El Pianista (sesshXkago)

Re: El Pianista (sesshXkago)

Abana: ju… bueno gracias por seguir mi tardío fic =3

Sirenita: y pomy dijo: un lunes pondré conti… y la puso… 6 dias después xD

Inu_*Kagome*: jaa… no te gusta Kouga? xD este no es tu capitulo…

SARITZ: bueno, no tarde tanto, viste? Y ya ves… como las cosas cambian (muajuaaa)

Sessholove: bienvenida ^^ yo tambien te kiero ¿? Espero te guste el capi.

Atropos_dian: siempre me encanto esa imagen que tenes puesta :P yo tambien te kiero ¿? Jaja… aca viene lo interesante.

Shailon: segui resando… xD

Pan-chan: ju, para lo de Naraku, ya vendra. Este cap es mas… lemon? Jaja… espero dejes de desaparecer -.-

BCZO: escritorA J me alegra que te guste, acá la conti.

Victoria_7: siempre te pasas! Que bien :D ya aca hay respuestas… muajuaa

Sessholove: veo espejismos…

Sirenita: shh xD

Sesskag: mi hermana favorita, te tuve en mente :3

BCZO: muajuaa… ya… aca esta la conti :D


Siempre había supuesto que las luces y los flashes serían imposibles de soportar, así ella se lo había planteado cada ves que por su trabajo se había detenido detrás de las sogas mirando a los famosos a desfilar por la alfombra roja.

No es que ella no quisiera su trabajo, es más, le encantaba ayudar a una reportera como lo era su amiga, pero estar ahora parada delante de los reflectores, ella misma desfilando torpemente por la alfombra… reconocía que era un gran cambio. Y lo mejor era que una vez acostumbrada a las luces, ya no le eran molestas en lo absoluto.

-…ella es Kagome, una muy buena amiga mía –escuchó que repetía una ves más la varonil voz del extravagante Kouga a un lado suyo. - ¿qué no es una preciosura?

Esta sonrió apabullada por las exclamaciones positivas a su belleza y alegremente saludó a las cámaras, sin hacer muchos comentarios. Era su primera vez en esta posición, y el vestido azul brillante la traía algo nerviosa, ya que se fijaban mucho en el aspecto de los demás.

-mi Kagome, ¿subirás conmigo al estrado si gano? –pregunto él una vez que se sentó en su asiento, detrás de Yukito Mécelo… una de las modelos más famosas en el momento. Kagome miraba los largos cabellos de ella pensando que se caería subiendo la escalera.

-no, muchas gracias. Mejor ve solo –dijo ella sin mirarlo.

-Kagome, no es que te quiera lucir, pero los demás se merecen ver tu hermosura… -dijo tomándola por las manos –eres como la luz que me ilumina, y quiero que seas mía por siempre.

Los suspiros de los que estaban cerca (incluida la modelo que se volteó estupefacta a ver) hicieron poner más incomoda y a la ves colorada a Kagome, que trataba de sacar sus manos de entre las de él. Hacía ya un mes que eran pareja…


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Las clases habían llegado al punto que las pruebas estaban a horas de distancia. Para conmemorar la cercanía de los títulos a entregar, se había llevado las pantallas plasma al comedor, donde luego se haría la gran ceremonia… de modo que a casi todas horas estaban las pantallas sintonizadas en canales de música o modernidad, entreteniendo las comidas de los chicos.

Esa noche se entregarían premios de música y por supuesto, todas las pantallas estaban sintonizadas en el mismo canal. Cuando algunos galardones comenzaron a entregarse, los abucheos o aplausos de los chicos fueron enseguida acallados por los profesores. Fue en ese momento en que todos guardaban cierto silencio, cuando Bancotsu vio entre las imágenes un rostro hermoso conocido. Sin embargo, luego de tanto pensarlo no logró volver al tema.

-¿Quién crees que ganará este? –Pregunto Kikyo a su lado –el señor Kouga es un excelente músico, se lo merece –pronunció con su melodiosa voz, denotando su admiración por el chico.

-mm.. Si tal vez gane. De todos modos están todos los premios comprados –dijo otro chico, sentado a la izquierda de ella.

-cállate Guinta –dijo kikyo mientras se metía más comida en la boca- de todos modos se lo merece.

-kikyo, allí esta tu amor –dijo Bancotsu algo celoso, con los ojos cerrados escuchando que ya había ganado el ‘maravilloso’ Kouga “ni que fuera la gran cosa” se decía así mismo.

-demonios… -dijo apagada y algo sorprendida la voz de la chica. Bancotsu la miró al instante y luego le siguió la mirada…

-esa chica… -dijo ella

-pero… ¿no es ella Kagome?


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Ya un mes hacía desde que la competencia lo había llevado a Alemania. Había visitado otros países pero éste era el que más había conocido una vez que había logrado la semifinal en su piano. Caminando por las calles, se sentía atiborrado de fanáticos, los carteles con su rostro lo hacían sentir bastante incómodo… pero de alguna manera le gustaba estar ocupado en esas cosas tan superficiales.

Miraba bastante perdido las imágenes de las revistas cuando una le llamó la atención. Se detuvo en el puesto mirando la portada, cuando su celular sonó y atrajo la atención de varios que lo miraron sorprendidos.

-¿hable? –dijo sin mover su mirada.

-sesshomaru, ¿Dónde estas? Tienes entrevistas que dar… -reprochó la voz de su tío en el otro lado.

-voy para allá –cedió enseguida cerrando la tapa del celular.

