Drake Orestes Por fin una gema se dignó a aparecer. La guardé en el saco rápidamente, y me centre en seguir cavando por la zona donde había caído la gema, para buscar la segunda. Atrás de mi, Samurott ya había detenido el combate. [5/5]
Drake Orestes Luego de que la vez anterior me fuera bastante bien al final, decidí seguir por un par de horas más. Otro punto a favor era el calor, que terminó fatigando a Scizor y Bisharp luego de idas y venidas de batallas. Luego de escoger un sitio, me puse manos a la obra. (1/5)
Drake Orestes La primera gema no tardo en aparecer. Prácticamente estaba en racha, las dos veces anteriores también había conseguido gemas. Guardé la gema en el bolso, y sin perder más tiempo volví a la tarea. Me gustaría obtener la mayor cantidad de gemas antes de que el pico se rompiera. (2/5)
Drake Orestes ¡Cayó la segunda gema! Parecía que había elegido un buen lugar. Con el tiempo que tenía trabajando en aquella zona, probablemente estaba aprendiendo a elegir mejor los sitios de excavación. Aunque aún había ocasiones donde no conseguía nada, pero bueno, eso solía pasar... (3/5)
Drake Orestes Tercera gema conseguida. Lo único malo era que probablemente no elegiría la misma zona al intentar volver luego de ir al mercado por otro pico, pues todos los lugares se parecen. Algún día conseguiría la forma de marcar el territorio, y entonces tendría gemas hasta para llevar a Galeia. (4/5)
Drake Orestes En algún momento se rompería el pico. La cuarta gema aún no había salido, pero no perdía la esperanza. Traté de escarbar a los alrededores, con tal de hacer más grande el agujero donde podría estar la siguiente. (5/5)
Drake Orestes Volví del mercado con el nuevo pico, luego de la sustancial recompensa del anterior. Había dejado cuidando a Kecleon, para que recordara la zona. Esperaba de alguna forma no perder el lugar en donde podía haber fácil una mina de gemas. Pero al llegar, Kecleon parecía haber olvidado el lugar exacto. En fin, tocaba intentarlo.
Drake Orestes De momento no aparecía nada. Probablemente había llegado al sitio incorrecto. Lo único que alcance a hacer fue moverme unos treinta centímetros a la derecha, y probar suerte desde ahí (2/5)
Drake Orestes Por fin luego de un rato intentando, cayó la primera gema. ¡Podía haber encontrado el sitio! No perdí el tiempo, rápidamente me dediqué a seguir picando con la esperanza de conseguir más. (3/5)
Drake Orestes La segunda gema cayó rápidamente. Sin duda, estaba en el mismo lugar. Agradecí a Kecleon, aunque había fallado en un principio, y me esforcé en concentrarme en el trabajo, con tal y encontrar más gemas antes de que el pico se rompiera. (4/5)
Drake Orestes No había salido otra gema, pero era normal, estás cosas pasaban. Seguí picando incansable, al menos hasta que el pico se rompió. Entonces volví a la ciudad para ir al que sería el último trabajo del día. (5/5)
Drake Orestes Probablemente haber dejado un cebo de marca no había sido la mejor idea. No sabía cómo había pensado que eso iba a funcionar, pero ya estaba hecho. Algún Pokémon de la colina había comido gratis. Solo podía esperar que no fuera un Pawniard Brillante. En fin, a trabajar. Casi podía sospechar cual era la zona correcta. (1/5)
Drake Orestes Nuevamente no había tenido suerte al primer intento. Esta vez me moví dos metros hacia la derecha antes de intentarlo de nuevo. Por lo menos esperaba poder acercarme al lugar correcto al final de todo (2/5)
Drake Orestes Nuevamente e igual que la vez anterior, la primera gema cayó. No detuve el ritmo en ningún momento, ni siquiera para poner aquella gema a buen recaudo. Lo único que me interesaba era mantener la suerte. (3/5)
Drake Orestes No salió nada más por un buen rato. Ya el sol comenzaba a caer, y tendríamos que irnos pronto o nos caería la noche. Aún así quise seguir intentándolo hasta que el pico se rompiera. (4/5)
Drake Orestes Pues no, no había suerte. Recogí la misera gema que había obtenido previamente, y seguí picando hasta que el pico ya no diera más. No sería mucho tiempo. (5/5)
Drake Orestes ¡Un último intento! Sin importarme que fuera ya de noche, o que empezara a hacer un poco de frío, nada importaba. Esta vez dejé a Kecleon apuntando el lugar exacto donde me parecía había intentado encontrar la última vez. Esperaba que esto funcionara. (1/5)
Drake Orestes Para variar, no obtuve nada. Pero si, aquello ya me había pasado varias veces antes, y esperaba tener mejor suerte en este segundo intento. Había que tener fe. (2/5)
Drake Orestes La primera gema no tardó en llegar. Seguí cavando por el mismo sitio, haciendo un barrido cuando la piedra vuelta metralla de me quedaba empozada en un solo sitio, evitando ver el lugar exacto a cavar. (3/5)
Drake Orestes Apareció la segunda gema. Probablemente era el mismo sitio de las otras veces, o probablemente era tan bueno como el primero. Lo único que importaba era aprovechar el momento y seguir con el trabajo. 4/5