Long-fic de Inuyasha - Entre el deseo y el deber [SesshxKag]

Re: Entre el deseo y el deber (SesshxKag)

Chicas les dire que este capitulo no me gusta, pero tenia que ponerlo para aclarar asuntiyos pendientes, espero que les agrade.

CAPITULO 6​

Ella no preguntaría mas, aquello había sido su respuesta, ya que Sesshoumaru no le dejaría ver el interior de su alma expresando sus deseos, pero aun así estaba satisfecha, ahora era ella quien debía de aclarar todo con Inuyasha, pero no en ese preciso instante, porque de seguro iniciaría una pelea, además de pensar si sentía algo mas profundo que atracción por el hombre que rodeaba su cuerpo dulcemente.

Después de ese beso Sesshoumaru no la había alejado, la mantenía pegada a el en un ligero abrazo, ella se sentía en las nubes, el cuerpo de Sesshoumaru le proporcionaba un calor agradable, ella dejo reposar su cabeza sobre el pecho de el youkai.

Mientras pasaba eso el decidió algo, ya no le importaba nada, lo que pensaran todos lo tenia sin cuidado, el deseaba demasiado estar con ella sin importar que tanto lo juzgaran ... ¿Pero, la chica deseaba lo mismo?, ese pensamiento lo asalto de repente, sin duda ella se sentía atraída a el pero, no significaba que lo amara...

Todo quedo aclarado cuando ella se dirigió a el con su dulce voz diciéndole.

- Debo irme, estoy muy confundida, estaré un tiempo en mi hogar y después de que aclare lo que siento volveré, lo prometo.

-........


Sesshoumaru no dijo nada, la comprendía a la perfección, el se tuvo que deshacerse de todo su orgullo para aceptar solo para el que estaba enamorado, cuando vio que estaba en peligro una parte de el le dijo que no la salvara, que era la forma de librarse de su obsesión con la chica, y otra demasiado distinta y mucho mas fuerte le pedía a gritos salvarla y tomar posesión de sus labios nuevamente...


Kagome aparto un poco de el y mirándolo a los ojos de una manera tímida le dijo:

-Te ...gustaría acompañarme...

Por toda respuesta el se dirigió a su lado y solo salio de su boca:

- Vamos

La chica sonrió ligeramente, al parecer el intentaba tragarse todo su orgullo por hacerla feliz y eso le resultaba encantador.

Sesshoumaru pensó para su adentros que había perdido el juicio, complacerla hasta tal punto, pero le gustaba verla sonreír , le resultaba un deleite sabiendo que era por su causa.

Se dirigieron a el pozo dirigidos por ella, el puso cara de confusión, Kagome sonrió levemente al ver una mirada de duda en los preciosos ojos dorados de Sesshoumaru, el la miro directamente buscando una respuesta, Kagome le contó todo, como no pertenecía a esa época, como viajaba por aquel pozo a su hogar y como solo ella e Inuyasha podían cruzarlo.

Cuando menciono ese ultimo detalle la mirada del youkai cambio levemente, un poco de furia se asomo en sus ojos, la chica sabia que lo pensaba, ella estaría sola con su medio hermano y que por eso se ponía celoso, no podía creerlo, Sesshoumaru celoso por culpa de una humana, ella se acerco lentamente con una bella sonrisa y le dio un ligero beso diciéndole:

-No te preocupes

El se sorprendió, había notado sus celos con solo mirarlo, si antes ella le parecía única con lo que le contó lo corroboro por completo, además por primera vez Kagome lo había besado tomando la iniciativa ella, aunque a decir verdad no le había parecido un beso de verdad, fue demasiado corto y rápido.

-¿Y que piensas hacer para que eso no suceda?... Le dijo el youkai al oído con su masculina voz con un tono provocativo.

-..............


- El simple hecho de que el le hablara de esa manera hizo que se derritiera, ¿Que seria lo que le pasaba por la mente a Sesshoumaru en esos instantes?, le daba miedo pensarlo, sin mas sintió como el la elevaba con sus fuertes brazos y la sentaba en el pozo diciéndole nuevamente al oído de forma apasionada y demandante...


- Bésame

Si eso era lo que pedía no le parecía tan difícil, por un momento Kagome se asusto demasiado, aun así decidió atender la petición de el youkai de todas formas...

Acercándose lentamente a el lo beso de la misma manera que el beso anterior, aquello no complació al demonio, cuando el la besaba sentía como ella respondía a sus deseos, pero al parecer Kagome era demasiado tímida aun para besarlo de igual manera, pero el haría que se olvidara de todo ese pudor por mucho que le costara.

