Contenido oculto: Leer Antes de leer el capitulo Buenos días mis queridos lectores, antes de que comiencen a leer les explico el porque del titulo y como se va a desenvolver esta historia. El "formato telefónico" es un formato de fic que me invente para poder escribir en mis ratos libres del trabajo y consiste básicamente en escribir capítulos en el bloc de notas, como podrán imaginarse dichos "capítulos" son realmente "cortos" pero como tal pueden salir muy rápido, es por esto que esta historia aunque me ha tomado MUCHO tiempo escribir el capitulo I porque escribir una introducción en un bloc del teléfono se torna engorrosa espero que los siguientes capítulos fluyan de mejor manera al punto de poder traer uno de estos mini capítulos cada día o día de por medio Mas importante antes de que me coman vivo con la redacción y los errores, recuerden que esto esta escrito en un bloc de notas del teléfono que si bien algo corrige tampoco hace milagros y no le doy demasiado enfoque a publicarlos en limpio, si no que me interesa mas publicarlos rápido (para yo mismo poder mantener el interés xD) Así que por una vez, no se enfoquen en el aspecto técnico y disfruten de la historia porque si me enfocara en los aspectos técnicos y tuviese que esperar a que me corrigieran cada mini capitulo no terminaría publicando nada xD Capitulo I... El resplandeciente sol de aquella región nueva y calurosa le pasó factura, el viaje en primer lugar fue demasiado largo y las olas no eran sus mejores amigas, así que mientras todos los pasajeros salían y saludaban enérgicamente "alola" en esta nueva región ella se encontraba en la enfermería del barco con una intravenosa tratando recuperarse de una severa deshidratación y mareos. - Alola compañera, ¿cómo van esos ánimos? el comentario no la irritaba, pero el tono condescendiente de él la sacaba de quicio, era como si quisiera recalcarle que era una novata en cuanto a misiones de campo y aunque fuese una entrenadora reconocida, seguía siendo una novata. -todo bien compañero, aunque no me dejaran salir de aquí al menos por otra hora- su voz salió apagada y rasposa, pero hizo su mejor esfuerzo para sonar animada pues no quería que su compañero la dejara de lado o relegará a un papel menor en este caso. Cómo pudo levanto la mirada, aunque su cabeza pesaba toneladas y el vértigo hacía que su foco de atención se moviera errático, así hasta que sus miradas se encontraron. Ethan era un sujeto alto y como una mata de pelo rojo bastante abundante peinado casi de forma obligada hacia atrás aunque algunos mechones rebeldes se salian de lugar dándole un aspecto alborotado a su cabello, su cara era serena y amigable de tez blanca y tapizada por un montón de pecas, casi no se notaba que estaba ya entrado en los treinta aunque era difícil saber su edad ya que siempre decía un número distinto, como entrenador era notable y un experimentado detective, reconocido por dar solución a los casos más extraños, incluso llegó a trabajar codo con codo con la policía internacional haciendo de apoyo con ciertos temas delicados, actualmente había sido contratado por una pequeña firma de abogados en representación de los familiares de algunas personas desaparecidas y dicha firma la eligió a ella como su compañera aunque el pocas veces aceptaba compañía. -Tu cuerpo no parece aceptar esas palabras del todo, tal vez sería mejor si me adelanto y nos vemos... Sus palabras fueron cortadas en seco por la brusca puesta de pie de la chica frente a él, su reacción le sorprendió, aunque no podía decir exactamente si para bien o para mal. -No voy a quedarme fuera del caso por un simple mareo- dijo aclarándose la garganta la chica y dando un dificultoso paso adelante, Ethan la miro de vuelta y aunque intento mantenerle la mirada realmente su cuerpo no estaba poniendo de su parte por lo que este último se acercó a ella y la ayudo a regresar a la cama y se sentó a su lado. -De acuerdo, esperemos a que ese mareo pase antes de continuar- estás palabras le dieron un sabor agridulce a la espera, por un lado, estaba feliz de no perderse nada del caso, pero tristemente