Crónicas Entrecruzadas

Re: Crónicas Entrecruzadas

acá va la primera parte de la tercera crónica:

CRÓNICA 3: una visita inesperada
(Primera parte “¡Tiene que ser un Gyarados!”)​

En ciudad Celeste una hermosa chica se encuentra sentada a orillas de la piscina de su gimnasio, algo melancólica y por cuya cabeza pasaba una y otra vez una escena que le dolía recordar, a pesar de que en su memoria las imágenes se veían borrosas y no escuchaba nada, algo era muy claro, una chica llorando, y un chico abrazándola tiernamente.


Chica: Yo no soy quien para interponerme entre ellos, además la felicidad de ambos es más importante para mí (mientras una tímida lágrima rodaba por su mejilla)


Misty: ¡Daisy! ¿Estás bien?


Hacía ya casi una semana, que Misty notaba extraña a su hermana, no como cuando tomaba un trapeador y se ponía a limpiar, sino callada y sumisa toda la semana, seguía dispuesta a ayudar en el gimnasio, pero ya no con su confiada sonrisa. Al escuchar la voz de su hermana menor, Daisy rápidamente secó su rostro con la mano, y volteó a saludarla.


Daisy: ¡Buenos días Misty!, ¿no me digas que ya ha llegado otro retador?


Misty: No, aún es muy temprano, seguro en un rato llegarán.


Daisy: Vaya que se nos ha pasado volando esta semana, no puedo creer que ya sea viernes.


Misty: Tienes razón, cada día llegan más retadores al gimnasio.


Daisy: Pero ninguno ha logrado vencerte (guiñándole el ojo)


Misty: He tenido suerte.


Daisy: Claro que no, has merecido ganar todas esas veces.


En ese momento se escucha el timbre del gimnasio


Misty: Debe ser un retador.


Daisy: Ya habían tardado (intentando reír)


Misty: Oye, en la tarde voy al lago a entrenar, ahí Gyarados puede nadar más libremente, y aún no me doy por vencida con las clases de natación de Psyduck ¿quieres venir?


Daisy: La verdad es que hoy no me siento muy bien, a esa hora él ya habrá llegado, seguro te acompañará.


Misty: ¿Quién?, ¿Tracey?, sí es cierto que él viene los viernes por la tarde, pero eso no quita que tú vengas también.


Daisy: No te preocupes, además Lily y Violet quieren que las ayude a elegir un vestido para una sesión de fotos que tendrán el domingo.


Misty (sonaba preocupada): está bien.


Daisy: De verdad que tienes una fijación con ese lago, desde el incidente con los Rocket buscas cualquier segundo para ir allá.


Misty: Yo sigo pensando que ahí hay algo que ellos quieren, y como la policía no quiere hacerme caso, es mejor que yo vaya cada vez que pueda a asegurarme que ellos no estén rondándolo.


Daisy: A veces no te entiendo, pero reconozco que tienes mejor instinto que yo para esas cosas. Mejor no hagamos esperar al retador, yo seré el árbitro.


Misty: ¡Gracias!


La mañana transcurrió “normalmente” en Celeste (si tomamos en cuenta que ya se había hecho cotidiano tener 8 retadores antes del mediodía, y el cofre de medallas aún no había sido abierto), cerca de las 3 de la tarde llegó Tracey al gimnasio como de costumbre cada viernes, sólo que esta vez desde ese momento Daisy se perdió de vista; ya llegando a las 5, la líder decidió terminar los duelos del día e irse al lago como tenía planeado, acompañada sólo por su amigo.


Unas horas antes en pueblo Paleta:


¿? : ¡Tiene que ser un Gyarados!, no puedo creer que no haya ninguno acá en el laboratorio.


Oak: Antes sí tenía un par de Gyarados, pero surgieron muchos problemas, y sus entrenadores decidieron llevárselos consigo, son pokémon con un temperamento muy difícil de controlar.


¿?: ¿Conoce a alguien que tenga uno por aquí cerca que me pueda ayudar?


Oak: A ver … (pensando), ah sí es cierto, la líder de Celeste tiene uno, tengo entendido que ese pokémon es particularmente difícil de tratar, pero con ella es increíblemente dócil.


¿? : Me iré a Celeste entonces.


Oak: Lástima que no estuvieras acá hace media hora, Tracey acaba de partir hacia allá.


¿?: No hay problema, aún recuerdo el camino, ojala ella pueda ayudarme a realizar mi investigación, ¡muchísimas gracias abuelo!


Oak: ¡Buena suerte Gary!


El chico comenzó así su viaje, si bien es cierto que llevaba años sin visitar esa ciudad, no le costó mucho encontrar el camino; de hecho al encontrar uno de los letreros que indicaban la distancia restante para llegar a la ciudad se detuvo recordando algo que le causaba mucha risa.


Gary: ¡No puedo creer que eso siga escrito ahí! Jajaja.


