Capitulo 1: Las lágrimas de una Hyuga. Ella estaba en su habitación, llorando, sus lagrimas caían en la cama. Esa estupidez de la chica enamorada, la que se sonrojaba con facilidad ¡Que fastidio cuando sientes algo por una persona! Mientras que esa persona cuando le dices lo que sientes te rechaza. Era muy doloroso, la rechazó sin tomar en cuenta sus sentimientos ¡Maldito Sasuke! ¿Cómo se le ocurrió hacer algo así? Cansada de llorar se pone su ropa y va a la casa de una vieja amiga, hace meses que no la visitaba pero aunque se moleste por eso necesitaba el apoyo emocional de una buena amiga. El trayecto fue largo pero valió la pena llegar. Ella, con sus ojos humedecidos por las lágrimas llega a la casa de su amiga Canna, sin pensarlo dos veces toca la puerta suavemente. Abrieron la puerta, aquella persona la miraba rara. --¿Hinata? --Dijo aquella mujer. --Canna... --Dijo ella en un tono triste. --Pero... ¿Qué te ocurrió? Ven, pasa a mi casa. La Hyuga entró al interior de la casa y se sentó en uno de los muebles, ella le contaba a su amiga lo que ocurrió mientras que preparaba el té para calmar a Hinata. --Con que eso fue lo que ocurrió... --Dijo Canna mientras le daba el té a la peli azabache-- No me sorprende, Sasuke es un tipo frío y yo que pensaba que estabas enamorada de Naruto. --Bueno ¡Si, lo estaba! Pero no se como llegué a enamorarme de Sasuke. --El amor, quien lo entiende siempre da vueltas y vueltas y terminas enamorada de la persona que menos esperas. Hinara y Canna siguieron conversando y riendo por ciertos comentarios. Mediante la conversación la peli azabache se da cuenta de lo recogida que estaba la casa. --La casa esta casi vacía, ¿Te vas a mudar? --No Hina, me voy a Amestris. --¿Amestris? --Si, es otro mundo se utiliza la alquimia, de vez en cuando voy allá hay gente adorable pero no todos los son. --Vaya, ojalá y tuviera la misma suerte que tu. --No sería tan mala idea. --¿A qué te refieres? --Dijo Hinata confundida. --Que tal si vamos a Amestris las dos juntas. --Pero... la ropa... --No vas a necesitar esa ropa en Amestris, tengo algunas cosas que te puedan servir. Hinata sube a la habitación de su amiga y ella le da algo de ropa. Hinara se probó un vestido lila y unas zapatillas negras. Esa ropa era algo rara para ella, nunca se había puesto cosa semejante. --¡De que hablas Hinata! Esa ropa te queda preciosa. --Dijo Canna con estrellitas en sus ojos. --Bien bien ok, si dices que me queda bien es suficiente para mi. Canna enrolla una gran alfombra y abajo de esta había un círculo de transmutación, Hinata estaba confundida ¿Qué era esa cosa? Canna le pidió a la Hyuga que pusiera las manos en el círculo junto con ella al hacerlo aquella habitación empezó a hacerse dorada, entonces de un abrir y cerrar de ojos ya estaba en frente de una puerta que empezaba a abrirse lentamente. --Hinata --Dijo su amiga-- Una de las leyes de la alquimia son, si quieres obtener algo debes que sacrificar algo del mismo valor, si me permites voy a dar algunos de tus recuerdos y esos serán desde que empezaste a sentir algo con Sasuke hasta ahora, no te preocupes, vas a seguir siendo Hinara Hyuga y te acordarás de todo menos de aquel suceso. La peli azabache estuvo de acuerdo, con lo que Canna le dijo y entonces unas manos negras se la llevaron hasta el interior de la puerta. Después de eso Hinata despierta en medio de un bosque, estaba un poco mareada, pensaba que todo era un sueño pero luego vio a Canna que se acercaba a ella. --Al fin despertaste, bueno será mejor que te levantes ya llegamos a Amestris. --¿Llegamos? --Dijo Hinata. --Bueno si, solo estamos en un bosque aun nos falta mucho por recorrer. --Esta bien.
