-¿Qué te parecería yo vestida de Maid?-pregunté adelantándome un poco para pararme a unos pocos metros de él-Okaeri Goshujin-sama~-dije haciendo una reverencia y cuando volví a mi postura inicial reí levemente.
Me detuve de repente al escucharla decir eso, ¿vestida como que?, ciertamente ella quería saber mi respuesta, pero la corta imagen mental que se había formado en mi cabeza ya me había hecho divagar demasiado en cuanto a una respuesta... normal — P-Pues... si tu quieres hacerlo... si quieres hacerlo... me supongo que esta bien..
— Claro...estoy bien — dije llevando una de mis manos a mi nuca sonriendole levemente — Pero creo que no podría verte vestida así sin querer arrojarte una chaqueta para que te cubras, solo eso..
-Owwwww que tierno-solté sin pensarlo-No te debes preocupar por eso, dentro haría calor-dije sonriendole. Aunque si se refería a tapar por otra cosa... me reí ante el pensamiento. Se nota que había sido hermano mayor.
— No te arrojaría una chaqueta por el clima Emi..— dije riendo levemente y seguí mi camino sin querer aclarar mas las cosas
-¿Ah nooooo?-pregunté canturreando y lo seguí sonriendo-¿Y por qué lo decías?-pregunté con falsa inocencia poniéndome a su lado.
— Mira Emi, una fuente — señalé la fuente delante nuestra y corrí hacia ella evitando el tema — Pide un deseo, anda — dije dandole una moneda una vez que llegó a mi lado
-Mooooo-me quejé inflando los mofletes al llegar su lado cogí la moneda-Si pido que me respondas, ¿que pasaría?-divagué mientras jugaba con la moneda entre mis dedos. Finalmente la lancé al agua teniendo en mente un deseo más especial que lo que había dicho.
— Eventualmente lo hubiera respondido — dije sentandome en la orilla de la fuente — Pero se que no gastarías tu deseo en eso, asi que no me preocupo
-¿Cómo que no?-dije y saqué mi cartera para revolver en ella hasta encontrar una moneda-Por ti-le enseñé el brillante objeto redondeado entre mis dedos y después la lancé a la fuente pidiendo con todas mis fuerzas que el chico hablara.
Suspiré, realmente lo había hecho, lo había hecho realmente — Te arrojaría la chaqueta... — pase una de mis manos por mi cabello, intentando encontrar la forma de completar la oración — Te arrojaría la chaqueta para que te la pusieras y nadie te viera... ¿feliz?...
-Mucho-respondí sonriente y me senté en su regazo, donde empecé a jugar con sus mofletes-No te preocupes, no creo que me contrataran, no sé llevar una bandeja tan profesionalmente-expliqué sonriendo.
Llevé mis manos a las suyas para apartarlas lentamente de mis mejillas — Se que sonará mal, pero me alegra...— dije sonriendole y soltando sus manos — Podrías buscar otros trabajos... debe de haber muchos...
-Supongo que tienes razón-dije dejando caer las manos y observé a la gente que pasaba y nos miraba con expresión de ternura mientras nos señalaban y cuchicheaban sonrientes-Aunque debo admitir que siempre soñé con poder vestir de Maid alguna vez en mi vida-admití con un leve sonrojo dirigiendo mi mirada al suelo.
— No quisiera arruinarte tu sueño, pero si lo cumples máximo podría verte por un segundo antes de hacer lo que te había dicho — me alce de hombros y como ahora estaba acostumbrando jugué desastradamente con su cabello
-¡Entonces te dejaré como el último en verme!-propuse tras reír levemente-También podría pedirle a Mimi lo que necesitara a cambio de llevarle las bolsas-me reí más fuerte y me eché hacia el lado, apoyando mi cabeza en el pecho del mayor.
— ¿Así que trabajarías para Mimi? — pregunté acariciando su cabello aprovechando que se estaba recargando en mi — Y de lo primero... esta bien... puedo aceptar eso
-¡No!-negué rotundamente sonriendo con los ojos cerrados debido a sus caricias-¡No aguantaría más de cinco minutos!-dije con tono de lástima. ¿De verdad había alguien que la aguantase todo el día? Lo compadecía.
— Yo por dinero... creo que aguantaría los caprichos de la princesita— dije riendo un poco, en algun momento incluso llegue a cargar todas las compras de Des, claro.. antes de que se enfadase conmigo por alguna razón
