Ciudad Aerosol

Tema en 'Rutas' iniciado por MrJake, 2 Enero 2014.

Cargando...
  1.  
    Amane

    Amane Equipo administrativo Comentarista destacado fifteen k. gakkouer

    Piscis
    Miembro desde:
    10 Julio 2013
    Mensajes:
    15,861
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Emily Hodges

    Debía admitirlo, ciertamente mi sueño no era uno de los más pesados que podía haber. Después de todas las noches en las que apenas podía dormir más de un par de horas sin despertarme por las pesadillas, mi sensibilidad a los ruidos se había vuelto bastante elevada. Así que los sonidos provenientes del pasillo me hicieron despertar.

    No pretendía levantarme, a decir verdad, a pesar de todo la cama estaba muy calentita, pero la fugaz idea de que aquello tuviese que ver de alguna manera con Alpha y Mimi hizo que me levantase prácticamente como un resorte. ¿Acaso no había hecho bien en acompañarle? Pensé que lo mejor sería dejarles hablar a solas, ¿no había sido una buena idea?

    Salí de la habitación sin apenas pensar en mi aspecto. No debía ser el mejor que había presentado, ciertamente, pero no era relevante en ese momento. No lo fue hasta que, al abrir la puerta, a quién me encontré de frente fue ni más ni menos a Ian. Vaya, ¿quién diría que después de los del dojo nos íbamos a encontrar tantas veces?

    Reprimiendo un chillido, me llevé las manos hacia mi cuerpo, intentando tapar... ¿el pijama? La verdad, estaba demasiado avergonzada en ese momento para pensar con claridad mis acciones.

    —¿Qu-qué haces aquí? —acabé por preguntar—. Qu-quiero decir...


    Quise empezar a explicar a lo que me refería exactamente, pero mi vista entonces, que había estado viajando a todos lados, se percató de algo en su rostro. Olvidando por un momento la situación en la que estábamos, relajé repentinamente mi cuerpo al acercarme un poco más a él. Con cuidado, coloqué mis dedos sobre su mejilla, inclinando ligeramente su cabeza para ver mejor aquella marca rojiza que tanto contrastaba con su piel, incluso en la oscuridad del pasillo.

    >>¿Qué ha pasado? —acabé por preguntar, en un susurro.

    AHORA QUE YA NO ESTÁ CON ELLOS NADA ME IMPIDE DARME MI PROPIO FANSERVICE CIERTO? CIERTO.
     
    • Fangirl Fangirl x 2
    • Adorable Adorable x 1
    • Gracioso Gracioso x 1
    • Borrashooo Borrashooo x 1
  2.  
    Lelouch

    Lelouch Rey del colmillo

    Aries
    Miembro desde:
    24 Junio 2012
    Mensajes:
    7,376
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Ian Lockhart

    Y aquello había terminado, una vez más, de manera repentina. No había sido debido a una paliza hacía Alpha como la última vez, si no que, en su lugar, fue este quien se levantó del suelo y tomó a Mimi de la mano, llevándosela a rastras dentro del cuarto del que la chica había salido.

    Qué pareja más rara, sin duda. Alpha siempre escogía al peor tipo de chica con la cuál estar, en mi opinión.

    En todo caso, aquel portazo dió fin a todo el asunto, precedido por la primera y última frase de Alpha.

    "El siguiente eres tú"

    Sonreí con suficiencia. No sabía con certeza lo que le haría a Mimi en ese cuarto, pero prefería no ser el siguiente en averiguarlo.

    —¡Disfruten su luna de miel, traten de no matarse entre ustedes por favor! —grité desde el otro lado de la puerta, riéndome inmediatamente después de ello.

    Me llevé las manos a los bolsillos y suspiré levemente, antes de encaminarme hacia mi habitación. O así me habría gustado al menos, pues una puerta estuvo a escasos milímetros de golpearme en la cara. Y la persona que había causado aquello no había sido otra más que Emily, en pijama y con una cara de muerto viviente.

    Y, como si fuese ella quien hubiese sido asaltada de improviso y no yo, se intentó cubrir de pronto el cuerpo con los brazos. No pude evitar reírme un poco en su cara.

    —No te preocupes Emily —le dije, encogiéndome de hombros y negando ligeramente con la cabeza, socarrón—, lo del dojo era una actuación para desconcentrarte y vencerte con más facilidad, no me atraes en lo absoluto —comenté entre bostezos, llevándome la mano a la boca y levantando ligeramente la cabeza—. ¿O es que a caso te da vergüenza que te vean con esa pijama? Je, no voy a negar que es algo infantil. ¿No estás muy grande para llevar una pijama de Jirachi, Em?

    Nerviosa como ella sola, Emily sólo pudo hacer preguntas que dejaban aún más en evidencia lo mal que llevaba todo. Aunque la miré ligeramente enternecido, eso no iba a evitar que le respondiese con algún comentario sarcástico.

    O eso pensaba.

    Lo cierto es que no esperaba que su mano terminase de pronto sobre mi mejilla, escrutando la zona donde Mimi me había abofeteado. Y ahora que estaba obligado a ponerle atención, comenzaba a doler. Emití un único gruñido ahogado a modo de queja, mientras sentía el tacto de la chica sobre mi rostro. En un principio sus dedos se habían sentido fríos, pero poco a poco comencé a sentir una especie de calidez proveniente de su mano.

    —Ha sido simplemente el precio a pagar por hacer una pequeña broma —le respondí con indiferencia, mientras la observaba seguir concentrada en mi mejilla—. Todos los juegos tienen sus riesgos, al fin y al cabo, pero este golpe no es algo por lo que me preocuparía—le sonreí, mostrando efectivamente despreocupación por el asunto.

    —Ahora vuelve a dormir, anda—le dije, colocando mi mano sobre su cabeza y dándole un par de palmaditas divertidas, mientras le revolvía ligeramente el cabello en el proceso—, tienes los ojos rojos como si hubieses llorado hace poco —apunté—, supongo que en el fondo nunca dejarás de ser la niña llorona de la escuela Pokémon, eh —me reí un poco, más divertido genuinamente que con ganas de fastidiarle.

    —Aquí no ha pasado nada importante, así que vuelve a tu cuarto. Yo me voy con la enfermera Joey a que me revise, por si acaso —dí el primer paso en dirección a recepción antes de pararme en seco. Uh, cierto—... O quizá no, no quiero que me eche por haber armado un alboroto, además de que la bofeta sería difícil de explicar. Mejor iré mañana temprano —me encogí de hombros—, ha sido simplemente un golpe después de todo.

    >>Así que si me disculpas, creo que volveré a mi habitación a dormir. Te aconsejo que hagas lo mismo.
     