-No te dejare marchar hasta que me beses de verdad...

Le dijo el youkai acercándose a su cuello rozando levemente aquella zona con sus labios mientras ella se estremecía, ¿Como que no iba a dejar que se fuera?, la respiración de Sesshoumaru sobre su cuello la hacia olvidarse de su timidez, enloqueciéndola. Si lo que quería era un beso de verdad decidió complacerlo.


Tomo el rostro de el youkai con sus manos, mientras lo veía a los ojos, acerco su boca a la de el, al parecer el quería hacerle las cosas difíciles, no iba a cooperar fácilmente, así que tenia que convencerlo, deslizo sus manos por su pecho, paso delicadamente sus dedos por la nuca de Sesshoumaru y lo atrajo hacia ella, primero lo beso lentamente, y no pudiendo contenerse mas comenzó a acelerar su corazón al mismo compás de su beso cuando decidió comenzar a desinhibirse, sintiendo como el se dejaba llevar, ahora era ella la que se volvía demandante, tomo las manos de el youkai las coloco en su cintura mientras seguía unida a el por ese beso cargado de pasión, no le importaba actuar así, el liberaba un lado desconocido en ella, Sesshoumaru hacía que se sintiera como una mujer que se daba a desear... no como la chiquilla que necesitaba ser protegida, así como Inuyasha la hacia sentir...


Cuando el beso termino el la miro, la encontró con una mirada que denotaba vergüenza, con el rostro ruborizado y con una expresión que le decía que quería salir corriendo de ese lugar, sonrió levemente, ¿A caso le resultaba tan embarazoso demostrar de esa manera sus deseos?.


Ella al termino de el beso se dio cuenta de todo lo que le provocaba Sesshoumaru, no había podido contenerse, le pareció imposible en aquel instante, sin embargo no pudo evitar sentirse abochornada, que diablos le ocurría que se comporto como una libertina.


-No te burles -dijo ella mirando como sonreía al verla tan apenada, solo atino en decirle mientras bajaba la mirada -Que tu fuiste el culpable de que me comportara así.


-No es verdad, estuvo mejor- dijo el refiriéndose a su beso mientras hacia que ella elevara sus ojos tomándola por la barbilla para encontrarse con los suyos, perdiéndose los unos en los otros, mientras una casi imperceptible sonrisa de satisfacción se mostraba en su rostro, ella le parecía tan extraña y a la vez tan maravillosa, con ese beso tenia en claro que podía comportarse como toda una hembra, pero esos rubores le confirmaban que aun era demasiado inexperta.

-Entonces, ya me puedo ir - dijo ella aun sonrojada

- Si - le dio por toda respuesta, mientras la liberaba, ya que no la había soltado desde que el beso que le dio la chica había terminado.

- Volveré, te lo prometo

Ahora era el momento de que ella decidiera que sucedería...

 

Re: Entre el deseo y el deber (SesshxKag)

Muchachas, definitiva si que han esperado, al parecer me voy a tardar un poco mas poniendo las contis, pero en recompensa serán mas largas, agradezco su interés en mi fic y su apoyo es indispensable para motivarme a seguirlo, acabo de notar algo raro, nunca les dije que era el primer fic que escribo...


Capitulo 7


Estaba mas que confundida, pensó en contárselo a su Mamá pero descarto rápidamente la idea, si se lo decía a ella moriría de la pena, aunque su madre ya sospechaba algo desde el momento que llego y la vio, lucia simplemente radiante, pero decidió no intervenir en el asunto. Iría al colegio, que mas podía hacer, ya eran varios días que no ponía ni un pie por la escuela y necesitaba ponerse al corriente.

Las clases transcurrieron de un modo normal, Kagome estaba distraída pero no de la misma manera que de costumbre, suspiraba como loca, tenia una sonrisa enorme de solo pensar en el... Sesshoumaru le provocaba aquello, desde el momento que lo vio tan indefenso no pudo contenerse, necesito verlo bien, atenderlo y curar de sus heridas

Cuado lo dejo de ver anhelo reencontrarse con el, necesito de su boca, de la fuerza de sus brazos que la hacían sentirse tan cómoda y protegida, el aroma que de desprendía su cuerpo, la pasión que le demostraba...

