Enfermería

Alisha Welsh

Abrí un ojo al escuchar una de las voces dirigiéndose hacia mí y le dirigí entonces una sonrisa despreocupada a Anna. Mientras me disponía a responderle, sin embargo, tras haber cerrado de nuevo el ojo, distinguí la voz de alguien más y acabé por abrir ambos ojos por completo al hacerlo.

Ahí la vi, al lado de la bubblegum girl, en aquella posición claramente defensiva y no pude evitar soltar un suspiro. Tampoco iba a morderla o algo así, ¿por qué tantos nervios?

No me pasaron tampoco desapercibidas las quejas de lo que parecía ser un chico que también había en la sala. Un sujeto interesante que ya me encargaría de investigar más tarde, cuando estuviésemos a solas.

Recuperé pronto la actitud relajada y centré mi atención en Anna, sonriente.

—Todo bien, Bubbly, solo un poco cansada —respondí, arqueando una ceja después—. ¿Y tú? ¿Robando pastillas para la resaca o algo así~?

 

De acuerdo, no había que ser ningún genio de la deducción para leer el ambiente en ese momento. Anna arrugó apenas el ceño y sintió que, de alguna manera, había metido la pata. Konoe estaba incómoda, se había puesto así luego de que Alisha entrara a la enfermería, y su pregunta sólo parecía haber empeorado la situación. Welsh, por otro lado, se veía... ¿normal? Aunque no le había dirigido la palabra a Suzumiya.

Hizo memoria. La noche anterior le había dado la sensación de que algo era extraño entre ellas, ¿no? O quizá algo andara extraño con Konoe en sí. ¿No había sido extraña acaso su oferta tan repentina por besarla? Joder, y encima había aceptado.

Siguió haciendo memoria y una pequeña alerta rebotó en su cerebro. Anoche, ella y Sonnen habían quedado a solas en el aula, ¿verdad? ¿Acaso no...?

Arrugó el ceño, algo preocupada y molesta. No quería saltar a conclusiones apresuradas pero no podría tolerarlo si ese cabrón le había hecho algo, y para bien o para mal, Anna tendía a ser particularmente hostil con los hombres. Siempre esperaba lo peor de ellos.

Pero ¿cómo mierda preguntar algo así? Le echó un vistazo a Konoe antes de volverse hacia Alisha en cuanto la oyó hablarle. ¿Pastillas para la resaca?

—Ya quisiera —soltó, enmascarando bastante bien su incomodidad, y alzó las cejas—. Ah, hablando de eso, tengo juguitos para la resaca, senpai. Creo que me quedan un par. ¿Te gustaría uno?

Ah, pero ¿dónde mierda había dejado la bolsa? Intentó hacer memoria sin éxito. Probablemente se le hubiera caído en el pasillo, en cuanto tuvo el ataque. Chasqueó la lengua de forma disimulada.

—Aunque... no sé dónde me los dejé. —Se rascó la nuca y soltó una risa corta, algo apenada; eh, era buena disimulando—. ¡Pero dime de qué sabor te gustan y mañana te traigo uno! Lo prometo.

Luego observó a Suzumiya por el rabillo del ojo y le picó el brazo amistosa, sonriéndole.

—¿Vamos yendo? Nos deben estar esperando.



Asintió sobre lo del fin de semana, le parecía buena idea y no tenía nada mejor que hacer, de todos modos. Conque ya había probado un club, ¿eh? Su reacción le dio gracia y se rió sin malicia, sonriéndole luego.

—¿Una mierda? ¿No estarás siendo muy duro, Tsun-tsun?

Luego abrió los ojos, junto a un simple "¿hmm?" al oírlo, y no entendió muy bien por dónde iba hasta que... Ah, ¿ya de cacería? Qué rápidos eran los jóvenes hoy día.

Volvió a reír, esta vez algo más sonoramente, y se encogió de hombros.

—Claro —accedió con simpleza, y sus ojos se afilaron apenas—, por el precio adecuado~

¿Vólkov? No tenía idea quién era, pero podía averiguarlo. Era bueno con esa clase de trabajos, después de todo.

