Tony Contenido oculto: Tormenta Viniendo del este, divisan una tormenta aproximándose. Un gran nimbo oscuro que tiene toda la pinta de traer consigo una fuerte lluvia. Lo más extraño de todo es que hace unos momentos nadie lo había visto, tal como si se hubiese formado de la nada. Sacándolos de su observación de la nube, la voz de su agente de libertad condicional les habla, regresando de su exageradamente largo viaje por un boli. —Eh, veo que ya se hicieron amigos —dijo sonriendo, hasta que vio los cigarrilos en las bocas de Gina y Gervase—. ¡Hey, apaguen esos cigarros! ¡No pueden fumar durante el servicio comunitario! De pronto, un enorme pedazo de hielo gigantezco cayó en uno de los autos estacionados frente a la calzada de las escalinatas, destrozando por completo el capó del vehículo. —Ese era mi auto... —exclamó Tony con una expresión de incredulidad mientras la alarma sonaba. Entonces otro enorme pedazo de hielo cayó en el lago justo detrás de ustedes, sobresaltando a todos los presentes. A este le siguieron otros de menor tamaño que cayeron justo en la orilla. El cielo se oscureció, la tormenta estaba ya prácticamente sobre ustedes. >>¡Corran! —gritó el supervisor guiándolos hacia el Centro Comunitario. Contenido oculto: Huida Hora de correr La tormenta trajo consigo una linda lluvia de granizo, los cuales caen sobre ustedes como proyectiles del tamaño de un ladrillo. Deben hacer 4 posts narrando el largo trecho desde las escalinatas hasta las puertas del Centro Comunitario, donde podrán ponerse a salvo hasta que la tormenta pase. Pero como debemos ponerle un poco de diversión a la cosa, por cada post deberán lanzar 1 dado de 20 caras, y si tienen la mala suerte de sacar un 1... eso quiere decir que un boquete de hielo duro como una piedra le dio a su personaje en la cabeza. Aunque eso sería tener mucha mala suerte, ¿no? Seguro no les pasa nada... ¿o sí? Los personajes que tienen 20 o más de velocidad (CofcofBruno) corren el doble de rápido, así que sus posts cuentan por dos. Tal parece que James tiene el pie derecho lastimado. Deberá lanzar 1 dado de 3 caras por cada post (además de la tirada para esquivar el granizo), si le sale un 1, se tropieza y su post no cuenta como avanzado. Recompensa: No sé, ¿sus vidas? :D P.D: Lástima por los que no acabaron sus posts, se quedaron sin dinero. Así es la vida (?) Edit: Olvidé poner la tirada de condición de James, sorry. Igual eso te dió 2 posts de ventaja (?)
James Bracho La tormenta apareció de la nada y con ella el Agente de Libertad Condicional, justo cuando todo comenzaba a ir bien, un pedazo de hielo cayo sobre el auto del agente. —Ese era mi auto... —no pude evitar reir, pero luego la seriedad se apoderó de mi cuando a algunos metros cayeron dos témpanos más de hielo. —CORRAN —gritó el agente, mientras a lo lejos vimos la entrada al Centro Comunitario. Comencé a correr y cuando ví que las chicas quedaban atrás, frené un poco para ir al lado de Gina, mientras que corríamos y nos tapábamos la cabeza en un horrible intento por no ser golpeado por una de esas cosas. —Espero que la mala suerte que me persigue, no haga de las suyas ahora. —comenté, mientras corría al lado de Gina y ésta observaba el cielo mientras la adrenalina nos invadía. [1/4]
Iris "Cher" Todd. Y para la desgracia de todos, el agente de libertad lo que sea llegó contó al dichoso bolígrafo, realmente había tardado, me preguntaba si realmente estaba buscando esa cosa o había decidido distraerse de otra manera. Quería comentar alguna cosa, pero lo más extraño paso, un trozo de hielo gigante cayó del cielo, dando en uno de los autos, me habría reído, de verdad que si, pero estaba algo impactada por ello, el ruido de la alarma lo escuché muy molesto, así que cubrí con una mano mi oído. No tardo mucho en caer otro bloque de hielo, está ves dando en el agua frente a nosotros, eso fue todo, me puse de pie y sin importarme nada salí corriendo, los ruidos se me hacían insignificantes y por un par de segundos lo agradecí enormemente. [1/4]
Gina Luego de que Kathleen preguntara eso de que si íbamos a recoger basura todo el tiempo, me hizo recordar al señor, ya se había tardado mucho. Cuando iba a preguntar por él, justo apareció jodiéndome a mí y a Gervase. Luego divisé la tormenta. —Ya no es un día tan lindo... —pensé. Grité luego de que el bloque de hielo cayó muy cerca de nosotros Fue lo primero que hice, corrí y James me alcanzó. Qué lindo, creo. —¡Venga, corran, chicos! —grité volteando a ver velozmente a todos. Luego me dirigí a James— Espero que tampoco la mía venga en estos momentos —dije entre jadeos y luego reí. Segundos después, también le comenté—. Esa envoltura tuya no ayuda mucho a lo que hay dentro —dejé salir risas nuevamente. [1/4]
James Mientras corríamos desesperados, Gina lanzaba sus comentarios con gracia. — Esta envoltura solo pueden quitarlas las más atrevidas. —reí, mientras al frente golpearon dos témpanos. —Hostía —por poco nos daban. Ya nos acercábamos más al Centro Comunitario, y en la delantera se encontraba Gervase. Parece ser alguien rápido y ágil.