Mientras caminaba, un solo pensamiento adornaba su mente “Kouga…”

-¿qué quieres tío? –pregunto él entrando al cuarto.

-lamento haberte molestado Sesshomaru, no tienes ninguna entrevista…

-lo sé, dime que quieres… -dijo él de repente

-mañana salimos a China, la competencia se adelantó, pero la noticia es privada. Hubo problemas con la empresa… no quise decírtelo por celular, ya sabes… para que no se enterase…

-armaré mis valijas –volvió a interrumpirlo, no tenía ganas de escuchar a su tío ni a sus explicaciones.

-escucha, sesshomaru. Como eres el rostro de la campaña, te han llamado a que toques el piano en una presentación especial… es para un galardón especial de música, una oportunidad muy grande para darte a conocer en ese país. Es mañana por la noche, prepárate –dijo yéndose a arreglar unos asuntos, viendo que su sobrino no estaba muy de ánimo para nada. Como siempre.

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La noche había sido excelente, claro, se había equivocado al hablar delante de tanta gente por el micrófono. Pero su sonrisa y el cariño con que Kouga la había salvado, aparentemente la había dejado muy bien parada.

Al llegar al hotel, y al ver la televisión, escucho muy buenas críticas de ella. También la aclamaban como una de las más agradables y hermosas, lo cual en seguida la puso nerviosa.

-¿lo ves? Todos coinciden conmigo –dijo él abrazándola por detrás.

-ahh… -exhaló ella ante la sorpresa del contacto-Kouga, esto es surreal. De pronto… todo esto… -dijo titubeante mientras se volteaba suavemente y lo miraba –no parece justo…

-pero qué hermosa te ves –dijo él –y no es el vestido a lo que me refiero –sonrió – mi Kagome, sos tan tú que me embelesas con tu dulzura. Todos aman tu sonrisa y tu modestia, pero tienes tanto para dar –la abrazó con más fuerza, acercándola a él –quiero que seas mía, Kagome. Quiero ser tuyo.

Ella estaba sonrojada, estos últimos días los había pasado de maravilla a su lado. Casi no trabajaba ya que su amiga parecía estar de acuerdo con Kouga y se la dejaba muchas horas, y él la mimaba y la consentía en todo. Era muy cariñoso y realmente hermoso. Cuando estaba con él, no podía pensar en nada más.

-te gusta mi sonrisa, ¿cierto? –preguntó ella, apoyando ambas manos sobre el cuello del chico.

-claro que si –contestó como si de una obviedad se tratase.

-vos me haces sonreír –dijo y entonces, acercándose a él, lo besó como solía hacerlo.

En el impulso del beso, sus cuerpos chocaron y él unió más sus brazos, apretándola contra él. Cuando el aire se acabo, este se acostó con ella encima y siguieron besándose, pero con caricias de por medio.

No parecía la primera vez que habían hecho algo como esto, pero de todos modos esta noche había sido tan perfecta que para la chica, era lo único que importaba.

Lemon… (para los desactualizados irrespetuosos que nunca leyeron un lemon xD cliqueen el cuadradito azul con una b al lado de mi imagen)

lemon... end
La mañana llegó cuando el sonido de la música del celular hizo mover algo molesto al chico. Ella se deslizo por él cuando se estiró y busco a tientas el pequeño aparato. Ella se volteó y se abrazó a sí misma, hundiéndose en las sábanas.

-Kagome, querida –dijo él al colgar, ya estaba mucho mas despejado.

-¿mm? –ella respondió perdida en sus sueños.

-vamos, amor. Vamos a bañarnos, que hoy en la noche es el gran galardón y debemos estar listos para el estilista, tenemos una hora.

-pero eso es muy poco tiempo.

Él la abrazo una ves más, estaba desnuda debajo de las sabanas, así que él las arrojo a lo lejos y la obligó a abrazarse a él por el frío.

-tendremos que bañarnos juntos –dijo él sonriendo malévolo.

-ju… -dijo ella luego de besarlo –llévame

Los dos jugaron un buen rato, hasta que escucharon que tocaban a la puerta y ella salió despavorida a poner un poco en orden el lugar. Él, por su lado solo la siguió mirando cómo se movía.

-bien, yo quiero que mi mujer esté hermosa. Como ya lo es, no te dará mucho trabajo –dijo abriendo precipitado la puerta, y dejando a Kagome media enfadada y media colorada.

-ya Kouga, ¿Qué dices? –pregunto mirándolo con algo de reproche y algo de agradecimiento.

El estilista sonrió y entro al cuarto alegremente. Detrás de él venía una tropilla de mujeres con accesorios y ropa.

-es hora de ponerlos presentables –anuncio pavoneándose y acomodando unas sillas delante del espejo.


Esa tarde, Kagome estaba muy feliz por todo lo que estaba viviendo. Su amiga había ido al hotel en el momento en que ella se estaba cambiando, y había hablado un buen rato con Kouga. En el momento en que ella salió, lucía un despampanante vestido blanco ajustado a su figura, y unos zapatos muy altos que la hacían más delgada aún.

-sos mi sueño –dijo el anonadado por la belleza de ella.

-Kagome… conquistarás a más de uno allá afuera –dijo la amiga periodista, consiguiendo una enfadada mirada del famoso.

Ella vio la reacción de él, y le pareció tan dulce que no pudo evitar acercársele y plantarle un gran beso.

-con lo hermoso que te ves, jamás me fijaría en otro.

Claro está, ese ‘otro’ no incluía a cierta persona que sorpresivamente, Kagome iba a conocer una vez más…


les gusto?? :D