One-shot de Pokémon - Everything that I want.....is you

Everything that I want.....is you

Lol por el título. La verdad soy sumamente mala con los títulos y asdfeades así, por ello...no es muy especial y deja mucho que desear.

Es la primera vez que publico un fic, o en este caso, un one-shot de Pokemon. Son parejas "originales", refiéranse a eso, porque uno de los personajes aparece en un sólo capítulo de la serie, y el otro es un...personaje original que incluyo en casi todas mis historias xD.
Tengo experiencia de ya varios años...unos dos o tres escribiendo fics, y...al parecer esta será la prueba de que he mejorado bastante cada día que voy escribiendo..

Well, mejor me dejo de palabrerías y les dejo leer.....Aquí va xD





Ya se acercaba medianoche, y un nerviosismo se apoderaba del lugar, a pesar de que había un silencio sepulcral.
Nos encontrábamos sentados en la alfombra, frente a la chimenea. Afuera nevaba, como era normal en aquella ciudad
Ella me miró a los ojos durante largos minutos, y yo igual, pero sin que nos diésemos cuenta de ello. Debíamos hacer algo; teniéndola a ella a mi lado no podía desear más en esta navidad. El sólo hecho de que estuviésemos así era un sueño.

- ¿en qué piensas? -pregunté intentando apartar los nervios-.
- Pues...realmente no sé. -dijo ella con timidez-.
- Anda, no estés tan tímida.

Me acerqué a ella y la abrazé, dejando que ella cargara su cabeza en mi pecho. Lo hizo, eso sí algo nerviosa. Noté que apretaba un poco mi chaqueta y sus manos temblaban. Su mirada estaba hacia el suelo, y algo de cabello cubría su lindo rostro.
Ambos ya sabíamos lo que nos pasaba con el otro. Me es inolvidable aquel día en el que se me declaró; mostraba otro carácter totalmente diferente a cualquiera. A pesar de ello, no ha ocurrido nada aún, mis tontas palabras de "Solamente amistad" deben de haber dañado mucho a Hanako.

- ¿qué sucede, pequeña? -volví a preguntar intentando ver su rostro-.
- Nada...no importa.

Cerró sus ojos y oprimió más su cuerpo al mío. No supe que hacer...inconcientemente acaricié su cabello suavemente, desenredando algunos de sus largos cabellos ondulados.
De pronto tomó mi mano y entrelazamos los dedos.

- Feliz navidad, Steven. -dijo en un tono de voz más alegre-
- ¿uh?

Miré el reloj, y ví que ya era medianoche. A lo lejos se escucharon, obviamente, doce campanazos. Afuera caminaban varios Stantler, y unos Delibird entregaban obsequios a la gente de la ciudad. Afuera estaba todo alegre, pero...preferí quedarme junto a Hanako...No podía dejar pasar esta oportunidad.
Ella me miró sonriente, como si quisiera algo.

- Dime, Hanako.
- El...mejor regalo que he podido recibir hoy es...estar junto a tí.

Me sonrojé de inmediato. Sentí como que una extraña sensación recorría mi cuerpo, provocándome escalofríos. Apreté levemente su mano.

- El mío igual...eres la única chica que ha estado conmigo tanto tiempo. Mi pequeña Hanakito.

La volteé hacia mí y tiernamente besé su frente. Ella igual se sonrojó y bajó su mirada. Sin pensarlo dos veces puse mi mano en su barbilla y levanté su rostro, para poder ver esos hermosos ojos cafés. Sus mejillas sonrojadas, sus labios que temblaban, sus ojos brillantes...todo ello me provocó unas ganas inmensas de besarla.

- Hanako... -susurré algo ya nervioso-.
- di-dime.
- ¿qué sucedería si te doy un beso?

Esa pregunta salió de mi boca sin que me haya dado cuenta. Hanako se sorprendió más que nunca y se sonrojó, tiernamente, como tomate.

- N-n-no sé que ocurriría, Steven. -respondió ella muy nerviosa-. Sabes que me gustas, pero siempre tú...

La interrumpí poniendo mis dedos sobre sus labios. Se sentían suaves, pero aún temblaban. Nunca habíamos estado así. Cerré mis ojos, y me acerqué a ella...estábamos a centímetros de besarnos, pero...
De pronto suena mi pokenav. Mientras intentaba sacarlo de mi bolsillo, Hanako se alejó un poco de mí, algo incómoda.
De repente se apaga la chimenea, y se escucha un fuerte ruido desde el techo. En unos segundos, cayó una pequeña bolsa de tela color rojo. Contesté el pokenav, y no era nadie. Hanako y yo miramos la chimenea con extrañeza. Nos fuimos acercando lentamente, y al abrir la bolsa...

