de Inuyasha - Corazon encadenado (inuyashaxaome) (+17)

Hola mis fieles seguidores de mis fics, siento haber tardado tanto pero como estuve enferma y mi Internet andaba como loco no pude actualizar rápido bueno sin más aquí la conti:
Cambié el tipo de letra espero no les moleste ;)


Capítulo 16: Toda la verdad (Parte 2)

La miré un momento con enojo mientras ella solo me miraba con timidez escondida.

— ¿Qué haces aquí? ¡Cómo te atreves a preguntar por Inuyasha después de lo que le hiciste!— dije con furia contenida, no podía creer que después de lo que le había hecho a Inuyasha se hubiera a atrevido de nuevo a buscarlo

—Tú debes ser Aome ¿no es así?— me pregunto de repente

—Sí soy yo pero eso no es lo importante ¿por qué regresaste? No te bastó con lastimar a Inuyasha— dije con el mismo enojo

—Escucha quiero explicarte el porqué de eso, sé que no me conoces y que debes pensar cosas horribles de mí, pero si quisieras escucharme un momento, podría decirte porque fue que le hice eso a inuyasha— decía tratando de explicar

—No sé si confiar en ti— dijo Aome algo insegura

—Créeme por favor, ¿podríamos hablar un momento?— pregunto la joven, mientras Aome con una mirada algo desconfiada acepto dándole a entender con la mano que pasara

—Gracias— contesto mientras se adentraba en la mansión

Kikyo observo el interior de la casa mientras caminaba hacia la sala, viendo cada rincón de aquel lugar que ella había visitado infinidad de veces, nada había cambiado.

—Valla esta casa sigue igual a como la recuerdo— Pensaba la chica

—Entonces, habla, di lo que viniste a decir— dije mientras me sentaba en el sofá y ella hacía lo mismo con timidez

—Bien creo que debo comenzar por el principio, hace 3 años yo trabajaba en una agencia de modelaje, era una gran modelo y me solicitaban mucho sin embargo yo pensaba que no era suficiente que yo merecía más, tontos pensamientos que cruzaban mi mente de 18 años. Fue entonces que apareció él, ese miserable, Naraku, él me dijo que era dueño de una gran empresa de modelaje, y que yo le había parecido demasiado hermosa y perfecta para estar en esa agencia, así que me ofreció que trabajase para él, me dijo que si lo hacía sería una gran modelo, la mejor del mundo, y yo tontamente creí en sus palabras y acepté. Sin embargo unos días después de aquello mi padre fue asesinado misteriosamente, él era dueño de una gran empresa farmacéutica y toda su fortuna la tenía asegurada en una cuenta de banco de la que él solo sabía la contraseña y que misteriosamente después de unos días de su muerte fue saqueada completamente, aún dolida por su muerte comencé a buscar la forma de encontrar a su asesino y lo supe cuando Naraku sospechosamente se hizo de una gran suma de dinero, pero lo que más me hizo sospechar de él, es que una vez lo vi hablar con mi padre para tratar de convencerlo de que invirtiera en un proyecto sobre una nueva medicina, en ese momento me di cuenta de su engaño sobre que era dueño de una supuesta de empresa de modelaje, lo único que quería de mí era saber la contraseña de la cuenta de mi padre, y fue por eso que una de nuestras pláticas él me preguntó sí la sabía y yo le dije que no, que él único que la sabía era mi padre, no se quedó conforme y buscó la forma de encontrar la contraseña. Nunca supe como la consiguió pero de lo que estaba segura era de que él lo había asesinado, porque desde el principio lo único que buscaba era la fortuna de mi padre, y fue por eso que él me había buscado a mí, ya que después de la muerte de mi padre me dijo que si seguía trabajando para él sería muy rica, pensé muy bien y decidí estar con él fingiendo que no sabía que él había asesinado a mi padre, para así desenmascararlo poco a poco mientras el confiase en mí— dijo ella mientras miraba al suelo

