Long-fic Contra viento y marea...por estar junto a ti

Re: Contra viento y marea...por estar junto a ti

Hola chicas...lo siento pero no eh podido colocar la comti, eh estado teniendo demasiada tarea prometo que la pondre pronto, tal vez hoy pero mas tarde n_n nos vemos ***GARU****

 

Re: Contra viento y marea...por estar junto a ti

Hola chicas, lamento la tardanza, espero me entiendan, aquí les dejo el capitulo 6 espero les guste.

Capitulo 6: La historia se vuelve a repetir.

El chico de mirada ámbar estaba que no cabía de la sorpresa, una de las preguntas que se formaban en su cabeza era, ¿qué hacia el ahí?. Pestaño varias veces pensando que tal vez estaba alucinando, ¿por qué su padre miraba tan desafiante al padre de Kagome?.

‑ Quiero que suelten a mi hijo ‑ Dijo un Ino no Taisho con voz autoritaria y fría.

‑ Suéltenlo ‑ Ordeno Onigumo, los guardias inmediatamente lo obedecieron. Onigumo seguía sin quitar la vista de Ino no, ¿cómo es que se atrevía a regresar después de lo que había pasado hace nueve años?.

‑ ¿Cómo es que te atreves a volver a dirigirme la palabra Ino no? – Dijo el rey con melancolía y enojo.

‑ ¿Yo? ‑ Respondió Inu no con ironía. – Si fuiste tu quien me traiciono – Respondió Inu no esta vez con furia, pero de un momento a otro sus ojos se volvieron a una mujer de cabellos plata mas oscuros que los de el y sus hijos, ojos cafés que normalmente mostraban frialdad, solo que ahora mostraban sorpresa hacia el. – Tsubaki... ‑ Fue todo lo que pudo salir de la boca del rey de Sengoku.

‑ Eso no es verdad – Dijo ya furioso Onigumo ‑ ¡Tu me traicionaste acéptalo! – Grito histérico el rey del Shikon.

‑ ¡Basta padre! – Dijo una dulce y preocupada voz detrás de Onigumo ‑ ¿Qué fue lo que paso?, ¿Inuyasha...tu sabias algo?‑ Pregunto una preocupada chica.

‑ No mi amor, te juro que yo no sabia nada Kagome – Respondió el príncipe de mirada ámbar tomándole las manos y viendo preocupado a su novia.

Muchas cosas se tuvieron que aclarar esa vez, ya había pasado tres meses desde ese doloroso, trágico y a la vez romántico baile. Esa fue la ultima vez que Kagome vio a Inuyasha, ahora dicha joven se la pasaba acostada en su cama, sin comer, dormir o beber algo simplemente lloraba por aquel día que deseo jamás hubiera pasado.

P.O.V Inuyasha.

¿Cómo es la vida no?, primero te da y luego te quita... eso me paso a mi, conocí a la mujer de mi vida, me enamore perdidamente de ella y justo cuando estaba en mi etapa mas feliz...todo se derrumbo, ahora resulta que nuestros padres se odian ¿irónico no?, estoy destrozado hace tres meses desde que nos enteramos de cosas que siquiera sabíamos no eh visto a la chica que me roba el sueño, que me arranca suspiros y que es mi tesoro mas preciado, ¿por qué?, simple...nuestros padres se detestan y no quieren que nos veamos mas, recuerdo que aquel día, mi padre llego furioso a palacio conmigo siguiéndole los pasos.

***Flash back***

‑ ¿Padre que pasa? – Pregunto un joven de melena plata y ojos ámbar que ahora miraban con preocupación a su padre, quien ahora le daba la espalda delante de el.

‑ Hijo...no quiero que te vuelvas a acercar a esa niña ¿entendiste? – Pregunto el rey aparentando tranquilidad.

‑ ¡¿Qué?!, ¡no eso nunca! – Grito el chico con los ojos llenos de temor.

‑ ¡Entiende Inuyasha! – Inu no trataba de hacer “recapacitar” como el pensaba, que estaba cometiendo un grave error al enamorarse de una Higurashi, es por eso que jamás le hablaron que aquel reino o aquella familia real...precisamente para evitar esto.

‑ Jamás la voy a dejar – Dijo un Inuyasha decidido subiendo los escalones que lo llevarían a su habitación escuchando como su padre gritaba furioso su nombre una y otra vez.

***Fin flash back ***

Pensé que mi padre me apoyaría, ya que el también conoció el amor con mi madre, y lo se por que ella jamás de los jamases deja de hablar de eso…creo que ahora le agradezco el que haya estado contándonos esa historia una y otra vez. De una cosa si estoy seguro...!no la voy a dejar!, ¿por qué?, pues muy simple...la amo y tal vez sonara cursi si un hombre lo dice pero el amor lo puede todo, y yo no voy a renunciar a ella ...aunque tenga que luchar contra viento y marea...¡No la voy a dejar!.

P,O,V narradora.

Se encontraba una joven en el palacio Shikon recostada en su cama sumida en sus pensamientos, en eso abren la puerta y la princesa de inmediato volteo a ver quien era.

‑ Señorita Kagome, le traigo un te de manzanilla, le hará bien – Dijo una hermosa chica de cabellos castaños lacios y largos recogidos en una coleta alta, ojos cafés expresivos, buena figura, piel blanca y nívea, llevaba puesto el traje de los sirvientes del palacio.

