Ciudad Barniz

--Bueno...digamos que al sentirme menos protegida ayudo un poco--dije pensando--luego hable un poco con Rojo que tambien me ayudo, hasta que estoy contigo lo que hizo que se me quitara el vacio y la actitud completamente.

 

--Asi que cuando te pase eso quieres que este contigo?--Le pregunte sonriendo--

 

Asenti sonriendo--Si, tu logras animarme--le dije sonriendo.

 

La mesera dejo los platos de pasta enfrente nuestro

--Vale es una promesa, ahora si a comer--Le dije.sonriendo--

 

--Vale--le dije sonriendo mientras empezaba a comer, pero me senti incomoda por la mirada...de cierto pokemon.

 

Empezaba a comer y veo a mitsuki

--Que pasa mitsuki?--Le pregunte sonriendo--

 

--Me siento incomoda...por la mirada de lax--dije mientras trataba de ignorar su mirada,pero se me era imposible.

 

--Que mal, sacalo y le doy comida para pokemon--Le dije sonriendo--

 

Agarre la pokeball de lax y le mire atentamente--Te sacare...pero si haces desastre no tendras comida por una semana--el pokemon tras escuchar eso asiente con rapidez, por lo que lo saco y este se acerca a yair para que le de la comida pokemon.

 

Veo a lax y saco de mi mochila el bote de la comida para pokemon y se la entrego para que empezara a comer.

--Vale, ya esta--Le dije sonriendo--

 

Decidí regresar al CP y entrar a la habitación de Mizuki, y sentarme en el suelo

 

Me desperte y vi a Rojo en el suelo--Hola Rojo--Dije sonriendo mientras bostezaba

 

Sonreí
—Hola, bella durmiente —saludé—

 

Sonrei--Bueno tampoco dormi tanto--le dije sonriendo

 

—No importa —sonreí—
Sylveon saludó a Mizuki, para luego sacar el nuevo disfraz de Flareon (muchísimo mejor que el anterior) y enseñárselo

 

Vaya asi podras engañar mejor a Quilava--Le dije sonriendo

 

Lax sonrie antes de ponerse a comer, lo que me hizo sentir menos incomoda--Mucho mejor...--dije sonriendo antes de seguir comiendo

 

Sylveon asintió, y ayudé a ponerse su disfraz
—Ahora sí parece un Flareon —le comenté, ya que el disfraz tenía la misma forma del pokémon—

 

Eres la hermana gemela de un Flareon--le dije sonriendo

 

Sylveon soltó una risita, y se puso a buscar a Quilava
—Bueno, ahí tendremos con qué pasar el rato —le murmuré a Mizuki—