Harry sostenía a Dobby en brazos, estaba herido y sangraba mucho, el mago le pedía que no se fuera, pero el pequeño elfo estaba feliz, había salvado a su mejor amigo. Entonces, Harry hizo único que podía hacer, pedir ayuda a su mejor amiga, Hermione Granger. —Hermione haz algo—Suplicaba el joven al borde del llanto. Pero conocía muy bien a la maga, le basto mirarla durante unos segundos para saber que no había nada que se pudiera hacer y el pequeño Dobby murió feliz y libre. La magia no podría curar esa herida.