‑ Sango...te he dicho que no me llames señorita, ¿somos amigas no? –Dijo la princesa menor.

‑ Pues...eso creo – Respondió la joven un tanto nerviosa.

‑ Entonces déjate de formalidades, ven, siéntate aquí conmigo – Dijo Kagome con una sonrisa.

Sango obedeció a lo que pidió la princesa, Kagome le contó detalle tras detalle de lo que paso en aquel baile, Sango escuchaba atentamente y con interés, tratando de darle un buen consejo a su amiga.

‑ Hay Kagome...pero si se aman, veras que van a terminar estando juntos mira, el amor todo lo puede...esto es una prueba, se que será difícil luchar contra viento y marea pero al final lo lograran, y lo van a lograr por que se aman de verdad – Dijo Sango abrazándola ya con mas confianza.

‑ Gracias por tu apoyo Sango – Dijo Kagome correspondiendo al abrazo de su amiga.

En la sala del hermoso castillo Shikon, la reina de aquel palacio se encontraba dando vueltas como loca, no cabía en su cabeza lo que había ocurrido hace tres días...¡Esto seria la burla de todos!, ¡Todo el mundo los señalaría!, ¿Y todo por que?, pues por que a su “querida hija Kagome” se le había ocurrido enamorarse de un Taisho en el momento menos preciso.

‑ ¡Esa niña no se cansa de arruinarnos! –Grito molesta la reina.

En la habitación de la menor de las Higurashi se encontraba dicha joven recostada en su cama viendo una hermosa caja de música que su amado le había regalado tiempo atrás.

*** Flash Back ***

‑ Oye Kagome... – Llamo un hombre de mirada ámbar a una chica de mirada castaña.

‑ Dime Inu – Respondió la joven mirándolo pacíficamente y sobretodo muy enamorada.

‑ Quiero darte esto...emmm...toma – Dijo el príncipe sonrojado entregándole una hermosa cajita de música, blanca y dorado, la chica quedo sorprendida al ver aquel objeto.

‑ Inu‑ya‑asha...es hermosa – Dijo al joven, quedando maravillada al abrirla se escucho una hermosa melodía y de ella salía una hermosa y morena bailarina de vestido blanco que giraba muy delicadamente, Kagome quedo sorprendida al ver aquella cajita, tanto que sus ojos se inundaron de lagrimas mientras abrazaba fuertemente a el chico de ojos ámbar.

‑ Gracias mi amor, te prometo que la cuidare muy bien – Dijo Kagome entre lagrimas aun abrazando al joven príncipe que correspondía gustoso a su abrazo.

*** End Flash back ***

Suspiro, lo extrañaba tanto, esa forma de ser tan tierno y a la vez orgulloso, sus hermosos ojos dorados como el mismo sol, sus lacios y perfectos cabellos plata que ella adoraba, aquella Hermosa y masculina sonrisa…lo extrañaba demasiado, era como si una parte de su alma y su corazón se hubiera ido con su querido Inuyasha.

‑ Hay Inuyasha, te extraño tanto mi amor – Dijo la princesa suspirando, después se quedo escuchando la hermosa melodía de aquella cajita y como un flash recordó una hermosa canción que recordaba desde que ella tenia cinco años.

El amor es tan extraño
no lo puedo entender
porque a veces hace daño
pero a veces hace bien​

Si lo buscas, el se esconde en algún lugar
pero él a mi me va a encontrar​

Como será, cuando vendrás
me harás reír, me harás llorar
cuando te vea el corazón me lo dirá…​

El amor es una estrella tan difícil de alcanzar
sin un beso que me pueda hacer volar
es como un rompecabezas que me cuesta tanto armar
se que tú tienes la pieza que le falta a mi vida, para amar​

¡Bingo!, la melodía de esa canción es la misma canción que ella tocaba en su piano antes de conocer a Inuyasha, y nadie mas que ella y “aquellos ojos ámbar” sabían esa canción, ya que ellos la habían inventado antes de despedirse, ¡pero como rayos no se había dado cuenta antes!, como no recordó esa mirada con los ojos de Inuyasha, entonces eso quería decir....que Inuyasha era aquel niño con el que compuso esa canción, pero ¿cómo?, ¿qué sus familias no se odian?, había mucho que aclarar.

Mientras en el reino sengoku...

‑ Kagome, suspiro. Mi amor, creo que tu eres mi pecado, ¿sabes? Tenemos un amor prohibido, pero juro que luchare con quién sea para estar a tu lado...te lo juro – Decía un Inuyasha decidido mientras apretaba fuertemente su puño y miraba a la nada.

En el palacio Shikon...

‑ Inu...tu eres mi pecado, mi hermoso pecado – Dijo Kagome, pero ahora que sabia que Inuyasha era aquel chico al que conoció y recordó por tanto tiempo, iba a luchar a costa de lo que sea para estar con el, de eso estaba mas que segura.

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Kagome‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑​

Este es mi pecado cual es el tuyo..

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Inuyasha‑‑‑‑‑‑‑‑‑​

Mi pecado eres tú..

Ambos príncipes se encontraban cantando la misma canción sin darse cuenta, cada quien en su reino, lejos de otro, en diferentes habitaciones, sin embargo, su corazón los unía a pesar de la distancia haciendo que cantaran la misma canción sin siquiera saber que hacían dúo.