Pero luego de entrar a la ciudad Gary notó que había algo que sí había olvidado, y era donde queda el gimnasio.


Gary: No puede ser, ¿cómo pude olvidar la ubicación del gimnasio?, y ahora que lo pienso, ese gimnasio no tenía una sola líder, tenía tres, y ninguna me parece que tenga el perfil de dominar a un Gyarados, ah creo que es por acá.


Lamentablemente el camino que eligió no llevaba al gimnasio, era un camino boscoso que sólo lo llevaría hasta el lago de la ciudad, pero no precisamente el camino que cualquier habitante de Celeste elegiría, este era muy problemático por la cantidad de pokémon salvajes que tenía, todos extremadamente territoriales, y poco amables con los visitantes.


Gary: ¡que fastidio! No era por acá, tendré que devolverme.


El chico no pudo regresarse, porque justo al voltear un enjambre de beedrills venían furiosos hacia donde él estaba; sin más alternativas, siguió adelante corriendo desesperadamente de tan amenazantes pokémon.


Mientras tanto en el lago, Misty estaba nadando junto con Gyarados, ella tenía un traje de baño entero en distintos tonos de azul, pero con una sola asa, que le quedaba muy bien, además que tenía su cabello suelto, que había crecido bastante; mientras Tracey intentaba nuevamente enseñar a Psyduck a nadar, luego de un rato Misty se detuvo a orillas del lago mientras Gyarados seguía nadando, pero escuchó un zumbido que la hizo voltear.


Misty: ¡Que raro! ¿Qué será ese zumbido?


Y al voltear ve a un chico corriendo desesperadamente perseguido por varias decenas de beedrills.


Misty (Con toda la potencia de su voz): ¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah! Son beedrills, ¿por qué a mí?


Ya en ese momento el chico que corría había llegado junto a Misty, pero lo que tenían al frente era el lago, no había donde correr.


Misty (tomando el brazo del chico y gritando): ¡Al agua!


Dicho esto saltó, halando al chico con ella al agua, Tracey también se sumergió, así permanecieron los tres unos segundos, mientras el enjambre de beedrills se alejaban; cuando ya no podían aguantar más la respiración salieron a tomar aire, el primero fue Gary, seguido de Tracey, y unos 20 segundos después Misty (ella estaba acostumbrada a resistir bastante bajo el agua, y con beedrills cerca no pensaba arriesgarse), en el instante que ella salió a superficie, Gary quedó como mudo viendo a la chica que lo había salvado, pero ella lo primero que dijo fue:


Misty (gritando): ¡Odio a los bichos!, (en ese momento vio el rostro del chico, y bajó el tono), ¿Gary? ¿Qué haces aquí?


Gary quedó atónito al ver que la chica lo había reconocido, él ciertamente recordaría conocer a una chica tan bonita, sin embargo a esta no la ubicaba en ninguna parte de su memoria.


Gary: ¿nos conocemos?


…CONTINUARÁ


Ojalá les haya gustado^^, ya saben que me gusta mucho leer sus comentarios, no importa el tipo :D

 

Re: Crónicas Entrecruzadas

Gracias a todos^^

Nadia que linda pasarte por acá^^, ojalá te gusten las contis también.


Y sí, es mi primer fic, a lo más que había llegado era a ayudar en uno colectivo de los pokeshippers, pero fue poquitico, este es el primero que escribo yo sola

Acá va la segunda parte (esta crónica tiene 3 partes)

CRÓNICA 3: Una visita inesperada
(Segunda parte “Psyduck lo tiene todo cubierto”)​

Gary: ¿nos conocemos?


Misty (asombrada por la pregunta): bueno, algo así, yo era parte del grupo de bobos


En sus continuas riñas con Ash cuando recorrían Kanto, Gary siempre se refería a Ash y compañía como el grupo de bobos.


En ese momento a Gary le vino a su cabeza la imagen de una joven pelirroja algo malhumorada que siempre acompañaba a Ash, en realidad nunca cruzó muchas palabras con ella, lo que sí recordaba era que le había caído bien el día que la escuchó decir “si yo llorara cada vez que Ash pierde una batalla, estaríamos inundados”, era agradable saber que alguien podía hacer enfadar a Ash cuando él estaba lejos


Gary: ¿Mis… Misty?


Misty: La misma.


Gary (bastante apenado): discúlpame, cuando yo hablaba de los bobos lo decía por Ash, es que (pero Misty lo interrumpió)


Misty( riendo): tranquilo, no era un reclamo, yo sé que era para molestar a Ash.


Tracey (que ya se había acercado a los dos chicos): Gary, el profesor me comentó que estabas iniciando una nueva investigación ¿cómo vas con eso?.


Gary: Precisamente por eso vine acá, mi investigación es sobre los Gyarados, pero en estado salvaje es imposible acercárseles, y como ni mi abuelo ni yo tenemos uno, él me recomendó que le pidiera a la líder de esta ciudad que me ayudara mostrándome el suyo; hace años yo conocí a tres líderes acá, no sé cual de ellas sea.