por el otro estaba retrasando el avance de este, no había mucho más que pudiera hacer más que guardar reposo, así que solo aguardo. El tiempo no avanzo con extrema rapidez, pero al fin el suero surtió efecto y la chica fue dada de alta y pudieron dejar el barco, el sol del mediodía se erguía aún orgulloso en el firmamento y así su arribo a la isla Ula-Ula estuvo completo, salieron del atracadero y su primera parada fue en el centro Pokémon, en el apenas entraron había un sujeto misterioso en una esquina del lugar, todo en centro era un lugar cálido pero ese sujeto daba la impresión de que no debía estar allí, sencillamente resaltaba y descolocaba el ambiente. Ethan se acercó a él y como si el mundo a su alrededor se apagara el ambiente se crispo. -Llegas demasiado tarde idiota. Las palabras de aquel hombre rebotaron en todo el centro, la mira de Ethan dio un circulo completo y su mano fue directo a su cinturón y tomo una de sus pokebolas haciendo un ademan bastante ofensivo que no pasó desapercibido para aquella misteriosa figura que también tomo posición de combate, así el lugar fue lo de menos y ambos entrenadores dejaron salir a sus Pokémon. Por parte de Ethan su Scizor y por parte de su oponente un Rhyperior, ambos Pokémon miraron a sus oponentes y luego a sus entrenadores y como si la orden ya estuviese implícita entre ellos salieron a disparados a saludarse los unos a los otros. -No entiendo como alguien tan lento se molesta por que lo hagan esperar. La risotada de Ethan rompió el ambiente, aquella pesadez desapareció y aquel sujeto comenzó a reírse de la misma forma. -Tal vez si no te hubiese regresado a este Scizor el lento serias tú. Las risas continuaron mientras esta persona le hacía mimos al Scizor de Ethan, el cual parecía disfrutarlos demasiado como quien se recuentra con un muy viejo amigo, sus platicas continuaron muy apacibles, el Rhyperior cargo en aires a Ethan y el alboroto fue tal que la enfermera Joy tuvo que acercarse para que ambos adultos dejaran de actuar como niños. -Ahora basta de darnos cariño, ¿conseguiste la información que te pedí? Una vez más el ambiente se hizo tenso, pero a diferencia de la anterior no fue por molestia, el tema parecía ser incomodo y estaba relacionado con el caso que tenían entre manos. -No fue fácil, pero sí, tengo fuentes que dice que estos sujetos están congregándose en la torre del parque Malíe, no sé qué pensar realmente de ese tipo de cultos, pero siendo sincero no creo que debas tomar esto como un simple “encargo de búsqueda” esto realmente se pone extraño. Ethan suspiro y extendió la mano para recibir un sobre con algo de información por parte de aquel sujeto que ahora posaba su mirada en la chica que hacía compañía a su viejo amigo. - ¿Ahora vas con tu novia a las misiones? Es bueno ver que has cambiado, antes eras terrible con las mujeres y por tu aspecto… Las palabras de aquel hombre fueron interrumpidas de golpe por Ethan quien sin perder demasiado la compostura paso a presentarlos. - No seas idiota Gamyl, ella es una compañera de trabajo puesta por la firma que me contrato, su nombre es Roselutte, Rose para los amigos, este sujeto es Gamyll es realmente lento, pero tiene una de las redes de información más grande de todo el mundo, muy pocas cosas escapan de sus redes. La sorpresa en todas esas palabras fue tal que no pudo reaccionar a tiempo, por una parte, la estaban emparejando con su compañero, cosa que lo hizo mirarlo de arriba debajo de forma tímida, no se había planteado si quiera el verlo como un posible amante y justo antes de que si quiera lo empezara a pensar el mismo había roto esas ilusiones y para completar estaba frente a este sujeto quien poseía una enorme red de información y les estaba alentando a tener cuidado con lo que encontrarían adelante. Gamyll era un sujeto robusto, usaba ropa muy ancha y su cara era casi completamente cuadrada con un cabello corto y cepillado hacia atrás, su voz era muy grave, realmente resultaba intimidante y misterioso, aunque sus acciones junto a Ethan demostraran lo contrario. “Esto se pone extraño” esas palabras