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Inuyasha‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑​

Mi destino ya estaba sellado contigo
y el corazón te entregue​

y aunque el mundo intentó separar los caminos
nunca olvidé..​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Kagome‑‑‑‑‑‑‑‑​

Tus caricias marcaron mi piel
y tu vos mi corazón,​

‑‑‑‑‑‑‑‑Inuyasha‑‑‑‑‑‑‑‑​

en tus brazos el cielo encontré
y en tus ojos la fé​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Dúo‑‑‑‑‑‑‑‑‑​

Eres tu, solo tu,
la razón por la que viviré
Fuiste tu, solo tu,
la mujer que yo siempre soñé
Mi pecado eres tu,
siempre te ame..​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Kagome‑‑‑‑‑‑‑​

Que difícil fingir
que el pasado no existe,
sigues aquí junto a mii
a pesar del dolor,
tu recuerdo persiste
voy tras de ti.​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑Dúo‑‑‑‑‑‑‑‑​

Tus carisias marcaron mi piel
y tu vos mi corazón
en tus brazos el cielo encontré
y en tus ojos la fé​

Eres tu, solo tu,
La razón por la que viviré
Fuiste tu, solo tu,​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Inuyasha‑‑‑‑‑‑‑​

La mujer que yo siempre soñé​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Dúo‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑​

Mi pecado eres tu,
siempre te ame..​

¡siempre te ame! ​

Eres tu, solo tu,
La razón por la que viviré
Fuiste tu, solo tu,​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Inuyasha‑‑‑‑‑‑‑​

La mujer que yo siempre soñé​

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑Dúo‑‑‑‑‑‑‑‑‑​

Mi pecado eres tu,
siempre te ame..​

mi pecado eres tu..
mi pecado eres tu...
mi pecado eres tu...
siempre te ame
siempre te ame...​

Luego de terminar de cantar ambos suspiraron diciendo el nombre del otro, ambos deprimidos, Kikyo que había estado escuchando a su pequeña hermana cantar suspiro con melancolía para después retirarse silenciosamente por aquel largo pasillo.

‑ Hay Kagome, no sabes lo que daría por evitarte este sufrimiento hermana, estas viviendo lo mismo que yo...la historia se vuelve a repetir – Dijo con tristeza una Kikyo intranquila pos su hermana menor.

‑ Hola Kikyo – Saludo una voz masculina detrás de ella, haciendo que Kikyo abra los ojos de sorpresa y tirara la taza de te que llevaba en sus delicadas manos provocando que esta se rompa en mil pedazos. ‑ ¿ Q..que..haces...tu..a..aquí? – Pregunto al princesa con voz temblorosa.

‑ Vine por unos asuntos pendientes – Dijo aquella voz

Continuara.....

Chicas espero les guste la continuación, gracias por su apoyo, cuídense n‑n:SILVESTRESANVALENT:

 

Re: Contra viento y marea...por estar junto a ti

Chicas, sin mas demora les dejo el siguiente capitulo n.n, por cierto capitulo dedicado a Maffer susin Xd

Capitulo 7: Contra viento y marea

‑ Y...¿se puede saber cuales son esas cosas? – Preguntó inquieta Kikyo.

‑ ¿En serio quieres saber? – Preguntó sarcástico aquel hombre.

No lo podía esconder, aquel hombre le daba pavor, ¿pero que hacer?, necesitaba saber a que había venido y cuales eran esos “asuntos pendientes” que tenia que atender con tanta importancia, además de que no le había gustado para nada el que hubiera dicho esa pregunta sarcástica.

‑ Pues...se supone que soy tu esposa Hakudoshi, y merezco saber que es ese asunto tan importante que tienes que atender – Menciono la mujer de cabellera oscura con algo de temor en su voz.´

En ese instante Hakudoshi tomo bruscamente del cuello a la joven princesa haciendo presión para que le faltara el aire, Kikyo por su parte intentaba gritar, pero el aire le faltaba ya comenzaba a pensar que su bella y fina cara se colocaba púrpura al no poder respirar, Hakudoshi cada vez presionaba mas y mas su fino cuello mientas ella desesperadamente intentaba sacárselo de encima con ayuda de sus finas manos.

‑ Crees que no me eh dado cuenta que te has estado viendo con el muerto de hambre de Bankotzu – Dijo aquel hombre completamente enloquecido por la ira y los celos.

‑ Ha..ku..do...shi – Fue todo lo que puedo pronunciar la princesa por falta de aire.

Justo en el momento en que Kikyo pensó que ya estaba todo perdido y que no tenia salvación, apareció una chica de cabellos azabaches que apenas iba saliendo de su habitación y al ver aquella horrible escena no puedo mas que gritar.

‑ ¡Haaa, suelte a mi hermana! – Grito Kagome mientras corría desesperada en auxilio de su hermana mayor intentando quitar las sucias manos que aquel hombre en el cuello de Kikyo.

‑ ¡Kagome! – Grito Kikyo al tomar grandes bocados de aire. – ¡Déjala! Hakudoshi, no te atrevas a tocarla – Enfrento Kikyo con mucha seriedad, tanta que sorprendió a Kagome y aunque no lo admitiera a Hakudoshi.

Este por su parte, soltó bruscamente el brazo de la pequeña Kagome a la que había sujetado sin ningún tipo de delicadeza por haberse metido entre el y su “amada esposa”.

‑ Me voy – Dijo serio el hombre de larga cabellera para irse como si nada hubiera pasado. Kagome no pudo mas que correr a abrazar a su hermana la cual ya la esperaba con los brazos abiertos, ambas respiraban agitadamente y no era para menos, ese hombre les dio el susto de su vida.