Tracey: Ninguna de ellas, por lo visto viniste buscando a Misty, las otras chicas son sus hermanas.


Gary: No tenía idea de que fueras tú la líder.


Misty (quien se acababa de percatar de que lanzó a Gary al agua completamente vestido): Te Empujé al agua con todo y zapatos, mejor vamos al gimnasio para que te cambies, te podrías resfriar.


En ese momento Gary se acercaba a ella, pero antes de lograrlo un par de ojos que lo veían con furia desde hace unos minutos sin que Gary lo notara, descargaron toda su rabia contra él.


Gyarados: Gyaaaaaaa (gruñendo y abalanzándose sobre él)


Misty: ¡Gyarados tranquilo!


Cuando vio a su entrenadora a su lado, y lejos del “intruso”, el pokémon se calmó, pero seguía viendo amenazadoramente a Gary.


Gary (algo nervioso): Supongo que este es el gyarados que yo venía buscando, con razón mi abuelo me contó que tenía muy mal carácter.


Misty: No tanto, en realidad es muy dulce, sólo que se pone nervioso con desconocidos. (decía esto mientras acariciaba a su pokémon para tranquilizarlo),


Luego de esto, Tracey la ayudó a subir a la orilla; a Gary le llamó la atención ver que gyarados no se inmutaba al ver a Tracey cerca de su entrenadora, en cambio cuando fue él quien se acercó el pokémon estalló de ira.


Gary (a si mismo): a mi me parece de todo menos dulce.


Cuando Misty salió del lago llamó a Gyarados a su pokebola, sin embargo, Gary parecía estar hipnotizado viendo a la pelirroja, sólo que alguien más lo hizo despertar de su sueño, en ese momento, Psyduck que estaba al lado de Gary, lo veía con una mirada desconfiada, y le lanzó un chorro de agua directo a la cara para que dejara de ver a su entrenadora.


Misty (gritando): ¡Psyduck! ¡Estás nadando! (nadie se esperaba que gritara eso)


Tracey: es cierto, no nos dimos cuenta que lleva todo este tiempo en el agua sin gritar.


Gary (confundido): ¿qué?


Misty: Ay disculpa, es que mi Psyduck nunca ha podido nadar, pero hoy lo logró

Ya en ese momento Psyduck había llegado a la orilla para que su entrenadora lo felicitara


Gary: Pues, ¡que bueno entonces!.


Misty (cargando a Psyduck): bien hecho, al fin lo lograste, pero lo que le hiciste a Gary estuvo mal.

Y puso a Psyduck en el piso, mientras Gary salía del lago


Tracey: bueno, vamos al gimnasio, de todas formas ya es bastante tarde.


Misty se puso por encima del traje de baño un vestido playero, Tracey hizo lo mismo con su ropa, y al pobre Gary le tocaba irse mojado, cuando Misty estaba llamando a Psyduck a su pokebola, éste insistió en no entrar e irse con ellos, tras lo cual su entrenadora lo cargó, ella siempre decía que el pato pokémon la sacaba de sus casillas, pero sin darse cuenta lo tenía bastante consentido, mientras el pokémon veía con una expresión recelosa a Gary.


En el gimnasio


Daisy: ya se tardaron bastante, ¿será qué les pasó algo?


Violet: No te preocupes seguro están bien.


Lily: seguro la feita sigue con sus alucinaciones en ese lago y no quiere irse.


Daisy: No digas eso.


Violet: ¿de cuándo acá tú la defiendes tanto?


Daisy: Ustedes están insoportables, yo mejor me voy a buscarla.


Pero cuando llegó a la puerta del gimnasio, ya estaban llegando Misty Tracey y Gary.


Daisy: ¿qué sucedió? Llegan tarde


Misty: tuvimos un incidente con unos beedrill, pero nada grave, ah te presento a Gary.


Daisy: Oye yo te conozco, viniste acá hace años por una batalla.


Gary: Si recuerdo bien tu eres Daisy ¿verdad?, fuiste quien aceptó mi reto, tus hermanas no parecían muy interesadas en pelear.


Daisy: sí, aunque la verdad me arrepentí, terminé con los ojos girando de tanto perder, pero… estás empapado, pasa, voy a preparar chocolate caliente.


Y los chicos pasaron; a Tracey y Misty siempre les sorprendía lo atenta que se había vuelto Daisy, aunque al parecer en esta ocasión Tracey parecía algo más desconcertado de lo común, cuando la vio tan atenta con el nuevo visitante. Al entrar a la sala, estaban Lily y Violet sentadas viendo televisión.


Daisy: tenemos visitas él es (pero a Daisy la interrumpieron sus hermanas quienes saltaron y gritaron al unísono)


Lily & Violet: ¡Dios mío! ¡Es Gary Oak!