    • Adorable Adorable x 3
    • Fangirl Fangirl x 1
    • Gracioso Gracioso x 1
  3.  
    Amane

    Amane Equipo administrativo Comentarista destacado fifteen k. gakkouer

    Piscis
    Miembro desde:
    10 Julio 2013
    Mensajes:
    15,861
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Emily Hodges

    Asi como se había ido, el sonrojo no tardó en aparecer de nuevo por todo mi rostro ante sus palabras, tensándome de nuevo por culpa de los nervios. ¿Qu-qué tenía de malo mi pijama? Aparté la mano de su rostro para señalarlo después con un dedo acusador, usando la misma.

    —¡Qué sepas que me lo he comprado en la zona de mayores! —comencé a quejarme, alzando la voz quizás demasiado.

    Quejas, que sin embargo, se vieron interrumpidas cuando sentí su mano sobre mi cabeza, dándome leves golpecitos y revolviendo mi ya de por sí alborotado pelo. Me crucé de brazos, inflando las mejillas, mientras miraba hacia otro lado con el ceño fruncido. Bien, iba a aceptar aquello y me callaría, ¡pero solo le serviría una vez, de eso estaba segura!

    Al final, sin embargo, acabé por suspirar y dejar caer los brazos a ambos lados de mi cuerpo, mirando de nuevo al chico con cierta preocupación en mis ojos. Ladeé la cabeza, una especie de mueca de incomprensión plasmada en mis labios, y sin darme cuenta, comencé a jugar de forma nerviosa con el borde de mi camiseta mientras hablaba.

    >>No entiendo por qué te gusta meterte en tantos problemas —dije, casi en un murmullo, con quizás cierto tono maternal en mi voz, para finalmente acabar negando con la cabeza, ojos cerrados y una leve sonrisa—. Como sea, no hace falta que molestes a Joy. Ponte algo frío y estarás bien~

    Me giré entonces, canturreando un "buenas noches, Ian~", entrando a la habitación de la que había salido segundos atrás, y cerré la puerta detrás de mí. Apenas un segundo después, sin embargo, volví a abrirla para asomar la cabeza durante un breve periodo de tiempo.

    >>¡Y no soy ninguna niña, hmpf! —sentencié, con tono de voz firme, adentrándome en el dormitorio instantes después sin dejarle tiempo al chico para reaccionar.

    ¡Eso le enseñaría!

    Me giré sobre mis talones, encontrándome entonces con algo que me sorprendió ligeramente. Espeon parecía haber salido en algún momento de su pokéball y estaba, como siempre, tumbada en la cama, durmiendo plácidamente. Parecía que tanto la conversación con Alpha como la de Ian habían logrado aliviarme un poco, y un pokémon como mi Espeon podía notarlo perfectamente.

    Ella no necesitaba pasar a tiempo a solas, solo quería que su entrenadora recuperase los ánimos, ¿verdad? Acaricié su cabeza ligeramente antes de meterme en la cama también, con una ligera sonrisa. ¿Quién me iba a decir que despertarme en mitad de la noche iba a ayudarme a dormir mejor? ¡Qué curiosa la vida!
     
    Última edición: 19 Mayo 2020
    • Adorable Adorable x 3
    • Gracioso Gracioso x 2
  4.  
    Naiki

    Naiki Main solo desde la beta

    Escorpión
    Miembro desde:
    7 Febrero 2013
    Mensajes:
    4,601
    Pluma de
    Escritor
    Alpha Xenodis.

    Mientes.

    No pude evitar callarme cuando ella terminó de hablar. Aun con sus manos sobre mi rostro, no evité moverlo de izquierda a derecha a modo de negación mientras apretaba con fuerza los ojos en un intento de limpiar las lágrimas que salieron.

    —No soy mejor entrenador que él—Sentencié apenas pude.—. Que me digas que soy mejor es simplemente mentira. ¿Sabes cómo nos comparamos entre entrenadores? ¡En el campo de batalla! ¿Y sabes qué pasaría si nosotros nos enfrentamos ahora mismo? ¡Fácil! ¡Me derrotaría! ¡Ni siquiera sé si podría darle un combate igualado en este momento!

    Pasé el dorso de mi mano izquierda sobre mi rostro con un poco de violencia. Tuve que cerrar y volver a abrir los dos ojos nuevamente para que mi vista se aclarase.

    —... Él no hubiese perdido tantas veces contra Bako. Fijo lo hubiese aplastado en el primer intento sin despeinarse y luego hubiese seguido con otro de los Ases. ¡Seguramente hubiese conseguido todos los símbolos en los días que estuve peleando ahí!—Volví a guardar un momento de silencio en el que simplemente apreté los dos puños.—... Es demasiado el camino que nos separa. ¡Así que no digas que soy mejor que él! ¡Eso es simplemente una mentira que volveré verdad con el tiempo!

    —Pero... Hasta entonces simplemente no lo digas. No digas que soy mejor porque no es más que una mentira, ¿me entiendes? Me da igual ser mejor o peor persona que él... Para mí la única victoria que vale es en el campo de batalla, ¿me entiendes? Si quisiera otras cosas lo retaría en el Dojo y con lo débil que es te puedo apostar que no aguantaría media llave.

    Mis ojos apuntaron directos a los de Mimi entonces. Muy levemente cerrados y acompañados por un ceño fruncido lograban darle determinación a mi mirada.

    >>No vuelvas a decir esa mentira hasta que sea verdad. Ahora mismo no soy mejor que él.
     
    • Adorable Adorable x 3
    • Fangirl Fangirl x 1
    • Sad Sad x 1
  5.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,616
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi Honda

    "Mientes"

    Sus palabras cayeron pesadas, como un balde de agua gélida. Lo miré sin comprender, en un principio impactada por sus palabras. ¿Qué estaba diciendo? ¿Cómo podía pensar así? Pero poco a poco y a medida que Alpha hablaba, empecé a encontrar y encajar las piezas del puzzle.

    A él no le interesaba ser mejor o peor persona que Ian. No le interesaba si no era un cerdo manipulador, si su corazón era puro y honesto, si era completamente opouesto o no a Lockhart. Solo le interesaba ganarle en un combate pokémon.

    Batallas.

    Eso era todo lo que parecía importarle.

    Lentamente aparté mis manos de sus mejillas ciertamente decepcionada con su respuesta. No mentía. No había dicho una sola maldita mentira desde que estaba allí. ¿Pero importaba acaso?

    "Lo eres para mí"

    Eso quise decir pero las palabras quedaron atoradas en mi garganta. No podía. Porque a Alpha no le importaba en absoluto lo que yo pensase de él. No le importaba si me abría y le decía la verdad destripándome el alma.

    Lo miré con seriedad.