—Espera ese tal Naraku del que hablas ¿Cuál es su apellido?— pregunto Aome preocupada

—Hokoto, Naraku Hokoto ¿Por qué? ¿Acaso lo conoces?— me preguntó preocupada igual que yo

—Sí es un socio de la empresa de la señora Kaede, pero entonces ¿es un tipo peligroso?—

—Sí lo es, no puedo creer que se haya asociado en la empresa de kaede, ah entonces está planeando lo que me temía— decía mientras yo me confundía aún más

—Por favor explícame de lo que hablas no te entiendo— decía yo aún más preocupada por la situación

—Aome escúchame bien, Naraku es un tipo muy peligroso, cuando yo trabajaba para él, me pidió que enamorara a Inuyasha y que finalmente me casase con él para así apoderarse de su fortuna una vez que deshiciera de él, yo lo hice pero me enamoré profundamente de Inuyasha sin poder evitarlo fue por eso que después de abandonarlo cuando me fui con Naraku, me sentí la más miserable del mundo, así que deje de estar de parte de Naraku y por eso regrese, para decirle toda la verdad a Inuyasha y que él pudiera perdonarme—

—No sé por qué pero te creo— dije mientras le tomaba de las manos, realmente esa chica me parecía sincera en lo que decía

—Gracias, pero ahora temo por ti, por Inuyasha, tengo el presentimiento de que Naraku planea algo malo, tenemos que decirle a Kaede que se deshaga de él— me dijo seriamente

—Sí pero y si ella no confía en ti, recuerda que ella aún piensa que tú traicionaste a Inuyasha—

—En eso tienes razón, entonces por ahora no puedo decir nada, bien mira hablaré con Kaede en cuanto pueda y entonces le explicaré todo—

— ¿Y con inuyasha ya hablaste?— le pregunte

—Sí pero no me dejo explicarle todo— dijo ella con mirada nostálgica

—Eso quiere decir que ya se vieron a solas— dije con algo de celos, a lo que ella se dio cuenta

—No te pongas celosa créeme que ya Inuyasha a mí ya no me interesa como otra cosa, me he dado cuenta que él es feliz a tu lado y eso me hace feliz a mí, yo solo deseo ser su amiga y tuya también si tú me dejas— dijo sonriéndome mientras yo también lo hacía

—Está bien, yo le diré a Inuyasha sobre lo que dijiste—

—Bien yo debo irme, si ves a Inuyasha salúdalo de mi parte— me dijo mientras caminaba a la salida

—Sí y gracias— dije mientras la veía irse

Me quede pensativa un rato, no podía creer que apenas hace un momento había estado hablando con mi “enemiga” por así decirlo sin embargo ahora que sabía los motivos por lo que la llevaron a abandonar a Inuyasha, y tal y como presentí al conocer a ese tipo, me pareció muy sospechoso y peligroso, y ahora que esta chica me lo había confirmado me sentía más intranquila.
En ese momento sentí unos fuertes brazos que me abrazaban por detrás mientras un cálido se hacía presente en mi cuello estremeciéndome toda, de pies a cabeza, mientras dejaba llevar por esas culmines caricias.

—Hola princesa ya estoy aquí— me dijo mientras besaba mi cuello

—Hola amor— musite aún más excitada ante sus caricias

—No sabes las ganas que tengo de hacerte el amor en este momento— susurro mientras giraba mi cuerpo para besarme

— ¿Que estas esperando?— dije en tono seductor mientras nos besábamos apasionadamente

Nuestros besos fueron haciéndose más exigentes y placenteros, mientras nos dirigíamos a nuestra habitación…
Después de aquella tarde de pasión, nos quedamos abrazados mientras Inuyasha jugaba con mi pelo y me encontraba recostada en su pecho.

