Clever: Capítulo 1: Una nueva vida

Tras esperar un rato —que creo que se me hizo más largo de lo que debería—, el detective llegó.

Parecía estar bastante calmado, y me extrañaba que no se hubiese sorprendido que un grupo de raritos le llamase a uno de los suburbios de la ciudad al anochecer. ¿Quizás ya estaba acostumbrado a ello? No perdía nada por preguntar.

—Señor detective... no recuerdo el nombre. ¿Johan? Mmm, no... ¡David! Eso es. ¿Está usted acostumbrado a esto? Se le ve bastante tranquilo. ¿Ha estado ya en este barrio? —dije, intentándome fijar en su reacción.

—Respecto a lo de comprobar las casas.... —proseguí, antes de esperar su respuesta— no lo veo mal. Es decir, vamos a llamar a la puerta. ¿Que los ciudadanos nos confundan con monstruos o maleantes? ¿Qué clase de monstruo llamaría a una puerta?

 

Al final decidimos llamar, no sabíamos qué o quién nos aguardaba al otro lado, pero confiábamos en que, efectivamente, nos respondiese aquel supuesto detective. Y así procedimos a acercarnos a la caseta telefónica que divisamos. Yo me apegué a la señorita Katia, se notaba que aún estaba muy nerviosa, quería animarla y quizás compartir acerca de nuestras habilidades para que se soltara, pero... aún tenía en mi cabeza la imagen de aquellos amargos recuerdos de mi pasado tras ver la silueta en el muro... por lo que sólo caminé a su lado algo cabizbaja...

«Si mi pastor estuviera aquí,... él sí sabría que decir y hacer...»​

Pero sucedió algo inesperado, y no pude evitar soltar una leve risa, tras la sutileza del señor Drenvor. Si bien se nota que es una persona bastante agradable y que destila empatía por todos lados, era la primera vez que lo oía bromear, claro que mi risa no fue tanto por el chascarrillo que era bastante malo aunque me hacía gracia ese hecho sino por haber presenciado esa faceta suya que no había tenido antes el privilegio de conocer. Sonreí nuevamente con cierto alivio, y hasta ternura al ver que el delegado hacía lo que yo no me había atrevido con Katia...

Pero la ternura se desvaneció al oír nuevamente dirigirnos la palabra, y todo lo relativo a su condición de dragón. Seguro era difícil tener que mostrarse sereno ante tal panorama, y después de haber vivido dicha experiencia en el campo de entrenamiento. Es admirable como a pesar de todo, muestra tanta lucidez ante la situación actual que estamos viviendo.

Me preguntaba si los de Wissen también se verán enfrentados a sus propios dilemas personales...

— N-No creo haga falta llegar a eso... — dije intentando animarle y hacerle sentir que no está solo — A-Además, todo ha estado muy tranquilo, du-dudo que pase algo que nos obligue a utilizar nuestras habilidades... s-sí, así es...— le sonreí, esperando haber sido convincente además de apoyarle en disminuir la tensión...

Tras recibir la respuesta y, luego de media hora, finalmente llegó el detective. Se trata de un hombre joven, de estatura alta, cabellos rubios... y un parecer que... me causa una extraña sensación... Es como que...

... me agrada lo que veo...

¿Qué era este sentimiento? sólo recuerdo haberme sentido así con mi pastor, aunque no era el mismo sentir de paz y cobijo a pesar de que su sonrisa me recordaba mucho a él.

— Señor David, m-mucho gusto. Mi nombre es Dalia, encantada. —

Las institutrices del culto me lo advirtieron,... supongo que a esto es a lo que se referían con mantenerme pura y centrada en mis estudios y en el servicio al Culto de los Predilectos, estoy en "esa edad". Desde que inició mi peregrinar hacia el instituto de Clever, y una vez en él, he empezado a experimentar diferentes sensaciones, mis compañeros, el señor Drenvor, la señorita Shinne, el joven Redneval,... Ena, Tsume... la maestra Sasha, el señor Clever y los maestros, la señorita Katia... sentimientos que antes jamás habían pasado por mi cabeza, y muchos de ellos no son desagradables en absoluto,... y aún así...

Como sea, decidí hacer caso omiso a estos sentimientos y centrarme en lo que debía. Por un momento los recuerdos de la silueta se habían esfumado, hasta que el señor David mencionó lo de preguntar casa por casa y sólo podía visualizar aquella imagen de mis recuerdos, en aquella casa derrumbada producto del incendio...

— Joven Redneval... ¿usted cree que nos vean como monstruos?— dije al joven Redneval mirando pensativa hacia él al recordar la misión del Culto de los Predilectos.

— Mmm... supongo que si se enterasen que tenemos dones nos verán así, pero... definitivamente el señor David no puede ser un monstruo, creo que él sí es normal... e inofensivo... sí...—

 

A David no se le pasó por alto ninguno de los presentes, ni siquiera a Katia, quien no parecía tampoco estar demasiado cooperativa al encontrarse ensimismada en sus pensamientos. Por lo que durante un instante se acercó a ella para mirarla.

— Ser alguien de índole introspectiva es un buen paso para ser detective. Necesitas pensar mucho para ello—. Comentó a fin de intentar otorgarle algo de confianza en lo que miraba al resto cuando compartieron sus ideas. No repondió de inmediato sinó que adoptó una pose reflexiva, aunque les sonrió cuando se fueron presentando uno a uno, aunque el único que comentó algo relativo a la misión en curso fue Drenvor, ya que Redneval buscaba conocer más del trabajo del detective y Dalia buscaba relajarse a su manera, pensando en si los verían como mónstruos o no, algo de hecho interesentante a lo que David negó.