    —Entonces hazlo—le dije—. Entrena hasta que puedas vencerle, ¿qué haces que no estás ya haciéndolo? Si esa es tu única maldita meta en la vida, hazla valer. Demuéstrale quien eres.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
    • Adorable Adorable x 1
    • Fangirl Fangirl x 1
  6.  
    Lelouch

    Lelouch Rey del colmillo

    Aries
    Miembro desde:
    24 Junio 2012
    Mensajes:
    7,376
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Ian Lockhart

    "Prefiero que se inflame a ponerme algo helado" pensé, mientras miraba cómo Emily se volvía a su habitación. No pude evitar reír cuando la vi asomar su cabeza por la puerta, gritando que no era una niña, sólo confirmándolo más. Me llevé las manos a los bolsillos y me alejé de allí, buscando dónde estaría mi habitación. Lo cierto es que rara vez había dormido en un centro pokémon, así que aún no estaba demasiado familiarizado con la distribución del lugar, pero al fin di con mi cuarto.

    Nada más entrar, dejé en una esquina todas mis cosas y me recosté en la cama, y entonces todo el tema de Chance volvió a mi mente de golpe. Sí, aquellos breves minutos con los otros holders fueron divertidos, pero en la soledad, mi mente no podía evitar volver a aquello que acaba de pasar ese mismo día. Le daba vueltas y vueltas a lo que había pasado, a lo iba a pasar, preguntándome cómo podríamos haber salido mejor parados de aquella situación, y que era lo que haríamos a continuación. Pero por más que pensaba, no llegaba a ninguna parte, y mi cabeza comenzaba a calertarse, y la marca de la bofetada comenzaba a molestarme.

    Me levanté de la cama con un pesado suspiro, me quité la ropa y me dirigí a la ducha a tomar un baño y despejarme la cabeza antes de dormir. Fue una ducha corta, pero después de eso pude conciliar el sueño.

    .............................

    Desperté más temprano de lo que me habría gustado, y no fui capaz de volver a conciliar el sueño, pues mi mente había vuelto a dirigirse al incidente de ayer en el laboratorio. Estar en aquella cama había comenzando a volverse estresante y monótono, y al final me vi obligado a salir de ella. Recogí mis cosas, me arreglé ligeramente, y salí de mi habitación. Aunque en un principio la idea era abandonar el centro y buscar algo qué hacer, mi estómago reaccionó cuando pasé cerca de cafetería.

    No habiendo tenido el mejor sueño, no podía darme el lujo de no desayunar algo, así que me acerqué a paso desganado a la cafetería y esperé mi turno para tomar algo de pan, fruta y yogur. Adormilado, pasé al lado de las mesas y me senté en el primer lugar que estaba libre. No fue hasta que iba a la mitad de la comida que levanté la vista y me di cuenta quién estaba en frente mío.

    —Hey, buenos días Emily —le saludé con un bostezo—. ¿La niña pequeña pudo dormir hoy? —una pequeña sonrisa burlona se dibujó fugazmente en mi rostro, antes de disiparse—. Vale, vale, hoy trataré de ser más amable, que necesito pedirte un favor. ¿Has ido alguna vez a la Sede del Gran Campeonato? he querido ir a ver ese lugar en algunas ocasiones, pero no he sido capaz de llegar por diversos motivos. ¿Crees que puedas darme un pequeño aventón? Te lo compensaré después, lo prometo~ Y no volveré a decir nada de tus pijamas. ¿Qué dices?

    Uh, sí, no era el mejor pidiendo favores.
     
    • Adorable Adorable x 1
    • Fangirl Fangirl x 1
    • Gracioso Gracioso x 1
  7.  
    Amane

    Amane Equipo administrativo Comentarista destacado fifteen k. gakkouer

    Piscis
    Miembro desde:
    10 Julio 2013
    Mensajes:
    15,861
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Emily Hodges

    La compañía de Espeon siempre me había ayudado a conciliar el sueño y mantenerlo a lo largo de la noche, y aquella ocasión no iba a ser la excepción. Aun así, nunca podía evitar despertarme demasiado temprano y me era ya muy difícil conciliar el sueño sabiendo que ya era de día.

    Así pues, con pesadez, salí de la cama y, como siempre, lo primero que hice fue dirigirme al baño para todo el aseo matutino, entre ello cambiarme de ropa también. Cuando acabé, me miré en el espejo, comprobando que estaba presentable para finalmente salir a desayunar. Así pues, preparé todas mis cosas y salí de la habitación, seguida de Espeon.

    Bajamos a la cafetería del Centro y cogí un par de tostadas con mermelada acompañadas de un café con leche, ¡con bastante azúcar! Lo bueno de despertarse temprano era que el sitio no estaba especialmente lleno, así que pude coger una de mis mesa favoritas para comer, junto a la ventana que daba al exterior.

    Me gustaba desayunar sola (bueno, con Espeon durmiendo al lado), en silencio, hundida en mis pensamientos. Y había bastante en lo que pensar, especialmente aquel día. Acostumbrara a desayunar sola, además, por ese mismo motivo me sorprendió cuando vi a Espeon bajar de la silla y subirse a mi regazo, no sin antes bufar hacia la persona que había sentado en su sitio.

    Dirigí mi mirada hacia aquella figura, descubriendo no mucho después que se trataba, ni más ni menos, de Ian. No dije nada, seguí comiendo hasta que el chico pareció darse cuenta de mi presencia, a la mitad de su propio desayuno.

    Le devolví el saludo con un movimiento de cabeza, pero poco después bufé casi sin pensarlo y le di una patada por debajo de la mesa, molesta. Bueno, no tenía el mejor humor por las mañanas tampoco, a decir verdad.

    —Oh~ —dije, finalmente, con cierta expresión divertida—. ¿Ian pidiéndome un favor? ¿Qué día es hoy? Habrá que marcarlo en el calendario~

    Acabé entonces de comer lo que me quedaba de tostada y me limpié con una servilleta, recogiendo un poco después lo que había usado para comer. Cuando terminé, miré a Ian de nuevo, los brazos apoyados en la mesa, sonriendo.

    >>He ido, puedo llevarte. ¡Pero quiero eso último por escrito y firmado!

    * * *

    Esperé a que terminase de desayunar para finalmente salir del Centro Pokémon. El sol comenzaba a brillar cada vez más y el calor se hacía cada vez más presente, parecía que la primavera estaba casi a la vuelta de la esquina.

    Liberé a Unfezant una vez el chico llegó a mi lado y, tras saludar al pokémon con una caricia, me subí al mismo con cuidado. Miré entonces al castaño.

    —Digas lo que digas, no me fío de dejarte subir conmigo, lo siento~ Así que sube en tu pokémon y síguenos, ¿vale? No está demasiado lejos, llegaremos rápido~

    Y cuando el chico liberó a su Salamance, ambos pokémon emprendieron el vuelo.
     
