No sé, pero esto me gustaba y mucho. Necesito hacer que me puerda pero... ¿Cómo? --Bien.... Lucario, creo un columna de polvo con Esfera Aural para librarnos. El pokémon asintió, y preparó el ataque para hacernos desaparecer.
Seguía corriendo cuando una esfera aural chocó frente mi sin darme y frené en seco para llevar mis manos a la cara para taparme de la impresión. --Dios, que susto. --dije respirando entrecortadamente y mirando a todos lados. --¿Donde...dónde se han metido? Empecé a darle vueltas a la cabeza y algo me vino a la cabeza. Cogí una pokeball y la lancé. De ella salió Sigiliph, y le sonreí decisiva. --Escúchame atentamente, agita tus alas para disipar el humo y con tus patas elévame contigo para ir más rápidos, ¿ok? --mi pokémon asintió y me agarró de los brazos para elevarme por el aire y con sus alas disipó la niebla. Acto seguido comenzó a volar más rápido hasta que dimos con nuestros objetivos. Le señalé a los que debía pillar y este asintió aumentando la velocidad.
(¿¿Sigilyph tiene patas?? XD) Ahora, solo quedaba una. Cogí todas mis balls, de las que salieron todos mis pokémon. --Todos, atacad a un mismo punto para hacer suficiente humo como para que llegue hasta Liza para despistarla.-- Todos asintieron, y prepararon sus mejores ataques para lanzarlos contra el suelo. Cuando ví que llegó hasta Liza, pude depistarla. Ahora solo quedaba llegar hasta un lugar para ocultarme.
(Esq no se como se llaman esas cosas raras que tiene como "pies" o algo XD) --¡Oh venga ya! --exclamé llevando de nuevo mis manos a la cara al ver colisionar los ataques. --Sigiliph vuelve a batir tus alas esta vez con ayuda de Starly y Noibat. --dicho esto saqué a dichos pokémon y entre los tres lograron deshacerse de la niebla en menos tiempo. Al terminar vi que Destiny ya se había escabullido de allí y suspiré un poco cansada. --Ayudadme vosotros dos a buscarla por aquí, Starly, tu por la derecha y Noibat por la izquierda. Nosotros iremos por arriba. Me fijé en que el lado de abajo nadie lo vigilaba con que saqué a mis demás pokémon para que patrullaran por allí. Esta vez no tenía escapatoria...
En nada, mis pokémon vilvieron, pero los necesitaría. --Cualquiera que se acerque... ¡Atacad! Mis pokémon asintieron, y se separaron. Todo iba genial. --Lucario, tú te quedas conmigo por si acaso. Como iría por aire, supongo que esconderme bajo algo serviría, con lo que decidí deslizarme bajo un banco junto a Lucario, y esconderme ahí. era incómodo, pero nos servía
Mientras yo observaba todo desde el aire, mis pokémon iban cada uno a lo suyo. Rhyhorn caminaba tranquilamente como si tal cosa y al llegar a un parwue le entró el sueño y se recostó allí. Heatmor y Sandlash buscaban sin descanso alguna pista de la chica, recorriendo todos los lugares incansablemente. Fennekin y Eevee corrian por todos lados siendo perseguidos por un Dewott enfadado por que no estaban ayudándome y el Pikachu miraba atento todo a su alrededor. Pasó por una calle ahora muy solitaria y vio a Destiny debajo de un banco, cosa que le hizo reir y se acercó allí cruzado de patas y con una sonrisita divertida.
--O te piras... O sales volando.-- Le dije al pokémon furiosa. --Venga... Viendo que el pokémon no hacía caso, Lucario preparó un Pulso Umbrío, pero lo desvaneció al ver a Krokorok acercarse. --Cuidadíto...-- dije sonriéndo. El ratón, al ver al cocodrilo, empezó a esquivar sus ataques. Al menos así no me descubrían.
Desde lo alto, escuché ataques provenientes de una zona en concreto y no dude en ir para allá. Al llegar, vi que mi pikachu esquivaba ataques de Krokorock y que...Destiny...¿estaba debajo de un banco? --¡Abajo Sigiliph! --le ordené a mi pokémon y salté desde una altura más baja al suelo. Me acerqué al banco y me agaché. --¿En serio? ¿Un banco? --empecé a reirme de lo divertida que estaba ella ahí abajo y le toqué con mi dedo en su frente. --Tu la llevas. --reí y me senté en el suelo esperando a que saliera de allí.
Grrrrr... Maldita rata. Estiré mi brazo hasta tocarla --No, la llevas tú.-- Según dije eso, salí de debajo del banco por detrás junto a mi pokémon, y volví a correr. --¡Grave error el quedarte parada niña!
--No voy a seguir jugando. --reí y me senté en el banco junto a el ratón eléctrico. --Boba, ahora corre para nada. --murmuré entre risitas. Poco a poco, mis pokémon empezaron a venir a donde yo estaba y los metí a todos, incluso al adormecido Rhyhorn, que acababa de despertarse de su siesta.
Paré al ver que no venía. --Me ha dejado en ridículo la muy...-- Volví a acercarme a ella con paso lento. --No te acuerdas pero sigues siendo igual de mala. -- le dije sentándome frente a ella.
--Lo dijo la que me chincha en medio de un juego. --le respondí acariciando al pokémon amarillo con una sonrisa burlona.
--Te recuerdo que lo eres... -- Le respondí sonriendo --No eres más que una niña... Estoy por ver si pica en mi trampa, haciendo que recuerde nuestras peleas
--¿Y tu que eres? Una vieja. --le respondí llevando mis manos tras mi cabeza y riendo divertida. --Te encanta hacerme enfadar.