‑ ¿Estas bien Kag? – Preguntó Kikyo mientras la observaba fijamente.

‑ Si Kikyo – Respondió esta, ‑ ¿Y tu? –Preguntó la menos de las Higurashi examinando a su hermana.

‑ Si, estoy bien Kag no te preocupes...gracias hermanita – Comentó Kikyo abrazándola mas fuerte, Kagome solo se limito a corresponder a aquel abrazo.

*** Y en el reino Sengoku ****

Se encontraba una hermosa familia real fuera del palacio esperando al parecer la llegada de algunas personas, luego de quince minutos se vio por aquella carretera que daba directo a palacio un carruaje color blanco junto a un caballo negro dirigiéndose directamente al palacio de los Taisho, el rey Inu‑no sonrió al ver que aquel carruaje se aproximaba cada vez mas hacia donde estaban ellos, la reina Izayoi se acerco mas a la pequeña carretera para recibir a las visitas mientras que el ultimo el príncipe Inuyasha Taisho solo hizo una mueca de fastidio, ya que estaba algo aburrido y camino hacia donde estaban su madre y recientemente su padre.

‑ Ya llegaron – Dijo la reina feliz.

De aquel carruaje bajo un hombre de tez bronceada, un cuerpo de atleta, cabello larguísimo color plata, casi igual al de el rey y príncipe que ahí se encontraban, solo que el de este hombre era mas claro, unos ojos color ámbar solo que a diferencia de Inuyasha, estos demostraban frialdad, vestía un traje de príncipe color negro que lo hacia ver muy elegante, enseguida bajo una hermosa doncella de tez blanca, mejillas sonrosadas, unos hermoso ojos chocolates que demostraban vida, un cabello negro hasta su cintura lacio y brillante, un cuerpo de modelo, realmente hermosa a simple vista que vestía un hermoso vestido color azul cielo y un hermoso sombrero blanco con un listón del mismo color del vestido, inmediatamente el hombre de que antes había bajado del carruaje le ofreció una mano ayudándola a bajar, y por ultimo un apuesto chico de tez morena, ojos azules realmente hermosos, cabello castaño oscuro recogido en una pequeña coleta, un cuerpo musculoso pero sin exageración que vestía un traje color azul que hacia resaltar sus hermosos ojos.

‑ Bienvenidos – Dijo un sonriente Inu‑no abrazando al joven de ojos ámbar igual que el, besando delicadamente la mano de la hermosa chica que la acompañaba y por ultimo dio un rápido abrazo amistoso al joven de ojos azules.

‑ Hola chicos, bienvenidos – Saludo la reina feliz que a diferencia de su esposo saludo a todos con un abrazo el cual los tres recién llegados respondieron gustosos.

‑ ¿Que tu no nos vas a saludar Inuyasha? – Preguntó el peliplateado de mirada fría.

‑ Hola Sesshoumaru – Dijo Inuyasha de mala gana, ‑ Hola Rin...lo lamento – Saludo y dijo Inuyasha.

‑ ¿Por qué? – Pregunto confundida y dudosa la hermosa chica sin entender por que su cuñado lo lamentaba.

‑ Pues por haberte casado con este tonto – Finalizo el menor de los Taisho como si fuera lo mas obvio del mundo.

Ante este comentario todos rieron a excepción de Sesshoumaru que miraba fijamente a Inuyasha con ojos de asesino.

‑ ¡Ja!, hola Miroku – Saludo por fin sonriente Inuyasha ignorando la mirada de su recién llegado hermano mayor y sonriendo amistosamente al chico de mirada azul mientras lo abrazaba amistosamente.

‑ ¡Amigo!, cuanto tiempo – Correspondió Miroku riendo.

‑ Y ¿qué se supone que has hecho Inu‑til – Preguntó con burla Sesshoumaru.

‑ Eso no te incumbe Sesshogay, además yo... – Inuyasha no termino de hablar ya que nadie se encontraba donde el estaba, volteo hacia el palacio y los observo a todos dirigiéndose a la puesta, ignorándolo por completo.

‑ ¡No me dejen aquí! – Grito molesto Inuyasha corriendo velozmente para alcanzarlos.

Mientras tanto con Kagome se encontraba hablando con su hermana sobre un tema algo importante.

‑ Por favor Kikyo – Suplico Kagome, que al parecer ya había superado el incidente de hace rato

‑ No lo se Kag – Dijo dudosa Kikyo.

‑ Vamos, por favor – Pidió la chica de cabellos azabaches juntando las manos en forma de rezo y poniendo su mejor carita de cachorro abandonado.

‑ ¿Y como sabes que siempre esta ahí? – Preguntó Kikyo.

‑ Por que el me dijo que todos los días va ahí a pensar, por favor ayúdame ¿si? – Contesto Kagome sin quitar aquella carita angelical.

‑ Bien – Suspiro resignada Kikyo.

Se encontraba un chico de mirada ámbar sentado en el verde pasto cerca de un río acompañado de su hermoso e inseparable caballo “ colmillo”, todo era silencio, solo se escuchaba la cascada caer, hasta que escucho unas pisadas acercándose lenta y peligrosamente hacia donde el se encontraba, este inmediatamente se puso de pie junto a colmillo, pero de ahí salió la persona mas esperada por aquel príncipe, si adivinaron...Kagome.