    Última edición: 22 Mayo 2020
    • Adorable Adorable x 2
    • Fangirl Fangirl x 1
  8.  
    Naiki

    Naiki Main solo desde la beta

    Escorpión
    Miembro desde:
    7 Febrero 2013
    Mensajes:
    4,601
    Pluma de
    Escritor
    Alpha Xenodis.

    No pude evitar que una sonrisa se posase en mis labios. Eso que me dijo era precisamente lo que planeaba hacer apenas me sintiese preparado para ello... O llegase el Gran Campeonato. ¡Lo que pasase primero! ¡El punto era derrotarlo y ya! ¡Los detalles no importaban!

    —¡Ni siquiera dudes que entrenaré para ello!—Separé un poco la distancia entre nuestros cuerpos y con tal de demostrar la seriedad con la que hablaba lo hice: Separé las piernas y ubiqué la parte frontal levemente hacia el medio. Mi mano derecha se fue hacia el exterior de mi cuerpo con el dorso hacia adelante y los dedos extendidos hacia atrás; La izquierda subió unos centímetros para quedarse frente a mi rostro y cubrir partes de este aun si mis dedos estaban separados.—¡Me esforzaré al máximo para ello!

    Guardé un momento de silencio mientras deshacía mi fabulosa y genial pose. Mi cuerpo quedó en una posición normal a excepción de mis manos, que se dirigieron en un rápido movimiento hasta las de Mimi para rodearlas a ambas tal como lo había hecho antes.

    —Pero tengo una batalla contigo primero—Levanté un poco la mirada y dejé que ella pudiese encontrar mis ambarinos ojos que parecían mirar las espaldas de Flame mientras le comandaba.—. Ya lo prometí: Voy a superar ese miedo sin importar lo que tenga que hacer. Estas manos—Las apreté un poco, no lo suficiente para dañarle... O eso esperaba.—no me van a aterrar.

    >>Primero acabaré con eso y luego entrenaré tanto como sea necesario. ¡Ese es el plan ahora mismo!

    [​IMG]

    ¿Le tenía que dar la pose del pure boy? ¡POR SUPUESTO! LOVE U JONATHAN <3
     
    • Adorable Adorable x 4
    • Ganador Ganador x 1
  9.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,616
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi Honda

    Su respuesta... era sin duda algo que esperaba. Pose incluída. Lo miré con cierta turbación, pálida, con los ojos bien abiertos. Arceus, era tan payaso. ¿De verdad en algún momento me enamoré de alguien como él? Lograba descolocarme por completo. Hacía unas cosas tan infantiles y extrañas. Pero así era él, ese era Alpha Xenodis en todo su insípido esplendor. Suponía que estaba bien, era algo que podía tolerar. Incluso si me resultaba ridículo y vergonzoso.

    Tensa, rodé los ojos y terminé suspirando con resignación. Estaba segura de que lo haría. Esforzarse por vencer a Ian. Pero eso no cambiaba el hecho de que eso parecía ser todo lo que le importaba. Batallas. Batallas y más batallas. Ese era todo el mundo que conocía. Ser el mejor implicaba ganar. E ignoraba cosas tan importantes, pasándolas por completo por alto, que lograba frustrarme. ¿Por qué no podíamos entendernos? ¿Por qué nuestros corazones parecían incapaces de conectar?

    Repentinamente el tacto de sus manos sobre las mías me hizo voltear a mirarle, sobresaltada. Sus ojos dorados brillaban llenos de una extraña determinación. Pero sus palabras y la convicción con la que las expresó solo me recordaron una cosa:

    La verdad en las palabras de Lockhart.

    Yo le había hecho daño en el pasado. Aún seguía haciéndolo. Y eso había ocasionado que Alpha me temiese. Incluso si no me temía a mí temer que le golpease era lo mismo. No cambiaba nada. Desde que nos conocimos, lo había tratado peor que a un trapo viejo. Había abusado de su confianza, había sido egoísta, agresiva, terca. Y aunque ese comportamiento había cambiado con el tiempo nuestros problemas seguían alejándonos, creando un muro insalvable entre nosotros.

    Nuestra relación no debería existir.

    Era tóxica para ambos. Para él, para mí y para cualquiera en torno a nosotros. No nos entendíamos, éramos mundos opuestos. Groudon y Kyogre. Reshiram y Zekrom. Arceus y Giratina. No estábamos destinados a coexistir de forma pacífica.

    Lentamente liberé mis manos de las suyas.

    —No te das cuenta ¿verdad?—pregunté. Había agachado la mirada, ensombrecida—. Todo esto está mal. No deberías tener que superar ningún miedo en primer lugar porque jamás debí creerme con el derecho de golpearte. Que te veas forzado a luchar contra tu temor para poder estar conmigo solo demuestra lo mal que estamos.

    Me aparté de él de pronto como si su presencia me quemase. Alcé la mirada, consternada, con los ojos vidriosos, el ceño fruncido y tembloroso. Me dolía. Dolía demasiado. Dolía horriblemente ser consciente de todo eso.

    Pero solo había una salida. Una forma de sanarnos.

    >>Ian tiene razón en algo—musité—. No puedo controlarme. En cualquier momento puedo terminar golpeándote de nuevo. No quiero eso. No quiero que me temas. No quiero lastimarte—sacudí la cabeza negando con obstinación, como si el solo pensamiento me aterrase— Pero ni siquiera confío en mi misma, de modo que lo mejor será separarnos. Olvida que existo, Alpha. Tú no me conoces. No me hables. No me mires. Ni siquiera respires el mismo aire que yo.

    Cada palabra sonó más pesada y brusca a medida que el nudo en mi garganta se hacía mayor. Romper nuestro vínculo era lo mejor, si estábamos lejos no podíamos dañarnos con nuestros comportamientos egoístas. Era lo correcto... pero eso no lo hacía menos doloroso en absoluto.

    Forzarme a ello era lo más egoísta y al mismo tiempo menos egoísta que había hecho jamás. No estaba pensando en mí.

    Estaba pensando en nosotros.

    >>Ahora vete—mi voz sonó extrañamente plana y monótona. Desprovista de cualquier emoción. Pero cuando volví a hablar, irremediablemente se quebró incapaz de soportar el peso de mis emociones— ¡Lárgate!
     
    • Sad Sad x 2
    • Me gusta Me gusta x 1
    • Impaktado Impaktado x 1
  10.  
    Naiki

    Naiki Main solo desde la beta

    Escorpión
    Miembro desde:
    7 Febrero 2013
    Mensajes:
    4,601
    Pluma de
    Escritor
    Alpha Xenodis.

    Bueno... Ella tenía razón.

