.

Sin embargo… Un deseo debe ser algo que aun no alcanzas, algo que no puedes hacer tan fácilmente…

Pero, ¿Podría algo que logras hacer todos los días, ser el deseo que debes plasmar para algún día volverse realidad?

Es confuso para un niño, si le busca el significado exacto a esta práctica… Aun así, Shaka lo trata de encontrar.

En su mente, ideas pasan, mas ninguna lo convence, solo… Aquellas que llevan la imagen del aspirante a Aries.

Quien en este momento esta tan feliz, mientras levanta su hoja, admirándola, evocando una linda sonrisa, para levantarse de su asiento, e ir corriendo hacia los dos adolescentes encargados de ellos.

-Saga, termine mi deseo- Ya doblada la hoja la presenta, pues ha entendido muy bien las reglas, extendiendo sus manitas con aquel papel ya listo para ser guardado.

-Muy bien, Mu- El peli azul le dedica una gentil sonrisa al menor, el cual ya se recuperó de las tiernas palabras del futuro sagitario, toma con cuidado la hojita para guárdala junto a otras que ya han sido completadas.

Ese entusiasmo, esa sonrisa, la voz, su risa, la enorme alegría que expresa al hacer algo que disfruta…

Logra que el rubio se emocione, y sienta una calidez extraña, pero bonita en su pequeño corazón.

Es difícil saber que signifique todo esto para su corta edad…

Pero, que se sonroje, se sienta nervioso y algo apenado, cada que piensa o está en presencia de Mu, en los momentos que lo toma de la mano, para invitarlo a comer, jugar, reír, o meditar hasta que ambos caigan dormidos…

Quien le ha permitido recortarse en sus piernas cuando se siente abrumado y le dedica unos cuantos mimos inocentes… Con quien ha compartido sus dulces y lágrimas, la única persona con la que puede ver las nubes cruzar el inmenso cielo azul por horas y ser lo más divertido del mundo.

Pasar tiempo con el pequeño Lemuriano, eso algo que lo llena de una infinita alegría que nunca le desearía perder…

-Eso es…- Murmura aquellas palabras, abriendo sus ojos levemente, dándose cuenta que puede tener al fin una pequeña idea de que cual es su mayor anhelo…

Ese que sin importar las circunstancias tratara de cumplir acomode lugar, porque es lo que más le ha hecho feliz en todo este mundo.

Sus manitas toman aquel pincel para niños, mojándolo en la tinta, para escribir sobre la bonita hoja de papel su deseo…

“Quiero siempre ser el mejor amigo de Mu”

“Permanecer a su lado, poder jugar con él cada que quiera, entrenar, y lograr ser el único que pueda sostener su mano para poder ir juntos a donde sea”

“No me quiero separar nunca de él”

Las pequeñas líneas describen su deseo en papel, solo las aprecia un momento, para dejar ver un color rojizo en sus mejillas, mientras baja el pincel.

Se da cuenta que lo que más quiere en este mundo, tiene que ver con el Lemuriano de mirada verde y sonrisa adorable, no lo piensa como algo romántico, sino… Como una fuerte amistad…

Es lo que conoce y cree correcto, lo que piensa que en su corazón se ha desarrollado… Aún es muy joven para darse cuenta que esos pequeños sentimientos que le hacen latir desesperado todo su ser, lo pone tan nervioso, pero con solo escuchar la voz de ese bonito niño se siente reconfortado y con un abrazo de él todo puede mejorar. Ese es el amor más puro que puede existir en este mundo.

Es aún muy inocente y tímido, como torpe en expresarse de forma correcta, pero lo ha tratado de hacer de una forma muy adorable, pidiendo en sus adentros que su deseo se vuelva realidad…

Casi todos han terminado de hacer su pequeña tarea… La han entregado a los mayores, que ya solo están acomodándolas y esperando al último de los pequeños.

Después de todo, tienen el resto del día libre y muchos ya han planeado que desean hacer para después, como algunos juegos, otros entrenar un poco y algunos quieren gastarles bromas a los pequeños… Aunque serán de seguro reprendidos por las dos manos derechas del patriarca y por él mismo.

Aunque… Últimamente pueden notar que el pontífice se encuentra bastante relajado, y gracias a esto poco los a regañado, tal vez sea por las fechas que están tan cerca y que le gusta ver tan ilusionados a los más pequeños con los bonitos colores, aromas y alegrías que se muestran solo por esta temporada del año.