resonaban una y otra vez en su cabeza, había leído muchos casos donde las situaciones alcanzaban momentos tensos o difíciles pero la palabra “extraño” no era una que se usara para describir estos casos. La mano de Ethan en su espalda la hizo sobresaltarse, debían continuar hacia el parque de Malíe, Gamyll los despidió efusivamente y desde su punto de vista demasiado para acabar de conocerse en el camino Rose interrogo a Ethan respecto a que pensaba de este caso, pero este se mostró muy reservado, las palabras de su amigo también lo afectaron, no era común para Gamyll decir cosas como esas, la cara de su compañero era tal que Rose decidido cambiar el enfoque y hablar de algo mucho mas ameno, como su relación con Gamyll. En este caso la expresión de Ethan se relajó, él y Gamyll habían sido amigos de la infancia hace unos cuarenta y cinco años según sus propias palabras, aunque obviamente ninguno de ellos parecía tener mas de treinta, su amistad se cimentaba en sus constantes intercambios Pokémon y muchos de ellos eran para evolucionar a sus compañeros, así que ambos tienen buen conocimiento del equipo del otro e incluso ayudaron a entrenar a algunos Pokémon de su amigo, así que desde muy chicos siempre están ayudándose. Con esas historias de su infancia el camino a la torre del parque se hizo corto y al llegar sin apenas poner un pie en dicha torre el ambiente hizo que las palabras “extraño” se apoderara de ambos, no iban a detenerse, pero había algo en el ambiente que no estaba del todo bien, con este sentimiento iniciaba su primer paso para resolver este misterio.
Capítulo II La entrada de la torre estaba inusualmente vacía al igual que su lobby, lo que era desconcertante, si bien era cierto que la torre no era el lugar más habitado de alola la realidad es que no era una zona desierta siempre había algún niño o monje y en su defecto, los encargados del mantenimiento la circundaban bastante amenudo pero esta soledad era criptica y realmente espeluznante, como si todo habitante hubiese sido tragado de golpe. Los dos detectives luego de una leve inspección dejaron el lobby encaminandose a la primera planta a de la torre, las escaleras tenían el mismo aspecto que la planta baja y para su sorpresa el primer piso también, se tomaron la molestia de revisarlo de arriba abajo y la sensación de estar completamente en otro lugar comenzaba a oprimirles el pecho a ambos, subieron un piso más y la sensación arreció ya que al igual que el anterior no había nadie, ni si quiera sonidos, la torre constaba de cinco pisos y el que los dos primeros de ellos estuvieses vacíos a tal punto era impropio. Ethan más para romper el silencio que por otra razón dejo salir a su Gengar e instó a Rose para que liberará a alguno de su equipo que los ayudará a investigar mejor, la chica en cuestión haciendo caso a su compañero le ordenó a su Arkanine que rastreará el lugar pero ni el potente olfato del camino pudo encontrar algo, por su parte Gengar se había desvanecido y regreso para cuando habían alcanzado ya el cuarto piso, el Pokémon sombra comunico a su entrenador la presencia de dos personas en la quinta planta y cinco en techo de la torre. Ambos entrenadores se miraron, llamaron a sus respectivos Pokémon y corrieron a la quinta planta, en ella había efectivamente dos personas bloqueando el paso a la escalera del tejado, parados como si su existencia no se notará, como si realmente ninguno de ellos estuviese allí, mirando el vacío como estatuas vivas. Al acercarse notaron lo extraño de ambos, el primero de ellos era alto y extremadamente delgado, tenía la cabeza rapada de tal forma que no tenia ningún tipo de cabello, ni en cejas ni bigote o barba, su piel estaba completamente tirante y los huesos de su figura se marcaban de forma grotesca por su piel, era como si ese hombre no hubiese probado bocado en meses y aunque intentaba cubrir su cuerpo con ropas olgadas y grises estás se pegaban a su cuerpo confiriendole un aspecto aún más calaverico, en contra parte el sujeto a su lado era morbidamente obeso, estaba igual que el anterior rapado por completo pero a diferencia