En definitiva aquello no solo era solamente atracción, muchos otros eran guapos, pero ninguno despertaba todo eso en ella, el hecho de pensar que le pasara algo malo la atormentaba, lo hizo desde que lo encontró herido aunque no se había parado a analizarlo, la forma en que la besaba, era simplemente maravillosa, era como si por medio de ello le dejara ver su interior por unos instantes, además nunca lo habría imaginado, el tan frío, con una actitud arrogante en todo momento, por ella podía olvidarse de todo y demostrar sus emociones tan ocultas, sintiendo en la forma en la que la besaba toda la ternura, el deseo y la pasión que sentía por ella.

Por alguna razón quería darle una oportunidad a todo el asunto, estaba mas que harta de que Inuyasha la tratara como una posesión y no como alguien que decidía por su cuenta, fastidiada de que se largara con Kikyo y por sobre todo de que nunca correspondiera todo lo que hacia y sacrificaba por el...

Pero aun así no sabia si había dejado de amarlo, pero conocía la manera comprobarlo.

Decidió hablar con Inuyasha, era indispensable, lo buscaría esa misma noche...

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Mientras tanto en la otra época

-Dime, ¿que paso Inuyasha?

Le preguntaba un curioso Kitsune de manera demasiado insistente acercándose a el moviéndolo por el brazo

- ¡No me molestes Shippo!

- Si Inuyasha no quiere hablar de lo ocurrido con la Señorita Kagome no podemos hacer nada al respecto.- dijo el monje, con un deje calmado en su voz

- Además no debió haber sido grave - afirmo la exterminadora - cuando Kagome volvió no se veía triste o enojada

- ¡¡Ya basta, lo que ocurrió no le importa a nadie, no es asunto suyo!!.

- Lo se, pero por algo Kagome se fue por la noche sin despedirse, que fue lo que le hiciste perro tonto - dijo el pequeño zorrito preocupado por su amiga

Sin duda ni el mismo lo sabia, después que vio como se besuqueaba con Sesshoumaru no le había dirigido la palabra, se encontraba indignado, aunque solo fue un acto por despecho le molestaba bastante que fuera precisamente con su medio hermano, la primera noche que habían partido desapareció, se dio cuenta de ello al despertar poco después de que ella había partido a su hogar, siguiendo su aroma hasta un cierto punto en el bosque se encontró con los restos de un ogro gigantesco, el olor de Sesshoumaru estaba en aquella zona, pero también el de Kagome. Siguió rastreando su aroma, llegaba al pozo sin embargo también percibió el olor de Sesshoumaru.

Solo esperaría a que cayera la noche para visitarla en su casa, no jugaría así con el...
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Sesshoumaru se encontraba sentado a las orillas de un río, observado como la pequeña Rin jugaba con el agua...
Al parecer no podía coordinar pensamiento alguno desde que decidió que no le importaría luchar contra todo el mundo, con tal de estar con ella... la dulce chica que lo había cautivado desde el primer momento, sin embargo estaba indecisa y eso le preocupaba, si se decidiera por el en definitiva se tragaría su orgullo y le pediría que viajara a su lado... Pero si se decidía por Inuyasha ni el mismo sabia lo que pasaría...

La añoraba mucho, se había detenido solo por ella, su instinto lo guiaba a demasiado para alguien tan frágil y sin experiencia, le costaba demasiado contenerse... Pero ella lo valía, en definitiva nadie en toda su vida le había resultado tan cautivadora, todas las mujeres con las que había estado siempre buscaban algo de el, y no pasaba demasiado tiempo con ninguna de ellas después de que sus instintos quedaban saciados, peor aun la idea de tener a cualquiera de ellas por compañera era impensable... Pero Kagome era distinta, ella lo embrujaba totalmente, a pesar de ello no quería lastimarla hiriendo sus sentimientos, consideración que con ninguna de sus amantes había tenido, sin embargo la indecisión de la chica lo frustraba.

Pero faltaba muy poco para que ese asunto se resolviera...

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Había caído la noche, y la llegada de un punto crucial en su vida, Kagome debía dirigirse con Inuyasha para aclarar todo, cuando se encaminaba al pozo observo como Inuyasha salía de el, al parecer también necesitaba hablar con ella.

- Necesitamos hablar Inuyasha.

Dijo la chica preocupada por su reacción.
- Lo se, es necesario aclararlo todo.

En un tono extraordinariamente calmado para el y su personalidad.

-Estas molesto

-...............

No sabia que contestarle, estaba molesto y sin duda alguna quería una explicación a lo ocurrido.

- Antes que nada quiero decirte que me canse de todo Inuyasha

- ¿De que hablas?