Tal vez por eso, quiere hacer traer una muy vieja tradición que había olvidado hace mucho, la cual recordó al momento de limpiar algunos de sus objetos personales y muy preciados, en donde encontró viejas notas, cartas y ¿Por qué no…? Sus deseos de niño…

Recordando a la vez, que eso era algo que le emocionaba mucho hacer y le permitía darse cuenta que había cumplido la mayoría de sus deseos para esta época, pero aún le falta unos cuantos más, aunque claro que puede hacerlos realidad a esta edad…

Igual quiere ver que estos pequeños se ilusionen y emocionen por esta bonita práctica…

Sin duda por eso, ha preparado una pequeña cajita de madera, en donde guardara los deseos de sus niños, para que algún día, si es el caso… En el futuro puedan leerlas de nueva cuenta y saber si han hecho realidad sus deseos o no… E igual que entiendan que mientras tengan vida, tienen la oportunidad de cumplirlos.

-Saga-

-¿Eh? ¿Ya terminaste Shaka?-

-Si- Extiende su manita con la hoja de perfectamente doblada –Aquí tienes-

-Muy bien, contigo terminamos. Puedes irte-

-Bien-

-Vamos, Shaka- Allí está el niño que siempre lo llama emocionado –Aioria, Milo y los demás quieren ir a los arboles de frutas, vamos a alcanzarlos-

-Mmh… ¿Me esperaste?- Siempre le causa sorpresa cuando ve el Lemuriano tan feliz, afuera de cualquier salón, templo o lugar solo para esperarlo, eh ir juntos a donde deseen.

-Claro que si- Al tenerlo cerca, rápidamente le toma la mano –Vamos a jugar con ellos, ¿Si?- Sin esperar repuesta alguna, lo jala levemente para que inicie el caminar junto a él.

Nunca se podrá terminar de acostumbrar que su mano sea tomada por el lindo pelilila, que le sonría, y provoque que su cuerpo se estremezca con tan solo sentirlo cerca.

Dándose cuenta que siempre lo invita a donde sea, no lo deja solo por ninguna causa, salvo por entrenamientos lejanos al santuario.

-Está bien…- Habla suavemente, mientras sus mejillas se sonrojan cual tomate, y su boca forma una sonrisa, sus ojos deben permanecer cerrados, pero eso no impide que de vez en cuando los abra, para grabar la imagen de su mejor amigo en su mente…

Su mano que es capturada por Mu, la aprieta como su deseo inconsciente por no perderlo por nada del mundo, e igual con la libre sujeta sus blancas prendas, denota el miedo de que no pueda seguirle el paso, y se separen en algún punto.

Ni Shaka, ni Mu quieren alejarse uno del otro, porque son amigos, los mejores y ambos están conscientes de que si uno falta en su vida, esta sería sumamente vacía y muy aburrida, pues se necesitan mutuamente para sonreír y ser felices por completo.

Solo esperemos que sus pequeños deseos, esas inocentes palabras que acaban de plasmar en aquellos papes tan lindos y bonitos que se guardaran en una caja secreta, para que en el futuro, cuando sean adultos, puedan leerlas una vez más… Y saber si las han cumplido o no las han logrado…

 

-Que bonito-

-Todo está muy colorido-

-Mira, han dibujado en el suelo-

-Wow, es sorprendente… ¿Está hecho con arena y pétalos de diferentes flores?-

-Nunca antes había estado en la India-

-Es muy linda… Pero, ¿No se supone que sea así siempre? ¿Cierto?-

-Ja, ja, ja, Esa es la razón por la que mamá nos hizo limpiar Aries, Virgo y la tire de Jamir-

-Bueno, la verdad no me quejó, todo es muy lindo aquí, colorido y huele rico-

-Sí, es cierto… ¿Qué será ese olor?-

-Creo que viene de ese lugar-

-Kiki, Anshin, tengan cuidado no se alejen mucho-

-Sí mamá, no te preocupes-

-Lo siento…-

-Está bien mis pequeños. Solo tengan algo de cuidado, ¿Si?-

-Hay mucha más gente de lo normal, se pueden perder con facilidad-

-Entendido- La sonrisa de aquel adolecente se refleja con cierta confianza, delante de los dos adultos.

