Mientras Mira exploraba, no pareció encontrar nada interesante en esa habitación, lo mismo para con Sasha, no parecía haber nadamás ahí, si hubiese algo oculto, tal vez y estaba muy bien escondido. Cuando Mira volvió al salón, al revisar en donde estaba la luz que de hecho, ahí seguía. Pudo notar que, efectivamente. ¡Ahí estaba la lámpara! Era perfectamente funcional y de bolsillo, aunque no parecía tener ninguna otra cualidad encima. ¿Era hora de irse? Tal vez, después de todo, al parecer tenían el tiempo contado. ¿No es así?
Mira Antonova Levantó la lámpara, aquella luz que había sido tan obvia desde el inicio pero habían tardado en levantar, aun con confusión y con deseos de encontrar la mayor cantidad de pistas posibles. Habían perdido mucho tiempo en aquel lugar pero salían con las manos llenas al menos, no había sido ninguna pérdidad de tiempo. Prendió y apagó la lampara de bolsillo y funcionaba perfectamente —Si ha estado prendida por un tiempo no debemos confiarnos tanto en que su luz nos duré todo el camino —dijo para apagarla y guardarla mientras no la necesitaran —Ahora si podemos seguir bajando ¿Qué dicen? — preguntó hacia Sasha y Travis. Se alejó de lo escombros con mucho cuidado, dando saltitos esquivando los obstáculos para por fin salir de allí y dirigirse hacia la salida.
Travis Dewitt Había corroborado que el par de chicas no representaban mayores problemas lo que pudo indicar que podría salir airoso de aquel extraño edificio. —pues entre más pronto nos larguemos mejor, si apresuramos el paso evitaremos el rollo de una linterna sin batería—dije mientras empezaba a seguir el paso de Mira, ninguna de ellas parecían despertar algún recuerdo. Obviamente eran desconocidas y no podía esperar menos. Sintió su cuerpo aún entumecido y de seguro salir de allí le devolvería su buena circulación, mientras Mira y Sasha pudiesen avanzar el estudiaría la parte más visible del lugar para memorizarlo, aunque si la ruta era más corta no sería necesario...vaya que sería un alivio.
Sasha Pierce Se permitió un suspiro algo hastiado en tanto sus esfuerzos por encontrar algo de utilidad no daban frutos. Sin embargo, el halo de luz que viajó rápidamente por la habitación captó su atención de inmediato y se giró hacia Mira, descubriendo que había dado con una linterna. Una extraña alegría algo infantil se apoderó de ella y dio unas palmadas cortitas, acercándose hasta la chica para rodearle el cuello en un abrazo fugaz y cariñoso. —¡Bien hecho, candy! —la animó, contenta, y luego colocó los brazos en jarra al girarse hacia el tercer integrante del grupo que... bueno, seguía sin hacerle toda la gracia del mundo—. Alright, shall we~? Contenido oculto uff, lamento muchísimo la tardanza. Se me quemó la neurona y olvidé que debía respuesta acá, gracias a Santy que vino a acosarme y me hizo dar cuenta de mi pelotudez ;-; Por mí ya estamos para bajar, btw (?
Sin más, comenzaron todos a bajar algunos pisos hasta que poco a poco, y con algunos guías de varios mapas que estaban colgados en la pared de varios sitios, consiguieron llegar hasta la aclamada Bodega donde Mira decidió encender la linterna, e ingresar al sitio. La peste era... nula. Extrañamente para decir que los sucesos fueron "recientes" la verdad es que era muy extraño que no se percibiese alguna peste por el susodicho hombre que se metió con prisas solo para ser arrasado poco después. Efectivamente, hallaron un interruptor para encender la luz, pero de nada sirvió, solo quedaba que estuviesen pegados a Mira. Echando un vistazo rápido, pudieron ver que se podía ver una Caja de cartón rasgada tenía hasta el unicel de protección salido, aunque por la forma parecía que las ratas lo habían destrozado, pero también pareciese que alguien fue allí a abrirlo de forma desesperada. ¿Podría conectarse con aquél sujeto? Al seguir revisando podían ver algo metálico reposando en unos estantes a medios tirar, brillaba mucho, pero por eso mismo era imposible saber si era algo útil o una pérdida de tiempo. Más temprano que tarde, dieron con algo blanco hasta lo más recóndito de la bodega... Como el segundo detalle, era imposible saber si había algo importante allí o sería algo inútil. ¿Qué podrían hacer? Contenido oculto Toda acción que decidan hacer, están obligados a hacerlos en conjunto, los tres. Ya que Mira posee la linterna y si quieren ir a su cuenta no van a ver nada, mientras revisan, quiero también que cada uno tire un dado de 50 caras con sea lo que sea que vayan a hacer.
Mira Antonova Al entrar a la bodega la obscuridad los inundó, así que no tardó en prender la linterna para poder ver bien dónde pisaban —Creo que no les queda mas remedio que seguirme — dijo mientras avanzaba, apuntó la linterna a la caja de cartón rasgada —No sé si algo nos puede brincar si sacudimos eso —mencionó moviendo de un lado a otro la linterna, intentando así despertar a la rata que imaginaba estaba dentro. —Hay algo en ese estante —dijo apuntando al objeto metálico —Acompáñenme a ver que es, prometo que luego yo lo haré hacia dónde ustedes quieran revisar— dijo avanzando con cuidado hacia el estante, así observar aquel objeto metálico.
Sasha Pierce Se movió junto al grupo por los pasillos oscuros de aquel edificio, guiándose entre los mapas y el sentido común que recogían entre los tres. No iba a mentir, montarse semejante aventura digna de una película de terror se volvía mucho más llevadera con otras personas, aunque bueno... no dejaba de ser desconfiada y precavida casi por naturaleza. ¿Ah? ¿Quizá los eventos de su vida la habían moldeado así? Quién sabe. Inspeccionó la bodega arrugando la nariz por mera inercia, ya que no había olor a nada. Repasó los alrededores y siguió sin más a Mira en su investigación del objeto metálico. Ya luego podrían encargarse de la caja esa, darle unas patadas de preaviso para ver si una rata les saltaba a los ojos o algo así. Así y todo, no perdía la ligereza característica de su tono de voz. —Yo te sigo adonde sea, preciosa~
Travis Dewitt Avanzando por el pasillo solo obtuvo como resultado más oscuridad, inclusive una bombilla resultó fundida, era conveniente no apartarse del par de chicas si no quería problemas. Arrugó el ceño al ser incapaz de indagar por su cuenta, en su lugar velaria por algún movimiento brusco de parte de sus compañeras, el ambiente le inspiraba de todos menos paz a pesar del imperante silencio en las cercanías. —De acuerdo solo procuren no provocar algún ruido innecesario—se refirió a cualquier desorden al derribar un utensilio del estante, Travis permanecía alerta de cada zona en penumbras...sin embargo más le inquietaba aquel objeto blanco, pero debía esperar a que el grupo averiguase la verdad.