- Mi anillo -exclamé con emoción-.

Hanako se quedó en silencio. Parecía algo confundida. Miraba una pequeña cajita con un collar hecho de madera, con un Steelex muy muy pequeño.

- Recuerdo...haber comprado este collar hace años, muchos años atrás. -dijo mirándome-. Juraba que lo había perdido. Pero...el Steelix.

Lo tomó cuidadosamente y lo miró durante unos segundos. Luego, sin decir nada, tomó una de mis manos, la abrió y puso el collar en ella. Mostró una leve sonrisa, y aún seguía sonrojada por lo del "casi beso".

- Feliz navidad denuevo, Steven.

Le sonreí, mientras tomaba su pequeña mano. "Tiene su piel bastante suave", pensé en ese instante. Le puse el anillo en el dedo anular, y luego apreté su manito.

- Falta algo más. -dije con una voz algo sexy-

Acerqué mi rostro al de ella y cerré mis ojos. Rocé levemente mi boca con la de ella...Sentía como con mucha delicadeza movía sus labios, algo fríos eso sí, por el ambiente...Posó sus manos sobre mis hombros, y se fue acercando mucho más a mí. Me sorprendió el ver lo... ¿bien que besaba?
"¿realmente esto está sucediendo", me pregunté por un segundo. Ella, que siempre se veía reservada, tímida y tranquila, estaba...tan...wow, era inexplicable.
Al separar nuestros labios, nos miramos sonrientes, esperando que el otro dijera algo. Hanako me sonrió y se puso de pie.

- Bien, será mejor que me vaya a dormir, Steven. -dijo mirándome sonriente, aún-.
- Oh...claro...
- Ven, vamos.

Estrechó su mano, y me levanté de inmediato. Ese "Ven, vamos" provocó una...sensación de nervios en todo mi cuerpo. No sabía que hacer ni que decir.

- ¿v-vamos? -pregunté apenas-
- Tú ve a dormir a tu cama y yo a la mía. -dijo sonrojada como un tomate-. ¿qué crees que estaba diciendo?
- n-n-nada, nada, Hanakito -respondí lleno de vergüenza-.

Tomó su bufanda, la cual había dejado en el sofá, y abrió la puerta de su habitación. Yo me quedé de pie observándola. Aún no podía creer lo que había sucedido. Mordí levemente mis labios, aún nervioso.

- Ah, Hanako.
- ¿uh? -preguntó volteándose hacia mí-
- Ven un momento, por favor...

Se acercó rápidamente hacia mí y me miró con sus ojos de cansancio. Mi corazón volvió a latir rápidamente.

- Feliz navidad, pequeña.

Le tomé sus manos y la miré sonriente. Ella se mostró de igual forma. Acerqué mi boca a la de ella y la besé muy tiernamente. Ella apretó mis manos levemente, mientras...íbamos apasionando el beso de a poco. Solté sus manos y la rodeé con mis brazos. Sentí su calor rodeándome por completo. Ello provocó una extraña necesidad de que se quedara a mi lado...por esta noche. Saqué ese pensamiento de mi cabeza, pues...Hanako es aún una niña, y no sería bueno para ella...hacerlo tan rápido.

- Steven, será mejor que... -intentó decir entre el beso-.
- Oh, claro. Disculpa. -dije, volviéndola a abrazar-.
- ¿sabes, Steven...?
- ¿uh?, dime, Hanako.
- No pediría nada más para esta navidad.
- oh, pequeña.

La abrazé aún más fuerte, de verdad no quería dejarla ir, pero...bueno, debía de hacerlo. Volvió a su habitación y apagó la luz. Yo me quedé sentado en el sofá, mirando la chimenea, y mirando por la ventana...afuera nevaba suavemente, y ya no se notaba el frío. De a poco fui cerrando mis ojos, quedándome dormido por completo.






¬¬ No comments...ok, acepto críticas malas. Ya quedé traumada por la inmensa crítica que recibí hace un tiempo de una user de aquí, y la verdad es que desde ese momento, he tenido miedo de publicar fics en cemzoo...y los he dejado guardados para el olvido.
Gracias por leer, Saludos!