este otro parecía que acabará de tragarse un cubo de grasa, completamente sudoroso y su cuerpo lleno de pliegues grasientos que deformaban sus ropas. La mirada de los cuatro se encontraron y aunque al verlos la luz en sus ojos regreso por un instante sus acciones continuaron como marionetas sin alma sencillamente atacaron lanzando a sus Pokémon iniciando así una batalla doble. El larguirucho dejo salir a un Munchlax y el gordo un Lickitung. Ethan dejo salir a su Gengar y Rose por tu parte dejo salir a su Luxray, quien apenas entrar intimido a sus oponentes bajando su ataque, por su parte el Gengar de Ethan se ocultaba tras un sustituto, luego de que el extraño muñeco hiciera acto de presencia Luxray se estrellaba con un potente voltio cruel Munchlax, pero el sujeto delgado le había ordenado usar protección por lo que su ataque fue completamente ineficaz. Lickitung en última instancia salto y quedó entre ambos Pokémon desatando un contundente terremoto con su caída, tanto como para romper el sustituto del fantasma y disminuir a la vida del felino en más de un cuarto, este movimiento realmente había dejado fuera de juego a Rose quien no estaba acostumbrada a batallas dobles y aunque afortunadamente el ataque de su oponente había disminuido el daño estaba allí y el suyo había sido el único Pokémon dañado en esta ronda. -Enfócate en Munchlax. Le susurró en tono muy bajo a su compañera para calmarla y sin mediar más preparo su siguiente ataque, Gengar desapareció y reapareció tras el lento Munchlax que apenas y pudo reaccionar para recibir una devastadora onda certera, el impacto lanzó hacia atrás al pequeño pero pesado Pokémon quien no se debilitó de un solo impacto, incluso se recuperó del golpe luego ingerir una baya, pero ni bien había tocado el suelo el impacto del voltio cruel de Luxray lo dejó fuera de combate, Lickitung por su parte repitió la jugada anterior, está vez dejando muy grave a Gengar y mal parado a Luxray pero está contienda estaba determinada, eran ahora dos contra uno, pero entonces los sucesos extraños comenzaron una vez mas, aquel sujeto larguirucho se desplomó al igual que su Pokémon, su cuerpo yacía inerte mientras una batalla inútil contra su compañero continuaba, su Pokémon realizó la misma jugada que había venido haciendo pero está vez antes de que pudiera tocar el suelo fue interceptado por una contundente bomba lodo por parte de Gengar y un impactante fuerza bruta por parte de Luxray, ambos entrenadores llamaron a sus Pokémon y se acercaron a los misteriosos sujetos pero al igual que su compañero el gordo callo tendido al perder la batalla, ninguna de las palabras por parte de los dos detectives los hacia reaccionar. Rose se acercó al sujeto esquelético y el terror invadió su rostro al comprobar su pulso, estaba muerto. Ethan hizo lo mismo con el otro y el resultado fue igual, la chica entonces tomo su móvil para llamar a la policía mientras el pelirrojo subía a la azotea y observaba a lo lejos a las tres personas que su Pokémon había confirmado escapar cada uno en un Pokémon volador diferente. Realmente el caso se volvía extraño, ahora no sólo había muchos desaparecidos, también había que agregar dos cadáveres y la súbita desaparición de todas las personas que normalmente frecuentan la torre
Capítulo III El resto del día fue completamente burocrático, ambos investigadores estuvieron a la espera de las autoridades en el lugar de los hechos, conocían que serían los principales sospechosos así que sencillamente esperaron a que las autoridades locales hicieran el reconocimiento pertinente a un caso con dos cadáveres lo cual tomo bastante más tiempo del que esperaban, la policía de alola resulto extremadamente meticulosa. Ethan se mostró mucho más cooperativo que Rose quien se veía por primera vez implicada en un caso donde hubiese un cadáver y su actitud más que nerviosa era de angustia, el pelirrojo se encargó de guiarla de la mejor manera, parecía ser que en cada caso que él se inmiscuía terminaba con algunos cadáveres, incluso bromeo con que en algunos casos lo habían acusado de ser un asesino serial ya