—No me has dicho como te fue ¿Pudiste encontrar la perla?— pregunte

—No de nuevo no pude encontrar nada, es extraño ya eh visitado todos los templos de la ciudad y escarbado en todos los arboles sagrados y no encontré nada, ¿acaso mi madre se habrá equivocado cuando me dijo la perla la había dejado en nuestra época?— dijo Inuyasha algo confundido

—Yo no lo creo, quizá alguien más la encontró—

—Tal vez pero ¿quién querría tener una perla inservible?—

—Pues ay muchas personas en esta ciudad que con una perla así se podrían hacer ricos ¿no crees?— dije algo seria
—Es cierto con una joya de esa magnitud cualquiera podría hacerse rico, si después de casi 21 años es normal que alguien pudiese haberla hallado antes—

—Inuyasha ya no importa, quiero decir no tienes por qué convertirte en humano por mí— dije mirándolo a los ojos

—Pero Aome yo pensé que tú estabas más a gusto cuando yo era humano—

—Por supuesto que no tonto, yo te amo a ti, no importa que apariencia tengas— dije para luego besar sus labios con ternura

—Por eso te amo mi querida Aome— dijo entre besos

—Y yo a ti mi amado demonio de ojos dorados— musite mientras me abrazaba fuertemente a su pecho

Pero entonces recordé la visita de Kikyo en la tarde y mi semblante se tornó serio a lo que Inuyasha se dio cuenta de inmediato

— ¿Qué sucede princesa?— me preguntó preocupado
—Kikyo estuvo aquí en la mañana, hablo conmigo— dije mientras Inuyasha inmediatamente se incorporaba hasta sentarse a mi lado

— ¿Kikyo estuvo aquí? ¿Qué fue lo que te dijo? ¿Te hizo algo malo?— me pregunto Inuyasha algo alterado

—No, no me hizo nada al contrario me contó todo, toda la verdad— dije seria

— ¿Toda la verdad?— dijo Inuyasha confundido

—Sí te lo diré Inuyasha te diré la verdadera razón por la cual ella te abandono—

Inuyasha se mostró completamente serio ante lo que le decía, mientras yo comenzaba a contarle todo lo que Kikyo me había dicho esa mañana y que por alguna razón extraña yo creía completamente.

Bueno hasta aquí el cap. 16 es corto pero es que tenía que terminar este para continuar con el sig.
¡¡Saludos y sayonara¡¡

 

Hola chicas aquí les traigo conti, disculpen el atraso

Capítulo 17: Tras el enemigo

Después de aquella plática, Inuyasha se quedó pensativo mientras trataba de asimilar lo que le había dicho, después de todo él siempre había pensado que Kikyo lo había dejado por que ella así lo quería y no porque estaba siendo obligada.

— ¿Eso quiere decir que Kikyo me dejó porque ese tipo la manipulo para que me enamorara y luego me quitase mi fortuna?— dijo inuyasha mientras empuñaba la mano con odio

—Así es todo eso fue un plan que Naraku forjó para quitarle la fortuna a la señora Kaede y a ti— conteste seria

—Maldito, mil veces maldito, todo mi sufrimiento se lo debo a él, Aome tenemos que hablar con mi madre y decirle que lo despida de inmediato y refundirlo en la cárcel por lo que ha hecho—

—Sí es lo mismo que le dije a Kikyo pero el problema es que no tenemos pruebas de ese asesinato que cometió y mucho menos de los fraudes que ha hecho— dije preocupada

—Tal vez nosotros no, pero estoy seguro que Kikyo sí, si ella trabajó tanto tiempo para él debe saber algunas cosas que de seguro descubrió, de esa forma podremos desenmascararlo—

—Sí quizá tienes razón, entonces lo mejor será que hablemos con ella para asegurarnos, Inuyasha tengo miedo, siento como si algo malo fuera a pasar— dije mientras le abrazaba fuertemente

—No digas eso linda, yo jamás permitiré que nada te pase, siempre voy a protegerte, siempre— musito en mi oído mientras me besaba en la mejilla tiernamente

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Mientras tanto en otra parte, un hombre se encontraba en la comodidad de su oficina, mientras bebía una copa de licor pensaba en su siguiente jugada.