Gary: ¿?


Lily: Te he visto en todos los noticieros cuando relatan tus hazañas como investigador.


Violet: además que cuando eras entrenador seguíamos todas tus victorias.


Gary(algo asustado): pero, si nosotros ya nos conocíamos.


Lily: en ese momento no sabíamos quien eras, y aun así, no quisimos pelear contigo porque nos dimos cuenta de lo talentoso que eres.


Daisy (en voz baja): Mentirosa, no quisieron por flojas.


Violet: ¿dijiste algo?


Daisy: no, nada; pero deberían dejar que Gary entrara, si no se han dado cuenta está empapado.


Lily: seguro fue por culpa de la feita ¿qué te hizo?


Misty: Muy graciosa Lily.


Gary: no, tu hermana me salvó de unos beedrill.


Violet: hasta tu bolso está empapado, no debes tener que ponerte, yo iré al centro comercial a comprarte algo para que te pongas.


Lily: no hace falta, yo iré


Violet: fue mi idea, iré yo


Ya al rato que ambas chicas discutían sobre quién iría, Daisy interrumpió


Daisy (con un tono de fastidio en su voz): ¿por qué no mejor van las dos y se callan?


Y ambas chicas salieron corriendo al centro comercial.


Daisy: tú puedes ir a darte un baño caliente mientras ellas vuelven, mientras más te demores mejor, esas dos pierden la noción del tiempo cuando están de compras así no sea para ellas; yo iré a preparar el chocolate. Te dejaremos la ropa en la habitación de huéspedes, Misty por favor muéstrale donde es.


Y Misty se llevó a Gary, mientras Psyduck los seguía como vigilando al chico, cosa que Gary y Tracey notaron.


Tracey (para sí mismo): parece que Psyduck lo tiene todo cubierto; (ahora en voz alta) Daisy te ayudo en la cocina.


Daisy (algo apenada): No hace falta, hacer chocolate es algo muy sencillo, y la cena ya está casi lista, tú también deberías ir a descansar en tu habitación de siempre.

Para sorpresa de muchos Lily y Violet llegaron bastante rápido, eso sí cargando muchísimas bolsas de ropa.


Violet: no sabíamos qué comprar, y como no había tiempo trajimos todo lo que nos gustó para Gary.


Daisy (con la gotita en la cabeza): bueno déjenlas en la segunda habitación de huéspedes, y lleven también esta taza de chocolate.


Ambas chicas fueron corriendo a dejar las cosas, mientras Gary se daba una ducha en el baño de esa habitación.


Cuando terminó todos cenaron juntos, aunque fue bastante incómodo escuchar a Lily y Violet profesar su amor y admiración al nuevo invitado, hasta que este las interrumpió.


Gary: Junto a las bolsas de ropa no estaba la factura, díganme cuánto les debo.


Violet: Ni pensarlo, eso te lo regalamos con todo nuestro cariño


Lily: es cierto, si quieres pagarme sólo necesitas llevarme a almorzar mañana


Violet: ¿por qué a ti sola?


Gary: hagamos algo, vayamos todos a almorzar mañana que yo invito.


Lily (en voz baja): esto me suena a multitud, yo lo quería para mi sola.


Misty: discúlpame Gary, mañana me será imposible, ya había quedado con Tracey en ir a comprar unos repuestos que nos hacen falta para el motor de la piscina, y cambiarlos nos va a tomar un buen rato.


Daisy: Y yo los voy a ayudar


Luego de esto, le dijo a Misty que estaba a su lado al oído: “por favor no me hagas escuchar a estas dos mañana en el almuerzo también”, tras lo cual Misty rió.


Violet: pues mejor aún, nosotras fuimos de compras así que nos llevará a almorzar a las dos.


En ese momento Gary hubiera preferido que le dieran la factura, acababa de notar el lío en el que se había metido.


Luego de cenar, todos se fueron a dormir, o mejor dicho casi todos.


… CONTINUARÁ

 

Re: Crónicas Entrecruzadas

Sí, sé a lo que te refieres, lo que pasa es que esta parte salió casi por accidente, originalmente la crónica 3 iba a tener 2 partes, pero se me hizo tan larga, que tuvo que salir una tercera, por eso esta que es la del medio, es la que tiene menos trama, es que si no iba a quedar muy larga.

En unas horas publico la tercera parte^^

 

Re: Crónicas Entrecruzadas

Gracias a todos por los comentarios^^, disculpen que ayer no pude poner la continuación, es que no tuve internet en la tarde.

CRÓNICA 3: Una visita inesperada
(Tercera parte “Somos la pareja perfecta”)​

Luego de la cena, Daisy se quedó algo pensativa a orillas de la piscina del gimnasio, Misty notó esto y decidió acompañarla.


Misty: Esas Lily y Violet nunca cambian.


Daisy (tratando de ocultar su estado de ánimo): ¡Claro!, no tienen mi madurez, ni mi confianza.