 

Alisha Welsh

Una risa genuina escapó de mis labios al escucharla hablar. ¿Jugos para la resaca? Pero que tierna era, my god.

—Sure, Bubbly, no puedo negarle un regalo a una chica linda, ¿no crees? —solté, sin perder la sonrisa coqueta que, como a Joey, casi se me plasmaba de manera inconsciente en aquellas situaciones—. Cualquier sabor está bien, no te preocupes~

Mientras le decía aquello, no me pasó desapercibido el movimiento de Konoe y la curiosidad fue lo suficientemente grande como para seguirla hasta ver lo que hacía.

Ah, que interesante. Usagi-chan tenía un buen grupo detrás para protegerla, ¿no? Altan, Konoe, quizás hasta nosotros tres, los desgraciados de la fiesta, intentaríamos protegerla si se daba el caso.

>>Anna-chan, no lo olvides mañana, ¿sí? It's a date~ —fue lo último que dije, levantando la mano a modo de saludo, antes de que se fuesen.

 

Alzó la vista al techo, junto a un murmullo pensativo, ante la pregunta de Natsu sobre los clubes. Le había echado un vistazo al tablón de anuncios, así que planeaba darse una vuelta por alguno.

—El de jardinería me interesaba. —Soltó una risa suave al ser consciente de la ironía de su elección y agitó las manos sin mucha premura—. Ah, no para hacer nada raro. Sólo me gustan mucho las flores y cuidar plantas en general. En el santuario siempre me encargo de ellas.

Girasoles.

Son como tú, hermano.​

Lo vio echarse sobre la cama con aquella eterna calma impresa en su rostro, y le regaló una sonrisa de ojos cerrados al oírlo. No pagaría por adelantado, ¿eh~? Bueno, se lo había esperado de Natsu. De cualquier forma, ya tenía todos los flancos preparados. No era la primera vez que hacía este tipo de recados, al fin y al cabo.

Estuvo por afirmar cuando advirtió la presencia de aquella chica acercándose. No la conocía de nada, sólo parecía ser amiga de Anna y se había apresurado tras ellos ante el ataque. Debía ser una buena chica, ¿verdad? Todo en ella le daba esa sensación; Kohaku solía manejarse así, se movía entre las personas según el aura, las energías que percibía de ellas. No era capaz de ponerlo en palabras, quizá lo hubiese pulido con los años pero al fin y al cabo se trataba de un talento nato. Permaneció allí, con su expresión relajada, mientras escuchaba el sermón que le daba a Natsu y tuvo que esforzarse por ocultar la diversión explícita que amenazaba con aparecer en su rostro. Era la primera vez que veía a una jovencita hablándole así a Gotho.

"La chica te dijo que no."

Bueno, se lo había imaginado, por eso tenía cartas preparadas para todos los escenarios bajo la manga. Contaba con esa clase de picardía.

De cualquier forma, su presencia pasó totalmente inadvertida y cuando la muchacha se marchó, llevándose a Anna consigo, Kohaku se permitió esbozar una sonrisa algo más ancha y volverse al oír a Natsu.

—Pero bueno, Tsun-tsun, ¿una niña tocándote los cojones? Eso es nuevo~ —lo molestó, con aquel tono suyo que exudaba tanta inocencia, y ya que los habían escuchado con tanta claridad bajó aún más el tono de su voz ya de por sí suave—. Esta Vólkov, dime algo más. ¿Cómo luce?

Contenido oculto

con Annita roleo en el pasillo directamente uwu

 

Lo dejó hablar, no era su lugar ni costumbre sermonear a otros y sabía que con Natsu, particularmente, tendría de poco a nulo sentido. No era novedad que alguien le colmara la paciencia, que de por sí escasa era. Permaneció allí, con su habitual sonrisa, y fue haciéndose una imagen mental de las características que el muchacho especificaba sobre la dichosa Vólkov. Soltó una risa suave. ¿Buenas caderas? ¿De qué le podría servir eso?