— Existen mónstruos con poderes y sin ellos, todo depende de como utilicemos nuestras habilidades ya sea como humanos o como Elegidos. Yo nací sin el don de los poderes, sin embargo el concepto de monstruos y de maldad es, digamos en el sentido más estricto de las palabras, sinónimos—. Comentó el chico amablemente para mirar a Redneval— En mi trabajo tengo que estar en muchos sitios así que si, he estado en este barrio solo en una ocasión, fue un caso menor de una disputa sobre asuntos de una infidelidad.

Finalmente dirigió su mirada a Drenvor para asentir.

— Cierto es que el perpetrador podría hallarse oculto, claro que de lo contrario no parecen existir otro tipo de personas que puedan darnos información fidedigna de lo que aquí ha acaecido. Además, parte del trabajo de detective reside en leer las microexpresiones de los demás, claro que.. teniendo en cuenta las casas vacías cerca del lugar… alguien pudo dejar alguna pista de algo antes de huir. Bueno, pues empezaremos por la de la derecha.

Casa abandonada:

A diferencia de lo que se pudiera creer, salvo el polvo y cierto desorden a raiz de las prisas, la casa estaba en buenas condiciones y bastante organizada, en la planta baja, estaba el comedor, un baño y una cocina, y en la planta superior un estudio de madera con un ordenador, varias estanterías y dos habitaciones, una aparentemente infantil con otra marca de calcinación en la pared y las camas y una habitación de adultos, intacta.

Podéis investigar toda la casa, dividíos y revisadla bien a fondo :D.

 

—Asuntos de infidelidad... ajá —dije en voz baja, pensando en las palabras del detective.

A los adultos siempre les gusta meterse en problemas, qué pereza. Por suerte, en el orfanato no teníamos que tratar con esa clase de actitudes habitualmente.

—Aah... el orfanato. ¿Se encontrarán bien el resto de mis compañeros? ¿Me dejarán los de Clever hacerles una visita? —pensé para mi mismo, olvidándome del resto y dejándome llevar por un momento.

Mientras estaba perdido en mis pensamientos, entramos junto al señor detective a una de las casas.

—Parece sospechosa... ¡no, mentira! ¡Es una casa normal! Aunque parece que no hay nadie... ¿de verdad les ha resultado tan fácil abandonar su hogar? —dije, tras echarle un primer vistazo al lugar.

Que no hubiese nadie en casa tampoco era de demasiada ayuda. Quizás se habían ido hace tiempo, o se habían marchado por algún otro motivo. Me encontraba un poco perdido aunque, por suerte, conseguí recordar algo que tal vez podía ser de utilidad.

-¡Escuchad, tengo una idea! En una ocasión leí una novela de detectives. En ella, comprobaban las fechas de lote y caducidad de la comida para hacerse una idea de cuándo había sido la última vez que alguien había habitado un lugar. Probaré a hacer eso. ¡Vuelvo ahora mismo!

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*Investigo el comedor y la cocina*

 

Asentí con la cabeza ante la respuesta del detective. El concepto de monstruo no debiera estar ligado a un individuo a causa de sus dones y habilidades, aunque esa es el gran "ay" al que se enfrenta el Culto de los Predilectos a menudo, cuya misión es predicar la Palabra de verdad acerca de los dones, y como estos son un regalo del cielo para mejorar nuestras vidas, en cooperación, tanto de gente que posee dones sobrenaturales como de personas normales. Por eso me intrigaba todo este asunto, si estos hechos eran producto de alguien con un don mal utilizado, debíamos detenerlo cuanto antes, de lo contrario, la sociedad nunca dejará de vernos como aberraciones.

Siguiendo las indicaciones del detective, me puse manos a la obra y me dirigí junto a él y al grupo a una de las casas abandonadas. Este era el momento de indagar, tal y como nos lo habían solicitado en el instituto, así que me puse alerta para inspeccionar cada detalle, no quería dejar pasar nada por alto. A simple vista, puedo notar un ligero desorden, pero nada demasiado fuera de lugar, por lo general, se veía que estaba todo bastante organizado, como si hasta hace poco hubiera estado habitada. Además, podía notarlo por el polvo, nada fuera de lo común tras un par de días de abandono. Aún así, necesitábamos comprobar con exactitud cuanto tiempo llevaba deshabitada y el joven Redneval tuvo una excelente idea al sugerir revisar las fechas en las conservas y comidas, que chico tan listo.

Mientras Redneval se dirigió a la cocina, el delegado hizo lo suyo subiendo por las escaleras.

— Si me lo permite, yo voy con usted. Arriba deben estar los dormitorios, me gustaría investigar allí, quizás pueda encontrar alguna identificación o algo que nos sea de utilidad.— respondí al joven señor Drenvor, mientras me dirigía tras de él hacia arriba por las escaleras. Una vez allí, me separé del delegado y me dirigí a las que parecían ser las habitaciones. Observé a la que parecía ser una habitación infantil, y tuve una idea de donde empezar a investigar. Aún estaba perturbada por esos recuerdos del pasado que tuve al mirar esas marcas detrás de los contenedores, así que esperaba que el ambiente grato de una habitación infantil me ayudase a encontrar más serenidad, pero...

— N-No... puede ser... — dije, mientras el rostro se me llenaba nuevamente de terror. Con la impresión, solté mi báculo, pero pude reaccionar a tiempo y evitar que cayera. Intenté mantener la calma, mas observaba fijamente la marca en el muro, pues la vista se me nubló y no podía divisar si tenía forma de silueta humana como la ves anterior. Luego voltee y pude notar otras marcas en una de las camas. Quería gritar, pero no me salía el habla... así que sólo susurré, esperando que alguien me oyera, no sabía si alguien más, además del delegado, habría subido después de mí:

— S-Señor D-Drenvor... c-creo que encontré algo...— murmuré, aunque dudaba que me oyera... Hice un esfuerzo por reponerme y observé el resto de la habitación buscando si había algo más destacable, o algo que pudiera ser una pista.