Misty (riendo): Pues supongo que no.


Daisy (ya en un tono más serio, casi triste): Por cierto, disculpa por arruinar tu cita.


Misty (que no entendía nada): ¿Mi qué?, ¿con quién?


Daisy: No hace falta que disimules, rechazaste la invitación de Gary porque querías estar con Tracey, te prometo que apenas se vayan Gary y las chicas los dejaré solos.


Misty (que seguía sin entender mucho): pero es que el motor de la piscina sí está fallando, lo que dije es cierto; más te vale no irte, ya dijiste que nos ayudarías.


Daisy: Vamos, no lo niegues más, además hasta hacen bonita pareja.


Misty (que ahora lucía seria y pensativa): Sí, somos la pareja perfecta.

Tras lo cual hubo un breve silencio que para Daisy fue eterno, pero Misty lo rompió para agregar algo más.


Misty: … En teoría.


Daisy (que ahora era quien no entendía nada): ¿Qué?, ¿cómo es eso?


Misty (aún pensativa): Sabes, una vez le dije a un amigo que era más fácil fijarte en alguien a quien le gustaras, que empeñarte en un imposible; en ese momento también pude haberle dicho que era más fácil enamorarse de quien te conviene, pero ahora sé que eso no sirve de nada, cada corazón es muy necio a su manera.


Daisy: no entiendo, si Tracey y tú se llevan muy bien, él es un gran chico y siempre se preocupa por ti.


Misty: Sí, nos conocemos muy bien, es fácil hablar el uno con el otro, existe mucha confianza entre ambos, cuando lo necesito siempre está a mi lado, y quiero pensar que también he estado para ayudarlo a él, pero… no podría amarlo de esa forma, y estoy segura que él piensa y siente igual.


Daisy: ¿Qué estás diciendo?


Misty: Cuando era pequeña, siempre eran “las tres hermanas fantásticas y yo”, ustedes hacían todo juntas, y yo siempre por mi lado, no encajaba muy bien, a ustedes les gustaba el maquillaje, a mí las batallas; en el fondo sentía que debía tener un hermano mayor, y él ha sido eso para mí, es mi hermano, y lo quiero como tal; y él siendo hijo único prácticamente me adoptó como su hermanita. (Ya al decir esto sonrió levemente)


Daisy : Perdóname, es mi culpa que te sintieras así todos esos años.


Misty: No tienes por qué disculparte, cada persona tiene sus gustos, además hemos pasado muchísimo tiempo juntas desde que soy líder, para serte sincera ha sido divertido tener una hermana mayor también (guiñándole un ojo a su hermana).


Daisy (quien en estos momentos tenía varias razones para sentirse feliz, pero no quería ser tan obvia): Lily y Violet también tienen su lado bueno, pero muy, muy en el fondo.


Misty: jajajaja.


Daisy: bueno, ya es tarde, a dormir, que mañana tenemos que cambiarle los repuestos a ese motor, y no sabemos cuántos retadores van a venir.


A la mañana siguiente Gary logró hablar con Misty para explicarle su investigación y pedirle su ayuda, ella le dijo que apenas terminara su trabajo, iría al lago con Gyarados a comenzar la investigación, y el domingo le prometió ayudarlo más tiempo.


Luego de eso se enfrentó a varios retadores, nuevamente sin perder batalla alguna, Gary, que estaba en las tribunas viendo cada batalla, agradeció no haberse tenido que enfrentar a Misty cuando fue a buscar su medalla a ese gimnasio años atrás.


A la hora del almuerzo ya Lily y Violet habían “secuestrado” a Gary, quien hubiera preferido mil veces que le dieran las facturas por la ropa, ya que las chicas lo hicieron llevarlas al restaurante más caro de la ciudad.


Misty y compañía terminaron bastante rápido el asunto de la piscina, por lo cual cuando Gary llegó de su ruina… perdón, almuerzo; ya la chica estaba lista para ir al lago a comenzar la investigación, sólo que Gary no contaba con que Daisy y Tracey los acompañarían también.


En el lago tardaron un buen rato en calmar a Gyarados, a quien no le gustó la idea de tener que pasar tanto tiempo siendo estudiado por el nuevo visitante, finalmente Misty logró que el pokémon colaborara, eso sí, siempre y cuando Gary estuviera lejos de la chica, cuando hacía el mínimo intento por acercarse a ella, el pokémon enfurecía, mientras tanto Psyduck veía la escena desde otra parte del lago (sí, nadando sin flotador) riendo a carcajadas.


Entre esa tarde y el día siguiente, Gary logró tomar las medidas al pokémon (se sorprendió de lo grande que era este Gyarados, unos 120cm más grande que uno promedio), le pidió que subiera nadando la cascada del lago, cosa que al pokémon no le costó nada, tomaba medidas sobre la frecuencia sonora de su rugido, y otras cosas que al parecer sólo él y Tracey entendían, incluso tomó muestras del agua del lago para examinarlas, diciendo que tal vez eso había influido en el gran crecimiento del pokémon.