La más pequeña de la familia, intenta estar centrada en las advertencias de sus padres, pero sus pensamientos giran en torno al dulce aroma de lo que intuye son postres, tanta es su tranquila emoción por conocer de dónde proviene ese olor delicioso, que despierta su interés genuino, sin embargo y como buena niña que es a su ver, sabiendo que no puede dejarse llevar fácilmente por sus deseos, se aguanta en decir algo al respecto, pasando saliva y tratando de concentrarse en otras cosas del alrededor.

Pero su hermano mayor claro que nota su discreto comportamiento, pues ambos son bastante unidos y al igual que su mamá, aprendió a leer bastante bien a los dos rubios que son su familia.

-Padres, ¿Podemos ir por algunos dulces?- Sonriente, con total calma en su rostro, pidiendo el permiso de los dos adultos, mientras toma la manita de la niña.

Los padres de inmediato se miran entre ellos unos segundos, el pelilila sonríe y asiente, al igual que el rubio, el cual muestra su reconocida seriedad.

-Bien, pero manténgase juntitos y no se alejen demasiado de nosotros ¿Si?-

-Tengan cuidado-

-No se preocupen, iremos rápido-

-Volveremos pronto, padres-

Ambos menores muestran su alegría de distintas formas, mientras el pelirrojo es más espontaneó y cuidadoso en mantener la mano de la rubia tomada por la de él, la cual sonríe levemente, demostrando que su seriedad es sin duda heredada del caballero de Virgo.

En cuanto ambos se alejan, adentrándose a las multitudes que se encuentran alrededor. Los dos hombres los miran atentos como se van a su destino, se les puede notar diferentes reacciones en sus rostros, pero están bien con que sus hijos vayan un poco lejos de ellos.

-Es algo curioso-

-¿Qué quieres decir, Mu?-

-Bueno, sabemos que nuestros hijos se pueden cuidar muy bien solos, después de todo… Son ambos aspirantes a nuestras armaduras-

-Eso no quita que nos sentamos preocupados por ellos…- Su voz suena seria, su rostro igual, pero lo que dice va cargado de unos sentimientos paternales muy fuertes.

-Es verdad...- Asiente, con una pequeña sonrisa en su rostro, mientras igual se encuentra hipnotizado por las luces, lámparas de aceite, colores, olores y pequeña actividades que le parecen asombrosas a simple vista –Además, sin importar lo que pase, podemos sentir sus cosmos en cualquier parte del mundo, así que… Si por alguna razón se alejan mucho de nosotros, los podremos encontrar siempre- No niega que su instinto maternal o paternal… Como lo gusten llamar de parte de él, siempre está activo, procurando el bienestar de sus dos hermosos y valiosos hijos que tiene con el amor de su vida.

Se escucha la música tradicional, personas rezando en templos cercanos, fuegos artificiales sonando por doquier…

Esos aromas tan poderosos que atraen la atención de cualquiera que esté a la redonda, provocando que uno imagine los deliciosos manjares.

Los grupos de familias, amigos y parejas… Tanta gente se encuentra reunida en este lugar, celebrando algo sumamente importante para todos los habitantes de la India, adeptos a estas creencias y turistas…

Sin duda, trae recuerdos muy vagos a su memoria, después de todo, es justamente esta ciudad, donde él vivió parte de su infancia y entreno con su gran maestro…

Además de haber experimentado algunas cosas no muy agradables, y visto otras que ya ahora no lo persiguen tanto…

Pero, la pregunta en su mente sigue… Pues en si… No fue él quien deseo venir aquí, ni por un segundo se le había ocurrido tal idea, pero… Esta aquí solo porque su persona amada se lo pidió y contra sus deseos jamás ira en contra.

-Mu-

Sale de su entremetimiento visual, al escuchar su nombre, y se gira para ver al rubio hombre que ama –Dime, Shaka-

-¿Qué estamos haciendo aquí realmente?- La curiosidad y extrañes claro que lo hace preguntar de golpe su inquietud.

Desde luego el carnero dorado, sabe que nada le puede ocultar a Virgo, por ende solo le dedica una pequeña sonrisa, al igual que unas mejillas levemente sonrojadas –Bueno, creo que sería bueno para nuestros hijos disfrutar de una festividad de tu país, conocer las tradiciones un poco, degustar los platillos típicos y hechos por personas que los conocen a la perfección. Después de todo… También es parte de ellos… ¿No?- Su manera de explicar es sincera, pero lleva algo más oculto entre líneas, que solo demuestra con una gentil sonrisa y un brillo cómplice en sus ojos esmeraldas.