>> Dalia examina la habitación infantil.

 

David por su parte se mantenía bien al tanto de las conversaciones que los alumnos estaban teniendo entre ellos aunque no estaba tampoco entrometiéndose en lo que expresaban ni en sus gestos, eran un equipo al fin y al cabo pero si rió ligeramente, divertido por la inocencia de Redneval cuando comentó que la casa le parecía sospechosa, a lo que negó con la cabeza.

— Veo que te entusiasma investigar, de pequeño era como tu, creo que por eso mismo acabé por meterme en este trabajo—. Comentó con amabilidad mientrsas todos entraban en la casa y decidieron, cada uno investigar una zona, en lo que David decidió revisar el sótano de la casa, no sin antes escuchar con atención las palabras de Drenvor, sorprendido por su razonamiento.

— Es posible, puede que el gobierno les buscara una casa segura, aunque también es meramente posible que escaparan del lugar en vista de lo acaecido en el vecindario, todo es posible, temo que hasta que no podamos investigar todo con calma es muy precipitado llegar a conclusiones, aunque me interesa mucho tu forma de razonar, Drenvor… tienes potencial—. Comentó David antes de que todos se separaran para investigar la casa, incluso Shinne optó por dirigirse a la habitación de los adultos de igual manera, efectivamente parecía estar intacta, aunque en la mesita de noche encontró una especie de nota medio calcinada cuya única parte legible era “Como toda impureza debe caer ante los fuegos de Hades” algo que le llamó la atención y se guardó en su bolsillo, por otro lado.

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Drenvor pudo encontrar un diario en las estanterías con una letra seria y formal muy clara con no muchas páginas escritas, las primeras se trataban de simplemente de cosas normales de una familia cotidiana, problemas a niveles laborales y como su carrera de abogado iba yendo en ascenso meteórico hasta que en un juicio cometió un error que provocó un descenso bastante elevado por un error en su defensa, muy básico que provocó la condena a muerte de un inocente gracias a un buen contraataque del fiscal.

Justo tras esa página, aparecía información importante de todos modos.

Contenido oculto: Diario

Día 45:

Ha pasado cerca de un mes desde el juicio en cuestión. No he podido dormir y siento que mi psique se resquebraja por completo, ugh… nadie me puso al corriente de las consecuencias que tenía el defender al hijo del diputado en cuestión. Debí haberlo intuido, por supuesto, pero nada me preparó para las consecuencias ¿O si? En fin, he perdido mi casa y mis cuentas bancarias están congeladas, afortunadamente mi mujer pudo asegurarse de sacar una gran cantidad de dinero anticipadamente para poder mudarnos a otro sitio si es que la situación lo ameritara. No sé que haría sin ella y no sé como será nuestra vida a partir de ahora….

Día 69:

Me siento vigilado… hay coches fuera de mi casa y creo haber escuchado ruidos abajo y el llanto de mi hijo pequeño desde su habitación, no entiendo nada ¿Como han podido burlar los sitemas de seguridad? Algo buscan… de eso no me cabe duda, sea quien sea.

Día 70:

Una vez más no he podido dormir, estuve escuchando ruidos durante horas pero solo en el piso de abajo, mi esposa me tacha de paranoico de todos modos pero, yo sé que alguien está en la casa, sé que alguien nos tiene en el punto de mira, simplemente lo sé….

Bajé a primera hora al salón y mis sospechas se confirmaron, encontré una carpeta en la mesa de la cocina, perfectamente organizada, del colegio de abogados y del tribunal, en la misma me despojaban del distintivo y me acusaban de haber perdido el juicio a propósito. No entendía absolutamente nada, todo es tan ambigüo y precipitado y sinsentido que incluso yo mismo empezaba a creer que eran alucinaciones por mi propia paranoia y la falta de sueño, mi esposa ha bajado, tengo que hablar con ella sobre esto. Actualizaré el diario una vez hayamos tormado una determinación.

15:45:

Ya no solo fue mi esposa la que estuvo hablando conmigo sinó que un amigo del bufette en el que trabajé me hizo una visita recomendándome abandonar esta casa lo antes posible, efectivamente y tal como esperaba estoy en el punto de mira de las altas esferas del gobierno y debía moverme rápido. Malienne, mi esposa me ha recomendado usar el dinero para comprar una casa pequeña en una ciudad distinta, Brilthor se llama, en una ciudad distinta seguramente podría vivir una vida más tranquila y protegido por el amparo de otra gente, de todos modos… necesito saber exactamente que ocurrió….

Día 394:

Mucho tiempo sin escribir. La mudanza se hizo de una forma muy secreta por evidentes motivos. Al poco tiempo de llegar y establecerme en esta nueva casa me enteré de la desaparición de mi amigo, lo primero que pensé es que el gobierno estaba detrás de ella, y hasta el día de hoy no he vuelto a saber nada de él. Mis paranoias duraron un tiempo, eso es verdad, aunque a medida que pasaban los meses me fui relajando y recuperando la vida normal, conseguí un trabajo de profesor de instituto, y creo que mis aptitudes como abogado me hicieron tener cierto éxito a ese respecto. Me gustaba y me sentía, tras mucho tiempo, feliz. Al menos hasta que en el vencindario vinieron alertas de desapariciones y calcinaciones ¿Es que ma habían localizado?