—Ya, fíjate que se te baja la bragueta, Tsun-tsun —bromeó.

Luego volvió a despotricar contra la muchacha de cabello oscuro y lo dejó hacer, mientras se incorporaba. Anna y los demás ya debían haber llegado a la cafetería, ¿no? Más le valía apresurarse si quería llegar a comer algo.

¿Quizá la enana le guardara algo? Siempre había sido estúpidamente generosa con esa clase de cosas, como si hubiera crecido con cien hermanos y compartir fuera para ella tan sencillo como respirar.

—Claro, cuenta conmigo. Te hablaré cuando esté listo.

Le guiñó un ojo, divertido, y en su camino hacia la salida se tomó el tiempo de volver la mirada hacia Alisha, sonreírle y despedirse con la mano. Puede que tuviera sus deslices morales (y legales) pero la cortesía estaría siempre a la orden del día.

 

Alisha Welsh

Finalmente el chico de pelo azulado también salió de la enfermería y, por supuesto, le devolví el saludo con una sonrisa. Era amigo de Anna-chan, ¿verdad? Sea como fuere, me gustaban sus vibes, parecía buen chico.

Noté la mirada del chico que aún estaba en la Enfermería, riendo ligeramente. Pero bueno, cariño, que no es tu Academia~ Le dirigí una mirada de reojo, y el leve rumor de la música me hizo sonreír.

Ah, estaba en el mood de jugar un poco.

Me levanté de la cama, ajustándome el uniforme finalmente mientras lo hacía, y me acerqué hacia la del chico, sentándome en el borde de la misma. Le dirigí una rápida mirada antes de centrar mi atención en su mano, llevando un dedo hasta el borde de uno de sus tatuajes y recorriendo las líneas del mismo con la yema.

—Lindos tatuajes~

Contenido oculto

ándale Ali-chan, que poco aprecio por tu vida tienes (?)

 

Alisha Welsh

Una carcajada genuina escapó de mis labios al escuchar su comentario, encogiéndome de hombros segundos después. Seguí tanteando su piel hasta que no me quedó más alternativa que separarme y girarme para mirarlo, con los ojos entornados.

—¿Eh? ¿Eso crees~? —pregunté, con un tono inocente claramente fingido—. Pero... ¿qué puedo decir? No puedo privar al mundo de ellas, ¿no te parece? —murmuré lo último mientras me inclinaba ligeramente.

Ladeé la cabeza para mirarlo mejor y me removí un poco, haciendo que mis piernas rozasen entonces los dedos de la mano que había liberado segundos antes.

 

Alisha Welsh

La respiración se me cortó durante un instante al sentir su mano sobre mi pierna, de una manera que no me había esperado. Por supuesto que lo había provocado, pero no esperaba que el agarre fuese tan fuerte, que doliese.

Pero mierda, la sensación de dolor se acabó mezclando con una extraña ola de placer que me dejó terriblemente excitada.

Tanto así que tumbarme sobre la camilla no debió resultarle ningún trabajo. Acabé por suspirar cuando se alejó después de aquello, aunque no tuve problema en recuperar la sonrisa confiada cuando me miró desde la puerta.

—Eso ya lo veremos, sweetheart~

Otra risita escapó de mis labios mientras lo veía alejarse. Ah, ¿de verdad se pensaba que iba a dejarlo estar tan fácilmente? No después de aquello, desde luego.

Doblé la pierna hasta que pude ver mejor la marca rojiza que me había dejado, acariciando la zona con mis dedos y una sonrisa plasmada en mis labios. Interesante.

Después de unos segundos saqué mi móvil de la falda y busqué el número de Joey para mandarle un mensaje.

"Hey, ¿dónde estás? Estaré en la enfermería si no tienes nada que hacer~"

Añadí el emoji de un guiño y dejé caer el teléfono sobre la cama, suspirando, mientras cerraba los ojos. All in all, había conseguido quedarme sola y eso era un win-win para mí.