Kathleen Walton El primero en responder a mi comentario había sido el chico del encendedor, diciéndome que a él realmente no le desagradaba la idea de recoger basura todo el tiempo pero mientras lo hacía comenzó a acercarse un poco demasiado a mi espacio y casi por instinto retrocedí un pequeño paso hasta que noté que simplemente recogió algo que se encontraba al lado mio. Pero cuando estuve a punto de preguntarle la razón por la cual había hecho eso, siguió hablando y en una de sus oraciones reveló algo que no me esperaba, quizás esa dificultad era la razón por la cual estaba aquí y no su extraña obsesión por el encendedor que realmente solo me hacía pensar en algo relacionado a la piromania aunque realmente no quería pensar eso hasta que él mismo lo dijera. Cher fue la siguiente en dar su opinión al respecto y podía decir que estaba de acuerdo con esa opinión. Iba a dar nuevamente mi opinión cuando Tony llegó con nosotros y el cielo se llenó de grandes nubes negras pero lo ignoré, quizás solo sería una pequeña tormenta que haría que nos suspendieran el trabajo. Pero que equivocada estaba. Un gigantesco hielo destrozó por completo el auto de Tony y un grito salió de mis labios sin poder evitarlo, ¿¡qué demonios había pasado?!, otro gigantesco pedazo de hielo cayó justo detrás de nosotros y otro pequeño grito salió de mis labios, ¡esto era una maldita pesadilla! "¡Corran!" Sin esperar que me lo dijeran dos veces corrí junto con los demás para refugiarme, mis manos estaban sobre mi cabeza por mero instinto de protegerme. ¿Por qué nos estaba pasando esto? [1/4]
Gina —Hey, ¿acaso estás insinuando algo? —reí. Me pareció un poco extraño su comentario— No es el momento para esas cosas, Grandote. En eso, cayó un bloque justo al lado mío, haciéndome tropezar por la sorpresa. Solté un grito y alcancé a poner las manos para que mi cara no fuese deformada con la caída. Rápidamente intenté ponerme de pie y seguir mi carrera. [2/4]
Kathleen Walton Mientras corría realmente muerta de miedo solo podía escuchar cómo James y Gina tenían una clase de conversación como si no pasara nada estuviera pasando y aunque no entendía con exactitud la razón por la cual podían conversar de esa forma tan natural a pesar de la situación, envidiaba ese control que estaban teniendo, porque gracias al miedo que sentía lo único que cruzaba por mi cabeza eran miles de insultos hacia mi hermano por haberme metido en todo esto y que él debería estar aquí, insultos a mi misma por haberme metido en ese carro con él e insultos a mis padres por no haberme creído. Todo era malditamente irreal. —¿¡Cómo pueden hablar de esa forma, por Dios?! —grité de pronto, sin ya contenerme acerca de esa duda que tenía rondando mi cabeza, el único pensamiento lindo que tenía. [2/4]
Iris "Cher" Todd. A unos cuantos pasos de mi el chico intimidarte y Gina mantenían una pequeña platica, o así lo vi yo antes del regaño de Kat, me pareció divertido, Dulzura no me había parecido el tipo de chica que te grita por intentar aligerar un poco la situación, pero bueno, no todos somos lo que aparentamos, el ejemplo más claro era el grandote, ese si se me hizo un pan de dios, aún con su tamaño y rostro intimidarte. Un granizo que pasó casi tocando mi brazo me hizo volver a la realidad, demonios, no era tiempo para meditar sobre mis compañeros y sus mascaras de actitud, ahora era salvar mi trasero de una peligrosa y para nada esperada tormenta. Mientras corría por mi vida giré la vista a Dulzura, se veía realmente alterada por todo esto, sentí una chispa de preocupación por ella, arrugué levemente el ceño. —No te alteres, pequeña —le dije sin dejar de mirarla mientras corría —, antes de pensar en lo que el resto hace concéntrate en llegar bajo techo —agregué para luego dedicarle una ligera sonrisa, una de las pocas que tenía sin rastros de burla o diversión. [2/4]
