Escuché con la cabeza debajo de la almohada como llamaban a la puerta pero no iba a levantarme, estaba demasiado débil y mal para recibir visitas. —Fuera de aquí. —exclamé con voz quebrada; era fácil saber que estaba llorando.
Reconocí las voces; eran Yair y Rojo. Lágrimas recorrían mis mejillas y se me formaba un nudo en la garganta, dificultandome el habla en aquel instante, pero aún así tuve que responder, quizás así me dejasen tranquila. —Dejadme sola, por favor...
Entendí el mensaje —Solo recuerda, un amigo de verdad no abandona a los suyos —dije, para luego marcharme con tristeza—
Triste y aun esperando que pasara algo ya que estaba triste y aburrido --Quiero que pase algo ya...--Dije triste y aburrido--
Me levanté y regresé al centro, volví a subir a las habitaciones y me acerqué a la habitación de Liza otra vez —Sólo quiero decir, mi más sentido pésame —dije con tristeza para luego marcharme— (@Liza White)
—En verdad, los hombres sí que no tienen tacto —suspiré, observando la escena desde el mostrador de Joy. La amable enfermera me devolvió las pokebolas de Gallade y Arcanine, ya recuperados de la batalla contra Dante. Me había cansado de observar el lento combate entre Ukita y Brendan, por lo que resolví ir al Centro a curar a los míos... y ahora, justo cuando me preguntaba por donde andaba Yair, aquí aparecía, y acompañado por un nuevo chico. —¡Oigan! —grité para llamar su atención, ya que aún no me habían visto.
Escuchar aquello último fue como si me apuñalaran por la espalda, me dolió horrores. Estallé en llanto de nuevo metiendo mi cabeza debajo de la almohada otra vez para que no se me oyera demasiado y asustara a la enfermera y demás personas y la agarré con fuerza. Sé que Rojo dijo lo que dijo por educación, pero recordarme todo esto me hacía poner peor...
—No tendrá tacto, pero sí que es sensible —comenté al verlo pasar, huyendo del Centro. Miré a Yair, que aún no había reaccionado para nada, y comencé a dirigirme hacia él.
Suspiré de nuevo. Yair no reaccionaba, se había quedado duro desde que el chico con el Wartortle salió corriendo... simplemente le entregué el folleto que había encontrado y lo obligué a tomarlo en sus manos. —Habrá un torneo para novatos en Ciudad Témpera... parece que no fue destruída después de todo —comenté, optimista—. Voy a inscribirme allí pronto... tengo que irme, ¡nos vemos! Y sin más, abandoné el Centro Pokémon, dirigiéndome hacia las costas de Ciudad Lienzo.
Seguía mirando el combate, sería un combate lento y me imaginaba que duraría mucho más así que no tendría inconveniente de ir al centro pokemon otra vez gracias a la pelea con Effy, esperaba que la enfermera Joy no me preguntara el porque ya había ido dos veces en un día. Camine a mi paso con Mawile en mis brazos, extrañaba lienzo de cierta forma había tanto recuerdos buenos como malos, pero quería enfocarme en los primeros... al llegar al centro pokemon entregue mis pokebolas y esperé sentado en una banca hasta que me llamara nuevamente la enfermera — ¿Mawile, a donde vas? — le pregunté a mi pokemon que se había bajado de la banca y había corrido a un de las habitaciones del centro pokemon para comenzar a darle pequeños golpes como intentando llamar a alguien
Solo me quedó sentir tristeza por Liza, lo duro que fué para ella perder a Bruno la destrozó, pero yo pasé lo mismo, hace cinco años.. —Warto, dime, ¿Crees que Liza se recuperará?, pobre de ella —le pregunté tristemente a Wartortle—
No abrían la puerta, y Mawile seguía llamando tanto como podía ya fuera tocando y haciendo su sonido característico — Mawile... ¿te quieres quedar para ver si te abren? — le pregunté a mi pokemon, no tarno mucho en asentir y se sentó frente a la puerta con una sonrisa — No te metas en problemas.... — le adverti antes de bajar para ir por mis pokemon que ya habían sido atendidos por Joy Salí del centro pokemon y me senté en una de sus bancas para tomar aire, desde allí podía ver la pelea sin problemas pero obviamente no con la misma "calidad" cuando estas cerca — Te extrañaba lienzo...
(entonces esta bien e.e) Saqué a Chesnaught de su pokebola y le mire intentando recordar como lo obtuve, pero claro... todo era en vano, nada venia a mi cabeza — ¿Tú no me puedes explicar que ese todo mi tiempo fuera o no? — le pregunté a mi pokemon, el movio su cabeza de lado a lado para decirme que no
Regrese a Flygon a su pokebola y mire a Ukita que se habia quedado dormido. --Vale amigo! Tengo que ir por un encargo, pero apenas despiertes no dudes en buscarme!-- exclame colocandome a su lado y dejandole una hamburguesa y una Frizz. @Fabian
Mientras caminaba de regreso con Warto y Sylveon había un chico caminando por allí... —¡Hola! —exclamé—
Había dos chicos cerca, uno se me hacía familiar por la batalla contra entidad, el otro chico era completamente desconocido para mi... nunca había tantas personas en lienzo así que era algo extraño para mi
—Hey hola pequeños!— me agache para saludar a los pokemon y de mi espalda surgian los traviesos Plusle y Minun.