En realidad el fin de semana pasó muy rápido, Lily y Violet se quejaban de que Misty acaparaba el tiempo de Gary, mientras éste se quejaba en silencio de todos los “chaperones” que tenía la chica, no sólo era Gyarados, Tracey y Daisy también hacían su parte, y si alguno de estos fallaba, siempre estaba Psyduck para lanzarle un chorro de agua a la cara, o algún fanático de ella que se pasaba por el lago a verla, aunque esos eran los menos “peligrosos” cuando Gyarados los veía con su característica furia, todos salían despavoridos.


Llegando casi a la noche del domingo, Gary dijo que no tenía listos todos los datos que necesitaba, y preguntó si no habría problema en quedarse toda la semana, alegando que no interferiría con los duelos de gimnasio de Misty, que de hecho ver a Gyarados en batalla le ayudaría a obtener más información, a lo que las 4 hermanas no pusieron objeción, Tracey hizo un “movimiento” inesperado, y llamó al profesor para pedirle que le dejara libre la semana, y así seguir ayudando con la investigación; en verdad al chico le llamaba la atención los resultados que podían obtener, pero parecía innegable que en parte también lo hizo para seguir su labor de “chaperón”, aunque a otras personas, específicamente a Gary, les haya dado la impresión que había otro motivo, mientras Daisy parecía estar inexplicablemente feliz, era bueno verla así, sobre todo después de la semana tan deprimida que había pasado.


Mientras tanto en un lúgubre lugar, una reunión muy misteriosa era llevada a cabo.


Hombre 1: Yo estoy seguro que está ahí, y ustedes me lo tienen que traer.


Hombre 2: Sí señor, yo les di la misión a estos dos pero fallaron, sólo estábamos esperando un tiempo prudente para el contraataque.


Chico 1: hay que hacer algo con la líder de la ciudad, fue su culpa que falláramos.


Hombre 1: ¿Intentan decirme que una niña es capaz de arruinar los planes de dos de los que creía, eran los mejores miembros de mi organización?, no me hagan reír, la razón es que me equivoqué y son unos ineptos.


Chica 1: pero señor Giovanni, de decimos que esa líder es de armas tomar, no la podemos subestimar, además, rara vez está sola.


Giovanni: ¡Namba! Quiero que convoque a 10 de los miembros de la organización que considere los más aptos para esta misión, a ver si entre todos pueden con la niñita (en tono burlón).


Cassidy: Le vamos a traer el objetivo jefe, no se preocupe.


Giovanni: más les vale, tú y Bull comandarán esta misión.


Butch (gritando): ¡Que es BUTCH!, (y cuando notó a quien le estaba gritando) Ay, perdón jefecito.


Giovanni: No quiero más incompetencias, ya he sido demasiado paciente.


FIN DE LA CRÓNICA 3

 

Re: Crónicas Entrecruzadas

Que linda Nadia, gracias^^, con lo de chaperón, sabes cuando una pareja joven va a una cita, y pasa algo como que el papá de la muchacha hace que el hermanito vaya en la cita para "vigilar" a la parejita, el hermanito sería lo que acá llamamos chaperón, alguien que está "de sobra" junto a una pareja, como vigilándolos.
Disculpen si hay más detalles como esos por el dialecto, he intentado no usar palabras muy locales, pero para esa no encontré una palabra que la sustituyera y sonara igual (aquí a los chaperones también les decimos "lamparitas", pero esa sí sólo la iba a entender la gente de acá^^)


Ah y ya se me iba a pasar, TR sí acertaste lo del mensajito que leyó gary en el camino a ciudad Celeste, es el que mencionaste^^, de hecho se puede decir que pasaste la prueba, yo lo había puesto así a ver si se acordaban.
Y sabes que yo no podría tratar de fea a Misty^^, la cosa es que en el fic fue ahora que Gary se vino a dar cuenta de lo que todos notamos desde el primer capítulo cuando la conocimos.

 

Re: Crónicas Entrecruzadas

Aquí va la primera parte de la crónica 4, esta también es de Misty

CRÓNICA 4: El Objetivo
(Primera parte “Ella tampoco está sola”)​

Narrador: miércoles en ciudad Celeste, la semana ha transcurrido sin mayores inconvenientes… hasta ahora, porque en un lugar lejano se planea acabar con esta situación.


Giovanni: ¿Ya convocó a los miembros que le ordené Namba?


Namba: Sí, señor, ya vienen para acá junto con Cassidy y Hutch.


A menos de un minuto de haber dicho esto, a la habitación entraron 11 personas, incluidos Cassidy y Butch.


Giovanni: ¿No puedes seguir ni siquiera una simple orden Namba? Te ordené traer 10 miembros aparte de los dos líderes, aquí sólo veo 9.