Gervase Allym Antes de la llegada de la tormenta, la conversación siguió los rumbos que yo había trazado, el de confesar los crímenes que nos habían traído hasta aquí. Mi última participación en esta charla fue asentir con la cabeza cuando Grandote me dijo que era un gusto conocerme; mentiría si dijese que yo no pensaba lo mismo respecto a él, pues su modo de ser me inspiraba algo de simpatía. Algo. Luego, otra de las chicas me quitó un cigarrillo sin darme a tiempo a replicar, seguido de un sujeto piromaníaco que comenzó a reclamar mi encendedor. Estos hechos hicieron que frunciera ligeramente la nariz y decidiera girar el rostro. Luego llegó el tipo que nos había traído hasta aquí, ese Tony, que se encargó de rematar mi situación con un regaño por estar fumando. No tuve más remedio que deshacerme del cigarrillo para evitar problema, aunque lo apuré de un modo más bien desafiante. La colilla fue arrastrada por el viento. Ahí fue cuando vi las nubes que se aproximaban. Para cuando terminó de caer aquel bloque de hielo sobre el auto de Tony, yo ya estaba corriendo. Menos mal que los había adelantado a todos: así no se vería mi cara de espanto. [2/4] (bonus por Velocidad)
Kathleen Walton Mi corazón parecía querer salirse de mi pecho, ni siquiera sabía como seguía corriendo con esa decisión sin ni siquiera resbalarme o tropezar conmigo misma, mientras tanto esos bloques exageradamente irreales seguían cayendo del cielo y parecía que buscaban matar a alguno de nosotros, como si fuera todo una clase de juego de puntería de Dios y mientras más cerca estuviera de matarnos más puntos se obtendría. "No te alteres, pequeña, antes de pensar en lo que el resto hace concéntrate en llegar bajo techo" —¡No puedo no alterarme, Cher! —la miré y aunque no me estuviera viendo esperaba que sintiera el temor que reflejaba mi mirada —¡El cielo parece que quiere asesinarnos como si fuera un mal sueño de alguien que esta obsesionado con un videojuego y eso me da miedo! —tragué saliva algo preocupada y ante lo último hice un asentimiento mental, teníamos que llegar bajo techo, refugiarnos y esperar a que el presidente comenzara a decir que todo esto era culpa del cambio climático y se haría algo al respecto o algo que me reconfortara un poco y me hiciera sentir segura. [3/4]
Iris "Cher" Todd. Reí levemente ante la analogía usada, bueno, entendía de sobra que no era momento de reír, pero me era imposible no hacerlo, claro que al ver otro granizo pasar extremadamente cerca mío mi sonrisa se desvaneció, bien, esta tormenta se me hacía caprichosa, cada que reía un trozo de hielo estaba por caer sobre alguna parte de mi cuerpo, mejor mantenerse sería, aunque sea difícil para mi persona hacerlo. Levante la vista a mi objetivo y me sorprendí mucho al ver al aburrido mucho más adelantado, yo que creía los fumadores contaban con una pésima condición física, quizá le pregunte luego o haga alguna broma al respecto cuando llegue a un lugar seguro... si lo consigo, claro. [3/4]
Kathleen Walton El lugar seguro estaba más y más cerca y eso me ilusionaba bastante, comencé apresurar mis pasos procurando esquivar todas las partes de hielo que quedaban esparcidas por el suelo al momento de que impactaban el suelo. Sentía como mis manos temblaban y como mi vista se desviaba algunas veces hacia el cielo con temor a que un pedazo de hielo se dirigiera más y más cerca de nosotros. Por otro lado, en algún punto y sin percatarme Gervase parecía estar igual de cerca que yo de llegar a ese sitio, ese chico era realmente veloz a pesar de ser un fumador, ¿de nuevo las apariencias estaban jugando con mi cabeza o ni siquiera debía pensar en eso porque eso me parecía mas normal que esa tormenta? —¡Vamos chicos! ¡Ya están cerca! —les grité una vez que vi el techo sobre mi cabeza, mis brazos inmediatamente rodearon mi cuerpo para tratar de tranquilizarme un poco [4/4!]