—Muy bien todo hasta el momento va bien, sin embargo esa estúpida de Kikyo se fue cuando más la necesitaba, ahora tendré que ver la forma de separar a esos tortolitos…No tengo una mejor idea, pero tengo que planear bien mi jugada— dijo mientras tomaba otro sorbo de su copa con una sonrisa malvada

Entonces se dirigió a una pequeña caja fuerte de donde saco otro pequeño cofre color ocre, del cual saco una pequeña perla color rosa pálido, que tomo entre sus manos con una sonrisa malvada.

—Esto es lo único valioso que me queda, está pequeña perla que encontré hace 10 años por casualidad— decía mientras recordaba aquel momento en que había encontrado aquella valiosa joya

Varios vehículos de construcción se encontraban en aquel templo que había sido vendido por sus dueños a una empresa constructora, mientras las maquinas escarbaban cerca de uno de los árboles de aquel templo, lo que ninguno de aquellos trabajadores se había dado cuenta era de que en la tierra que retiraban del lugar iba un pequeño cofre color ocre que cayó en donde desechaban la basura, en ese momento un sujeto de apariencia oscura iba pasando dándose cuenta de aquellas maquinas en construcción, fue entonces que vio aquel pequeño cofre tirado en la basura.​

— ¿Y esto? Parece un cofre— pensó mientras lo levantaba y lo llevaba con él lejos de ahí ​

—Jamás pensé que me encontraría con semejante maravilla aquel día, a veces me pregunto cómo fue que está joya llego a ese lugar— decía mientras contemplaba aquella perla, mientras que aquel sujeto no se imaginaba la verdadera historia de aquella joya.

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La noche dio paso a un nuevo día, en la mansión Karisawa, Aome bajaba con Inuyasha al comedor mientras conversaban acerca de lo ocurrido en esos últimos días.

—Inuyasha eh estado pensando, y sabes pienso que por ahora no debemos decirle a la señora Kaede acerca de lo de Naraku— dije seria

—Pero Aome ese tipo es muy peligroso es mejor que le digamos a mi madre acerca de él— me dijo muy alterado Inuyasha

—Sí yo también creo lo mismo pero mientras no tengamos pruebas reales en contra de ese sujeto no podemos hacer nada, mira lo mejor es esperar a hablar con Kikyo así tal vez ella podrá ayudarnos—

—Muy bien linda, quizá tengas razón por ahora no le diremos nada a mi madre, pero debemos tener mucho cuidado con ese tipo— me dijo fijamente

—Sí— conteste firmemente

Fue entonces que cuando intenté dar un paso sentí un horrible mareo que me hizo tambalearme, Inuyasha me tomo por los hombros impidiéndome caer, mientras yo aún seguía con ese horrible mareo.
—Aome, linda ¿Qué tienes?— me preguntó mi amado Inuyasha mientras me apegaba a su cuerpo

—N-No es nada…es solo un pequeño mareo, no te preocupes— dije mientras sonreía levemente

—Pero ¿Ya estás mejor? ¿Quieres que te lleve al médico?— seguía preguntándome Inuyasha

—No, no cariño, estoy bien de verdad, ya me siento mejor solo fue un leve mareo es todo, debió ser porque no desayune en la mañana, no te preocupes— dije mientras lo abrazaba

—Bueno, pero si sigues sintiéndote mal me avisas ¿de acuerdo?— me dijo seriamente

—Claro que sí cariño, lo haré— conteste mientras le daba un pequeño beso en los labios

La verdad, era que desde hace dos días me habían dado mareos, a cada momento, la verdad no me parecía nada grave así que no le di mucha importancia, hasta hoy.

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Mientras tanto en otra parte, una joven de tez blanca y ojos de mirada fría, caminaba por las frías calles de la cuidad mientras pensaba.