Día 395:

Solo en un dia mi vida se ha puesto patas arriba, al despertarme esta mañana mi mujer se hallaba muerta a mi lado, y mi hijo nonato… No sé que planeaban conmigo, pero no tengo mucho tiempo. Espero que para el que encuentre este diario… pueda, como mínimo, llegar al fondo del asunto….

El resto de páginas están en blanco.

Cuando Drenvor se dirigió al ordenador, vio que estaba completamente desbloqueado, pudo ver una carpeta en el escritorio con el prefijo “Información” y en ella, varios documentos digitalizados de información sobre el juicio que le cambió la vida, el perfil del acusado y las transcripciones del juicio en cuestión, la parte que no pudo hacer fue acceder para descubrir la información en cuestión, eso si que estaba protegido con contraseña exceptuando un último mensaje, era una carta que no pudo llegar a abrir, y por ende tampoco estaba desbloqueada. Al abrirla pudo ver lo siguiente

Hola:

Ha pasado mucho tiempo pero, al fin puedo ponerme en contacto contigo. Estoy bien, aunque no sé por cuanto tiempo, esta carta es mi forma de ponerme en contacto contigo y ver si has podido averigüar algo de lo que acaeció en el juicio, necesito acceder a esa información para poder también tener un plan para averigüar todo lo que acaeció. Ya te advertí en determinadas ocasiones que había algo demasiado extraño en ese caso, claro que tu sentido de la responsabilidad es demasiado elevado como para siquiera negarte a seguir adelante con el caso, lo respeté y pese a que intenté ayudarte se me negó todo acceso a la información.

Espero que en tu nuevo hogar te halles cómodo, yo como digo no puedo revelar mi ubicación por el momento, pero si que puedo intentar buscar la forma de hacerte una visita, solo responde a esta carta cuando puedas a la dirección que te facilitaré a continuación….

Pero no había dirección establecida, lo que daba una pista de que la carta había sido también alterada.

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Por su parte, Dahlia vio de nuevo la marca de la calcinación en la pared, aunque no es que hubiera mucho mas a parte de un dibujo en su mesita de noche que revelaba una niña en la cama, aterrorizada y el dibujo de unas garras que aparecían debajo de su cama indicando que allí había un mónstruo.

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Redneval por su parte, examinó la cocina y, efectivamente las fechas de caducidad de los alimentos y el estado de los mismos pudo notarse que no hacía mucho que el hombre se había marchado a juzgar por las fechas y la cantidad de comida consumida, y en el comedor pudo ver una carpeta con los datos del acusado.

Contenido oculto: ficha acusado

Nombre: Adriak Von Aldien

Edad: 25

Cargos imputados: Homicido premeditado con arma blanca.

Imagen del acusado:

Contenido oculto

Acabáis de recoger toda la información que había en la casa, podéis reuniros y de ese modo poner en común todas las pistas :D.

 

Contenido oculto: Musiquita ambiental :3

Todo esto parecía producto de un mal augurio, y apenas estábamos revisando la primera casa. ¿Se supone que en las demás casas deshabitadas encontraremos marcas similares?,... o quizás algo peor...

Toda esta situación me aterraba, sí... el no depender de mi pastor me hacía sentir bastante vulnerable ante el entorno, mas... este es el camino que decidí seguir y debo afrontarlo. Por suerte el delegado sí oyó mis palabras y acudió a mi llamado,...

— Que alivio... suspiré aliviada.

Escuché sus palabras y me mantuve alerta,... observaba a todos lados, a la vez que seguía al señor Drenvor mientras él observaba por la ventana, yo la verdad no sabía como proceder, así que sólo hice caso a sus indicaciones, y esperé a que regresara junto a la señorita Shinne. Entonces observé hacia un costado, hacia la mesita de noche...

Contenido oculto: dibujo de la niña aterrada :3

¿Una niña...? Seguramente quien dibujó esto, es una pequeña que solía dormir en esta habitación... pero era extraño... ¿Acaso esas eran... garras?...

Lo normal sería pensar que sólo es un dibujo inocente,... de una niña que plasma en él sus miedos... a la oscuridad... a lo desconocido... Mas...

...

... ¿quizás...

Me agaché y observe debajo de la cama... no encontré nada, salvo un poco de polvo... por supuesto...

Ahora me encontraba pensativa... Observé nuevamente aquellas marcas en el muro... me aterraba pensar en lo que tuvo que haber vivido esa pequeña... si acaso ese monstruo de las garras saltó sobre ella consumiéndola,... a ella y a su inocencia... todo lo que nos quedaba eran aquellas marcas...

Me puse de pie, a la vez de que el señor Drenvor la señorita shinne se acercaban, así que me apresuré, tomé aquel dibujo y me reuní con ellos.

¿Un ex abogado?, oí atenta lo que decía el delegado, para luego responder:

— Pero... si aquel ex abogado ha traído su propia ruina... ¿puede eso estar relacionado con las calcinaciones?, quiero decir... ¿no deberían ser sólo él y su familia los afectados?— dije con la voz temblorosa.

— Tiene usted razón, señor Drenvor, yo también lo pensé. Apenas vamos en la primera casa, ¿será que encontraremos más marcas en el resto de casas deshabitadas? ¿Y tal vez...— bajé la mirada mientras alzaba el dibujo de tal manera que ambos, Drenvor y Shinne lo vieran.

—¿Estarán bien la señorita Katia y el joven Redneval?, me gustaría regresar con ellos.— Me apresuré a decir, ya que sentía bastante desconfianza... aquel detective, el señor David... fue él quien nos indicó visitar esta morada... ¿en verdad podemos confiar en él?...