Iris "Cher" Todd. Y de un momento a otro vi como Kat estaba resguardada bajo techo, sonreí ante ello, al menos ya no tendría que preocuparse por que un trozo de hielo le caiga en la cabeza o algo. Aceleré el paso, sin importarme que estaba agotada, yo llegaría a ese lugar o moriría en el intento... Bien, no me reí de ese pensamiento porque era exactamente mi situación actual y se me hacia ridículo bromear al respecto. Apenas llegué al lugar seguro coloque mis manos en mis muslo a la par que agachaba levemente el cuerpo, ese, sin duda, fue el ejercicio del año, ahora lo único que quería era recostarme en el sofá de mi casa, con una bebida en la mano y una bolsa de frituras en la otra. Levanté la vista a la otra superviviente. —¿Ves?, no había de que preocupar —comenté con una sonrisa ladeada. [4/4]
Gina Llegué de nuevo al lado de James, aunque creo que alentó un poco su ritmo que por eso lo alcancé. Pero bueno, ahora lo importante era correr para poder salvar mi trasero. Vi que Kathleen ya había llegado al techo, colocándose debajo de éste. Qué envidia. Oh... También Cher había llegado. Seguro que por mi tropezón me quedé atrás. Gervase también estaba por llegar. Genial. Me imaginé que el chico piromaníaco iba detrás de nosotros dos. Sólo quedamos nosotros 3, los únicos con posibilidades de ser aplastados por una gran masa de hielo. Decidí apresurarme, mis piernas daban pasos un poco más grandes y que parecen saltos, de esos que duelen pero que son necesarios en situaciones como ésta. Hace mucho que no corría así, la última vez fue cuando salía huyendo de un infeliz de una fiesta a la que asistí. Gracias a mi tamaño, logré perderme en el parque que estaba por ahí. Un cubo de hielo que cayó a un par de metros enfrente de mí, me hizo volver a la realidad. Lo esquivé y me dirigí con las chicas lo más rápido que podía. Ya casi, Gina, ya casi... [3/4]
Laurent La negociación no se concretó, porque el chico salió corriendo en cuanto cayó el pedazo de hielo gigante. Yo también, en realidad. Lo malo del hielo es que no podía prenderse en llamas, por lo que me resultaba poco interesante. Alguien me había dicho que el agua no se prendía porque su oxigeno ya había sufrido el proceso de la combustión. No me iba a devanar los sesos por ello... y esperaba que tampoco me los devanacen a mí. [1/4]
Gina Me concentré en mí misma para llegar con Kathleen estando ya a menos de dos metros. Realmente ya no estaba consciente de que si James seguía a mi lado o no. Simplemente en ese instante sólo existía yo, yo, yo y yo. Al estar a un salto del mismo piso que las chicas, me aventé al suelo, quizás fue la adrenalina lo que me hizo hacerlo. Descansé tirada por segundos y luego me puse de pie, arqueé mi espalda y llevé el dorso de mi mano a la frente. Mi respiración, por obvias razones, se encontraba totalmente agitada. —Dios... —susurré. [4/4]
Gervase Allym El ruido de los bloques hielo haciéndose pedazos contra el piso me iba a dejar sordo, por no hablar del viento cada vez más intenso que me sacudía los pelos y parecía tirarme de las orejas. Así y todo, pude escuchar que, detrás, alguien reía. Se oyó muy bajo y fue inmediatamente tapado por el escándalo de un granizo cayendo al lado mío. Di un respingo, molesto por el susto. Pero más me indignaba haber escuchado aquella risa. ¿Quién carajo podía reírse en una situación así? ¡Podíamos perder la cabeza en cualquier momento y uno de mis compañeros allá atrás, pasándola pipa. Como un payaso. Tuve la mala fortuna de, en plena carrera, pisar un trozo de hielo. El resbalón me hizo trastabillar de forma bastante ridícula. Por un momento temí acabar en el suelo y comenzar a despedirme de mi vida. Que era una porquería, pero no lo suficiente para entregarla a las inclemencias del tiempo. Al final, luego de segundos de tensión, logré hacer pie. Al levantar la vista vi que la chica que me había robado un cigarrillo estaba llegando. Apuré el paso. Rogaba que la suerte no me rompiera la cabezota... [4/4] (bonus por Velocidad)
Laurent Mi mente estaba extrañamente concentrada en una sola cosa, algo que no sucedía muy a menudo. Aquello en lo que mi mente ponía tanto empeño era, como no cabía duda, sobrevivir. El resto de chicos se había adelantado y sólo quedábamos yo y otro chico, que parecía trastabillar ligeramente. —¿Te ha golpeado el granizo en la pierna o algo así? —pregunté, tres cuartos en broma y un cuarto en serio. Incluso si la respuesta era afirmativa, no era lo suficientemente buena persona como para arriesgar mi vida por este chico, pero la curiosidad había podido conmigo. Me encantaba enterarme de los asuntos de los demás, incluso si no me gustaba hablar realmente de mí; por supuesto, tampoco había demasiado qué contar. [2/4]
James Gina había tropezado y caído sobre el suelo, pudiendo cubrir su rostro a tiempo, frené e iba a intentar ayudarle, pero con la misma adrenalina de la situación se levantó y corrió a mi lado, mientras que los otros ya estaban bajo techo. —Vamos, vamos! —comenté, mientras que corríamos me reí. —Por cierto, nunca es tarde para "esas cosas" —le dije, con una sonrisa en el rsotro y un tempano de hielo cayendo a mis espaldas.