—Ojalá tuviera más pruebas en contra de ese maldito, pero siempre busca la forma de parecer “limpio” ante la sociedad, lo que más me preocupa ahora es su asociación con la empresa de Kaede, entonces hará lo que yo me temía, es cierto él nunca me habló de esos planes, al parecer no me tenía la suficiente confianza como yo pensaba— pensaba en ese momento la pelinegra mientras caminaba por aquellas solitarias calles de la ciudad

Los pensamientos de Kikyo no cesaban de aquel presentimiento, sabía muy bien las malignas intenciones de Naraku, ella lo conocía muy bien, cada movimiento suyo, cada jugada, sin embargo ahora que ya no se encontraba de su parte, no podía seguir sus maniobras, pero sabía que había tomado la decisión correcta al haber dejado a ese sujeto malvado, ahora tenía que encontrar la forma de probar su culpabilidad por el asesinato de su padre, porque ella sabía muy bien que él había sido el causante, y buscaría la forma de hacerlo pagar, así se le fuese la vida en ello.



Bueno chicas hasta aquí el cap. 17, lo sé es corto pero es que en estos últimos días que ya me recuperé de la varicela eh tenido que ponerme al corriente con mis tareas de la escuela, espero me entiendan, el próximo cap. Lo subiré en unos cuantos días, trataré de no atrasarme mucho, para terminarla pronto.

¡ULTIMOS CAPITULOS¡
¡Saludos y sayonara¡;)

 

Hola a todos perdón la tardanza sin más aquí la conti


Capítulo 18: El fruto de nuestro amor

Aquella mañana desperté con un horrible mareo de nuevo, casi todos los días despertaba así y ya me estaba empezando a preocupar, también mi periodo se había atrasado varias semanas, y no entendía el motivo, fue entonces que cuando me encontraba sentada en mi cama unas horribles nauseas se hicieron presentes en mi cuerpo para dar paso a unas terribles ganas de volver el estómago, salí corriendo a hacia el baño de mi habitación casi tropezando con la puerta.

Al salir de inmediato lo supe, sin embargo no podía asegurar nada, así que decidí hacerme la prueba, aquella prueba que en el fondo me hacía sentir una felicidad inmensa si el resultado fuera positivo.
Más tarde cuando ya me sentía un poco mejor, escuche el teléfono sonar y conteste a duras penas ya que me tambalee un poco al caminar, contesté y de inmediato me di cuenta de que se trataba de mi mejor amiga Sango.

—Oh hola Sango me alegra escucharte— conteste alegrada

—Hola amiga mía ¿Cómo has estado?— me contesto igual de contenta Sango

—Bien amiga y ¿tu?— conteste sonriendo

—Muy bien amiga gracias, oye disculpa que no me haya comunicado antes pero es que ando algo desconectada del mundo— dijo Sango en tono de excusa

—No te preocupes amiga te entiendo ahora que estas con Miroku en normal que pases más tiempo con él— conteste mientras sonreía

—Bueno precisamente hablando de él, no sé si estarás hoy en casa ya que me gustaría ir para decirte algo y también para platicar ¿podrías?— me preguntó de repente

—Sí por supuesto la verdad es que me gustaría platicar contigo amiga— conteste alegre

—Que bien entonces en una hora estoy allá ¿Te parece?—

—Sí claro que sí yo te espero— conteste alegre

—Muy bien nos vemos en una hora amiga—

—Sí amiga nos vemos—

—Adiós— contesto despidiéndose de mí Sango

Al colgar el teléfono, me cambie de ropa y salí de mi habitación para encontrarme con mi amado Inuyasha mientras se acercaba a mí con una gran sonrisa y yo lo recibía con la misma sonrisa cálida.

