Descendí al ver que Liza lo hacía... había comprobado su pokebola, ¿acaso no se había dado cuenta que Togepi se había extraviado? Explicaba porque no la había estado buscando después de todo... Bajé del lomo de Skarmory, y Togepi saltó después de mí y corrió a brazos de su entrenadora. —Realmente te ha extrañado —observé mientras veía a Togepi alcanzar finalmente a Liza.
Pidgeotto y yo caimos en picado ya cuando el suelo estaba muy cercas de nosotros logre recuperar el vuelo.. --Oye estas bien?--Le pregunte preocupado--
— Ustedes tambien— les sonrei a mis pokemon que ayudaron en la batalla. Garchomp se limito a gritar su nombre y Milotic solo dio una elegante sonrisa
Miré como Togepi bajaba del pokémon y corría a mis brazos, instantáneamente me agaché y la abracé con todo el cariño del mundo, mientras algunas pequeñas lágrimas salían de mis ojos. Me sentía la peor entrenadora del mundo, mientras mi pokémon estaba de lo más feliz abrazándome. —Togepi, no se qué ha pasado...pero...lo siento mucho. —dije mientras la abrazaba con más fuerza. —No me puedo creer aún todo esto. Mi pokémon sonrió y me secó las lágrimas para sonreirme, y yo no pude evitar sonreir igual. Miré a la entrenadora a la que le tenía en estos instantes una gratitud enorme. —Muchas gracias por cuidar a Togepi, no sabes cuanto te lo agradezco, de verdad. —sonreí cogiendo en brazos a la pequeña. —Para mi Togepi es como si fuera mi bebé, ahora mismo me siento la peor madre del mundo
—No sabías que Togepi estaba extraviada... —comenté por lo bajo suavemente. Luego levanté la voz—. No hay problema, es una bebé muy buena y llena de alegría. Fue mi placer cuidarla, y me alegra mucho poder devolverla a donde pertenece. Me acerqué más a ellas dos, y procedí a presentarme. —Mi nombre es Effy, por cierto, soy una entrenadora de Ciudad Témpera —le extendí una mano amiga.
Cuando Yair me ayudó, sentí un gran dolor por todo el cuerpo. --¡Aaah! --Grité al principio. --No pasa nada... Continuemos...-- pedía algo me dice que voy a cojear...
--Subete a pidgeotto, mientras te repongas de esa caida--Le dije y el pidgeotto se puso de el lado de destiny--
Sonreí con alegría al ver que la chica, que decía que se llamaba Effy, era bastante amigable y le estreché mi mano igual. —Yo soy Liza White, y sí, también era procedente de Ciudad Témpera pero hace mucho de eso. —le respondí ya apartando mi mano y recordando aquel tema de la mansión témpera y de mi verdader familia. —Más bien vengo de Teselia. Togepi miró con alegría a Effy al ver que al fin la había devuelto conmigo y se lo agradeció en su idioma.
—Teselia... he oído mucho de esa región. Espero visitarla algún día —comenté con una sonrisa—. Y dime, Liza... ¿a dónde te dirigías con tanta prisa, que por poco y no te alcanzo?
--Cuidado, por favor...-- le pedí. Me dolía todo. Me dolían hasta cosas que no sabía que dolían. --Charizard no puede andar lejos...
— Bueno, creo que lo mejor seria empezar a prepararnos para la siguiente pelea— Me dije a mi mismo pensando el lo ocurrido con Omicron y su "Entidad"
--De acuerdo... Pero Mejor intenta buscar a Charizard en vez de ocuparte de mi.-- le pedí a Yair mirando hacia los lados. -- Sólo espero que no se haya roto...
—Es una región bastante interesante, deberías visitarla, sí. —le respondí y pasé a tornarme más seria. —¿Que a dónde me dirigía? Pues, a la batalla final. Debo ir a la plataforma de los cielos a luchar por el mundo tal y como es junto con otros holders. Tan solo eso. —dicho esto Sigiliph me avisó de que debía irme ya pero le hice una seña de que esperara un poco.
Me monte en Charizard y guarde a los otros dos para al instante empezar a surcar los cielos. Desde aqui se podia ver el lugar creado por la entidad. Seria una lastima perderme esa batalla