-Es verdad… Tienen derecho de conocer estas tradiciones…- Habla suave, serio, y pensativo… No lo había visto de esa forma.

De hecho, pensaba que no debía adentrarlos mucho a su cultura más allá de los entrenamientos y meditación, como algunas historias que se permitía contarles, cuando ellos le pedían que les contara más de su país, todo por mera curiosidad según él.

Sin contar un cierto miedo que aún tiene oculto en su corazón. Lo ha hablado con Mu, sin embargo eso no quita que está bastante angustiado por que su hija, la futura Virgo, pueda ser alejada de ambos para seguir el mismo exigente entrenamiento que él tuvo de pequeño, a la misma edad que ahora tiene ella…

No le gustaría que tuviera que pasar esa soledad, indiferencia y aislamiento que él debió experimentar y aceptar como la única manera para ser un digno caballero dorado de Virgo… Le sirvió para ser fuerte, poderoso en cosmos… Sin embargo con el pasar del tiempo y al aceptación de sus sentimientos, aprendió que no todo eso representa toda la fuerza de un ser humano y caballero, sino… Que algo tan hermoso como frágil puede darle el mejor impulsivo y motivo para siempre mejorar.

Por eso… Esa es ahora la nueva razón del por qué se exige más en sus entrenamientos, para seguir siendo uno de los mejores en fuerza y control de cosmos, por… Y aunque su Mu se sabe defender extremadamente bien, proteger y cuidar a su familia es primordial ahora para él.

Aunque puede decir que sus hijos algún día llegaran a ser tan o más fuertes que ellos, peor por mientras, hará todo para mantenerlos a salvo tanto como pueda y su destino se lo permita.

La nostalgia de aquellos colores, el sonido de rezos, alabanzas y risas… Los momentos en donde en su mayoría mucho pasean, comen, convive y hacen cada rito tradicional en compañía de sus seres queridos… Todo siendo cosas, que él nunca pudo hacer… No porque fuera un huérfano… Y viviera así su niñez en la India… Sino, que al ser considerado la reencarnación de Buda… No le permitían hacer ciertas actividades, ya que su grandeza podría verse afectada.

Por ende, aunque sea un oriundo de la india, jamás había podido celebrar el Diwali como el resto de las demás personas…

Por eso, no le tomaba mayor importancia más allá de una importante y sagrada celebración para su gente como tal, pero que nunca llevo a cabo y perdió el interés por ella…

Aunque, cada que se acerba la fecha, en los meses de Octubre o Noviembre, un poco de nostalgia se vía en su rostro, pero casi nadie se daba cuenta… Salvo por una persona de quien no pudo escapar cuando le hizo preguntas sobre su sentir.

-Cuando era niño, el Diwali era algo que todo el mundo esperaba. Esos cincos días en que las familias y amistades se reunían para llevarlo a cabo-

-¿En qué consiste?-

-Depende de cada región llega a ser diferente el motivo. El regreso del príncipe Rama a la ciudad de Ayodhya tras catorce años de exilio o el destierro del rey Bali, ambas bien se pueden tomar en cuenta como motivo de celebración, datando estas historias de muchos siglos atrás-

-¿El triunfo del bien sobre el mal?-

-Ya has leído algo del Diwali, ¿No?-

-Sí, estuve leyendo algunas cosas desde niño sobre ese tema, me llego a llamar mucho la atención, pero… Obviamente no era como tal mis creencias, así que… Solo tenía curiosidad-

-El triunfo del conocimiento sobra la ignorancia, de la luz sobre la oscuridad… Eso se celebra en esos cinco días, en donde en el primero se le reza a la Diosa Lakshmi, se preparan dulces, limpian por completo el hogar-

-¿Qué clase de dulces preparan?-

-Gulab, Jaleebi, Ladoo, Barfi, Kesar entre otros, lo importante es hacerlo con toda la familia, y los ingredientes en específico el azúcar, la harina, y una buen estufa es perfecto para cocinarlos-

-Se escuchan deliciosos. Pero, ¿Qué más ocurre en los demás días?-

Es incapaz de resistirse a esa curiosa sonrisa y mirada verde, que siempre lo escucha con total atención.