Contenido oculto

Yo, kinky bitch, chill yourself jeez (?)

Gigi Blanche te etiqueto pues para que sepas pero no hace falta que respondas ni que vengas ni nada si no te apetece, dw. Es que la pendeja seguramente le avisaría so eso uwu

 

El móvil vibrando literalmente contra su cara fue lo único capaz de despertarlo. Podía haber parecido una vorágine de energía esa mañana, inmune a la resaca y todo lo demás, pero las baterías se le habían puesto en rojo más o menos a mitad de jornada y para la hora del receso... estaba muertísimo. Ni siquiera se molestó en buscar un lugar más cómodo, usó los brazos de almohada y cayó redondo sobre su pupitre.

Soltó un gruñido bajo y se rascó la mota de cabello desordenado, intentando enfocar el mundo a su alrededor. Joder, qué sueño. Sus dedos buscaron el móvil a tientas y lo desbloquearon sin el menor esfuerzo, arrugando el ceño al recibir el brillo de la pantalla. ¿Resaca tardía? ¿O sólo estaba cansado?

Pero bueno, Alisha tenía una especie de poder especial o quizá fuera un poder compartido por las mujeres en general, al cual Joey no podía negarse. Aún gruñendo y todo como un animal molesto, estiró las piernas, se incorporó y empezó a caminar hasta la enfermería.

Atravesó la puerta en medio de un amplio bostezo y se dejó caer en la cama continua a la de Welsh, boca arriba. Soltó un suspiro.

—Estoy muerto, Ali-chan, creo que morí y no me di cuenta —balbuceó, viendo el techo de a ratos, cuando sus ojos no se cerraban; así y todo, se las ingenió para sonreír ligeramente divertido—. ¿Qué tal el receso, linda? ¿Le sacaste provecho~?

 

Contenido oculto

Me voy a ver una peli con Juanjo so estaré un par de horas desaparecida pero TENÍA que hacer este post antes so if you'll excuse me

Alisha Welsh

Para cuando Joey apareció por la puerta, era yo la que se estaba quedando prácticamente dormida. La cama estaba tan mullida, hacía calorcito y encima nunca había nadie, era el sitio perfecto para echarse una siestesilla... sobre todo con la resaca que seguía llevando y había vuelto a atormentarme una vez el silencio se apoderó de la habitación.

Cuando escuché al chico tirarse a la cama contigua, me levanté sin pensar demasiado y prácticamente me arrastré hasta tumbarme a su lado, rodeándole con mis brazos mientras me hacía hueco para acurrucarme mejor, con la cabeza apoyada sobre su pecho.

—Mhm... —asentí ligeramente con la cabeza pero no tardé en hacer un mohín infantil y hablar con un tono de queja parecido—. Pero ahora me acaban de rechazar, bu~

Contenido oculto

I'M: SOFT

 

Siquiera abrió los ojos cuando la escuchó moviéndose y, luego, su propio colchón se hundió. El cuerpo de Alisha era cálido y la rodeó con un brazo mientras la chica se acomodaba sobre su pecho. Su pulgar acarició vagamente la espalda femenina, suave pero constante.

—¿Te rechazaron? —Se permitió soltar una risa baja, que vibró en su pecho—. ¿Quién puede ser tan idiota?

Abrió los ojos un instante, y su voz se imprimió con cierta nota de circunstancia claramente fingida.

—Espera, ¿eso significa que fui tu plan C? Ali-chan, how mean~

Contenido oculto

wey qué soft

 

Alisha Welsh

Reí ligeramente al escuchar su propia risa, encogiéndome de hombros.

—Un tipejo con tatuajes, parecía nuevo~ —respondí, recuperando mi tono de voz normal.

Me incorporé después, levantando la cabeza con una sonrisa culpable para mirarlo, depositando un rápido beso sobre sus labios antes de depositar mi barbilla sobre su pecho y mirarlo desde ahí, pestañeando un par de veces rápidamente.

>>Claro que no~ Tú no entras en la misma categoría que ellos, tonto~