 

Una vez en la cocina, decidí comenzar a investigar. La comida no parecía estar en muy mal estado, y las fechas de caducidad de los alimentos más frescos no estaban muy lejos de la fecha actual. Además, todo parecía estar más o menos ordenado. Juntando todo esto, parecía claro que los habitantes de la casa se habían ido hace poco y que habían tenido tiempo para prepararse...

O al menos, eso es lo que supuse; yo no era ningún experto en nada.

—Mmm, parece que no hay nada más aquí. ¡Hora de volver con el resto! —dije para mí mismo, mientras salía de la cocina, volviendo por donde había venido.

Fue en el momento en el que estaba pasando rápidamente por el comedor cuando vi algo fuera de lo habitual; algo que anteriormente había ignorado pero ahora había llamado mi atención: había una carpeta sobre la mesa del comedor.

Me pareció raro que hubiese una carpeta en ese lugar. Es verdad que la organización no era perfecta, pero en la cocina solo había encontrado cosas que uno habría esperado en un lugar como ese. ¿Qué hacía, entonces, esa carpeta ahí? Era algo que uno esperaría encontrar en un estudio, o una habitación. ¿Sería algo que se habían olvidado antes de marcharse?

Decidí mirar los contenidos de la carpeta y me llevé una sorpresa.

—Mmm, alguien muy feo. Y parece un asesino... creo que eso de "Homicidio premeditado con arma blanca" se podría traducir como "mata con cuchillo".

Una idea peligrosa me rondó por la cabeza. ¿Y si esa persona era el dueño de la casa, y aún se estaba escondiendo en algún lugar de la misma? Lo encontrado en la cocina decía lo contrario, pero... ¿y si estaba guardando alguna clase de sumunistros?

Empecé a tener algo de miedo, así que me fui a reunir con el resto. En esos momentos lo único que quería era estar solo.

—¡Chicos! ¡He encontrado la foto de un asesino!

Me dirigé hacia el resto y les conté lo que encontré y mis preocupaciones infundadas.

 

También llegué al comedor con la nota que encontré bien guardada a espera de ver que habian encontrado los demás y, cuando todos hubieran puesto en común sus conocimientos yo misma aprovecharía para poner la nota en conocimiento comunal.

Del mismo modo pude comprobar el movimiento de Drenvor para que me acercara y escucharle con atención, entendía sus sospechas y lo conveniente que estaba resultando todo dada la información hallada en la primera casa que acabábamos de encontrar.

— Un diario con información, un dibujo y más siluetas de calcinación… Definitivamente es algo demasiado conveniente. Cabe la posibilidad claro de que sea una mera coincidencia pero ¿Tantas pistas de la misión? ¿Al alcance de nuestra mano? Desde luego no es normal—.Comenté sacando la nota— Está un tanto dañada, pero se puede leer claramente “Como toda impureza debe caer ante los fuegos de Hades”. No creo que sea una coincidencia, tiene relación literal con las calcinaciones, aunque no me cuadra que tiene que ver eso con el Abogado en cuestión ¿Alguna idea?—. Comenté mirando el dibujo de Dalia con el monstruo debajo de la amohada mientras escuchaba a Drenvor, asintiendo

— Demaisado conveniente, sin dudas….

Drenvor no vio demasiado movimiento en la ventana, aunque si una columna de humo negro espesa que podía verse no muy lejos de su posición, como si algo se estuviera quemando a enorme temperatura algo que le dejó obubilado por unos segundos olvidándose de todo alrededor, aunque era mejor ver que decía el detective, era evidente que eso era algo que tenía que investigarse al no haber habido indicios de un incendio en los alrededores ni olor a quemado en su llegada.

Drenvor por su lado, pudo ver el dibujo con atención, aunque parecía querer investigarlo más de cerca agarrándolo con suavidad de las manos de Dalia.

Su cabeza se espesó y la misma sensación que sintió en Crystalium cuando acabó en ese extraño mundo regresó con fuerza a él.

Gritos… los gritos desesperados de una niña diciendo “Para por favor” ante la amenaza del mónstruo fue lo que esuchó como si viniera desde el fondo de un túnel pero a la vez tan nítidas como si estuviera ocurriendo justo delante de él, los gritos desesperado de la niña, los rugidos del mónstruo y, finalmente… silencio absoluto.

Drenvor volvió en si apenas un par de segundos después, aunque para él habían sido horas, lo había sentido, las emociones, el terror y aquellas garras extrañamente familiares para él.

— ¿Estás bien Drenv?—. Preguntó Shinne preocupada al ver que se había quedado como en trance.

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Al final, los 3 escucharon la llamada de Redneval provocando que bajaran y Shinne revisara la ficha policial con calma.

— Así que este es el “Asesino” ¿eh? Bueno… no tiene pinta de ser una bellísima persona la verdad—. Comentó reflexiva en lo que David llegaba.

— ¿Algo interesante chicos?—.Preguntó con calma.

 

Oí a al señor Drenvor y a la señorita Shinne con atención. Podía ver con cierto pesar que no estaba equivocada, pues tanto el señor Drenvor como la señorita Shinne pensaban lo mismo, era todo muy coincidente, aunque luego pensé que quizás nos estábamos dejando llevar por la paranoia. Ciertamente lo del ex abogado, su ola de desgracias y la niña aterrada era un tema preocupante, pero... no tenía por qué estar relacionado con las calcinaciones, necesariamente... después de todo, lo de las calcinaciones era un problema que involucraba a todo el barrio. Quizás... esta familia sólo se encontraba en el lugar equivocado cuando todo comenzó...

... hasta que observé la nota que encontró la señorita Shinne.

— Ciertamente, esta nota tiene más probabilidad de estar relacionada con las calcinaciones. Podríamos buscar escritos y comparar la letra con los miembros de la familia, en caso que no coincida, quizás fuera la firma del perpetuador... Y como dice el delegado, lo más probable es que "Hades" se trate de un pseudónimo. — comenté, aunque medio recordaba haber leído acerca de Hades en un libro de mitología... que dicho sea de paso, no pude acabar de leer porque las institutrices del Culto de los Predilectos, me lo confiscaron seguido de un extenso regaño y penitencia...


El delegado tomó el dibujo en sus manos y su semblante cambió. Me asusté por un momento, hasta que la señorita Shinne le habló y salió de ese... ¿trance?... o esa impresión me dio. Dice estar bien, pero... recuerdo que hasta hace poco, aún estaba recuperándose de su transformación. Estaba a punto de ofrecerle ayuda con mis habilidades curativas cuando el mismo Drenvor interrumpió con su exclamación. ¿Humo?, ¡no había nada de eso antes de entrar a esta vivienda!

Bajamos de inmediato y nos reunimos con el joven Redneval. ¿La foto de un asesino? observé la fotografía mientras escuché las preocupaciones del joven Redneval, mas el señor Drenvor nos interrumpió nuevamente, ahora mismo apremiaba indagar que era aquel humo que vio antes por la ventana del segundo piso.

— ¡Señor David, algo se quema cerca de aquí, se puede ver un humo negro a la distancia! ¿¡D-Deberíamos ir y ver que sucede!?— respondí al detective David, olvidando momentáneamente todo lo que habíamos encontrado. — Quizás haya alguna persona en peligro. ¡Debemos hacer algo pronto!—

 

Katia salió de su ensimismamiento casi al instante al oír una voz dirigiéndose a su persona, y no pudo evitar sonrojarse ante la pregunta de Drenvor, quien se veía genuinamente preocupado por ella. Se limitó a asentir con la cabeza y a sonreír para indicar que efectivamente todo estaba bien.

Escuchó atentamente el pequeño discurso que éste le dedicaba tanto a ella como al resto de sus nuevos compañeros, sin poder evitar ocultar la perplejidad que la invadió, reflejada en sus ojos.

Transformarse en un dragón. La capacidad de adquirir la forma de una criatura que, hasta donde la persona promedio sabía, no era más que propia de los relatos de fantasía que cualquier niña como ella habría leído alguna vez en su infancia. ¿En verdad alguien como el señor Drenvor cargaba con un poder tan impresionante y a la vez tan posible y escalofriantemente devastador?

No era como si ella fuese quien para poner a prueba la veracidad de sus palabras. Al igual que los demás, era poseedora de una habilidad que otras personas considerarían anti-natural. El mundo como lo conocía había dejado de existir en el momento de riesgo en que el su poder se manifestó. Ahora le tocaba estar con los de su clase, aquellos que podrían comprender cómo se sentía. Y la pregunta que Dalia le había hecho a Redneval no hacía más que confirmar aquella sospecha.

Nunca había sido precisamente brillante cuando se trataba de deducir u observar cosas, por lo que el concepto de investigar una escena del crimen era un escenario completamente nuevo para ella. Decidió seguir al resto del grupo por inercia, más concretamente a Redneval, guardando silencio hasta que el muchacho requiriese de su ayuda o de su opinión al respecto y no estando del todo segura de qué de todo lo que la rodeaba podía ser considerado como una pista más allá de la fotografía que su compañero afirmaba haber encontrado.

Cuando el grupo regresó nuevamente con ellos tras haberse separado momentáneamente, pudo notar aterrada el fuerte humo que provenía de la ventana del segundo piso. Podía reconocer perfectamente el olor a madera quemada, y aunque sus piernas temblaban como si tuviesen voluntad propia algo en su interior la forzó a hablar.

-¡Y-YO IRÉ!-exclamó fuertemente tras un prolongado silencio y para sorpresa de todos los presentes. Luego se tapó la boca y les eludió con la mirada humillada-Q-quiero decir, yo puedo entrar allí. Mi cuerpo hará que mis pulmones puedan respirar el humo sin que me ocurra nada. A-aunque tal vez necesitaría de alguien que pueda volar para e-entrar por la ventana y darme una mano una vez dentro para salir rápido. S-soy menos atlética de lo que parezco.

 

No había pasado casi nada de tiempo desde que había mostrado mis hallazgos al grupo cuando comencé a escuchar gritos sobre 'humo' y 'fuego'. Por un momento me alteré, aunque pronto comprendí que se trataba de un fuego en otro edificio de la ciudad, y no en el que estábamos nosotros.

Tras centrarme, procesé con más tranquilidad lo que habían gritado Dalia y Katia e intenté dar mi opinión.

—E-Esto... ¡escuchad! Yo también estoy de acuerdo con que deberíamos ir a mirar el origen de ese humo, y deberíamos comprobar la casa por si hay alguien dentro, pero... —hice una pausa, comprobando que me estuviesen prestando atención—. Si lo que estamos buscando es al que ha iniciado ese fuego... ¡lo más probable es que no esté dentro de la casa! Es decir... nadie se quedaría dentro de la propia casa que está intentando incendiar, ¿no? Quizás alguien debería quedarse por los alrededores vigilando en caso de que esa persona esté intentando huir... ¿tal vez deberíamos dividirnos? —dije, inseguro, mientras miraba a Katia y a Dalia.

—Y-yo creo que dentro no serviría de mucho, quizás es mejor que me quede fuera... —expliqué, con tono de voz un poco débil.

Mi mente ahora mismo estaba intentando decidir qué era peor: si quedarse dentro de una casa con fuego, o si quedarse fuera, por la noche, en las calles donde ronda un supuesto criminal.

 

No estaba del todo segura, aún estaba dándole vueltas a todo lo que estaba acaeciendo, escuché a Drenvor para emitir un ruido reflexivo ¿Enfrentarse a una deidad? Aun si fuera posible entiendo que ese estátus implica enfrentarse a alguien superior a los profesores y aun no somos ni rivales para ellos ¿Como planteamos poder siquiera enfrentarnos a una deidad? O a alguien con el cuajo de agarrar y ponerse el nombre de una deidad mitológica, y aún más ¿Con que objetivo atacaría una deidad de buenas a primeras a un vecindario así? Algo no me acababa de cuadrar, por lo que me asomé a la ventana un instante para ver el humo negro… Sea lo que fuere, es algo que debemos investigar de manera inmediata.

Escuché a Drenvor y su reacción me había recordado horriblemente a las dos que tuvo Dahlia delante de mi cuando le habían dado sus ataques, algo que me preocupaba de hecho horrores, pero tampoco quería arriesgarme del todo a entrar en su mente ahora que estaba constantemente concentrada en no hacerlo con nadie, por lo que negué, adoptando una actitud mas compasiva.

— Sea lo que sea ese humo, lo averigüaremos juntos como clase y, como amigos ¿Si Drenv? Vamos, anímate—. Le sonreí escuchando como el resto, tomando en cuenta la idea de Drenvor iban aceptando dirigirse a examinar el humo, finalmente aceptando yo también, no sin antes escuchar en si las palabras de Katia, que parecía ganar fuerzas por momento, por lo que volteé para sonreirla.

— ¡Así se habla!—.Comenté con una sonrisa.

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David comprendía la situación, especialmente viendo el estado de animo del resto de los adolescentes y la más que evidente atracción de todos por la columna de humo negro que se veía a la lejanía. No hubo palabras y Drenvor, quizás movido por el estrés que le produjo la visión, optó por convertirse en dragón alzando el vuelo para cerciorarse de primera mano el detalle de la columna, pero, pese a la altura no se alejó demasiado de los chicos y se había levantado una suave brisa que desentonaba con la tensión del momento.

Y llegaron…

Contenido oculto: Scene of battle

La casa era mas grande que las demás, estaba al final de una calle llena de casas mas pequeñas a los laterales, simétricamente colocadas una tras otra. Drenvor regresó al suelo, y, dado su elevado tamaño dificultaba la vista a la casa mas grande, aunque eso no les impidió escuchar ciertos murmullos tras el espeso humo de una persona, quizás dos, hablando. No duró, pues de la nada unos penetrantes ojos amarillos se vieron desde el interior de una ventana del segundo piso, seguido de un rujido estruendoso, y la figura salió con rapidez de la ventana dirigiéndose hacia la multitud, aunque con un objetivo aparentemente claro, golpeando a Drenvor producto del impulso aunque, su mirada, parecía no estar del todo centrada en el joven dragón.


Drenvor no pudo eludirlo, pero si que, al verle encima suyo no pudo sinó rugir soltando una llamarada dirigda a su ala derecha y alzar el vuelo con rapidez forcejeando por unos instantes con las llamas de ambos dragones, así como luego pasaron a embestirse en lo que al final el dragón enemigo le mandó de un coletazo a uno de los edificios dirigiéndose a la multitud de elegidos que veían el espectáculo, pero de nuevo Drenvor se acabó acercando hacia su rival para embestirle repetidamente varias veces, al final regresó a su posición habitual con algunas heridas superficiales, no parecía que eso fuera a suponerle ningún tipo de hándicap a la hora de luchar junto al resto de sus amigos.

Contenido oculto: A partir del 7:49

Aunque ahí no quedaba todo… al lado opuesto de la enorme torre de humo, otra figura caminaba aun cubierta por la espeura, y al salir, se encontró con un arma apuntándole a la cabeza.

— Vaya vaya, salí buscando cobre y encontré oro—. Comentó escopeta eb mano con el dedo en el gatillo la fémina voz— Así que el destino busca que me vengue de ti…



— Así que no tuviste suficiente humillación en nuestro último encuentro ¿Eh Avitte? Creí que mi muestra de misericordia habría sido suficiente para haceros entender que no teníais opción, pero, como dicen, los humanos son los únicos seres vivos que caen dos veces en la misma piedra y, los estúpidos 3—. Comentó la otra voz, ahora claramente definda— Como quieras pequeña Avitte, al menos podré estirar los músculos…

Contenido oculto

Aqui empieza vuestro combate, disfrutad~, iréis atacando a medida que posteéis. Recordad, poned las fichas y atacad descontando los PA que cuesta cada ataque y, a la vez no olvidéis el dado de Precisión, de 10 caras dependiendo del ataque. Buena suerte

P.D: AH SI, controlé a Drenvor con permiso de Giga, no os preocupéis nwn

Contenido oculto: Vs ridley theme

???


PV: ???
Ataque:???
Defensa:???
At.Especial:???
Df Especial: ???

 

Alas que baten fuerte
Ojos que miran y juzgan hasta estremecerte
Dientes y garras que descargan la muerte
Hasta que su desgraciado oponente yazca inerte
Oyendo su diabólico rugido, que hasta al cielo despierte

Katia enmudeció por completo y se paralizó. La colosal, alada y aterradora bestia reptiliana, de apariencia similar a un pteranodon, que se había interpuesto entre la casa en llamas y ellos rivalizaba-por no decir que superaba por un pequeño aunque notable margen-la fuerza del señor Drenvor, haciéndola entrar en un estado de shock que no había experimentado desde el día en el que su poder se manifestó en aquel mercado, salvándola de las balas de sus atacantes. Ya fuese por su ávida lectura o por su gusto por la lírica, su mente siempre solía emplear como mecanismo de defensa poesía improvisada, que la ayudaba a procesar y digerir el peligro inminente sin desconectarse por completo del mismo.

