Ciudad Barniz

— ¿Comida favorita? — pregunte mirándola y después al techo — Creo que no tengo ninguna...creo que debo de decir que la pizza aunque sea una respuesta muy vaga

 

— Color favorito... rojo o negro — dije sonriendo un poco, ¿a quien no le gustaba la pizza? creo que a la mayoría le gustaría comer pizza en cualquier momento, claro... no me imaginaba a mimi comiendo una pizza pero lo mas probable es que también a ella le gustara

 

— Mi fecha de cumpleaños es secreta... y... con tal de que pases conmigo ese día yo creo que me es suficiente — le sonreí al notar tanta curiosidad sobre mi, aunque practicamente no tuviera mucho de interesante

 

Le sonreí un poco y tomé sus brazos para hacer que volvieran a su posición normal, pero claro eso implicó que estuviera cerca de ella invadiendo su espacio — Te lo diré cuando estemos por esas fechas ¿vale? — le propuse sin dejar de sonreir y una vez dicho esto, me alejé nuevamente

 

-- Chocolate-- creo que de todas las preguntas esa había sido la más fácil de resolver para mi, pero aunque ese fuera mi dulce preferido casi nunca lo comía, tal vez después debería ir a comprar uno

 

Su pregunta a continuación me tomo bastante desprevenido pero al parecer a ella también, lo más probable es que ella no quisiera haber preguntado aquello si no que más bien sería una pregunta que había pensado en voz alta

— Ah... Pues... No lo se realmente — murmure riendo algo nervioso, ¿cómo responder aquello? — Supongo que... Es algo difícil de decir, tal vez...— me detuve rápidamente, al notar lo que estuve apunto de decir

— Tal vez debería decírtelo cuando tenga una respuesta concreta

 

Le abrace un poco haciendo que descubriera su rostro, aunque me ahorraría el hecho de decirle que se veía tierna de esa forma, no quería que se avergonzará más

— Hmmm... ¿Cuál es tu pokemon favorito y por que?

 

— Entonces manos mal que te di un de eevee — reí levemente al parecer ya se le había pasado la vergüenza un poco — Aunque me imagino que querrás otra de sus evoluciones

 

— Creo que entonces tu gusto a los eevee es mucho — Para que alguien quisiera las evoluciones de un pokemon, el amor era mucho — Creo que también por eso querías ir a la torre ¿verdad?

 

— Sigues queriendo que te lleve a la torre? — pregunte soltándola hasta que nuevamente recargue mis brazos en el colchón de la cama