Le seguí hasta el C.P. Pero, yo preferiría una habitación para mi sola. --No sé si será mejor o no...--Susurré
Entré dentro del hospital pokémon, y encontré a Alpha sentado --¿Ya has pedido tu cuarto?-- Le pregunté
--No, te estaba esperando-- me levante del asiento y le pedi dos cuartos a la enfermera Joy, luego me puse delante de Destiny y le ofreci sus llaves de habitacion-- ten, tus llaves--
Tomé el objeto, y sonreí. --Genial, dejaré mi mochila en el cuarto.-- A continuación subí, hasta encontrar mi habitación, a la cual entré a dejar mis cosas.
No sé si cambiarme de ropa... ¡Bueno! ¡Mejor tomo una ducha y me cambio! Cogí mi mochila, para preparar mi ropa de recambio, y cuando lo tube todo listo, llegó mi turno de asearme.
En cinco minutos me comberti en un Ninjask comiendo, lo hacia rapido y sin importar nada, tenia mucha hambre para hacerlo
No tardé si no 25 minutos en estar lista. Lo sé, pero es que las chicas tenemos que estar presentables. Me vestí, pero esta vez con una camisa blanca de manga corta, unos vaqueros largos, y mis "All star" color militar. Ya iba siendo hora de darse un buen cambio. No me molesté ni en secarme el pelo, solo me pasé rápidamente el peine por mi cabello, para luego dejarlo caer mojado sobre mi espalda. Ya solo quedaba bajar, que fué lo que hice.
Una vez bajé, pensaba en ir a por Spark, que posiblemente se quedara fuera haciendo algo, pero para mi sorpresa, tropecé con a saber qué. Cuando veo al causante, no sé si levantarlo de golpe, o simplemente preguntar. --¿Qué haces ahí?--
--¿En medio de un pasillo? Eres un poquito raro ¿no?-- Dejé de seguirle el juego, simplemente, me puse en una postura más cómoda, y decidí ir a por mi pokémon.
--Lo que tú digas...-- Salí fuera del centro pokémon, y justo como dije, Spark estaba fuera. --¡Hey! ¡Chico! ¡Ven!-- Spark me había oído, pero se quedó un rato más. Al cabo de unos minutos, si que se acercó. a mí, y lo llevé a mi cuarto. Esta vez tube más cuidado, y en donde estaba Alpha, lo pasé por encima, para no tropezarme de nuevo.
Una vez en mi cuarto, solté a el Pikachu. Que rápidamente, se acomodó en la cama. Me senté a su lado, y acariciándolo, me puse a pensar en White. --¿Me querrá ver o no?--
Esos pensamientos no paran de invadirme... --Liza...-- Dije tristemente. --¿Por qué me habré enfadado así?-- Empecé a hacer memoria, y lo recordé. Pero no era con ella.