Drabble Dulces sueños [Emily x Mimi | Pokémon Rol]

Título: Dulces sueños.
Fandom: Pokémon Rol Championshipn
Personajes: Emily Hodges, Mimi Honda.
Palabras: 433
Summary: "Lo que empezó siendo como una charla amena terminó en una conversación realmente profunda en la que finalmente Mimi fue capaz de confesarle todo que había sucedido con Alpha y sus sentimientos."
N/A: When estás muy hype y esto sucede (?) | Soft hours everyone | Kurone

—Bueno… creo que es hora de que me vaya a mi cuarto —inquirió Emily, mirando el reloj de pared.

Eran ya las 3 de la madrugada y Emily había estado con Mimi en el cuarto de esta última, poniéndose al día después de tanto tiempo sin verse.

Lo que empezó siendo como una charla amena terminó en una conversación realmente profunda en la que finalmente Mimi fue capaz de confesarle todo que había sucedido con Alpha y sus sentimientos.

Había explotado en una vorágine de confesiones y lágrimas, haciendo que en un principio, Emily no supiese muy bien cómo actuar. Por supuesto, no tardó en rodearla en sus brazos, dejando que derramase todas las lágrimas que quisiese su roto corazón, susurrando palabras tranquilizadoras y acariciando su cabello.

Tras eternos minutos, cuando Mimi finalmente se sintió más calmada, se separó de sus brazos y miró a Emily a la cara, avergonzada y humillada. ¿Dejar que su amiga la viese en ese estado tan deplorable? ¡Qué demonios!

No obstante, la brillante sonrisa que Emily le devolvió hizo que su corazón se llenara de calidez. Era una sonrisa sincera, pues Emily era sincera. Mimi siempre estaba diciéndole a Alpha que era un idiota pero a veces sentía que la verdadera idiota era ella. ¿Cómo iba Emily a juzgarla?

Siguieron hablando de nimiedades, intentando aligerar el ambiente.

Mas, no mucho después, el cansancio empezaba a hacerse presente en sus cuerpos y era inevitable que en algún momento acabarían cayendo dormidas sin poder evitarlo.

Así pues, Emily se puso en pie, bostezando. Demonios, y se suponía que al día siguiente debían entrenar y estar descansadas para ello.

Al darse la vuelta, sin embargo, sintió un pequeño tirón en su camisa que le impidió avanzar. Se giró, curiosa, descubriendo a una cabizbaja Mimi sujetándola. Su sonrojo era tal que casi iluminaba la habitación.

No hicieron palabras, nunca hacían falta entre ellas. Emily sonrió enternecida.

Volvió a colocarse sobre la cama, tumbada en aquella ocasión, con uno de los brazos extendido. En ningún momento Mimi fue capaz de mirarle a los ojos.

La rubia se tumbó, dejando su cabeza sobre el brazo izquierda de la morena. En unos pocos segundos, Emily arropó el cuerpo de ambas con la manta y con su brazo libre rodeó a la joven Honda.

Enterrando su rostro en el pecho de Emily, sintiéndose protegida del cruel mundo exterior, Mimi se sintió capaz de dormir sin miedo a las pesadillas o a los malos sueños.

—Dulces sueños… —murmuró Hodges, depositando un leve beso sobre la coronilla de la rubia.

Y con una sonrisa, cerró los ojos.