    No lo había visto desde esa perspectiva. Era obvio que no debía golpearme... En realidad ella era la única persona conocida en mi viaje que lo había hecho fuera de jugueteos como Bruno, Brendan o Rojo. Si ella no lo hubiese hecho no me asustaría de ello y entonces no tendría que superar el miedo; De verdad no me di cuenta de ello.

    Pero sus siguientes palabras de verdad no las pude compartir.

    Era muy estúpido. Ni siquiera pude aguantar a que terminase de echarme del cuarto para contestar.

    —No puedo hacer eso—Inicié de inmediato, con un tono que acompañaba la seriedad de mis palabras.—. Ya prometí que iba a superarlo, así que es algo que tengo que hacer de una u otra manera. Y aunque ahora mismo no tenga un plan, te aseguro que se me ocurrirá algo más temprano que tarde. Pero tengo que decirte que sí hay una cosa que tengo clara sobre esto: ¡Lo voy a hacer!—Acompañando mis palabras, hice un rápido movimiento con mi brazo que logró poner mi mano derecha frente a mi rostro, empuñada y con el dorso hacia Mimi. También tuve un segundo aire en mi cabeza que me hizo continuar hablando.—... En realidad, son dos cosas que tengo claras—Di vuelta mi mano y enseñé mi corazón y medio en alto hacia ella.—: Lo voy a hacer y no me puedo alejar de ti para hacerlo. ¡Es demasiado obvio que no hay otra Mimi! Es totalmente imposible que lo consiga si me alejo y te olvido para siempre.

    —¡Además lo que me pides es imposible! ¿Cómo voy a simplemente olvidarte? ¡Si me pides que te olvide pensaré que debo olvidarte y eso hará que te recuerde y por ende no podré olvidarte! Es obvio que no va a funcionar—Asentí dos veces, de brazos ahora cruzados, seguro de mi planteamiento de la situación.—. ¡O si tengo que enfrentarme a un Luxray es demasiado obvio que recordaré a Raiden y eso me hará recordarte a ti! ¡O si me encuentro con un Mimikyu en el Frente o en Udan pasará lo mismo! ¡Pides algo imposible!

    Liberé un poquito de aire de mi boca y volví a cogerlo. Ser el que hablaba más realmente quitaba el aire, ¿eh?

    >>Pero siempre dices cosas ridículas—Proseguí.—. Si hace tan solo unos minutos estabas dicien-—Me callé repentinamente. Hablar de ello hizo que eso volviese a mi mente de manera instantánea, y por supuesto no pude contenerlo.—. ¡¡Discúlpate!!—Exigí con mi índice derecho apuntando hacia ella. Mi tono de voz llevaba cierta molestia a la vez que mis palabras salían rápidamente de mi boca.—¡Emily no es y mucho menos se parece a un Hippowdown! ¡Quizás a un Togepi o a un Happiny, pero un Hippowdown no! ¡Tienes que disculparte por haber dicho eso sobre ella!
     
    • Fangirl Fangirl x 2
    • Adorable Adorable x 1
  11.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,616
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi Honda

    Ojalá pudiera entenderle de forma adecuada. Solo hablaba tonterías... solo lo hacía todo mucho más complicado de lo que era. Su falsa convicción en qué iba a lograr superar un miedo que no tenía por qué haber necesitado superar nunca era ridícula. ¿Por qué esforzarse tanto? ¿No era mejor dejarlo todo y ya? No es como si le costase de cualquier forma. Ni siquiera me había extrañado los dos meses que estuve en Sinnoh.

    —¿Ah?—enarqué ambas cejas cuando terminó de hablar, pasmada. ¿Qué estaba diciendo ahora? Tardé unos segundos en que mi cerebro lograse procesar su orden. Mi ceño se frunció apenas—. No pienso disculparme. Además, no dije que Emily fuese un Hippodown, dije que no me importaba si os revolcábais como Hippodown salvajes en un chiquero. ¿Por qué lo sacas todo de quicio? ¿Por qué siempre tienes que meter a otras personas cuando hablamos nosotros?

    Apreté los puños, tensa. Me molestaba. ¿Cuál era su problema? ¿Por qué era incapaz de ver la realidad cuando la tenía delante de las narices?

    >>Primero Ian, ahora Emily... deja de hacer eso—solté, harta. Estaba tensa y aquella emoción era fácilmente apreciable en mis labios apretados, en mis nudillos blancos por la presión—. Esto es entre tú y yo. Es nuestro maldito problema. Ni de Ian, ni de Emily... es nuestro. Estoy haciendo esto por nosotros, no seas idiota. ¿Piensas que es fácil para mí? ¿Que yo sí puedo olvidarte como si nada? ¡Dije que te apreciaba y te dio igual! ¡Ian nos puso por los suelos y no te importó!

    Sacudí la cabeza, negando mis emociones, rehusando a quebrarme aún más. No tenía ningún tipo de sentido. No éramos nada, dudaba siquiera que fuésemos amigos. No nos entendíamos. Él era un bobo, yo era una terca orgullosa y éramos completamente incompatibles. Si nada nos unía, ¿por qué no dejarlo todo y seguir como si nada con nuestras vidas?

    >>Si no le dijiste nada a Lockhart es obvio que piensas de la misma forma. Y si piensas que somos tóxicos—corté el aire con un repentino movimiento de mi brazo derecho— ¡¿por qué no acabar con esta farsa?!
     
    • Reflexivo Reflexivo x 3
  12.  
    Naiki

    Naiki Main solo desde la beta

    Escorpión
    Miembro desde:
    7 Febrero 2013
    Mensajes:
    4,601
    Pluma de
    Escritor
    Alpha Xenodis.

    Mi ceño se frunció considerablemente cuando dijo que no se disculparía. ¿Comparar y decir que lo era tenía alguna diferencia? ¡Ninguna! ¡Era exactamente lo mismo!, pero me mantuve en silencio... Al menos hasta que prosiguió haciendo algo que me molestaba; Muchas veces recibí golpes por eso, pero jamás me quejé. Ahora mismo no me iba a contener.

    —¡Pues tú haces lo mismo!—Exclamé.—¡Siempre, siempre dices cosas que no tienen sentido en nuestras conversaciones! ¡Empiezas a hablar estupideces sin siquiera escuchar lo que tengo que decir! ¡Lo mismo hiciste en el pasillo con el tema de Emily y luego la llamaste de esa manera tan fea! ¿Sabes qué pasó? ¡Me contó lo que pasó en la fábrica de Chance y luego lloró un poco, yo solo la contuve!—A este punto mi voz había subido bastante su tono, casi podríamos decir que gritaba.—¡Y exactamente lo mismo haces ahora! ¿¡Qué es esa mierda de que me dio igual lo que dijiste!? ¡¡Ni siquiera me dejaste contestar porque apareció el imbécil de Ian!!—Sí, ya gritaba.—¡¡Era obvio que la cosa no se pondría bonita y gracias a ti no salió como en Témpera!!