‑ Ka..ka..go..me – Tartamudeo Inuyasha sorprendido.

‑ Inuyasha –pronuncio la chica con felicidad mientras corría a abrazarlo, este inmediatamente correspondió al abrazo. – Sabia que estarías aquí – Dijo la joven.

‑ Mi amor, te extrañe – Hablo Inuyasha acariciando su largo y sedoso cabello.

‑ Yo también, nos quieres separar – Comento Kagome tristemente.

‑ ¡Ya no mas! – Te juro que voy a luchar así tenga que ser contra viento y marea por estar junto a ti mi amor...¡te lo juro! – Dijo un Inuyasha decidido.

‑ Yo también voy a luchar por nuestro amor Inuyasha – Respondió Kagome mientras le daba un tierno beso a su amado príncipe, el cual lo recibió gustoso.

P.O.V Inuyasha.

No me puedo dejar vencer, tengo que luchar a costa de lo que sea para poder estar junto a mi amada Kagome.

Siento un vació que va​

ahogándome una vez mas​

te quema el aire en la piel​

y vivir me da igual.​

En estos tres meses que estuve sin ella me sentía vació, solo la recordaba a ella, mi pensamiento estaba con ella...mi corazón estaba con ella, sin ella mi vida ya no tiene sentido.

Me duele tanto saber​

Me duele solo pensar​

que moriremos así y de igual forma te vas​

tus palabras me pueden mentir​

tu mirada jamás.​

Antes de irme de aquel desastroso baile, Kagome me había dicho que me fuera por que ella nunca me amo, ¡ja!, solo quería que yo terminara odiándola para que ya no sufriera mas ¿se dan cuenta?, ella prefirió que yo la odiara a que sufriera, la amo, sus palabras aparentemente frías me dolieron, pero no lo creí por que sus ojos demostraban lo contrario, yo solo me había limitado a besarla como si el mundo se fuera a acabar, y ella dejo de mentir.

Contra viento y marea​

y tal vez contra el mundo​

luchare con quien sea​

sin dudar un segundo​

con todo el corazón​

a matar o morir​

Contra viento y marea por estar junto a ti.​

¡Luchare!, lo haré por que la amo y se que ella me ama, estaremos juntos ¡lo juro! Voy a luchar contra el mundo entero si es necesario para estar con ella, luchare a muerte para defender nuestro amor.

Llevo un silencio que da​

la sensación de gritar​

tengo la mente en tu voz​

que pide nunca olvidar​

tus palabras me pueden mentir​

tu mirada jamás​

Tengo una sensación desesperada por gritarle al mundo entero que estoy enamorado y que no se interpongan, mi mente ahora solo piensa en Kagome...mi Kagome.

Contra viento y marea​

y tal vez contra el mundo​

luchare con quien sea​

sin dudar un segundo​

con todo el corazón​

a matar o morir​

"CONTRA VIENTO Y MAREA POR ESTAR JUNTO A TI"​

La necesito a mi lado y no voy a permitir que nadie nos quite esa felicidad, la felicidad que al fin eh encontrado, eh estado esperando desde mucho tiempo a la chica ideal, y ahora que la encontré nada ni nadie me la va a quitar.

CON UN SUEÑO QUE PIDE​

CON MI FE QUE TE SIGUE​

Y CON TODO EL AMOR​

Contra viento y marea​

y tal vez contra el mundo​

Contra viento y marea​

sin dudar un segundo​

Contra viento y marea​

y tal vez contra el mundo​

Contra viento y marea​

sin dudar un segundo​

Estoy decidido a enfrentarme...contra viento y marea.

Con todo el corazón​

a matar o morir​

Contra viento y marea por estar junto a ti.​

Junto a ti​

...​

junto a ti​

P.O.V narradora

‑ Lo estoy Kagome – Le dijo el chico a la hermosa joven de mirada chocolate que lo miro confundida, pero al final le dedico una hermosa sonrisa y lo abrazo fuertemente.

‑ Yo también lo estoy Inuyasha – Dijo esta cerrando sus hermosos ojos y dejando que el viento juegue con su cabello azabache y ondulado, haciendo que el príncipe sonriera complacido.

Esa tarde se la pasaron de maravilla, ella e Inuyasha cabalgaron un rato juntos arriba de colmillo y cuando Kagome se distraía Inuyasha aprovechaba para darle cortos besos en los labios a lo cual ella solamente sonreía complacida.

‑ Que maravilloso día – Dijo Kagome feliz sentada en el verde pasto.

‑ Lo se – Dijo Inuyasha sentado detrás de Kagome abrazándola por la cintura.

Inuyasha por un momento se distrajo viendo el paisaje, Kagome enseguida lo noto y decidió sorprenderlo al igual que el lo hacia con ella, rápidamente Kagome le dio tres cortos besos a los masculinos labios de su joven príncipe. Inuyasha solamente se sorprendió y después comenzó a reírse seguido de Kagome.

‑ Valla que aprendes rápido amor – Dijo Inuyasha aun rindo.

‑ Si ya lo creo – Contesto la chica al igual que Inuyasha.

‑ Ya veras – Dijo Inuyasha maliciosamente mientras la tomaba de la cintura, la atrajo mas hacia el y comenzó a darle besos por toda la cara y cuello, Kagome solamente reía sin parar ya que le daba cosquillas cuando Inuyasha depositaba besos en su cuello debido a una barba que estaba por crecer.