-En el segundo día, se decoran lámparas y se hacen varios Rangolis, los cuales son diseños que se hacen en el suelo, con arena, arroz o pétalos de flores, para que el hogar este decorado, colorido y sumamente luminoso-

-Wow, debe ser muy hermoso verlo. Y ¿Todos participan en hacer las lámparas y los Rangolis?-

Mu nunca ha dejado de ser curioso por naturaleza, se nota por como pregunta cada detalle que le parece más interesante que el anterior

-Sí, se supone que así debe ser- Un cambio en ese rostro y cosmos se deja apreciar, aunque sea muy leve

-¿Se supone?- Nota de inmediato el tono serio que Shaka ha comenzado a usar, se supone que siempre ha sido así el Hindú, pero el carnero reconoce cuando algo el molesta o entristece –Shaka, ¿Estas bien?-

-Sí, estoy bien… Solo que, yo nunca celebre en si el Diwali… Solo lo vi de lejos-

-Oh, ¿Y eso por qué?- Pregunta con cautela, tomando cuidadosamente la mano del rubio, para darle la seguridad que siempre desea trasmitirle, en que puede confiar en él cada que lo necesite.

-Sabes que pensaban, que creían que yo era la reencarnación de Buda, así que… Siempre me han tratado como tal. Pase mucho tiempo encerrado, para volverme más fuerte… Aprender lo necesario y poder comunicarme con el gran maestro- Lanza un pequeño suspiro, siendo incapaz de darle la cara al pelilila -Las pocas veces que salía, siempre era acompañado y no se me permitía acércame tanto a la gente. Y en esas fechas en particular, solo era un espectador en aquel lugar, en donde las personas se reunían para rezar, y siempre se iban con su familia, para seguir celebrando… Yo nunca conocí más allá de lo escrito en diferentes pergaminos-

El ambiente se siente algo tenso, se nota el cómo esto sí que afecto mucho al rubio, pero está bien expresarse un poco ahora, ya que ambos están solos, mientras sus dos niños están en el coliseo, el mayor entrenando, mientras la más pequeña hace lo mismo con los de su edad, siendo ellos en especial supervisados por los de bronce.

Así que están en un instante en donde los dos dorados pueden sincerarse por completo, algo que siempre hacen cuando se siente abrumados o preocupados por algo, y su amado esposo está a su lado, para darle comprensión, cariño y atención cuando más lo necesitan.

-Lamento si no te puedo darte una información más detallada, lo que se… Es lo mismo que has podido leer o saber de libros o leyendas…-

Pudo ver en esos ojos azules una tristeza y nostalgia bastante compleja, en donde claramente quiere ayudarlo a que ese dolor y pesar sea cambiado por un buen recuerdo.

Sonríe ante él, demostrándole que lo comprende, mientras toma su mano y le regala su atención absoluta –No te preocupes, Shaka… Todo lo que me puedas decir, para mi es interesante y muy educativo-

Es como si le restara un poco de importancia a ese caso, pero a la vez no del todo… Pues aun cuando se encuentran ambos atentos a la información que el rubio puede dar, algo está maquilando la mente del carnero dorado.

No lo pensó en ese momento, le dedico una leve sonrisa, y continuo narrando los preparativos para los días tres, cuatro y cinco, entendiendo que tal vez de esa forma el pesar en su corazón sobre esa festividad pueda disminuir…

Jamás se imaginó que todo lo que digo tiempo después, se volviera en una realidad.

Fue allí que en su mente, mientras el exterior seguía transcurriendo, los fuegos artificiales se escuchaban cada vez más potentes, iluminando el cielo nocturno... Provocando que piense en lo que hace cuatro días inicio…

Mu propuso a todos limpiar los dos templos y la torre de Jamir, pensó que tal vez los niños no querrían hacerlo, pero cosa rara al ver que ellos no dijeron que no, de hecho estaban muy emocionados, y claro que Shaka tampoco se negó, ama pasar tiempo con su familia, además de que Aries y Virgo no son templos que se encuentran en si sucios, en cambio la torre… Si esta algo desordenada, pero eso está bien…

Los intentos de Mu y Kiki por preparar esos dulces típicos, no siendo todos, pero si una buena parte para comer después de limpiar, tal vez el rezo hacia esa Diosa no se dio para nada, pero aun así la tradición del primer día fue muy agradable.