Namba: El décimo está hablando con usted en este momento señor.


Giovanni: ¿Tú?, no me hagas reír Namba, ambos sabemos que estás “caducado” para participar en una misión.


Namba: Señor, el más capacitado para situar la ubicación exacta del objetivo soy yo, no confío en estos inútiles para leer mis dispositivos digitales.


Giovanni: Si algo sale mal, usted también será responsable, comandará la misión junto a los otros dos, ahora dense prisa.


Y el escuadrón partió hacia su misión.


Mientras tanto en ciudad Celeste, llegaban las 3:00pm, Misty se disponía a luchar contra el último retador que aceptara por el día para luego ir al lago a proseguir las investigaciones junto a Gary, Tracey y Daisy, mientras Lily y Violet se cansaron de esperar a que el joven investigador apartara su atención de las batallas de gimnasio de “la feita” y se fueron a tomar unas fotos para su portafolio de modelos. Luego de la batalla, los cuatro partieron hacia el lago.


Mientras caminaban hacia el lago:

Gary: No dejo de asombrarme cada vez que ganas una batalla, ya veo por qué el gimnasio sigue invicto.


Misty: Exageras, además, este no es el único, hay otro invicto también.


Gary: ¿Cuál es el otro?


Daisy: No lo sabemos, la federación de gimnasios es muy extraña con eso, como hay una mención especial para los gimnasios invictos de la temporada, mantienen los nombres en secreto hasta que cierre el período de batallas.


Gary: pero no entiendo ¿cómo saben entonces que hay otro?


Tracey; en los informes mensuales dicen si hay y cuántos gimnasios siguen en la competencia, sin embargo no dicen los nombres, según ellos para no crear rivalidad entre líderes, los retadores simplemente se dirigen hacia el gimnasio que según los rumores es el posible invicto.


Daisy: Ya hace tres años que ningún gimnasio logra el título.


Gary: ¿El año pasado Misty ya era líder?


Daisy: Sí, fue una lástima, estuvo muy cerca, sólo otorgó 4 medallas.


Tracey: sí, recuerdo que sólo estuve acá cuando perdió la primera contra una chica llamada Sakura.


Daisy: sí, pero la misma regresó este año y no lo logró (decía esto muy contenta)


Misty: No digas eso, ella es muy hábil, sólo que esta vez tuve suerte.


En ese momento ya habían llegado al lago, los chicos desempacaron sus cosas y se disponían a comenzar su labor; los exámenes que Gary había hecho al agua del lago le dieron resultados muy curiosos, al parecer esa agua sí tenía muchos minerales inusuales, que aparentemente tenían efectos positivos sobre los pokémon. Lamentablemente para el grupo, hoy no podrían culminar las actividades que tenían planeadas, en ese momento llegaban al lago el equipo especial enviado por Giovanni en una especie de Jet.


Cassidy (viendo a través de unos binoculares): Genial (en tono sarcástico), la mocosa está otra vez acá.


Butch(con otro par de binoculares): Y esta vez tiene más compañía que la anterior.


Namba (quitándole a Butch el suyo): ¿Bromean? ¿Es esa la niñita?, son más patéticos de lo que creía.


Los Rocket venían muy bien armados, además de todos los miembros que se encontraban en el lugar, el jet parecía estar bien equipado, particularmente la cabina estaba llena de radares y otros artefactos tecnológicos.


Cuando Misty y los chicos estaban a punto de comenzar notaron el enorme jet sobre ellos, del cual empezaron a descender varias escaleras de cuerda, por las cuales bajaban los miembros del equipo Rocket, los últimos en bajar fueron Cassidy y Butch, mientras que Namba se quedó piloteando el Jet.


Misty: ¡No puede ser! ¿Ustedes nuevamente?


Cassidy: como lo ves mocosa, y ahora no venimos solos.


Gary: Ella tampoco está sola.


Cada uno de los miembros llamó a un pokémon, que tenían tipos muy variados, mientras que Misty llamó a su Gyarados, Gary a Blastoise, Daisy a Dewgong y Tracey a Scyther.


Mientras tanto Namba desde el jet buscaba en el mapa digital la ubicación del objetivo en una pantalla, y en la otra tenía una especie de analizador pokémon, el cual usaba en los pokémon de los 4 chicos, este aparato le daba datos como el tamaño, peso, nivel, fuerza, defensa, velocidad y otras características de los pokémon con sólo enfocarlos, siendo sincero a Namba le llamaron la atención los 4 pokémon, sin embargo había uno que consideró muy buen “botín”.