    Cerré los ojos e inspiré profundo antes de continuar.

    —¿¡Y a quién llamas idiota, idiota!?—Volví la distancia entre nosotros mucho menor con tal de que mi índice pudiese clavarse sobre la parte alta de su pecho, en el lado izquierdo.—¿¡Por qué sugieres hacer algo que es difícil para ti, eh!? ¡Solo un idiota haría eso!—Nuevamente clavé el dedo sobre ella.—¿¡Acaso no me escuchas!? ¡¡Ya te dije que lo iba a superar!! ¡Es una maldita promesa, así que solo cállate y mírame hacerlo, rubia idiota!
     
    • Adorable Adorable x 2
    • Ganador Ganador x 1
    • Fangirl Fangirl x 1
  13.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,616
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi Honda

    De verdad lograba sacarme de quicio. Ni siquiera presté realmente atención a las razones ni a lo que sea que hubiera pasado con Emily. Estaba demasiado dolida y molesta.

    Lo estoy haciendo por ti—espeté de inmediato, sin dudarlo, contrariada. La voz ni siquiera me tembló—. ¡Lo estoy haciendo por ti, imbécil! ¿Para qué vas a esforzarte en superar el miedo que me tienes cuando puedes solo no volver a verme? Así no volverás a temer que te golpee ¿es que no lo ves? ¡A ti te da igual de todas formas! ¿No es cierto?

    Lo empujé con un dedo, de la misma forma que él había apoyado su índice bajo mi hombro. Tenía el ceño fruncido, tensa, molesta. Pero dolida y consternada también.

    >>Estarías mucho mejor sin mí ¿no es verdad?—lo empujé otra vez. Mi voz se impuso sobre la suya y repentinamente parecíamos batallar por quién gritaba más— ¡¡Solo acepta de una vez que nuestra relación no debería existir, maldito idiota!! ¡¡Que empezamos mal y seguiremos mal si no paramos esto!!
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  14.  
    Naiki

    Naiki Main solo desde la beta

    Escorpión
    Miembro desde:
    7 Febrero 2013
    Mensajes:
    4,601
    Pluma de
    Escritor
    Alpha Xenodis.

    No me estaba escuchando. Todo lo que decía sin duda era vano, pero sin duda no me iba a quedar callado luego de que me llamase idiota de esa manera. Además, ella también gritaba sobre mi voz.

    —¡¡Ni siquiera me estás escuchando, estúpida!! ¡¡Dices que haces las cosas por mí, pero ni siquiera sabes lo que yo quiero!! ¡¡Ya te dije que lo prometí y nada va a cambiar eso!!—Mi dedo nuevamente fue por su hombro. Ahora era yo quien lograba tomar la ventaja en el volumen de las palabras.—¡¡Y aun así no podría simplemente dejar de verte!! ¡¡Tenemos a dos malditos estúpidos que parar y a otro más que apoyar para que se vuelva el maldito presidente de la región así que sería imposible que dejásemos de vernos porque no pienso quedarme tranquilo mientras Haku se vuelve la maldita gobernante o como sea que se quiera hacer llamar!!

    Tan metido como estaba en esta situación ni siquiera tuve tiempo para recordar que no éramos los únicos en el cuarto y fue un agudo lloriqueo proveniente de mi espalda lo que me trajo de vuelta a la realidad.

    Cuando me di la vuelta, en la cama se encontraba el príncipe de los mares en medio de una pataleta. ¿L-Lo habíamos alterado? ¿Había escuchado desde el principio? No sé, no importa. Ni siquiera dudé en llevar mi cuerpo al costado del colchón para recoger entre mis brazos al bebé y comenzar a acunarlo mientras de mis labios salían monosílabos en un intento de calmar la situación.

    De todas maneras, la cosa con Mimi no acababa. Mi rostro, que había perdido toda la ira y ahora solo reflejaba seriedad, apuntó hacia el de ella antes de dirigirle la palabra.

    >>Solo escúchame, baka.

    Si no lo hacía... Solo me quedaba una idea en mente, pero no me gustaba. Mucho menos ahora mismo.
     
    • Adorable Adorable x 3
  15.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,616
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi Honda

    ¿¡Qué tiene que ver eso!?—le solté inmediatamente, con incredulidad—. ¡Tú puedes detener a Haku por una parte y yo a Chance por la otra! ¡Ni siquiera tenemos que colaborar!—le empujé de nuevo—. ¡¡Colabora con Ian, restriégale en la cara lo bueno que eres!! ¿No es eso lo que tanto te importa?

    Repentinamente un agudo llanto irrumpió nuestra discusión. Mi cuerpo se sobresaltó y me giré en la dirección del sonido. Se trataba de Manaphy. Estaba tan sumida en nuestra pelea verbal que había obviado por completo que el Pokémon legendario seguía allí, dormido apaciblemente sobre la cama. Nuestros gritos lo habían despertado y no dejaba de chillar y sollozar como un bebé.

    Bueno, era un bebé.

    Vi a Alpha recogerlo entre sus brazos de la cama y acunarlo, arrullándolo hasta que empezó a calmarse. Podía ser un completo insensible para ciertas cosas pero los Pokémon no estaban entre ellas. Era cuidadoso, cariñoso y casi paternal. No en vano había dicho ser el padre de Manaphy.

    Era como si pudiese percibir ese aura calmada y compasiva y se sentiese seguro a su lado. Poco a poco se relajó y volvió a dormirse.

    Suspiré con pesadez, tensa. Empezaba a dolerme la cabeza.

    —Te escucho— Mi voz sonó más baja, más calmada, pero mi ceño seguía fruncido cuando le miré—. ¿Qué quieres? ¿Seguir con esto? ¿Por qué? Es obvio que no tiene ningún sentido.
     
    • Fangirl Fangirl x 1
  16.  
    Naiki

    Naiki Main solo desde la beta

    Escorpión
    Miembro desde:
    7 Febrero 2013
    Mensajes:
    4,601
    Pluma de
    Escritor
    Alpha Xenodis.

    Mecí una y otra vez al pequeño mientras de mi boca no dejaban de escaparse unos "ya" que intentaban calmar sus lágrimas hasta que finalmente el silencio volvió a la habitación. Tras unos cuantos segundos más Manaphy se durmió por completo y eso me hizo soltar un gran suspiro de alivio; Situación completamente salvada.

    ...

    O eso me gustaría decir.

    Todavía quedaba por resolver el problema más grande: Mimi.

    Entonces... Era un uno contra uno contra un oponente muy fuerte y un poco rápido. Lo mejor en este caso era un defensivo o algo más rápido para tomar el primer ataque; Lo segundo era más cercano a lo que podría hacer. ¿Pero ahora cómo atacar? Directo siempre era mi primera opción, pero... Me causaba ciertas dudas ahora mismo.

