Pidgeotto regreso a su pokeball y veo a mitsuki --Vamos a la casa de rojo--Le dije sonriendo a mitsuki mientras la veia--
Una vez ya en la casa toque la puerta --...--No dije nada pues solo esperaba a que alguien abriera la puerta o algo asi--
Hawlucha abrió la puerta y se fué inmediatamente, impidiendo que lo vieran, esperaba desde las sombras, ya que la casa estaba oscura
—Hoy... Es tu mal día... —susurré con otro tono de voz para darle miedo, mientras esperaba que Mizuki hiciera algo—
Miraba lo que hacia Rojo la verdad no se me ocurria cosas que hacer ahora por lo que miraba la escena en total silencio
Encendí la luz, dejando todo iluminado y preparado para una fiesta, con una pancarta en el techo sobre el cumpleaños de Yair —¡Sorpresa!
Noté que Rojo habia encendido las luces por lo que salí de mi escondite y sonrei --¡Feliz cumpleaños Yair!--Le dije sonriendo a Yair
Sonrei al ver aquella fiesta --Que genial--Dije sonriendo mientras veia la casa y veo a mizuki--gracias mizuki--
—Vale, pásala bien —sonreí un poco mientras miraba a ambos entrar— Espero que te haya gustado nuestros regalos
--Claro que me gustaron--Le dije sonriendo a rojo--Gracias por los regalos y por todo chicos--Les dije.sonriendo a mizuki y a rojo--