Capitulo 2: La llegada a Amestris. Ambas mujeres fueron caminando por el bosque sin ninguna prisa, ya estaban cerca de la ciudad pero Canna se detuvo y le dijo a Hinata (En esta historia Hinata tiene 17 años). --Hitanta, quiero que me prometas algo. --¿Qué ocurre Canna? --Quiero que no uses tu Byakugan en Amestris, y tus Jutsus lo pueden confundir con alquimia pero no los uses tan frecuentemente. --Esta bien. Y dicho esto siguieron caminando, cuando llegaron a la ciudad Hinata se quedó sorprendida, todo era absolutamente nuevo para ella ver los autos y los edificios todo era tan diferente nunca había visto estructuras como esas. Tanto deseaba activar su Byakugan para ver cada detalle de los edificios a profundidad pero le prometió a Canna no usarlo mientras que estuvieran en Amestris. Cada vez que se adentraban mas en Central mas sorprendida quedaba, hasta que perdió de vista a su amiga. Pero ella no estaba pendiente a su mejor amiga solo quería ver la ciudad. Mientras caminaba accidentalmente se topa unos sujetos vestidos de azul armados con rifles cerca de un puente. Hinata tenia curiosidad así que solamente se quedó a cierta distancia para que no la pudieran ver. Entonces alguien choca en ella, y la peliazabache termina en el piso. Sacudió su cabeza luego lo vio fijamente, era de pelo rubio y ojos pardos, era muy apuesto lo cual causó un leve sonrojo en la Hyuga. --Lo siento, ¿Te encuentras bien? --Dijo el chico dándole una mano para que ella se levantara. --S... si estoy bien. --No deberías estar aquí, es un lugar muy peligroso para una chica tan linda como tu. --Es que... soy nueva en la ciudad y me dio curiosidad al ver tantos sujetos con esos uniformes. --¡Eres nueva en Central! ¿De dónde vienes? Esa pregunta puso a Hinata muy nerviosa ya que no sabía que responder, no podía revelar lo de Konoha ni nada por el estilo y eso fue lo primero que le advirtió Canna. --Lo siento, creo que fui un entrometido. --Dijo el rubio rascándose la nuca. --No lo fuiste es que... --Dijo ella jugando con los dedos. --Si me permite decirlo, se ve muy linda cuando juega con los dedos. --Dijo él un poco sonrojado-- Por cierto soy Alphonse Elric mucho gusto. --Yo... este... yo soy Hinata Hyuga. --Dijo ella con un leve ardor en las mejillas. Mientras ellos hablaban una voz los interrumpe en su conversación. --Hinata, deja de coquetear y vamos a casa me tenías loca estaba buscándote por toda la ciudad. --Sin duda era la pelinaranja reconocida como Canna. --Canna... --Dijo la Hyuga mas roja que un tomate. --Bueno, mucho gusto en conocerte Hinata que tal si salimos un día de estos para enseñarte la ciudad. --Dijo Alphonse. --Que tal mañana en este mismo sitio a las cuatro de la tarde. --Me parece bien, tengo que volver al trabajo. Entonces mañana a las cuatro. Alphonse se fue a su trabajo con los militares y Hinata fue rumbo a su nuevo hogar junto con Canna. Mientras tanto, Alphonse estaba en una investigación de un asesinato, no era cualquier asesinato los cuerpos aunque tenían heridas lo que mas provocó escalofríos a otros eran que aquellos cuerpos no tenían rostro, era como si les quitaran la personalidad. Los militares nunca habían visto algo así, ni siquiera Mustang que era el que estaba mas sorprendido sin duda podía ser obra de los homúnculos pero ¿Cómo lo hicieron? ¿Tienen un nuevo aliado? Al terminar las investigaciones Edward se quedó con Alphonse y le dieron un recorrido a la ciudad antes de irse al cuartel. --Al, ¿No crees que el caso de hoy fue escalofriante? ¿Qué clase de ser puede hacer eso? No creo que fueran los homúnculos, conociendo ya sus habilidades ninguno puede hacer cosas similares a esas. --Tienes razón hermano parece que tienen un aliado y sin duda ese "alguien" es mas poderoso que ellos. En otro lugar lejos de los hermanos Elric, donde la luz de la luna no alcanza y la oscuridad se hace mas densa, se encontraba un tipo de pelo negro piel mas blanca que la mismísima nieve y ojos de serpiente, si, era el mismísimo Orochimaru, el nuevo líder de los homúnculos. --Este tipo, no puede ser un humano. --Susurró envidia a Lujuria. --Tienes razón, ¿Qué tipo de humano puede hacer esas cosa? Puede resucitar a los muertos. --Dijo ella. --Lujuria ¿Me lo puedo comer? ------------------------- Bueno espero que les haya gustado El próximo capítulo se titula: ¿Una cita?