Intuyo lo que quería hacer su Mu, pero… Jamás pensó que sería el inicio de tantas preciosas sorpresas.

Decorar esas lámparas en el día dos, no se llevó acabo el Rangolis como tal, pero no hizo falta… suficiente fue ver, como sus pequeños se divertían llevando a cabo esas tradiciones, y él aunque torpe trataba de hacer alguna también, pero se nota que Shaka no es muy habilidoso para las manualidades, cosa que sin duda los niños heredaron ese talento de Mu.

Si bien, en la tercera parte, se pasaron el día antero en Jamir, donde platillos típicos de la India, fueron cocinados por los dos adultos, mientras sus hijos, seguían poniendo algunas cositas bonitas y tradicionales en su hogar, comieron juntos, y encendieron fuegos artificiales menos contaminantes y explosivos, para que no asuste a los animales cercanos, ni a la pequeña niña, la cual… Estaba encantada como asombrada por cada detalle que conocía de la cultura de su padre.

Y claro que Kiki no se quedaba atrás, había antes celebrados festividades típicas del Tíbet, pero… Si era la primera vez que aquellas típicas de la India las llevaba a cabo, estaba tan emocionado como la menor, pero entendía que su índole de primogénito le daba la responsabilidad de también cuidarla en todo momento.

Todo era mucho mejor de lo que alguna vez se había imaginado de niño, y lo estaba haciendo realidad con su familia… Con su amada familia formada gracias a Aries…

Fue tan lindo para padre e hijo, encender las lámparas que decoraron el día anterior en su hogar, y más al verlas iluminando la torre en aquella noche…

En el cuarto día… Esta tradición también marca el inicio de un año nuevo…

Tal vez para ellos, no sea como tal esa festividad ya que… Celebran según el calendario gregoriano en su mayoría… Pero, aquí fue un buen momento para explicarles un poco a los niños lo que es el Diwali…

Lo mejor posible y en referencia a sus conocimientos…

Para al final, desearse buenos deseos y darse pequeños regalos entre todos, nada ostentoso o costoso, sino… Cosas sencillas y bonitas que representen el inmenso amor y cariño que se tienen los cuatro.

Con las risas de sus niños, la felicidad en el rostro de Mu y su corazón llenándose de tanta calidez, más de la que ya poseía por el inmenso amor que le tiene a su familia…

Sonrió tantas veces, olvidando su seriedad de siempre, solo con ellos tres se permite demostrar su inmensa felicidad y exteriorizarla…

Y ahora… En el quinto día, están reunidos en una parte de su ciudad natal… En donde el festival es llevado acabo… Y puede escuchar, como la gente se asombra por lo que está sucediendo en ese preciso instante.

Los fuegos artificiales pararon un instante para poder ver cómo miles de lámparas empiezan a surcar el cielo nocturno, aquellas que tradicionalmente no están hechas de arcilla, si no de materiales más ligeros para poder elevarse hasta el firmamento, en el tiempo indicado.

-Es tan lindo…- Escucha la voz de Mu, la persona que sin importar el tiempo o circunstancias jamás ha dejado de amar, ni de corresponderse, que le ha dado tanto en esta vida, que lo ha hecho tan feliz, y que sin él no podría seguir adelante, al igual que sin sus dos niños tampoco podría hacerlo.

Se da cuenta del esfuerzo que ha hecho, que preparó todo para este momento, cada detalle, cada tradición, la formo a su estilo de vida… A lo que ellos pudieran dar y hacer…

Volviéndolo mucho más perfecto de lo que alguna vez imagino…

Su hogar, sus templos… Protegidos por esta tradición, nadie se mete de forma negativa o positiva de lo que haga la familia Aries-Virgo…

Shaka cree que jamás le podrá alcanzar la vida, para devolverle la enorme alegara que Mu, que solo ese hermoso hombre de cabellera lila le ha dedicado… Pero siempre hará lo mejor para todos los que ama…

Sin pensarlo, ni pedir permiso alguno, toma la mano del distraído Lemuriano, sorprendiéndolo un poco, y él cual se gira para verlo mejor, pero el Hindú, ya no con los ojos cerrados como antes era su costumbre, mira el cielo nocturna, admirando como esas lámparas se van, acompañadas de un cálido aire, y la enorme felicidad de todos los presentes.