Se encontraban dos princesas entrando por la puerta principal de el palacio Shikon, al entrar se pudo ver en la sala a el esposo de la hija mayor Hakudoshi, el rey Onigumo acompañado de su esposa Tsubaki y un extraño hombre que ninguna de las dos conocía, era de tez morena, cabello negro hasta los hombros amarrado a una coleta alta, ojos azules muy apuesto y un musculoso cuerpo, llevaba unos pantalones azul marino y una camisa de botones muy elegante color blanca con detalles en azul del mismo color del pantalón mas unas botas largas, masculinas color negras.

‑ Buenas noches – Saludo Kagome haciendo reverencia a los presentes.

‑ ¿Qué pasa aquí? – Dijo en cambio Kikyo.

‑ Kagome...‑ La llamo Tsubaki con una sonrisa de burla – El es el conde Kouga Kuno Kishimoto, y es tu prometido – Soltó de golpe la malvada mujer sonreído maliciosamente.

La recién llegadas princesas solamente abrieron los ojos de sorpresa. Kagome no lo podía creer ¿un prometido?, ¡pero como!, de pronto vio todo borroso y solo escucho un grito de Kikyo y su padre Onigumo. Se había desmayado.

‑ Kagome – Gritaba Kikyo mientras le daba aire con su abanico de mano y la sostenía en el piso.

‑ Hija responde – Dijo preocupado Onigumo

Continuara...

Hola chicas, gracias por sus comentarios

Sephoraanime: No te preocupes amiga, yo te entiendo n.n jeje :si:

Izayoi sama: Gracias por todos tus consejos amiga, me sirven de mucho, y bueno a mi también me hubiera gustado que Inuyasha fuera así en la historia :mad:, pero bueno...aun así amamos a nuestro Inu original (el de la serie) ¿cierto? Xd.

Mailedriussi: Jaja, pues la verdad yo tampoco me imaginaba a Inuyasha tan romántico, pero así me sale la narración :D, jaja creo que adivinaste quien estaba con Kikyo amiga Xd.

Maffer susin: Amiga gracia por tu apoyo, para mi es importante tu opinión, y bueno aquí esta la conti que me pediste amiga n.n espero te haya gustado:rosa:.

IKST: Amiga estas loca si piensas que voy a dejar de firmar en tu fic jaja, ¡no lo haré!:no:, me encanta tu fic :saltarin:y bueno pues me alegra que te agrade el que Inuyasha sea romántico jaja.

Nos vemos en la siguiente conti.:SILVESTRESANVALENT:

 

Re: Contra viento y marea...por estar junto a ti

por cierto chicas, la cancion se llama "contra viento y marea" y es de intocable, la anterios se llama "mi pecado" y es de Maite perroni y Reik jeje olvide decirles :D

 

Re: Contra viento y marea...por estar junto a ti

chicas, lamento no haber puesto la conti, pero eh tenido unos problemitas, ahora la estoy terminando, en cuanto pueda la terminare sin mas retraso, tal vez mañana este lista gracias a todas por sus comentarios

 

Re: Contra viento y marea...por estar junto a ti

Chicos, eh tenido problemas con los capítulos de este song-fin, lamentablemente se borraron y tuve que volver a escribir, le daré dos capítulos mas y este song-fic terminara n‑n

Capitulo 8: La maldad de Tsubaki

‑ ¡Pero como se te ocurre decirlo así sin mas Tsubaki! – Gritó enfurecido el rey aun con Kagome en brazos.

Tal vez el rey Onigumo pensó ver a su esposa preocupada por el desmayo de su hija, pero lamentablemente no...Tsubaki tenia una radiante sonrisa en su rostro, es como si la hubiera complacido al ver a Kagome desmayada, a el con ella en brazos , a su hermana mayor tratando de despertarla y al duque Kouga sorprendido, ¡dios!, ¡¿pero de que estaba hecha esa mujer?!.

‑ ¿Qué pasa aquí? – Preguntó el recién llegado Souta con una hermosa chica de cabellos cortos y castaños, algo rizados, piel blanca y nívea, una mirada chocolate oscuro, era alta y muy hermosa.

‑ Tu hermana se ha desmayado hijo – Dijo con preocupación el rey.

‑ ¡Kagome!, ¿pero que le paso? – Preguntaba preocupado el príncipe de shikon, bueno no era para menos. El llegar con su futura esposa realmente feliz y ahora saber que su hermana menor estaba desmayada en la sala de palacio no era para nada agradable.

‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑‑

A la mañana siguiente todo era silencio, los pájaros cantaban y los rayos del sol iluminaban la habitación de la hermosa Kagome que aun se encontraba dormida.

‑ ¿Qué paso anoche? – Se pregunto la recién despierta Kagome, en ese instante recordó absolutamente todo lo que le paso desde la tarde maravillosa que tuvo con Inuyasha, hasta la terrible noticia de que su madre la comprometió con un completo desconocido. ‑ ¿Cómo pudo hacerme esto? – Dijo entre sollozos la bella mujer.

‑ Kagome, hermana me tenias preocupado – Hablo el hermano mayor de Kagome, Souta.

‑ Hola Souta, ya estoy mejor gracias, oye...¿quién me trajo a mi habitación? – Pregunto la princesa de ojos café.

‑ Pues yo quien mas? – Respondió este riendo y desordenándole sus cabellos con su mano en un gesto cariñoso.

‑ Hermano yo no me quiero casar con el tal Kouga, siquiera lo conozco, yo amo a Inuyasha – Dijo Kagome llorando amargamente.