Capitulo 3: ¿¡Una cita!? (Parte 1) A la mañana siguiente Hinata se levantó muy animada esperando a que se hicieran las cuatro de la tarde, de vez en cuando miraba el reloj pero era lo mismo el tiempo pasaba muy lento, entonces decidió dar un paseo. La Hyuga coge un cuchillo y se hace una pequeña cortada en el pulgar dejado caer un poco de sangre hace algunos sellos: ¡Jutsu de invocación! Aparece un lobo de color gris tenía una correa en el cuello y otra en la para izquierda. El lobo ve a Hinata y se pone muy contento. --Hace mucho que no la veo Hinata-Sama. --Hiku, ¿Qué tal si damos un paseo por Central? Ah, y no hables a menos que yo te lo diga ¿Entendido? --Si, Hinata-Sama. Ambos se fueron a dar un paseo por central, bueno Hiku le enseñaba parte de la ciudad ya que había venido varias veces con Canna. Canna fue la que le enseñó a Hinata a hacer Jutsus de invocación ella simplemente puede invocar a los lobos y uno de ellos es Hiku que se hizo amigo de Hinata. La Hyuga y el lobo iban caminando por las calles hasta que se encontró con frente a cierta persona que le hizo hervir las mejillas levemente. --¡Hinata! Que sorpresa verte por aquí. --¡Alphonse! Yo... solo daba un paseo con mi amigo Hiku es un lobo gris. --¿Segura que no muerde? --Dijo Alphonse mirando al lobo con recelo. --No te preocupes, si mordiera no estuviera paseando con él. --Dijo ella con una amplia sonrisa. "Niño estúpido, como quisiera devorar la mano que tienes" --Pensó Hiku, que estaba muy molesto con él. --Pero me mira muy feo. --Dijo Alphonse notando el enojo del lobo. --¡No! Te equivocas Hiku es un buen lobo ¿No es cierto? Con esto Hinata hizo saber al lobo que si no se comportaba iba a tener un buen castigo. A sus 17 años y Hinata Confía es si misma y es un poco agresiva de vez en cuando unas veces Hiku la hace enojar y ver enojada a la Hyuga no es muy bonito que digamos. la --Bueno ¿Qué tal si damos un paseo? --Sugirió Alphonse. --No sería mala idea ¿Verdad Hiku?
Capitulo 4: ¿¡Una cita!? (Parte 2) Esa misma tarde Hinata, Alphonse y Hiku fueron a dar un paseo, él le enseñó la biblioteca de central, el parque y finalmente el cuartel general. --Y es en este lugar donde trabajo. --Dijo el rubio. --Vaya... es muy grande. --Le dijo Hinata --¿Entramos? --Claro. Los tres entraron al cuartel. Al entrar todos se quedaron mirando a la parejita, Alphonse y Hinata se veían muy bien juntos. En la forma en la que los militares miraban a la Hyuga hizo que esta se sonrojara, Al notó eso así que la tomó de la mano para que se calmara. Llegaron hacia el despacho del Coronel Mustang, abrieron la puerta y ahí estaba su hermano mayor Edward que discutía con el Coronel. Ed se dio una gran sorpresa al ver a su hermano agarrado de la mano de una linda muchacha solo pudo pensar: "¡Que diablos sucede aquí, Al...! --¡Al! Jamás me dijiste que tenías una novia, ¡Que mal hermano eres! Aquel comentario puso a ambos muy sonrojados, especialmente a la peliazabache. --Este... bueno... Alphonse no es mi novio. --Dijo Hinata jugando con sus dedos. --Vaya, con razón no me dijo nada. --Dijo Ed mientras suspiraba. --Pero aun es una hermosa joven. --Dijo el Coronel haciendo sonrojar a Hinata aun mas de lo que estaba. --¡CALLA, ZORRO MUTANTE! --Gritó Ed. Entonces el Coronel se puso aun mas serio y les dijo a ambos chicos. --Acero, Alphonse, hemos recibido reportes de otras ciudades de asesinatos pero este es diferente, los cuerpos se encuentran sin sus rostros. Esta es la foto del sujeto. El coronel le enseñó a ambos chicos la foto del hombre, para ellos era extraño pero a la peliazabache le llenó de temor por dentro "Sin duda es el mismísimo Orochimaru, esa forma de asesinar a la gente ¡Como lo hizo con los Genin de la aldea oculta entre la hierva, pero que se traerá aquí en Amestris sin duda quiere venganza lo presiento" Pensó Hinata mientras observaba la foto con el ceño levemente fruncido. --¿Ocurre algo? --Preguntó el Coronel. --Nada... --Respondió Hinata. --¿Estás segura? Te ves un poco alterada. En ese momento ella no respondió solo se quedó mirando detenidamente la foto del sujeto hasta que por fin pudo reaccionar. --¡Lo siento! Es que... esa foto... me trae... me trae... viejos recuerdos... --Dijo ella un poco nerviosa. --Bueno, hermano, Coronel, ella es mi amiga Hinata Hyuga es nueva en la ciudad y me ofrecí a enseñarle la ciudad. --E... encantada. --Dijo Hinata. --Soy Edward Elric, el hermano mayor de Al. --¿Dices que eres el hermano mayor? --Preguntó la Hyuga muy confundida. --¡¿CÓMO...?! --Ed estaba a punto de estallar --¡Lo siento! Lo siento no quise llamarte así, lo siento. --Dijo Hinata haciéndole una reverencia a Ed. Aquella acción sorprendió a los presentes e incluso al coronel. --Vamos Acero perdónala, es la primera persona que te pide disculpas por decirte enano. El rubio la miró por un momento y la perdonó. Después de unos minutos Al y Hina se tuvieron que ir a recorrer nuevamente la ciudad.