—Hola muñeca buenos días— me dijo mi amado mientras me besaba

—Hola mi amor…que guapo te ves ¿A dónde vas tan apuesto?— pregunté curiosa mientras me abrazaba a él

—Pues como mi madre aún sigue de viaje, tengo que ir a la empresa para ponerme al tanto de las actividades de los socios, pero sobre todo tengo que ir por ese maldito de Naraku, es mejor que lo vigile de cerca— musito con rencor en sus palabras

—Entiendo, bien entonces cuídate mucho ¿está bien?— le susurre en sus labios para luego besarlos

—Sí linda lo haré y tú también ¿de acuerdo? Es más dime ¿ya no te han dado esos mareos?— me pregunto preocupado

—Pues no, no cariño ya estoy mejor de verdad— conteste con una sonrisa, la verdad es que no quería preocupar más a inuyasha

—Te veo muy pálida ¿Estas segura que estás bien?— volvió a preguntarme

—Sí estoy bien amor, mejor vete o se te hará tarde— le dije dándole un fugaz beso en los labios mientras lo empujaba a la salida

—M-Muy bien, nos vemos más tarde— dijo despidiéndose

Después de eso, Sango llego a la casa mientras yo la esperaba en el recibidor, una gran sonrisa adornaba su rostro por lo que supuse que algo bueno le había pasado no hace mucho.

—Aome amiga— me dijo mientras me abrazaba fuertemente

—Hola Sango— dije mientras correspondía a su abrazo

Entramos a la sala donde nos sentamos para platicar mientras bebíamos té hacía tiempo que nos veíamos y ahora menos en cuestión de que las dos teníamos novios y nos la pasábamos con ellos, sin embargo nuestra amistad se hacía más fuerte cada vez más y eso me alegraba, ya que a Sango yo la consideraba una hermana y sabía que contaba su apoyo.

—Dime Aome ¿Cómo has estado?— pregunto Sango mientras bebía un sorbo de té

—Pues bien…quiero decir las cosas aquí no han estado muy bien que digamos— dije algo seria

— ¿Qué sucedió?— pregunto extrañada

—Bien pues hace poco…regreso la ex-novia de Inuyasha— dije con la mirada baja

— ¿La ex-novia de Inuyasha?— musito extrañada

—Sí su nombre es Kikyo Hirasama y hace poco vino a hablar conmigo—

— ¿Pero cómo se atrevió a venir después de lo que le hizo a Inuyasha? Digo después de lo que me contaste lo hizo sufrir mucho cuando lo abandono—

—Sí yo también pensaba lo mismo pero después me explico los motivos que la llevaron a dejarlo y también otras cosas—

Fue entonces que comencé a relatarle todo lo que Kikyo me había dicho, después de todo Sango era mi mejor amiga y yo tenía plena confianza en ella.

—Eso quiere decir que ese tal Naraku ¿trabaja en la empresa de la señora kaede?— me pregunto Sango preocupada

—Así es pero le dije a Inuyasha que lo mejor es no decirle nada a la señora kaede por ahora además ella se encuentra de viaje aún y fue por eso que Inuyasha fue a la empresa para estar al tanto de todo—

—Aome ten mucho cuidado, si ese tipo es tan peligroso como dijo esa Kikyo entonces debes cuidarte mucho amiga—

—Sí lo sé amiga, pero bueno solo hemos estado hablando de mí ¿Qué hay de ti?— pregunte sonriendo mientras cambiaba el tema

—De eso mismo también quería hablarte amiga, pues hace unos días Miroku y yo estábamos en un restaurante y él me… ¡Pidió matrimonio!— me dijo muy emocionada y sonrojada Sango

— ¿De verdad amiga? ¡Qué felicidad amiga, estoy muy feliz por ti! Y ¿cómo te lo dijo?— pregunte a mi amiga emocionada

—Fue hermoso déjame contarte— me dijo mientras relataba lo sucedido aquella noche

Era una noche hermosa, la luz de la luna iluminaba la cuidad haciendo aquella noche aún más romántica, pero exactamente en el “Tama no doro” uno de los más lujosos restaurantes de Tokio por su atractivo menú de comidas a la carta y la más finas, una pareja de jóvenes disfrutaba de una velada juntos.

