Ciudad Lienzo (Rol Base)

--¿A qué esperas para echar un vistazo?-- dije sacando la lengua y adentrándome en el lugar

 

— A que pasaras tú antes — dije siguiendola para observar todo, ¿por qué este lugar se llamaría la zona prohibida?

 

--Se podía ver también ¿sabes.-- dije sonriendo

Empecé a hacer memoria, y recordé todo sobre este sitio.
--Mis padres me prohibían entrar aquí. Me decían que sólo eran para los mayores... Pero me da igual. Ahora es mía.

 

— Claro que lo sé... — ¿una sala solo para mayores?, bueno aun así Destiny podía estar en cualquier otra área de su mansión para no aburrirse — Bueno...no me parece un lugar para mayores realmente

 

--¿¡Verdad!? ¡No tiene lógica!-- dije dándole la razón y saliendo del lugar
--Bueno, prosigamos.
Cuando Eevee me oyó, salió del agua y se sacudió para estar listo.

 

¿Destiny me acababa de dar la razón?, vaya... ahora si moría, moriría tranquilo de cierta forma

— Debían de tener algun motivo para eso...— dije en una pequeña risa, la sala en realidad parecía mas para jóvenes que para adultos

— ¿A donde me guiarás esta vez? — pregunté

 

Le dije que viniera con un gesto de mi mano. Llegué justo a la puerta de enfrente, me giré y le sonreí.
--Mi lugar favorito cuando era pequeña... La sala de cine. Pero esta es la parte infantil- dicho esto, abrí la puerta

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Silbé al ver semejante sala "infantil" de cine enfrente mio — Sabes... presentía que tendrías algo como esto aquí en tu mansión — dije riendo mientras me adentraba en ella y veía los asientos

 

Reí ante su reacción.
--Toda mansión tiene una.
Eevee se adentró, y se tumbó en el asientos ama de delante. Luego, me senté yo junto a mi pokémon.
--Me encantaba este lugar...

 

— ¿A quien no le encantaría tener una sala de cine en su hogar? — pregunté sentándome en el asiento al lado ella

 

Cierto.
--Bueno, ahora no me gusta mucho. Paso de películas.

 

— ¿Enserio?... entonces.. ¿ahora que te gusta mas? — pregunté, en lo que a mi se refería jamás me hartaría de ver peliculas una y otra vez

 

Me quedé pensando. La verdad, no sabía.
--Ni idea. Lo iré averiguando con el paso del tiempo.

 

— Bueno... eso espero — dije recargándome en mi asiento — Por cierto... ¿cómo te fue con el regalo?

 

¡Ahí va! Todavía lo tengo en Témpera...
--Pues me gasté novecientos sesenta y pico poké dólares en él.

 

— ¿Tanto?... pues que cosas le compraste a Alpha — le pregunté, tal vez para ella no era tanto dinero pero alguien "promedio" o para mi, era demasiado

 

Sonreí y le miré.

--Un cinturón de entrenador dorado y unas cuantas cosas más.

 

— Eso es demasiado... — dije asombrado, ¿para que Alpha necesitaría tantas cosas?

 

Alcé una ceja.
--¿Es demasiado un conjunto para entrenadores?

 

— Realmente no lo sé... — dije imaginándome un cinturón dorado — Pero es que desde mi punto de vista gastaste mucho...