‑ Lo se Kag, te prometo que no te vas a casar con este tipo, ¡lo juro! – Contesto Souta mas para el que para Kagome mientras la abrazaba fuertemente.

Mientras en el palacio sengoku...

‑ Joven Inuyasha ,lo buscan – Dijo el mayordomo del palacio.

‑ ¿Quién es? Naraku– Dijo un Inuyasha sorprendido y algo molesto, ya que ese mayordomo no le agradaba para nada, sentía que tenia una maldad escondida muy dentro de el.

‑ Es el príncipe del palacio shikon, ¿lo hago pasar señor? ‑

‑ Si, por favor hazlo pasar Naraku– Contesto este sorprendido.

Inuyasha se encontraba muy desconcertado por la inesperada visita que le aguardaba, y valla que no esperaba que su “cuñado” lo fuera a visitar.

‑ Buenas tardes Inuyasha – Saludo Souta.

‑ Buenas tardes, ¿a que se debe tu visita? – Respondió este intrigado.

- Mira Inuyasha, yo se que tu y mi hermana mantienen una relación en secreto, y sinceramente lo apruebo, creo que tu eres un buen muchacho y pues pienso que harás muy feliz a mi hermana Kagome ‑

‑ Pues, a pesar de que no se como fue que te enteraste, te agradezco tu confianza Souta, y si yo amo a tu hermana y quiero casarme con ella – Dijo Inuyasha serio y decidido.

‑ De eso precisamente quiero hablarte, mi madre la comprometió con un supuesto duque o que se yo llamado Kouga, y pues la verdad es que yo no estoy muy de acuerdo -
‑ ¡¿Qué?!, ¡pero como es posible que Kagome haya aceptado esa propuesta por dios! – Grito Inuyasha enfurecido.

‑ ¡No!, mi hermana no acepto nada, ella siquiera lo sabia, mi madre nos lo dijo ayer por la noche -.

- ¡Entonces que vamos a hacer! – Gritaba un desesperado y enamorado Inuyasha.

- ¡Pues que mas!, ¡vamos a impedir esa boda! – Dijo Souta como si fuera lo mas normal del mundo.

‑ ¿Cómo? ‑

- Tengo un plan...- Susurro Souta mientras con la mano le señalaba a Inuyasha que se acercara mas a el.

4 meses después...

‑ Hace cuatro meses que no te veo Inuyasha...¿cómo estarás? – Hablaba Kagome entre sollozos mientras acariciaba la cajita musical que el le había regalado tiempo atrás.

En la habitación de los reyes del palacio shikon...

- Ya mañana caso a Kagome...jaja y me las arreglare para que Kouga me deje una herencia, este matrimonio me facilitara mucho las cosas, tal vez ya siquiera necesite a el bueno para nada de Onigumo...me las voy a arreglar para ser la amante de Kouga, así como lo hice con Hakudoshi...el esposo de Kikyo – Hablaba cínicamente la cruel mujer.

‑ ¿Q-Que-acabas de decir mama?, ¡eres amante de mi esposo! – Reclamaba Kikyo con una cara de sorpresa y asco hacia la mujer que tenia enfrente.

Por su parte Tsubaki miraba fijamente el rostro de su hija Kikyo, era una mirada fría por parte de ambas.

Mientras en el palacio sengoku...

- Hoy es el día...Kagome, mi amor...ya voy por ti.

En el palacio shikon se encontraba una hermosa novia terminando de arreglar su hermoso vestido blanco, todo en ella se veía maravilloso...lamentablemente había un problema, en su mirada y en su voz no demostraba felicidad alguna.

- Estas lista Kagome – Dijo Tsubaki con la misma frialdad en sus palabras que la caracterizaba.

- Mama, yo no me quiero casar...yo estoy enamorada de Inuyasha ta... – Kagome no pudo terminar de hablar ya que se escucho un estruendoso “plaff” en la habitación de la novia..era Tsubaki, quien lamentablemente se había atrevido a golpear a Kagome en el rostro.

Kagome se encontraba tirada en el piso sollozando mientras con una de sus delicadas manos tapaba la mejilla en la que su madre la había golpeado. Tsubaki tomo a Kagome bruscamente del brazo y la jalo hasta quedar a la misma altura que ella mientras Kagome seguía sollozado.

- Escúchame bien Kagome – Hablo la malvada mujer. – Ni se te ocurra tratar de arruinar esta boda por que te juro escuincla que tu amado Inuyasha ¡se muere! – Grito enfurecida Tsubaki mientras la soltaba bruscamente haciendo que Kagome cayera nuevamente al suelo y saliendo de la habitación.

Kagome no lo podía creer, jamás pensó que su mama la amenazara de esa manera...tendría que casarse con Kouga, lo tendría que hacer si quería salvar a Inuyasha.

Mientras en el bosque...

- Kagome ¡tu no te puedes casar!, ¡yo te amo! – Gritaba con todas sus fuerzas mientras unas traviesas y gruesas lagrimas se asomaban por sus hermosos ojos dorados.

El alma nos juntó
con sólo un beso de testigo
cada latido prometió
que ibas a estar
siempre conmigo.

- Inuyasha te amo... pero no podemos estar juntos... te amo y es por eso que me voy a casar, para protegerte a ti – Susurraba Kagome mientras sollozaba con la cajita musical en sus manos y en su mano derecha...aquella medalla que tenia desde los cinco años.

En ese momento las ventanas se abrieron de improviso, Kagome se asusto ante el ruido, pero al ver de quien se trataba...simplemente pudo abrir los ojos de la sorpresa.

- I-nu-ya-sha...q-ue haces a-qui – Tartamudeaba la joven novia.

- Kagome mi amor – Dijo Inuyasha con una sonrisa mientras Corria a abrazarla – Te amo Kagome...tu no te puedes casar por que se que tu me amas a mi...vamonos mi amor...vamonos ahorita mismo – Decía un Inuyasha desesperado mientras la miraba fijamente.

Kagome lo miraba fijamente a los ojos, en su mirada se demostraba felicidad...justo cuando estaba apunto de darle el si...recordó una platica con su madre hace un rato.

*** FLASH BACK ***

- Escúchame bien Kagome – Hablo la malvada mujer. – Ni se te ocurra tratar de arruinar esta boda por que te juro escuincla que tu amado Inuyasha ¡se muere! – Grito enfurecida Tsubaki mientras la soltaba bruscamente haciendo que Kagome cayera nuevamente al suelo y saliendo de la habitación.

*** END FLASH BACK ***

- No Inuyasha! – Grito Kagome soltándose bruscamente de el – no me puedo ir contigo – Susurro alejándose lo mas posible de aquel hombre que la volvía loca.

Hoy todo cambió
y es que has seguido otro camino
pero mi vida se quedó
toda en tus labios
toda contigo

- P-pero ¿por qué? – Preguntaba Inuyasha desesperado y sorprendido.

- Por..por que ¡yo ya no te amo! – Grito Kagome sin mirarlo a los ojos y volteándose rápidamente para que el no se diera cuanta de la presencia de agua salada en sus mejillas.

- ¡ Kagome eso es mentira ,por dios estas mintiendo! – Gritaba desesperado Inuyasha...con temor de perderla para siempre.


Te dice un corazón desesperado
que regreses a mi lado
que la vida sin tu amor no ha sido igual
Te pido con el alma que recuerdes
que juraste no perderme
prometimos que no acabaría jamás
que mañana es para siempre

- Claro que no miento ¡yo ya no te amo Inuyasha!, ¡vete de una vez! – Gritaba una adolorida Kagome.

- No te creo ni una sola palabra...¡dímelo a los ojos! – Grito Inuyasha.

- ¡no!, ¿qué no entiendes? Yo nunca te quise solo estaba jugando contigo...simplemente para divertirme un rato – Dijo Kagome queriendo parecer sarcástica aunque por dentro estaba destrozada.

Inuyasha simplemente la miraba atónito...sin tratar de creer en las palabras de Kagome...en ese momento se cegó por la ira, por el coraje.

- Eres igual...¡eres igual a todas las malditas ofrecidas Kagome! – Le grito a todo pulmón. – ¡Eres una cualquiera...una..! – Inuyasha no pudo terminar su frase ya que Kagome lo había bofeteado.

- Vete Inuyasha – Hablo Kagome con sus ojos llenos de lagrimas.

Inuyasha sin decir mas salió por la ventana rojo de la ira, mientras que Kagome lloraba desconsoladamente dejándose caer lentamente en el suelo.

Dentro de mi piel
sigue la ausencia de tus manos
sigo tratando de entender
por que el destino
quiso engañarnos

- Creí que eras diferente Kagome...pero ahora me doy cuenta que eres igual a todas las demás – Decía un Inuyasha dolido.

Te dice un corazón desesperado
que regreses a mi lado
que la vida sin tu amor no ha sido igual.
Te pido con el alma que recuerdes
que juraste no perderme
prometimos que no acabaría jamás

- Te amo Inuyasha...pero prefiero que me odies a que te pase algo – Susurraba en sollozos la pequeña Kagome.

Sé que hay
una fe que no se acaba
una luz y una mirada
que nos volverá a encontrar

- Kagome ya estas lis..!pero que te paso Kag! – Dijo Kikyo corriendo al lado de Kagome.

- Lo perdí Kikyo...para siempre -

- ¿A quien Kagome? – Preguntaba Kikyo asustada,

-Inuyasha estuvo aquí...y le dije que no lo quería ver mas – Dijo Kagome llorando.

- ¿Cómo? – Dijo Kikyo sorprendida...- pero por que le dijiste eso – Dijo Kikyo desconcertada.

Kagome le contó a Kikyo la amenaza de Tsubaki y la mayor de las Higurashi enfureció de rabia.

- ¡Ella no puede impedirte nada!, si no estas enamorada de ese tal Kouga no te vas a casar Kagome – Dijo Kikyo saliendo de la habitación decidida mientras Kagome le suplicaba que no lo hiciera.

Con Inuyasha...

Mientras tanto Inuyasha se encontraba desconsolado en el mismo rió en el que había estado con Kagome tantas veces


Te pido con el alma que recuerdes
que juraste no perderme
prometimos que no acabaría jamás

- Espero que seas muy feliz Kagome...por que yo jamás lo seré – Dijo Inuyasha con una sonrisa de melancolía caminando lentamente entre el rió mojando sus ropas completamente.

Que mañana es para siempre

- Te amo Kagome...a pesar de todo ¡maldita sea! -


Continuara...

Espero les haya gustado amigas...espero sus comentarios.
*GARU**** Por cierto la cancion se llama mañana es para siempre y es de Alejandro Fernandez