que no había atendido nunca un caso en el que no hubiese al menos un fallecido. Las bromas del chico la mantenían más tranquila pero no le resulto nada agradable estar detenida y bajo sospecha, el ser interrogada una y otra vez le resultó cansino hasta que por fin ya caída la noche y con los resultados de las autopsias firmados quedaron al fin libres de sospecha y quedaron en libertad. La comisaria de Ula-Ula estaba bastante lejos del lugar donde deseaban residenciarse por lo que al no poder regresar decidieron quedarse en el lugar más cercano el curioso pueblo Po. A su llegada tanto el muro como la inminente carencia de personas asustaron un poco más a una ya nerviosa Rose quien realmente había tenido un pésimo día. -Un lugar un tanto pintoresco ¿no crees? Decía el señalando curiosamente al los grafitis dispersos por todo el lugar, pueblo Po estaba sencillamente abandonado había un par de gamberros apostados en el centro Pokémon y el mismo estaba realmente hecho un verdadero desastre, luego de una pequeña charla y varias rimas los gamberros que se habían ocupado del centro Pokémon accedieron por una módica suma a curar sus Pokémon además de brindarles una jugosa información, "ahora mismo estamos solos como loros, no hay nadie más en el lugar por más que vayas a buscar" las terribles rimas eran lo de menos pero si el pueblo estaba tan abandonado sencillamente podían entrar a cualquier casa y dormir "gratis". Y tal fue el caso, entraron a una de las casas del lugar y luego de asegurarse de que estaba vacía se dispusieron a dormir, Ethan le ofreció una habitación pero Rose la rechazo era mejor dormir en la sala de la casa junto a la chimenea ya que como casi todo el pueblo no había electricidad y al menos podrían hablar de los pormenores del caso y avanzar en algo. Rose se puso su ropa de dormir y se dispuso a meterse en un saco junto a su compañero quien no se perdió de la figura de la chica, su cuerpo era bastante atlético y con unas curvas bien marcadas, su cabello era liso y color caoba atado en una cola de caballo, su piel bronceada y sus labios carnosos eran realmente atractivos pero en este instante realmente eso servía de poco. -Si no me hubiese enfermado en el barco, hubiésemos obtenido más información sobre las personas en la torre. Sus palabras fueron casi un susurro casi algo solo para ella pero aún asi su compañero respondió. -Si, tal vez hubiésemos formado parte de los cadáveres o desaparecidos de la torre si hubiésemos llegado antes. Rose quien se sentía completamente presionada e inestable aún así había dicho algo tan esperanzador que casi al instante se sintió demasiado inocente, no había considerado la posibilidad si quiera de que ellos hubiesen podido ser las víctimas, su batalla había sido caótica tenía cero experiencia en batallas dobles y si no fuera por su compañero seguro hubiese sido derrotada. -Aun tengo mucho por aprender. Dijo con voz melancólica, tenía tantas ganas de demostrar su valía que estaba perdiendo la oportunidad de hacerlo. -Nuestros amigos de hoy, murieron de causas naturales. La declaración del pelirrojo la saco de su ensoñación y la hizo girar hacia el para darse cuenta de que sujetaba unos papeles, exactamente copias de las autopsias. -Pero... ¿Cómo conseguiste eso?. -Eso que importa, los conseguí y ya. Dijo el extendiéndole los papeles. Sus palabras "murieron de causas naturales" tenían cero sentido a menos que contará como muerte natural el morir de hambre y morir por sobrealimentación, el primero de ellos el sujeto extremadamente delgado había pasado por un periodo de ayuno de aproximadamente un mes, tal vez ingiriendo lo mínimo posible para mantenerse en pie, mientras su contraparte comía como si deseara comer su propio peso, las causas de muerte evidentemente los dejaban libres uno murió de hambre y el otro de un infarto. -¿Quien se sometería a algo tan horrible? - Eso es precisamente lo que intentamos averiguar, descansa compañera, mañana será un día ocupado. Esta vez sus palabras fueron más frías y junto con ellas se giró dejando a Rose sola con sus pensamientos, era hora de descansar.