-Gracias, Mu- Le prenuncia estas palabras, sin verlo, pero sabe que su hermoso rostro debe estar con una preciosa sonrisa y las esmeraldas que ama, brillan más que esas lámparas rojizas

-De nada. Me alegra verte feliz- Sin cohibirse por estar rodeados de muchas personas, se recarga levemente en su hombro, admirando el cielo, pero al igual tiene una idea mas –Deberíamos buscar a nuestros pequeños-

-Sí, ya se tardaron…- Con esa sonrisa única, dedica un beso en la frente del Lemuriano, provocando que su sonrojo se manifesté en las orejas.

Al igual que las mejillas del pelilila se tornan rojizas, pues esas muestras de afecto siempre son de las mejoras, tan espontaneas y lindas –Deben estar igual de entretenidos viendo las lámparas-

Y mientras caminan tomados de las manos, hablando un poco de la hermosura de esta tradición, cuidando de no pisar ningún Rangolis en el piso, van rápido para poder contemplar este evento a lado de sus dos niños.

Encontrándolos casi de inmediato, con esos dulces fritos en sus manos, mientras sin perder el cuidado, Kiki toma fuertemente la izquierda de Anshin, y así sin perderla admiran el cielo con esas lámparas de color rojo volando por doquier.

-Es muy lindo…-

-¿Verdad que si?- Mu sonríe al ver con su niña esta tan emocionada por ese precioso espectáculo.

-Wow, es mucho mejor de lo que imaginé-

-Sí que lo es, porque estamos juntos- Cuidadosamente, posa su mano sobre el hombro izquierdo del mayor de sus retoños, dedicándole una sonrisa, para de nuevo elevar la vista al firmamento.

Solo unos segundos más para admirar las lámparas que se alejan con ayuda del cálido viento de la ciudad, encantados por ese espectáculo tan hermoso, sintiendo la insuperable felicidad de estar en familia ahora mismo, no siendo primera vez para tres de los miembros, que han podido disfrutar de algunos eventos tradicionales de Grecia o el Tíbet, pero para Shaka… Era la primera vez que podía celebrar el Diwali, y era mucho mejor de lo que había pensado alguna vez, exactamente lo mismo que Kiki dijo, él lo siente.

Gracias a ellos, tiene esta oportunidad de vivir esta celebración, la tradición de las luces, el triunfo del bien sobre el mar, el saber por encima de la ignorancia, el amor ganándole al odio…

Siempre debe ser de ese modo y celebrarlo ahora será la manera de recordar que sin importar que tan difícil o mala fuera tu infancia, en tu adultez, te puedes volver en el adulto que siempre necesitaste tener a tu lado para que te enseñara todas esas maravillosas tradiciones y vivir momentos incomparables…

Por eso, Shaka Y Mu se esfuerzan siempre porque sus dos pequeños vivían experiencias únicas y preciosas para que las recuerden toda su vida…

Ese es el amor que ambos siempre se han tenido y ahora comparten con sus dos amados hijos.

-Mamá, ¿Iremos a dejar las lámparas sobre las aguas sagradas?- Kiki es quien pregunta, entusiasmado pues a notado que algunas familias se deben dirigir a ese lugar por los objetos que llevan en sus manos.

Aunque ha visto que muchos han dejan lámparas de aceite afuera de los templos, al igual que ellos lo hicieron a las afueras de los dos templos y la torre de Jamir, dejando también todas las ventanas abiertas, como puertas…

-Claro que sí, ¿Quieren ir de una vez?- Mu pregunta a ambos, ante los ojos expectantes del rubio.

-Si, por favor- Asiente la pequeña rubia, emocionada, tomando una actitud mas similar al carnero dorado, mientras junta también sus tikas en son de la enorme alegría que siente.

-Anshin ya estaba desde el primer día entusiasmada por eso- El Lemuriano pelirrojo delata a la menor, mientas ofrece uno de los Galub que compro a su padre.

Esto avergüenza mucho a la Lemuriana, pero enternece a los adultos…

-Bien, vamos…- Desde que acepto su inmenso amor por Mu, se ha permitido ser tan espontáneo como pueda… Tomando el dulce entre sus manos, agradeciéndole a su hijo mayor y colocando el postre en su boca, para que con cuidado cargué a la pequeña niña, llevándola a que se siente sobre sus hombros, para que vaya cómoda, procurando que la vestimenta de túnica roja sencilla que lleva la cubra bien.

