Interior Duchas masculinas

Obligarse a salir de su casa solo por el hecho de la creciente paranoia de que si se quedaba un día más allí en su apartamento, olvidándose de sus responsabilidades escolares, su familia se iba a enterar e iban a tenerle que hacer una visita al respecto.

Se levantó entonces temprano para poder ocupar la piscina aprovechando que no habría P.E a esa hora, dejarse hundir al fondo para relajarse un rato, no pensar.

Pero también, hacer algo de actividad física aprovechando lo frio del agua para evitar malestar en su cuerpo, nadando de lado a lado como si realmente alguien estuviera allí para revisar qué estaba haciendo y llevar cuentas.

Cuando terminó, tan solo se dirigió a las duchas con una tranquilidad automática qué duró solo hasta que escuchó el sonido del agua y un uniforme sucio en una de las bancas.

—... Joder...—murmuró fastidiado, dejando sus cosas a un par de cubículos para poder sacar las cosas que necesitaba para ducharse.

Insane

 

Madrugada de mierda.

Tenía todo el uniforme embarrado, hasta las zapatillas, y una raspadura del carajo en la mano izquierda al apoyarme contra el asfalto. Pfff, y ni se diga del moretón que me saldría en la pierna derecha por recibir el peso de la moto.

Ni sé cómo putas me levanté, pero por ahora no sentía el que me hubiese roto algo y no iba a esperar como un marica ahí tirado la ambulancia que un par de estúpidas estaban llamando. A la final me largué luego de pasarme el aturdimiento.

Me veía como la mierda.

Ingresé aún con la mochila al hombro, hasta el casillero para sacar la ropa de deporte, cerrando el metal con algo de fuerza para perderme por el pasillo, hacia las duchas. Fue en cuanto tiré mis cosas sobre uno de los muebles que la adrenalina disminuyendo me hizo verme la palma de la mano. Seguía sangrando, goteando, pero comenzaba a sentir el escozor asqueroso.

Tsk...

Dejé el agua correr sobre el cuerpo magullado, frunciendo apenas el ceño. Sabía que dentro de un par de horas estaría sintiendo cualquier otro golpe que me hubiese dado en la caída, y para trabajar en la noche... Recosté entonces la cabeza contra la pared, pestañeando en lo que escuchaba la puerta abrirse.

Cerré la llave, buscando la toalla al estirar la derecha para medio secarme el cabello y amarrarla en la cintura, topándome con un tipo de mi clase, no era este... Lo escudriñe apenas con los rubia, como solía hacer con todo el mundo en realidad, hasta que deparé en los moretones que se estaban difuminando, quedándome un poco más de tiempo en ellos, como si mi puta cabeza no entendiera el por qué de ellos si ese imbécil ni hablaba en clase como para llamar la atención y cogerme fastidio.

 

Pese a no estar haciendo contacto visual con él directo, puso sus ojos en blanco momentáneamente al ver por su periferia qué simplemente se había quedado allí, ¿por qué simplemente no continuaba con lo suyo o se hacía cargo del desastre de su uniforme?

Terminó de sacar sus cosas de la mochila y finalmente le prestó atención, frunciendo el ceño cuando notó la dirección donde miraba.

—Es completamente inapropiado que te quedes viendo a la gente así —Habló con cierto fastidio, tranquilo pero a fin de cuentas molesto por su indiscreción —. Sigue con lo tuyo, tienes un desastre.

Miró en dirección a su uniforme para hacerle entender que a eso se refería y se fue en dirección a la ducha, solo quería quitarse el cloro de encima y su cabello, así que de momento hasta que se fuera iba a mantener su traje de baño.

 

—Pff.

Apenas y chasqueé la lengua luego de soltar la monosílaba de la garganta, sujetando la camiseta del suelo con la sudadera para echarlas dentro de una bolsa plástica que saqué de la mochila.

La porquería de uniforme me costaría un par de monedas en la lavandería, o tocaría dejar en agua esa mierda y ver qué más echarle para que desmanche. Mientras tanto me coloque la camiseta de deporte, en lo que de reojo regresaba la vista al tipejo de mi salón de clase.

—Te dieron una paliza —solté pese a lo obvio.

La maldita manía de no cerrar la puta boca. Pero si algo me nervaba era la gente que no parecía defenderse, y en definitiva Yume no tenía pinta de aquello, con lo callado que era en clase. Aunque no me importaba.

Continué colocándome la sudadera y por último me senté en la banca, desenredando los cordones de las zapatillas, frunciendo el ceño por ahí derecho. La puta mano me ardía como el carajo.

 

Abrió la llave de la ducha para dejar que ya el agua recorriera su cuerpo, y como primer paso usar sus manos para remover su cabello y asegurarse de que el agua lo enjuagara bien antes de que abriera su shampoo.

Y mientras tanto, el chico seguía sin hacerle caso a su consejo aparentemente.

—Al único que parece le han hecho algo es a ti, y no me ves detrás tuya preguntando.—Bufó, no entendía la motivación de interesarse, nada iba a cambiar con sus preguntas ni iba a resolver nada.

—Te repito que es inapropiado, así que no saques conclusiones dramáticas a algo que no tiene importancia. Mejor ve a clases o algo, no lo sé, usa mejor tu tiempo.

 

Un poco podía deducir que le habían apaleado por no cerrar la boca, pero si por eso fuese ya no tendría yo manos de tanto abrirla. Metí el pie derecho en la zapatilla y amarré los cordones, continuando con el otro para levantarme. Retire varias toallas de secarse las manos para humedecerlas y quitar el mugre de mierda.

—Que le den una paliza a alguien no me parece dramático, idiota —respondí en alguna especie de gruñido, como perro arisco, colocándome nuevamente la mochila al hombro—, pero si fuese tu, no me dejaría dar así de duro, perdedor.

A la final me largué a clases, ya en hora de almuerzo vería si me vendaba la jodida mano o me aguantaba el dolor.

 

—Conclusión dramática seguro por lo que te toca vivir a ti...—Gruñó en respuesta, mirándolo de reojo antes de poner los ojos en blanco, no hacía más que preguntarse si solo a sus ojos no era algo obvio, podía ser cualquier otra cosa, resbalar y caer en alguna escalera, inclusive no usar un equipo de protección adecuado en un deporte de contacto.

Para cuando notó que finalmente se fue, suspiró mientras se retiraba el traje de baño para poder terminar de enjabonarse, no tardar más y tampoco arriesgarse a que alguien más viniera y fuera igual de dramático que él.

"Pero si fuese tu, no me dejaría dar así de duro, perdedor."

Chasqueó la lengua con cierta molestia cuando termino de ducharse y tomaba la toalla para poder secarse, lo decía tan fácil que le molestaba demasiado, ¿qué se suponía que hiciera cuando solo terminaba congelándose? ¿cómo se suponía que obligara a su cuerpo a reaccionar en cosas así? Si cuando llegaba hacerlo tampoco es que tuviera muy claro qué era lo que pasaba.