- Estoy harta de ser la segunda en la vida de alguien que no me aprecia en lo absoluto.

- Eso no es verdad

Dijo con una expresión preocupada por que en el fondo sabia que ella tenia razón, siempre se olvidaba de todo y todos cuando estaba con Kikyo. Hería a la pobre de Kagome sin que se lo mereciera, y no sabia como evitarlo, el hecho de que ella estuviera cerca de cualquier otro lo ponía furioso, sin embargo no podía olvidarse de su primer amor... Kikyo

- Por supuesto que es cierto, a caso piensas que no me doy cuenta de nada

Kagome se dirigió a el de forma demasiado calmada, si reproches, sin lagrimas, como si ya no le importara. Aquello lo aturdió, como lo haría usualmente por pensar en el junto con Kikyo

-Para mi eres especial, lo sabes

Hablo el atrayéndola por medio de un abrazo que ella repelió dejándolo sorprendido

-Inuyasha quiero pedirte algo

El la miro a los ojos, en ellos se reflejaba dedición sin duda alguna y la Miko solo dejo escapar de sus labios una petición casi inaudible

- Bésame.

El no contesto nada, no lo considero necesario, tomo a la chica por los brazos y acercándose a su boca unió ambas en un beso. Su forma de besar era tan diferente a la de Sesshoumaru, Inuyasha la besaba como si fuera un objeto frágil que podía romperse, de una manera indecisa y en definitiva no le demostraba en lo absoluto nada; ni amor, ni calidez, ni siquiera simple pasión.

Cuando el beso termino, Kagome lo miro directo a los ojos, el seguía sosteniéndola por los brazos, pero de solo mirar los ojos chocolate de la chica lo comprendió todo, ese beso no significo nada para ella, si alguna vez espero que el la besara, ese deseo se había esfumado, en todo caso si sentía algo por su medio hermano y no se acerco a el por despecho. La soltó de inmediato y reuniendo todas las fuerzas de su alma le pregunto a la chica:

- ¿Piensas volver con el?

Kagome sabia a quien se refería, si volvería con Sesshoumaru, solo atino en decir:

- Así es.

El no se lo permitiría, consideraba que Sesshoumaru solo tomaba algo que le pertenecía para hacer de su vida un infierno, lo mas importante, llevándose a alguien que significaba todo para el, a la chica que estaba con el en todo momento, feliz o triste...
(N. de la autora:¡¿Por que apenas se dio cuenta?!)

- No lo permitiré - dijo el con un tono que mezclaba preocupación y celos al mismo tiempo

- No pienso pedir tu opinión, ¡¿A caso crees que necesito de tu consentimiento?! - respondió ella ardiendo en furia, como se atrevía siquiera a cuestionar su vida de esa manera

- ¡No lo ves Kagome, el solo juega contigo!

- Si me equivoco será mi error.

Contesto la Miko de forma calmada notando que el simplemente se preocupaba por ella, hablo sin rencor, dejándolo sin palabras, no tenia miedo a equivocarse con respecto a lo que confirmo con ese beso que le dio Inuyasha, en definitiva el ya no ocupaba su corazón.

- ¡Pero Kagome..!

-Por favor Inuyasha, no insistas mas

El la acerco demasiado a el por los brazos, volviendo a besarla de una manera desesperada, pero, no despertaba ninguna de las cosas que Sesshoumaru lograba con apenas un ligero roce de sus labios, por mas que el se esforzara no lograría convencerla.

El sintió como el corazón se le despedazaba, los labios de ella, que imaginaba serian dulces y calidos cumplían las expectativas, pero lejos de corresponder a los besos de el parecían demasiado indiferentes, como si ella no pudiera sentir nada.

- Comprendo...
Fue lo único que salio de la boca de Inuyasha, al parecer aceptaba su derrota.

- Gracias.

- Pero si alguna vez me necesitas, estaré ahí para ayudarte Kagome.

- Vamos...

Dijo la chica con la dulce voz que el extrañaría demasiado cuando se fuera. Ambos entraron al pozo, en definitiva cada cual tomaría un rumbo distinto, pero todo aquello se debía a la indecisión de Inuyasha, el lo sabia, ahora pagaría por aferrarse a lo que solo era un recuerdo, a Kikyo...

Ahora era tiempo de que Kagome cumpliera su promesa, volver con el hombre que comenzaba poco a poco a entrar en su corazón, aquel orgulloso y arrogante youkai que la volvía loca...