—Miroku que lugar tan hermoso pero no debiste molestarte ya que me imagino que aquí cuesta una fortuna— dijo la castaña mientras miraba al rededor del lugar

—El costo no importa, además todo esto es para que tú te sientas a gusto amor— dijo el joven pelinegro mientras tomaba las manos de la chica para luego besarlas

—Bueno entonces gracias— contesto sonrojada ante el acto del muchacho

—Sango desde que te conocí me pareciste la chica más hermosa que jamás había conocido en mi vida, con el tiempo empecé a conocerte mejor y me fui enamorando de ti poco a poco y fui muy feliz cuando aceptaste ser mi novia sin embargo yo quiero que lo nuestro valla más allá— dijo mientras tomaba las manos de la castaña al mismo tiempo que sacaba una pequeña cajita negra de su saco y esta lo veía sonrojada

—Sango Hakane… ¿Te casarías conmigo?— preguntó mirando fijamente a la joven y mostrándole un hermoso anillo de diamantes mientras Sango lo miraba sonrojada y comenzaba a titubear

—Miroku yo…Sí, sí quiero casarme contigo— contesto al mismo tiempo que abrazaba al pelinegro para luego unir sus labios en apasionado beso

—Ay amiga que lindo amiga me alegro mucho que al fin puedan formalizar su compromiso— dije contenta mientras abrazaba a mi amiga

—Sí yo igual amiga no sabes lo feliz que estoy—

—Me alegro amiga, yo aún no formalizo con Inuyasha pero estoy segura que pronto lo haremos— dije segura de mi misma

—Estoy segura que sí amiga, Inuyasha es un buen hombre y te ama así que tal vez hasta haya boda doble— dijo Sango en tono de broma

—Sí quizá oye amiga ¿quieres más té? Voy a bus…— decía levantándome de mi asiento cuando sentí uno de esos fastidiosos mareos de nuevo

—Aome ¿estás bien?— me pregunto sango mientras me tomaba de los brazos

—S-Sí es solo…— eso fue lo último que pude decir ya que inmediatamente me desmayé

Afortunadamente no caí al suelo por que Sango pudo atraparme casi en el aire y me acostó en el mueble mientras llamaba a alguien para ayudarla.

— ¡Aome! Despierta ¡Aome!— me decía mi amiga sin que yo despertase

Comencé a despertar mientras aquellos malditos mareos no cesaban y ahora para colmo de males sentía unas nauseas horribles, parpadee un par de veces para darme cuenta donde estaba, me encontraba en mi habitación cubierta con una sábana mientras escuchaba a alguien tocar mi puerta.

—Aome ¿ya despertaste?— me pregunto Sango en la puerta

—S-Sí ¿Qué sucedió?— pregunte algo confusa

—Pues estabas por levantarte cundo te desmayaste fue por eso que llame al doctor para que te revisará, pase doctor— dijo mientras dejaba a entrar al doctor

—Señorita Higurashi ¿Cómo se ha sentido estos últimos días?— me pregunto de inmediato el doctor mientras se acercaba para tomarme el pulso

—Pues eh tenido muchos mareos, náuseas y falta de apetito y además me eh notado muy pálida— pregunte preocupada

— ¿Desde cuándo ha estado así?—

—Pues desde hace una semana—

—Sí ya sé exactamente lo que tiene señorita Higurashi, Felicidades está usted embarazada— me dijo el doctor sonriendo

— ¿E-Embarazada?— musite sorprendida y casi llorando de felicidad

— ¡Amiga que felicidad¡— me dijo Sango mientras se abalanzaba para a abrazarme

—Sí amiga, gracias doctor…dios embarazada, voy a tener un bebé de mi amado Inuyasha, estará tan feliz cuando se lo diga— dije mientras unas lágrimas de felicidad se escapaban de mis ojos



Bueno hasta aquí el cap. 18 espero que no les parezca muy corta y que la disfruten

¡¡Saludos y sayonara¡¡;)