Danganronpa Deseó que fuese mentira [Sonia x Gundham]

Título: Deseó que fuese mentira.
Fandom: Danganronpa.
Personajes: Sonia Nevermind, Gundham Tanaka.
Palabras: 444
Summary: "Deseó que todo fuese mentira, un mal sueño, una cámara oculta. Aun a esas alturas, con más compañeros muertos que vivos, deseó que todo fuese mentira."
N/A: Para la actividad "Doce Deseos" | SPOILER. Avisados quédais, spoiler del cuarto caso y del final del juego. Está aquí, sin embargo, porque el final es más bien del anime.

Los ojos de Sonia se anegaron en lágrimas cuando supo la verdad de aquel caso.

Ya no podía soportarlo más. Ver como todos sus amigos habían ido cayendo poco a poco en la desesperación, como habían caído en las trampas de Monokuma y habían desaparecido de su lado con tanta facilidad.

Ella, como princesa, debía mantener la cabeza fría durante esas situaciones. Debía mostrar al pueblo compostura ante desgracias como aquella.

Y sin embargo, ahí estaba, perdiendo toda señal de señorita y dejando ver todo su dolor en las saladas gotas que no dejaban de salir, rodando por sus mejillas hasta chocar en el suelo.

Porque había sido encontrado culpable él, la persona que menos podía esperar y que menos deseaba ver en aquella situación. Porque ella confiaba plenamente en él y estaba segura que no sería capaz de hacer algo así.

Lo miró, vio su imagen borrosa alejándose hacia la terrible sala de tortura donde las ejecuciones se llevaban a cabo. No pudo evitarlo, no apartó la mirada en ningún momento, acrecentando más su dolor.

—Gundham… —murmuró, casi sin voz, apretando con fuerza sus manos.

Lo odió. No a él, odió la situación. Porque ella sabía que no había sido por malicia, porque Gundham no era una mala persona. Lo había hecho por ellos, para que pudiesen salir de aquella casa de diversiones (o del terror, más bien). Lo había hecho por ella.

Sus piernas, temblorosas, finalmente cedieron cuando vio aparecer a los cuatro hámsteres a su lado. Se dejó caer en el suelo, desgastada, llorando desconsoladamente. Los pequeños roedores su subieron a su falda, también entristecidos por lo sucedido.

Deseó que todo fuese mentira, un mal sueño, una cámara oculta. Aun a esas alturas, con más compañeros muertos que vivos, deseó que todo fuese mentira.

. . .

Cuando la princesa abrió los ojos, observó a su alrededor un extraño edificio de índole futurística. Salió de aquella extraña cápsula y, tras recuperar su vista normalizada, miró como Hinata, Kazuichi, Fuyuhiko y Akane se encontraban ya despiertos y esperando que los demás también saliesen de aquel extraño programa.

Ella no lo dudó, en cuanto tuvo capacidad de moverse libremente, se acercó a la cápsula donde Gundham se encontraba aun durmiendo.

Y esperó.

Esperó viendo como poco a poco todo iban despertando excepto él.

Hasta que finalmente lo hizo.

Hasta que finalmente la tapa se abrió, dejando ver aquella morada bufanda y provocando que el corazón de Sonia diese un vuelco.

No podía creérselo, estaba ahí. Tenía un aspecto algo diferente pero no dudaba en absoluto, ese era Gundham, su Gundham.

Lo abrazó con fuerza, sintiendo sus ojos anegándose en lágrimas.

—Estás bien… —murmuró.