Capitulo 5: ¿¡Una cita!? (Parte 3) Alphonse le enseñó el resto de la ciudad a Hinata, ella, como se había dicho anteriormente deseaba activar su Byakugan para ver cada detalle de los edificios. Cuando terminó su paseo por la ciudad, Al dejó a la Hyuga en su casa y se fue directamente al cuartel general. Cuando llegó, en el despacho del coronel se encontraban él y su hermano esperándolo, la forma en que miraban al rubio lo preocupó, "¿Qué ocurre?, ¿Por qué me miran así?" pensó. Al estaba muy confundido, ¿Acaso había hecho algo malo?, Alphonse se quedó mirando a su superior el cual este lo miraba con cara de pocos amigos. --O... ocurre algo coronel...? --Dijo el rubio muy nervioso. El Coronel no dijo nada al respecto, solo se levantó de su silla y se dirigió hacia la ventana con las manos en la espalda. Mustang miró por unos segundos el panorama a través del cristal y luego abrió la boca levemente para decir unas palabras. --Alphonse Elric. ¿Se puede saber dónde conociste a la chica Hinata? --Bueno... es muy difícil de explicar. --Dijo Al rascándose la nuca. --Aunque sea... no te has detenido para ver el físico de la chica. El rubio pensó por un momento para analizar a fondo el aspecto de la chica. Hinata Hyuga, pelo largo color negro azulado, piel blanca, cara angelical y ojos ¿Blancos? El detalle de sus ojos lo hizo recapacitar por un momento, "¿Qué tiene de malo los ojos de Hinata?" Pensó, luego miró al Coronel, el cual este lo miraba en busca de una respuesta. --Señor, ¿Acaso le preocupa los ojos de Hinata?, ¿Qué tienen de malo señor? --No se pero de una forma u otra esa chica oculta un secreto muy grande. --Dijo el Coronel acercándose a él-- Necesito que reúnan información sobre ella, los enviaré a Liore junto con ella así podrán investigarla. Alphonse no supo que decir, se quedó totalmente neutro ¿Qué iba a hacer? No le podía hacer eso a Hinata, ella era su amiga pero en su interior sentía mas, sentía mucho mas por ella, no podía traicionarla de esa manera le rompería el corazón. Pero era una orden de su superior, no lo podía desobedecer, ya sabía como se ponía Mustang cada vez que no cumplían con sus órdenes ¿Qué voy a hacer? se preguntaba una y otra vez hasta que un golpe en la espalda lo sacó de su trance. --Al, ¿Te encuentras bien? --Le preguntó su hermano. --Se que es duro para ti joven Elric, estás enamorado de la chica ¿No es cierto? --Dijo Roy con una cara totalmente seria-- Pero esto es el ejército y debes obedecer mis órdenes, tu eres perfecto para esta misión así que no acepto "peros" a cambio, ¿Me entendiste? Alphonse se dirigió a la salida del despacho con una cara totalmente melancólica su hermano lo seguía por detrás. --Al --Pero él no respondía-- ¡Al! ¡Alphonse! --Pero aun así parecía estar transportado en otro mundo-- ¡Alphonse Elric me escuchas! El rubio simplemente volteó la mirada para ver a Edward, y le dijo: --Hermano... no le puedo hacer eso a Hinata. --Eso fue lo que pudo decir mientras ocultaba nuevamente su rostro y una lágrima recorría su cara. ----- Mientras tanto, en la casa de Hinata todo parecía estar tranquilo, bueno... no todo parecía estar normal, la Hyuga sea encontraba sentada con una taza de chocolate caliente mientras recargaba los codos en la mesa pensando con el seño fruncido. Hiku por otra parte, se encontraba sentado en el suelo mirando atentamente a su ama. En eso una Canna baja las escaleras con una taza de chocolate caliente, luego vio a Hinata la cual no estaba muy contenta, ese gesto en su cara le parecía muy raro a ella, como la chica dulce que es (Bueno ahora en sus 17 años no es tan dulce como lo era antes) según Canna pero aun así decidió darse la "molestia" de acercarse a ella y preguntarle de lo que pasaba. --Hinata Hyuga, ¿Qué te sucede? --Dijo la mujer en un tono agradable. --Bueno, te lo diré de la forma mas directa que pueda. Orochimaru se encuentra en Amestris. En ese momento Canna se sonrojó levemente y se puso a temblar, aquella reacción no pasó por alto por parte de Hinata que le sorprendió mucho la reacción de ella al escuchar en nombre de Orochimaru, "¿Pero qué ocurre aquí?" se preguntó mentalmente, "Algo raro sucede aquí". --Canna... ¿Qué te ocurre? --Dijo la Hyuga con mucha intriga. --Na... nada Hina. --Dijo ella mientras se iba de la cocina. La peliazabache se quedó pensando y se dijo a si misma. --Que raro, ella no suele ser así. ¿¡Y desde cuando me dice Hina!?