De hecho todos portan prendas tradicionales Hindú, cómodas, no tan brillantes o excesivas de detalles como las de los demás, pero… Son con telas algo llamativas y sin mucho adorno… Todo para que encaje perfecto con el evento.

Cabe mencionar que quien los preparó fue Mu, aprendiendo a hacerlos en el proceso, para que estuvieran sin duda integrados a esta celebración tan linda.

Mu y Kiki les parece adorable como Shaka actúa y mima un poco a Anshin, mientras con cuidado come el dulce, denotando una calmada seriedad, como una sonrisa discreta.

El Lemuriano pelirrojito, igual ofrece otro dulce al pelilila, un Jaleebi, el cual fue escogido por su hermanita, para Mu.

-Gracias mis pequeños- Aunque Kiki sea ya un adolecente, sin pensarlo toma la mano de él, para ir directamente hacia el cuerpo de agua sagrado más cercano.

Al llegar a la orilla, Shaka baja a Anshin y Mu suelta la mano de Kiki, para entregarles a cada uno de sus niños lamparillas encendidas con un toque de cosmos, y para que así ambos se acerquen con sumo cuidado y supervisión de sus padres, a la orilla de ese rio, colocando las lamparillas sobre el agua, viendo como flotan y dándoles un pequeño empujón, para que se empiecen a alejar.

-Mientras más lejos vayan, tendremos mucha buena suerte en este año- Kiki le dice estas palabras a la niña, que sigue atenta a las lamparillas con un tranquiló fuego en su interior.

-¿Hasta donde crees que lleguen?-

-Mmmh… Tal vez… Lleguen hasta un punto que nosotros no conocemos aun-

-Es increíble…-

Se nota que ella está muy impresionada por cada detalle y tradición, claro que tiene cuidado de no acercarse más de la cuenta a la orilla, solo mira atenta hacia las lamparillas que tanto ellos como los demás han colocado sobre el agua, mientras se pierden en la espesura de la noche.

Esto genuinamente es cada vez más perfecto, y Shaka lo sabe muy bien.

Se acerca a Mu, sujetándolo por la cintura, para depositarle un beso en sus rosados labios de forma fugaz, dándole igual que cualquiera pudiera verlo mal. Después de todo es su esposo ante la ley de la Diosa Atena, así que las opiniones de los demás para nada le importan aunque sea de su propia gente.

Esta feliz, esta cada día más enamorado del Lemuriano que robó su corazón desde la infancia.

No importa el tiempo, la distancia, el mundo o diferentes dimensiones que existan, siempre… Por y de cualquier manera, Shaka buscara estar al lado de Mu.

No importa nada más que estar a su lado y seguir formando a su manera una linda familia, en donde el amor siempre reine. Y así de ninguna manera olvidarlo…

-Te amo Mu, te amo tanto como no tienes una idea- Le susurra estas palabras, para seguir dándole besos, ahora en la mejilla derecha, mientras admira la belleza que jamás se extinguirá en la persona que más ama en este mundo, vida y en lo que seguirá.

Aunque rojo como un tomate, acepta ser rodeado por los brazos del rubio, para acomodarse un poco en el pecho de él, mientras eleva su vista y también dedica un beso en los labios del rubio de manera algo torpe, siendo apenas un toque –También te amo Shaka, con todo mi corazón-

Sentir que están juntos, que al fin lo pueden estar sin que nada, ni nadie se los impida… Saber que ahora son una hermosa y enorme familia, los cuatro lo son, y por eso procuraran la felicidad de todos…

Pueden que sigan siendo caballeros dorados, que tengan su deber siempre con ellos, preparando a sus sucesores que son sus pequeños, teniendo en cuanta que no pueden ser suaves con ellos, porque deben estar preparados para las terribles conciencias de las batallas que libraran en algún futuro en nombre de Atena…

Pero, por esta noche, solo por este instante, los cuatro son una preciosa y normal familia, que disfrutan juntos una tradición en donde forman parte de la cultura India, como de la Tibetana.

Y todo gracias al amor de dos corazones que jamas se rindieron y sin duda nunca lo harán, en ningún momento, ni mundo… Aries y Virgo están destinados en estar juntos, siempre y cuando quienes lleven esos títulos o signos zodiacales posean los nombres de Mu y Shaka.

Esa es una de las más grandes verdades que nadie olvidara nunca.
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Gracias por leer.