Después de estornudar voltee a ver al Loppuny de Rojo. —Hola Loppu...¡Achu!—me interrumpí a mi misma tras estornudar, Rai saludo a la pokemon sonriente.
Mire a Rojo y asenti --Oh, bueno...esta bien, jaja sera divertido--Le dije sonriendo levemente mientras me levantaba
Me puse de pie y me despedí de Loppuny. —Vamos Rai—le dije a la pokemon mientras esta asentía y me empezaba a seguir, yo mientras caminaba apreté los puños con fuerza, al igual que los dientes.
Lopunny supuso que un pañuelo y medicinas para resfriado serían de utilidad, y se las dió a Mitsuki, mientras, una sombra cubría mis ojos, por tener la gorra baja, mientras esbozaba una malévola sonrisa...
Lopunny se despidió de Mitsuki y Raichu, para irse caminando, mientras, me puse a caminar con ella, y no pude evitar tomarle la mano y empujarla suavemente a modo de jueg
Me recosté de un árbol y tras estornudar un poco, apreté los dientes. —"Quien lo entiende...¿no?"—pensé antes de suspirar.
Mire a Rojo y suspire largamente mientras seguia caminado, yo no queria hacer eso pero seguiamos actuando
Suspire y mire a Rai. —De cualquier forma...si el cree que yo pienso que las cosas se resuelven solas...—me separe del árbol y empece a caminar con rai hacia la pradera arte—esta algo equivocado y tal vez no me conoce bien...o ni quiere intentarlo—rai me veía mientras caminábamos, luego tomo mi mano y yo le sonreí.
Pidgeotto aterrizo de nuevo en el parque por lo que sonrei un poco y vi a eevee el cual estaba triste por mi
Mire a Rojo, suspire y le correspondi el abrazo, aunque sabia que durante esa semana....quizas no lo hubiera hecho
Me detuve y puse una mano en la cabeza de Rai. —Lamento preocuparte, Chuchu—le dije sonriendo luego suspire—vaya...extraño verte como un Pikachu...ya que siendo un raichu no te puedo cargar mucho—le dije, esta sonrió pero luego se dio cuenta de algo y frunció el ceño—N-no es que te este diciendo que pesas mucho o que estas gorda, tranquila—ella suspiro.
--quisiera verla...pero no creo que ella me quiera ver--dije mientras bajaba la mirada--Ademas no me gusta sufrir cuando la extraño--
Mire a Rojo curiosa --Pe-Pero si no llevamos ni tres minutos, la diversion todavia no ha empezado--Le dije a Rojo
—Oh bueno, sigamos entonces... —resoplé, siguiendo con mi camino, con la mirada baja y una sonrisa un tanto malévola—
Mire a Rojo y sonrei por haber aceptado seguir, pero despues segui caminando con las manos en mis bolsillos
--pero me lo he ganado..--dije mientras seguia viendo el suelo y empece a hacer circulos en la tierra pues estaba triste-+
—...¿Entrenamos mas tarde?—ella asiente, yo sonreí y me senté en una banca— ¡Achu!...va-vaya...me vendría bien un poco de compañía—rai frunció el ceño tras escuchar eso—co-compañía humana, Rai.