    Se supone que ahora podía hablar, ¿no? Tenía que lanzar sin duda las palabras correctas si quería acabar el enfrentamiento en este momento: Un golpe crítico que no pudiese eludir.

    —Tiene mucho sentido para mí—Contesté apenas ella acabó de hablar. Si bien hablaba más despacio, mi tono de lucha continuaba presente.—. Yo no puedo romper mis promesas, así que si prometí acabar con mi miedo lo único que va a pasar es que lo haga, ¿me escuchas? Así que no te preocupes por ello que te aseguro que lo lograré.

    Guardé un momento de silencio. Eso es lo único que realmente quería decir... Pero no lo había escuchado hasta ahora. Necesitaba algo más, pero realmente no tenía idea de qué. No era normal para mí tomar la palabra y que me escuchasen como si realmente pudiese dar algo de valor para alguien que no fuese un novato. Tuve que tomar asiento mientras mi ceño parecía fruncirse más y más mientras intentaba buscar una respuesta en mi mente; Mis ojos estaban perdidos en la pared del cuarto.

    >>... ¿Crees que puedas escucharme la próxima vez que haya un malentendido?—Rompí mi silencio tras poco más de un minuto. Mi mirada se desvió hacia Mimi, serena. Mi rostro se había relajado bastante y mi tono de voz se calmó.—Sin acorralarme contra la pared. Solo dejarme responder y ya.
     
    • Adorable Adorable x 4
  17.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,616
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi Honda

    La confusión debía estar bien presente en mi semblante. La decepción, también. No, no tenía ningún sentido. El más mínimo. ¿Quería que le escuchase para que me repitiese lo mismo otra vez? Solo era un Chatot usando cháchara. ¿Lo iba a superar porque se lo había prometido a sí mismo? ¿Esa era toda su convicción? Una promesa. Si no fuera por eso... le daría igual. Si me iba, si me quedaba, si seguíamos siendo amigos tratando de superar nuestros problemas o nos rendíamos y lo dejábamos todo de una maldita vez.

    Alpha ya lo había decidido.

    ¿Qué pasaba con mis sentimientos entonces? Le había dicho que le apreciaba, si había una mínima razón que me detuviese de simplemente largarme era esa. El cariño que le tenía. Lo apreciaba. Se lo había dicho, me había destripado el alma frente a él para confesarle las verdades que jamás dije. Yo, que era una estúpida orgullosa. Eso era todo lo que necesitaba escuchar para cambiar. Una razón válida para impulsarme a mí misma, para creer que realmente nuestra absurda relación llena de altibajos no era una farsa desde que Tau decidió moldearnos.

    Tal vez aún podíamos arreglarlo todo.

    Me equivoqué.

    No entendía lo que significaba para mí. No entendía la forma en la que había tratado de buscar soluciones válidas, desde que el bastardo de Ian me abrió los ojos. Sus promesas no tenían ningún valor para mí. Rompió la que me hizo. ¿Qué clase de credibilidad podía darle?

    "No me iré hasta que puedas vencerme"

    Mentiroso.


    Apreté los labios. Dolida, frustrada conmigo misma, con Alpha y con la situación. Un "prometo superar mi miedo a que me rompas la cara" era tan vacío y absurdo. La propia situación era bochornosa. No le iba a forzar a superar nada, ni yo tampoco iba a cambiar. Porque aquello no tenía el más mínimo sentido.

    —Te prometo dejarte responder cuando haya un malentendido—le dije—. A diferencia de ti, yo sí cumplo mis promesas.

    —Ahórratelo, de hecho—caminé hasta la puerta resueltamente, la cual abrí—. Vete. Esta conversación se ha acabado.

    ¿Por qué era tan imbécil? Estúpida de mí por darle algo de crédito. Por pensar que tal vez, de alguna forma, sus razones no eran egoístas. Pero era un egoísta. Y yo también. Y las relaciones tóxicas debían cortarse para evitar empozoñarnos con nuestros propio veneno. Éramos venenoso pero no inmunes al tóxico de otros. No teníamos ningún sentido. Debía haber tomado aquella decisión mucho antes.

    Nos habríamos ahorrado todo ese circo.

    >>Solo por una promesa—repití con incredulidad, con una sonrisa amarga—. La única razón por la que no quieres que rompamos nuestra amistad es una jodida promesa que hiciste. Ni siquiera dices querer intentarlo porque esto te importe.

    Hablé algo más fuerte de lo que pretendía, el volumen se incrementó en mi voz con la última frase pero mi tono volvió a caer, gélido, cuando volví a hablar. Supe retomar el control de mis emociones a tiempo.

    >>No somos nada, Alpha—acoté— Así que podemos ahorrarnos estos teatros ridículos como si fuésemos una pareja, no nos pega para nada. Cumple tus falsas promesas si quieres, pero lejos de mí.

    Y antes de que pudiese responderme, lo había echado del cuarto junto a Manaphy y cerrado la puerta a su espalda.
     
    • Fangirl Fangirl x 1
    • En desacuerdo En desacuerdo x 1
  18.  
    Naiki

    Naiki Main solo desde la beta

    Escorpión
    Miembro desde:
    7 Febrero 2013
    Mensajes:
    4,601
    Pluma de
    Escritor
    Alpha Xenodis.

    No sirvió de nada.

    Todo lo que había salido de mi boca realmente fue inútil, como si le lanzases un Terremoto a un tipo Volador. En tan solo unos segundos ella había abierto la puerta, me había cogido por los brazos y luego empujado mi espalda hasta forzarme a caminar fuera del cuarto y poder cerrar frente a mí la puerta; Ni siquiera pude reaccionar. Incluso fuera de la habitación me quedé unos segundos en silencio intentando comprender bien las cosas.

    Sus palabras empezaban a retumbar en mi cabeza, como si hubiese tenido cierto retraso al momento de escucharle.

    A diferencia de ti, yo sí cumplo mis promesas. La única razón por la que no quieres que rompamos nuestra amistad es una jodida promesa que hiciste. Ni siquiera dices querer intentarlo porque esto te importe. Cumple tus falsas promesas si quieres, pero lejos de mí.

    Esas partes de su discurso me sacudieron al completo. Nunca me escuchaba, ni siquiera cuando había dicho que lo iba a hacer. Y para peor me dejaba sin la opción de responderle.

