En minutos entre a la sede del torneo y me fui rápidamente a mi sala-- Espero no acabarla muy r´pido-- dicho esto entre con confianza a la sala de mi combate.
--Spark, nos quedamos solos.-- Spark bajó las orejas decepcionado. --Vamos... Dime, que quieres hacer y nos entretendremos.--
Llegué lentamente a la sede del torneo pero justamente al abrir la puerta, Pika se fue corriendo. --¡Pika !¿a dónde vas?! ¡Vuelve! --le ordené pero el me miró con cara triste y vi que el pobre estaba aburrido. Me acerqué y le acaricie las orejas. --¿Quieres ir con Sparky verdad? Bueno, ya que no te sacaré hoy, puedes ir. Pero pórtate bien, aunque si Des te trata mal, lanzale un rayo. --le dije con malicia. Mi pokémon me miró asustado por mi actitud y se limitó a asentir y se marchó. Yo entré al edificio con una pokeball en la mano.
--Gaaaah... Me aburro...-- Dije bostezando.--No hay nada que hacer... Podríamos comer algo, pero no tengo mucha hambre.-- Spark seguía caminando como si nada, yo no le prestaba atención, ya sabe cuidarse el solito. Pero me llamó la atención un "Pika" más fino que el de Spark. Pika había aparecido de la nada. No señalaba a ningún lado, no quería que buscara nada, Entonces... ¿Por qué no está con su entrenadora? Le pregunté dónde estaba Liza, y por qué no estaba con ella. Simplementee, señaló la sede, y negó con la cabeza. Si quería estar con nosotros, no le voy a obligar a que se vaya, ni mucho menos. prefiero que se quede. Bueno, entonces supongo que sí que hat que comer... Pues, a buscar algún sitio.
Salí de la sede algo triste y llegué al centro pokémon. Dejé allí a mis pokémon y fui a dar un paseo. Mientras paseaba, mi móvil sonó y lo cogí rápidamente. Era mi madre... --Liza: Hola mama. --le sonreí tiernamente. --¿Querías algo? Mama: Hola hija. ¿Qué tal va tu viaje? Liza: Bueno...--bajé la cabeza en señal de tristeza. Mama: ¿Qué te ocurre? Liza:Es que acabo de perder en el torneo Tempera y no estoy de muy buen humor. Mama: No pasa nada por perder.A sí uno aprende y madura.--me sonrió. --Por cierto, ¿te acuerdas de aquella promesa que hicimos tu padre, tu y yo? Liza: Me puse pálida al recordar la promesa y tan solo asentí. Mama: Pues, creo que deberías volver a casa. Debes cumplir tu parte del trato Liz. Liza:Volver a Teselia... --susurré muy pensativa. Mama: Acordamos que solo te dejaríamos viajar allí por un tiempo, hasta que encontraras a Pika. Y si cuando pasara no hubieras hecho algun logro importante...Deberías volver a cas sin rechistar. Mama: Piénsatelo bien y esta tarde me das una respuesta ¿vale? Liza: Ok... Adios mama... Mama: Adios Liz, te quiero. Colgué el teléfono y me senté en un banco, muy pensativa. --Debería volver a casa...
Salí de la sede y empece a buscar a sierta chica--¿que habre ganado?-- pregunte confuso por el acuerdo echo.
--Creo que ya es hora ¿no?-- Me pregunté mirando mi reloj.--Bueno si es la hora...-- Llamé a Spark y al pokémon de Liza, para emprender la busqueda de Alpha y Liz. Ya habrán salido de la sede. Solo me quedá ir a verlos. La pregunta es... ¿Dónde está? ME tendré que peinar toda la Ciudad con tal de encontrarlos, y eso voy a hacer ahora mismo.
Mil ideas pasaban por mi mente en aquel momento y estaba muy confusa. Recordé que debía buscar a Pika y me levanté para comenzar la búsqueda.
--¿Dónde estan?-- Pregunté extrañada. --Vale a ver... Calma. Si han salido, no deberían estar lejos, así que... Tendré que buscar cerca de la sede.--
--Me quedan 2 horas para aclarar mis ideas... ¿qué debo hacer? --me decia a mi misma pero iba tan distraida que no vi por donde iba y choqué contra un arbol.
Me levanté con dificultad y me sobé la cabeza. --Creo que es malo darse tantos golpes en la cabeza. --me dije en voz alta y miré hacia la derecha donde se encontraba Alpha tirado en el suelo. --¿Qué haces ahí?
--Nada, ni por los alrededores ni por ningún lado...-- Tendré que volver a peinar el lugar... Espero encontrarlos esta vez. Y cuando antes hablo, antes aparecen. Liza y Alpha estaban delante de mí. Este último tirado en el suelo. --¿Pasa algo?--
No me reí ante el comentario y seguí sumida en mis pensamientos. Al segundo apareció Des y me puse de cuclillas para intentar estar a la altura de Pika. Le acaricié la cabeza y se subió a mi hombro. Le lancé una sonrisa forzada a Destiny y me fui del lugar con paso sumiso.
--Ya veo...-- Dije en tono indiferente. Luego miré a White, y quieras o no, me preocupé. --Ocurre algo Liz?--
Di media vuelta ante su comentario y sin mirarla a los ojos, ya que si lo hacia me echaría a llorar, le respondí: --Nada. --le contesté intentando parecer borde, aunque estaba demasiado afligida cono para conseguirlo.