Abajo en tierra firme, la batalla seguía, era difícil distinguir quien peleaba contra quien, dada la gran diferencia en número, además que el lugar se estaba cubriendo de ataques de humo por los ataque de tipo veneno del enemigo; mientras del otro bando se escuchaban órdenes de ataques como hidrobomba, ventisca, cuchillada …, el Gyarados de Misty particularmente era un problema para los Rocket, dado la variedad de ataques que posee, era casi seguro que alguno de ellos tenía la ventaja sobre el enemigo, ya sea con la hidro bomba, lanzallamas, furia dragón o hiperrayo siempre lograba herir gravemente a sus rivales. Lamentablemente los Rocket empezaron a llamar a más pokémon, con lo cual nuestros héroes terminaron convocando a todos los que tenían también.


Desde el Jet el profesor Namba comenzaba a alegrarse cuando vio un punto rojo en una sección de su mapa digital, que marcaba un lugar del lago, frente a una gran roca donde se encontraba parada Misty. En ese momento desde el jet se escuchó por un mensaje la voz de Namba diciendo:


Namba: ¡Frente a la roca donde está la chica!, todos hacia allá.


Muchos de los miembros no pudieron llegar hasta esa parte, gracias a Daisy, Gary y Tracey quienes con sus pokémon lograron detenerlos, en ese momento cada uno se estaba haciendo cargo de tres miembros del equipo Rocket, pero Cassidy Y Butch lograron llegar saltando entre varias rocas hasta una muy cerca de donde estaba Misty.


Justo en el momento en el que llegaron un resplandor blanco salió del agua, todos los presentes lograron verlo, esa era una buena señal para los Rocket, les indicaba que su objetivo estaba cerca, sólo que una especie de maremoto comenzó, haciendo que tanto Misty como los Rocket perdieran el equilibrio, también en ese momento todas las pantallas del Jet del profesor se apagaron, algo parecía haber causado una falla eléctrica, aunque no parecía estar afectando el motor de la nave.


Para desgracia de los Rocket, el grupo de Misty recuperó primero el equilibrio y tenían prácticamente vencidos a todos los miembros, los que parecían tener más fuerza eran Cassidy y Butch que esta vez aparte de su Sneasel y Migthyena, llamaron a dos sharpedos, quienes parecían buscar algo en el agua.


Aunque ya bastante cansados, los pokémon de Misty seguían en la lucha, Politoed y Corsola se hacían cargo de los sharpedos, mientras que Starmie y Gyarados estaban contra Migthyena y Sneasel, para Misty era muy difícil controlar a tantos pokémon a la vez, pero a pesar de esto resistía bastante bien, los sharpedos fueron los primeros en caer, dejando a los Rocket sin nadie que buscara en la profundidad del lago lo que sea que buscaban.


Luego de un rayo hielo de Starmie, y un hiperrayo de Gyarados, Cassidy y Butch salieron disparados por los cielos, ante el muy pronto fracaso de su misión, Namba se dispuso al menos a llevarse un “motín de consolación”.


Namba: Al menos me llevaré a ese Gyarados, con él haré que el jefe me perdone este fracaso.


Y del Jet salió una enorme pinza directo hacia donde estaba Gyarados, sin embargo en un acto casi inconsciente Misty saltó y se interpuso, lo que hizo que la pinza la capturara a ella, y la elevara a una gran altura.


Estando arriba, Namba notó a quién había atrapado y se dijo a si mismo:


Namba: bueno, pensándolo bien, no es mala idea tener de rehén a una líder de gimnasio que tantas veces ha arruinado nuestros planes.


Cuando Namba se disponía a partir abandonando a sus compañeros un destello aún mayor salió del lago, cegando a todos los presentes, mientras comenzaban a salir a lote desde el lago varias figuras que eran difíciles de distinguir.


Namba: ¿Qué rayos es eso?


Misty alcanzó a escuchar las palabras de Namba, pero esta vez todo el sistema del jet falló, lo primero fue la pinza que la sujetaba, que se partió de raíz, dejándola caer, una escena espantosa presenciada por sus amigos que la vieron golpear contra la roca en la que hace unos minutos había estado parada, el golpe hizo un sonido indescriptible y espeluznante, tras esto la chica cayó al lago.


Sus amigos que gritaban desesperados, trataron de llegar hasta donde estaba ella, pero los otros miembros del equipo Rocket con sus últimas fuerzas intentaban hacer lo imposible por impedirlo.


En ese momento el motor del jet falló, éste cayó sobre la gran roca, pero sin hundirse en las profundidades del lago, seguidamente decenas de patrullas de policía llegaron al lugar, logrando capturar a los nueve miembros, mientras que un escuadrón de Feraligators tenía rodeado a Namba.


Tres oficiales sostenían a Tracey, Gary y Daisy, quienes gritaban que tenían que ir a buscar a Misty, e intentaban soltarse, sin embargo el jet acababa de estallar (por mala suerte cuando Namba ya estaba afuera, así que se salvó), por eso los oficiales no dejaban ir a los tres chicos, cuyos pokémon iban a empezar la búsqueda, sin embargo, en ese momento aún era difícil ver el lago, el resplandor blanco seguía, aunque cada vez menos intenso.


…CONTINUARÁ