Haciendo un intento sobrehumano por mantener la calma y no demostrar debilidad para no defraudar a su clase, respiró hondo y dejó que llegase oxígeno a su cerebro, cerrando los ojos. Y entonces se concentró.

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De acuerdo, veamos. Tengo a posiblemente la cosa más espeluznante que haya visto en mi vida parada frente a mí. La casa todavía se incendia y si no actuamos rápido la gente que se pueda encontrar allí dentro morirá. Mis compañeros también lo harán si no aporto pronto.

Un ataque frontal sería suicidio. Esta...criatura posee un aliento de fuego como el del señor Drenvor que podría calcinarme si mi cuerpo no se adapta a tiempo. A menos...

A menos que intente aquello que me sucedió cuando huí de aquellos supervillanos. Si corro y uso la correcta cantidad de adrenalina, mis células podrían ajustarse al calor de las llamas mucho más rápido. Pero la distancia que nos separa es muy corta y no hay garantías de que pueda juntar la energía cinética suficiente a tiempo.

Si mi cuerpo tarda tanto en sanar, seré inútil. Apenas he llegado a esta academia y no he tenido tiempo de entrenar. ¿Cómo es que hacen las cosas aquí? ¿Cuál es el protocolo en una situación como esta? ¿Tienen protocolos en situaciones como esta? ¿Qué harían los demás?

No importa. Nada importa excepto ver si no hay nadie en la casa. Soy la única capaz de sacar a las personas-si es que las hay-sin terminar en la enfermería. Solo tengo que correr y mi cuerpo hará el resto.

Trágate el miedo, aunque sea por unos segundos. Corre. ¡CORRE!

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-¡E-ESCUCHEN!-osó exclamar de repente-¡T-tengo una idea! N-necesito que lo d-distraigan para que pueda acercarme a la casa. P-peleando no les seré muy útil, ¡p-pero puedo salvar a quien sea que se halle dentro! ¡Q-que alguien me cubra!

 

Primero esas marcas, luego el dibujo de esa pequeña... no, no puedo pensar con claridad, se me vienen pensamientos confusos a la cabeza. Revivo una y otra vez aquella noche, cuando mis padres perecieron en aquel incendio... y cuando aquella pequeña niña lloraba desconsolada,... hasta que un gran hombre la acogió... Oh, me pregunto si habré hecho bien en salir de la cobertura de mi pastor, él siempre me cuidaba, me daba confianza y seguridad...

... pero decidí madurar...

>>A ese gran hombre, a Frederick McCoy, mi pastor... Yo, Dalia McCoy le prometo que utilizaré bien mi don y asistiré al prójimo como es mi deber,... como una verdadera sacerdotiza del Culto de los Predilectos, y ahora también como heroína de Clever.<<

... y cuando me haya convertido en heroína volveré a usted....

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Nos apresuramos a salir de la casa y dirigirnos hacia la columna de humo. Si hay heridos, debemos socorrerlos, mas...

— ¿U-Un dragón? Entonces sí era literal,... ¡el Señor Drenvor puede convertirse en dragón!

Quedé estupefacta ante la transformación, aunque él rápido voló hacia la columna, así que sujeté fuertemente mi báculo y corrí junto al grupo. Pero la sorpresa estaba por llegar...

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Contenido oculto: Musiquita para ambientar :3

Ver a un dragón era demasiada emoción para una noche, pero... ¿dos dragones? Un temblor recorrió mi cuerpo, no sé si estaba preparada para esto... quería creer que el señor Drenvor podría con él, pero... se notaba la diferencia de fuerzas, él no podría solo...

— Ese dragón es demasiado fuerte, el señor Drenvor necesita de nuestro apoyo, pero...

Observé a Katia, y parecía paralizada. No era para menos porque yo estaba igual. En ese momento me olvidé de todo, de la promesa a mi pastor, sólo quería salir corriendo... hasta que la oí.

— Katia...

Observé nuevamente como el señor Drenvor en su forma de dragón observaba al enemigo, parecía que estaba calculando y acto seguido, reinició el ataque.

... Es cierto. ¡No podemos titubear ahora! La casa en llamas, este barrio. ¡Si hay personas en peligro, debemos auxiliarlas! — dije en voz alta, para darme fuerzas yo misma. ¡No puedo fallarles en mi primera misión!


— ¡Está bien, mientras Katia se adentra en la casa, nosotros apoyaremos al señor Drenvor!— dije a la vez que corría al encuentro de ambos dragones. Mientras más me acercaba, más imponente se veían, pero ya no había lugar para el miedo así que sujeté firme mi báculo y apunté hacia ese dragón:


>>Dalia ataca con —¡Impulso vacío!—

Nivel: 3
PV: 40/40
PA: 30/35
Ataque: 10
Defensa: 15
At.Especial: 35
Def.Especial: 35

Arma: Báculo (Quita 3 PA a los enemigos) [0 PA; Precisión - Perfecta (Nunca falla)]

Habs especiales:
Sanación ligera (Cura de un turno 5 PV a sus aliados o a si misma) [5 PA; Precisión - Perfecta]
Impulso del corazón (Cura 5 PV a sus aliados y a sí misma) [10 PA; Precisión - Perfecta]
Impulso vacío (Baja 3 PV a sus enemigos) [5 PA; Precisión - 90% aplica a todos los objetivos]

Clase: Sanadora

Contenido oculto

Pinxe Mada, que actualices las fichas! >< me costó encontrar la mía actualizada con las precisiones (y ni siquiera sé si esta que usé es la correcta, pero voto a que está desactualizada owo)