    —¡¡¡Bien!!!—Un grito violento, lleno de rabia e impotencia, se escapó de mi boca.—¡¡Por mí puedes creer lo que tú quieras!! ¡¡Si crees que hago las cosas solo porque las prometí entonces me alegra darme cuenta que hay una persona más estúpida que yo en el mundo!! ¡¡¡Las promesas solo se hacen cuando algo o alguien te importa!!!—Continué rugiendo. El rostro se me había llenado de rubor por la exaltación.—¡¡¡Pero cree la mierda que tú quieras!!! ¡¡¡Voy a hacer las cosas solo así que por mí te puedes ir directamente a la mierda!!!

    Pero cuando acabé la única contestación que obtuve vino de entre mis brazos.

    Los agudos llantos comenzaron nuevamente y eran mucho más fuertes. No pude evitar ahogar un grito entre mis labios por la situación. ¿¡Cómo diablos se me había olvidado que lo tenía en brazos durmiendo!? ¡¡AGH!!

    No tuve otra opción que salir rápido de ahí. Si no había sido yo, sería Manaphy quien terminaría alertando a todos los entrenadores dentro de los cuartos y ahora mismo no estaba de ánimos como para patear sus traseros si quisieran pelea, porque yo realmente la querría si alguien me despertase de esta forma... Nota mental: No volver a gritar en un pasillo.

    ***

    —S-Se durmió al fin.

    Pedir un cuarto a Joy fue la idea más sensata porque me daría el espacio para calmarlo, más porque había preguntado si una de las alas tenía menor cantidad de personas y efectivamente así fue. Y vaya que sirvió, pues el pequeño estuvo lloriqueando unos minutos que parecieron eternos. Ni siquiera sabría decir cuántos fueron, pero una vez todo terminó pude sentir paz.

    ... Y cansancio, y un desagradable malestar en el pecho que no sentía hace mucho.

    Kalos.

    Suspiré mientras retiraba de mi brazo la pulsera y el megaaro para dejarlo sobre la mesita de noche. Realmente no era algo que quisiese que me recordasen, mucho menos hacerlo yo mismo.

    Estúpidas rubias.

    Fue mi último pensamiento antes de adentrarme en las sábanas y dejarme en sus zarpas una vez más.
     
    Última edición: 3 Junio 2020
    • Ganador Ganador x 1
    • Adorable Adorable x 1
    • Sad Sad x 1
  19.  
    Amane

    Amane Equipo administrativo Comentarista destacado fifteen k. gakkouer

    Piscis
    Miembro desde:
    10 Julio 2013
    Mensajes:
    15,861
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Emily Hodges

    Llegamos a Aerosol con rapidez, aterrizando frente al Centro Pokémon como solíamos hacer, dejando después que Unfezant volase por la zona con libertad. Sabía que estaría bien solo, y ahora más que nunca sentía que tenía que darle la libertad que quería.

    Tras verlo sobrevolar un poco la zona, entré al edificio con un leve suspiro. Espeon no tardó en salir de su pokéball y caminar a mi lado, a lo que no pude evitar una sonrisa sobre mis labios.

    Definitivamente, no sabría que hacer sin mis pokémon.

    Miré la hora en el reloj de pared del Centro, comprobando que aun era bastante temprano y que teníamos todo el día por delante. Me llevé el dedo índice a los labios, pensativa, antes de dirigirme hacia el puesto donde se encontraba la enfermera Joy. Le pregunté por Alpha y la mujer me respondió sin apenas tardar, porque sin dudas ir con un legendario en los brazos llorando como un bebé era bastante llamativo, huh.

    Agradecí la información y le hice una seña a Espeon para que me acompañase a la cafetería, lugar donde cogí una bandeja para colocar algunas cosas de desayuno. No sabía lo que le gustaba especialmente al chico así que coloqué una variedad de las cosas que había ofrecidas. Bueno, era Alpha, ¿cierto? Seguramente comiese lo que fuese.

    Liberé entonces a Gardevoir y le pedí que me ayudase a llevar la bandeja hacia la habitación del chico. Aceptó encantada y así nos dirigimos los tres hacia la puerta que Joy nos había indicado como la del chico. Di un par de golpes en la madera con los nudillos.

    —¿Alpha? —pregunté, acercando la cabeza para que mi voz se escuchase en el interior sin tener que levantarla demasiado y no molestar a quiénes pudiesen estar aun durmiendo—. ¿Estás ahí?

    But what is this waifuness (????)
     
    • Adorable Adorable x 2
  20.  
    Lucas Diamond

    Lucas Diamond Dios de FFL

    Aries
    Miembro desde:
    22 Marzo 2015
    Mensajes:
    14,142
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Lucas Diamond

    Junto a Abeto estaba allí Irvine, en el laboratorio. Entre ambos nos explicaron todo lo que había sucedido y el riesgo que corríamos. Sabía que Chance no sería un buen tipo, pero nunca pude imaginar que pudiera secuestrar a Joel y manipular a los pokémon y las personas de esa forma. Toda su "tecnología" no eran sino intentos para obtener más poder, ¿¡cómo podría nadie simpatizar con esas ideas!? ¡Vamos, pero si estaba jugando con todos! Pero eso parecía no verlo la gente. Y, al contrario, sus proyectos parecían ilusionar a los ciudadanos, especialmente aquellos relacionados con la energía dinamax.

    Y por esa razón, nos pidieron un favor. Gérie... Resultaba ser otra región, otra isla poco conocida, con su propio sistema de liga pokémon y competición. Allí, muy próxima a Galar, se podía aprender sobre la dinamax y todo aquello sobre lo que Chance y su grupo trabajaba. Macrocosmos, ese nombre... No sonaba nada bueno, sin lugar a dudas. Y probablemente, si eran aliados de Chance, no me equivocase.

    Antes de poder preguntar siquiera por la localización de la isla, o cómo llegar a ella, llegó Eileen. Una conocida de Irvine de aquella región. Y no venía sola, pues la acompañaba un Flygon... ¡súper chulo! Guau, ¿existían Flygon así en serio? Ella se dispuso a mostrarnos el camino. Para ello, debíamos coger un avión hacia la isla, y allí ya nos guiaría. Una vez más... emprendería un nuevo viaje por una isla casi desconocida, ¿eh? ¡Era entusiasmante! Aunque lo cierto es que nuestra verdadera misión era recabar información, pero siempre se podía aprender algo nuevo en el proceso, ¿no? Aunque esta vez tuviera que ser sin la ayuda de Abeto...

    Tras toda la presentación, Mimi y yo salimos al fin y pusimos rumbo hacia ciudad Aerosol, a lomo de nuestros pokémon.

    —¿Ilusionada, Mimi? Aún me cuesta creerme que tengamos que hacer esto para pararle los pies a Chance, ¡pero no me quejaré! Al menos parece una misión divertida, ¿no crees? —le pregunté, ya en el aeropuerto. Pronto cogeríamos el avión.

     
    Última edición: 4 Junio 2020
    • Fangirl Fangirl x 2
Cargando...

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso